Mr. Nobody

“If you never make a choice, anything is possible”

Decidir, es tomar una determinación definitiva sobre un asunto; resolver o hacer que se resuelva un asunto definitivamente, y de una determinada manera.
Si no tuviésemos la necesidad de escoger….
¿Podríamos experimentar todas las vidas resultado de la bifurcación creada tras cada elección que marcase nuestro destino?
A veces el azar no es suficiente, y nos sentimos obligados a elegir racionalmente dentro de lo que se nos ofrece.
No podríamos creer, la cantidad de puertas que se nos abren y que se nos cierran al día.
Como lanzar una moneda al aire, no siempre es suficiente.
En la vida, no todo queda determinado a “cara o cruz”, ojalá fuera así, y no tuviéramos un colapso mental con cada dilema, pero por desgracia, tenemos esa cosa llamada “sentimientos”
El ser humano es pasional, algunos más y otros menos, pero lo cierto es que todos tenemos dificultades a la hora de mantener la cabeza fría en determinadas situaciones.
Nos rompemos la cabeza con los “qué pasaría si…”, a veces nos asusta, otras nos hace fantasear, pero lo cierto, lo único real, es la elección final.
¿Por qué somos cómo somos?
¿Por qué tenemos esta personalidad?
¿Hay buenas o malas decisiones, o todas son interesantes?
La vida está hecha de situaciones que no podemos controlar, y que te ponen en múltiples opciones en la que solo se puede escoger una y, esa elección dependerá de cómo se desarrollará el resto de tu vida.
¿Con cuánta frecuencia evocamos al pasado buscando una respuesta, nos preguntamos, cómo hemos llegado hasta aquí, o cómo podrían ser las cosas si hubiésemos cambiado una simple decisión?
“Every path is the right path.
Everything could've been anything else.
And it would have just as much meaning”
Mr. Nobody es una película belga, de ciencia ficción, escrita y dirigida por Jaco Van Dormael, en el año 2009.
Protagonizada por Jared Leto, Sarah Polley, Diane Kruger, Linh Dan Pham, Rhys Ifans, Natasha Little, Toby Regbo, Juno Temple, Clare Stone, Catherine Demaiffe, entre otros.
El complejo guión de Jaco Van Dormael, no en vano tardó 7 años en completarlo, plantea multitud de incógnitas que el ser humano se ha preguntado a lo largo de la existencia.
Desde qué es el tiempo, real o irreal, lineal o paralelo…
Cuarta dimensión creada desde la expansión del Universo con el “Big Bang” así que…
¿Volveríamos a vivir todas nuestras vidas al revés, cuando se dé la esperada compresión/implosión, el denominado “Big Crunch”?
Hasta el por qué nos gusta una persona, encontrando la explicación en la Prehistoria, pasando por “El Efecto Mariposa”, y las devastadoras consecuencias que puede tener que un brasileño en paro, se ponga a cocer un huevo…
Desde la producción, Mr. Nobody está considerada la película belga más cara, con un presupuesto valorado en 33 millones de euros; en un rodaje duró 120 días, y se produjo en Bélgica, Alemania y Canadá; con la participación del fotógrafo británico Martin Parr, siendo el encargado del diseño de las 3 vidas de Mr. Nobody.
La acción inicia en el año de 2092, Nemo Nobody (Jared Leto), que tiene 118 años, es el último ser humano mortal de La Tierra, y vive rodeado de hombres que han alcanzado la inmortalidad, gracias a increíbles avances científicos.
Cuando Nemo se encuentra en su lecho de muerte, recuerda varias posibles existencias y matrimonios que no llegó a vivir...
Y es que Nemo quien tiene la particularidad de poder recordar todas sus vidas, ya sean ficticias o vividas, a diferencia del resto de los hombres, a quienes “el ángel de la vida” les ha borrado la memoria antes de nacer...
Así lo vemos como un niño en el andén de una estación.
El tren está a punto de partir; y debe decidir si:
¿Subir al tren con su madre, o quedarse con su padre?
De esa elección, dependen muchas vidas posibles, todas las vidas son completamente distintas, y contienen experiencias y lecciones diferentes.
Las cuales, el personaje principal ha obtenido todas, ya que ha vivido de una forma u otra, todas las vidas.
Mr. Nobody es una historia romántica, sobre la posibilidad de vivir una cuasi eternidad, pero sin amor; la muerte interior por miedo o congelación; la tragedia de crecer desde los 9 años, tomando decisiones imposibles; y lo bonito de renunciar a todas las vidas posibles, por una sola que merece la pena.
Mr. Nobody, entrelaza entonces distintas Teorías de La Física Cuántica, acerca del universo, La Teoría del Caos, y otras explicaciones filosóficas, sobre el antes y el después de la muerte, para contar una historia sobre la amplia posibilidad de realidades que experimentamos a lo largo de nuestra vida.
A diferencia de La Teoría Newtoniana o La Relativista, La Mecánica Cuántica describe la realidad que nos rodea en términos estadísticos:
Vivimos inmersos en una infinidad de mundos paralelos; todos ellos posibles, aunque no todos igualmente probables.
A fin de cuentas, nuestra realidad es en igual medida, las vidas que decidimos vivir como aquéllas que dejamos pasar.
“In chess, it's called Zugzwang... when the only viable move... is not to move”
Diferente de cualquier otra obra inmediatamente comparable, desde la misma esencia de su ritmo y sintaxis, Mr. Nobody solicita del observador atención plena, ya que el aluvión de imágenes extraordinariamente compuesto que presenta, atraen la mirada con un fulgor abrumador, mágico e indescriptible, para dar materia a un guión, no pocas veces impenetrable.
Jaco Van Dormael, es un director, guionista y dramaturgo belga; cuyas complejas películas, aclamadas por la crítica, se destacan especialmente por su representación respetuosa y comprensiva de las personas con discapacidad, tanto mental como física; y nos brinda un guión inteligente, cuidado hasta el más mínimo detalle, que balancea drama, comedia y romanticismo, haciéndonos unas veces reír, otras reflexionar y, la gran mayoría, emocionarnos hasta límites insospechados; pues nos habla de una humanidad que está a punto de perder sus señas de identidad, porque el miedo le ha impedido tomar decisiones con libertad, porque el amor ha sido anulado por la distancia y reducido por las contingencias de la vida.
Se ha alcanzado la cuasi eternidad, y el protagonista, Nemo Nobody, es el último individuo de la especie humana, cuya muerte se ha convertido en un acontecimiento.
Él es el último anciano de La Tierra; en un mundo donde ya se puede escoger ser inmortal, él resulta ser la gran atracción; por tanto, conseguir una entrevista en la que explique su vida, tras 118 años, es toda una primicia… si el periodista es capaz de comprender cuál, de entre todas las que le explica, es la verdadera.
Porque, tras la trascendental decisión de Nemo a los 9 años, quedarse con su padre, o irse a la gran ciudad con su madre, todo se confunde:
¿A quién de 2 escoge?
Es una decisión imposible de tomar; y varias opciones marcarán su adolescencia y porvenir:
Con 3 chicas que formarán parte de su vida, y cada una de ellas estará representada formal y simbólicamente con un color concreto:
¿Nemo se casó con Anna?
El color es el rojo, la pasión.
La historia principal, sería la de Nemo y Anna.
Una historia de amor y pasión, de 2 personas incapaces de vivir separadas.
En esa línea temporal, como no podía ser de otra forma, predomina el color rojo hasta en el más pequeño detalle.
¿Se casó con Elise?
El color empleado es el azul, la nostalgia/melancolía.
La 2ª vida es más triste, pues va unida a la depresión, así es la vida de Nemo y Elise:
Un matrimonio roto, que intenta salir a flote.
Una mujer que se pasa el día en la cama, desganada, y un marido paciente, que tiene la esperanza de que algún día cese el sufrimiento.
¿Se casó con Jeanne?
El color es el amarillo, el deseo.
En la 3ª predomina el color amarillo, simbolizando la ambición:
Nemo vive en una casa enorme, y rodeado de lujos junto a Jeanne; pero su vida está vacía, no hay sentimientos, ni buenos ni malos, predomina la neutralidad y la indiferencia.
Para rizar más el rizo, dentro de esas vidas, también se pueden crear otras, otras vidas u otras narraciones; por ejemplo, a partir de la novela de ciencia ficción que está escribiendo Nemo, en una de ellas, o de la representación teatral, o mediante un vídeo de un matrimonio que era feliz…
Cine, vídeo, literatura, teatro, televisión, periodismo...
Son distintas formas para contar o crear historias, después de todo, tal como el mismo relato de Mr. Nobody.
Pero quedan preguntas:
¿Tuvo hijos, cuántos o no tuvo?
¿Vivió feliz junto a la mujer de su vida, o amargado y solo, tras la muerte de una de ellas?
¿Murió él mismo en un accidente de coche, de moto, o asesinado en una bañera?
En todo caso…
¿Cómo pudo morir y estar explicándolo ahora?
Y, lo mejor de todo…
¿Cuál de todas estas historias es real, o lo son todas?
El Nemo anciano, y el periodista que le acompaña en su lecho de muerte:
¿Existen, o son producto de la imaginación de un niño?
Con retazos de un pasado confuso que su memoria trata de rescatar, contemplamos lo que hubiera sido de su vida si…:
No llega a perder el zapato mientras corría de niño hacia el tren; si ese pájaro no hubiera chocado contra el cristal de su coche; o esa gota de lluvia no hubiera caído sobre el papel…
La narrativa de Mr. Nobody, sigue una estructura no lineal, y en ocasiones, los saltos entre sus vidas resultan algo repentinos e inesperados.
Una mezcla de posibilidades, que en ocasiones parece que no resulta coherente tal y como le reprocha el periodista...
La construcción del guión, va y viene en el tiempo, saltando de una a otra vida, de una a otra mujer de las 3 que se cruzaron en su vida.
Las transiciones y el montaje, están acertados siempre que el espectador haya comprendido que se ha prescindido de la lógica espacio-temporal, y no se haya desconectado… porque sabe que todo sucede en la cabeza infantil de quien conoce el futuro, porque el anciano se lo va “dictando” y, por tanto, la ficción y la realidad se mezclan y confunden en esa desesperada búsqueda por salvar lo humano.
Todos los efectos especiales de Mr. Nobody, son de gran calidad y fueron realizados por Modus FX, Fly Studio y FX Rodeo en Montreal, Canadá; mientras la gráfica digital fue creada en Bélgica; y hay que añadir algunas imágenes de gran fuerza visual, caso de los helicópteros que portan trozos de mar como piezas de puzle, los rodillos gigantes que ponen el asfalto, la bota que aplasta una casa, o esas bicicletas flotando por el espacio sideral…
La planificación, acompaña a los personajes con aceleraciones o ralentíes, según el tiempo interior, y sus íntimos sentimientos.
Como dato, fue necesario un año de posproducción, para llegar a construir Mr. Nobody.
Su director la describe como “cine experimental” con un gran presupuesto, y una imponente historia, con temática cotidiana, pero al mismo tiempo compleja.
Por otro lado, a nivel técnico, el propio director explica que su visión a la hora de traducir en imágenes las distintas versiones de la vida de Nemo, era utilizar diferentes recursos para cada una de ellas.
Así, por ejemplo, la historia de Nemo y Anna adultos, repite puestas en escena que ya les hemos visto cuando eran adolescentes, ligando así fácilmente las 2 tramas.
La vida con Elise, en una neurótica Sarah Polley, se caracteriza por la distancia que hay entre ellos, y el color más apagado.
Mientras que con Jeanne, nos damos cuenta de que es la relación que menos le ha importado, porque ella nunca es el centro, siempre en sus escenas, lo destacable está fuera de campo.
Durante la mayor parte de su metraje, se juega a varias bandas, confundiéndonos sobre qué es real, qué imaginado, qué recuerdo, qué pasado, qué futuro, en definitiva, sobre la existencia o no de las cosas, a partir de una historia sobre las decisiones que Nemo podría tomar en cierto momento de su vida.
Cada decisión, genera un “Efecto Mariposa” que hace que hasta las más pequeñas de las acciones, resulten determinantes de cara al futuro, condicionando nuestro destino.
La idea de ese “efecto”, se ve reflejada mediante 2 elementos principales:
El primero y más literal, es la mariposa que se cruza por el plano al comienzo, y que vuelve a recuperar protagonismo cerca del final.
El segundo, es la hoja de un árbol, hoja que fue clave en el primer encuentro entre sus padres.
Por eso es importante, “no parpadear durante el visionado” y observar todo lo que se muestra en pantalla, ya que todo es determinante.
En el fondo, Mr. Nobody nos habla de las 3 formas de mantener una relación afectiva:
Amar y ser amado, a lo larga del episodio con Anna.
Amar y cuidar, y no ser correspondido, a lo largo del episodio con Elise, y con su padre.
Y ser amado, pero vivir la relación de manera anodina, a lo largo del episodio con Jeanne.
Claramente, el tema es el amor y la muerte.
No en tanto, pulsión Eros-Thanatos, sino como vivencia existencial lanzada paradójicamente desde el paradigma científico.
El amor, está visto en todas sus fases y variables.
La ternura casi rencorosa de un adolescente, bañando a su padre impedido...
El amor adolescente en todas sus formas simultáneas, como lo es siempre, un coctel de amor-dolor, un trago que siempre lleva amargura en sus entrañas.
El amor adulto, con su carga de frustraciones, pequeños fracasos y obstinados intentos.
El amor también es “borde”, y se encarna en Elise…
La muerte, está siempre en los que amamos, y esa parece ser la lucha que vertebra la trama:
La muerte es el desencuentro con el otro.
Al llegar al final del último de ellos, y morir, elige a Anna, y entonces llega el “Big Crunch”, que más que como algo real, podría verse como la vuelta de todas las posibles vidas, al punto de partida en la vía del tren, cuando Nemo tiene 9 años, siendo “el arquitecto” de todo lo que hemos visto.
¿Eso pasa, porque no ha elegido nada, o porque es lo que va a pasar en el futuro?
La realidad termina cuando el niño al final elige, o mejor dicho, decide no elegir; aunque “no elegir”, también es elegir...
Al final entonces parece que no es que vea el futuro, ni haya vivido el abuelo todas esas vidas, sino que el niño, en el momento del tren y a velocidad de la luz, parece ser, se imagina o se aventura a pensar todas las posibles vidas que puede tener, si se queda con uno o con otro, y acaba eligiendo a la madre, para a priori, acabar con Anna, la historia de amor más profunda, y que le aporta realmente más felicidad, porque con Jeanne siempre pensando en el limbo, y con Elise, o la pierde en un accidente, o la tiene que soportar durante años como una cabra, para que lo acabe abandonando, aparte de tener que cuidar del padre, que parece achacado de Alzheimer o algo similar.
Sobre el “Big Bang” y el “Big Crunch”:
Primero, la expansión del universo, luego su contracción, y así formando un ciclo repetitivo al que en física se le denomina la teoría del “Big Bounce”
Del mismo modo que las dimensiones espaciales y el tiempo se expanden, con el “Big Crunch” que vemos al final, ocurre lo contrario:
El caos del universo tiende a simplificarse, y el tiempo corre hacia atrás, del destino al inicio de todo.
Una vez allí, comenzamos de nuevo, una nueva humanidad en la que, solo si se da las circunstancias, Nemo volverá a nacer.
En tal caso, Nemo tendrá el “don”, si se le puede considerar como tal, a veces la ignorancia es la felicidad; de recordar sus vidas pasadas en otros ciclos del “Big Bounce”; recordemos que “el ángel olvido tocar el labio a Nemo para olvidar”
Esto le permite no conocer el futuro, sino conocer las consecuencias de tomar decisiones que ya haya tomado antes.
Por eso, Nemo se equivoca continuamente, si conociese el futuro, no se equivocaría, pero en nuevas oportunidades enmienda los errores, uno a uno.
Mr. Nobody, no es más que un intento de representar ideas del ámbito de la ciencia a un enfoque más humano.
Y en esa “humanización” de esos conceptos aún no comprobados, hacen que uno “humanice” probabilidades científicas desde nuestro egocentrismo intelectual.
Del reparto, Mr. Nobody es un gran reto para el actor Jared Leto, que interpreta a un total de 12 personajes en este laberinto de vidas, incluido el abuelo, y que sin lugar a dudas, sale victorioso de todos ellos.
Como dato, el personaje se llama “Nemo Nobody”, una redundancia, ya que “Nemo” en latín es “Nadie”, al igual que “Nobody” del inglés.
Van Dormael dijo, que Leto fue elegido, porque es “un actor que puede transformarse a sí mismo, tanto física como vocalmente, rítmicamente, su respiración”
Leto describe su papel, diciendo, “Mr. Nobody es todo el mundo, y nadie al mismo tiempo; una ilusión, el producto de sus propios sueños; él es el amor, es la esperanza, es el miedo, es la vida, y es la muerte”
Hay otro aspecto que creo que no se ha tenido en cuenta a la hora de valorarla; y es la gran interpretación del elenco femenino.
A pesar de estar relegadas a un 2º plano, las mujeres interpretan personajes complicados, y con emociones contradictorias:
Mientras que a Sarah Polley, con gran intensidad dramático-emocional, le toca el difícil papel de una mujer deprimida, Elise es la vida atormentada en cualquier elección.
Diane Kruger, hace las veces de mujer afectuosa y enamorada, en un trabajo más sencillo.
Su Anna es la vida plena en cualquier situación.
Y Linh Dan Pham como Jeanne, por la que el personaje no siente nada; es la más golpeada, pues su compromiso no fue por elección...
Evidentemente, estamos ante una película de pureza y dureza metafísica, en la cual, el director obliga al espectador a pensar el porqué de lo que está viendo, prácticamente desde el principio hasta el final.
Por esta razón, no es una película sencilla de ver, y desde luego, uno de sus defectos es que en algunos momentos sumerge al espectador en un círculo de confusión del que le cuesta salir; además de que el metraje resulta excesivo, más de 2 horas y 30 minutos, habría sido fácil meter las tijeras en la etapa adolescente; y un personaje, el periodista nerd, que chirría excesivamente…
Así como vemos muchas referencias cinéfilas que van desde la película de Capra “It's a Wonderful Life” (1943), que resultan más que evidente en ese accidente de un niño con un trineo, y esa casa abandonada apuntalada con listones de madera clavados sus ventanas…
Aunque tampoco el director belga se olvida de títulos emblemáticos más recientes como la saga “Matrix”, y la directa alusión que hace al “arquitecto”
Pero sigo preguntándome:
¿Por qué cuesta tanto encontrar a un director que sepa lo que quiere decir con una película?
Así como:
¿Habría otra forma de contar lo que se cuenta en Mr. Nobody?
Preguntas como si el tema del viaje a Marte es parte de una vida posible, o solo una historia que escribe mientras cuida al padre con la máquina de escribir, o como llega el abuelo al futuro, y es el único superviviente; quedan sin sentido cuando sabemos que nada de eso ha pasado, ni existe, pues todo lo que estábamos viviendo, son los pensamientos que pasaban por la cabeza de un niño de 9 años, mientras decidía si se iba con su madre o con su padre.
Por último, las canciones y versiones tan conocidas como el “Mr. Sandman” escrita por Pat Ballard, el “Preludio” de Johann Sebastian Bach, y “Where is my mind?” de Pixies, entre otras piezas, quedan en la cabeza, además de la banda sonora instrumental, compuesta por el hermano del director, Pierre Van Dormael.
“What did I do to deserve this?”
Nuestra vida, se ha definido, se define, y se definirá en el futuro, por las pequeñas decisiones que tomemos en el camino.
Cada acción, movimiento y decisión que tomemos en nuestra vida, por pequeña que sea, afectará en consecuencia, la manera como se desarrollen los eventos posteriores.
Y es que esto, tiene mucho de sentido común, lógica, y hasta la física nos lo indica con Las Leyes de Newton:
Acción/Reacción.
En la parte científica, la física también toca el tema de los universos paralelos, que indica que por cada posible desenlace en cualquier situación del universo, se genera un universo en el que ocurran dichos sucesos… pero esto ya sería tema de otro sitio…
Lo que sí es naturalmente sencillo de comprender, es que por cada pequeña decisión que tomemos, llegarán una o más consecuencias, ya sean estas buenas, o malas; y sin duda, la diferencia a futuro de cómo nos encontremos viviendo nuestra vida, será tremendamente radical, comparando si el origen fue una u otra decisión.
Como dijo Sir Winston Churchill:
“Se paciente, y reúne todos los elementos posibles antes de tomar una decisión… pero siempre tómala”
Cada día, tenemos decenas de oportunidades de cambiar nuestras vidas.
Algunas decisiones traerán cambios más grandes que otras, pero todas las decisiones que tomemos, impactarán nuestra vida de alguna manera.
Es indispensable entonces, no permitir que nuestra vida se desarrolle en piloto automático, sino que por el contrario, tomemos el control, día a día de lo que hacemos, sabiendo de alguna manera, tomar decisiones con base en los posibles resultados que éstas puedan tener.
Para aprovechar las pequeñas decisiones, no hace falta, más que ponderar con cabeza fría, los posibles beneficios o perjuicios que las mismas nos pueden traer.
Pero siempre, decidirse, avanzar, y ser firme en el camino.
Así, Mr. Nobody nos enseña una historia acerca de la elección; y nos quiere dar a entender, que no importa el camino que escojamos, sino que el más importante es aprender a vivir lo que nos toca, a vivir intensamente el ahora, el no arrepentirse, y el no preguntarnos como seria nuestra vida si hubiésemos elegido otros caminos, aun así se lo plantea, cree que la existencia no tiene sentido, pero que no podemos evitar preguntarnos el porqué de las cosas.
Bastaría que una sola de las variables que a lo largo de la historia determinaban mi existencia, para que yo no estuviera escribiendo esta crítica…
Tenemos más posibilidades de no existir, que de existir, y aun así, existimos.

“You don't exist.
Neither do I.
We only live in the imagination of a 9 year old child.
We are imagined by 9 year old child, faced with an impossible choice”



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