Groundhog Day
“He's having the day of his life... over and over again”
No todo lo que hacemos en la vida, querríamos que se repita eternamente.
Muchas cosas preferiríamos que queden enterradas en el pasado, y en el olvido.
Punxsutawney es un “borough”, es decir, una entidad municipal de gobierno, usualmente más pequeña que una ciudad, y una subdivisión de un condado; ubicado en el condado de Jefferson en el estado estadounidense de Pensilvania; y es famoso porque se cree, según la tradición, que cada 2 de febrero, “Día de La Marmota”; la marmota Phil predice si la primavera de ese año se adelantará, o no.
El Día de La Marmota, es un método folclórico, usado por los granjeros, especialmente de Estados Unidos y Canadá, para predecir el fin del invierno, basados en el comportamiento del animal cuando sale de hibernar el 2 de febrero.
Según la creencia, si la marmota al salir de su madriguera no ve su sombra, por ser un día nublado, dejará la madriguera, lo cual significa que el invierno terminará pronto.
Si por el contrario, por ser un día soleado, la marmota “ve su sombra”, y se mete de nuevo en la madriguera, significa que el invierno durará 6 semanas más.
Como dato curioso, El Día de La Marmota señala, aproximadamente, la mitad del periodo entre el solsticio de invierno y el equinoccio de primavera, de forma similar a la fiesta de Halloween, que señala la mitad del periodo entre el equinoccio de otoño y el solsticio de invierno.
Así, la marmota Phil de Punxsutawney, es la más famosa, con una tradición de más de un siglo, concretamente desde 1887, en la que cada 2 de febrero, se intenta predecir la duración del invierno por el comportamiento de Phil.
Los defensores del Día de La Marmota, plantean que el pronóstico del roedor tiene una precisión de entre un 75% y un 90%.
Un estudio canadiense de 13 ciudades en los pasados 30 a 40 años, establece que el índice de aciertos, está a un nivel del 37%.
Además, informes de la National Climatic Data Center, han establecido que la precisión global de la predicción, está alrededor de un 39%
En 2016, Phil pronosticó:
“Primavera adelantada”
“What would you do if you were stuck in one place and every day was exactly the same, and nothing that you did mattered?”
Groundhog Day es una comedia romántica, dirigida por Harold Ramis, en el año 1993.
Protagonizada por Bill Murray, Andie MacDowell, Chris Elliott, Stephen Tobolowsky, Angela Paton, Rick Overton, Brian Doyle-Murray, Marita Geraghty, Rick Ducommun, Harold Ramis, Rod Sell, Michael Shannon, Peggy Roeder, Les Podewell, Robin Duke, entre otros.
El guión es de Danny Rubin y Harold Ramis, sobre una historia original de Danny Rubin.
El director, comenzaría a trabajar en la idea del filme, después de leer “Interview with The Vampire”, a su juicio:
“Una inspiración que me hizo plantearme lo que sería vivir para siempre”
La otra fuente de “inspiración”, sería el libro de Nietzsche “Die fröhliche Wissenschaft”; y un corto de 1990 llamado “12:01 PM”, se suele considerar como predecesor, el cual se basa en un cuento de 1973 del mismo nombre.
El relato, no está exento de ser una fábula moralista, en el que se trasluce un mensaje para que valoremos cada día como si fuera el único que hay, y que ser buenos nos hace mejores; nos habla de que debemos aprender de los errores, de que hay que degustar de lo que la vida nos ofrece.
Todo ello en situaciones estrambóticas, mucho amor, romanticismo puro, desengaño, desesperación e incomprensión, profundo aprendizaje, etc.
La frase “Groundhog Day” ha entrado en uso común, como una referencia a una situación desagradable, que se repite continuamente.
Groundhog Day está ambientada en Punxsutawney, pero fue filmada en Woodstock, Illinois, donde se conservan 2 placas conmemorativas del rodaje:
Una, en el lugar donde Phil irremediablemente cada mañana mete el pie dentro de un charco…
Mientras que en Punxsutawney no hay placas, y ni falta que les hace.
El pequeño pueblo sufrió un “boom” de turismo a raíz de la película, tal que los siguientes 2 de febrero, hasta el día de hoy, han colgado cada año el cartel de “Completo”
No en vano, Groundhog Day que costó unos $14,5 millones, recaudó solo en EEUU, más de $70 millones, y fue un “blockbuster” a nivel internacional.
Ahora, 23 años después, la gente sigue acudiendo en masa a ver a la marmota salir de su agujero, y predecir el futuro meteorológico del año.
Allí, Phil Connors (Bill Murray), un meteorólogo algo frustrado, acude al pequeño pueblo de Punxsutawney cada 2 de febrero; esta vez con acompañado de su nueva productora, Rita Hanson (Andie MacDowell), acude con su técnico de grabación, Larry (Chris Elliott); para retransmitir el comportamiento de una marmota que determina, cuánto tiempo queda hasta que termine el invierno.
Esta tradición local, se conoce como “El Día de La Marmota”
Lo que no imagina Phil, es que deberán pasar la noche en el pueblo, debido a una tormenta de nieve, y a la mañana siguiente, misteriosamente volverá a vivir el mismo día.
Y así, sucesivamente.
Todo se repite, excepto su percepción de que, lo que le sucede en cada momento, ya lo ha vivido.
Con esta simple premisa, arranca un divertido guión, en el que además de crearse ingeniosas situaciones, se asistirá al cambio de valores del protagonista, sin caer en la obviedad, ni la sensiblería.
La metáfora es que tal como una marmota al ver su sombra “hace” que el invierno dure, Phil, mismo nombre que la marmota, al ser un insoportable egoísta y despreocupado de los demás, provoca que su vida sea un largo invierno.
Una vida estancada y gris.
De esa manera, sólo cuando Phil logre ver y colaborarle a su prójimo, es decir, cuando logre sentir el verdadero amor, puede romper el ciclo de estancamiento que amenazaba ser el resto de su vida.
Lo importante no era que ese repetido día fuera el más feliz de su vida, sino la de los demás.
Groundhog Day, trae consigo otras varias preguntas relacionadas con la vida, el destino, el propósito del hombre, o las decisiones que todos tenemos que tomar.
Es una película de profundos cuestionamientos éticos, morales, que cuestiona esa prepotencia del ser humano al querer ser Dios, pero somos humanos con todos nuestros defectos, y ese inmenso amor por alguien, esa humanidad por el desvalido, esa esperanza insondable, son las que nos hacen darle sentido a nuestras vidas.
Por tanto, Groundhog Day hace reflexionar mucho sobre cómo invertimos nuestro tiempo en nosotros mismos, y aún más importante, en los demás.
“Do you every have déjà vu?”
Si tuviésemos la capacidad de volver atrás en el tiempo, seguramente muchos coincidiríamos en subsanar antiguos errores de nuestra vida.
Desgraciadamente, la teoría es imposible a día de hoy, y es quizás, por esta razón, por lo que Groundhog Day sea una obra de culto universal.
Recordando el mito de Sísifo y la filosofía del absurdo, y basado en el libro “Die fröhliche Wissenschaft” de Nietzsche, en 1993, se escribió un guión mágico bajo una simple premisa:
¿Qué haríamos si todos los días fueran el mismo día?
Ese año, el director Harold Ramis, estrenaba en los cines:
Groundhog Day; una especie de “Cuento de Navidad”, en la que los fantasmas siempre son del presente; y siempre el mismo presente.
En esta estructura básica, se añade además, una historia romántica, absolutamente magistral en su desarrollo, y humor, mucho humor.
Pero un humor sutil, blanco, un humor deliciosamente tolerado para todos los públicos.
Es por esto que Groundhog Day recuerda mucho al espíritu “capriano”, tan presente en tanto en cuanto la idea fundamental es la radical y última esperanza en la condición humana.
Por esto, todos los personajes que rodean a nuestro trío protagonista, son inocentes, y llenos de buenas intenciones.
El concepto general de lo que trata la historia es sobre un hombre que revive el mismo día, una y otra vez, el 2 de febrero, también conocido en Estados Unidos y Canadá como “El Día de La Marmota”
Según la tradición, en esta fecha se celebra un ritual en donde, de acuerdo con el comportamiento de una marmota, se determina si el invierno se alargará, o no:
Si el día es soleado y el animal ve su sombra, la temporada invernal seguirá; de lo contrario, la primavera llegará más pronto.
La fantasía llega cuando se crea un bucle temporal, y se presentan diversos predicamentos existenciales para el protagonista:
Phil es un egocéntrico y sarcástico reportero del clima, que llega a la pequeña localidad de Punxsutawney, en Pensilvania, para cubrir el evento ceremonial; luego de que una tormenta lo deja a él y a su equipo, la productora Rita y el camarógrafo Larry, varados en la ciudad; Phil se ve forzado a pasar de mala gana el día entero ahí, sólo para darse cuenta, que al despertar, es nuevamente la misma fecha.
Phil, aborda su problema desde diversas perspectivas, una vez que se ha dado cuenta que no está en sus manos poder cambiar la situación.
Durante todo un período de tiempo, Phil intenta, ante su destino de eterno retorno, calcular el encuentro con los semejantes, eliminando el azar, y sometiendo el mundo a su capricho, al punto de creerse un dios…
Él tiene la libertad de hacer lo que le plazca, usando en su provecho, el conocimiento de lo que va a ocurrir en el día.
A veces, intenta conquistar a una mujer; otras sólo intenta divertirse; en ocasiones planea cómo robar dinero y gastarlo; y en alguna hasta intenta suicidarse…
Pero lo importante es que, durante el proceso de vivir y revivir el mismo día, una y otra vez, por tanto tiempo, el protagonista logra cuestionarse:
¿Qué hacer con esta oportunidad/maldición, según sea la perspectiva?
Y Groundhog Day nos hace preguntarnos:
¿Qué hacer cuando la vida es una repetición monótona del día a día?
¿Qué pasa cuando la vida transcurre en un más de lo mismo cotidiano?
¿Qué harías si supieras el futuro?
¿Qué harías si tuvieras todo el tiempo del mundo?
¿Qué decisiones tomarías?
¿Eliges perder el tiempo, o utilizarlo?
¿Eliges hacer algo, o conformarte?
¿Qué concepto tenemos de la moralidad?
¿Seríamos capaces de vender nuestra alma al diablo, por información privilegiada que pudiésemos utilizar en nuestro provecho?
Para llegar a una conclusión, Phil tiene que existir dentro del mismo día, cientos de veces, y pasar por una serie de etapas diferentes en el proceso:
A veces es negativo ante su situación; otras la aprovecha, unas más odia tener que revivir lo exacto mismo, en algunas sólo le enoja, o le decepciona, o le harta, se cansa de lo que vive, de la vida misma.
Sólo asumiendo su destino, admitiendo el límite de lo imposible, renunciando a una apropiación del objeto de amor por vía del cálculo, resignando su egocentrismo, y ligando su deseo a otros, Phil podrá desear en la repetición y, al hacerlo, salir del “hechizo de tiempo”
Su contraparte es Rita, una optimista y alegre mujer, que elige ver “el vaso medio lleno, en lugar de medio vacío”
Sus palabras son las que inspiran a Phil, a hacer algo con el tiempo que el destino le ha dado, aceptar su realidad, y aprovecharla.
Así decide aprender a tocar el piano, a hacer esculturas, aprender de la vida de quienes le rodean, ayudarles gracias a su posibilidad de poder anticipar lo que va a suceder…
La historia permite al espectador, preguntarse sobre el futuro, pero incluso también sobre el pasado, y sobre el presente, sobre el tiempo, y lo que se elige hacer con él.
Es cierto que Groundhog Day está envuelta en un halo de fantasía, romance y comedia, dejando al aire la pregunta de si Phil lo hizo todo por convertirse en mejor persona, o si lo hizo para impresionar a Rita...
Es debatible, si la lección para el protagonista es dejar de ser alguien negativo y arrogante, para convertirse en alguien amable, alguien que piensa en los demás, y que disfruta la vida; después de todo, cuando comienza a hacerlo, es cuando el “hechizo” por fin termina.
¿Cómo iban a poder explicar convincentemente algo así, de esa naturaleza tan fantástica?
Primeramente, es un hecho que el final es muy Walt Disney; de igual manera, se puede cuestionar el porqué del “hechizo”, por qué Phil se la pasa en el mismo espacio temporal durante un periodo tan largo.
La falta de explicación, la fantasía y la magia abierta a interpretaciones, es en realidad, un acierto del desarrollo de la historia:
Él cambia porque elige ver el lado positivo de su realidad, y eso es lo más importante del mensaje con que carga la historia; y no la no-explicación del porqué de la historia de Phil.
Aquí no hay ningún malo.
No hay una bruja que lo hechice debido a alguna mala acción concreta…
A mi entender, es el propio Phil quien escoge voluntariamente, de manera inconsciente, pasar por su propio calvario, para redimirse a sí mismo.
Y al final, es él mismo, y solo él quien puede, y de hecho lo hace, liberarse de su maldición, pasando por un proceso de madurez.
¿Acaso no estamos todos de una manera u otra, en la misma situación de nuestro protagonista?
¿Nuevamente, no vivimos lo mismo día a día una y otra vez?
¿Nos hemos dejado atrapar por el tiempo, sin siquiera darnos cuenta?
¿Dónde está lo que nos habían prometido?
Y más importante aún:
¿Dónde ha ido a parar todo lo que nos habíamos prometido a nosotros mismos?
¿Dónde han ido a parar nuestros sueños?
¿Nos hemos conformado?
¿Nos hemos convertido en marmota, y nos pasamos media vida durmiendo, y la otra media, hibernando?
O acaso es que irremediablemente hemos olvidado todo esto, y ya no nos preocupa…
Un dato curioso, es que la marmota de Punxsutawney se llame Phil, igual que nuestro protagonista.
Un buen guiño de guión, ya que ambos son meteorólogos, y están condenados a vivir, año tras año, el día 2 de febrero, la misma situación.
Phil el humano, es igual que Phil la marmota, y viceversa; ambos, a su manera, están atrapados en el tiempo.
Por otro lado, encuentro que el guión en su totalidad, es una reinterpretación de “Fausto”, la inmortal obra de Goethe, ya que su mensaje final es el mismo:
A través de un viaje de introspección y auto-análisis, el protagonista es capaz de salvarse del infierno, gracias al amor puro.
La grandilocuencia y los conocimientos del sabio, pueden llevar a la indiferencia sobre las situaciones vitales.
Y la degradación moral, lleva al ansia de placer que al final es una prisión en sí misma.
Desde lo religioso, Groundhog Day ha sido considerada como un cuento de superación, que hace hincapié en la necesidad de mirar dentro de uno mismo, y darse cuenta de que la única satisfacción en la vida, proviene de volverse hacia el exterior, en relación a uno mismo y con los demás, en lugar de concentrarse únicamente en las propias necesidades y deseos.
La frase “Groundhog Day” también se ha convertido en una ilustración taquigrafía para el concepto de trascendencia espiritual.
Como tal, la película se ha convertido en un favorito de los budistas, porque ven sus temas de desinterés y renacimiento, como un reflejo de sus propios mensajes espirituales; y en la tradición católica, se ha visto como una representación del Purgatorio.
Incluso, se ha denominado por algunos líderes religiosos como “la película más espiritual de nuestro tiempo”
Por su parte, el teólogo Michael P. Pholey, de Touchstone Magazine, comentó sobre la dificultad de determinar una única interpretación religiosa o filosófica de la película, teniendo en cuenta “las creencias religiosas ambiguas” de Harold Ramis, como “agnóstico judío, y casado con un budista”, y sugirió que cuando no se ve a través de una “lente hermenéutica única”, Groundhog Day podría ser vista como “una impresionante alegoría de la excelencia moral, intelectual, e incluso religiosa, de cara a la decadencia posmoderna, una especie de “Progreso cristiano-aristotélica del peregrino”, para los que se perdieron en el cosmos contemporáneo”
Al final de Groundhog Day, lo que salva al protagonista, es entender de que, si el día será el mismo durante toda la eternidad, el único que permanece y puede cambiar, es él.
Por otro lado, como se trata de una comedia, los aspectos más sórdidos, no terminan por explorarse, como la posibilidad de matar o cometer otros crímenes de manera impune todos los días, aunque Murray se da maña para robar dinero sin disparar un tiro…
Y es que hace falta talento, mucho talento, para desarrollar una película de 100 minutos, en la que el mismo día se repite una y otra vez.
Encontrar el punto justo entre la repetición de las acciones, para que el público tenga claro que siempre es el mismo día, más ir variando los acontecimientos para que haya un desarrollo dramático, más añadir a todo ello, una evolución interior del personaje, no es jugando.
Sustentando todo esto, unos actores excepcionales:
Por un lado, Chris Elliott a los que todos los amantes del humor absurdo recordamos con cariño.
Andie MacDowell, que no sólo tiene un físico más que agraciado, sino que además ha demostrado tener un discreto pero definitivo buen gusto para las producciones en que participa; pues pocas actrices pueden encajar de manera tan perfecta en una comedia blanca como ella, con su innegable atractivo unido a esa imagen impoluta.
Y por último, pero no por ello menos importante, sino todo lo contrario, Bill Murray.
Es verdad, que Bill tiende a repetirse un poco en el papel de cínico, pero lo hace tan bien, que todo se le perdona.
Como dato, Ramis ha explicado, que la idea original de Groundhog Day, era vivir el 2 de febrero por unos 10.000 años.
Pero finalmente cree que Phil vivió el mismo día, 10 años; aunque luego se retractó diciendo:
“Creo que la estimación de 10 años es demasiado corta.
Lleva por lo menos 10 años siendo bueno en algo, y si nos fijamos en la cantidad de tiempo que Phil perdió, debieron ser algo así como 30 o 40 años”
Sin embargo, en la película sólo están representados 38 días.
Otro dato, a raíz del estreno, es que tanto Ramis como Murray, han sido mariscales de honor en la celebración del Día de La Marmota en Punxsutawney.
Y lo que más me ha fascinado de la trama, es que se muestra una gran verdad acerca del ser humano:
Que es el único ser vivo que tropieza 2 veces con la misma piedra.
Y no sólo 2 veces, y 3 veces, y montones de veces antes de comprender el verdadero significado de la existencia, de todos esos pequeños detalles que marcan la diferencia entre una vida mediocre, superficial y vana; y una vida plena, honesta y feliz.
Sin embargo, para achacarle algo, Groundhog Day se me hizo larga; la segunda parte es muy reiterativa, y creo Phil debería haber estado menos metraje atrapado en el tiempo.
Además, la historia está mal resuelta:
Yo creo que dijeron “bueno ya llevamos 1:40 de película, vamos a ventilar esto...”
Y pienso que hay mejores finales, para una idea tan interesante.
Además, lo más fácil para averiguar qué pasa:
¿Por qué Phil no se aguantó despierto las 24 horas?
De haberlo hecho, no habría película.
Por último, la banda sonora está muy cuidada, y hay 2 canciones que me gustaría destacar especialmente:
Primero, la canción con la que Phil se despierta a las 6:00AM cada mañana, mientras está atrapado en el tiempo, y que no es otra que “I Got You Babe” de Sonny & Cher; y “Pennsylvania Polka” que es la que suena cada día durante los prolegómenos de la ceremonia de la marmota.
Y hay otra curiosidad musical:
En la escena en la que Phil, después de haber acudido a clase de piano, día a día en su cárcel temporal, toca el piano en el baile de celebración, es realmente Bill Murray quien está tocando.
Murray no sabe leer música, pero aprendió de oído a tocar el fragmento de la pieza de Sergei Rachmaninoff, “Rapsodia sobre un tema de Paganini” que suena entre pieza de jazz, y pieza de jazz.
“Today is tomorrow.
It happened”
El Eterno Retorno es una concepción filosófica del tiempo, postulada en forma escrita, por primera vez en occidente, por el estoicismo, y que planteaba una repetición del mundo, en donde éste se extinguía para volver a crearse.
Bajo esta concepción, el mundo era vuelto a su origen por medio de la conflagración, donde todo ardía en fuego.
Una vez quemado, se reconstruía para que los mismos actos ocurrieran una vez más en él.
Entonces, El Eterno Retorno plantea una repetición del mundo, en donde éste se extingue para volver a crearse.
El mundo vuelve a su origen, para que los mismos actos se repitan una y otra vez, en el mismo orden, tal cual ocurrieron, por toda la eternidad.
Así, a través de la teoría del eterno retorno, Nietzsche nos enseña, primero en “Die fröhliche Wissenschaft” y luego en “Also sprach Zarathustra. Ein Buch für Alle und Keinen” sólo una cosa:
El hombre logrará transformarse en el “Übermensch” o “superhombre” o “suprahombre”, cuando logre vivir sin miedo.
Sólo a través de la comprensión de que El Eterno Retorno incluye tanto los fracasos como los éxitos, logra “despertar” del estado de trance en el que está, sabiendo que, aunque el hombre vuelva a ser mono, nuevamente Zarathustra aparecerá para predicar el “Übermensch”, nuevamente se dará cuenta de lo que es El Eterno Retorno, y nuevamente despertará.
Con la primera obra, se cierra el periodo “negativo” de destrucción de la metafísica cristiana; y se abre el periodo afirmativo, de construcción de nuevos valores; en el que se destaca la obra “Also sprach Zarathustra. Ein Buch für Alle und Keinen”
Así, Nietzsche plantea que no sólo son los acontecimientos los que se repiten, sino también los pensamientos, sentimientos e ideas, vez tras vez, en una repetición infinita e incansable.
El valor del concepto de Eterno Retorno, ha sido tan discutido como poco entendido.
En general, se le considera únicamente desde el punto de vista cronológico, en el sentido de repetición de lo sucedido.
Y pocas veces es pensado como uno de los conceptos más poderosos de la filosofía moral de todos los tiempos:
Obrar de modo que un horizonte de infinitos retornos no intimide, elegir de forma que si uno tuviera que volver a vivir toda su vida de nuevo, pudiera hacerlo sin temor.
Podría decirse que en Groundhog Day, su Eterno Retorno al 2 de febrero, podría ser una analogía con la rutina diaria de la vida real, que puede hundirnos hasta hacernos personas grises, que actúan sin sentir nada por la vida, por sí mismo o por el otro, o puede hacernos aflorar el sentido de comunidad, amor y contacto.
“Well, what if there is no tomorrow?
There wasn't one today”
No todo lo que hacemos en la vida, querríamos que se repita eternamente.
Muchas cosas preferiríamos que queden enterradas en el pasado, y en el olvido.
Punxsutawney es un “borough”, es decir, una entidad municipal de gobierno, usualmente más pequeña que una ciudad, y una subdivisión de un condado; ubicado en el condado de Jefferson en el estado estadounidense de Pensilvania; y es famoso porque se cree, según la tradición, que cada 2 de febrero, “Día de La Marmota”; la marmota Phil predice si la primavera de ese año se adelantará, o no.
El Día de La Marmota, es un método folclórico, usado por los granjeros, especialmente de Estados Unidos y Canadá, para predecir el fin del invierno, basados en el comportamiento del animal cuando sale de hibernar el 2 de febrero.
Según la creencia, si la marmota al salir de su madriguera no ve su sombra, por ser un día nublado, dejará la madriguera, lo cual significa que el invierno terminará pronto.
Si por el contrario, por ser un día soleado, la marmota “ve su sombra”, y se mete de nuevo en la madriguera, significa que el invierno durará 6 semanas más.
Como dato curioso, El Día de La Marmota señala, aproximadamente, la mitad del periodo entre el solsticio de invierno y el equinoccio de primavera, de forma similar a la fiesta de Halloween, que señala la mitad del periodo entre el equinoccio de otoño y el solsticio de invierno.
Así, la marmota Phil de Punxsutawney, es la más famosa, con una tradición de más de un siglo, concretamente desde 1887, en la que cada 2 de febrero, se intenta predecir la duración del invierno por el comportamiento de Phil.
Los defensores del Día de La Marmota, plantean que el pronóstico del roedor tiene una precisión de entre un 75% y un 90%.
Un estudio canadiense de 13 ciudades en los pasados 30 a 40 años, establece que el índice de aciertos, está a un nivel del 37%.
Además, informes de la National Climatic Data Center, han establecido que la precisión global de la predicción, está alrededor de un 39%
En 2016, Phil pronosticó:
“Primavera adelantada”
“What would you do if you were stuck in one place and every day was exactly the same, and nothing that you did mattered?”
Groundhog Day es una comedia romántica, dirigida por Harold Ramis, en el año 1993.
Protagonizada por Bill Murray, Andie MacDowell, Chris Elliott, Stephen Tobolowsky, Angela Paton, Rick Overton, Brian Doyle-Murray, Marita Geraghty, Rick Ducommun, Harold Ramis, Rod Sell, Michael Shannon, Peggy Roeder, Les Podewell, Robin Duke, entre otros.
El guión es de Danny Rubin y Harold Ramis, sobre una historia original de Danny Rubin.
El director, comenzaría a trabajar en la idea del filme, después de leer “Interview with The Vampire”, a su juicio:
“Una inspiración que me hizo plantearme lo que sería vivir para siempre”
La otra fuente de “inspiración”, sería el libro de Nietzsche “Die fröhliche Wissenschaft”; y un corto de 1990 llamado “12:01 PM”, se suele considerar como predecesor, el cual se basa en un cuento de 1973 del mismo nombre.
El relato, no está exento de ser una fábula moralista, en el que se trasluce un mensaje para que valoremos cada día como si fuera el único que hay, y que ser buenos nos hace mejores; nos habla de que debemos aprender de los errores, de que hay que degustar de lo que la vida nos ofrece.
Todo ello en situaciones estrambóticas, mucho amor, romanticismo puro, desengaño, desesperación e incomprensión, profundo aprendizaje, etc.
La frase “Groundhog Day” ha entrado en uso común, como una referencia a una situación desagradable, que se repite continuamente.
Groundhog Day está ambientada en Punxsutawney, pero fue filmada en Woodstock, Illinois, donde se conservan 2 placas conmemorativas del rodaje:
Una, en el lugar donde Phil irremediablemente cada mañana mete el pie dentro de un charco…
Mientras que en Punxsutawney no hay placas, y ni falta que les hace.
El pequeño pueblo sufrió un “boom” de turismo a raíz de la película, tal que los siguientes 2 de febrero, hasta el día de hoy, han colgado cada año el cartel de “Completo”
No en vano, Groundhog Day que costó unos $14,5 millones, recaudó solo en EEUU, más de $70 millones, y fue un “blockbuster” a nivel internacional.
Ahora, 23 años después, la gente sigue acudiendo en masa a ver a la marmota salir de su agujero, y predecir el futuro meteorológico del año.
Allí, Phil Connors (Bill Murray), un meteorólogo algo frustrado, acude al pequeño pueblo de Punxsutawney cada 2 de febrero; esta vez con acompañado de su nueva productora, Rita Hanson (Andie MacDowell), acude con su técnico de grabación, Larry (Chris Elliott); para retransmitir el comportamiento de una marmota que determina, cuánto tiempo queda hasta que termine el invierno.
Esta tradición local, se conoce como “El Día de La Marmota”
Lo que no imagina Phil, es que deberán pasar la noche en el pueblo, debido a una tormenta de nieve, y a la mañana siguiente, misteriosamente volverá a vivir el mismo día.
Y así, sucesivamente.
Todo se repite, excepto su percepción de que, lo que le sucede en cada momento, ya lo ha vivido.
Con esta simple premisa, arranca un divertido guión, en el que además de crearse ingeniosas situaciones, se asistirá al cambio de valores del protagonista, sin caer en la obviedad, ni la sensiblería.
La metáfora es que tal como una marmota al ver su sombra “hace” que el invierno dure, Phil, mismo nombre que la marmota, al ser un insoportable egoísta y despreocupado de los demás, provoca que su vida sea un largo invierno.
Una vida estancada y gris.
De esa manera, sólo cuando Phil logre ver y colaborarle a su prójimo, es decir, cuando logre sentir el verdadero amor, puede romper el ciclo de estancamiento que amenazaba ser el resto de su vida.
Lo importante no era que ese repetido día fuera el más feliz de su vida, sino la de los demás.
Groundhog Day, trae consigo otras varias preguntas relacionadas con la vida, el destino, el propósito del hombre, o las decisiones que todos tenemos que tomar.
Es una película de profundos cuestionamientos éticos, morales, que cuestiona esa prepotencia del ser humano al querer ser Dios, pero somos humanos con todos nuestros defectos, y ese inmenso amor por alguien, esa humanidad por el desvalido, esa esperanza insondable, son las que nos hacen darle sentido a nuestras vidas.
Por tanto, Groundhog Day hace reflexionar mucho sobre cómo invertimos nuestro tiempo en nosotros mismos, y aún más importante, en los demás.
“Do you every have déjà vu?”
Si tuviésemos la capacidad de volver atrás en el tiempo, seguramente muchos coincidiríamos en subsanar antiguos errores de nuestra vida.
Desgraciadamente, la teoría es imposible a día de hoy, y es quizás, por esta razón, por lo que Groundhog Day sea una obra de culto universal.
Recordando el mito de Sísifo y la filosofía del absurdo, y basado en el libro “Die fröhliche Wissenschaft” de Nietzsche, en 1993, se escribió un guión mágico bajo una simple premisa:
¿Qué haríamos si todos los días fueran el mismo día?
Ese año, el director Harold Ramis, estrenaba en los cines:
Groundhog Day; una especie de “Cuento de Navidad”, en la que los fantasmas siempre son del presente; y siempre el mismo presente.
En esta estructura básica, se añade además, una historia romántica, absolutamente magistral en su desarrollo, y humor, mucho humor.
Pero un humor sutil, blanco, un humor deliciosamente tolerado para todos los públicos.
Es por esto que Groundhog Day recuerda mucho al espíritu “capriano”, tan presente en tanto en cuanto la idea fundamental es la radical y última esperanza en la condición humana.
Por esto, todos los personajes que rodean a nuestro trío protagonista, son inocentes, y llenos de buenas intenciones.
El concepto general de lo que trata la historia es sobre un hombre que revive el mismo día, una y otra vez, el 2 de febrero, también conocido en Estados Unidos y Canadá como “El Día de La Marmota”
Según la tradición, en esta fecha se celebra un ritual en donde, de acuerdo con el comportamiento de una marmota, se determina si el invierno se alargará, o no:
Si el día es soleado y el animal ve su sombra, la temporada invernal seguirá; de lo contrario, la primavera llegará más pronto.
La fantasía llega cuando se crea un bucle temporal, y se presentan diversos predicamentos existenciales para el protagonista:
Phil es un egocéntrico y sarcástico reportero del clima, que llega a la pequeña localidad de Punxsutawney, en Pensilvania, para cubrir el evento ceremonial; luego de que una tormenta lo deja a él y a su equipo, la productora Rita y el camarógrafo Larry, varados en la ciudad; Phil se ve forzado a pasar de mala gana el día entero ahí, sólo para darse cuenta, que al despertar, es nuevamente la misma fecha.
Phil, aborda su problema desde diversas perspectivas, una vez que se ha dado cuenta que no está en sus manos poder cambiar la situación.
Durante todo un período de tiempo, Phil intenta, ante su destino de eterno retorno, calcular el encuentro con los semejantes, eliminando el azar, y sometiendo el mundo a su capricho, al punto de creerse un dios…
Él tiene la libertad de hacer lo que le plazca, usando en su provecho, el conocimiento de lo que va a ocurrir en el día.
A veces, intenta conquistar a una mujer; otras sólo intenta divertirse; en ocasiones planea cómo robar dinero y gastarlo; y en alguna hasta intenta suicidarse…
Pero lo importante es que, durante el proceso de vivir y revivir el mismo día, una y otra vez, por tanto tiempo, el protagonista logra cuestionarse:
¿Qué hacer con esta oportunidad/maldición, según sea la perspectiva?
Y Groundhog Day nos hace preguntarnos:
¿Qué hacer cuando la vida es una repetición monótona del día a día?
¿Qué pasa cuando la vida transcurre en un más de lo mismo cotidiano?
¿Qué harías si supieras el futuro?
¿Qué harías si tuvieras todo el tiempo del mundo?
¿Qué decisiones tomarías?
¿Eliges perder el tiempo, o utilizarlo?
¿Eliges hacer algo, o conformarte?
¿Qué concepto tenemos de la moralidad?
¿Seríamos capaces de vender nuestra alma al diablo, por información privilegiada que pudiésemos utilizar en nuestro provecho?
Para llegar a una conclusión, Phil tiene que existir dentro del mismo día, cientos de veces, y pasar por una serie de etapas diferentes en el proceso:
A veces es negativo ante su situación; otras la aprovecha, unas más odia tener que revivir lo exacto mismo, en algunas sólo le enoja, o le decepciona, o le harta, se cansa de lo que vive, de la vida misma.
Sólo asumiendo su destino, admitiendo el límite de lo imposible, renunciando a una apropiación del objeto de amor por vía del cálculo, resignando su egocentrismo, y ligando su deseo a otros, Phil podrá desear en la repetición y, al hacerlo, salir del “hechizo de tiempo”
Su contraparte es Rita, una optimista y alegre mujer, que elige ver “el vaso medio lleno, en lugar de medio vacío”
Sus palabras son las que inspiran a Phil, a hacer algo con el tiempo que el destino le ha dado, aceptar su realidad, y aprovecharla.
Así decide aprender a tocar el piano, a hacer esculturas, aprender de la vida de quienes le rodean, ayudarles gracias a su posibilidad de poder anticipar lo que va a suceder…
La historia permite al espectador, preguntarse sobre el futuro, pero incluso también sobre el pasado, y sobre el presente, sobre el tiempo, y lo que se elige hacer con él.
Es cierto que Groundhog Day está envuelta en un halo de fantasía, romance y comedia, dejando al aire la pregunta de si Phil lo hizo todo por convertirse en mejor persona, o si lo hizo para impresionar a Rita...
Es debatible, si la lección para el protagonista es dejar de ser alguien negativo y arrogante, para convertirse en alguien amable, alguien que piensa en los demás, y que disfruta la vida; después de todo, cuando comienza a hacerlo, es cuando el “hechizo” por fin termina.
¿Cómo iban a poder explicar convincentemente algo así, de esa naturaleza tan fantástica?
Primeramente, es un hecho que el final es muy Walt Disney; de igual manera, se puede cuestionar el porqué del “hechizo”, por qué Phil se la pasa en el mismo espacio temporal durante un periodo tan largo.
La falta de explicación, la fantasía y la magia abierta a interpretaciones, es en realidad, un acierto del desarrollo de la historia:
Él cambia porque elige ver el lado positivo de su realidad, y eso es lo más importante del mensaje con que carga la historia; y no la no-explicación del porqué de la historia de Phil.
Aquí no hay ningún malo.
No hay una bruja que lo hechice debido a alguna mala acción concreta…
A mi entender, es el propio Phil quien escoge voluntariamente, de manera inconsciente, pasar por su propio calvario, para redimirse a sí mismo.
Y al final, es él mismo, y solo él quien puede, y de hecho lo hace, liberarse de su maldición, pasando por un proceso de madurez.
¿Acaso no estamos todos de una manera u otra, en la misma situación de nuestro protagonista?
¿Nuevamente, no vivimos lo mismo día a día una y otra vez?
¿Nos hemos dejado atrapar por el tiempo, sin siquiera darnos cuenta?
¿Dónde está lo que nos habían prometido?
Y más importante aún:
¿Dónde ha ido a parar todo lo que nos habíamos prometido a nosotros mismos?
¿Dónde han ido a parar nuestros sueños?
¿Nos hemos conformado?
¿Nos hemos convertido en marmota, y nos pasamos media vida durmiendo, y la otra media, hibernando?
O acaso es que irremediablemente hemos olvidado todo esto, y ya no nos preocupa…
Un dato curioso, es que la marmota de Punxsutawney se llame Phil, igual que nuestro protagonista.
Un buen guiño de guión, ya que ambos son meteorólogos, y están condenados a vivir, año tras año, el día 2 de febrero, la misma situación.
Phil el humano, es igual que Phil la marmota, y viceversa; ambos, a su manera, están atrapados en el tiempo.
Por otro lado, encuentro que el guión en su totalidad, es una reinterpretación de “Fausto”, la inmortal obra de Goethe, ya que su mensaje final es el mismo:
A través de un viaje de introspección y auto-análisis, el protagonista es capaz de salvarse del infierno, gracias al amor puro.
La grandilocuencia y los conocimientos del sabio, pueden llevar a la indiferencia sobre las situaciones vitales.
Y la degradación moral, lleva al ansia de placer que al final es una prisión en sí misma.
Desde lo religioso, Groundhog Day ha sido considerada como un cuento de superación, que hace hincapié en la necesidad de mirar dentro de uno mismo, y darse cuenta de que la única satisfacción en la vida, proviene de volverse hacia el exterior, en relación a uno mismo y con los demás, en lugar de concentrarse únicamente en las propias necesidades y deseos.
La frase “Groundhog Day” también se ha convertido en una ilustración taquigrafía para el concepto de trascendencia espiritual.
Como tal, la película se ha convertido en un favorito de los budistas, porque ven sus temas de desinterés y renacimiento, como un reflejo de sus propios mensajes espirituales; y en la tradición católica, se ha visto como una representación del Purgatorio.
Incluso, se ha denominado por algunos líderes religiosos como “la película más espiritual de nuestro tiempo”
Por su parte, el teólogo Michael P. Pholey, de Touchstone Magazine, comentó sobre la dificultad de determinar una única interpretación religiosa o filosófica de la película, teniendo en cuenta “las creencias religiosas ambiguas” de Harold Ramis, como “agnóstico judío, y casado con un budista”, y sugirió que cuando no se ve a través de una “lente hermenéutica única”, Groundhog Day podría ser vista como “una impresionante alegoría de la excelencia moral, intelectual, e incluso religiosa, de cara a la decadencia posmoderna, una especie de “Progreso cristiano-aristotélica del peregrino”, para los que se perdieron en el cosmos contemporáneo”
Al final de Groundhog Day, lo que salva al protagonista, es entender de que, si el día será el mismo durante toda la eternidad, el único que permanece y puede cambiar, es él.
Por otro lado, como se trata de una comedia, los aspectos más sórdidos, no terminan por explorarse, como la posibilidad de matar o cometer otros crímenes de manera impune todos los días, aunque Murray se da maña para robar dinero sin disparar un tiro…
Y es que hace falta talento, mucho talento, para desarrollar una película de 100 minutos, en la que el mismo día se repite una y otra vez.
Encontrar el punto justo entre la repetición de las acciones, para que el público tenga claro que siempre es el mismo día, más ir variando los acontecimientos para que haya un desarrollo dramático, más añadir a todo ello, una evolución interior del personaje, no es jugando.
Sustentando todo esto, unos actores excepcionales:
Por un lado, Chris Elliott a los que todos los amantes del humor absurdo recordamos con cariño.
Andie MacDowell, que no sólo tiene un físico más que agraciado, sino que además ha demostrado tener un discreto pero definitivo buen gusto para las producciones en que participa; pues pocas actrices pueden encajar de manera tan perfecta en una comedia blanca como ella, con su innegable atractivo unido a esa imagen impoluta.
Y por último, pero no por ello menos importante, sino todo lo contrario, Bill Murray.
Es verdad, que Bill tiende a repetirse un poco en el papel de cínico, pero lo hace tan bien, que todo se le perdona.
Como dato, Ramis ha explicado, que la idea original de Groundhog Day, era vivir el 2 de febrero por unos 10.000 años.
Pero finalmente cree que Phil vivió el mismo día, 10 años; aunque luego se retractó diciendo:
“Creo que la estimación de 10 años es demasiado corta.
Lleva por lo menos 10 años siendo bueno en algo, y si nos fijamos en la cantidad de tiempo que Phil perdió, debieron ser algo así como 30 o 40 años”
Sin embargo, en la película sólo están representados 38 días.
Otro dato, a raíz del estreno, es que tanto Ramis como Murray, han sido mariscales de honor en la celebración del Día de La Marmota en Punxsutawney.
Y lo que más me ha fascinado de la trama, es que se muestra una gran verdad acerca del ser humano:
Que es el único ser vivo que tropieza 2 veces con la misma piedra.
Y no sólo 2 veces, y 3 veces, y montones de veces antes de comprender el verdadero significado de la existencia, de todos esos pequeños detalles que marcan la diferencia entre una vida mediocre, superficial y vana; y una vida plena, honesta y feliz.
Sin embargo, para achacarle algo, Groundhog Day se me hizo larga; la segunda parte es muy reiterativa, y creo Phil debería haber estado menos metraje atrapado en el tiempo.
Además, la historia está mal resuelta:
Yo creo que dijeron “bueno ya llevamos 1:40 de película, vamos a ventilar esto...”
Y pienso que hay mejores finales, para una idea tan interesante.
Además, lo más fácil para averiguar qué pasa:
¿Por qué Phil no se aguantó despierto las 24 horas?
De haberlo hecho, no habría película.
Por último, la banda sonora está muy cuidada, y hay 2 canciones que me gustaría destacar especialmente:
Primero, la canción con la que Phil se despierta a las 6:00AM cada mañana, mientras está atrapado en el tiempo, y que no es otra que “I Got You Babe” de Sonny & Cher; y “Pennsylvania Polka” que es la que suena cada día durante los prolegómenos de la ceremonia de la marmota.
Y hay otra curiosidad musical:
En la escena en la que Phil, después de haber acudido a clase de piano, día a día en su cárcel temporal, toca el piano en el baile de celebración, es realmente Bill Murray quien está tocando.
Murray no sabe leer música, pero aprendió de oído a tocar el fragmento de la pieza de Sergei Rachmaninoff, “Rapsodia sobre un tema de Paganini” que suena entre pieza de jazz, y pieza de jazz.
“Today is tomorrow.
It happened”
El Eterno Retorno es una concepción filosófica del tiempo, postulada en forma escrita, por primera vez en occidente, por el estoicismo, y que planteaba una repetición del mundo, en donde éste se extinguía para volver a crearse.
Bajo esta concepción, el mundo era vuelto a su origen por medio de la conflagración, donde todo ardía en fuego.
Una vez quemado, se reconstruía para que los mismos actos ocurrieran una vez más en él.
Entonces, El Eterno Retorno plantea una repetición del mundo, en donde éste se extingue para volver a crearse.
El mundo vuelve a su origen, para que los mismos actos se repitan una y otra vez, en el mismo orden, tal cual ocurrieron, por toda la eternidad.
Así, a través de la teoría del eterno retorno, Nietzsche nos enseña, primero en “Die fröhliche Wissenschaft” y luego en “Also sprach Zarathustra. Ein Buch für Alle und Keinen” sólo una cosa:
El hombre logrará transformarse en el “Übermensch” o “superhombre” o “suprahombre”, cuando logre vivir sin miedo.
Sólo a través de la comprensión de que El Eterno Retorno incluye tanto los fracasos como los éxitos, logra “despertar” del estado de trance en el que está, sabiendo que, aunque el hombre vuelva a ser mono, nuevamente Zarathustra aparecerá para predicar el “Übermensch”, nuevamente se dará cuenta de lo que es El Eterno Retorno, y nuevamente despertará.
Con la primera obra, se cierra el periodo “negativo” de destrucción de la metafísica cristiana; y se abre el periodo afirmativo, de construcción de nuevos valores; en el que se destaca la obra “Also sprach Zarathustra. Ein Buch für Alle und Keinen”
Así, Nietzsche plantea que no sólo son los acontecimientos los que se repiten, sino también los pensamientos, sentimientos e ideas, vez tras vez, en una repetición infinita e incansable.
El valor del concepto de Eterno Retorno, ha sido tan discutido como poco entendido.
En general, se le considera únicamente desde el punto de vista cronológico, en el sentido de repetición de lo sucedido.
Y pocas veces es pensado como uno de los conceptos más poderosos de la filosofía moral de todos los tiempos:
Obrar de modo que un horizonte de infinitos retornos no intimide, elegir de forma que si uno tuviera que volver a vivir toda su vida de nuevo, pudiera hacerlo sin temor.
Podría decirse que en Groundhog Day, su Eterno Retorno al 2 de febrero, podría ser una analogía con la rutina diaria de la vida real, que puede hundirnos hasta hacernos personas grises, que actúan sin sentir nada por la vida, por sí mismo o por el otro, o puede hacernos aflorar el sentido de comunidad, amor y contacto.
“Well, what if there is no tomorrow?
There wasn't one today”
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