The Amityville Horror

“GET OUT!”

Desde tiempos inmemorables, el ser humano siempre ha contado hazañas sobre sucesos inexplicables para el hombre.
Ahora los conocemos como sucesos paranormales, y la ciencia que intenta explicarlos, se conoce con un solo nombre:
Parapsicología.
En todo el mundo han ocurrido, y siguen ocurriendo actualmente, miles de sucesos inexplicables para muchas personas, algunos fraudes, y otros, misterios que aún nadie ha podido resolver.
Los sucesos de actividad paranormal, se dividen en distintas categorías, pudiendo ser:
Sucesos demoníacos, poltergeist, retrocognición, psicofonías, y muchas más clases, con sus distintas características.
Resulta pues, que en el condado de Suffolk, estado de New York, existe una curiosa casa, situada en Amityville:
Una mansión de estilo colonial holandés, con embarcadero propio, y un enorme jardín.
En resumen, es la casa perfecta para cualquier familia, si no fuera por las extrañas presencias con las que se debe compartir la casa.
“Grandes Esperanzas” reza el extraño cartel en la entrada, casi como una cruel ironía de lo que les pasaría a las 2 familias, que vivieron allí, la experiencia más terrorífica de sus vidas, una de ellas, con desastroso final.
La historia de la mansión de Amityville, se cuenta, que se remonta a la aparición de los indios nativos “shinnecocks”, quienes aprisionaban en el terreno de lo que actualmente es la casa, a los moribundos y enfermos, dejándolos morir en el lugar.
A finales del Siglo XVII, un hombre llamado John Catchum, construyó la casa comenzando desde el sótano.
Según parece, Catchum había sido expulsado de su ciudad natal Salem, Massachusetts, acusado de brujería.
Sin embargo, no detuvo sus actos, continuando los rituales en su nueva casa, y realizando sacrificios.
Luego de su muerte, fue enterrado en el sótano de la casa, y esta después fue quemada.
Fue hasta 1928, en que se construyó la casa que a la fecha existe.
Varias familias la habitaron sin durar en ella, hasta que la familia Riley, la vendió a los DeFeo.
El 13 de noviembre de 1974, a las 03:15 de la madrugada, Ronald Joseph “Butch” DeFeo, Jr., también conocido como “Ronnie” asesinó con un rifle de gran calibre, alrededor de las 3:15 de la madrugada, a sus padres, y a sus 4 hermanos, mientras todos dormían plácidamente en sus camas.
Su argumento fue, que oyó unas voces procedentes de la casa, que le incitaban a matar a su familia, a sangre fría.
Las víctimas fueron:
Sus 2 padres:
Ronald DeFeo de 44 años, y Louise DeFeo de 43 años.
Sus 4 hermanos:
Dawn DeFeo de 18 años, Allison DeFeo de 13 años, Mark DeFeo de 12 años; y John DeFeo de 9 años.
Todas las víctimas, habían recibido disparos con un calibre .35, de un rifle Marlin 336C; los padres de DeFeo, habían recibido disparos 2 veces, mientras que sus hijos, habían sido asesinados con un sólo disparo.
Louise DeFeo y su hija Allison, habrían sido las únicas víctimas que fueron despertadas por el ruido de los disparos, al momento de sus muertes, pero de acuerdo con la Policía del Condado de Suffolk, las víctimas fueron encontradas acostadas boca abajo, en la cama, con la cabeza reposando sobre sus brazos, en posición de cruz.
A todos les disparó en la espalda, menos a la madre, Louise, que le disparó en la cabeza.
Tras la matanza, Butch recogió toda su ropa manchada de sangre, la funda del rifle y unas balas del arma, y lo introdujo todo, en una funda de almohada, que posteriormente encontró la policía, en una alcantarilla llena de hojas secas.
Después de aquello, Ronald se fue a un bar de su barrio, “The Witches’ Brew”, y le dijo al chico que trabajaba ahí, Joe Yeswit, que alguien había disparado a sus padres.
Butch y Joe, se dirigieron a la casa, y llamaron a la policía, diciendo que había habido un tiroteo.
Cuando la policía llegó, irrumpieron en la casa, y descubrieron que ahí yacían 6 cuerpos sin vida, y sacaron los cadáveres de la casa.
Ronald era el principal sospechoso, ya que era la única persona de la familia, que no había sido asesinada.
Al ser interrogado, Ronnie dijo que había salido pronto de su casa para adelantar trabajo, pero la hora de la muerte no encajaba, y su coartada falló.
Butch fue llevado a la estación de policía local por su propia protección, después de sugerir a los oficiales de policía en la escena del crimen, que los asesinatos habían sido llevados a cabo, por un asesino a sueldo de la mafia, llamado Louis Falini.
Sin embargo, una entrevista con DeFeo en la estación, pronto expuso serias inconsistencias en su versión de los hechos, y al día siguiente, confesó haber llevado a cabo el asesinato; y le dijo a los detectives:
“Una vez que comencé, no pude detenerme.
Todo pasó muy rápido”
Obviamente, el chico fue arrestado, y sometido a juicio.
Las investigaciones iniciaron, apuntando como posible causa del asesinato al Sr. Ronald DeFeo, padre del asesino.
DeFeo señaló, que su padre había sido un hombre sumamente estricto, además de haber usado la violencia contra su familia, si no se cumplían sus deseos.
Como cabeza de la familia, exigía ser tratado como una “figura de autoridad”, cosa que nadie podía contradecir.
Más tarde se investigó también a los demás miembros de la familia.
Las víctimas, habían llevado buena relación con Ronald, quién confesó:
“Mi madre daba prioridad a Dios ante todo”
Todas las investigaciones se vieron contradichas, cuando Ronald DeFeo declaró, haber tomado un rifle de cacería de colección de su recámara, y haber asesinado a su familia, luego de que unas voces provenientes del interior de la casa lo indujeran a hacerlo.
Según los datos declarados por el mismo, alrededor de las 8:00 pm, cenaron por última vez, y a las 3:15 am los asesinó.
Por último, señaló que Allison DeFeo, había tenido una relación con él durante los días anteriores al asesinato, pero esto se descartó como la razón del crimen, ya que ambos estaban de acuerdo.
Las 6 víctimas, habían sido encontradas boca abajo en sus camas, sin signos de lucha o sedantes, llevando a la especulación, de que alguien de la casa, debería haber sido despertado por el ruido de los disparos.
Los vecinos informaron no escuchar ningún disparo.
La investigación de la policía concluyó, que las víctimas estaban durmiendo al momento de los asesinatos, y que el rifle, no había sido equipado con un supresor.
Los oficiales de policía, y el médico forense que asistió a la escena, estaban confundidos por la rapidez y la magnitud de las matanzas, y consideraron la posibilidad, de que más personas habían sido responsables del crimen.
El caso de Ronald DeFeo, se llevó a juicio el martes 14 de octubre de 1975, casi un año después de los asesinatos.
El fiscal de distrito a cargo del juicio, fue Gerard Sullivan, y el abogado defensor de Ronald DeFeo, fue William Weber.
Ronald y su abogado defensor William Weber, montaron una defensa afirmativa de locura, con DeFeo afirmando que, voces en su cabeza le insistían llevar a cabo los asesinatos.
La locura fue apoyada por el psiquiatra de la defensa, Dr. Daniel Schwartz.
El psiquiatra de la acusación, Dr. Harold Zolan, sostuvo que a pesar que DeFeo era un abusador de la heroína y LSD, tenía un trastorno antisocial de la personalidad, y estaba consciente de sus acciones, en el momento del crimen.
Aquel testimonio, resultó absurdo para el juzgado, ya que tenían entendido, que Ronald tenía un pequeño historial delictivo, y coqueteaba con las drogas.
El 21 de noviembre de 1975, DeFeo fue encontrado culpable de 6 cargos de asesinato en 2º grado.
El 4 de diciembre de 1975, el Juez Thomas Stark, sentenció a Ronald DeFeo, Jr., a 6 penas consecutivas de 25 años, a cadena perpetua.
Durante su tiempo en prisión, Ronald DeFeo se le han dado varias cuentas de asesinatos, de cómo fueron hechos los asesinatos, todos ellos incompatibles.
En una entrevista de 1986, él dijo que su madre era responsable de los disparos, que fue desestimado como “absurdo” por un ex funcionario oficial del Condado de Suffolk.
El 30 de noviembre de 2000, Ronald DeFeo conoció a Ric Osuna, autor de “The Night The Defeo's Died”, que fue publicado en 2002.
De acuerdo a Osuna, DeFeo dijo, que él cometió los asesinatos con su hermana Dawn, y 2 amigos no identificados “por desesperación”
Dijo que después de una pelea furiosa con su padre, él y su hermana planearon asesinar a sus padres, y que Dawn asesinó a los niños, con el fin de eliminarlos como testigos.
Él dijo que se enfureció, al descubrir las acciones de su hermana, la dejó inconsciente en su cama, y le disparó en la cabeza.
Se ha informado, que durante la investigación original policial, rastros de pólvora se encontraron en el camisón de Dawn, indicando que quizás pudo haber dado de alta un arma de fuego.
Esta línea de investigación, no fue perseguida tras la confesión de Ronald DeFeo.
Por su parte, el libro de Ric Osuna, a partir del verano de 2010, fue adaptado en un documental titulado “Shattered Hopes: The True Story Of The Amityville Murders”
La película, escrita, dirigida, y producida por Ryan Katezenbach, y que presenta la narración del actor Edward Asner, examina todos los aspectos del caso Amityville, con un enfoco fuerte en la familia DeFeo, y los eventos que rodearon los asesinatos.
Los intentos en contactar a los 2 presuntos cómplices, han fracasado, ya que se tiene conocimiento que uno murió en enero de 2001, y el otro, se dice, que entró a un programa de protección de testigos.
Ronald DeFeo, Jr. tuvo una relación tormentosa con su padre, pero el por qué asesinó a la familia entera, sigue siendo poco claro.
La fiscalía en el juicio sugiere, que el motivo de los asesinatos era para obtener el seguro de vida de sus padres.
Recientemente, se halló otra arma escondida en el embarcadero, por lo que se cree, que el asesinato de la familia DeFeo pudo haber sido premeditado por la mafia, y que Ronald, recibió ayuda para efectuar la matanza, tal y como declaró en una ocasión.
Nacido el 26 de septiembre de 1951, Ronald DeFeo actualmente tiene 62 años, y se encuentra en el Green Haven Correctional Facility, en Beekma, New York, y todas sus apelaciones a la junta de libertad condicional, hasta la fecha, han sido rechazadas.
A modo de curiosidad, el médico psiquiatra Dr. Daniel Schwartz, que fue nombrado para ocuparse de la parte de la defensa de Butch, más tarde, sería el mismo que atendería al asesino en serie, David Berkowitz, más conocido como “El Hijo de Sam”, quien curiosamente aclamó consecuentemente, que fue comandado a cometer los asesinatos, por un demonio que poseyó al perro de su vecino.
Su celebridad se fue al traste, porque se diagnosticó enfermedad mental a Berkowitz erróneamente, algo que se comprobó años más tarde.
“What do you want from us?
Goddamnit, this is MY house!”
Un año después del juicio contra Ronald DeFeo, una nueva familia se mudó a la casa de Ocean Avenue:
Los Lutz.
George Lutz tenía 30 años, y era padre de familia; poseía su propia empresa topográfica “William H. Parry, Inc.”
Entre los meses de julio y noviembre, él y su esposa Kathy, también de 30 años, habían visitado más de 50 viviendas en la costa sur de la isla, antes de decidirse a buscar en Amityville.
Ninguna casa de precio comprendido entre $30 mil y $50 mil reunía todos los requisitos, que los Lutz querían que tuviera su nuevo hogar:
Que estuviese cerca del mar, y que George pudiera trasladar ahí su oficina.
Continuando con la búsqueda, George visitó la “Inmobiliaria Conkin” de Massapequa Park, y habló con la agente, Edith Evans.
Ésta le dijo, que tenía una casa en venta que deseaba mostrarles, y que podría hacerlo entre las 3, y las 3:30pm de ese mismo día.
George aceptó la invitación, y les condujo ahí a las 3 de la tarde.
La chica se mostró muy amable, y les dijo que no sabía lo que buscaban, pero que deseaba mostrarles aquella casa.
La casa, situada en el número 112 de Ocean Avenue, en Amityville, New York, es un edificio grande de 3 pisos, cubierto por tejas oscuras y fachada blanca.
Está en un solar bastante amplio, con un jardín muy grande, una piscina, y un embarcadero; y en un poste que se sitúa al final del camino empedrado de la entrada, hay un pequeño rótulo, con el nombre adjudicado a la casa, el cuál puso su anterior propietario:
“High Hopes”
Al mirar las magníficas vistas de aquélla casa, George advirtió que los postigos de las casas vecinas, estaban cerrados en todas las direcciones que apuntaban a la casa, pero no cuando apuntaban a otras casas distintas.
Hacía casi un año, que estaba aquélla casa en venta.
No había sido anunciada por ninguna parte, pero estaba perfectamente descrita en la inmobiliaria de la señorita Evans.
Pedían $80,000, y George se sorprendió muchísimo, pensó que el precio era erróneo, pero tras una visita por el interior de la casa, Evans les dijo, sin mayor dilación, que había sido la casa de los DeFeo.
Pero tanto George como Kathy, se mantuvieron indiferentes.
La casa reunía todos los requisitos que ellos querían, y más.
Pero aunque se fuera un poco de su presupuesto, era la casa de sus sueños.
George dijo:
“Después de todo, los fantasmas no matan, las casas tampoco, sólo matan las personas”
George y Kathy, se mudarían a su nueva vivienda con los 3 hijos del matrimonio anterior de Kathy:
Christopher, Danny, y Missy.
Pero después de pagar $80,000 por la casa, la familia Lutz dijo, que vivió unos 28 días en compañía de fenómenos paranormales, que pusieron en peligro su vida.
Los Lutz afirman, que desde el primer día en la casa, ya sucedió algo extraño:
Llamaron al padre Pecoraro para que les bendijera su nueva morada, y en una de las habitaciones, el padre escuchó una voz siniestra que le dijo:
“¡Fuera de aquí!”
El padre Pecoraro se estremeció, pero continuó bendiciendo la casa, y cuando terminó, rechazó la propuesta que le había hecho Kathy, de quedarse a comer en su casa, y salió lo más rápido posible de ahí.
Tras la bendición del padre, los Lutz estuvieron realizando sus tareas de mudanza, como ordenar cajas, trastos, organizar ropa, mover cosas de lugar…
Al acabar el día, Kathy y George acostaron a los niños, y ellos se quedaron en la sala de estar.
George alimentaba el fuego con leños, porque notaba un frío glaciar en la casa, aunque el termostato estuviese a una temperatura superior a 20 °C.
A las 11:00pm, George y Kathy se fueron a dormir por primera vez en su nueva casa.
George se despertó con un fuerte golpe en la puerta principal, y se levantó de un salto.
Abrió la puerta, y no vio a nadie, pero escuchó a Harry, el perro, ladrando en el jardín, y entonces se fijó en que la caseta de los botes, estaba agitando sus 2 puertezuelas.
George se extrañó, al recordar que las había cerrado, pero pensó que sería una mala jugada por el sueño.
Cuando George volvió a su cama, eran las 03:15am.
Esa fue la primera noche, que George se despertó a esa misma hora.
Al día siguiente, George tenía un frío glaciar, y estaba comprobando todas las puertas y ventanas de la casa para cerrarlas si alguna hubiera quedado abierta, hasta cuando entró en el cuarto de costura.
Al irrumpir en la habitación, George se quedó perplejo.
¡Había cientos de moscas en la ventana, a pesar de que estuvieran en pleno invierno!
George cogió un periódico enroscado, y mató todas las moscas que pudo.
A las demás, las echó por la ventana.
Esa misma noche, George se despertó sobresaltado por un fuerte ruido.
A pesar de que había revisado todas las puertas y ventanas, la del cuarto de costura estaba abierta, y la puerta se abría y cerraba continuamente, haciendo un estrepitoso ruido.
La pesada puerta de la entrada, también estaba abierta, pero cuando George iba a cerrarla, descubrió que había sido “arrancada” de sus ejes, pero la cerradura sólo se veía forzada por dentro de la casa.
Era extraño, que sólo se hubiera despertado él, pues la puerta debía haber hecho un ruido estruendoso.
Cerró la ventana del cuarto de costura, arregló la puerta de la entrada como pudo, y volvió a la cama.
Eran las 03:15am.
Al día siguiente, George llamó a un cerrajero para que arreglase la puerta de la entrada; y el resto del día, fue básicamente como siempre:
Limpiar y organizar las cosas de la mudanza, aún quedaba mucho por hacer.
Pero sucedió que en 2 ocasiones, en el 112 de Ocean Avenue, apareció una figura espeluznante, que más tarde los demonólogos, Ed y Lorraine Warren, descubrieron que era una manifestación demoníaca.
Aquel ser, se manifestó en la chimenea del cuarto de estar, por primera vez.
Su rostro se imprimió en fuego, sobre la pared de ladrillos del hogar.
La segunda aparición, fue en el cuarto de los niños.
Éstos empezaron a gritar, en mitad de la noche, que había un monstruo bajo sus camas.
Cuando George salió de su habitación para investigar, efectivamente, ahí había una enorme figura blanca, con una capucha, y un rostro realmente espantoso, y estaba bajando las escaleras.
Ese fue el último rato, que los Lutz pasaron en su casa, antes de huir de ella.
Por otra parte, también estaba “Jodie” la cual es, según los demonólogos, un ser demoníaco, que se manifestó en forma de cerdo, seguramente para adoptar una forma menos espantosa, para comunicarse con la niña, Missy.
El cerdo parecía estar casi permanentemente en la casa, porque ocurrieron varios incidentes relacionados con él:
Una vez, Kathy subió al piso de arriba, mientras George estaba echando más leños al fuego; porque no conseguía quitarse el frío de encima.
Kathy pasó a ver a sus hijos, cuando de pronto, vio salir a su pequeña hija, Missy, en el cuarto de costura.
Le extrañó el comportamiento de su hija:
“¿Qué andaría buscando ahí la pequeña?”
La conducta de Missy, hizo que Kathy se parase a observar a la niña, que no le había visto; cuando Missy se dirigió a su habitación, que estaba al lado del cuarto de costura, canturreando; cuando llegó, se sentó en su cama, y la niña, mirando por la ventana dijo:
“¿No es hermosa la nieve, Jodie?”
Kathy le preguntó a su hija, que con quién hablaba, y ella le respondió, que con Jodie, y que era un cerdito, amigo suyo, que sólo ella podía ver.
Y Kathy mandó a la niña a dormir, y ella también se fue a acostar, junto con George y los niños.
Como de costumbre, George se despertó a las 03:15am, y miró por la ventana.
Las puertas de la caseta de los botes, estaban de nuevo abiertas, aunque él las había cerrado antes de irse a dormir; y bajó a cerrarlas, y cuando volvía, vio a su hija Missy en la ventana pero detrás de ella, había un cerdo realmente enorme.
George entró en su casa, y subió rápidamente las escaleras, entró en el cuarto de la niña realmente sorprendido, pero su hija estaba durmiendo plácidamente, ahí no había ningún cerdo…
Otro de los incidentes con Jodie, ocurrió en la sala de estar:
Los niños estaban durmiendo, y George y Kathy estaban frente a los leños, hablando sobre las cosas extrañas que les estaban ocurriendo en la casa.
Kathy estaba asustada y preocupada, y se levantó a abrazar a su marido, cuando de pronto, lanzó un grito, y se echó las manos al rostro.
George se dio la vuelta y vio que, por la ventana, unos ojos rojos, les estaban observando.
George salió fuera, y vio lo que eran claramente, las pisadas de un cerdo, de al menos 100 kilos.
Otro día, la niña estaba en su habitación, hablando y canturreando, cuando Kathy entró, y vio moverse sola, la pequeña mecedora de Missy.
Kathy se asustó, pero no lo hizo notar delante de su hija, que seguía canturreando.
De pronto, Kathy le preguntó a su hija, que con quién hablaba, y la niña le respondió que con Jodie, y le contó lo que él le había dicho.
Jodie le había dicho a Missy, que antes vivía un niño en su habitación, pero se puso muy enfermo y murió.
También le dijo, que Kathy no le gustaba, y que no quería que se acercase a él, y que Missy se quedaría en la casa para siempre, y jugaría con el niño que se puso enfermo y murió.
Al escuchar esto último, Kathy se horrorizó, y le preguntó a Missy por dónde se había ido Jodie.
La niña señaló hacia la ventana, y cuando Kathy miró, había un cerdo enorme lanzando un gemido horrible.
Kathy se puso a gritar histérica, y George se alarmó y subió.
Él también vio al cerdo, y entonces cogió una silla del cuarto de la niña, y la arrojó por la ventana.
Jodie empezó a gritar, y se fue corriendo por la nieve; y la niña posteriormente, hizo un dibujo de aquel ser corriendo en la nieve para describirlo.
Pero resulta que con todos estos hechos, el abogado de Ronald DeFeo, declaró en un programa de televisión del canal Discovery, que él mismo le había contado a los Lutz, muchas de las anécdotas de las cuales, tranquilamente, se pudieron haber valido para idear las famosas “apariciones paranormales”
Weber les dijo, que los vecinos de la casa tenían un gato, que a menudo saltaba a la ventana del segundo piso de la casa, y que de noche, se podían ver sus ojos brillantes, que no tenían nada sobrenatural, y que probablemente, era lo que los Lutz veían.
La casa, también poseía un cuarto rojo, una habitación secreta, que descubrieron Kathy y George un día en el sótano; cuando estaban colocando algunos alimentos en la alacena, que utilizaban como pequeña despensa, cuando uno de los tablones de madera se separó un poco.
Movidos por la curiosidad, George y Kathy empujaron más el tablón de madera, hasta que lo derribaron.
Quedaron los 2 absolutamente perplejos.
Detrás de aquella alacena, había un cuarto aproximadamente de 1,20 por 1,50 metros, completamente pintado de rojo, suelo, y techo incluidos.
Dentro de aquel cuarto, se hallaba una especie de pozo mal sellado, que desprendía un olor nauseabundo.
George consultó los planos de la casa, y ni el cuarto ni el pozo aparecían en ellos.
Posteriormente, George se enteró, de que Ronald DeFeo se dedicaba a sacrificar cerdos, y otro tipo de animales dentro de la pequeña habitación.
Asimismo, un documental del canal Discovery reveló, a través del testimonio de uno de los más íntimos amigos de la infancia de la familia DeFeo, que el cuarto rojo, fue pintado por los mismos hijos DeFeo, para utilizarlo de cuarto de juegos.
Así pues, durante su paso por la casa, Kathy tuvo varios incidentes por los que quedó psicológicamente marcada; uno de aquéllos fueron los fenómenos de levitación:
Durante 3 noches no consecutivas, George se despertó, y vio a su mujer flotando unos dos palmos por encima de la cama.
El primer día, al flotar, su rostro había cambiado, y parecía una mujer de 80 años.
Las arrugas habían marcado su rostro, y su pelo estaba completamente blanco.
Al despertar, Kathy fue corriendo al baño, y al mirarse en el espejo, se desesperó.
Ella y su marido estaban horrorizados.
Por suerte, las arrugas se fueron yendo, y al día siguiente no quedaba rastro alguno del extraño suceso; su piel volvía a ser tersa, y su pelo dorado.
El segundo día de levitación, Kathy quedó marcada por una especie de quemaduras, que iban desde debajo de su pecho hasta el pubis.
Dichas marcas, eran de un color extremadamente rojo, y al tocarlas ardían.
Era como si hubiera fuego.
Ni Kathy ni George, quisieron llamar al médico, por la situación extraña que había producido los daños en la joven.
Además decir, que durante varias noches de su estancia en la casa, Kathy tuvo sueños extraños:
Soñaba que toda su familia era asesinada con un rifle por la noche, o que una mujer mantenía relaciones sexuales con un amante, en la misma cama en la que Kathy estaba durmiendo.
Más tarde, Kathy descubrió, que la mujer con la que soñaba, era la difunta Louise DeFeo, y que efectivamente, había tenido un amante secreto.
Sus sueños se repitieron, una y otra vez, hasta que abandonaron la casa…
Resulta también, que Kathy solía pasar bastante tiempo en la cocina, ya fuera cocinando como limpiando, o simplemente, pasando el rato, o leyendo.
Durante sus largas estancias en la cocina, Kathy había sentido 2 contactos sobrenaturales distintos:
Una vez, se encontraba tomando un café, cuando empezó a oler a perfume barato y dulzón.
Entonces, sintió como algo se apoyaba cuidadosamente sobre uno de sus hombros, y luego le cogía suavemente por la cintura.
Kathy pensó en un contacto tranquilizador, pero aun así, se asustó, porque ahí no había nadie.
Otro de sus contactos, también comenzó con aquel olor a perfume barato y dulzón.
La situación era parecida:
Kathy estaba fregando los platos, y sintió cómo 2 personas distintas le presionaban, pero esta vez, no era cuidadosamente, sino bruscas, y enérgicas.
Como resultado, Kathy dejó de pasar su tiempo libre en la cocina, pues tenía miedo de que esos contactos, pudieran hacerle algún daño físico, como le había ocurrido con las quemaduras, en la segunda de sus levitaciones.
También está la historia de Jimmy, que era el hermano mayor de Kathy, y Carey era su prometida, y posteriormente, su esposa.
El día de la boda de Jimmy, éste fue al 112 de Ocean Avenue, para visitar a su hermana y a su cuñado George.
Jimmy traía consigo un sobre, que portaba $1,500 para su viaje de luna de miel con Carey; y pidió a George que le guardara el sobre hasta el día en que se fueran de viaje, y lo dejó encima de la mesa de la cocina.
Fueron a sentarse a la sala de estar, y cuando volvieron a la cocina, el sobre no estaba.
Lo buscaron por todas partes, les preguntaron a los niños, miraron debajo de las alfombras… pero el sobre nunca apareció, tampoco después del viaje de luna de miel…
Tras su luna de miel, Jimmy y Carey se quedaron una noche en casa de los Lutz.
Ellos durmieron en la cama de Missy, y la pequeña, en una litera plegable en otra habitación.
Mientras todos dormían plácidamente, Carey se despertó con un gran grito; George y Kathy fueron corriendo hacia la habitación, donde Carey y Jimmy estaban durmiendo, y ahí encontraron a Jimmy, abrazando a su mujer, que estaba realmente horrorizada.
Carey dijo, que se había despertado, porque un niño que estaba sentado en la silla de enfrente, le había estado tocando los pies, y que le dijo que le ayudara, porque estaba muy enfermo.
Jimmy intentó tranquilizar a su esposa, diciéndole que habría sido una pesadilla, pero George tocó la silla donde supuestamente había estado sentado aquel niño, y aún estaba el sitio caliente.
Carey estaba tan segura de lo que había visto, que nunca más quiso volver a acercarse al 112 de Ocean Avenue.
George estaba bastante desconcertado con todo lo que estaba sucediendo en su casa, y por eso, se puso en contacto con un amigo suyo, que conocía a Francine, una chica con poderes sobrenaturales; una médium.
Francine nació con velo veneciano, y por eso, supuestamente, tenía esos poderes.
El velo veneciano, es una membrana con la que nacen algunas personas, la cual aparece por encima del rostro; y se dice que las personas que nacen con velo veneciano, son sensibles en temas relacionados con la parapsicología.
Cuando Francine entró en la casa, estuvo manteniendo una charla con George, hasta que ella misma sacó el tema espiritual.
Le dijo a George, que acercase la mano a cierto lugar, y éste lo hizo.
George notaba una corriente de aire frío cerca de la cocina.
Francine entro ahí, y dijo que había un olor extraño, a perfume barato.
Kathy se quedó boquiabierta, pues no había mencionado ninguno de sus contactos en la cocina.
Francine dijo, que en la cocina había un anciano y una anciana, y que posiblemente, habían sido dueños anteriores de la casa, o simplemente decidieron alojarse ahí, después de su muerte, en su casa.
Francine se dirigió al sótano, y dijo que seguramente, eso hubiera sido un lugar de enterramiento, porque notaba, que había gente enterrada bajo el suelo, y que seguramente, alguien hubiera sido asesinado.
Después, sugirió salir del sótano, diciendo que no le gustaba nada ese lugar.
Subió al primer piso, y al acercarse al cuarto de costura, y al de Missy, no quiso entrar.
Dijo que ese lugar estaba lleno de energía negativa, y que no quería entrar.
En el cuarto de jugar de los niños, dijo exactamente lo mismo, y notaba las corrientes de aire frío.
Después de ese breve recorrido por la casa, Francine quiso irse.
En la puerta de entrada, le dijo al amigo de George, Eric, que no quería volver a entrar en esa casa nunca, porque había malas energías.
Otra ocasión impactante para los Lutz, fue cuando Kathy salió a hacer las compras de Navidad, y al volver, entró en el baño, y encontró la porcelana de los váteres recubiertas de una especie de limo negro, y de olor nauseabundo.
Ninguno de los niños había hecho nada en la taza de aquellos váteres, pero Kathy se enfadó, e intentó limpiar aquel estropicio, que no había manera de quitar con ningún tipo de producto de limpieza que Kathy tenía.
Así también, durante los últimos días de su estancia en la casa, empezó a salir una sustancia gelatinosa de color verde, sin ningún sitio de procedencia.
Salía de las paredes, de las cerraduras de las puertas…
Pero al otro lado de cada puerta, no había absolutamente nada.
Por mucho que George, Kathy, o los niños limpiasen, aquella asquerosa sustancia, volvía a salir de nuevo.
El último día que vieron esa especie de gelatina, fue el último día que estuvieron en la casa, antes de huir.
Las pruebas que realizaron los parapsicólogos después de que los Lutz abandonaran la casa, revelaron que aquello era ectoplasma… y que algunos sucesos que ocurrieron en el 112 de Ocean Avenue, eran fenómenos de poltergeist.
La mayoría de ellos, se encontraban en la actividad de las puertas y ventanas, cuando se abrían, supuestamente solas.
Una de las víctimas de esos incidentes fue Chris, que estaba jugando en su habitación con Danny, y de repente, se cerró la ventana cuando él tenía los dedos ahí.
Empezó a gritar fuertemente de dolor, y George subió corriendo.
Libró al niño de la ventana como pudo, y lo llevó al hospital.
Sorprendentemente, los dedos del niño, estaban completamente planos, pero no se había roto ningún dedo.
Otra víctima del poltergeist fue George, que durante 2 noches consecutivas, se despertó a las 03:15am, escuchando bombos, trombones, y platillos en el piso de abajo.
Parecía un desfile militar; cuando entró en la sala de estar, todos los muebles estaban apartados hacia los lados, como si alguien hubiera hecho sitio para hacer, efectivamente, un desfile militar.
En otra ocasión, George experimentó otro suceso de este tipo:
En la sala de estar, tenían un león de porcelana, que de vez en cuando se movía supuestamente solo.
Un día, el león se había movido hasta el suelo, y George tropezó con él.
Al levantarse, tenía en el tobillo, lo que parecía ser las marcas de unos colmillos que le habían mordido…
Curiosamente, el padre Pecoraro, aparte de ser sacerdote, psicólogo, y juez, se dedicaba a realizar su vida como sacerdote, y algunos trabajos relacionados con sus otras 2 carreras.
Sus conocimientos psicológicos, fueron los que lo ayudaron a no perder la cabeza con el asunto relacionado con el 112 de Ocean Avenue.
Aunque los Lutz no se dieron cuenta hasta un tiempo después de abandonar la casa, el padre Pecoraro no quiso volver nunca más a la casa, por las agresiones físicas que le estaban sucediendo.
Le aparecieron unas ampollas en las palmas de las manos, justo en la zona con la que cogía el teléfono al intentar telefonear a la casa de los Lutz.
Las ampollas parecían estigmas.
También, sufrió una fuerte neumonía, que persistió hasta pocos días después de la huida de los Lutz, y pequeños accidentes con su vehículo, cada vez que intentaba acercarse al 112 de Ocean Avenue.
Uno de aquellos días, el apartamento del padre Pecoraro, sufrió un ataque demoníaco, manifestado por un fuerte y nauseabundo olor a excrementos.
El padre Pecoraro sabía de demonología, y ese persistente olor, indicaba que había una presencia demoniaca, relacionada con el lugar, o con él mismo.
Por eso, el padre Pecoraro, quiso desentenderse completamente de todo lo relacionado con los Lutz, y con su casa en Amityville.
El sacerdote declaró más tarde, que en realidad él jamás había pisado la casa, e inclusive, la única vez que se comunicó con la familia Lutz, fue durante una llamada que Kathy le hizo, para contarle sobre una extraña levitación que dijo haber sufrido.
Toda vinculación que se hizo de él con la casa de Amityville, fue deliberadamente sacada de contexto.
Asustados, los Lutz huyeron sin sus pertenencias, para nunca más volver al 112 de Ocean Avenue.
Desde los Lutz, la casa ha ido pasando de dueño en dueño, y ninguno de ellos ha confesado, haber vivido nada parecido.
Por esto, la veracidad de la historia se ha puesto en duda, sin impedir que se considere al edificio, como una de las casas embrujadas más populares del folklore estadounidense.
Muchos creen, que los posteriores sucesos que sucedieron en la casa, los fenómenos paranormales, que supuestamente atormentaron a los Lutz, fueron una máscara para encubrir los verdaderos fines de la mafia, que a la sazón, deseaba quedarse con el dinero de los DeFeo.
Esto se ajustaría perfectamente, dado que todos los que deseaban esclarecer los sucesos allí ocurridos, es decir, demostrar que todo fue una farsa, como quiso hacer el Dr. Kaplan, fueron muriendo uno por uno, misteriosamente…
Algunos parapsicólogos, médiums, y videntes, que entraron en aquella casa, dicen relacionar los hechos paranormales, con unos crímenes que ocurrieron anteriormente en ella.
“A guy kills his whole family.
Doesn't that bother you?”
The Amityville Horror es un film de terror, dirigido en 1979, por Stuart Rosenberg.
Protagonizado por James Brolin, Margot Kidder, Rod Steiger, Don Stroud, Murray Hamilton, John Larch, Nitasha Ryan, K.C. Martel, Meeno Peluce, Michael Sacks, Helen Shaver, Amy Wright, entre otros.
The Amityville Horror, fue la primera película de la saga de la casa encantada de Amityville; y fue un éxito de público a pesar de que fue muy denostada por los críticos de la época, siendo la 2º película más vista en USA en los 70, después de “Kramer Vs. Kramer”
El guión de The Amityville Horror, es de Sandor Stern, basado en el libro “The Amityville Horror: A True Story” de Jay Anson, el cual, está basado en una historia real.
El novelista Jay Anson, se basó en los sucesos acaecidos en la localidad de Amityville para crear su primera, y más famosa novela en 1977, que narra desde los crímenes dentro de la casa, hasta la llegada de los nuevos moradores, la familia Lutz, y el mes que tuvieron que aguantar.
El libro, que consta de 25 capítulos, se ha podido escribir gracias a la ayuda de George y Kathleen Lutz, y a partir de la dura tarea de recordar, día por día, lo que les ocurrió en su casa, y grabarlo en una cinta magnetofónica, para procurar que el “diario” fuera lo más completo posible.
Su novela, se vendió como una “historia verdadera”, y se basa en las experiencias de los Lutz, quienes vendieron los derechos del libro a Anson, para que accediera a algunas de las reclamaciones de los Lutz sobre el contenido.
De The Amityville Horror, se han hecho varias novelas y películas:
1. The Amityville Horror (1979)
2. Amityville II: The Possession (1982)
3. Amityville 3-D (1983)
4. Amityville 4: The Evil Escapes (1989)
5. The Amityville Curse (1990)
6. Amityville 1992: It's About Time (1992)
7. Amityville: A New Generation (1993)
8. Amityville Dollhouse (1996) TV
9. Amityville 2000 (2000) TV
10. The Amityville Horror (2005) Remake.
A día de hoy, miles de turistas se aproximan al pueblo, para contemplar la casa, para disgusto de los vecinos, que sienten que los sucesos les han dado mala fama.
Con todo ello, esta versión, The Amityville Horror, estuvo nominada al Oscar, como mejor banda sonora
Así pues, la historia relata los hechos en una localidad de Amityville, donde el hijo mayor asesina a toda su familia.
Tiempo después, George Lutz (James Brolin) y su esposa Kathy (Margot Kidder) junto a sus hijos: Amy (Natasha Ryan), Greg (K.C. Martel), y Matt (Meeno Peluce), son los nuevos propietarios de la residencia, y sin importarles lo ocurrido anteriormente, intentando adaptarse a su nuevo hogar.
Pero ahora a los Lutz y sus hijos, les espera una pesadilla de 28 días, en la que deberán sobrevivir en la maldita casa de Amityville.
The Amityville Horror tiene un acierto, que está muy bien planteado y desarrollado durante toda la narración:
La historia no se centra solamente, en contar las vivencias de la familia dentro de la casa embrujada, sino que se van presentando las diferentes personalidades que rodean el caso policial, y a una serie de sacerdotes que le van a otorgar un sentido, mucho más profundo e interesante a este relato.
Los momentos que Rod Steiger como el Padre Delaney, son excelentes, no solo en términos dramáticos, como esa primera entrada a la casa, sino actorales, ya que logra destacarse siempre con su imponente personalidad, sobre todo en la escena que discute con sus superiores.
Es así, como The Amityville Horror va introduciendo, además de un paralelismo policial y religioso muy bueno, la vida cotidiana de los personajes, y cómo la casa los va consumiendo.
Son varias las escenas de suspenso que aquí se desarrollan, y muchos los golpes de sonido que harán saltar al espectador.
El simbolismo con el demonio, a las 03:15am siempre pasa algo, y esos destellos que en muy pocas oportunidades se tienen visualmente, con alguna figura fantasmal, los cuales son muy difíciles de distinguir, le dan un toque mucho más terrorífico al relato.
The Amityville Horror no es una cinta que se caracterice por tener altas dosis de sangre ni truculencia, sino que más bien, se decanta por un estilo de generar miedo, a través de la opresión psicológica a la que se ven expuestos los personajes, debido a una extraña fenomenología paranormal de magia negra, que habita en los más recóndito de la casa que han adquirido.
The Amityville Horror no es una película de sustos al uso, sino que intenta crear terror con una atmósfera ominosa, utilizando varios recursos como ruidos u olores extraños, o fenómenos climáticos, pero más que nada, alterando la mente del dueño, en este caso George, interpretado por un ENORME James Brolin, y volviéndolo literalmente loco.
Todo lo que tiene que ser ambientación, y atmósfera de suspenso y terror, esta manejado de manera estupenda, apoyándose en las actuaciones de un sobrio James Brolin, una maravillosa Margot Kidder, y para mí el mejor, Rod Steiger como el Padre Delaney, una de las mejores interpretaciones que he visto, desgarrador aunque no aparece tanto en pantalla.
Su juego con los planos, encadenando varios de un mismo personaje desde distintos ángulos, en ataques frenéticos de energía, así como su impresionante capacidad para la puesta en escena, y el desarrollo de éstas, consiguen que el resultado de The Amityville Horror a nivel puramente cinematográfico, sea de Matrícula de Honor.
“She was shot in the head”
The Amityville Horror es un pequeño clásico; no tanto por su calidad cinematográfica, sino por el precedente que sentaría para todo el subgénero de casas poseídas, que le seguirían con el correr de los años, y que tomarían ideas de aquí, para expandirlas o reciclarlas.
Lo que diferencia en todo caso, a The Amityville Horror, como dije, es su ambientación, aquí moderna e inusual para la época, y el hecho de que estaba, supuestamente inspirada en hechos reales, contados en un famoso best seller de entonces, acerca de la familia Lutz, y su experiencia con demonios, fantasmas, y posesiones en su residencia.
Hoy en día, la fama de dicho fenómeno, ha terminado por eclipsarse bastante, con la mayoría, considerándolo hoy como fraude, y con The Amityville Horror siendo ninguneada, incluso por sus actores, entre ellos, un James Brolin que afirmaba, no creerse un ápice, de lo que el verdadero Lutz le había contado.
Otra cosa que la hace perder puntos ante muchos fanáticos del género de terror, es su general ligereza, y su escasa cantidad de muertes, lo que la hacía perder muchos puntos, ante otros productos sobrenaturales de la época, mucho más brutales, los cuales, tocaban temas similares, con ambientación moderna, y que eran sin duda, mucho más eficientes como cine de terror.
No obstante, salvo la sucesión de incidentes que les ocurren a los Lutz; algunos de ellos, como la visión de ojos demoníacos en la ventana, o el raro comportamiento de los animales de la casa, sirven de excusa para un par de buenos sustos.
Hay una revelación final, que no difiere demasiado de otras películas con tema de “la casa está construida sobre territorio maldito”, pero el libreto, no sabe muy bien cómo manejar el tema.
Una vez descubierta la verdad, los Lutz siguen con su rutina, aún cuando las cosas van cada vez peor.
Incluso, la pareja de amigos de los Lutz, queda descartada, y sepultada en el guion, sin jugar ningún papel adicional; aún cuando sean ellos, los que descubren la historia de la casa, y la chica tenga poderes de médium…
Y lo que realmente opaca a la historia, es la subtrama del sacerdote que compone Rod Steiger.
Es que aquí hablamos de una casa poseída, que afecta a sus ocupantes; pero con la historia del cura, que es atacado incluso en su casa, o en el auto en que se dirige hacia el hogar de los Lutz, pareciera que hablamos de una entidad demoníaca, que va mucho más allá, que es omnipresente, lo cual es inaudito.
Que James Brolin tenga visiones, o accidentes en la casa es una cosa; que Rod Steiger sufra lo mismo, a decenas de kilómetros, es ridículo, y queda en el mero efectismo, que según parece, es un ataque contra la iglesia…
Y es que parece ser, que los demonios se transmiten por las líneas telefónicas para quemarles las manos a los curas, que viven a millas del lugar en donde residen.
Es así, como la historia del cura queda perdida en el limbo, y pierde sentido al final, aunque esto lo podemos perdonar, si no somos muy rigurosos; pero en cambio, el personaje del detective, el de los amigos que llegan a la casa, y ven el esperpento del sótano, o la reacción tan despreocupada hacia todo de los protagonistas, están contadas con tanta superficialidad, y tan poco cuidado, que resulta un sinsentido que aboca en el desinterés, y pérdida de conexión con el espectador, que desde el principio, piensa que el matrimonio debería de hacer algo al respecto, y durante una hora, se quedan anquilosados en la mansión, suceda lo que suceda.
Sin importar lo anterior, lo que más me gusta de The Amityville Horror, es la sencillez de sus efectos especiales.
Al fin y al cabo, es una casa “encantada” que se dedica a volver locos a quienes habitan en ella, no se ven fantasmas, pero las caras de lo que los ven son suficientes.
James Brolin es el “protagonista principal”, perdonen la redundancia, pero es necesaria, y ayudado por una extraordinaria labor de maquillaje, hace un trabajo completísimo, metiéndose en el papel de pies a cabeza, y llevando a cabo, la compleja labor de reflejar con miradas y gestos, lo que su personaje calla en palabras.
Así James Brolin actuando correctamente, con un papel agarrotado, tenso, y contenido, muy acorde al tormentoso rol del padre de familia de los Lutz, que va viendo como se le escapa el control de sí mismo, con los acontecimientos que le están rodeando; y por el otro, Margot Kidder nos ofrece una interpretación solo buena, de una mujer que más que parecer una madre de familia preocupada, cuyos sucesos le sobrepasan, se asemeja más a un papel de mujer independiente, sexual, y carismática, que nada bien le viene al rol que le toca.
La pareja amiga de los Lutz, unos personajes estrambóticos, y fuera de lugar, sobre todo la mujer, una médium que debería ser eje crucial de una parte importante de la obra, que por el contrario, se convierte en un hazmerreír, o el sacerdote y su aprendiz, que pasan sin profundizar.
A destacar, The Amityville Horror contiene algunos fragmentos escalofriantes para el recuerdo, por ejemplo:
La habitación que se llena de moscas, la pesadilla de la madre, ese reloj marcando las 03:15am, ese pozo oculto en el sótano, las paredes chorreando sangre... y cómo no, la discusión religiosa entre los curas.
Dentro de los detalles interesantes, y que nos son del todo desarrollados, están:
El tormento del padre Delaney, que pudo tratarse a fondo, mostrando dilemas teológicos.
La hora de los asesinatos 03:15am.
Jodie, que parece querer advertir a la niña, que va a ser asesinada, como lo fue ella; pero todo eso, es apenas sugerido, y hay que adivinarlo.
Curiosidades:
Los dueños de la casa real, decidieron cambiar las ventanas tipo “ojos malvados” por unas de forma cuadrada, debido a la fama de “casa maldita” que se gano con la película y el libro.
El actor principal, que hace a Ronald DeFeo, estuvo 2 años sin encontrar trabajo, debido a la crueldad de su personaje.
El papel de Margot Kidder, como la esposa, fue el que hizo tras hacer de Lois Lane en “Superman” (1978)
Errores, como la ventana de los pisos superiores, que con tanta alevosía se rompe en la tormenta... en las tomas siguientes está intacta…
A propósito, según las versiones reales de los hechos, esa ventana nunca se rompió.
¿Por qué siempre tienen que ir a buscar al puto perro?
A pesar de los errores y sinrazón que se puedan encontrar, el mayor problema de The Amityville Horror, no radica en su trama paranormal, sino en la humana, porque es en el comportamiento de los personajes, donde este trabajo desbarra.
Empezando por la actitud del sacerdote Bolen (Don Stroud), que no reacciona, pasando por la monja, que viene y se va sin dar explicaciones, o la niñera y su crisis autodestructiva dentro del armario; y terminando con la protagonista Kathy, quien, entre otras lindezas, ve que su marido está pálido y nervioso, y lo único que se le ocurre, es decir que tiene un virus…
¿Un virus que le hace despertarse todas las noches a las 03:15am?
Los niños, desaparecen como a la mitad del metraje, y con ello se desaprovecha el enorme conflicto, que podría suponer, la percepción de los pequeños y el choque con su padrastro.
Pero sobre todo esto, resulta interesante, como The Amityville Horror inspiró a otras películas como:
“The Shining” (1980) y “Poltergeist” (1982); y ciertos guiños cinéfilos de “The Exorcist” (1973) son apreciados aquí.
De hecho, la música de Lalo Schifrin, fue compuesta originalmente para “The Exorcist” (1973), pero William Friedkin la rechazó.
“Jody doesn't like George...”
20 días después de que los Lutz huyeron, los investigadores paranormales Ed y Lorraine Warren, fueron llamados por Marvin Scott, un reportero de noticias del canal 5 de New York, que había cubierto la historia de Amityville, y trabajó en una investigación previa con los Warren.
Ed y Lorraine, son 2 investigadores estadounidenses, de fenómenos paranormales, y autores de varios libros asociados a casos ocurridos en casas encantadas.
Demonólogo él, y clarividente ella; entre sus casos destacan su investigación en Amityville, al ser unos de los primeros investigadores que pisaron la casa.
En la noche del 6 de marzo 1976, la casa fue investigada por los Warren, junto con un equipo del canal de televisión Canal 5 de New York, y el reportero Michael Linder de WNEW-FM.
Durante la investigación, Ed fue empujado físicamente al suelo, mientras se utilizaba un poco de provocación religiosa en el sótano.
Lorraine también se sintió abrumada, por la sensación de una presencia demoníaca, y estuvo plagada de sus impresiones psíquicas, de los cuerpos de la familia DeFeo, esparcidos en el suelo, cubierto de sábanas blancas, y una sensación de estar, físicamente empujados hacia atrás.
Según Ed y Lorraine, el certificado de defunción de la señora DeFeo, marcaba como hora de su muerte, las 03:15am.
Resulta que ese mismo día, y a esa misma hora, en la casa, Ronald había asesinado a los 6 miembros de su familia con un rifle.
Durante el curso de la investigación, Gene Campbell tomó una serie de fotografías infrarrojas de lapso de tiempo.
Una de las imágenes, que supuestamente mostraban un “niño demonio con los ojos brillantes que estaba de pie a los pies de una escalera”
Los Warren creían, que el sufrimiento no había salido de la propiedad con una energía muy negativa y oscura historia.
Y que tal, una historia negativa, fue un imán para los espíritus demoníacos y sobrenaturales.
Los Warren creen, que estas energías impactaron directamente en la vida, tanto a los DeFeo como a los Lutz.
Los Warren lograron recuperar un puñado de posesiones de los Lutz, y la escritura de la propiedad, y los Lutz vendieron el resto de sus pertenencias, y se mudaron a California.
La fotografía, no surgió en el dominio público hasta 1979, cuando George y Kathy Lutz, y Rod Steiger, aparecieron en “The Merv Griffin Show” para promocionar el lanzamiento de The Amityville Horror.
Según el propio George Lutz, aunque nadie se dio cuenta al principio, una de las fotos, contenía algo extraño.
Gene Campbell, un fotógrafo profesional, fue el que instaló la cámara automática en 1976.
Se hicieron muchas fotografías, pero sólo en una, aparece la imagen del niño.
Según George, su hija Missy reconoció al niño de la fotografía, que era el amigo invisible, que solía jugar en la casa.
Aunque los investigadores afirman, que nadie estaba arriba durante todo el tiempo que se capturaban las imágenes, aunque según los expertos, podría ser simplemente, la imagen de uno de los investigadores, Paul Bartz, que tenía un gran parecido con el niño fantasma, y además, llevaba una camisa similar.
Muchos testigos afirman, que Paul estaba en el piso de abajo, mientras se realizaban las fotografías en el piso de arriba.
Expertos en lo paranormal, creen que se trata de un demonio, capaz de cambiar su forma a voluntad, que en ese caso, cambió en la forma de uno de los hijos de DeFeo.
Curiosamente, el objeto más famoso del Museo de lo Oculto de los Warren, la muñeca Annabelle, una muñeca “Raggedy Ann” aparece en el film The Amityville Horror, como la muñeca de la niña de los Lutz.
Inclusive, la distribución de la casa, es muy similar a la casa de los Perron, en el film “The Conjuring” (2013) a partir de una misma investigación real de los Warren, tanto la posición de las escaleras, como la distribución del sótano, habitaciones, la casa a orillas del rio, etc.
Posterior al show promocional para el film The Amityville Horror; hubo enfrentamientos entre unos y otros parapsicólogos:
William Weber, abogado de Ronald DeFeo y el Doctor del Instituto de Parapsicología, Stephen Kaplan contra los Warren, por llevarse la gloria de la noticia.
Por una parte, Weber y los Kaplan decían, que era todo un fraude, mientras que por otro, los Warren, apoyados por la familia, testifican la veracidad del suceso.
Aparecen artículos, de una y otra parte, intentando imponer su opinión sobre la casa, entre medio de denuncias y amenazas.
El abogado William Weber, al ver que las discusiones entre los 2 bandos no llegaban a ninguna parte, decide contratar al experto en parapsicología, el profesor Hans Holzer.
Éste pudo investigar la casa, acompañado de la médium Ethel Jonhson Myers, la cual, gracias a sus poderes psíquicos, lanzó la teoría de que la casa había sido construida, encima de un cementerio indio.
A parte de esto, se descubrió que unos huesos pertenecientes a un jefe indio, habían aparecido a principio del siglo XX.
Mientras tanto, los Kaplan se mostraban escépticos ante las investigaciones de Holzer, e intentaban desmentir sus teorías, y se creó entonces, un nuevo enfrentamiento.
La historia de la casa se propagó rápidamente por el ámbito nacional; Paul Hoffman, que había tenido acceso a la familia Lutz, gracias a Weber, escribió el primer artículo nacional sobre el caso, aunque según Weber, no tenía permiso para escribir ese artículo.
Tanto Weber, Hoffman, como la revista, fueron demandados por los Lutz.
Los Lutz fueron presentados al editor Tam Mossman, quien les recomendó a Jay Anson, un renombrado escritor de películas documentales, para escribir el libro sobre el suceso.
El libro fue publicado en el año 1977, bajo el título “The Amityville Horror: A True Story”, y con ese subtítulo bastante polémico que decía:
“Una historia real”
“Look, the deal was cash.
You know?
Cash”
Después del éxito de The Amityville Horror, el sacerdote que Jay Anson mencionaba, como el que intentó realizar el exorcismo durante la estancia de George y Kathy Lutz en la casa, declaró que jamás había pisado la casa, e inclusive, la única vez que se comunicó con la familia Lutz, fue durante una llamada que Kathy le hizo, para contarle sobre una extraña levitación que dijo haber sufrido.
Luego de esta declaración, se investigaron los reportes del tiempo del día 13 de Enero de 1975, día en que los Lutz abandonaron la casa, y se descubrió que durante esa noche, no hubo más que vientos precipitados, y no una tormenta como afirmaron los Lutz.
Tampoco, se registró ninguna llamada al departamento de policía, como los Lutz indicaron que habían hecho.
Pero sin duda alguna, la inconsistencia que más predomino para considerar la novela de Jay Anson un fraude, fue una declaración hecha por William Weber, el abogado de Ronald DeFeo, quién acusó a George Lutz, de no haber cumplido con su pacto.
Aparentemente, DeFeo había hecho un trato con los Lutz, y con el mismo periodista Jay Anson, para relatar un caso sobre apariciones demoníacas en la casa donde él había cometido los asesinatos.
Esto lo ayudaría a reducir su sentencia, debido a que su investigación podría ser modificada, y el hecho de que había matado sin iniciativa, propia podía ser considerado.
A cambio de ello, los Lutz lograrían tener fama y dinero.
Una contradicción de todo esto, fue cuando George y Kathy Lutz, fueron sometidos al detector de mentiras, resultando “cierto” a todas sus declaraciones en el programa “Good Morning America”
Además, se logró comprobar, que nunca existió un hombre que proviniera de Salem con el nombre de John Catchum, tal como afirmó Jay Anson.
Los 2 únicos hombres con el nombre de John Catchum, fueron identificados:
El primero, nacido en Inglaterra en 1622, dedicado a los juicios, y creyente en brujas.
El segundo, nació en 1780, en Estados Unidos, de descendencia inglesa, perteneciente a grupos religiosos.
Por tanto, no pudo comprobarse fiablemente, si un John Catchum proveniente de Salem, fuera real.
Esto causó más polémica entre la veracidad de la historia.
Más tarde, Ronald DeFeo se quejó del escritor Ric Osuna, acusándolo de modificar por completo, la versión real de los hechos ocurridos en Amityville, en 1974, e incluso, mostró una carta de Ric Osuna hacia Kathy Lutz, donde le decía:
“Ustedes pueden modificar lo que quieran del manuscrito original”
El escándalo continúo, cuando Bárbara y James Cromarty, nuevos propietarios de la vivienda, demandaron a la familia Lutz y a Jay Anson por difamación, además de verse obligados a solucionar el problema de la gran cantidad de personas que visitaban la casa, a raíz de la novela.
Además, ni la familia Cromarty, ni las siguientes familias que habitaron la casa, vivieron fenómenos paranormales, como los que describieron los Lutz.
Esto se convirtió en una razón más, por la que la historia de Amityville puede ser considerada una mentira.
Kathy Lutz falleció el 17 de Agosto de 2004, y George Lutz murió el 8 de Mayo de 2006, en Las Vegas, a causa de un paro cardiaco.
Tenía 59 años.
Ronald DeFeo continúa preso.

“Maybe I am just chasing shadows”



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