Feed

 Terminando de ver “Feed” (2005) de Brett Leonard con Alex O'Loughlin, Jack Thompson, Gabby Millgate, Patrick Thompson, entre otros.

Película de terror australiana que sigue a un investigador de delitos informáticos cuando rastrea a un hombre sospechoso de haber alimentado a mujeres a la fuerza llevándoles la muerte.

¿Pero qué más está tramando?

La desaparición de una de esas mujeres y la obsesión por resolver el caso, llevarán al detective al límite de la locura...

La trama involucra una investigación policial sobre el “feederismo no consensuado” pero también explora temas como el amor, el dominio y la sumisión, así como las relaciones de pareja y los fetiches que abundan en Internet; al tiempo que el caso dentro de la película, inicialmente tiene muchas similitudes con el de Armin Meiwes, el hombre conocido como “El Caníbal de Rotenburg” que sirve como introducción de lo que veremos durante todo el metraje.

Comienzo diciendo que “Feed” evidentemente es una película independiente de relativamente bajo presupuesto pero que aprovecha al máximo sus limitaciones presupuestarias; una historia concebida por sus 2 protagonistas, Patrick Thomspon y Alex O'Loughlin, que serán 2 caras de la misma moneda, donde el espectador valorará, quien es el villano y quien el héroe... o si realmente existe un héroe y todos somos villanos...

Técnicamente, el valor de producción de la película era bastante bueno, sobre todo la actuación de los 2 protagonistas mencionados, aunque O’Loughlin se lleva todo el palmarés; sin olvidar la cinematografía rápida en constante contraste y los efectos especiales, especialmente el traje de gorda.

Así pues, todos los actores involucrados eran creíbles en sus roles, y la tensión entre el policía y el psicópata es tangible, sin olvidar también el giro decente al final que no se ve venir.

No obstante, “Feed” no está exento de defectos o debilidades, pero es capaz de proporcionar una historia convincente, así como un puñado de auténticas conmociones y/o imágenes repulsivas; aun cuando la trama se compare con filmes como “Se7en”, “Hostel” inclusive “El Secreto de Tus Ojos”, “Feed” es mucho más realista, o al menos los elementos más básicos del guión lo son.

Y es que esta película trata principalmente sobre fetiches sexuales extremos y, por mucho que a todos nos gustaría negarlo, realmente existen; no es casual que al principio se delinee que, aunque los eventos representados en esta película son ficticios, se basan en comportamientos reales, que están sucediendo entre adultos que consienten en este momento; y por ello “Feed” es extraño, enfermizo, repugnante y repulsivo; sin embargo, también es una historia aterradora y original.

La premisa de la película es excelente, solo el hecho que es la primera película que aborda el extraño tema de los alimentadores, explorando una comunidad que la mayoría de nosotros desconoce, la de la relación “Feeder/Gainer” que, en términos simples, es donde alguien alimenta a otro hasta el punto en que sentiríamos que no es atractivo, pero adora su apariencia... eso es lo básico o “normal” y “Feed” le agrega el extremo, al lanzar imágenes de hombres que encuentran mujeres muy grandes como objetos sexuales, hace preguntarnos:

¿Por qué lo encontramos impactante en primer lugar?

¿No parecen Michael y Deidre, que es la mujer que se ve en el sitio web, ser más cariñosos que Phillip y Abby?

¿Cuál es la pareja más feliz?

Lamentablemente, la dirección descuidada decepciona al elenco fuerte; y la narración de la película simplemente no es muy coherente.

En las manos adecuadas, esto podría haber sido un asunto muy tenso, y una película de culto memorable.

Al tiempo que pierde gran parte de su poder tan pronto como la historia se convierte, obviamente, en un enfrentamiento de poder típico entre la mente maestra malvada y el policía obsesivo.

Primero, Michael es un psicópata inteligente, y sus explicaciones sobre la evolución y los estándares de la moda son muy impresionantes, traumatizado desde la niñez y naturalmente es muy elocuente y siempre tiene listo un discurso de genialidad cuando alguien le señala su enfermedad; y yo agrego la metáfora que hace de las granjas de alimentación de animales, que usan el mismo procedimiento para alimentar a la gente...

Y Phillip, es un detective impulsivo, que profundiza en sus investigaciones, pero tiene sus propios demonios... en él se analiza la cordura, el extremo y la legalidad... curiosamente en el tipo que debería simpatizarnos...

El resultado, es un fascinante duelo entre el gato y el ratón con una conclusión sorprendente.

Por último, la dirección de Leonard es sólida y seguramente aprovecha al máximo un pequeño presupuesto; sin olvidar el retorcido sentido del humor de la banda sonora, que contiene canciones ambiguas de los 70s como “Yummy Yummy, love in my Tummy”, “Cherish” y “Lips like Sugar”

En definitiva, nos quedan los temas básicos que la película intenta explorar:

¿Qué es una relación sana?

¿Qué es el amor?

¿Ser adultos que consienten, hace que los comportamientos sean aceptables?

¿Qué está bien y qué está el mal?

Y la película se esfuerza por hacernos pensar, y por eso vale la pena verla, así que:

“¡Aliméntame!”

RECOMENDADA.