The Punisher

Terminando de ver “The Punisher” (2004) de Jonathan Hensleigh con Thomas Jane, John Travolta, Rebecca Romijn, Laura Elena Harring, Samantha Mathis, Roy Scheider, Will Patton, Ben Foster, John Pinette, Mark Collie, Kevin Nash, entre otros.      

Comic basado en el personaje de MARVEL del mismo nombre, y “reboot” de la película de 1989 protagonizada por Dolph Lundgren, sobre un agente secreto del FBI con un historial intachable, experto en combate cuerpo a cuerpo, guerra de guerrillas y puntería; que decide un día abandonar una profesión tan peligrosa para poder tener una vida familiar normal; pero precisamente entonces su vida se hace añicos al cumplirse el peor de sus temores. 

Buscando castigar a los culpables, al final encuentra lo que menos esperaba:  

La redención.   

Esta es la 1° adaptación de un cómic en obtener una calificación “R” desde “Blade II” (2002) y eso debido a la naturaleza brutal de su contenido y la voluntad de matar del personaje que lo convirtieron en una anomalía en el cómic convencional; y por ello, el personaje ha sido descrito como obsesionado con la venganza; uno que ve el mundo en términos muy en blanco y negro, que resuelve sus problemas con absoluta finalidad y que su respuesta a cualquier problema es, en caso de duda, devolver el golpe. 

En el fondo es un vigilante, de descendencia italiana, que emplea el asesinato, el secuestro, la extorsión, la coerción, las amenazas de violencia y la tortura en su campaña contra el crimen; siempre impulsado por la muerte de su familia asesinada por la mafia; por lo que libra una guerra de 1 solo hombre contra el crimen, mientras emplea el uso de varias armas de fuego. 

También, “The Punisher” marcó el primer lanzamiento independiente importante de MARVEL como propietario de acciones, mediante el cual aporta personajes y apoyo creativo a filmes de bajo presupuesto a cambio de una participación financiera en el costo negativo...    

Como fuera el caso, la película marcó el debut del director que tuvo que hacerse preguntas intelectuales como: 

“¿Hasta qué punto los crímenes contra una persona se vuelven tan inconcebibles, tan atroces, que incluso una persona que no cree en el vigilantismo puede recurrir a ello de una manera más justa?” 

Esa fue la ecuación por la que le dijo a MARVEL que no solo quería hacer una historia de venganza con eventos subyacentes que dan lugar al vigilantismo, apartándose así del cómic; de hecho la historia y la trama se basaron principalmente en 2 historias de Punisher, “Welcome Back, Frank” y “The Punisher: Year One”; y para inspirarse se observaron películas de acción de las décadas de 1960 y 1970, como la serie “Dirty Harry”, “The Getaway”, “The Good, the Bad and the Ugly”, “The Godfather” y “Bonnie and Clyde”, al tiempo que rinde homenaje a “Mad Max” y al “Otelo” de Shakespeare del que bebe demasiado en cuanto a personajes. 

Lo más destacado de la propuesta es que aquí no hay CGI llamativos como los esperados en cualquier comic; sino que se basa más en las técnicas tradicionales, ofreciendo resultados maravillosos. 

Y sí, la película es excesivamente violenta, pero logra hacer que el personaje de cómic encaje en el mundo real con situaciones realistas; y por ello es un tipo diferente de héroe; del tipo que desearía que nunca necesitáramos, pero también uno que quizás deseamos. 

Del reparto, Thomas Jane como Frank Castle es soberbio, tan bello como letal. 

Según cuentan, Jane rechazó hacer el filme 2 veces, ya que no se veía a sí mismo como un actor de superhéroe; pero al cambiar la opinión, se entrenó durante casi 7 meses con los SEAL de La Marina de los Estados Unidos y ganó más de 20 libras de músculo, demostrando por qué se le llama “El Castigador” 

Mientras John Travolta como Howard Saint, es un pelele, implacable pero pelele al fin y al cabo, con un pésimo andar y un terrible corte de pelo. 

¿Por qué todos los trajes le quedaron grandes? 

Tal vez nos dice algo de su personalidad... y creo que Will Patton se robó el show con su interpretación de su personaje Quentin Glass, porque tenía un carisma que era más perturbador que el villano principal, y curiosamente es un villano gay. 

Su defecto, fatal, proviene en parte de lo que la convirtió en una buena película: 

Su escasez de efectos especiales, su minimalismo general y su falta de fórmula de superhéroe.  

Más bien, la propuesta es un kit de modelos ensamblado a partir de películas de acción de venganza de la vieja escuela, sórdidas; y también por su extensión, 2 horas y 20 minutos, es demasiado, sin olvidar algunos elementos de comedia en algunos personajes y el diálogo del tipo “Pinky y Cerebro”  

Como dato, la calavera que lleva Punisher es el símbolo de su fuerza y muerte hacia los malvados, curiosamente, sin embargo, poco se ha explicado su razón, aunque aquí se deba como el regalo que le hizo su hijo antes de la masacre en la cual su familia muere, diciendo que “la calavera atrae malos espíritus y daba mucho miedo” 

Total, todos los héroes y/o antihéroes tienen algunos eventos traumáticos que los convirtieron en quienes son; y en esta película se piensa profundamente en esos conflictos y decisiones: 

“Mis acciones no son la venganza... es el castigo” 

RECOMENDADA. 




Comentarios

Entradas populares