Journey Into Fear
Journey Into Fear
“Oriental intrigue”
Dirigido por Norman Foster y protagonizado por Joseph Cotten, Orson Welles, Dolores del Río, Ruth Warrick, Agnes Moorehead, Jack Durant, Everett Sloane y Jack Moss; Journey Into Fear es un thriller de 1943.
El guión es obra de Joseph Cotten y Orson Welles sobre una novela de Eric Ambler.
La trama de Journey Into Fear gira en torno a Howard Graham (Cotten), un ingeniero norteamericano experto en armamento, el cual llega a un hotel de Estambul, acompañado de su esposa y, esa misma noche, en una sala de variedades, sufre un atentado.
El coronel Haki (Welles), de la policía secreta turca, le advierte que Peter Banat (Moss), un asesino a sueldo de la Gestapo, anda tras él; para garantizarle la seguridad, le obliga a zarpar en un barco con destino a Batumi, donde podrá reencontrarse con su esposa Stephanie (Warrick)
Howard sube al barco, en el que viajarán otras personas de dudosa identidad... además del siniestro Banat.
Como ya he comentado, en un intento de protegerle, la policía cambia su ruta.
Hace que Graham siga el trayecto en solitario a bordo de un barco.
Mala idea, le meterán en la boca del lobo y sin escapatoria posible.
Graham tendrá que ingeniárselas para volver a ver a su esposa.
Journey Into Fear es una intriga bastante convencional con espías nazis de por medio y un magnífico clímax en la cornisa de un hotel bajo una persistente lluvia.
La fotografía corría a cargo de Karl Struss, permite a Welles volver a interpretar su personaje favorito… Orson Welles.
Esos planos cumplen con el cometido de generar opresión y claustrofobia, metiéndonos por el ojo la sensación kafkiana de sombras y pequeños espacios que Journey Into Fear requería en su totalidad, 68 minutos.
Son los momentos, son los planos, los que le dan el aprobado.
Es ese final bajo la lluvia que, como debe ser, te cala hasta los huesos.
Journey Into Fear es un filme correcto, sumamente entretenido y en el que incluso se incluyen algunas críticas nada ocultas hacia algunos pensamientos políticos, como cierta conversación, o más bien habría que decir monólogo, entre uno de los personajes secundarios y Joseph Cotten, acerca del capitalismo y el socialismo que es verdaderamente ingenioso y casi delirante, por divertido.
Como curiosidad, la actriz de origen mexicano Dolores del Río (Josette Martel) era para aquellos días del rodaje de Journey Into Fear la amante del director Orson Welles.
Por cierto, hay un par de toques humorísticos en Journey Into Fear ingeniosamente metidos que sorprenden bastante, pero por supuesto hacen reír.
“How fear makes people heroic”
“Oriental intrigue”
Dirigido por Norman Foster y protagonizado por Joseph Cotten, Orson Welles, Dolores del Río, Ruth Warrick, Agnes Moorehead, Jack Durant, Everett Sloane y Jack Moss; Journey Into Fear es un thriller de 1943.
El guión es obra de Joseph Cotten y Orson Welles sobre una novela de Eric Ambler.
La trama de Journey Into Fear gira en torno a Howard Graham (Cotten), un ingeniero norteamericano experto en armamento, el cual llega a un hotel de Estambul, acompañado de su esposa y, esa misma noche, en una sala de variedades, sufre un atentado.
El coronel Haki (Welles), de la policía secreta turca, le advierte que Peter Banat (Moss), un asesino a sueldo de la Gestapo, anda tras él; para garantizarle la seguridad, le obliga a zarpar en un barco con destino a Batumi, donde podrá reencontrarse con su esposa Stephanie (Warrick)
Howard sube al barco, en el que viajarán otras personas de dudosa identidad... además del siniestro Banat.
Como ya he comentado, en un intento de protegerle, la policía cambia su ruta.
Hace que Graham siga el trayecto en solitario a bordo de un barco.
Mala idea, le meterán en la boca del lobo y sin escapatoria posible.
Graham tendrá que ingeniárselas para volver a ver a su esposa.
Journey Into Fear es una intriga bastante convencional con espías nazis de por medio y un magnífico clímax en la cornisa de un hotel bajo una persistente lluvia.
La fotografía corría a cargo de Karl Struss, permite a Welles volver a interpretar su personaje favorito… Orson Welles.
Esos planos cumplen con el cometido de generar opresión y claustrofobia, metiéndonos por el ojo la sensación kafkiana de sombras y pequeños espacios que Journey Into Fear requería en su totalidad, 68 minutos.
Son los momentos, son los planos, los que le dan el aprobado.
Es ese final bajo la lluvia que, como debe ser, te cala hasta los huesos.
Journey Into Fear es un filme correcto, sumamente entretenido y en el que incluso se incluyen algunas críticas nada ocultas hacia algunos pensamientos políticos, como cierta conversación, o más bien habría que decir monólogo, entre uno de los personajes secundarios y Joseph Cotten, acerca del capitalismo y el socialismo que es verdaderamente ingenioso y casi delirante, por divertido.
Como curiosidad, la actriz de origen mexicano Dolores del Río (Josette Martel) era para aquellos días del rodaje de Journey Into Fear la amante del director Orson Welles.
Por cierto, hay un par de toques humorísticos en Journey Into Fear ingeniosamente metidos que sorprenden bastante, pero por supuesto hacen reír.
“How fear makes people heroic”
Comentarios
Publicar un comentario