Chico Xavier

“A vida do melhor meio espiritual que o mundo já viu”

¿527 años después del descubrimiento de América, se abrirá una nueva etapa de contacto con seres de otros mundos?
He dicho siempre que existe una línea muy delgada entre un testigo de contacto extraterrestre, un chamán, y un médium… pues todos ellos comparten un factor en común:
Canalizar mensajes de “inteligencias no humanas”; y es que mucha gente asocia a los médiums o espiritistas con tramposos que se aprovechan de la gente, con individuos que dicen “poder hablar con los espíritus cuando y donde quieren”, en definitiva, son considerados “charlatanes de feria”; y es cierto que por desgracia eso sucede en la mayor parte de los casos, pero no es menos cierto que a poco que se estudie en profundidad lo que el espiritismo dice, lo que busca…. se da uno cuenta de que esa parte de comunicación con el más allá, no es más que la punta de un iceberg de una especie de filosofía o forma de vida que va mucho más lejos; tanto que en cierto modo es similar a pensar que, porque algunos Santos católicos cayeran en trance, y dijesen ver a La Virgen pensáramos que eso y solo eso es la religión cristiana, caeríamos en un craso error.
Un médium o clarividente es una persona a la que se considera dotada de facultades paranormales de percepción extrasensorial, que le permitirían actuar de mediadora en la consecución de fenómenos parapsicológicos o comunicaciones con los espíritus; y asegura que le es posible establecer contacto con porciones de su inconsciente, que le permiten desde allí, acceder a realidades no ordinarias y eventualmente comunicarlas.
No está muy claro que sea una actividad extrasensorial, sino probablemente mediada por “el sensorio” hacia zonas poco conocidas de la actividad psíquica.
Por tanto, la mediumnidad, del francés “médiumnité”, es la facultad de la que dispone un médium para ponerse en contacto con las personas ya fallecidas u otras entidades de otros planos o realidades.
Existen distintos tipos de mediumnidad, como por ejemplo la psicografía y la sanación, entre otras; y hay quienes consideran que existen más de 70 mediumnidades diferentes.
En especial, la psicografía, del griego “escrito de la mente o del alma”, según el vocabulario espírita, es la capacidad atribuida a ciertos médiums para escribir mensajes dictados por los espíritus; también se le llama “escritura automática” o “el fluir de conciencia”, y es el proceso o resultado de la escritura que no proviene de los pensamientos conscientes de quien escribe; siendo una forma de hacer que aflore el inconsciente; por lo que consiste en situar el lápiz sobre el papel y empezar a escribir, dejando fluir los pensamientos sin ninguna coerción moral, social ni de ningún tipo; en ocasiones se realiza en estado de trance, aunque no es necesario que sea así.
Allan Kardec lo clasificó como “una especie de manifestación inteligente”, ya que consiste en la comunicación discursiva escrita de una supuesta entidad o espíritu incorpóreo, a través de un hombre; y el mecanismo de trabajo de la psicografía, según Kardec, puede ser consciente, semi-mecánico o mecánico, dependiendo del grado de conciencia del médium durante el proceso de escritura.
Kardec fue un influyente educador, autor y traductor francés; notable como “el codificador de espiritismo”, neologismo creado por él, también llamada La Doctrina Espírita; así como pionero en la investigación científica sobre fenómenos paranormales, sobre todo la mediumnidad.
Así, aunque es recurrente en varios grupos espirituales y sociales, y en el dogma de La Doctrina Espírita , la mediumnidad no se establece a la luz de la ciencia, ni la existencia de espíritus está científicamente probada; por lo que es objeto de estudio de la pseudociencia de la parapsicología, ya que el consenso científico actual no apoya las afirmaciones de este y otros supuestos fenómenos paranormales.
El caso más famoso fue, sin duda, Humberto de Campos, un periodista, político y escritor brasileño, que a partir de 1937, 3 años después de su muerte, varias crónicas y novelas atribuidas al escritor, comenzaron a ser psicografiadas por el médium brasileño, Chico Xavier.
Francisco Cândido Xavier, fue un filántropo popular y uno de los más importantes exponentes de espiritismo; que según los biógrafos, su meditación apareció por primera vez cuando tenía solo 4 años; desde que su padre estaba hablando con una dama sobre el embarazo, y él comenzó a declarar hechos sobre las ciencias; donde afirmó que podía oír y ver espíritus.
La madre de Francisco murió cuando él tenía 5 años; y afirmó haber hablado con el espíritu de ella durante algunos años.
Por todo ello, la gente pensó que estaba loco porque hablaba con los espíritus.
Su nombre bautismal, Francisco de Paula Cândido, en honor al santo del día de su nacimiento, fue reemplazado por el nombre paternal de Francisco Cândido Xavier, tan pronto como psicografió los primeros libros, al nombre oficial de Chico Xavier en abril de 1966, cuando llegó de su 2º viaje a los Estados Unidos.
El legado de este médium va más allá de las barreras religiosas, y es reconocido como “el líder espiritual más grande de Brasil”, siendo una de las personalidades más admiradas y aclamadas del país, y destacado principalmente por un fuerte altruismo.
Nacido en Pedro Leopoldo, Estado de Minas Gerais, el 2 de abril de 1910; era miembro de una familia numerosa, y conoció toda la amargura de ser niño pobre, abruptamente arrojado de las suaves faldas maternas para caer en manos nerviosas de la madrina que le aplicaba castigos corporales a diario.
Rita de Cassia demostró ser una persona cruel, vistiéndolo de niña y golpeándolo a diario, inicialmente por cualquier pretexto, sobre todo por la afirmación de que “el niño tenía al diablo en el cuerpo”
No contenta con azotarlo con un palo de membrillo, Rita comenzó a sujetar los tenedores de la cocina en su vientre, no permitiéndole que los sacara, lo que causó un terrible sufrimiento al niño.
Los únicos momentos de paz que tuvo, fueron los diálogos con el espíritu de su madre; y tras 2 años de sufrimiento, durante los cuales añoraba el reencuentro con su madre, volvió al hogar paterno, gracias a los esfuerzos de Cidália, la joven bondadosa con quien se unió el padre.
Las dificultades de subsistencia material fueron constantes durante toda su infancia y adolescencia; y a los 8 años, el niño Chico empezó a trabajar para aportar al sustento de los hermanos, que eran 15 en total.
A la par de esa lucha por conseguir el pan de cada día, extraños fenómenos sucedían en su existencia, que le causaban conflictos psicológicos intensos, pero que su madre desencarnada le recomendaba tener paciencia para afrontar el sufrimiento.
En la escuela pública, en donde efectuó los estudios primarios, escuchaba a los espíritus que le dictaban versos y composiciones sobre los temas más variados.
Sus conflictos aumentaron en la adolescencia, cuando la fe católica en que se educó, reprimía todo ese contenido fenomenológico que sin embargo crecía con el tiempo, sin que tuviera alguna explicación plausible; y constantemente lo pondría en problemas:
Una vez, mientras estaba en su 4º año de escuela primaria, afirmó haber visto a un hombre que había dictado todos sus ensayos escolares, pero nadie parecía haberle dado ningún crédito; y ni siquiera el profesor parecía haberse preocupado por eso.
Una de sus composiciones de la escuela, conmemorativa del Centenario de La Independencia de Brasil ganó una mención honorífica en un concurso estatal; y en 1922, se enfrentó al escepticismo de sus colegas y amigos, quienes lo acusaron de plagio, tal acusación duró toda su vida; y cuando se le exigió demostrar sus dones, Francisco se vio sometido al desafío de improvisar un ensayo, con la ayuda de un espíritu, sobre el grano de arena, el tema fue elegido en ese momento, en el que tuvo éxito.
El Padre Scarzelo, el sacerdote católico del pueblo, lo examinó y concluyó que hospitalizar al niño sería un error, ya que solo era “una fantasía infantil”; y simplemente aconsejó a la familia que restringiera su lectura, que él creía que eran la razón de las fantasías; y lo puso a trabajar.
Francisco, entonces, fue contratado para trabajar en una fábrica textil, donde fue sometido a una rigurosa disciplina de horas de trabajo extendidas; lo que trajo graves consecuencias que duraron por el resto de su vida.
En 1924, terminó la escuela primaria, y nunca volvió a clases; siendo contratado como empleado de ventas, trabajando también horas extendidas; y a pesar de su devoción católica y sus innumerables penitencias, aparte de todas las restricciones impuestas por el sacerdote con el que confesó; nunca dejó de tener visiones o comunicarse con los espíritus.
En mayo de 1927, su hermana, María, estaba teniendo trastornos mentales, que muchos creían que eran causados por fuentes espirituales conocidas como “obsesión” en el espiritismo; y este episodio le permitió a Francisco, apoyar a su hermana con sus capacidades de mediumnidad, y también le introdujo a La Doctrina del Espiritismo.
Simultáneamente, supuestamente recibió un nuevo mensaje de su madre, en el que ella le recomendó que cumpliera todos sus deberes, y estudiara a fondo los libros de Allan Kardec; y el día 8 de julio de 1927, recibió el primer mensaje escrito, firmado por un espíritu amigo.
A partir de ese momento no cesaron sus actividades en el campo mediúmnimico de la psicografía.
Debemos decir aquí, que Chico Xavier poco más que leer y escribir sabía, había sido mal alumno, y ya muy joven se puso a trabajar y dejó de estudiar.
Algunos de los mejores expertos en cada materia, examinaron sus escritos, los cuales siempre hacia de cara al público, y no encontraron explicación al hecho de que la manera de expresarse y los términos empleados fueran tan iguales a la manera de hacerlo de quien Chico decía recibir la comunicación.
Hay que tener en cuenta que psicografiaba una media de 8 a 10 libros al año, y eso durante todo su larga vida, los temas tratados eran de muy diversa índole incluyendo temas médicos.
De esa manera llegó a ser ampliamente conocido en Brasil en 1931, cuando publicó el libro “Parnaso de Além-Túmulo”, que tenía 259 poemas supuestamente compuestos por 56 ilustres poetas brasileños y portugueses fallecidos.
Ese año estuvo marcado por “la edad adulta”, y fue cuando conoció a su mentor espiritual Emmanuel, “debajo de un árbol, cerca de un depósito de agua” según Chico, le informó sobre su misión de psicografiar una secuencia de 30 libros y para lograr tal tarea requeriría 3 condiciones obligatorias:
“Disciplina, disciplina y disciplina”
Emmanuel le ordenó ser leal a Jesús y a Kardec, aunque fuera en contra de su base religiosa; así trabajó en varios lugares, y finalmente se estabilizó como funcionario del Ministerio de Agricultura del Estado de Minas Gerais, el cual mantenía La Hacienda Modelo en Pedro Leopoldo.
Trabajó por 30 años corridos, sin vacaciones, sin domingos o días de descanso; y vivió siempre modestamente, ayudando a la educación y al sustento de sus hermanos y sobrinos.
Sin embargo, en 1958, el médium estaba en el centro de una nueva controversia, esta vez debido a las denuncias de un sobrino, Amauri Peña, el hijo de su hermana curada de la obsesión.
El sobrino dijo a la prensa que Chico era “un médium falso, un imitador muy capaz”
Chico Xavier se defendió, negando cualquier cercanía a su sobrino, ya con un historial de alcoholismo y con un remordimiento serio por el daño causado a la reputación de su tío, Amauri retiró la acusación, y fue ingresado en un sanatorio psiquiátrico en São Paulo, donde murió.
En 1959, Chico se trasladó a Uberaba, en el conocido “Triángulo Minero”, en donde continuó con las mismas tareas en el campo de la psicografía.
Debemos tener en cuenta que Chico era visitado por todo tipo de gente, desde ricos a pobres, desde creyentes a ateos, desde espiritistas a católicos, protestantes, y todos, absolutamente todos lo trataban y respetaban como a alguien especial; y en muchos casos llegaba gente que habían perdido a sus seres queridos, con la intención de que el médium se contactase con ellos, a lo que él siempre decía:
“O telefone só toca de alá para ca” es decir, “el teléfono solo suena de allá para acá”
Y la mayoría de esa gente regresaba sin que el contacto se produjese, pero todos volvían con palabras sabias de ánimo, que Chico no dudaba en dar a todo el mundo, por lo que la gente volvía más tranquila, más apaciguada de ánimo y más feliz.
En cierto modo, podríamos asociar su figura a la de personas como La Madre Teresa de Calcuta pues, todo el que llegaba a él, encontrada de un modo y otro un alivio a sus pesares.
Chico siempre afirmó que un incansable benefactor espiritual, Emmanuel, era quien supervisaba su tarea como médium desde sus inicios; y según Chico, vivía en la antigua Roma como El Senador Publius Lentulus, que luego se reencarnó en España como el padre Damián, y más tarde como profesor en La Sorbona.
Chico afirmó que era un canal para el trabajo de los espíritus, y que no podía producir ningún milagro, como la curación de personas.
A menudo mencionó que no podía comunicarse con una persona fallecida a menos que el espíritu estuviera dispuesto a ser contactado.
Sus apariciones en programas de televisión a finales de los años 60 y principios de los 70, ayudaron a establecer La Doctrina del Espiritismo como una de las principales filosofías profesadas en Brasil, con más de 5 millones de seguidores.
Además de la notoriedad, persistieron las críticas de las personas que intentaron desacreditarlo; y Chico Xavier dijo que también los enemigos espirituales trataron de involucrarlo en fluidos y tentaciones negativas, aparte de todas las personas vivas.
Souto Maior, periodista brasileño, informó de un intento de “linchamiento de espíritus”, así como un episodio en el que niñas desnudas intentaron seducir al médium en su bañera.
Tenga en cuenta que en ambos episodios hay aspectos narrativos comunes a la llamada “prueba”, comúnmente mencionados en las historias de santidad.
Otro episodio ocurrió en 1944, con los periodistas, David Nasser y Jean Manzon, cuando hicieron un informe hostil de él, que se publicó en la revista “O Cruzeiro”
Los Reporteros pretendían ser extranjeros que usaban nombres falsos para probar si Chico era un fraude; y más tarde, cuando Nasser y Manzon llegaron a casa después de la entrevista, se sorprendieron:
“Desde el amanecer, Manzon me llamó y me dijo:
“¿Has visto el libro que Chico Xavier nos dio?”
Le dije que no; estaba en mi biblioteca, recogí el libro y allí estaba escrito:
“Para mi hermano David Nasser, Emmanuel”
Había hecho una dedicación similar para Manzon.
Para cosas como esta, tengo mucho miedo de involucrarme en asuntos del Espiritismo”, dijo Nasser.
A principios de 1970; Chico participó en el popular programa televisivo de entrevistas llamado “Pinga Fogo” que alcanzó niveles extremadamente altos de audiencia en todo el país.
Con todo, durante toda su vida recibió a la gente en su hogar, incluso ya con más de 90 años, ciego de un ojo por una catarata ocular, con problemas de respiración arrastrados desde su juventud debido a su trabajo en una fábrica de tejidos, necesitando que alguien le ayudase a levantarse y mantener su cabeza erguida, seguía recibiendo a la gente, y siempre tenía palabras de ánimo y una sonrisa para quien fuera que se le acercase.
Los espíritus y sus mentores, Emmanuel y Bezerra de Menezes, lo instruyeron para que lo trataran con los recursos de la medicina humana, y le dijeron que no contara con ningún tipo de privilegios de los espíritus.
El acervo producido por su intermedio, además de poemas, incluye trovas, novelas históricas, cuentos, alegorías, reportajes, instrucciones doctrinarias y revelaciones científicas que se han traducido a 33 idiomas y sólo en Brasil se editaron 18 millones de ejemplares, incluidas en ediciones braille.
En 1943, se publicó uno de los libros más populares de la literatura espiritista brasileña, el romance titulado “Nosso Lar” siendo el libro más vendido y el más revelador de los extensos escritos psicográficos del médium; que se convirtió en una película en 2010; siendo este, el primer libro de una serie cuya autoría se atribuye al espíritu de André Luis.
Otra psicografía muy notable, que circuló por todo el mundo, fue sobre un caso de “Goiania”, una ciudad brasileña, en el cual José Divino Nunes, acusado de asesinar a su mejor amigo, Maurício Henriques, fue absuelto de la acusación por un juez que aceptó la psicografía como una prueba válida, entre otras pruebas presentadas por la defensa; un testimonio de la propia víctima, ya muerta, a través de una carta psicográfica dictada a Chico Xavier; y liberó a su mejor amigo de la acusación de asesinato alegando que había sido un accidente.
En cuanto a su producción mediúmnimica, hay aspectos muy nítidos que se deben señalar:
El primero es el consuelo, porque los mensajes sustentan los corazones debilitados por el dolor, y les devuelve el aliento de vivir, al comprobar la existencia de la vida más allá de la tumba.
Otro aspecto es la instrucción doctrinaria, como complemento de la obra codificada por Allan Kardec; y está también el aspecto de revelación con informaciones importantes en el sector científico y en el campo social, que se han confirmado a lo largo del tiempo.
Es importante señalar, que el médium no se ha beneficiado jamás de las ganancias financieras recaudadas con la venta de las obras; que han sido destinadas para institutos benéficos como hospitales, hogares para huérfanos, ayuda a los niños carentes, etc.; y se estima que, en la actualidad, de los derechos de autor de sus obras se benefician unas 100 mil familias en todo Brasil; tanto que según algunos biógrafos, ya sea directamente o bien por influencia suya, existen en Brasil más de 2.000 obras sociales.
Y es que aun cuando la situación familiar de Chico era de gran pena, jamás aceptó ayuda; de hecho vivió de una modesta jubilación como funcionario.
Pero todavía hay un detalle que conviene subrayar:
Solamente tras 40 años de ejercicio continuo de las actividades mediunimicas, Chico empezó a recibir mensajes para los familiares.
Acorde a sus propias aclaraciones, hace falta mucho entrenamiento por parte del médium para que el espíritu comunicante tenga libertad de expresión.
Gracias a ello, Chico Xavier recibió títulos honoríficos de ciudadanía en un sinnúmero de ciudades brasileñas, y más de 1 millón de firmas lo indicaron para el Premio Novel de La Paz.
Pero como todo humano, Chico Xavier desencarnó el 30 de Junio del 2002 a la edad de 92 años, debido a un paro respiratorio.
Según amigos y familiares cercanos, él le pidió a Dios que se lo llevara en un día que todos los brasileños estaban muy contentos, cuando el país esté bajo algún tipo de celebración; de esta manera, nadie estaría triste con su partida.
Así que el día de su muerte, Brasil estaba celebrando la conquista de La Copa Mundial de La FIFA 2002, ya que Chico murió alrededor de 9 horas después del juego Brasil – Alemania; y murió tranquilo como un ave que regresa a su tierra de origen.
Había llegado el momento de abandonar ese cuerpo que ya no le servía, pero que le permitió realizar muchas grandes obras de amor.
El entonces Presidente de Brasil, Fernando Henrique Cardoso, emitió una nota sobre la muerte del médium, diciendo:
“Un gran líder y figura espiritual, amado y admirado en todo Brasil, Chico Xavier dejó su huella en el corazón de todos los brasileños, quienes durante décadas han aprendido a respetar su compromiso permanente con el bienestar de los demás”
El entonces gobernador de Minas Gerais, Itamar Franco, decretó el duelo oficial durante 3 días en El Estado, y declaró:
“Chico Xavier expresó en su rostro una inmensa bondad, un reflejo de su alma iluminada, que era particularmente evidente en su dedicación al pobre, una imagen que guardaré para siempre, con mucho cariño”
Según La Policía Militar de Minas Gerais, 120,000 personas asistieron a la vigilia del médium, que tuvo lugar en Uberaba el 1° y 2 de julio.
En un camión del cuerpo de bomberos, el ataúd con el cuerpo del médium viajó 5km hasta llegar al cementerio de San Juan Bautista, también en Uberaba; y más de 30 mil personas acompañaron la procesión a pie.
Cuando el ataúd llegó al cementerio, fue recibido con una lluvia de pétalos de 3.000 rosas arrojadas en profusión desde un helicóptero de La Policía Federal de Carreteras.
Los centros espiritistas fundados por Chico Xavier, El Grupo de Oración Espiritista y La Comunión Espiritista Cristiana en Uberaba, como El Centro Espiritista Luiz Gonzaga en Pedro Leopoldo, continúan funcionando y llevan a cabo una gran asistencia caritativa.
Pero fue después de su muerte que se emitieron muchos libros basados en cartas antiguas y manuscritos que gradualmente se hicieron públicos, lo que elevó el número total de libros hasta 496.
En abril de 2010, fecha en que Chico Xavier cumpliría 100 años, se lanzó la película “Chico Xavier” en su honor.
“Toda paz que trago para alguém vale a paz que nunca tive”
Chico Xavier es un drama brasileño del años 2010, dirigido por Daniel Filho.
Protagonizado por Nelson Xavier, Ângelo Antônio, Matheus Costa, Tony Ramos, Christiane Torloni, Giulia Gam, Letícia Sabatella, Luís Melo, Pedro Paulo Rangel, Giovanna Antonelli, André Dias, Paulo Goulart, Cássia Kiss, Cássio Gabus Mendes, Rosi Campos, Via Negromonte, entre otros.
El guión es de Marcos Bernstein, y es una biografía del médium brasileño, Chico Xavier, que habla sobre su actividad mediumnística y filantrópica; al tiempo que está basado en el libro “La Vida de Chico Xavier” de Marcel Souto Maior; que para 2013 ya había vendido más de 1 millón de copias.
Maior, es periodista, escritor, guionista y director brasileño, que se ha hecho famoso por los libros sobre el espiritismo y el médium Chico Xavier.
De ese modo, la película describe una vida llena de luchas y amor; y el éxito la hizo una de las más taquilleras del cine brasileño, alcanzando un público de 3,4 millones de espectadores.
Por último, pero no menos importante, la película es mejor que “Lula, O Filho do Brasil”, que fue seleccionada para disputar la nominación al Oscar en la categoría de Mejor Idioma Extranjero.
La historia inicia de niño, Chico Xavier (Matheus Costa) escuchó voces y vio a personas que ya habían fallecido.
Sus informes siempre fueron desacreditados, bajo la justificación que fue su imaginación o la obra del diablo…
A medida que crece, él (Ângelo Antonio) comienza a usar su don para psicografiar cartas; y pronto se convierte en un ícono en su ciudad natal, provocando la ira del nuevo sacerdote, Julio María (Cássio Gabus Mendes) y acusaciones de fraude, ya que publica libros de personajes famosos que ya habían muerto.
Ya de edad avanzada, Chico (Nelson Xavier) participa en el programa de televisión “Pinga Fogo”, donde habla sobre su trayectoria, su vida y los problemas del espiritismo; y a través de él conoce a Orlando (Tony Ramos), el director del programa, que es ateo.
Él y su esposa Glória (Christiane Torloni) sufren la pérdida de su hijo, Thomas, asesinado cuando él y un amigo jugaban con un arma, y que provocó que el amigo fuera a la cárcel.
La historia entonces se narra como “flashback” con la historia central de Orlando y Glória, con la vida de Chico Xavier como nexo para el desenlace.
Así se presenta una biografía sincera, sin melodramas, que desmitifica al santo y lo transforma en un hombre; porque retrata su vida desde la edad de 9 años hasta su edad adulta; y es bastante conmovedor ver cómo Chico Xavier fue malinterpretado durante toda su vida.
De niño fue llamado “el niño encantado”, lunático y mentiroso…
Dicha “fama” resultaría en terribles palizas por parte de su padre y su madrina, que lo cuidaron después de la muerte de su amada madre.
Ya de joven fue perseguido y acusado de mistificación, a pesar de haber dado toda su vida para aliviar el dolor de muchas familias que perdieron a sus seres queridos.
Y es que la película es un trabajo bastante difícil retratar, como bien se dice en los títulos iniciales, la esencia de la vida de Chico Xavier.
Aunque vivió 92 años y psicológicamente en más de 400 libros, su vida fue sobre todo, superlativos, en un ejemplo de caridad, amor a sus semejantes, resignación, paciencia y verdadera humildad cristiana.
Ni siquiera sus obras escritas son más importantes que su ejemplo como buen ser humano; por tanto, estamos ante una película muy peculiar sobre un hombre también muy peculiar; por lo que independientemente de las creencias religiosas, es imposible no reconocer la inmensa influencia que Chico Xavier ha tenido en el pueblo brasileño.
Su éxito sin precedentes, hizo que la productora TV Globo hiciera una serie para televisión de 4 horas; y junto a ella existen otros filmes que perfilan su trabajo de filantropía; entre ellas se encuentra el documental “As cartas psicografadas por Chico Xavier” (2010), con entrevistas a padres y madres que perdieron a sus hijos y recibieron cartas a través del médium brasileño; o la película “As mães de Chico Xavier” (2011), una versión cinematográfica de este mismo asunto; más recientemente se ha presentado el documental “Quando lembro de Chico” (2018), que también es muy recomendable.
“A história de um homem não se encaixa em um filme.
O que você pode fazer é ser fiel à essência de sua carreira”
Chico Xavier ha sido una de las personalidades más sobresalientes del siglo XX, a la altura de figuras como Mahatma Gandhi, Martin Luther King o Teresa de Calcuta, por citar sólo algunos ejemplos de personas que dedicaron su vida a causas sociales y humanitarias, con una repercusión muy positiva en miles de personas; que como Gandhi, Chico nunca recibió el premio Nobel, pese a haber sido nominado en varias ocasiones; y fue testimonio vivo de la máxima de Jesús:
“Por sus obras los conoceréis”
Y lejos de lo que pudiera pensarse, Chico Xavier no es una película para espíritas, ni pretende explicar esta filosofía de vida; de hecho, 3 de sus principales artífices son ateos:
El autor de la biografía, el director de la película y el actor principal.
Y es que el interés de esta biografía rebasa con mucho el ámbito espírita, de modo que la película presenta de forma objetiva los principales momentos de la vida de Chico Xavier, que nació en 1910, en Pedro Leopoldo, Minas Gerais, Brasil; y cuando tenía 5 años murió su madre, por lo que lo mandaron a vivir con su madrina, una mujer frustrada que durante 2 años lo maltrató con saña.
Luego lo recogió su padre, que se había vuelto a casar, pudiendo así vivir en familia junto a sus hermanos y madrastra, que era una mujer muy cariñosa, que lo trató tan bien como si fuera su madre.
Ya desde niño, Chico empezó a experimentar el fenómeno de la mediumnidad:
Podía ver y hablar con espíritus, cuenta él que lo hacía con su madre u otros espíritus desencarnados; y en 1927, asiste por primera vez a una sesión espírita dirigida por un matrimonio espírita, y a partir de ahí, estas personas lo inician en los libros y la doctrina espírita-cristiana de Allan Kardec, tomando conciencia de su condición de médium, y concentrándose sobre todo en la psicografía de mensajes del más allá.
Desde entonces hasta el final de sus días, Chico Xavier escribió muchísimos libros.
Por ello, esta historia narrada se articula en torno a la emisión de un programa televisivo en directo, “Pinga Fogo”, en 1971, en Brasil, que tuvo una enorme repercusión social.
En torno a esta emisión televisiva, 2 historias corren paralelas:
La vida de Chico Xavier con diversos “flashback”; y la historia de unos padres destrozados por la muerte de su hijo, donde la madre vive con la esperanza de tener noticias a través del médium, y el padre ateo, que es el director del programa televisivo.
Precisamente, la evolución del personaje del padre, Orlando, desde el ateísmo y desesperación por la muerte de su hijo hacia la aceptación de la duda, y posterior posibilidad de la realidad espiritual, constituye un elemento singular de reflexión.
Orlando viaja desde la desesperación hacia la paz, gracias a una esperada carta enviada desde el más allá, que revela no sólo que su hijo no fue asesinado, sino también datos familiares inéditos, que sólo él mismo conocía, y que por tanto demuestran que no hay fraude, sino hechos que no puede comprender, pero que son reales.
Evidentemente, Orlando es el alter ego del director, y de tantas personas que se muestran escépticas ante todo aquello que no pueden explicar, que necesitan pruebas personales para aceptar aquello que está fuera de la comprensión, y que la ciencia no puede ofrecer.
Y es que las pruebas, muchas veces sólo son aceptadas si son propias, directas a cada corazón.
Así, a lo largo de la película vamos descubriendo la personalidad de un hombre dedicado a los otros por amor, Chico; y nos muestra cómo él tuvo una infancia marcada por la pérdida de seres queridos, como su madre y su madrastra; que sufrió maltrato infantil y explotación laboral, como prácticas todavía vigentes, pese al desarrollo tecnológico, en el siglo XXI.
Sufrió también la incomprensión familiar y, pese a las dificultades, siempre mostró un carácter afable, y un espíritu resiliente.
Porque Chico siempre fue sencillo, no era ningún santo, y una vez que le llegó la fama, le pasó como a tantos que reciben alabanzas, la atención de los periodistas y la casi veneración de mucha gente, que empezó a dar señales de envanecimiento, como por ejemplo, aquello de comprarse un peluquín para ocultar que estaba quedándose calvo.
Ahora bien, como médium llegó a ser tan notorio y conocido que, en los años 80 se recogieron millones de firmas entre los brasileños, las cuales solicitaban El Premio Nobel de La Paz para él.
Es obvio que ha sido uno de los médium, es decir, una persona a la que se considera dotada de facultades paranormales con las cuales media en la consecución de fenómenos parapsicológicos o de hipotéticas comunicaciones con los espíritus, más famosos en toda la historia de Brasil.
A Chico Xavier, según él contaba, su espíritu guía le anunció con muchos años de antelación, que moriría un día en que todo Brasil estaría muy contento.
Y así fue, falleció a los 92 años, el 30 de junio de 2002, fecha en que Brasil celebraba con entusiasmo general la conquista de su 5ª Copa Mundial de fútbol.
Y así dio gran muestra de humildad, al no atribuirse nunca la autoría de sus libros, sino que según él, todas esas numerosas obras se la dictaron espíritus, o sea que no eran creaciones suyas; siendo consecuente en este sentido, pues donó los derechos de autor de sus libros a diferentes instituciones sin ánimo de lucro, entre ellas, La Federación Espírita Brasileña.
Con todo, Chico Xavier obtuvo muchos donativos y ganancias por sus actividades de médium, de esto no cabe duda; pero él siguió viviendo con modestia, al menos nunca como un ricachón.
De hecho, gran parte del dinero que le llegaba gracias a su mediumnidad, cuentan sus seguidores y los que han propagado sus escritos, que lo empleó en ayudar a los pobres.
También parece ser que curó de sus males a un buen número de personas; sin embargo no pudo salvar de la muerte a un hermano suyo que cayó enfermo a su lado, algo que le reprochó su propio padre, quien llegó incluso a tacharlo de farsante; así como tampoco se pudo curar a sí mismo de una enfermedad en los ojos, que le fue mermando la vista desde la juventud, ni de sus graves trastornos de próstata.
Y a diferencia de otros espíritas, que suelen mostrar una gran animadversión hacia La Iglesia Católica, Chico se mostró comprensivo hacia esta magnífica institución, llegando a declarar:
“Consideramos a La Iglesia Católica, madre de nuestra civilización…
Los espíritus enseñan que estamos en distintos niveles de interpretación, pero que somos una única familia ante nuestro señor Jesucristo.
Aunque estemos en el espiritismo cristiano, dentro de los conceptos de Allan Kardec, un día dejamos las actividades de La Iglesia Católica porque la mediumnidad nos llamaba”
Esta película, no es simplemente asombrosa porque llama nuestra atención desde el primer comienzo; también es asombrosa porque nos hace pensar en lo que realmente importa en la vida.
Nos da una perspectiva diferente sobre diferentes tipos de temas, y principalmente porque todo en la película es real, ya que viene de eventos reales; porque Chico Xavier no solo fue un líder para un grupo específico de personas religiosas, es un ejemplo para todos nosotros.
Contar que la dirección de Daniel Filho es discreta; y optó por una historia sin efectos especiales, pues tenía todas las razones para usarlos; o grandes trucos cinematográficos.
Su dirección es segura, casi lineal, pero resultó en un gran efecto, ya que nunca contradice ni roba los focos de la figura más importante de la película, el propio Chico Xavier; mientras que la hermosa cinematografía de Nonato Estrela es buena, aunque un poco oscura en algunas secuencias propias de la película.
El guión de Marcos Bernstein es correcto, siguiendo la extraordinaria vida de Chico Xavier desde que tenía 9 años en 1919 a través de “flashbacks” en el programa de entrevistas de Saulo Guimarães, y el drama personal del ateo director de TV, Orlando y su esposa Glória, que perdieron a su amado hijo en un accidente con un arma mientras jugaba con su mejor amigo... pero falla un poco cuando deja muchos hechos importantes fuera del guión final.
Todas las posibles objeciones a los fenómenos espirituales atribuidas al llamado médium se descartan rápidamente con algún evento extraordinario, o una increíble muestra de generosidad por parte de Chico o sus amigos del otro lado; y humanamente no podemos conectarnos con alguien que soporta estoicamente un gran sufrimiento e incomprensión, sin tener una sola ráfaga de ira o revuelta.
Algunas escenas son casi cómicas en su fervor, por promover la santidad de Chico, como aquella en que su padre lo lleva, de joven, a un burdel…
Por lo que puede llegar a achacársele como una película para televidentes brasileños, principalmente porque allí era, de hecho, una persona popular y muy conocida que apareció en televisión.
Pero en los créditos de la película se encuentra el detalle:
“La historia de un hombre no cabe en un film.
Lo que se puede es ser fiel a la esencia de su trayectoria”
En efecto, no pueden condensarse en algo más de 2 horas, la repercusión de 92 años de vida de dedicación a los demás; por lo que Chico Xavier nos invita a reflexionar sobre diversos temas en una sociedad comandada por el materialismo y la pérdida de valores ético-morales, como la incomprensión de la mediumnidad de un niño y un hombre; las burlas ante lo desconocido y diferente que debió soportar; las pruebas de su mediumnidad a través de cientos de cartas que llegaban del otro plano de la vida, que ofrecían consuelo a miles de personas, y que sirvieron como pruebas judiciales en Brasil; la ausencia de ética de algunos medios de comunicación, que no dudan en desacreditar y mentir para elevar el número de ventas, etc.
Y entre las muchas máximas con gran sentido espiritual y humano, que pueden extraerse de sus escritos, he aquí algunas dignas de recordar:
“El bien que practiques en un lugar, será tu abogado en todas partes”; “Auxiliemos hoy, ya que mañana estaremos necesitados de auxilio”; “Agradezco todas las dificultades que tuve que enfrentar, si no fuera por ellas, yo no estaría donde estoy”; “Las facilidades nos impiden caminar, en cambio las críticas nos son de gran ayuda”; “No cobres por aquello que debes estar agradecido”; “Si Allan Kardec hubiese escrito que fuera del espiritismo no hay salvación, me habría ido en sentido contrario, gracias a Dios que escribió fuera de la caridad, es decir, fuera del amor, no hay salvación”; y “La desesperación es una enfermedad, y un pueblo desesperado, herido por las enormes dificultades, puede enloquecer, como cualquier persona; puede perder sus ideas propias; esto es lamentable, pero podemos decir que todo ello es consecuencia de la falta de educación, especialmente de la formación religiosa”
En un momento de la película, Chico Xavier se autodefine como un “cartero” que entrega cartas, quitándose cualquier importancia, por su carácter de humilde servidor de una causa pacificadora y consoladora; porque su vida fue una dedicación al trabajo, como funcionario durante su horario laboral, como trabajador de un centro espírita en auxilio constante a otras personas, y como colaborador de la espiritualidad para escribir más de 400 libros que nunca reconoció como propios.
En lo que respecta al reparto, incluye a muchos actores brasileños conocidos de telenovelas; siendo 3 actores los que dan vida a Chico Xavier en momentos puntuales de su vida:
Matheus Costa de niño, Ângelo Antônio de joven; y Nelson Xavier de anciano, en su periplo vital.
Y junto a Chico, se yergue la figura de su guía espiritual, Emmanuel (André Dias), que forma parte de los autores de “El Evangelio según El Espiritismo”, obra a la que este espíritu denomina “Libro de La Esperanza” por el esclarecimiento que proporciona de Los Evangelios, como legado para la humanidad.
La película tiene la increíble actuación de Nelson Xavier, cuya semejanza con el personaje en sí es espeluznante; y le da al personaje un sabor suave y humorístico, sin exagerar en ningún momento.
Ângelo Antonio, muestra a Chico Xavier inseguro e ingenuo en su juventud, y Matheus Costa interpreta el papel con todo su sufrimiento y sentimiento de incomprensión.
Ana Rosa como Carmen, muestra cómo hacer un poco más grande la participación.
Tony Ramos y Cristine Torloni, son pura emoción; André Dias como Emmanuel, el guía espiritual de Chico Xavier, desempeña su papel con gran dignidad; y Pedro Paulo Rangel como El Padre Scarzelo, da una actuación impresionante, haciendo que su personaje explote en la pantalla.
Como dato, Nelson Xavier no está relacionado con Chico Xavier, a pesar del mismo apellido, y ambos hombres nacieron en el mismo estado, Minas Gerais.
De hecho, Nelson ha dicho que antes de hacer esta película, las personas a menudo los confundían y seguían llamándolo Chico Xavier, lo cual no le gustó mucho.
Pero cuando leyó el libro sobre la vida de Chico, y el guión de la película, se sintió transformado por todo lo que sabía sobre el médium, y decidió interpretar el papel de Chico en su vida posterior.
Por último, la partitura musical de Egbert Gismonti es excelente, fusionando canciones religiosas tradicionales con sonidos de la naturaleza, involucrando las escenas con una atmósfera mágica y emocional al mismo tiempo.
“Quando temos fé e disciplina, tudo fica mais fácil.
Paciência é a mãe de todas as virtudes.
Com ansiedade, todas as nossas vidas pioram”
Para el año 2006, Chico Xavier fue elegido “O Maior Brasileiro de Todos los Tempos”, y en 2010, año del centenario de su natalicio, ha estado marcado por numerosas celebraciones en Brasil, como 2 largometrajes y un sello postal especial; tanto que la ciudad de Uberaba, donde vivía Chico, levantó recientemente un memorial en su honor.
Y es que a lo largo de décadas, Chico produjo miles de cartas psicografiadas para padres desesperados que acudieron a él para recibir mensajes de sus hijos  fallecidos; y según una encuesta realizada en 1990, realizada por La Asociación Médica Espírita de São Paulo, las cartas siempre contenían mucha información que de alguna manera era familiar para los lectores a quienes estaban destinadas, y el 35% de ellos tenía una firma idéntica a la de los fallecidos.
De hecho, en El Estado de Pernambuco, después de la determinación de La Constitución del Estado, establece como obligación para ese Estado y sus municipios, la prestación de “asistencia a la persona dotada de esta facultad”
Tanto que los textos psicografiados por psíquicos como Chico Xavier y Jorge José Santa Maria, de la Benevolent Spiritist Society Love and Light, en el municipio de Porto Alegre; ya se han incorporado a los procedimientos penales en forma de “pruebas documentales”; en especial un caso presentado por la defensa, demostró ser un elemento decisivo en la sanción aplicada a un caso de homicidio aprobado internacionalmente en los estados de Goiás, Mato Grosso do Sul, y Paraná; entre los años de 1976 y 1982.
Pero hoy, desde mediados de 2018, Chico Xavier resucitó por enésima vez debido a una supuesta profecía que dice que en julio de 2019, los extraterrestres se presentarían oficialmente a la humanidad.
Chico Xavier se refirió en sus escritos a distintos acontecimientos futuros que la humanidad enfrentaría, precisando crisis políticas, cambios climáticos, descubrimientos científicos y, tal vez lo más controvertido, la realidad extraterrestre.
De aquellos mensajes que se refieren a los “hermanos del cosmos”, resalta uno que fue dado a conocer en 1986:
La advertencia de los 50 años o “El Protocolo de La Luna”; y viene así:
El 20 de julio de 1969, la misión Apolo XI logra posarse en La Luna.
Neil Armstrong se transforma, “oficialmente”, en el primer hombre en caminar en nuestro satélite.
Más allá de Las Teorías de Conspiración que sostienen que ese viaje nunca se hizo, y otras no menos incisivas que aseguran que, de haberse hecho, como mínimo, las imágenes reales del alunizaje se adulteraron, y La NASA no le contó al mundo lo que en verdad había registrado en ese viaje espacial, que marcó una etapa en la historia de la humanidad.
Pues bien, Chico Xavier canalizó un mensaje en donde “altas jerarquías celestiales” le habrían informado que a partir de ese acontecimiento, la humanidad sería sometida a un plazo de 50 años para ver si estaba lista para relacionarse con otras civilizaciones “no humanas”
El plazo, pues, se vence en julio de 2019.
La verdad es que el mensaje recibido por Chico Xavier, habla de un periodo de prueba en donde la humanidad debería abstenerse de una guerra nuclear, y convivir pacíficamente para ser admitida en una suerte de comunidad cósmica, el cual dice así:
“Nuestro Señor deliberó conceder una moratoria de 50 años a la sociedad terrena, a comenzar el 20 de julio de 1969, y, por tanto, a terminar en julio de 2019.
Ordenó Jesús, entonces, que sus emisarios celestes se empeñasen más directamente en el mantenimiento de la paz entre los pueblos y las naciones terrestres, con la finalidad de colaborar para que nosotros ingresásemos más rápidamente en la comunidad planetaria del Sistema Solar como mundo más regenerado, al final de ese período.
Algunas potencias angélicas de otros orbes de nuestro Sistema Solar sospecharon de la dilación del plazo extra, y fue entonces cuando Jesús, en su sabiduría, decidió imponer una condición a los hombres y las naciones de la vanguardia terrestre.
Según la imposición de Cristo, las naciones más desarrolladas y responsables de La Tierra, deberían aprender a soportarse unas a otras, respetando las diferencias entre ellas, absteniéndose de lanzarse a una guerra de exterminio nuclear.
La faz de La Tierra debería evitar a toda costa la llamada Tercera Guerra Mundial.
Según la deliberación de Cristo, si, y únicamente en ese caso, si las naciones terrenas, durante este período de 50 años, aprendiesen el arte de la buena convivencia y de la fraternidad, evitando una guerra de destrucción nuclear, el mundo terrestre estaría por fin admitido en la comunidad planetaria del Sistema Solar como mundo en regeneración”
Como se puede apreciar en el texto, Chico Xavier involucra dentro de esa “Jerarquía Cósmica” a Cristo y distintas entidades angélicas, una información que no es ajena a los mensajes de diferentes testigos de contacto.
Puede sonar chocante, pero también hay que entender el contexto cultural de Xavier:
Brasil es el país con mayor número de católicos en el mundo; pero también es un crisol de conocimientos.
De hecho, muchas escuelas espíritas de Brasil se consideran a sí mismas “cristianas”
¿Esto invalida el presunto mensaje de Chico Xavier?
¿Es posible que más allá de los prejuicios, exista una advertencia real, que parece cumplirse justo cuando actualmente potencias como China o Estados Unidos hablan de volver a La Luna?
¿Hay algo de verdad en todo esto?
El escenario es enrevesado; no obstante, Chico Xavier sostiene que si el ser humano obtiene un “aprobado” por parte de la mencionada “Jerarquía Cósmica” luego de esa moratoria de 50 años, se iniciaría, gradualmente, una nueva y positiva etapa; y lo describe así:
“Nosotros alcanzaremos la solución para todos los problemas de orden social, como la solución para la pobreza y el hambre, que serán extinguidas; habremos descubierto la cura de todas las enfermedades del cuerpo físico por la manipulación genética en los adelantos de la medicina; el hombre terrestre tendrá amplio y total acceso a la información y a la cultura, que se hará más generalizada; también nuestros hermanos de otros planetas más adelantados tendrán permiso expreso de Jesús para presentársenos abiertamente, colaborando con nosotros y ofreciéndonos tecnologías nuevas, hasta entonces inimaginables para nuestra fase actual de desarrollo científico; habremos de fabricar aparatos que nos facilitarán el contacto con las esferas desencarnadas, haciendo posible nuestra añorada conversación con los seres queridos que ya han partido para ultratumba; en fin, estaríamos ante un mundo nuevo, una nueva Tierra, una gloriosa fase de espiritualización y belleza para los destinos de nuestro planeta”
Sea como fuere, siempre estamos a tiempo de enrumbar el futuro, tal y como lo dijo Chico Xavier:

“Embora ninguém possa voltar atrás e começar de novo...
Qualquer um pode começar de novo e fazer um novo final”



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