Alpha Dog

“It's about taking care of your children.
You take care of yours, I take care of mine”

Jesse James Hollywood, fue un adolescente acaudalado, traficante de marihuana y fugitivo; a los 20 años, llegó a ser uno de los más jóvenes en aparecer en la lista de “Los Diez Más Buscados por El FBI”
Gracias al tráfico de drogas, y otras actividades delictivas, Hollywood fue capaz de comprar una propiedad de $200.000 en San Fernando Valley, al Sur de California, y numerosos coches exóticos.
Un sujeto llamado Benjamin Markowitz, trabajó para Hollywood como vendedor de drogas, y lo ayudó en diversos “trabajos”
A lo largo de esta relación, Benjamin contrajo una deuda de $1.200 con James; lo amenazó con revelar una estafa al seguro por parte Hollywood de $36,000, quien se benefició del cobro de seguro de robo de uno de sus coches deportivos, que fue desmontado y vendido por piezas realmente.
Los 2 hombres llevaban un tiempo intercambiando amenazas.
Entre otras, Jesse James fue un día al restaurante donde trabajaba la novia de Ben, amenazándola; a lo que Ben respondió conduciendo hasta casa de Jesse James una noche, y rompiéndole una ventana.
Lo que pasó a partir de ese momento, está largamente recogido y documentado entre artículos en los periódicos y revistas, informes policiales, testimonios, y 750 folios recogidos en la transcripción de los juicios.
El 6 de agosto de 2000, Hollywood y gente de su banda, planearon hacer frente a Benjamin, pero de camino a su casa, encontraron al hermanastro de Benjamin de 15 años de edad, Nicholas Samuel “Nick” Markowitz, y decidieron raptarlo.
Nicholas, no se dio cuenta del peligro real que corría, y pasó varios días conviviendo y de fiesta con sus raptores…
El mismo contó a otra chica, que estaba allí para ayudar a su hermano, y parece que hasta que no fue realmente tarde, el mismo ignoraba, hasta qué grado corría peligro.
“Seguramente estaba bastante tranquilo, porque conocía a varios de sus raptores, incluso la madre de Skidmore, uno de los involucrados, era conocida de su madre”, comento más adelante Jeff Markowitz, padre de Nick.
En la tarde del día 8 de agosto, tras 48 horas secuestrado, Nick estaba muy tranquilo.
Jesse James Hollywood, ya no andaba cerca de él, y las cosas se habían relajado considerablemente.
Nick actuaba con total libertad en las casas en las que estaba, iba a la nevera a por bebidas, veía la televisión, hablaba con las personas que pasaban por allí, fumaba sus porros… era, aparentemente, uno más.
En muchos momentos, podría haberse ido de allí sin más, pero él creía en su hermano, al que adoraba, y pensaba que en cualquier momento aparecería, y se iría con él.
Uno de sus captores, Jesse Rugge, le dijo una y otra vez, que él le llevaría a casa, y que no le iba a pasar nada…
Nick, cometió el error de creer en su palabra.
Quizás peco de ingenuo, al fin y al cabo era un adolescente; o quizás, en el fondo, estaba demasiado entusiasmado, y se sentía uno más de la cuadrilla, lo que le impidió calibrar la magnitud de la situación real.
Seguramente serian ambos aspectos, y una serie de circunstancias fatales, las que llevaron a un desenlace fatal, dentro de una historia algo surrealista, y bastante absurda.
Hollywood consultó al abogado de su familia, sobre la pena que podría caerle tras el rapto de Nicholas.
El abogado le contestó, que con toda seguridad le caería cadena perpetua si el niño era liberado.
Al ver esto, Hollywood decidió que no podía dejar ir a Nicholas…
Entra en escena Ryan Hoyt, un chico de 21 años, que tenía una deuda de $1000 con Jesse James Hollywood; y le llamó aquella noche, ofreciéndole saldar la deuda a cambio de matar a Nick; por lo que Ryan aceptó sin rechistar.
El 8 de agosto de 2000, en las montañas del norte de Goleta, California, Nicholas fue atado, amordazado, y asesinado con una ametralladora, por gente del grupo de Hollywood.
El cuerpo de Nicholas, fue descubierto por unos senderistas el 12 de agosto.
Hollywood evitó ser capturado, y escapó de EEUU, pero el resto de los implicados en el secuestro, fueron capturados.
Jesse James Hollywood, fue detenido el 8 de marzo de 2005, en el pequeño poblado de Saquarema, ubicado aproximadamente a 1 hora de distancia hacia el este de Río de Janeiro, Brasil.
La captura se dio gracias a información enviada por las autoridades de EEUU, que informaron de la intención de Hollywood, en encontrarse con una prima en un centro comercial al aire libre.
Durante su estadía en Brasil, Hollywood, que utilizó una identidad falsa bajo el nombre de Michael Costa Giroux, habría tenido por lo menos 3 direcciones.
Siendo una de ellas, en el barrio de Copacabana, Río de Janeiro; donde supuestamente conoció a Marcia Reis, una brasileña de 35 años, con la que pasó a residir, y que en el momento de su captura, se encontraba embarazada.
Las autoridades brasileñas alertaron a la justicia de EEUU, de que si Hollywood tenía un bebé en territorio brasileño, sería problemático llevar a cabo una deportación.
Los agentes de EEUU y Brasil, trabajaron juntos hasta llegar a la conclusión, de que Hollywood se vería con una prima a la que no veía desde hace 10 años en un centro comercial cerca de la playa.
Capturado Hollywood, fue entregado al FBI, quien lo custodiaría a lo largo del país hasta llegar a Los Angeles el 10 de marzo de 2005.
La policía sospecha, que Jack Hollywood, padre de Jesse, ayudó a su hijo a escapar del país.
Durante los 4 años y pico que estuvo fugado, fue la persona más joven en la lista de los más buscados por El FBI; y para La Fiscalía, Hollywood actuó como un entrenador que “daba las órdenes desde las bandas”, y dirigió la ejecución de Nick.
Otras 4 personas fueron ya juzgadas por aquel crimen, y una de ellas condenada a muerte…
El abogado defensor, aceptó en su argumentación inicial, la responsabilidad de su cliente en el secuestro de Markowitz, pero rechazó que hubiera participado en el crimen posterior, y que el perfil de Hollywood, coincidiera con el de una persona manipuladora que actúa a sangre fría.
“No es un ángel, pero no es un individuo poderoso que controla a su gente, y consigue que hagan su voluntad”, aseguró el abogado, James Blatt.
Más de 300 personas, acudieron al funeral de Nick.
Impresionados, enfurecidos y apenados por una muerte así, no entraban en la iglesia, siguiendo muchos de ellos, el acto desde fuera del Eden Memorial Park, en Mission Hills.
Su hermano Ben no acudió, según sus palabras, por respeto a su madrastra.
“You ever have that dream:
The one where you did something...
You don't know why, but you can never go back?”
Alpha Dog es un drama del año 2007, escrito y dirigido por Nick Cassavetes.
Protagonizado por Emile Hirsch, Justin Timberlake, Anton Yelchin, Ben Foster, Shawn Hatosy, Bruce Willis, Sharon Stone, Olivia Wilde, Amanda Seyfried, Harry Dean Stanton, Fernando Vargas, Amber Heard, Lukas Haas, Vincent Kartheiser, Alex Solowitz, Alec Vigil, Frank Cassavetes, Nicole Dubos, Regina Rice, Laura Nativo, David Thornton, Matthew Barry, entre otros.
Alpha Dog está basado en el secuestro y asesinato de Nicholas Markowitz, en California en el año 2000, y la implicación en el crimen del traficante de drogas Jesse James Hollywood.
Los hechos reales, no se siguen con total exactitud, así que están cambiados los nombres, lugares y pequeños detalles menores de la historia.
Esto se debe a las posibles consecuencias legales por parte de algunos protagonistas de la historia; pues durante el rodaje, la dirección del distrito de Santa Barbara, facilitaron información real del caso, revelando incluso información confidencial hasta la fecha, de todos los documentos que disponían, para dar mayor fidelidad a la cinta.
Por tanto, el retraso del estreno fue por culpa del juicio sobre James, ya que su abogado creía que podría influir sobre el veredicto.
Sobre la producción, todo empezó en el verano de 2000, antes del estreno de los filmes “The Notebook” (2004); y “John Q” (2002), que el realizador Nick Cassavetes, se sorprendió esbozando en un papel, una historia acerca de algunos de los tipos de adolescentes que poblaban el instituto de su hija Gina.
Sopesó lo que podría pasar, si un grupo de chicos llevaba demasiado lejos alguna malicia, y efectuaba una serie de decisiones y de actos equivocados que les entrampara en una situación de la que les fuera imposible zafarse.
Mientras investigaba la vida familiar de algunos de esos chicos del Valle de San Fernando, en California, Cassavetes reparó en que sus dinámicas domésticas, resultaban sorprendente y particularmente interesantes.
Aquellas historias, se convertirían rápidamente en un guión:
“Esperaba toparme con un puñado de muchachos ricos, consentidos y rebotados con toda autoridad, criados por padres con un gran sentido del aburrimiento, y lo cierto es que no fue eso lo que me encontré en absoluto.
Lo que acabé hallando, y de lo que honestamente me pareció que también yo mismo era culpable en mi propia vida, fue que estamos en un mundo muy complicado, donde ambos padres tienen puestos de trabajo, y se ven superados.
La consecuencia de ello, es que te ves pasando revista a tus propios hijos, comprobando si están bien, adónde van a ir, y si necesitan algún dinero… en lugar de buscar tiempo para pasarlo con ellos.
Ello fue lo que me impresionó más, y que se evidenciaba como el rasgo común entre casi toda esa gente.
La mayoría de ella, eran personas que no me parecían particularmente problemáticas.
Los conflictos surgían de permitir a todos esos chicos que se reunieran, y tomaran decisiones sin ningún tipo de tutela o intervención paterna, pudiendo generar la “tormenta perfecta” de circunstancias y coincidencias que diera paso a que ocurriera algo que jamás debería producirse”, concluyó.
Tras muchas discusiones con colegas, y una exhaustiva investigación acerca de los tipos que habitan este mundo, Cassavetes escribió el guión de Alpha Dog.
La producción, hizo uso de un vasto espectro de localizaciones en California del Sur, en El Valle de San Fernando y alrededores, y en el gran de Los Angeles.
También, viajaron al desierto, y a los puntos más transitados de Palm Springs; asimismo rodaron en el Vasquez Rocks Natural Area Park, cerca de Agua Dulce Spring, California.
Alpha Dog sigue a Johnny Truelove (Emile Hirsch), un conocido traficante de drogas, el “alpha dog” de su vecindario; y aunque sólo tiene 19 años, vive su propia versión del “Sueño Americano”:
Es joven, nada en dinero, posee varios coches deportivos, vive en una lujosa casa de uno de los vecindarios más exclusivos de Los Angeles, en la que organiza fiestas llenas de chicas, y rodeado de sus amigos; pero todo gracias a su próspero negocio como traficante de drogas.
Incluso su padre, Sonny Truelove (Bruce Willis), le provee de marihuana…
Estando de marcha se encuentra con Jake Mazursky (Ben Foster), uno de sus distribuidores.
Cuando Jake falla al cobrar una deuda por drogas para Johnny, éstos se pelean y, en venganza, Jake entra a robar en casa de Johnny.
Por lo que él y sus amigos:
Frankie “Nuts” Ballenbacher (Justin Timberlake), y Tiko “TKO” Martínez (Fernando Vargas), responden secuestrando al medio hermano de 15 años de Jake:
Zack Mazursky (Anton Yelchin), para así forzar a Jake, a pagar la deuda él mismo; pero mientras tanto, Zack empieza a disfrutar de su secuestro… y se lo toma como un pequeño descanso de su casa y su familia.
Le dan bebidas alcohólicas, drogas, y pierde la virginidad; además, confía en que su hermano pagará pronto su deuda, y así será liberado.
Lamentablemente, el final será muy distinto de lo esperado…
Alpha Dog muestra una mirada decidida, a cuanto puede acontecer cuando una serie de movimientos erróneos, tienen consecuencias incluso peores.
Es como un cuento aleccionador, acerca de la cultura contemporánea, pero sin sermonear; sin embargo, nos dice que la vida vale mucho, que las drogas son tu mayor asesino, y que el porcentaje de consumo de las mismas entre los más jóvenes, sigue aumentando de forma alarmante.
“Am I the only fucking person who thinks this is fucking wrong?”
Dirigida con un ritmo dinámico, y con un estilo fiel a los hechos reales, Alpha Dog es una obra sustanciosa, que va de menos a más, hasta alcanzar un final absorbente, que deja al público descolocado, cumpliendo notablemente como un film que deja buenas vibraciones tras su visionado, a toda clase de públicos.
El guión, escrito por el mismo director, es penetrante, y desde luego atractivo por exponer una dura e inesperada historia que, de forma implacable, atrapa de principio a fin al espectador, hasta alcanzar un final implacable, de esos que no se olvidan por ser tristemente realista y desolador en su contexto.
Esto se lleva a cabo, con una narrativa insidiosa e insinuante, que deja claro el trato conspirador de los personajes, exhibiendo también unos diálogos mordaces, que dejan claro los pocos escrúpulos del grupo de jóvenes delincuentes.
La fotografía es lumínica y evocadora, es una labor impactante que está bien cuidada en detalles, y que sitúa perfectamente al espectador, tanto en el lugar, como en la clase de personajes con los que trata.
La música es variada y rítmica en sus sonidos modernos, y alusivos al momento, estimulando al público, en una labor que en ocasiones puede ser algo ruidosa.
Los planos y movimientos de cámara, consuman un buen trabajo técnico, en el que destacan los generales, reconocimiento, seguimiento, y primeros planos que sacan lo mejor de la acción, y las interpretaciones.
Los personajes de Alpha Dog, se conocen desde hace mucho, han ido al mismo colegio, y viven en el mismo vecindario, desde la más tierna infancia.
En consecuencia, el reto para su creador, estribaba en lograr reproducir exactamente ese sentido de camaradería, surgido a través de años de estar juntos.
Alpha Dog, es de esas películas en las que uno se frustra, porque vemos claramente, tanto los momentos en los que los personajes cometen gravísimos errores, por los cuales pagan por ellos con sus vidas, como las breves ocasiones en la que pudieran fácilmente remediarlo, pero no lo hacen.
Es desesperante y deprimente ver, como un acto realizado por instinto, trae mortales consecuencias, pero más desesperante y más deprimente es aun el hecho de que tan solo minutos después de haber cometido ese error, los personajes se ponen a pensar en cómo solucionarlo, cuando es bastante obvio lo que deben hacer.
En vez de corregir su error, y con tal de mantener su prepotente imagen de líder, Johnny Truelove, narcotraficante que encabeza a un grupo de jóvenes en Los Angeles, comienza meterse más, y más en problemas, mostrándole a muchos lo que acaba de hacer, y muchos de estos fueron testigos en corte a la hora de enfrentar las consecuencias.
Todo terminó, con un adolescente muerto, y él mismo en la cárcel de por vida.
Las actuaciones, en general son aceptables y cumplidoras:
Bruce Willis realiza un papel secundario notable, que resalta un personaje chulesco.
Emily Hirsch está decente en su labor, y su contrapartida, Ben Foster, está brillante en un difícil personaje, siendo buenos los acompañamientos de Fernando Vargas, Justin Timberlake, Harry Dean Stanton, Frank Cassavetes, Sharon Stone, Olivia Wilde, y Amanda Seyfried, entre otros.
Sin embargo, es el personaje de Shawn Hatosy, Elvis Schmidt, Ryan Hoyt en la vida real, que se halla en lo más bajo de la jerarquía reinante en la banda de Johnny:
Soporta un mal trato y, a cambio de una deuda, servidumbre acordada en beneficio de Johnny, con muchos hermanos en la cárcel, y habiéndose criado sin la figura paterna, Elvis mira a Johnny como un hermano, y a Sonny como padre.
“No creo que Elvis se vea del mismo modo que los demás le ven; él cree que es uno más del grupo”, comenta el mismo Hatosy.
“Cuando surge un problema, y Johnny necesita que se encargue del mismo, Elvis siente que no sólo está pagando la deuda, sino que también es un héroe”
Su actuar es el de quien reacciona para ser aceptado, una bomba de tiempo que puede explotar cuando menos se lo espera, producto del “bullying” y la falta de cariño fraternal.
Para todos los personajes, la dirección artística emplea unos vestuarios y caracterizaciones sugerentes a jóvenes del momento, llevados con informalidad en un buen trabajo.
Y aunque está trufada de falsas entrevistas a los personajes, Nick Cassavetes roba del documental, los textos sobreimpresos en pantalla, que marcan lugares y personas; especialmente los numerosos testigos de los acontecimientos, que Cassavetes va numerando uno a uno.
El secuestro y demás acontecimientos, fueron presenciados por al menos 36 personas, y casi nadie hizo nada para evitarlo.
Parece que la policía se tomó a pitorreo, las pocas llamadas que recibió al respecto.
Todo el mundo percibe a los protagonistas, narcotraficantes, y a sus acciones, como modelos a imitar dentro de la estética de glorificación de la violencia y el hampa urbana en la que parece que vivimos.
En determinado momento, Zack le cuenta a unas chicas, que está secuestrado, a lo que ellas contestan:
“¡Qué genial!”
Y es que Nick lo pasó muy bien, de fiesta perenne, y se podría decir que por ese lado, haber sido secuestrado fue lo mejor que le pudo haber pasado.
A partir del secuestro, es una fascinante observación, de cómo estos jóvenes actúan y reaccionan ante el gravísimo problema en el que se acaban de meter.
La historia no se limita a mostrar complacientemente, como mero espectáculo, la vida de lujo y desenfreno que llevan estos “niños de papá”
Puede ser así para aquel que se acerca a ella desde una óptica superficial; pero realmente, se trata de una brutal crítica a la sociedad occidental post-materialista, en la que, después de 2 generaciones después de los 60, todos los valores y referentes morales se han perdido.
Sólo queda el dinero, el hedonismo, el sexo, y la evasión...
Nada tiene valor realmente:
Ni las familias, ni las parejas, ni los colegas, ni la vida…
Esa desaparición de referentes, unida a una cultura que reverencia la violencia, nos lleva al último peldaño de la maravillosa evolución cultural humana:
Jóvenes adolescentes que se dejan llevar por sus instintos más primarios, sin pensar tan siquiera que la vida pueda tener algún sentido, más allá de una eterna adolescencia descerebrada...
Alpha Dog es una crítica de la sociedad y de los mecanismos que dentro de ella permitieron que ocurriera la tragedia; una historia basada en hechos reales, que sin embargo merece más respeto, y más enfoque en la crítica social.
Se le achaca también, que algún personaje importante desaparece sin dejar rastro, como la inexplicable ausencia del personaje de Ben Foster, en la casi totalidad de la 2ª parte del filme; que hace de un judío que va de nazi, sobreactuado y repelente; que es experto en artes marciales; y que no faltan acciones demasiado precipitadas.
Y el final patético de la Stone, en plan “Norbit” de dudosa calidad.
Resulta curioso además ver, como los cacos de turno tienen miedo de ir a la cárcel, o de que le caiga una cadena perpetua por secuestrar a un adolescente, sobretodo visto desde un país, en el que el sistema judicial a veces parece que el secuestro, o crímenes similares, los castiga con 3 avemarías y 1 padrenuestro.
Pero gracias a la influencia de sus padres, la mayoría de ellos fumadores habituales de porros, malhablados y alcohólicos:
¿Cómo no van a salir esos hijos?
A mí esas personas me han producido sentimientos contradictorios, tanto lástima, y vergüenza.
¿Cómo pueden preguntarse, por qué sus hijos son así, cuando ellos son los que les han inducido a llevar ese tipo de vida?
Alpha Dog refleja cómo se vive en esa parte de EEUU, los excesos y la falta de límites paternales.
Por otro lado, al ser un hecho real, me ha quedado la sensación de que esos jóvenes, pese a tener todo el dinero de sus padres, no les permitió disfrutar de todos los placeres materiales, y terminaron en prisión.
Lo único que no me cerró, fue la reacción de los padres de los implicados en este hecho brutal, los que intentaron justificar las actitudes de sus hijos, aduciendo que solo fue una broma de mal gusto…
Los padres de estos chicos, también vagan por la vida, sin parecer entender muy bien ni porque.
Rodeados de buenas casas, de grandes coches, pero absolutamente desorientados y perdidos, o, como en el caso del papel que interpreta Sharon Stone, obsesionada, confusa y extremadamente protectora, hasta el punto de perder toda credibilidad como personaje.
Esta es otra cosa deprimente:
La muerte de Nick, fue una verdadera tragedia, pero lo peor de todo es que ni siquiera su asesino ganó nada al haberlo hecho.
A quien se le ordenó matarlo, y quien fue quien jaló el gatillo, Ryan Hoyt, lo hizo porque tenía una deuda con Jesse, pero ahora tiene una mayor deuda en prisión, y está en espera para que se lleve a cabo su ejecución.
Jesse Rugge, quien en el filme seria Frankie/Justin Timberlake, es algo cuestionable.
El filme muestra que él y Zack fundan una verdadera y genuina amistad a través del tiempo, y cuando es asesinado, es él quien le amarra las manos, con lágrimas en los ojos, asegurándole que todo va estar bien, cuando es claro lo que va a pasar.
¿Es una escena muy emotiva, pero así pasó de verdad, o es una libertad que el director se tomó?
Queda la duda.
Pero si en efecto es cierto lo que Alpha Dog muestra, entonces es realmente lamentable, porque Rugge fue su verdadero amigo hasta el mayor limite que pudo, y ahora, al igual que Jesse, obtuvo cadena perpetua, y su petición para ser liberado hace 5 años, fue rechazada.
Un dato curioso, es que Alpha Dog se filmó en un momento, en el que todavía Jesse James estaba fugado.
De hecho, cuando acabaron la película, todavía no lo habían detenido, fue al poco de terminarla cuando ocurrió.
Ese hecho tuvo consecuencias para el estreno de la película, que tuvo que retrasarse.
Además, en la película hubo otros asuntos de por medio, como el tema de los nombres verdaderos, o los detalles cambiados.
Susa y Jeff Markowitz, los padres de Nick, hubieran querido que quedara mucho más claro, quién era quién.
Mientras que los acusados y culpables, en especial Jesse James, se quejó por hacer una película basada en su vida sin su permiso…
Así, en la premier de Alpha Dog, se encontraban los actores, el director Nick Cassavetes, que uno de los motivos por los que empezó con la idea de hacer esta película, fue que su hija había ido al mismo colegio que Jesse James Hollywood, y los padres de Nick Markowitz, Susan y Jeff.
Sharon Stone, que interpreta el papel de Susan en la película, al finalizar el pase, se fundieron en un cariñoso abrazo.
“No matter where you go, no matter what you do, I'm gonna hunt you down”
El 8 de julio de 2009, Jesse James Hollywood fue hallado culpable, por ordenar el secuestro y posterior asesinato de Nicholas Markowitz, y condenado a cadena perpetua, sin posibilidad de libertad condicional.
Las investigaciones revelaron, que varios testigos vieron a Nicholas en fiestas y reuniones, y nunca lo denunciaron.
Era el centro de las fiestas, siendo apodado “The Stolen Boy” o “El Niño Robado”
A la mayoría de los jóvenes participantes de las fiestas, se les concedió la inmunidad a cambio de testificar en el juicio.
Se sabe que Nicholas mantuvo relaciones con una chica de 17 años, que se encontraba en la fiesta.
Después de la fiesta, la banda hizo creer al chico, que volvería a su casa pronto…
Entonces, Hollywood llamó a Ryan Hoyt, un miembro de su banda que le debía un favor…
Para intentar evitar cualquier problema, el secuestro tiene pena de cadena perpetua normalmente en EEUU; Hollywood dio a Hoyt una Tec-9; y 2 miembros de la banda, decidieron cometer el homicidio en unas montañas cercanas a Santa Barbara.
Los 2 cavaron una zanja poco profunda, a modo de tumba, y volvieron al motel por Nicholas.
Hoyt y otro miembro de la banda, llevaron a Nicholas al lugar donde habían escarbado, con la excusa de llevarle a casa; ataron las manos a la espalda a Nicholas con cinta de embalar, y usaron la cinta en su boca también.
Hoyt golpeó a Nicholas en la nuca con la pala que habían usado para cavar, y luego disparó 9 veces sobre Nicholas con la Tec-9 que le había dado Hollywood.
Los miembros de la banda, intentaron esconder el arma entre las piernas del cuerpo; taparon el cuerpo con arena y ramas.
Peor debido a que la tumba era poco profunda, y que se encontraba muy cerca de un camino transitado por senderistas, fue encontrado poco después, el 12 de agosto de 2000.
Ryan Hoyt, Jesse Rugge, William Skidmore, Graham Pressely, fueron capturados rápidamente, y acusados del asesinato:
Ryan Hoyt, de 21 años; fue acusado por asesinato en primer grado, físicamente fue él quien jaló el gatillo asesinando a Nick; siendo condenado a pena de muerte.
Su juicio terminó en febrero del 2003.
En la actualidad, se encuentra en El Corredor de La Muerte, en La Prisión Estatal de San Quentin.
El mismo día que Hoyt recibía su sentencia, 2 policías de Los Angeles, eran disciplinados por su mala gestión y mala realización de su trabajo en este caso.
Donovan Lyon y Brent Rygh, fueron considerados culpables, por realizar una mala investigación en las llamadas al 911, que relataban y denunciaban el rapto.
Jesse Rugge, de 20 años; fue acusado por cómplice de secuestro y asesinato de Nicholas Markowitz.
Rugge fue el miembro de la banda que amordazó y ató las manos del muchacho.
El juicio finalizó en septiembre del 2002; y fue condenado a cadena perpetua, con posibilidad de reducción de condena tras los primeros 5 años.
William Skidmore, de 20 años; fue condenado por robo y secuestro, está cumpliendo una condena de 9 años en una prisión estatal.
Su juicio terminó en septiembre del 2002, y tiene derecho a reducción de condena.
Graham Pressely, de 17 años; se le intentó juzgar en 2 ocasiones como un adulto, en julio y octubre del 2002; pero se le condenó finalmente como menor.
Fue el que cavó la zanja que serviría de tumba a Nicholas; siendo condenado a detención en un centro correccional juvenil, hasta cumplir los 25 años, sin posibilidad de tener reducción de condena.
Luego de deliberar durante unos 4 días, el jurado de La Corte Superior de Santa Bárbara, determinó también que Hollywood, de 29 años, es culpable de un cargo circunstancial y especial, al estar involucrado en un crimen en que se usó un arma de asalto.
Ello lo podría hacer merecedor de la pena de muerte…
Por su parte, Hollywood permaneció impávido con la vista al frente, mientras se leía el veredicto.
“No puedo creer que lo hayan encontrado culpable de aquel asesinato”, dijo su padre Jack Hollywood, afuera de los tribunales.
Mientras los padres de la víctima, se dijeron aliviados, pero se negaron a emitir más comentarios, por una orden emitida por el juez, a fin de que no dieran declaraciones sobre el caso.
Finalmente, el 5 de febrero de 2010, Jesse James Hollywood, fue condenado a prisión de por vida, sin posibilidad de libertad condicional.
A día de hoy, la vida del resto de los protagonistas, es y ha sido la siguiente:
Ben Markowitz, está casado y tiene 2 hijos pequeños, se distancio de ese tipo de vida y de las drogas; y trabaja en una empresa.
Sigue sin hablas con su madrastra y madre de Nick, Susan.
Susan Markowitz, tras 2 intentos de suicidio, ha seguido adelante.
Apoyó la película Alpha Dog y el libro; y sigue recordando cada día a su hijo.
Una página de MySpace, en memoria de Nick, está apoyada por ella.
Jeff Markowitz, como su mujer, Susan, sigue recordando a Nick.
Se sintió especialmente frustrado, porque en la película Alpha Dog, no apareciera el nombre real de su hijo.
Nicholas Samuel “Nick” Markowitz es recordado hoy, como un chico divertido y gracioso, con mucha energía, e involucrado en su colegio, que realizó actividades deportivas, y participó en obras teatrales escolares.
No hizo daño a nadie.

“My son was murdered over $1200”



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