Léon: The Professional
“He moves without sound.
Kills without emotion.
Disappears without trace”
Un sicario o asesino a sueldo es una persona que mata por encargo a cambio de un precio.
“Sicarii” es una palabra plural latino de “sicarium”, que usa de daga, asesino por contrato o encargo, este término se aplicó, por analogía empleada por los invasores y ocupantes romanos, a los defensores judíos, o a los insurrectos, que procuraron expulsar a los Romanos y a sus partidarios de Judea.
“A perfect assassin.
An innocent girl.
They have nothing left to lose except each other.
He moves without sound.
Kills without emotion.
Disappears without trace.
Only a 12 year old girl... knows his weakness”
Léon: The Professional es una película francesa de drama estrenada en 1994.
Fue escrita y dirigida por Luc Besson e interpretada por Jean Reno, Natalie Portman, Gary Oldman, Danny Aiello, Samy Nacery, Peter Apple, Michael Badalucco, Ellen Greene, Elizabeth Regen, Maïwenn Le Besco, entre otros.
Léon: The Professional presenta a Natalie Portman en su primer papel cinematográfico y vale decir que a sus padres no les hizo mucha gracia el argumento por lo que la vigilaban constantemente durante el rodaje; ya que en el guion de la versión original para Léon: The Professional, la relación de Léon y Mathilda es más estrecha, hasta el punto en el que ambos si sucumben en una relación amorosa y según los detalles dan a entender que, inclusive sexual, destacando que la edad de Mathilda era de 13 o 14 años, además de que eliminaron varias muestras de afecto como besos y frases.
Dentro las pocas películas que retraten la vida de un asesino a sueldo, Léon: The Professional, sobreexcede los limites dentro de la barrera del género.
Los niveles de acción son muy altos, pero la trama combina el drama y dicha acción de una manera magistral y estilista, combinados con un poco de humor negro.
Luc Besson generó grandes expectativas dentro del cine de acción que lo consolidaron como uno de los mejores dentro del campo.
El desarrollo de la historia lleva un ritmo adecuado, manteniendo la atención del público e introduciéndolos cada vez más a los sucesos a medida que toman lugar.
Cada personaje tiene su personalidad bien establecida, y las actuaciones lo reflejan de una manera espectacular; la selección de actores para cada papel fue estupenda.
Sin ningún problema, Léon y Mathilda logran conectar con el espectador y crear empatía.
Desde el punto de vista de la fotografía, Léon: The Professional muestra técnicas cinematográficas no muy comunes, lo cual la hace interesante e innovadora.
Luc Besson nos sumerge en un mundo dominado por la corrupción policial a límites insospechados.
La trama gira en torno a un asesino a sueldo, Léon Montana (Jean Reno), se ve envuelto en un problema al salvarle la vida a una niña llamada Mathilda (Natalie Portman), que se encontraba comprando en el momento en que unos agentes corruptos de la división anti-narcóticos del Departamento de Policía de la ciudad de Nueva York (NYPD) masacraran en su propia casa a todos los miembros de su familia por problemas de droga.
Estos policías tenían como cabecilla a Norman Stansfield (Gary Oldman)
Mathilda le pide a Léon que le enseñara a hacer el trabajo que éste desempeñaba; después de ciertas dudas, Léon acepta.
Léon: The Professional se convierte en un verdadero drama cuando la niña decide vengarse de los culpables de la muerte del único miembro de su familia que apreciaba de verdad:
Su hermano pequeño.
Ahí es cuando Léon Montana y Mathilda se introducen en la más excitante aventura de sus vidas.
Es indudable que Léon: The Professional no tiene mucha profundidad en las situaciones que plantea, no obstante alcanza para que como espectadores nos sintamos "tocados" afectivamente por la relación que se entabla entre la inocente niña y el despiadado asesino.
Besson comienza a describir con frescura y sencillez los personajes:
Léon, el mercenario profesional, quien entra en conflicto cuando debe elegir entre desatender un pedido de auxilio de la desprotegida niña o hacerse cargo de la situación.
Allí está el punto de inflexión, sobre él se construyen las variantes que siguen.
Mathilda, quien no está conforme con su familia, queda huérfana y a partir de allí entra en contacto más cercano con Léon.
En la relación entre ambos se abordan temas tales como la amistad, el dar la vida por el otro a cambio de nada, hasta incluso un amor que no podrá tener lugar dadas las diferencias de edad.
Cabe resaltar que si bien es cierto que Mathilda tiene sólo doce años, los fuertes acontecimientos que le ha tocado vivir han hecho de ella una “niña-vieja” o una mujer adulta atrapada en el cuerpo de una niña; es demasiado astuta, apasionada, decidida, y autosuficiente para su edad.
Así las cosas, cada uno va aprendiendo lo que el otro sabe, por lo tanto esta relación simbiótica crece al punto más extremo:
La incondicional apertura hacia el otro que necesita.
Sin embargo, Léon: The Professional tiene un no sé qué de perversión sexual muy infrecuente en el cine políticamente correcto de aquellos años, que en lo sexual dura hasta hoy.
La relación entre el asesino y la niña es intencionadamente ambigua, dándose a veces de manera paterno filial, y a veces como una relación romántica con una chica que recién es preadolescente y que descubre su sexualidad, o se convierte en mujer, con un hombre mayor.
Sin duda, como dije anteriormente, que las situaciones planteadas no poseen gran profundidad, no obstante esta pareja de protagónicos logra una química especial para hacer de Léon: The Professional, una verdadera combinación de acción y reflexión a la vez.
No podemos decir que le falten momentos emotivos, de repulsión por el personaje de Gary Oldman y sus secuaces, de ambigua atmósfera que puede oscilar entre la inocencia y frescura hasta los momentos más violentos y malvados que podamos imaginarnos.
Las actuaciones increíbles desde mi punto de vista por parte de Reno cuando interpreta con esa maestría el papel de matón a sueldo pero además esconde en su personaje cierta ternura y deseos por vivir y amar inconcebibles muchas veces en este tipo de personas.
Destaco en mayúsculas en papel de Gary Oldman, me pareció excelente y comedido en su puesta en escena con ese punto de “locura-compasión” que transmite, acerca al espectador y hace suyos los gestos que el actor muestra.
La música merece un punto y aparte porque es la idónea, con Björk y Sting al final.
Léon: The Professional posee secuencias magistrales:
Jean Reno enseñándole a la tierna Natalie Portman a usar un rifle.
La lección en terreno, con un corredor tomado por sorpresa.
Los avances de la chica para seducir a Reno.
Y por supuesto, la espectacular batalla final entre el asesino y un ejército de policías.
Destaco:
La escena en que el portero recibe a Reno, a él no lo vemos en el plano, pero lo que abarca su sombra...nos lo dice todo.
La escena en que Natalie viene de comprar y no se detiene cuando descubre a su familia asesinada, la tensión hasta el momento que Reno abre la puerta, magnífico.
Cuando Reno decide hacerla su compinche, se ve solo en el plano Reno y a medida que va avanzando este... aparece la niña, muy bueno.
Las frases inteligentes de Natalie:
“Estoy enamorada de ti Léon”
“...no es mi padre... es mi amante”
“Voy al 6º J” para poder engañar al policía y entrar en su casa.
La escena del rifle, anteriormente citada es genial, lenta, práctica, intrigante y sorprendente.
En ningún momento pensé que fuese a disparar y nunca imaginé ese final de lo mejor.
Las escenas del juego de disfraces, muy divertida por ambas partes.
Lo que sobra:
Las escenas en que Gary Oldman se toma las pastillas…
¡Qué patético!
Si hasta pensé que se transformaría en alguna criatura.
¿Es que la policía no hace pruebas psiquiátricas?
Cuando Reno va a buscar a la niña al edificio federal…
¿Y los policías?
El equipo de “élite” que asalta el apartamento de Léon es menos efectivo que cualquiera.
La forma de crear al personaje de Reno: solitario, voyeur, bebedor de leche, inculto de narices y encima tonto, no solo no guarda su propio dinero, sino que desconoce cuánto tiene.
En definitiva, y a pesar de los fallos, Léon: The Professional es una correcta película que nos regala momentos de auténtica adrenalina, sin perder de vista que en el filme hay un discurso de fondo que trata de mostrar el lado humano de un asesino y el costado malvado y vengativo de una inocente niña de 12 años.
Las complejidades de la vida misma
“You can't stop what you can't see”
Kills without emotion.
Disappears without trace”
Un sicario o asesino a sueldo es una persona que mata por encargo a cambio de un precio.
“Sicarii” es una palabra plural latino de “sicarium”, que usa de daga, asesino por contrato o encargo, este término se aplicó, por analogía empleada por los invasores y ocupantes romanos, a los defensores judíos, o a los insurrectos, que procuraron expulsar a los Romanos y a sus partidarios de Judea.
“A perfect assassin.
An innocent girl.
They have nothing left to lose except each other.
He moves without sound.
Kills without emotion.
Disappears without trace.
Only a 12 year old girl... knows his weakness”
Léon: The Professional es una película francesa de drama estrenada en 1994.
Fue escrita y dirigida por Luc Besson e interpretada por Jean Reno, Natalie Portman, Gary Oldman, Danny Aiello, Samy Nacery, Peter Apple, Michael Badalucco, Ellen Greene, Elizabeth Regen, Maïwenn Le Besco, entre otros.
Léon: The Professional presenta a Natalie Portman en su primer papel cinematográfico y vale decir que a sus padres no les hizo mucha gracia el argumento por lo que la vigilaban constantemente durante el rodaje; ya que en el guion de la versión original para Léon: The Professional, la relación de Léon y Mathilda es más estrecha, hasta el punto en el que ambos si sucumben en una relación amorosa y según los detalles dan a entender que, inclusive sexual, destacando que la edad de Mathilda era de 13 o 14 años, además de que eliminaron varias muestras de afecto como besos y frases.
Dentro las pocas películas que retraten la vida de un asesino a sueldo, Léon: The Professional, sobreexcede los limites dentro de la barrera del género.
Los niveles de acción son muy altos, pero la trama combina el drama y dicha acción de una manera magistral y estilista, combinados con un poco de humor negro.
Luc Besson generó grandes expectativas dentro del cine de acción que lo consolidaron como uno de los mejores dentro del campo.
El desarrollo de la historia lleva un ritmo adecuado, manteniendo la atención del público e introduciéndolos cada vez más a los sucesos a medida que toman lugar.
Cada personaje tiene su personalidad bien establecida, y las actuaciones lo reflejan de una manera espectacular; la selección de actores para cada papel fue estupenda.
Sin ningún problema, Léon y Mathilda logran conectar con el espectador y crear empatía.
Desde el punto de vista de la fotografía, Léon: The Professional muestra técnicas cinematográficas no muy comunes, lo cual la hace interesante e innovadora.
Luc Besson nos sumerge en un mundo dominado por la corrupción policial a límites insospechados.
La trama gira en torno a un asesino a sueldo, Léon Montana (Jean Reno), se ve envuelto en un problema al salvarle la vida a una niña llamada Mathilda (Natalie Portman), que se encontraba comprando en el momento en que unos agentes corruptos de la división anti-narcóticos del Departamento de Policía de la ciudad de Nueva York (NYPD) masacraran en su propia casa a todos los miembros de su familia por problemas de droga.
Estos policías tenían como cabecilla a Norman Stansfield (Gary Oldman)
Mathilda le pide a Léon que le enseñara a hacer el trabajo que éste desempeñaba; después de ciertas dudas, Léon acepta.
Léon: The Professional se convierte en un verdadero drama cuando la niña decide vengarse de los culpables de la muerte del único miembro de su familia que apreciaba de verdad:
Su hermano pequeño.
Ahí es cuando Léon Montana y Mathilda se introducen en la más excitante aventura de sus vidas.
Es indudable que Léon: The Professional no tiene mucha profundidad en las situaciones que plantea, no obstante alcanza para que como espectadores nos sintamos "tocados" afectivamente por la relación que se entabla entre la inocente niña y el despiadado asesino.
Besson comienza a describir con frescura y sencillez los personajes:
Léon, el mercenario profesional, quien entra en conflicto cuando debe elegir entre desatender un pedido de auxilio de la desprotegida niña o hacerse cargo de la situación.
Allí está el punto de inflexión, sobre él se construyen las variantes que siguen.
Mathilda, quien no está conforme con su familia, queda huérfana y a partir de allí entra en contacto más cercano con Léon.
En la relación entre ambos se abordan temas tales como la amistad, el dar la vida por el otro a cambio de nada, hasta incluso un amor que no podrá tener lugar dadas las diferencias de edad.
Cabe resaltar que si bien es cierto que Mathilda tiene sólo doce años, los fuertes acontecimientos que le ha tocado vivir han hecho de ella una “niña-vieja” o una mujer adulta atrapada en el cuerpo de una niña; es demasiado astuta, apasionada, decidida, y autosuficiente para su edad.
Así las cosas, cada uno va aprendiendo lo que el otro sabe, por lo tanto esta relación simbiótica crece al punto más extremo:
La incondicional apertura hacia el otro que necesita.
Sin embargo, Léon: The Professional tiene un no sé qué de perversión sexual muy infrecuente en el cine políticamente correcto de aquellos años, que en lo sexual dura hasta hoy.
La relación entre el asesino y la niña es intencionadamente ambigua, dándose a veces de manera paterno filial, y a veces como una relación romántica con una chica que recién es preadolescente y que descubre su sexualidad, o se convierte en mujer, con un hombre mayor.
Sin duda, como dije anteriormente, que las situaciones planteadas no poseen gran profundidad, no obstante esta pareja de protagónicos logra una química especial para hacer de Léon: The Professional, una verdadera combinación de acción y reflexión a la vez.
No podemos decir que le falten momentos emotivos, de repulsión por el personaje de Gary Oldman y sus secuaces, de ambigua atmósfera que puede oscilar entre la inocencia y frescura hasta los momentos más violentos y malvados que podamos imaginarnos.
Las actuaciones increíbles desde mi punto de vista por parte de Reno cuando interpreta con esa maestría el papel de matón a sueldo pero además esconde en su personaje cierta ternura y deseos por vivir y amar inconcebibles muchas veces en este tipo de personas.
Destaco en mayúsculas en papel de Gary Oldman, me pareció excelente y comedido en su puesta en escena con ese punto de “locura-compasión” que transmite, acerca al espectador y hace suyos los gestos que el actor muestra.
La música merece un punto y aparte porque es la idónea, con Björk y Sting al final.
Léon: The Professional posee secuencias magistrales:
Jean Reno enseñándole a la tierna Natalie Portman a usar un rifle.
La lección en terreno, con un corredor tomado por sorpresa.
Los avances de la chica para seducir a Reno.
Y por supuesto, la espectacular batalla final entre el asesino y un ejército de policías.
Destaco:
La escena en que el portero recibe a Reno, a él no lo vemos en el plano, pero lo que abarca su sombra...nos lo dice todo.
La escena en que Natalie viene de comprar y no se detiene cuando descubre a su familia asesinada, la tensión hasta el momento que Reno abre la puerta, magnífico.
Cuando Reno decide hacerla su compinche, se ve solo en el plano Reno y a medida que va avanzando este... aparece la niña, muy bueno.
Las frases inteligentes de Natalie:
“Estoy enamorada de ti Léon”
“...no es mi padre... es mi amante”
“Voy al 6º J” para poder engañar al policía y entrar en su casa.
La escena del rifle, anteriormente citada es genial, lenta, práctica, intrigante y sorprendente.
En ningún momento pensé que fuese a disparar y nunca imaginé ese final de lo mejor.
Las escenas del juego de disfraces, muy divertida por ambas partes.
Lo que sobra:
Las escenas en que Gary Oldman se toma las pastillas…
¡Qué patético!
Si hasta pensé que se transformaría en alguna criatura.
¿Es que la policía no hace pruebas psiquiátricas?
Cuando Reno va a buscar a la niña al edificio federal…
¿Y los policías?
El equipo de “élite” que asalta el apartamento de Léon es menos efectivo que cualquiera.
La forma de crear al personaje de Reno: solitario, voyeur, bebedor de leche, inculto de narices y encima tonto, no solo no guarda su propio dinero, sino que desconoce cuánto tiene.
En definitiva, y a pesar de los fallos, Léon: The Professional es una correcta película que nos regala momentos de auténtica adrenalina, sin perder de vista que en el filme hay un discurso de fondo que trata de mostrar el lado humano de un asesino y el costado malvado y vengativo de una inocente niña de 12 años.
Las complejidades de la vida misma
“You can't stop what you can't see”
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