Lethal Weapon

“Two cops.
Glover carries a weapon.
Gibson is one.
He's the only
L.A. cop registered as a Lethal Weapon”

Si pregunto por películas de culto de los 80:
¿Con cuáles títulos respondería?
Condensadores de flujo, “starfighters”, guerras en las galaxias, historias de replicantes, extraterrestres, arqueólogos aventureros, monstruos, aliens, robocops…
Durante los años 80, surgieron multitud de maravillosas películas, que han marcado a toda una generación de niños, que ahora son adultos, y recuerdan con mucho cariño esas historias llenas de creatividad y aventuras.
“If these two can learn to stand each other... the bad guys don't have a chance”
Lethal Weapon es un película de acción policiaca estadounidense, del año 1987, dirigida por Richard Donner.
Protagonizada por Mel Gibson, Danny Glover, Gary Busey, Mitchell Ryan, Tom Atkins, Traci Wolfe, Darlene Love, Grand L. Bush, entre otros.
El guión es de Shane Black.
Lethal Weapon fue candidata a un premio Oscar al mejor sonido en 1987.
Siempre hay un comienzo, un punto de partida, que marca un antes y un después; a veces es un hecho fortuito, un acontecimiento claro, o una percepción subjetiva; en el cine de acción policíaco, podemos decir que el punto de inflexión es Lethal Weapon, ya que marca un antes y un después en el género.
El director Richard Donner, tiene en su versatilidad, su mayor virtud, ya que ha dirigido desde comedia familiar hasta terror, pero sin duda, su preferencia es la acción.
El veterano Donner, dirigió con maestría, una de las mejores películas policíacas de las últimas décadas, con unas espectaculares escenas de acción, acompañadas del toque de humor justo, para suavizar la violencia de las imágenes de manera inteligente.
Desde el punto de vista técnico, a Lethal Weapon no se le puede reprochar nada, ya que está perfectamente ejecutado; siendo el comienzo de una saga, dirigidas también por Richard Donner, cosa rara, debido a que se encargó de dirigir los 3 títulos restantes de la franquicia.
Lethal Weapon es un fin de acción, producido en plena Época Dorada del género, y que dudo mucho, que nadie la conozca a estas alturas, porque merece ser vista como referente al género de acción.
Lethal Weapon hace gala de ese 1987; un año perteneciente a una década, en donde funcionaba de maravilla en pantalla, las parejas de policías, resolviendo casos siempre vinculados con los traficantes de drogas, ya que era usual entonces, que todo film de acción ochentero que se precie, tiene que mostrar su escena del agente metiendo un dedo en un paquete de cocaína, para luego llevárselo a la boca o nariz...
También, Lethal Weapon parte con la ahora gastada idea, de que la dupla de personajes, lleva una vida completamente distinta a la del otro:
Si uno tiene casa, mujer e hijos, y desayuna huevos con tocino; el otro como buen tipo duro que es, vive sólo en un cuchitril miserable, y se desayuna un cigarro con cerveza.
Así, con 2 personajes tan dispares, comienza la saga, en donde no faltará de nada; diferencias entre ellos, explosiones, y persecuciones a punta de bala.
Lethal Weapon inicia con una chica joven, que cae de un edificio bajo la influencia de la heroína.
El veterano sargento de policía, Roger Murtaugh (Danny Glover), descubre que era la hija de un antiguo compañero en Vietnam, Michael Hunsaker (Tom Atkins)
Pues resulta que una extraña organización, formada por antiguos miembros de las Fuerzas Especiales, está detrás de lo que parece un caso más complicado de lo que debería; pero Murtaugh deberá con la colaboración de Martin Riggs (Mel Gibson) un agente de narcóticos traumatizado por su pasado; intentar desenmascarar la organización del General McAllister (Mitchell Ryan) y su mano derecha Mr. Joshua (Gary Busey); así, la pareja de policías se ven inmersos en una trama de corrupción, tráfico de drogas, asesinatos, secuestros, tiros, y muchas más explosiones.
Curiosamente, el veterano sargento Murtaugh, es asignado con un nuevo compañero, el joven y explosivo sargento Riggs, ojo al nombre, que podemos interpretar como “RisK” o “Riesgo”; además de tener que acostumbrarse a trabajar en parejas, la dupla deberá resolver un caso, que involucra a la peligrosa banda de traficantes de drogas.
La primera mitad de Lethal Weapon es buenísima, porque nos van dando a conocer a ambos personajes, y su desarrollo está fenomenalmente construido, mientras van de misión en misión, como en una serie.
Durante la segunda mitad, ya llega el conflicto principal, con el terrorista malvado y cierto secuestro, y lo que está perfecto, respecto al desarrollo de los protagonistas, sufre una gran carencia por parte de los villanos.
Ya que no nos dan miedo, porque prácticamente, no les conocemos de nada.
Seguramente esto sea bueno, en vista de todas las continuaciones que hubo basadas en el dúo principal.
El argumento en sí, no es nada del otro mundo, aquí apenas se usa el cerebro, ya que todo es acción sin parar desde el minuto uno.
Muchos odian Lethal Weapon, por ser un típico cliché de policías y acción exagerada, con personajes definidos, pese a estar estereotipados, buena introducción, y puesta en escena de los mismos.
Respecto a los actores, Gibson y Glover llevan todo el peso de Lethal Weapon.
Mención especial para un Mel Gibson nervioso, “espídico” y en plenitud de facultades, que otros prefieren decir “sobreactuado”
Mientras tanto, Glover, con una interpretación bastante sobria con su papel de un hombre casado, maduro, y responsable policía, padre de familia, a punto de jubilarse; en contra posición de un Gibson deprimido por la muerte de su mujer, con tendencias suicidas, y eso sí, con buena puntería, amargado, sin otro deseo que recibir un tiro, pero que va humanizándose, y volviendo a la vida, a la humanidad, por el contacto con la familia de su compañero, que se comporta realmente como tal.
Riggs es uno de los mejores personajes de Mel Gibson, que de hecho, lo catapultó a la fama, y lo convirtió en un especialista en este tipo de películas.
Y hay que decir que el personaje de Gary Busey, es uno de los malos más representativos de los 80.
Los protagonistas, son 2 agentes de la policía de Los Angeles, que usan esa fórmula tan gastada de las “buddy movies” con vidas completamente diferentes, y antagónicas, inicial aversión entre ambos, que se convierte en una maravillosa amistad a medida que se va manifestando cierta química.
Curiosamente, ambos tienen puntos en común:
Son veteranos del Vietnam y quieren resolver sus casos rápidamente; pero sus decisiones topan con largas y humorísticas discusiones, que no así, interrumpen sus casos a esclarecer que, como ya se debe saber, en Lethal Weapon, se centra en uno en concreto.
“This is a real badge, I'm a real cop, and this is a real fucking gun!”
A diferencias de otras cintas policiacas, Lethal Weapon nunca se ha caracterizado por los combates cuerpo a cuerpo, la letalidad de los adversarios, ni la espectacularidad de sus secuencias de acción.
Sin embargo, Lethal Weapon se ha mantenido en el gusto del público, gracias a la perfecta química entre sus protagonistas, Mel Gibson y Danny Glover, los cuales interpretaron de manera, más que perfecta, a los sargentos Riggs y Murtaugh.
El resultado es que, pocos recuerdan las misiones a resolver en cada una de las cintas, pero nadie puede olvidar las incontables anécdotas vividas por este par de policías.
En fin, no hay nada técnicamente destacable en Lethal Weapon, simplemente su frescura, su originalidad, su fuerza.
Y eso la hace un clásico.
Y es que:
¿Cuántas películas se animan a decir, que los traficantes de drogas son americanos y no colombianos, o rusos, o tercermundistas?
Y encima, héroes de guerra…
Hoy en día, les harían cambiar el guión… y la protagonizaría algún modelo tipo Colin Farrell...
Aun, cuando las escenas de acción son muy buenas, el plato fuerte de Lethal Weapon es la relación entre ambos compañeros, y sus pequeños o grandes problemas en el trabajo.
Se supone que muchas veces se critican las películas por su argumento, o su previsibilidad a la hora de finalizar, si bien, Lethal Weapon no tiene un argumento original, ni nada fuera del otro mundo, y su final es muy previsible, nos cuentan una historia interesante, “divertida”, y llevadera, con buenos diálogos con chascarrillos en las discusiones entre Glover y Gibson, en un final espectacular lleno de acción.
Pero es que Lethal Weapon se queda en eso, en un espectáculo entretenido e interesante, que no sobrepasa los límites del género, sin llegar a hacernos reír, tanto como ya lo hiciera Bruce Willis “Die Hard” y sin mostrarnos giros de guión, o muerte de los buenos, para mostrarnos algo de credibilidad al argumento…
Dejando de lado, que en ese sentido, los valores que transmite Lethal Weapon no son muy éticos, el resto de la película agradó mucho.
Como decía antes, Lethal Weapon aúna todos los elementos de los que debe formarse una película de ese calibre.
El momento inigualable:
Al inicio, Murtaugh, quien aún no tiene compañero, observa con recelo a Riggs dentro de las oficinas de la policía, considerándolo peligroso sólo por su desarreglada apariencia.
Al percatarse que el joven desconocido porta un arma, el veterano se lanza en un intento desesperado por detenerlo.
Al final, Murtaugh termina en el piso, mientras el Capitán de policía le presenta a su nuevo compañero…
Se destaca además, la banda sonora, bonita como es, compuesta básicamente por saxos y guitarrita eléctrica.
¿Quién es el responsable?
Nada más y nada menos, que Michael Kamen en la orquestación, Eric Clapton en la guitarra, y David Sandborn en el saxo, genios.
“I was driving before you were an itch in your daddy's pants!”
Lethal Weapon supone un punto de partida importante, de las películas del anti héroe policial desde un punto subjetivo.
Sin Lethal Weapon no se entendería la saga de “Die Hard”, y “Demolition Man”, por poner ejemplos; películas en las que los salvadores son anti héroes, con mala fama entre el público, y que siempre, ganen o pierdan, terminan hechos un asco.
Por no hablar de sus toscos modales, sus chistes malos, y sus problemas con el alcohol, el tabaco, y la relaciones sociales…
Poco más que añadir, éste tipo de cine actualmente está muerto, y es una lástima.
Por suerte existe la TV, y los DVD clubes para recordarnos, y enseñarle a la nuevas generaciones, que por los ‘80s, el “cine palomitas” era sincero, no trataba al espectador como estúpido, y ofrecía diversión, a la par de calidad.
Lethal Weapon es una película de esas, en las que los protagonistas, con decir “soy policía”, tenían acceso a cualquier sitio, sin necesidad de mostrar la placa; es una de esas películas, en las que lo rudo de cada personaje, se medía por el ingenio de su frase, y es una de esas películas, que te hacen darte cuenta de que, si te despierta una agradable sensación de melancolía, es que ya estás viejo.

“I'm too old for this shit”



Comentarios

Entradas populares