The Goonies

“The pirates map, the villainous crooks, the underground caverns, the booby traps, the skeletons, the monster, the lost treasure, and the magic that is...
The Goonies”

Para avivar la mente humana, no hace más falta que mencionar la existencia de un tesoro:
Montones de monedas de oro y plata, sortijas y colgantes de gran valor, orfebrería ejecutada por la mano de artesanos desconocidos, y otros objetos que son testimonio mudo de la riqueza de monarcas olvidados, y reinos desaparecidos.
Desde nuestros sueños infantiles de piratas con patas de palo, que entierran cofres llenos de doblones en alguna isla desierta, hasta las prolongadas búsquedas realizadas por estudiosos y aventureros, ir en pos de la riqueza oculta de antaño, ha inspirado poemas, libros, y largometrajes.
En especial, para los piratas, muchas veces era más fácil conseguir un abundante botín, que lograr llevárselo consigo.
La falta de espacio en sus barcos, el temor a caer en manos de los navíos de guerra, y la lógica desconfianza en piratas de otra hermandad, hacían muy complicado el trámite de guardar los tesoros.
Por lo general, estas riquezas terminaban en manos de los taberneros, o de las prostitutas, o en el fondo del mar, después de algún naufragio.
Han sido pocos los piratas que lograron retirarse a tiempo, para gozar de los capitales adquiridos con sus numerosas andanzas.
Todo esto llevó, a que numerosas islas del Pacífico y del Caribe, tengan la reputación de contener formidables tesoros enterrados en sus playas, o en recónditas cavernas.
El archipiélago de Las Galápagos, El Archipiélago de Recilla-Gigedo, Las Islas de Malpedo, Clipperton, Bancs, o La Isla del Coco en Costa Rica, han sido escenario de numerosas búsquedas, de excavaciones, y de dinamitaciones, en procura de esos legendarios tesoros enterrados.
Aparte de la emoción de hacerse rico repentinamente, una constante en todas las culturas de nuestro mundo, el concepto de hallar tesoros ocultos, como el sueño infantil de encontrar un baúl lleno de riquezas dónde lo marca la “X” en un mapa pirata, ha llevado a muchos aventureros, a gastar capital y vidas humanas en tales empresas.
Desde el tesoro del dragón de Siegfried, hasta la maravillosa cueva de Alí Babá y Los 40 Ladrones, nos empeñamos en creer, que el oro de reyes muertos está a nuestro alcance, aunque dichos caudales estén resguardados por fuerzas que no podemos comprender.
¿Quién no ha deseado encontrar el cofre del tesoro?
¿Descubrir el barco pirata, después de atravesar las peores trampas mortales?
Y es que con más de 1500 satélites activos en órbita alrededor de La Tierra, y la población humana acercándose a los 7 mil millones, se pude pensar, que todos los tesoros han sido ya encontrados.
Pero no es así.
“Just like that last prank about all those little creatures that multiply when you throw water on them?”
The Goonies es una película estadounidense de aventuras, del año 1985, dirigida por Richard Donner.
Protagonizada por Sean Astin, Corey Feldman, Josh Brolin, Martha Plimpton, Joe Pantoliano, Jeff Cohen, Jonathan Ke Quan, Kerri Green, Anne Ramsey, John Matuszak, Robert Davi, Lupe Ontiveros, Steve Antin, entre otros.
The Goonies está escrita por Chris Columbus, basada en una historia de Steven Spielberg.
The Goonies lo tiene todo:
Aventura, acción, intriga, fantasía... y relata el viaje de un grupo de amigos en busca de un tesoro perdido.
The Goonies se ha convertido, en una de las películas de culto de los años 80; no obstante, siempre se barajó la idea de una secuela, pero finalmente, en 2004, se descartó por completo, cuando Warner Bros se reunió con Richard Donner, y los actores; y varios de éstos ya no estaban interesados en el proyecto.
The Goonies se rodó en Astoria, Oregon, EEUU; y gran parte del metraje transcurre en la playa de Cannon Beach, muy conocida por el “Haystack Rock”, es decir, Las 3 Rocas.
El enfoque de The Goonies, es una película infantil, pero las áridas localizaciones y los siniestros decorados, le dan el tono adulto que la ha hecho inmortal para la generación de niños de los 80.
The Goonies gira en torno a Mikey (Sean Astin), un chico que vive en Astoria, Oregon, un pueblo costero de los Estados Unidos.
Su padre, se ve angustiado por los problemas que lo enfrentan a unos inversionistas, que pretenden hacer un campo de golf en el barrio “Goon Ducks” donde viven Mikey y sus amigos, “Los Goonies”, de ahí su nombre.
En una tormentosa tarde de otoño, Mikey pasa el tiempo en su casa junto a sus amigos y su hermano mayor.
Aburridos, suben al desván, donde encuentran una gran variedad de objetos antiguos y extraños.
Entre ellos, descubren sin querer, un mapa que indica la ubicación de un supuesto tesoro, perteneciente a un pirata conocido como “One-Eyed Willie”, desaparecido con su tripulación hace muchos años.
El grupo decide entonces, ir en busca de ese tesoro, que podría solucionar económicamente el problema por el que está pasando el padre de Mikey, y que en caso de no resolverse, podría derivar en la disolución de “Los Goonies” como pandilla, y ellos son:
Michael “Mikey” Walsh (Sean Astin)
Es el líder de Los Goonies, y el que les anima a buscar el tesoro de “One-Eyed Willie”
A pesar de sufrir de asma, y un ligero problema en el habla, es el que siempre contagia a los demás con su entusiasmo, y espíritu aventurero.
Está dispuesto a hacer lo que sea, por salvar los muelles de “Goon Ducks”
Brand es su hermano mayor.
Lawrence “Chunk” Cohen (ENORME Jeff Cohen)
Con tan sólo 11 años, Jeff Cohen era el más joven de los actores.
“Chunk”, como cariñosamente le llaman sus amigos, es conocido por sus fantásticas mentiras, como aquella que les cuenta a sus amigos de Michael Jackson:
“…Vale Mikey, Michael Jackson no vino a mi casa para usar el baño… pero su hermana sí que vino”
Como dato curioso, Michael Jackson, al ser muy amigo de Spielberg, visitó más de una vez el set, de ahí el comentario.
Y sus compañeros, para divertirse, le hacen pasar a “Chunk” por la humillación de hacer el “truffle shuffle” un movimiento enérgico del vientre.
“Chunk” siempre está pensando en comida; y se hace muy amigo de “Sloth”, el desfigurado hermano de Los Fratelli.
Clark “Mouth” Devereaux (Corey Feldman)
“Mouth” es porque no para de hablar.
Siempre está bromeando, y tomándole el pelo al resto de sus compañeros.
Se parte de risa viendo a “Chunk” hacer el “truffle shuffle” y se ofrece a traducir a la madre de Mikey, Irene Walsh (Mary Ellen Trainor) para Rosalita (Lupe Ontiveros), la señora de la limpieza.
Aunque más que traducir, “Mouth” asusta a Rosalita con invenciones como:
“…y esta es la sala de las torturas…”
Richard “Data” Wang (Jonathan Ke Quan)
Es un chico asiático muy creativo, que está siempre inventando interesantes artilugios de todo tipo.
Es un fan de los gadgets de James Bond, y del Inspector Gadget.
Aunque sus inventos no parecen siempre muy útiles, les salvan la vida a los chicos varias veces, a lo largo del metraje.
Brandon “Brand” Walsh (Josh Brolin)
Es el hermano mayor de Mikey, y siempre le está corrigiendo.
Al principio, podría parecer el típico hermano mayor, que siempre machaca a su hermano pequeño, pero enseguida, muestra cuanto le importa Mikey.
Se pasa el día haciendo ejercicio, y le gusta Andy.
Aunque él mismo fue una vez un Goonie, se opone en un principio a la búsqueda del tesoro, aunque casi sin darse cuenta, acaba envuelto en la aventura, y no tarda en sentir el mismo entusiasmo que los demás.
Andrea “Andy” Carmichael (Kerri Green)
Es la popular animadora de la edad de Brand.
No está segura, si le gusta más Brand, o el chico con el que sale, Troy Perkins (Steve Antin)
Se niega a reconocer, que ella también es una Goonie, hasta el final.
Salva a sus amigos con su limitada experiencia en el piano, en una de las trampas más complicadas de “One-Eyed Willie”
Stephanie “Stef” Steinbrenner (Martha Plimpton)
Es la mejor amiga de Andy.
Tiene mucho genio, y es una cabezota como “Mouth”, con quien no se lleva muy bien en un principio.
La primera impresión, es la de la típica “sabionda”, pero acaba mostrando su parte más humana.
Y Los Fratelli:
Es una familia de delincuentes, formada por:
Mama Fratelli (Ann Ramsey), Jake (Robert Davi), Francis (Joe Pantoliano) y Lotney “Sloth” (John Matuszak)
La búsqueda del tesoro, los llevará a todos, a una aventura bajo tierra, escapando de las trampas de los piratas, y de Los Fratelli, que ansía hacerse también con el botín.
The Goonies empieza como si fuera un drama carcelario, aunque rápidamente te das cuenta, que es más bien una comedia algo surrealista, por la familia de bandidos, Los Fratelli, y mucho de aventuras.
Inmediatamente, en unos pocos minutos que suenan a “gloria cinematográfica”, el guión de Chris Columbus, nos presenta a nuestros protagonistas, mientras vamos siguiendo la persecución policíaca inicial.
En poco tiempo, conocemos a “Chunk” y sus fantasías y ganas de comer; a “Data” y sus inventos a menudo inservibles; a Mikey, soñador, y al guapera de su hermano mayor; a “Mouth”…
Todos ellos son el grupo de Los Goonies, que van a desaparecer, ya que alguno tendrá que irse a vivir hacia otra parte.
A no ser que algo cambie:
¿Qué mejor que un mapa del tesoro de “One-Eyed Willie”?
“La mota vienen en primer cajona.
La coca y la rapidez vienen en segundo.
La heroína en el debajo.
Siempre hay que separa las drogas”
Donner filmó The Goonies, prácticamente de forma cronológica, para que eso ayudase a los jóvenes actores.
Del mismo modo, intentó que los actores improvisaran mucho, según sus palabras:
“Ellos venían con grandes ideas, y yo era el primero en oírlas.
Tuvimos mucha improvisación, eran capaces de meterse en sus personajes, y se convertían en un grupo unido.
Eran maravillosos.
Ellos empezaron a ser esas personas.
Había ocasiones, que parecía que no estábamos trabajando.
Sí eso no sucedía en ellos de forma instintiva, sabía que algo estaba mal”
Como dato, para obtener una respuesta más natural de los chicos, al ver por primera vez el barco pirata, Richard Donner explica como lo consiguió:
“Nunca deje que los chicos vieran el barco.
A ellos se les prohibió la entrada en el plató, desde el primer día, desde el comienzo de su construcción.
El día que ellos entran en escena, saliendo disparados y cayendo al agua, se giran y ven el barco por primera vez.
Los traje a todos de espaldas.
Todos sabían lo que iban a ver, pero no tenían ni idea, de lo que iba aparecer.
Y así, cuando ellos se giran, y ven el barco por primera vez, esas son sus reacciones reales”
El barco fue construido a escala real.
Al terminar el rodaje, fue ofrecido a quien le pudiera interesar, pero como nadie se interesó por él, acabó siendo desmontado.
Richard Donner realiza un excelente trabajo de dirección, sorprende ver a un director de la categoría de Donner, realizando una película enfocada al público juvenil, pero The Goonies se beneficia de su sabiduría visual, ejemplos claros de ello, son:
La introducción de todos los chicos, utilizando la persecución de Los Fratelli como nexo de unión.
El plano en el que cada uno de los chicos, dice lo que espera encontrar al otro lado del túnel.
“Chunk” parando una furgoneta, y descubriendo que en ella van Los Fratelli, la cara de Robert Davi, se refleja en el espejo retrovisor.
O el beso de Mikey y Andy a contraluz.
Los chicos actúan con total naturalidad, habiendo siempre, buen rollo entre ellos.
Su estética es propia de la época:
El mayor de todos lleva una bandana; otro lleva un peine, con el que cardarse el pelo de vez en cuando.
Pero los 80, no solo se sienten en la indumentaria, sino también en objetos como:
Las cintas de cassette, la cámara con carrete, la referencia a Michael Jackson, la camiseta de Superman, el guiño a The Gremlins, los efectos especiales, o algún decorado.
En The Goonies hay segundas lecturas a buscar, además de que prima la diversión, un mundo emparentado con la imaginación de los niños, donde todo es posible.
Un mundo donde existen tesoros escondidos tras un mapa, y túneles llenos de trampas, un mundo donde la aventura, espera a la vuelta de la esquina, y donde los niños son los dueños.
Para empezar, la principal característica de la mayoría de las películas de Spielberg, y en especial, las de género fantástico o de aventuras, es que estén protagonizadas por niños, o por “hombres-niño”
Su segunda característica clave, es su visión negativa de la figura paterna, ya que el padre de Steven, abandonó el hogar tras el divorcio.
Así, sus películas están plagadas de familias disfuncionales, en las que el padre no aporta soluciones…
Ciertamente, los personajes están estereotipados:
El guaperas, la rubia tonta, la amiga fea de la rubia, el gordo gracioso, el monstruo entrañable, los malos malísimos... pero cada uno tiene un papel imprescindible en The Goonies, y vienen acompañados de unos diálogos inteligentes.
Sobre todo, quiero hacer una lectura sobre el desarrollo sexual, de niño a adolescente, y de estos a adultos.
The Goonies viene a ser un viaje de aprendizaje y descubrimientos, al estilo de una “road movie” pero con grandes referentes al desarrollo sexual.
De entrada, vemos que cuando los chicos están en casa de los Walsh, a una pequeña pieza de un hombre griego, se le quiebra el pene…
Bueno, eso no dice nada, si después analizamos a cada uno de los personajes:
“Mickey” es un niño que tiene un problema asmático, que logra ser superado en una parte importante del metraje, la cual es, cuando se hace valiente y enfrenta sus temores al decir un parlamento que anima a los demás chicos al fondo del pozo.
Tiene su primer beso con “Andy”
“Mouth” es quien siempre tiene un papel de galán del grupo, siempre acicalándose el cabello, presumiblemente, ya ha tenido experiencias con chicas, lo que demuestra una atracción final, con alguien parecido a él, “Stef”
“Data” es el oriental, inmerso en el mundo tecnológico, presumiblemente el menor del grupo junto con “Mickey”
“Data” al ser tecnológico y oriental, podemos identificarlo en todo esos avances electrónicos que surgían de SONY, y demás productos “Made in…”
Pero no todo es asiático, ya que vemos muchas referencias estadounidenses como la marca “Nike”
“Brand” es el adolescente en etapa hacia la adultez, siempre ejercitando sus músculos, lleva la pantaloneta afuera, en una clara alusión a “Superman”
Siente una gran atracción por “Andy”; si bien antes fue un Goonie, cree que ha superado la niñez, pero es ambivalente.
“Chunk” solo piensa en comer, por tanto, también es la mofa del grupo, y es por eso que siente una gran conexión con “Sloth”, quien es la vergüenza de Los Fratelli.
Podemos interpretar esa “hambre descontrolada” de “Chunk” como el mero consumismo estadounidense, y a “Sloth” como ese gigante llamado “Estados Unidos de América”
Durante el metraje, asistimos a la superación del miedo, las responsabilidades de los actos, la solidaridad, y la fraternidad de la amistad.
Del mismo modo, al crecimiento emocional, está el sexual, sobre todo en la escena de los baños, cuando se deciden a orinar, y delimitan los espacios para “chicos y chicas” y “Brand” dice que él prefiere el de los “hombres” seguido por la mayoría del grupo.
“I like the dark.
I love the dark.
But I hate nature.
I hate nature!”
Otro detalle que pocos conocen, es que The Goonies significó el debut cinematográfico de Josh Brolin; y que de los actores principales, 3 de ellos tristemente, ya no están en este mundo:
“Sloth” (John Matuszak), Mama Fratelli (Anne Ramsey), y el padre, Irving Walsh (Keith Walker)
Como dato, “Sloth” aparece en una escena, con una camiseta de “Superman”; Richard Donner, el director, dirigió la película “Superman” en 1978.
“Sloth” se llama así, porque significa “pereza” en inglés; y así nombrado, por la lentitud de sus movimientos.
The Goonies posee algunas semejanzas con otro film:
“Indiana Jones And The Temple Of Doom” (1984)
La participación de Spielberg, como productor y coguionista es clave, porque le da ese toque aventurero, semejante a Indiana Jones, pero con niños, y las fantasías propias de su edad, pero basados en una necesidad:
La de ayudar a sus padres, en un apuro económico.
Por eso, Spielberg propuso a Ke Huy Quan, quien había participado en “Indiana Jones And The Temple Of Doom” (1984) para que sea “Data”, el amigo chino e inventor de Los Goonies, la pandilla de travesuras infantiles que había creado Mickey.
También, The Goonies tiene una clara referencia a “Gremlins” (1984) cuando “Chunk” llama a la policía, para avisar que sus amigos están en peligro, el agente le dice, que si es como “aquella vez que me dijiste que había unos bichos que se reproducían cuando se mojaban”
Richard Donner y su asistente, hacen un cameo, y son los 2 policías que encuentran a Los Goonies en la playa, al final.
De hecho, cuando al final aparecen los padres de los chicos, algunos de ellos son sus verdaderos padres, mientras otros, no eran actores de reparto, sino eran miembros del equipo.
The Goonies contiene un montón de momentos memorables:
El caos que provocan los chicos al manipular unas tuberías, mostrado con una serie de divertidos gags.
La aparición del barco pirata en la cueva.
“Mouth” traduciéndole a Rosalita, las frases que le dice la madre de Mikey.
“Andy” tocando un piano hecho con huesos de esqueletos.
Mikey abriendo la puerta de su casa con un original invento.
El hallazgo del pozo de los deseos.
La bella escena final del barco pirata perdiéndose en el mar, y un largo etc.
Pero The Goonies también hay errores, los más grandes no precisamente vienen de la producción original:
En la versión original, la mujer que contrata la madre de Mikey es hispana, y se llama Rosalita, pero en la versión española, se le cambió por el de “Rossanna” y se convirtió en italiana, para que la secuencia en la que “Mouth” traduce las frases de la madre de Mikey tuviera sentido.
El italiano de “Mouth” en la versión española, es muy superior a su español de la versión original, donde claramente, Corey Feldman se aprendió las frases fonéticamente.
El cambio de español a inglés, también se realizó con el mapa del tesoro, si uno se fija, verá que las frases están escritas en español, pero como debe ser “Mouth” quien las traduzca, se estableció en la versión española, que el mapa estuviese en italiano.
Todos estos cambios, producen un curioso detalle:
Los Fratelli sí son italianos, y en determinados momentos, hablan en ese idioma, pero cuando “Mouth” está presente, no entiende lo que dicen, un error producido por los horrorosos cambios del doblaje.
El restaurante es antiguo, pero no tanto para que “One-Eyed Willie” construyera la alcantarilla, y si en todo caso fuese el arquitecto, o los de alcantarillado verían las galerías hechas por El Gran Willie...
El videoclip de la canción de Cyndi Lauper para The Goonies, tiene como protagonistas a los niños y a los luchadores WWF de la época:
André “El Gigante”, Roddy Pipper, etc.
El tema principal de The Goonies es “The Goonies 'R' Good Enough” interpretado por la cantante Cyndi Lauper.
En 1985, sacó el disco “The Goonies 'R' Good Enough” en el que incluyó el tema “What A Thrill” que también aparece en The Goonies.
“I am going to hit you all so hard that when you wake up, your clothes will be out of style!”
Volver a ver The Goonies, trae a la memoria los años libres de ataduras de la adolescencia, la libertad de la imaginación, la felicidad de la aventura, y la sensación que sólo la amistad verdadera aporta.
La historia descubre la capacidad de maravillarse, y también, la falta de imaginación que a veces muestran el “mundo adulto” o las diversiones tecnológicas solitarias.
Con el paso del tiempo, The Goonies se ha convertido en la preferida de toda una generación, aquella que se crío en los 80, donde con ojos de niño, uno podía ver una aventura que le gustaría haber vivido:
La búsqueda de un tesoro pirata, sorteando todo tipo trampas y peligros.
Así las cosas, The Goonies marcó un antes y un después en la infancia, y aún a día de hoy, puedo decir sin avergonzarme, que siempre he creído que llevo una parte Goonie dentro de mí, y es que The Goonies no es una película cualquiera, es una película que te marca, te hace querer volver a ser niño cuando la ves de mayor, y desata tu imaginación cuando la ves de niño.
Semejante viaje…
¿Quién se lo querría perder?
Ya en los 80, existían otro tipo de películas.
No tenían grandes efectos especiales, pero uno disfrutaba con ellas.
Simplemente, el hecho de mostrar a un grupo de niños/adolescentes en un propósito irrisorio, y descubrir, sin demasiados miramientos, que ese propósito puede ser real, es algo mágico.
Era el incentivo perfecto, para encaramarse en una búsqueda sinsentido, hacia un algo, no importa que, si el sentido de la aventura prevalecía, y la enseñanza era aún mayor.
Porque no se encuentra en los manuales de la escuela, ni en los reglamentos de la vida:
Se encuentra en el barro, en los golpes, en las escondidas, en la aventura misma.
Claro, The Goonies no es una película didáctica, ni tampoco debe ser un modelo fílmico destinado al museo, para que los niños se aproximen a observarla con curiosidad.
No, el significado se desprende por sí solo, cae de maduro al darse cuenta uno, siendo niño, que para vivir, hay que salir a vivir, a desmantelar la fina capa que cubre el verdadero sentido de la vida:
El respirar aire fresco, el sentarse a contemplar el mundo que pasa impávido entre la rutina y el malhumor.
Esperar que las cosas pasen, es una lección mal dada por algún concursante de la vergüenza.
La vida está ahí, y está para descubrirla, para “Goonear” por ella, para darle un sentido particular:
La vida tiene tantos sentidos, como almas en este planeta.

“Goonies never say die”



Comentarios

Entradas populares