8mm

“Be careful when you kill a monster, that you don't become one yourself”

Super-8 es un formato cinematográfico que utiliza película de 8 mm de anchura, se trata de una evolución del formato Doble 8, con película de idéntica anchura, pero cuya distribución entre área impresionada y perforación, así como las diferencias de tamaño de ambas, es diferente.
Nació pensado para el mercado doméstico, aunque en manos de aficionados y de modestos cineastas alcanzó un gran nivel.
Con la llegada de los nuevos sistemas de registro de imágenes sobre cinta magnética, lo que comúnmente llamamos "vídeo", cayó en picado su uso.
Pero actualmente ha cobrado nueva vida, entre cortometrajistas y vídeo artistas para obtener una estética diferente al vídeo.
“I wasn't beaten.
I wasn't molested.
Mommy didn't abuse me.
Daddy never raped me.
I'm only what I am.
And that's all there is to it!
There's no mystery.
Things I do, I do them because I like them!
Because I want to!”
Las películas snuff son grabaciones de asesinatos reales, sin la ayuda de efectos especiales o cualquier otro truco.
Su finalidad es registrar estos actos mediante algún soporte audiovisual y posteriormente distribuirlas comercialmente para entretenimiento.
Este tipo de films se han transformado en un mito moderno, en una leyenda urbana, ya que todavía se sigue y se seguirá discutiendo sobre su existencia.
Parecería ilógico pensar que en nuestra enferma sociedad, no haya algún individuo que se regocije, intelectual o comercialmente, con la producción y distribución de este tipo de material.
Muchas son las historias vinculadas a la producción y comercialización de estas películas.
Se las relacionó con redes pedófilas, con ritos satánicos e incluso con círculos millonarios.
Los lugares donde se filmarían también dependen de quien cuente la historia.
El cine es un medio flexible.
Es fácil simular una muerte en una cinta, que es en parte el motivo porque la gente cree en la existencia de snuff films.
Ven muertes simuladas y creen que son genuinas.
Creo que es posible que existan, pero existan o no es menos importante que la creencia de la gente en su existencia; es la voluntad de creer en una fantasía maligna.
Eso hace al mito interesante.
“You name the vice I name the price”
Se puede decir, que en la vida actual de velocidad, ritmo, movimiento, dinamismo, libertad, o más bien libertinaje, pueden quedar sueltas, sin rumbo, sin control, necesitadas, personas que no están formadas, que han soportado un hogar problemático sin felicidad, del que quisieran salir para buscar algo mejor y que en ese espacio, otras con maldad, sentido de explotación, materialistas, que por unos pocos dólares están dispuestos, sin duda alguna, a hacer daño, sacrificar e incluso matar con saña, y sadismo, a personas desorientadas que confiando en que les van a acercar y facilitar esa vida que soñaban, lo que reciben es la catástrofe de su existencia, sin remedio alguno.
“You know the best part of killing someone?
The look on their face.
It's that look.
Not when they're threatened.
Not when you hurt them.
Not even when they see the knife.
It's when they feel the knife go in.
That's it.
It's surprise.
They just can't believe it's really happening to them.
She had that look, the girl, when she knew it wasn't just porno”
8mm es una película de misterio y suspenso, dirigida por Joel Schumacher, estrenada en 1999.
Protagonizada por Nicolas Cage, Joaquin Phoenix, James Gandolfini, Peter Stormare, Anthony Heald, Chris Bauer, Catherine Keener, entre otros.
El guion original del escritor Andrew Kevin Walker, era enteramente diferente.
En esa versión, titulada "Sexy World", el protagonista Tom Welles era un solitario que encontró la conexión humana en su amistad con el propietario de una aislada tienda de pornografía a un lado de la carretera.
Walker más tarde tuvo una importante plática con el director Schumacher sobre el contenido oscuro de la película y cambiaron enteramente el guion.
Schumacher cortó una porción significativa de varias escenas de 8mm con el fin de no obtener una clasificación “X”
Lo interesante de 8mm es que en sus tiempos dio a conocer el mundo del snuff que de vez en cuando sale a la luz.
El corte de 8mm es oscuro y críptico combinado con violencia y sexo “explícito” a partes iguales.
El producto termina convenciendo, porque equilibra bien la dosis de entretenimiento con el acento reflexivo que intenta dejar de fondo.
Todo ello mostrado con una cuota justa de truculencia que no cae en el mal gusto ni la violencia desmedida en ningún momento.
Durante la trama, se desglosa el problema típico familiar cuando las familias se separan y aparecen las figuras de los padrastros, los cuales no suelen ser aceptados por los adolescentes, los cuales buscan crear su propia vida y cumplir sus sueños.
Aunque la verdad, que la vida muchos sueños puede convertirse en pesadillas, si no se cuenta con la guía o apoyo adecuado, puede verse involucrados en situaciones que jamás ellos podrían pensar, en el caso de 8mm esta ocurre de forma dramática.
La trama gira en torno a Tom Welles (Cage), un detective privado contratado por una anciana viuda, cuyo millonario y reconocido esposo falleció recientemente.
Ella ha encontrado un rollo de película Super-8 en una caja fuerte.
En la película de 8mm está grabado el violento asesinato de una adolescente, que debido a su gran autenticidad lleva a Welles a pensar que se trata de una película snuff.
Welles comienza la investigación, que lo lleva a descubrir la identidad de la víctima, después a contactarse con su madre y posteriormente acercarse a la oficina de un productor de películas pornográficas en Hollywood.
La creciente obsesión de Welles por resolver el caso lo aleja de su esposa y su hija recién nacida y lo lleva al perturbador inframundo de la industria pornográfica más extrema.
Cuando la identidad de los asesinos queda al fin descubierta, la vida de Welles se encuentra en un peligro más grande del que había previsto.
Quizá la mejor parte de 8mm es cuando el protagonista principal descubre la trama y cambia por completo su “modus operandi” desarrollado hasta ese momento.
Las emociones y los sentimientos abren paso a una descarga de rabia contenida traducida en unos actos que a todo el mundo se le han pasado por la cabeza al escuchar alguna noticia dantesca relacionada con el submundo que muestra 8mm.
Desde las actuaciones, Nicolas Cage convence en el personaje típico de detective que va atando cabos a medida que se adentra en el aberrante mercado del sexo enfermizo.
Joaquin Phoenix en un secundario sin mucho desarrollo, pero que acompaña correctamente con su interpretación dentro de la narración.
James Gandolfini siempre equilibrado y convincente, como el antagonista que más relevancia tiene.
“If there was no honor among perverts and pornographers, the whole fucking business would fall apart”
Es complicado hacer una película donde se trata el tema del Snuff porque no solo tienes que contar una trama alrededor de este mundo sino que también tienes que contentar a los curiosos que quieren ver algunas escenas de sexo extremo y asesinatos.
Bueno, este es uno de los detalles que hacen de 8mm una película curiosa porque es excelente, pero han mutilado estas escenas y apenas se puede ver algo de sangre, nada de sexo explicito, nada de gore, apenas se ve alguna teta por ahí, esto es insuficiente para la trama que intenta contar.
Entonces:
¿Cómo puede ser que una película sobre el snuff no se vea snuff?
La existencia de lo snuff aún no ha sido demostrada, pero el cine snuff muestra el rostro más cruel del ser humano.
Volvemos a estar donde hemos empezado.
Entonces…
¿Existen o no las películas snuff?
Si.
Categóricamente sí.
Las películas snuff existen, pero obviamente no se pueden comprar en ninguna tienda, ni se pueden alquilar en un videoclub o bajarse de Internet.
Las películas snuff las gravan, normalmente, mafias dedicadas a la pornografía infantil, porno gonzo terriblemente degradante y un sin fin de actividades ilegales más.
Las películas snuff se hacen, normalmente, por encargo.
Y más allá del productor y el cliente, la película nunca sale a la luz.
Una película snuff, olvidándonos de lo comercial, es una película en la que se mata a alguien para gozo del espectador y beneficio del productor.
La policía ha interceptado, varias veces, películas snuff; y se han hecho, en más de una ocasión, detenciones relacionadas con este tema.
Por su parte, 8mm deja escapar muchas cosas, como es, entre otras, la postura de estar a favor de la pena de muerte.
El debate sobre este castigo, legalizado como sabemos en Estados Unidos, en 8mm surge cuando el policía llama a la madre de la chica contándole todo lo ocurrido, y, después de apreciar todo su dolor ante lo acaecido, recobra fuerzas para matar a uno de los culpables; también, cuando está en plena pelea con otro de los culpables, esta vez el auténtico asesino, el hombre que en la macabra película llevaba la máscara de cuero negro, y lo obliga a quitarse la capucha, y ante el rostro de una persona con pinta de inocente: calvo, con gafas, y que antes había despedido a su madre con un beso; se ve porque el policía fue a buscarlo a su casa, de la boca del asesino salen las palabras, no creo que textuales:
"No ves como no soy ningún monstruo, no intentes buscarle ninguna explicación, mi madre y mi padre siempre me han querido, nadie me ha maltratado ni he sufrido ningún abuso sexual, soy así porque simplemente soy así, no le busques explicación"
En 8mm volvemos a encontradnos una vez más con una realidad subyacente en toda sociedad.
El mundo torcido de la prostitución, la pornografía y el mundo que rodea el comercio del sexo.
Mujeres y hombres que han sufrido abusos y malos tratos desde su niñez.
Sobre todo mujeres que escapan de una pobreza económica y social.
Faltas de amor e incomprensión, de inestabilidad emocional, familiar y social.
De los sueños rotos de adolescentes influenciadas por los medios mediáticos de la fama al precio cual fuese.
Nos habla de la avaricia sin límites del ser humano.
De cómo puede llegar ser una mentalidad o personalidad enfermiza.
El modo sería todo un tratado de psicología, sociología y de mecanismos genéticos; es un problema de índole social y político.
Es un problema de todos.
Más allá de su real existencia o no, este tipo de films contiene algún elemento que provoca que el mito siga creciendo día a día.
Las vinculaciones a determinados ritos satánicos, a perversiones sexuales y al simple comercio nos hacen pensar en cuán enfermos estamos como sociedad.
Que alguien alcance el éxtasis sexual, religioso o monetario mediante la tortura, el ultraje, el asesinato da una idea de cuántos problemas tenemos por resolver.

“What'd you expect?
A monster?”


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