Superman

“In the decade of the 1930s, even the great city of Metropolis was not spared the ravages of the worldwide depression.
In times of fear and confusion, the job of informing the public was the responsibility of the Daily Planet, a great metropolitan newspaper whose reputation for clarity and truth had become the symbol for hope in the city of Metropolis...”

De todas las cosmogonías mitológicas que ha parido el difunto siglo veinte, sin duda una de las más importantes, seguramente la que más repercusión cultural ha provocado, ha sido la de nuestros queridos superhéroes.
Si la comparamos con, por ejemplo, los populares mundos de fantasía heroica deudores directos del mítico Tolkien, queda claro que la mitología supe heroica es mucho más connatural a la edad moderna.
Héroes del presente que actúan sobre el asfalto y el cemento, visten colores chillones y, en algunos casos, sufren las debilidades propias de nuestro tiempo.
Miles de superhombres (y súper mujeres) en mallas convertidos en iconos pop, en ningún caso deudor de fábulas clásicas e incrustadas desde principios de siglo y para siempre en el imaginario colectivo.
Si lo súper heroico, como género, representa uno de los puntales de la cultura pop, está claro que Superman es su máximo exponente, y por ende uno de los más grandes iconos pop del momento, perfectamente comparable al último Papa, Juan Pablo II, a Madonna, a Marilyn Monroe o a cualquier otro que podáis imaginar.
Visto así, y como no podía ser de otra forma, el cine y la televisión han explotado ese tirón contracultural del último hijo de Krypton casi desde sus orígenes, allá por 1938 de la mano de Joe Shuster y Jerry Siegel para el número uno de la revista, The Action Comics.
Un factor que influyó en las primeras historias de Superman fue el contexto de la Gran Depresión.
La perspectiva de Shuster y Siegel, con tendencias izquierdistas, se refleja en los primeros argumentos, donde Superman toma un rol de activista social, que lucha contra empresarios y políticos deshonestos y demuele conventillos ruinosos, etc.
El personaje tuvo mucho éxito y dio origen al subgénero de los superhéroes.
Superman es un extraterrestre, el último superviviente del planeta Krypton cuyas especialidades son el poder volar; súper fuerza; fuerza sobrehumana; visión microscópica, visión de rayos-x, telescópica, calorífica; invulnerabilidad; inmortalidad; súper velocidad; súper aliento; súper oído; longevidad sobrehumana, factor de curación regenerativa, no tiene la necesidad de respirar, capacidad de protegerse a él y todos los que toque, etc.
“You'll Believe a Man Can Fly!”
Superman es una película estadounidense del año 1978 basada en el personaje de cómics Superman.
Superman está dirigida por Richard Donner y protagonizada por un ENORME Christopher Reeve, Marlon Brando, Margot Kidder, Gene Hackman, Terence Stamp, Glenn Ford, Trevor Howard, Ned Beatty, Jackie Cooper, Aaron Smolinski, Susannah York y Larry Hagman.
El guión fue obra de Robert Benton, David Newman, Leslie Newman y Mario Puzo.
Superman fue nominado a 3 Óscar y obtuvo un premio especial de la Academia por los efectos especiales.
Curiosamente, uno de los factores que más quebraderos de cabeza dio al equipo de producción y efectos, los estupendos efectos especiales previos a la era digital nos convencieron realmente de que Superman podía volar.
Superman viene a ser el primer filme hecho sobre superhéroes, el primero basado en un comic y hasta me animo a decir que es uno de los pilares que revolucionó con su estética al género fantástico.
Superman impacta desde lo visual, te sorprende desde la inventiva y te regocija desde la famosa banda sonora de John Williams que aún hoy tarareamos con gusto identificando al más fuerte de los superhéroes conocidos hasta el momento.
De las actuaciones se puede decir que Superman logró atraer a una personalidad muy respetada como el ENORME Marlon Brando aunque más no sea para el comienzo de la cinta solamente, en especial el monólogo durante la escena en la que introducen a Kal-El en la nave, si bien su intervención en Superman no justifica para nada la burrada de dinero que hubo que ponerle en la mano para que aceptara el papel; si catapultó a un desconocido por entonces Christopher Reeve inhumanamente guapo como Superman a ser un ícono al que siempre identificaremos con El Hombre De Acero.
Una de las razones que hicieron a Christopher Reeve hacerse acreedor del papel de Superman fueron sus características físicas, ya que eran parecidas a las del Superman del comic.
Para empezar su privilegiada estatura: 194 cm y sus ojos azules.
El único detalle fue el cabello, que tuvo que teñírselo de color negro, puesto que el cabello de Reeve era rubio.
Hasta el día de hoy la interpretación de Reeve del personaje sigue siendo considerada como la definitiva y ningún otro actor ha logrado capturar tan bien la esencia del hombre de acero como él.
Es uno de esos casos raros, en el que el personaje escoge al actor, Reeve es Superman y Superman es Reeve.
Donner también sigue siendo imitado ya que su versión de Superman es considerada insuperable por muchos e inevitable por otros.
Pero, si Superman tiene algo bueno, es que no necesita maratonianas escenas de lucha para acabar con sus enemigos.
No se ven interminables patadas y llaves de artes marciales.
Siempre al grano, tocado y hundido, lo cual hace que nos podamos centrar en cosas mucho más interesantes como la relación de Superman con el mundo, las vistas espectaculares: como de la un preciosísimo Manhattan rodado como antes nunca lo habíamos visto, la talentosa dirección artística con esos decorados de Krypton y el Polo Norte, o los sabrosos diálogos a cargo de personajes como Perry White o Lex Luthor.
Y es que me cuesta pensar en un malvado tan canónico como el interpretado por Gene Hackman, tan irónico, prepotente y a la vez simpático.
Superman no es perfecto, ya que Lex Luthor (Hackman), el principal enemigo de Superman es demasiado payasesco como para ser tomado en serio e interrumpe el flujo de la historia sin apenas contribuir en nada ya que su presencia podría ser completamente obviada y Superman no perdería mucho.
Hackman interpreta a un cáustico Luthor rodeado de inútiles y dominado por delirios de grandeza totalmente delirantes.
El sentido del humor manejado a la perfección por Hackman confiere a Superman unas dosis de liviandad y simpatía extraordinarias, muy de agradecer.
Glenn Ford interpreta a la perfección el papel del padre terrestre de Superman, tanto cuando la nave aterriza, más bien se estrella, como cuando aconseja a un Clark adolescente que sólo desea dar rienda suelta a los poderes que, poco a poco, comienza a descubrir; Jackie Cooper está soberbio interpretando al exigente y estresado redactor jefe del Daily Planet; Ned Beatty nació para interpretar a Otis, el patoso y atontado ayudante de Luthor que estorba más que ayudar y Margot Kidder como la enamorada Lois Lane agresiva y luchadora en su trabajo pero dulce e ingenua en el amor.
Lo más destacado de Superman es el tema de la doble personalidad, el dilema del límite de sus poderes y el nivel de participación en los hechos de la historia de la humanidad.
¿Cuál es el límite de mi intervención en la historia del hombre?
¿Acaso, por omisión del deber debe morir gente?
Son preguntas constantes que rondan la cabeza del héroe y que, en cierta forma, Superman resuelve.
Respecto al tema de los efectos especiales, son muy importantes en Superman puesto que ya en el “spot” te dan a entender que vas a ver el efecto de volar como nunca se ha visto.
Y es totalmente cierto, hay que ponerse en la época del filme (1978) y es simplemente impresionante como consiguieron el efecto de volar del Hombre De Acero.
Es que lo ves y te crees que es real.
Aparte de eso, pues luego también hay muchísimas escenas muy bien elaboradas: la persecución de los misiles nucleares, cuando Superman intenta arreglar la falla de San Andres, cuando hace girar el planeta, toda la parte de la trama que ocurre en Krypton, etc.
La historia de Superman nos narra sus orígenes: la destrucción de su planeta natal Krypton, su llegada a la Tierra, concretamente Smallville, su vida como Clark Kent en el instituto, la creación de La Fortaleza De La Soledad y su llegada a Metropolis como El Hombre Del Mañana y como el periodista Clark Kent.
En su trabajo del Daily Planet conocerá a Lois Lane, a Jimmy Olsen y su jefe Perry White.
Superman va solucionando muchos problemas, como en viaje iniciático, hasta que se encuentra con Lex Luthor, un loco homicida con ansias de poder, que le explica su plan de destruir la falla de San Andres y hundir toda California para poder aprovecharse de la revalorización de unas tierras que ha adquirido.
Superman pretende detenerle pero es incapacitado con un trozo de kryptonita.
A pesar de ello, consigue librarse e inicia una persecución contra los misiles nucleares que tienen como objetivo dicha falla.
Como no puede ser de otra forma al final, El Hombre De Acero consigue arreglar el desaguisado y detener a Lex...
Y por descontado, con un vuelo al espacio y un guiño al espectador nos promete que regresará con una secuela.
Quizá el mayor triunfo de Superman sea capturar bien el origen del hombre de acero y preparar el terreno para su aparición, la cual no ocurre hasta más de una hora después que se inicia la película.
Superman también se permite considerar las implicaciones religiosas de la mitología de Superman, la cual tiene gran parecido con la religión cristiana.
Superman también se permite incluir mucho humor y darle un toque ligero aunque no tonto a las aventuras del Hombre De Acero, que lucha contra el hecho de que nunca será humano y que sus grandes poderes lo alejan de la humanidad sin importar todo lo que permiten hacer.
La relación entre Superman y Lois Lane es de los puntos altos de Superman ya que muestra al héroe de una forma mucho más humana y accesible de lo que se lo había visto antes, marcando un punto de inflexión en la evolución del personaje que comenzó a volverse mucho más humano.
Ahora bien…
¿Por qué Superman sigue siendo la mejor película del género de superhéroes?
En primer lugar, hay que darse cuenta de la dificultad de la cosa, pues no había sólo que hacer la presentación del personaje, sino que había que hacer el "bio-pic" íntegro.
No es posible entender la génesis si no sabemos de Krypton, del viaje interestelar, de la casa de los Señores Kent...
Además de eso, hay que llegar al proceso de auto-reconocimiento del héroe en el polo norte, situarle en Metropolis para que entendamos su doble vida, y finalmente presentar un plan diabólico que desbaratar con malvado incluido al que vencer.
Parece mucha cosa para meter en 143 minutos.
Sin embargo, Richard Donner, ayudado por Mario Puzo, consigue plasmar esto y más, a través de una estructura basada en una sucesión de clímax que van en "crescendo"
El momento en que la nave del pequeño Kal-El abandona su planeta natal, cuando levanta la furgoneta de sus padres adoptivos, el instante en que descubre quién es, el episodio del helicóptero... y todo ello sin caer en la sensación episódica o de deslabazamiento.
Muchos son los elementos que hacen excelente este largometraje.
Pero yo destacaría:
Los espectaculares títulos de entrada, con música de John Williams que pone los pelos de punta, los primeros momentos.
Las escenas del planeta Krypton, curiosamente Marlon Brando cobró 10 veces más que Christopher Reeve por un papel de cinco minutos y es el primero que aparece en los créditos, evidenciándose su calidad de Divo del Cine, es sublime, magníficas maquetas las del planeta, estupenda
El fabuloso reparto, por muchos actores que hagan los papeles, para mí, Superman, Lois y Lex Luthor tendrán siempre los rostros de Christopher Reeve, Margot Kidder y Gene Hackman.
El romanticismo de la escena de vuelo de Superman y Lois, una de las escenas románticas más bellas y bien logradas que se hayan visto en el cine
La estupenda combinación de acción y humor en toda Superman, y la escena del helicóptero, simplemente genial.
“Can you read my mind?
Do you know what it is that you do to me?
I don't know who you are.
Just a friend from another star.
Here I am, like a kid out of school.
Holding hands with a god.
I'm a fool.
Will you look at me?
Quivering.
Like a little girl, shivering.
You can see right through me.
Can you read my mind?
Can you picture the things I'm thinking of?
Wondering why you are... all the wonderful things you are.
You can fly.
You belong in the sky.
You and I... could belong to each other.
If you need a friend... I'm the one to fly to.
If you need to be loved... here I am.
Read my mind”
En las primeras adaptaciones del personaje en cortos animados y en series de televisión la música siempre fue enaltecedora de su carácter heroico, aunque destacó muy especialmente desde la película de 1978 con Christopher Reeve, en que se le comisionó al compositor norteamericano John Williams.
El tema principal de Williams para Superman fue, tal como se esperaba de él, grandilocuente y encomiástico para el personaje, mientras el resto de la orquestación resultó ser también de mucha calidad, aunque el tema sería lo más perdurable convirtiéndose en casi permanente del Hombre De Acero; su leitmotiv.
El tema principal de Williams para Superman se volvería emblemático de la serie y prácticamente reconocible hasta la fecha.
La partitura de la película original de 1978, como muchas otras de John Williams, fue ejecutada por la Orquesta Sinfónica de Londres.
Los principales temas de la película a destacar, fueron:
Superman Fanfare, que como su nombre indica es una melodía corta la cual anuncia y acompaña la presencia del héroe en pantalla.
Curiosamente, es muy similar, como variación al tema de Star Wars.
Superman Main Theme ó Superman March, el cual se divide en dos secciones, la primera que es básicamente un himno y una segunda más melódica, y en la cual a su vez se incorpora en algunas secciones la Superman Fanfare.
El infaltable Love theme, llamado también Can You Read My Mind, que como indica su nombre enmarca los encuentros de Clark con Lois Lane.
Krypton Fanfare: Como su nombre indica es un tema corto utilizado para las imágenes del planeta natal del héroe, y posteriormente para la construcción de su Fortaleza de la Soledad.
Tiene un acorde secundario de sonido misterioso generalmente llamado Krypton Crystal.
Tema personal de Superman, que refleja su dualidad debido a su identidad secreta como el despistado Clark.
Smalville ó Gowing Up Theme, un tema de sonido provinciano que acompaña las escenas en el pueblo ficticio de Smallville, ubicado supuestamente en el Estado de Kansas.
The March of the Villains ó Lex Luthor theme, que es más bien una función de sonido cómico dada la representación del maloso Lex Luthor.
Curiosamente, la banda sonora se lanzó junto con Superman en 1978 por Warner Bros. Records, en 2 discos debido a lo extenso de la partitura, y aun así no contenía toda la musicalización en buena medida porque la publicación de la correspondiente música aún no era práctica muy frecuente en esos días.
“You will travel far, my little Kal-El.
But we will never leave you... even in the face of our deaths... the richness of our lives shall be yours.
All that I have, all that I've learned, everything I feel... all this, and more I...
I bequeath you, my son.
You will carry me inside you... all the days of your life.
You will make my strength your own, and see my life through your own eyes, as your life will be seen through mine.
The son becomes the father, and the father, the son.
This is all I... all I can send you, Kal-El”
Superman ha resultado fascinante para los académicos y tanto tesistas culturales como comentaristas y críticos han explorado el impacto del personaje y su rol en los Estados Unidos y en el resto del mundo.
Umberto Eco por ejemplo discutió las cualidades mitológicas del personaje a inicios de los años 1960 y Larry Niven escribió sobre las características de una hipotética relación sexual entre el personaje y Lois Lane.
Hay muchas opiniones que uno escucha al pasar sobre que a Superman se lo puede llegar a comparar con Jesucristo dada las similitudes en las variantes de los propósitos de ambos: buenos de corazón, vienen al planeta Tierra a sustentar un régimen de bondad u justicia, únicos hijos con revelaciones constantes del padre.
Incluso he leído que los creadores del cómic, Jerry Siegel y Joe Shuster, se inspiraron en la figura de Cristo.
En el caso de Superman, no es sólo que sus "padres", Siegel y Shuster fueran judíos, como en el caso de otros tantos creadores de comics.
Es que además, este superhombre tiene rasgos y representa metáforas inequívocamente israelitas.
Para empezar, Jor-El es el nombre hebreo de ''Dios El Padre'' y Kal-El es un vocablo hebreo קל-אל que significa ''La Voz De Dios''
El sufijo «El», que significa de Dios, también se encuentra en los nombres de ángeles, como Gabriel, quienes son agentes del bien con aspecto humanoide, que pueden volar y poseen poderes sobrehumanos.
Para seguir, la idea de un "ser invencible, guardián de la seguridad del pueblo", base de los superhéroes, está directamente sacada de la leyenda judía del Golem, y por si fuera poco, la propia peripecia vital de Superman, la manera en la que sus padres lo envían a La Tierra, refleja el drama de muchos padres judíos alemanes que en las vísperas de la Segunda Guerra Mundial mandaban a sus hijos a EEUU con la esperanza de poder salvar así su vida, lo malo es que no todos tuvieron esa suerte; ya lo dice el propio Superman:
"Con todos mis súper poderes y no he podido salvarle", es la idea recurrente en el personaje.
La película de Superman (1978) comienza cuando el planeta Krypton está destinado a la destrucción.
Hay 3 criminales que han sido juzgados y considerados culpables, como La Trinidad del Apocalipsis (16:13): el dragón, la bestia y el falso profeta y que van a ser expulsados, como Satanás del Cielo.
La Trinidad del Padre Jor-El, decide enviar a su Hijo Kal-El al mundo, cuyo nombre kryptoniano significa “Estrella”.
Jor-El bendice a su hijo, asegurándole que nunca le abandonará.
Todo lo que tiene, se lo da.
Él mismo le llevará en su interior el resto de los días de su vida.
"El hijo se convierte en el padre, y el padre en el hijo", dice Brando en unas palabras que recuerdan al Evangelio de Juan.
El Hijo vendrá a este mundo de una forma sobrenatural, en una cueva en forma de útero, creada por una nave espacial, que trae el Nacimiento de la Estrella.
Como Cristo, Superman tiene una doble naturaleza.
Vive en una familia humana, pero tiene un origen celestial.
Sus prodigios recuerdan los milagros de Jesús, y trabaja en un periódico, que va a dejar registro de las hazañas, que anuncian su venida.
El enemigo de Superman, Lex Luthor, suena en inglés como Lucifer.
Vive bajo tierra, y ofrece a nuestro héroe un reino en este mundo.
Superman baja al fuego del infierno, en medio de un terremoto, en el que muere su amada Lois, con un coche como tumba, siendo resucitada por Superman.
Para ello nuestro héroe tiene que alterar el tiempo.
Lo que logra dando vueltas a la Tierra, para invertir su rotación.
Tras cambiar así la Historia, Superman levanta los brazos y asciende a los cielos…
Por otro lado, el logo de Superman uno de los logotipos más reconocidos de inmediato en el mundo, al igual que lo es la cruz de Jesucristo, lleva matices de la historia, la literatura, las ciencias (¿esotéricas?) y las artes.
Los dos colores del logotipo llevan un profundo significado.
El rojo y el amarillo son los colores de RAO (el Dios-Sol de Krypton) y Sol se refiere a la luz del Sol, y los dones asignados a él y los dioses representados por él.
La forma piramidal que nos recuerda claramente a un diamante, un claro signo de pureza y fortaleza, es en realidad un pentágono irregular, si contamos sus lados veremos que tiene cinco, lo cual no es en ningún caso una coincidencia.
El símbolo del pentágono inscrito en el pecho del Hombre De Acero nos da algunas luces de lo que puede atribuirse a las fuerzas bélicas: fuerza, poder, invencibilidad, etc.
Véase la figura arquitectónica del Pentágono, el centro del mando militar estadounidense.
La figura pentagonal es también el símbolo mágico por excelencia en ciertas prácticas ocultistas pero bajo el nombre de pentáculo o pentagrama que son dos cosas distintas.
Aunque no es lo mismo un pentágono que un pentagrama, se pueden establecer innegables semejanzas.
El pentagrama es una figura formada por líneas rectas, la cual se asemeja a una estrella.
La han adoptado satanistas, paganos, pitagóricos y otras corrientes con diferentes significados.
El pentáculo pagano es un pentagrama inscrito en un círculo, y su connotación no es satánica, sino mágica.
Es un signo que representa los elementos tierra, aire, fuego, agua y espíritu, así también como la correcta armonía entre ellos.
Si unimos cada punta con su adyacente, tendríamos como resultado una figura pentagonal perfecta.
El otro elemento que compone el logo de Superman, la ''S'', es en realidad un sigilo, es decir una representación de una idea mayor a través de una letra a fin de, justamente ''sigilizar'' su significado y hacerlo pasar desapercibido para la gran mayoría del público haciendo valer de alguna forma el axioma que dice:
''La mejor manera de ocultar algo es mostrándolo''
¿Pero cuál es la idea que sigiliza la letra ''S''?
La letra representa a la serpiente, la cual también es un arquetipo y un símbolo acuñado por diferentes tradiciones esotéricas y ocultas.
La naturaleza serpentina es un modelo que se repite en La Biblia como en otras tradiciones, como en los testimonios precolombinos, en los que innumerables dioses tenían esta naturaleza reptilinea o los dioses sumerios.
La serpiente es un símbolo de conocimiento, sabiduría y curación en diversas corrientes, que no nos son en absoluto ajenas, tanto es así que la serpiente se ha convertido en el símbolo de la salud...
El símbolo ''S'' que se utilizó para crear el logotipo, tiene un significado mucho más adentro de los límites de la cultura americana, del nombre del propio personaje (Superman) y de la inicial del apellido de sus dos creadores (Siegel y Shuster).
La ''S'' (Stands for Superman - Sinónimo de Superman), (Stopping crime - Detener el Delito), (Saving Lives - Salvar Vidas), además de representar el símbolo de Superman lo es también de la casa familiar en Krypton, cuya pronunciación recuerda ''el Tikkum Olam'' hebreo, un concepto de restauración de los males de este mundo, qué está en el fondo mismo de la esperanza mesiánica bíblica...
Superman es un ser que llega del cielo, su nave espacial tiene forma de estrella, por lo que su llegada es literalmente anunciada por una estrella, así como la de Jesús fue anunciada por la Estrella de Belén.
Superman se alimenta del Sol, el Sol amarillo agranda sus poderes, Sol=luz=vida, representa todas las virtudes, paciencia, sobriedad, castidad, honor, humildad y evita todo aquello que se interprete como pecado, siempre está para ayudar al débil y derrota a sus enemigos mostrando su superioridad, pero siendo humilde y siempre entregándolos a la justicia de los hombres...
Los dos, Superman y Jesucristo, son enviados a La Tierra desde el cielo.
Los dos crecieron con un padre adoptivo.
Los dos fueron conscientes de su verdadera naturaleza cuando se hacen mayores.
Los dos tienen poderes sobre-humanos.
Los dos mueren alguna vez.
Los dos luchan contra el Mal, cada uno a su manera.
Ninguno de los dos peca.
Los dos tienen multitud de películas sobre su vida.
Los libros de los dos, La Biblia y La muerte de Superman, son bestsellers de los más vendidos de la historia.
Los dos hablan con su padre cuando ya no está.
Los dos viven en soledad.
Los dos viven en climas extremos: uno en el desierto, el otro en el Polo Sur.
Los dos se han enfrentado a gente que se hacía pasar por ellos, y un largo etc.
Este «mesías de Krypton», enfrenta al mal y defiende a aquellos más desfavorecidos, que eran muchos en la época en la que nace el personaje.
Una situación de crisis económica que en algunos aspectos recuerda al estado actual de la sociedad.
Superman está como a favor de los oprimidos, para ayudar cumpliendo ideales de justicia, algo parecido a los principios de Roosevelt.
Luego, el personaje va evolucionando hasta convertirse en un prototipo conservador, estableciéndose como una figura de la clase media americana.
Como ocurre con otros superhéroes, es alguien que el mundo rechaza, como si fueran incomprendidos de su propia época.
Igual de ya sabes quién…
Superman tiene esta conciencia mesiánica y un sentido de propósito al que no puede renunciar.
“Live as one of them, Kal-El, to discover where your strength and your power are needed.
Always hold in your heart the pride of your special heritage.
They can be a great people, Kal-El, they wish to be.
They only lack the light to show the way.
For this reason above all, their capacity for good, I have sent them you... my only son”
Pero también hay diferencias marcadas entre ambos héroes, el de ficción y el bíblico.
Se insiste en la limitada visión de Jesús que puede ofrecer un superhéroe.
Superman es enviado escapando de una destrucción de su planeta, algo que encauza con la mitología, no con la Biblia.
En cambio, Jesús no huye de alguna situación, sino que es enviado por el Padre con un propósito.
Además no es un Padre que muere, sino que sigue viviendo con él en eterna relación.
De modo que Jesús y el Padre viven en una comunión real y vital.
Por otra parte, Jesús no vivió una doble vida, ocultando su identidad.
Jesús vive con completa naturalidad su deidad y humanidad, de forma que hace los milagros abiertamente, mostrando su identificación con el hombre y haciendo este acto prodigioso de su poder.
Además, la historia de Superman podría mostrar la necesidad del sacrificio para salvar a otros.
Pero el sacrificio de Cristo es inigualable por el significado eterno.
Por otro lado se ataca al héroe de ficción de manera nacionalista, muy parecida con su contraparte bíblica.
Superman, en su traje, viste los colores de la bandera de Estados Unidos.
Superman, viene de las estrellas, las cuales también podemos ver en la bandera de este país.
Superman es blanco, anglosajón y protestante, como la élite gobernante de ese país y es un estrecho colaborador del gobierno y del Presidente de los Estados Unidos.
Superman actúa como un policía del mundo, ayudando a los "buenos" y escarmentando a los "malos", sin pararse a reflexionar en las causas sociales que provocan la delincuencia o el crimen, es decir, el desigual reparto de la riqueza, la sociedad de clases, la marginación, el abuso de poder, la injusticia, etc. él defiende el Poder, el Status Quo.
Superman es todopoderoso, prácticamente invencible, como suele decirse del poder militar estadounidense.
Superman se comporta como un Dios en la tierra, impartiendo su propio concepto de la justicia y creyéndose un mesías o salvador del mundo, igual que han hecho creer y hacen los dirigentes de los Estados Unidos.
Superman, por tanto, no es sino un símbolo, una metáfora del sistema de valores y de la visión imperialista-mesiánica del mundo propia de la élite anglosajona y protestante del gran país del norte, visión con la que se auto legitiman moralmente para intervenir en los asuntos de cualquier país del globo en defensa de los intereses de los grandes capitales financieros e industriales que son los verdaderos dueños de la nación.
Superman por tanto, no solo es una película, también es propaganda que nos han ido inoculando desde que éramos pequeños para que nos identifiquemos con las políticas belicistas y de rapiña de las distintas administraciones que han ido ocupando el despacho oval de la Casa Blanca.
No es la única película propagandística o simbólica de la visión imperial estadounidense, hay muchísimas más, pero es conveniente tener la mente en guardia cada vez que consumimos este tipo de productos, más de uno de los que estén leyendo esta crítica apoyará o habrá apoyado alguna vez las aventuras imperiales de Estados Unidos para salvar al mundo de los "malos" y no será casualidad.
Pero regresemos al film…
Por otro lado, el mismo Jor-El, padre de Superman, encarna a todos aquellos que en los 30 avisaron por activa y por pasiva del horror humano que se avecinaba mientras los europeos miraban hacia otro lado, y que en la historia original queda sublimado como la destrucción total de Krypton.
Superman es además el único superhéroe que oculta su verdadera identidad en la vida cotidiana, a diferencia de muchos otros que se visten o transforman.
Superman es Superman, y para ganarse la vida es Clark Kent.
Y esto tiene mucho que ver con el sentimiento de necesidad de ocultación que tienen los judíos, y la intuición de que mostrarse sin tapujos, en cualquier parte, a cualquier hora, puede despertar a una turba de linchadores dispuestos a culparles de todos los males del mundo.
Superman es un héroe que lucha por el bien y no tiene conflictos internos, ni crisis de responsabilidad por ello, ni necesita invocar traumas infantiles para dedicarse a lo que se dedica.
Superman es un héroe mítico, y como tal, representa una conducta muy estilizada, carente de recovecos y dobles fondos, lo que propicia que no pocos estudiosos acusen de "simple" a lo que es un arquetipo, y un arquetipo tan exitoso a juzgar por el número de "copias" que ha tenido.
La motivación de este superhombre es el mandato del Talmud:
"Hacer el bien allí donde vaya, e intentar curar el mundo allí donde sea posible"
Y no hay más vueltas que darle.
Superman es visto como un icono cultural estadounidense y como el primer superhéroe de los cómics, en la pantalla grande y en nuestra forma de vivir.
Sus aventuras y popularidad han establecido al personaje como una fuente de inspiración en los ojos del público, inspirando a músicos, comediantes y escritores.
Conceptos propios del cómic han sido asimilados por la cultura popular, de manera que la kryptonita puede usarse como sinónimo de Talón De Aquiles y en inglés Brainiac y Bizarro se utilizan para indicar “inteligencia extrema” y “lógica inversa”
Igualmente, la frase «No soy Superman» o «No eres Superman» es un modismo usado para sugerir vulnerabilidad.

“No, now you listen to me.
When you first came to us, we thought that people would come and take you away because if they found out about the things you could do, well that worried us a lot.
But then a man gets older and he thinks very differently better, starts to see things very clear.
And there's one thing I do know, son.
And that is, you are here for a reason.
I don't know whose reason it is, or whatever the reason... maybe it's...
I don't know.... but I do know one thing:
It's not to score touchdowns”


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