Finding Neverland

“Unlock your imagination”

Sir James Matthew Barrie, comúnmente conocido como J. M. Barrie (1860 - 1937), fue un novelista y dramaturgo escocés y es especialmente famoso por haber creado el personaje de Peter Pan, basado en sus amigos, los niños Llewelyn Davies.
La familia Llewelyn Davies estaba formada por los padres Arthur (1863–1907) y Sylvia (1866–1910), hija de George du Maurier, y sus cinco hijos:
George Llewelyn Davies (1893–1915), John Llewelyn Davies o Jack (1894-1959), Peter Llewelyn Davies (1897–1960), Michael Llewelyn Davies (1900–1921) y Nicholas Llewelyn Davies o Nico (1903–1980)
Barrie entró en contacto con la familia en 1897 o 1898 tras conocer a George y Jack con su niñera Mary Hodgson en los Jardines de Kensington de Londres, donde solía ir mientras paseaba a su perro Porthos, pues vivía cerca.
No conoció a Sylvia hasta más tarde, en un encuentro casual durante una cena.
Barrie se convirtió en un segundo padre para los chicos y, cuando éstos quedaron huérfanos, en su guardián.
Algunas fuentes afirman que el testamento de su madre estipulaba que la hermana de la niñera debía tomar la custodia y que Barrie lo falsificó o malinterpretó involuntariamente, la hermana de la niñera se llamaba Jenny, mientras Barrie era llamado Jimmy por la familia Davies.
Sin embargo, estaba claro que era el único con tiempo y recursos suficientes para mantenerlos y Sylvia no quería que los chicos fueran repartidos entre los parientes.
Aunque algunos pueden encontrar sospechosa esta amistad con los niños, no parece haber evidencia alguna de que ocurriese algo inapropiado y el menor de ellos, Nico, negó rotundamente que Barrie se hubiese comportado deshonestamente alguna vez.
Barrie estaba casado con la actriz Mary Ansell, pero el matrimonio carecía de sexo e hijos, terminando en divorcio.
Barrie sufrió grandemente la dolorosa muerte de dos de los niños con los que tenía una relación más estrecha.
George murió en servicio (1915) durante la Primera Guerra Mundial.
Michael, con quien Barrie mantenía una correspondencia diaria, se ahogó en (1921) en un posible pacto suicida un mes antes de su vigesimoprimer cumpleaños, cuando nadaba en unas conocidas aguas peligrosas de Oxford con su amigo y posible amante Rupert Errol Victor Buxton.
Algunos años después de la muerte de Barrie, Peter Davies, ya trabajando como editor, escribió su libro “Morgue”, incluyendo mucha información familiar y comentarios sobre Barrie.
A la edad de 63 años Peter se suicidó saltando ante un tren del Metro de Londres.
No obstante, la figura de Peter Pan está inspirada en esos hermanos Llewelyn Davies.
La familia Llewelyn Davies era amiga de James Barrie, quien desarrolló la idea para Peter Pan y Nunca Jamás a partir de su estancia y amistad con ellos.
A menudo representaba con ellos pequeñas obras de teatro y participaba activamente en sus juegos infantiles.
Barrie tuvo la idea de relatar las aventuras derivadas de estos juegos en un libro, Peter Pan y Wendy (1911), y en una obra de teatro, Peter Pan (1904), que luego desarrolló más ampliamente en una serie de relatos y novelas.
Peter Pan tomó el nombre de Peter Llewelyn Davies, por lo que se consideró que estaba basado en él.
No obstante, el conjunto de personajes de las novelas, incluyendo a los Niños Perdidos y al propio Peter Pan, se inspira en el conjunto de los hermanos Llewelyn Davies, compartiendo rasgos de todos ellos.
De acuerdo con el relato de Barrie, Peter Pan es representado como un niño pequeño que rehúsa crecer, de personalidad inmadura, rebelde, agresiva, con grandes complejos y traumas causados por las aspiraciones de su madre para su futuro como adulto, y por el hecho que luego de su fuga, su madre lo olvidara y lograra continuar con su vida como si nada.
Peter Pan convive con otros niños de su misma edad, que son llamados Niños Perdidos, en el país de Nunca Jamás, una isla poblada tanto por piratas como por indios, hadas y sirenas, y en donde Peter Pan vive numerosas aventuras fantásticas durante toda la eternidad.
La familia Darling por su parte, es una familia normal, la cual está constituida por:
La señora Darling, el señor Darling, Wendy Darling, John Darling, Michael Darling, Nana (la niñera de los niños, la cual es un perro), y la sirvienta de los Darling.
Wendy, que es la hija mayor, siempre les cuenta historias a sus hermanos, en las cuales hay piratas, sirenas, hadas, indios, y que tienen como personaje principal a un niño muy peculiar llamado Peter Pan, quien, sin que ellos sepan, escucha sus historias junto con su hada, Campanilla.
Una noche Peter Pierde su sombra en la casa de los Darling, ya que Nana se la quitó en una riña.
Wendy encuentra su sombra, la guarda y la noche siguiente, Peter Pan se presenta en la casa Darling para buscarla y Wendy le cose la sombra a los pies para que ésta esté pegada a él de nuevo.
Luego de esto Peter decide que Wendy será su madre y la de los niños perdidos.
Le pide que lo acompañe a El País de Nunca Jamás en donde ella nunca crecerá y contara cuentos a él y a los niños perdidos.
Ella accede a acompañarlo, pero sólo si sus hermanos van también, y a Peter no le queda más remedio que aceptar.
Juntos van hacia El País de Nunca Jamás, siempre acompañados de Campanita, quien está muy celosa de Wendy.
A lo largo de la historia se presentan diversas y numerosas anécdotas fabulosas, entre ellas cuando el hada Campanilla casi muere al ingerir un veneno, y una confrontación con el enemigo directo de Peter, el pirata Capitán Garfio.
Al final, Wendy decide que su verdadero espacio para poder vivir se encuentra en su hogar, al lado de sus padres, y por ello lleva a sus hermanos de regreso a Londres, mientras que Peter Pan se queda en Nunca Jamás, prometiendo a su compañera de juegos volver repetidamente a visitarla.
Nunca Jamás es un país imaginario donde los niños no crecen y sólo existen la diversión y la felicidad.
Este lugar es habitado por los niños perdidos, liderados por el héroe infantil, Peter Pan.
De acuerdo con la leyenda, si alguien desea llegar a este lugar deberá girar en la segunda estrella a la derecha, volando hasta el amanecer.
Peter Pan fue representado por primera vez el 27 de diciembre de 1904.
Esta obra presentó al público el nombre Wendy, que fue inspirado por una niña, que murió a los cinco años y cinco meses de edad el 11 de febrero de 1894, Margaret Henley, quien llamaba a Barrie “Friendy”, pero no podía pronunciar bien las erres de manera que le salía algo así como “Fwendy”
Se ha interpretado numerosas veces desde entonces, y se desarrolló por Barrie en forma de novela en el año 1911: Peter And Wendy, y ha sido adaptada por otros en películas de dibujos, musicales y otros medios.
Las escenas de Bloomsbury muestran las restricciones sociales de la realidad doméstica de clase media de finales de la época victoriana, en contraste con Nunca Jamás, un mundo donde la moralidad es ambivalente.
La temática más ampliamente tratada en la historia parece ser el "crecimiento", con el personaje de Peter que quiere permanecer como un niño para siempre para evitar las responsabilidades de la madurez.
El Síndrome de Peter Pan se ha convertido en un término psiquiátrico utilizado para describir a un adulto temeroso de sus obligaciones y compromisos, que se niega a actuar de acuerdo con su edad.
La descripción que hizo George Bernard Shaw de Peter Pan como “ostensiblemente un entretenimiento vacacional para niños pero en realidad una obra para personas adultas”, sugiere profundas alegorías sociales en Peter Pan.
En 1929 se especificó que los derechos de autor de la obra debían dedicarse al principal hospital infantil de la nación, el Great Ormond Street Hospital en Londres.
El estado actual de estos derechos de autor es bastante complejo.
¿Quién no ha soñado con ser niño otra vez?
¿Quién no ha creído en las hadas alguna vez?
¿Quién no ha vivido grandes aventuras en su imaginación y ha soñado que podrían ser reales?
“You can visit Neverland any time you like”
Finding Neverland es una película de 2004 dirigida por Marc Forster.
Protagonizada por Johnny Depp, Kate Winslet, Dustin Hoffman, Julie Christie, Radha Mitchell, Nick Roud, Joe Prospero, Freddie Highmore, entre otros.
El guión de David Magee está basado en la obra “The Man Who Was Peter Pan” de Allan Knee.
Finding Neverland obtuvo un Oscar a la Mejor Banda Sonora para Jan A.P. Kaczmarek y 6 nominaciones, incluyendo mejor película, actor (Depp), guión adaptado, dirección artística, vestuario y edición.
Finding Neverland nos demuestra todo lo qué podemos hacer usando sólo nuestra imaginación.
Lo que el talentoso director Marc Forster propuso, no fue solamente mostrar la personalidad del escritor y cómo fue creando la obra, sino que nos hace introducir a su mundo, ya sea cotidiano o fantástico, nos lleva de vuelta a la infancia y nos hace partícipe de una tierna y conmovedora historia que, con austeridad y emoción, llega directo al corazón.
Los decorados son espectaculares, y no se recargan con grandes efectos especiales, lo que hace que la ambientación de Finding Neverland resulte muy acertada para el momento que se está narrando.
Hay numerosos planos que resultan muy originales, como uno en que se ve un filo de luz debajo de una puerta y la cámara atraviesa este, y pasa al otro lado de la habitación, o mundos otros que sin duda nos recordaran esa estética de cuento que conserva Finding Neverland.
El realizador, revisó cuidadosamente los datos biográficos y cruzó información con varios historiadores y descendientes para descartar los rumores de pedofilia, que como a Lewis Caroll, rodearon al autor por habladurías de su época que asociaron su desdicha matrimonial, las fuentes afirman que la relación con su esposa Mary Ansell nunca se consumó, y su apego a los niños Llewelyn Davies, de quienes se hizo cargo cuando éstos quedaron huérfanos.
Así las cosas, Finding Neverland cuenta la experiencia de J. M. Barrie escribiendo el clásico infantil Peter Pan.
Sir James Matthew Barrie (Depp) es un escritor de obras de teatro.
Cuando sus obras ya no reciben buenas críticas decide escribir una nueva historia.
Mientras está en el parque conoce a Sylvia Llewelyn Davies (Winslet) y a sus hijos, Peter, Jack, George y Michael.
Peter (Highmore) es el único de los tres al que parece no agradar James.
Barrie crea una gran amistad con la familia, pero no es bien vista por su esposa Mary (Mitchell) ni por la madre de Sylvia (Christie)
El escritor y la familia pasan un magnífico verano juntos en el cual los chicos y él mismo aprenden muchas cosas.
Especialmente Peter, con quien J.M. Barrie crea un gran lazo de amistad, inseparable.
Una vez, en el campo, de paseo, Sylvia comienza a toser descontroladamente y se descubre que posee un problema pulmonar, pero decide no someterse a medicaciones ni tratamientos, pero eso podría empeorar.
La esposa de James se cansa de tener que compartir su marido con otra familia y decide dejarlo.
Sylvia empeora rápidamente, llegando a un punto en el cual ya no hay muchas esperanzas.
Por otra parte, Barrie escribe una extraordinaria obra inspirada en sus experiencias junto a la familia de Sylvia, siendo Peter el protagonista de la historia.
La obra es todo un éxito, cautivando al público con la fantasía y originales personajes.
Sin embargo, la salud de Sylvia no muestra ningún cambio.
La noche del estreno el señor Barrie va a buscarla, a pedirle que deje de fingir que no pasa nada.
Pero ella le da a entender que su hora está llegando y es irremediable.
Así es cómo un día George le pide a su madre que baje al living y allí se encuentra con la mismísima obra, en la casa.
Al final, un telón se desprende de la pared de la casa y detrás de él se encuentra Nunca Jamás.
Sylvia entra allí y ahí es donde muere, dibujando esa muerte tras una estadía eterna en Nunca Jamás.
James y la señora Llewelyn Davis comparten la tutela de los niños de Sylvia.
Claro está, hay diferencias entre historia real y la película, y esas son:
Había cinco niños en vez de cuatro.
El esposo de Sylvia aún estaba vivo cuando Barrie conoce a la familia.
Sylvia muere seis años después de que la obra es estrenada.
Es decir, los hechos principales no están cambiados nada más que de tiempo, y el resto de cambios son cosas que ya seguramente cualquier persona pueda admitir porque es una película, no un documental, y es lógico que haya cosas que añadir para poder hacerla.
Finding Neverland es una historia encantadora y conmovedora que nos hace descubrir el niño que hay nuestro interior despertando la imaginación que rejuvenece el espíritu humano.
La estética de Finding Neverland es bastante llamativa en cuanto a los escenarios y decoraciones de los lugares, que genera una festividad emocional para nuestros ojos.
Finding Neverland es un buen filme de época, con un interesante vestuario que aporta lo suyo para los climas oníricos respectivos.
Muy bien acompañada por una música preciosa y distinguida, llena de hermosas melodías que nos mueven los sentimientos más profundos.
Sobresaliente desde este aspecto, Finding Neverland está muy bien lograda estéticamente con una linda fotografía.
Finding Neverland, poéticamente, nos transporta a un mundo lleno de fantasías que vienen a querer romper con una triste realidad que acontece en la familia Llewelyn Davies.
Finding Neverland es imaginación en estado puro, de ella se nutre la narración de la historia que da vida a un personaje de la literatura infantil.
Poco a poco se nos va presentando al creador de Peter Pan, J.M. Barrie, quien consume la mayor parte de su tiempo absorto en cómo tratar de mostrar al público el fruto de su envidiable imaginación.
Barrie está interpretado por un polifacético y ENORME actor Johnny Depp, quien da sobradas muestras de su virtuosismo que nuevamente cumple en el papel de turno que le toque asumir.
Aquí encarna a un personaje excéntrico, con un poder imaginativo inconmensurable que asume y se hace cargo de una triste realidad que le toca vivir a una familia.
La poderosa actuación de Johnny Depp realizaría aquí la mejor interpretación de su carrera, superando otros papeles míticos y encumbrados.
También me gustaría destacar la actuación del niño (Peter), que con lo pequeño que es ya muestra un potencial tremendo.
De entre los niños, todos muy entrañables, el más atrayente por su personalidad es el pequeño Peter, quien más adelante sería motivo para una magistral obra teatral.
El concepto fundamental de Finding Neverland es dejarse llevar por la aventura que nos produce dejar volar nuestros pensamientos más inocentes y dirigirnos hacia donde no hay problemas, donde el tiempo no corre agitadamente, donde somos quienes deseamos ser, en definitivas:
Nunca Jamás.
“That... is Neverland”
La finalidad de Barrie es lograr que el público se deje llevar por la aventura, que dejemos nuestro rol de adultos y por una vez nos dejemos llevar hasta lo que se nos ofrece, dejando volar nuestros pensamientos más inocentes y dirigirnos hacia donde no hay problemas, hacia donde la felicidad y el disfrute no están ligados a un intervalo de tiempo impuesto, a un lugar donde somos quienes deseemos ser, a Nunca Jamás.
Barrie poco a poco se va metiendo y formando parte de la familia llamando especialmente la atención de Peter, un niño que quiere crear historias y por el que se inspira Barrie.
Un niño distinto a sus hermanos y que Barrie le hará soñar y le inculcará que utilizando la imaginación podrá llegar hasta donde uno quiera.
Barrie hace partícipe a la familia de su peculiar estilo para jugar, él como con la imaginación se pueden visitar múltiples mundos y que no es solo lo que vemos por nuestros ojos lo que marca el límite.
Cree que el paso de niño a adulto viene impuesto por una acción determinada y sus ideales repercutirán en los niños que a su vez por sus acciones le servirán de inspiración para su obra.
También podemos ver a un hombre que no expresa con su voz lo que siente y sufre como persona, anotando sus sentimientos en papel, en su diario, y de ahí sus problemas familiares y falta de comunicación con su esposa.
Es interesante la idea de Barrie de reservar veinticinco asientos para niños huérfanos y repartirlos por diferentes asientos del teatro para impregnar al público adulto de la inocencia infantil es sublime, así como la escena cuando están Peter y Barrie frente a frente y parte del público asistente comienza a llamar "Peter Pan" a Peter y el niño dice: "...pero yo no soy Peter Pan.
¡Es él!... (Señalando a Barrie)"
La escena en la que se representa la obra de "Peter Pan" en casa de los chicos es uno de los mejores regalos para el lacrimal y el alma que he visto en una pantalla de cine, lo que he podido llorar de felicidad viendo tanta magia, ya era hora.
Solo me queda una duda:
¿Si Johnny Depp sufrirá el síndrome de Peter Pan?... como lo sufrió el mismo Barrie, y la estrella del pop, Michael Jackson, en el mundo de Neverland.
“Young boys should never be sent to bed... they always wake up a day older”
La crítica que plantea Finding Neverland, en la estela del cuento, recuerda que cuando se abandona la inocencia infantil y se descubren las ambigüedades de la imaginación, se aterriza en una reducción de la realidad a lo puramente material.
Sin embargo, Finding Neverland propone que hay que apostar por el poder de la imaginación, así es necesario preservar al niño en el adulto para poder creer en las posibilidades escondidas de los mundo interiores y espirituales.
Ciertamente que el cuento de Peter Pan ofrece la posibilidad de realizar lecturas psicológicas sobre la sublimación de las frustraciones o la dificultad de asumir la realidad adulta:
El niño que no quiere crecer o el vuelo hacia la fantasía.
Finding Neverland tramite valores morales siendo rodada como producto destinado a las familias.
Finding Neverland trata de abordar la cuestión del sufrimiento y la muerte vista desde los ojos de los niños y teniendo especialmente presente el mundo de las emociones.
Desde aquí suscita el valor de la fantasía como capacidad para trascender la vida y afrontar el dolor.
Desde el punto de vista escatológico interesa especialmente la representación del paraíso como el País de Nunca Jamás.
Este paraíso procede de la imaginación creadora que más allá del sufrimiento y tomando como base la propia vida vivida y disfrutada, la planifica abriéndola a todas las posibilidades.
En este sentido la metáfora de los cuentos de hadas sirven para abrir las realidades objetivas a nuevas dimensiones insospechadas.
Así se establece una relación nueva entre la realidad con sus límites y la proyección subjetiva con su capacidad de idealización.
Así, Finding Neverland realiza en una de las secuencia finales, una representación del País de Nunca Jamás.
La obra de ficción nació para mostrar a la persona querida el País de la felicidad.
Para ello se tomó como punto de partida el disfrute de la propia vida, la materia de la creación nace de las propias posibilidades de la realidad desde las personas y sus relaciones de amor:
La vida de aquella extraña familia formada por la madre y sus muchachos que han perdido al padre y a los cuales el autor falto de inspiración, se ha acercado.
El creador dramático, con su fantasía, abre nuevas posibilidades, así los niños pueden volar, las hadas existen y dan luz, los perros hablan o los piratas serán vencidos.
En el mundo del teatro, la ficción es montaje escénico:
El perro es una persona, las hadas son luces artificiales y vuelan gracias a poleas. Sin embargo cuando se entra en ese mundo de ficción artificial detrás puede aparecer un mundo de fantasía.
Pero, para eso hace falta creer en él.
La exigencia clave es:
Si creéis en la hadas tenéis que aplaudir.
Esta será la señal de salida para ver por fin el País de Nunca Jamás:
País de colores, de paz interior y exterior, de reconciliación de relaciones.

“Just believe”


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