Amor de Hombre
“Ya sé que tienes novio”
La amistad entre el hombre gay y la mujer, en general, heterosexual, aunque no es excluyente, es un clásico de las relaciones humanas que el mundo del espectáculo supo exponer en una amplia gama de variantes.
No todas las amistades son iguales, pero es posible encontrar en este mapa, algunos lugares comunes donde reconocerse.
Dicen que la unión comenzó, al mismo tiempo que las luchas por los derechos de las mujeres y los homosexuales, siendo ambos despreciados y marginados, se cristalizó entre ellos, una simpatía que acabó en complicidad y amor.
Pero, probablemente, se trate de algo mucho menos político, y más cercano a las simples relaciones humanas; es verdad, que esta amistad hubiera resultado imposible en otros tiempos de la historia, cuando las mujeres vivían vidas reclusas, y los hombres ocultaban su homosexualidad.
Salvo en un área, en el mundo del espectáculo.
Porque, allí, la “inmoralidad” estaba dada; y probablemente se trató del primer lugar de incubación de la amistad, entre las mujeres heterosexuales y los hombres gays, que es un clásico verdadero.
Pasan los años, y los estereotipos se hacen más complejos, y se desdibujan.
Pero el par sigue firme, presente en la cultura pop, celebrada, y por supuesto, también con sus problemas.
Así las cosas, la llamada “mariliendre” o “mariliendra” es una expresión española de “marica”, despectivo para homosexual, o de forma irónica, usado para autodefinirse, y “liendre” también de forma irónica, aludiendo a una forma de vida parásita, adherida a su hospedador; y es un término usado para referirse a una mujer heterosexual, que se asocia exclusivamente, con hombres homosexuales y bisexuales, o mujeres cuyos amigos gays, son muy cercanos.
Entre los sinónimos, se pueden incluir:
“Amante del rocío de vientre negro”, “diosa gay”, “merluza”, “hada madrina” o “reja” de Regina, una famosa mariliendre sevillana; inclusive “hermana” o “madre”
Su equivalente en inglés, es “Fag Hag”, el cual se origina en la cultura masculina gay de EEUU, y que históricamente era un insulto, pero también puede ser usado como broma, o de manera positiva.
El término “mariliendre” puede incluso, referirse a una celebridad femenina que es idolatrada y venerada por hombres homosexuales, o por la comunidad gay en general, pero además, también se puede referir a figuras públicas, no necesariamente del medio artístico, que se han manifestado a favor de los derechos de los homosexuales, como:
Judy Garland, que ha sido caracterizada como “mariliendra”, he de ahí, el origen de la frase “Amigo de Dorothy” haciendo referencia hacia hombres homosexuales, como Dorothy fue el personaje que Judy Garland hizo en “The Wizard Of Oz” (1939)
En el argot gay, un “Amigo de Dorothy” o “Friend Of Dorothy”, a veces abreviado “FOD”, es un término usado para referirse a un hombre gay.
La frase se remonta hasta por lo menos La Segunda Guerra Mundial, cuando las prácticas homosexuales eran ilegales en los Estados Unidos.
Era un eufemismo usado para hablar de la orientación sexual, sin que los demás supieran su significado.
Un término similar es “Friend Of Mrs. King” o “Amigo de La Reina”, que se utilizó en Inglaterra, sobre todo, en la primera mitad del siglo XX.
Otras mariliendras famosas han sido:
Elizabeth Taylor, Madonna, y Cher.
Cabe mencionar, que por lo general, el objetivo de algunas mujeres que se asocian con hombres homosexuales, es ganarse la mayor cantidad de amistades a como dé lugar.
Las mariliendres son a veces estereotipadas, como mujeres poco agraciadas o solitarias, que están buscando un sustituto para relaciones heterosexuales, o chicas populares y sociables, de armas tomar, que en secreto sienten atracción hacia hombres homosexuales.
De hecho, muchas mujeres que se identifican como mariliendras, ya que se han involucrado en una relación romántica unilateral, sólo por parte de ellas.
Esta relación, tal como las más positivas relaciones, se desarrolla generalmente fuera de intereses y opiniones compartidas.
Esto ofrece a las mujeres heterosexuales, una oportunidad para participar en una comunidad gay, donde las artes, la moda, y la literatura, son fortalecidas.
La comunidad gay, también ofrece a las mujeres heterosexuales, un ambiente seguro para reuniones o fiestas en libertad, relativa de los no deseados avances sexuales.
En entrevistas con hombres homosexuales, y mujeres descritas a sí mismas como mariliendras, el mayor tema en común, es la seguridad.
Se puede desenvolver una rica relación entre una mujer heterosexual y un hombre gay, sin esa tensión sexual.
La relación con las mariliendras, permite a los participantes, separar la intimidad de la sexualidad.
Por lo general, las mariliendras son muy activas, en lo que concierne a toda la participación con causa gay.
Muchas de ellas, forman parte de un club exclusivo de gays, que incluso llegan a encabezar, lo cual genera ganancias jugosas, para aquellas mujeres empresarias que aprovechan la oportunidad, de abrir un negocio en el que sus principales clientes sean gays.
“Juntos, amor para dos, amor en buena compañía”
Amor de Hombre es una película de comedia española, de temática LGBT, del año 1997, dirigida por Yolanda García Serrano y Juan Luis Iborra.
Protagonizada por Loles León, Andrea Occhipinti, Pedro Mari Sánchez, Armando del Río, Roberto Álvarez, Romá Sánchez, Jesús Cabrero, Sergio Otegui, entre otros.
Amor de Hombre es una obra inteligente, de ritmo ágil, y entretenida, teniendo en cuenta que su fecha de lanzamiento fue 1997, siendo precursora de la aparición, ahora frecuente, de películas que tienen que ver con las relaciones blandas, entre los hombres gay y las mujeres heterosexuales.
Amor de Hombre es también, una rara comedia de temática gay, que está libre de los clichés habituales que encontramos en películas de este tipo, hechas en los EEUU.
Los directores, Yolanda García Serrano y Juan Luis Iborra, quien también escribieron la obra de teatro homónima de la pantalla, nos muestran una cara de la vida gay en España, lo que representa su vida de una forma madura para que puedan interactuar en su mundo, y una vida social que parece ser gratificante.
Amor de Hombre trata la historia de la amistad de un hombre homosexual con una mujer; en la que el actor italiano, Andrea Occhipinti, regresaba a España casi 15 años después del rodaje de “Bolero” (1984), donde trabajó con Bo Derek, y la española, Ana Obregón.
Amor de Hombre sigue las aventuras de Esperanza (Loles León) como mariliendra, y su amigo homosexual, Ramón (Andrea Occhipinti) cuando celebran su 40 cumpleaños, rodeados de sus amigos, todos ellos homosexuales.
Esperanza es una profesora de preescolar, es divertida y cariñosa; y Ramón es un “famoso” y guapo abogado matrimonialista gay, aficionado a los ligues de una sola noche, y que a diferencia de Esperanza, no intenta encontrar al hombre de su vida, ya que es escéptico respecto al amor, debido a su profesión.
Ambos son amigos del alma, siempre están juntos, y lo comparten todo.
Pero todo cambia, a raíz de un accidente de coche, en el que Ramón resulta levemente lesionado.
Y cuando Esperanza le presenta a Roberto (Armando del Río), un profesor de educación física y masajista, para que le trate las secuelas, y Ramón se enamora perdida, y ciegamente de él.
Cuando Esperanza empieza a darse cuenta, de que Roberto no es buena persona, y que no le conviene a Ramón, la amistad entre ambos se resiente, ya que Ramón atribuye sus objeciones, a los celos.
Finalmente, Ramón descubre que Esperanza tenía razón, se reconcilian, y celebran su siguiente cumpleaños juntos, sabiendo que, aunque no tengan suerte en el amor, siempre se tendrán el uno al otro.
Paralelamente a la trama principal, se nos muestran las relaciones sentimentales de los demás amigos.
La trama de Amor de Hombre, tiene el número correcto de estereotipos, personajes, y situaciones creíbles, para hacer que Amor de Hombre funcione en los niveles de cómicos y dramáticos.
La representación inusual de hombres gay como “yuppies” “normales” es decir “cero pluma” y profesionales, como lo son médicos, abogados, y maestros; no peluqueros, maquillistas, y diseñadores, aquí es de agradecer, recordar que estamos en 1997… y que tienen vida propia.
Y en la ecuación, los directores han lanzado a una mujer, Esperanza, que es un típico “Fag Hag” en amistad con Ramón, el hombre que es el centro de la historia, siendo algo poco común.
Ramón depende básicamente de Esperanza, como un medio de apoyo y amistad.
De hecho, la amistad parece ser más profunda de lo que parece en la superficie, siendo Esperanza, una verdadera amiga, que estará allí para Ramón, todo el tiempo, algo que se da por hecho, como se ha demostrado cuando se involucra con Roberto.
Y es que el alma de Amor de Hombre es Loles León, que está estupenda, como la diva de sus amigos homosexuales, en especial con Ramón, y el personaje le viene como “anillo al dedo” y se nota, siendo ella, el verdadero “amor de ese hombre”
Magnífica Loles León, que en la primera media hora, hace que te enganches a su personaje, que va dando muchos matices ante la ramplonería e insulsez de los que le rodean; hombres jóvenes y muy guapos eso sí, pero malos en su interpretación de unas situaciones vulgares, u ordinarias, típicas del mundillo.
Así, el tono de comedia, y la ambientación en la comunidad gay, viene de perlas para acompañar a esa maravillosa mujer, de nombre bien puesto “Esperanza”, en su soledad amorosa a pesar del bullicio que le rodea, muy bien tratado un ambiente gay normal, y sin estridencias, ni plumas.
A lo largo de Amor de Hombre, se hace evidente que, incluso con una incompatibilidad sexual básica, estas 2 personas, realmente se preocupan por los demás, tanto que es poco probable, que cada uno, alguna vez, encuentre una mejor pareja.
Las secuencias en las que cada uno trata de arreglar al otro, con un amante, son hilarantes y conmovedoras.
No obstante, Amor de Hombre respalda una relación, en la que una mujer está en la entera disposición de “la reina del drama histriónico” de un hombre gay…
Ella no tiene vida propia, aparte del ambiente, y está siempre disponible para atender al pobre hombre, que se acuesta con un montón de chicos; pero este se enamora de uno, la deja de lado y regresa cuando descubre que estaba equivocado...
Ninguno de los personajes, se desarrollan o crecen, a pesar de la ilusión de una “amistad amorosa sensible”, que no lo es... tanto, de manera bilateral.
Las feministas se pondrán furiosas con esta caracterización del “todo dar” de esta “Fag Hag” y del hombre gay, narcisista y egoísta, que se aprovecha de ella.
Pensé que Amor de Hombre iba a exponer, lo enfermo era esta relación, que a mí me pasó una vez, sino que se creó un final feliz, de romántica ilusión, así que no puedo dejar de pensar, que los cineastas quisieron darle mucho sentimiento y hacer de Amor de Hombre algo anecdótico o de vivencia, la suya, entre Yolanda y Juan Luis…
Y sin embargo, no es un buen mensaje para estos días.
Sin embargo, rescato que Amor de Hombre muestra el arco iris de las relaciones entre los hombres homosexuales, que van desde el largo plazo con el buscavidas, a buscar un compañero para aprovecharse financieramente; pero lo más importante es que representa el anhelo de la mayoría de los hombres gays, de encontrar un socio de toda la vida, y simplemente ser amado.
Los amantes van y vienen, pero los amigos siempre están cerca, para aconsejar y consolar, para bien o para mal; de ahí que la escena final, resultó conmovedora.
“Me arrastraré, suplicaré, sí; un hombre de verdad”
Amor de Hombre muestra una amistad épica, donde se puede ver, que el verdadero amor existe.
Para la mayoría de los gays que conozco, si no todos, tienen una o varias mariliendres al lado:
Ella te escucha, te aconsejan, salen al ambiente contigo, aman y odian a tus novios con tu misma intensidad...
¿Qué sería de los homosexuales, sin esa mejor amiga que vela por su bien en todo momento?
¿Qué sería de ellos sin las mariliendres?
Y curiosamente, porque alguna, seguro que alguna vez fue tu novia, aunque nunca lo hayas sabido... ya que la relación con las mariliendres, en muchos casos, data de la infancia, o adolescencia, donde crecieron enamoradas, y que “se desilusionaron” al saber la orientación gay, pero que la aceptan y se hacen las mejores amigas.
Normalmente, sus amigos gays, suelen ser las típicas maricas de turno, que se creen graciosos, simplemente por el mero hecho de haber nacido gay, y con una prepotencia, totalmente inexplicable, dada su limitada inteligencia e ilimitado atrevimiento.
Las mariliendres, sin embargo, suelen ser utilizadas, para contar los devaneos de alcoba, y ser paño de de lágrimas, y donde su único objetivo en la vida, es salir cada semana con ellos al lugar de moda.
Por otro lado, la inseguridad de las mariliendres, les hace ser las típicas “mosquitas muertas celosas” que cuando ven que su amigo gay está ligando, de repente, le apetece irse de la discoteca, para comprobar si a su amigo le importa más el sexo o su amistad…
Dicen que el final de las mariliendres es trágico, y triste, condenadas al mal de amores, ya que todas comparan a los chicos que se les acercan con su “perfecto” amigo gay, y por tanto, ninguno les llena, creándose una relación de amor platónico.
Amor de Hombre no te decepcionará, si entiendes que existen otras vidas alrededor, muy cerca, y con pensamientos esenciales, no tan alejados de los tuyos.
“¿Te acompaño o te persigo?”
La amistad entre el hombre gay y la mujer, en general, heterosexual, aunque no es excluyente, es un clásico de las relaciones humanas que el mundo del espectáculo supo exponer en una amplia gama de variantes.
No todas las amistades son iguales, pero es posible encontrar en este mapa, algunos lugares comunes donde reconocerse.
Dicen que la unión comenzó, al mismo tiempo que las luchas por los derechos de las mujeres y los homosexuales, siendo ambos despreciados y marginados, se cristalizó entre ellos, una simpatía que acabó en complicidad y amor.
Pero, probablemente, se trate de algo mucho menos político, y más cercano a las simples relaciones humanas; es verdad, que esta amistad hubiera resultado imposible en otros tiempos de la historia, cuando las mujeres vivían vidas reclusas, y los hombres ocultaban su homosexualidad.
Salvo en un área, en el mundo del espectáculo.
Porque, allí, la “inmoralidad” estaba dada; y probablemente se trató del primer lugar de incubación de la amistad, entre las mujeres heterosexuales y los hombres gays, que es un clásico verdadero.
Pasan los años, y los estereotipos se hacen más complejos, y se desdibujan.
Pero el par sigue firme, presente en la cultura pop, celebrada, y por supuesto, también con sus problemas.
Así las cosas, la llamada “mariliendre” o “mariliendra” es una expresión española de “marica”, despectivo para homosexual, o de forma irónica, usado para autodefinirse, y “liendre” también de forma irónica, aludiendo a una forma de vida parásita, adherida a su hospedador; y es un término usado para referirse a una mujer heterosexual, que se asocia exclusivamente, con hombres homosexuales y bisexuales, o mujeres cuyos amigos gays, son muy cercanos.
Entre los sinónimos, se pueden incluir:
“Amante del rocío de vientre negro”, “diosa gay”, “merluza”, “hada madrina” o “reja” de Regina, una famosa mariliendre sevillana; inclusive “hermana” o “madre”
Su equivalente en inglés, es “Fag Hag”, el cual se origina en la cultura masculina gay de EEUU, y que históricamente era un insulto, pero también puede ser usado como broma, o de manera positiva.
El término “mariliendre” puede incluso, referirse a una celebridad femenina que es idolatrada y venerada por hombres homosexuales, o por la comunidad gay en general, pero además, también se puede referir a figuras públicas, no necesariamente del medio artístico, que se han manifestado a favor de los derechos de los homosexuales, como:
Judy Garland, que ha sido caracterizada como “mariliendra”, he de ahí, el origen de la frase “Amigo de Dorothy” haciendo referencia hacia hombres homosexuales, como Dorothy fue el personaje que Judy Garland hizo en “The Wizard Of Oz” (1939)
En el argot gay, un “Amigo de Dorothy” o “Friend Of Dorothy”, a veces abreviado “FOD”, es un término usado para referirse a un hombre gay.
La frase se remonta hasta por lo menos La Segunda Guerra Mundial, cuando las prácticas homosexuales eran ilegales en los Estados Unidos.
Era un eufemismo usado para hablar de la orientación sexual, sin que los demás supieran su significado.
Un término similar es “Friend Of Mrs. King” o “Amigo de La Reina”, que se utilizó en Inglaterra, sobre todo, en la primera mitad del siglo XX.
Otras mariliendras famosas han sido:
Elizabeth Taylor, Madonna, y Cher.
Cabe mencionar, que por lo general, el objetivo de algunas mujeres que se asocian con hombres homosexuales, es ganarse la mayor cantidad de amistades a como dé lugar.
Las mariliendres son a veces estereotipadas, como mujeres poco agraciadas o solitarias, que están buscando un sustituto para relaciones heterosexuales, o chicas populares y sociables, de armas tomar, que en secreto sienten atracción hacia hombres homosexuales.
De hecho, muchas mujeres que se identifican como mariliendras, ya que se han involucrado en una relación romántica unilateral, sólo por parte de ellas.
Esta relación, tal como las más positivas relaciones, se desarrolla generalmente fuera de intereses y opiniones compartidas.
Esto ofrece a las mujeres heterosexuales, una oportunidad para participar en una comunidad gay, donde las artes, la moda, y la literatura, son fortalecidas.
La comunidad gay, también ofrece a las mujeres heterosexuales, un ambiente seguro para reuniones o fiestas en libertad, relativa de los no deseados avances sexuales.
En entrevistas con hombres homosexuales, y mujeres descritas a sí mismas como mariliendras, el mayor tema en común, es la seguridad.
Se puede desenvolver una rica relación entre una mujer heterosexual y un hombre gay, sin esa tensión sexual.
La relación con las mariliendras, permite a los participantes, separar la intimidad de la sexualidad.
Por lo general, las mariliendras son muy activas, en lo que concierne a toda la participación con causa gay.
Muchas de ellas, forman parte de un club exclusivo de gays, que incluso llegan a encabezar, lo cual genera ganancias jugosas, para aquellas mujeres empresarias que aprovechan la oportunidad, de abrir un negocio en el que sus principales clientes sean gays.
“Juntos, amor para dos, amor en buena compañía”
Amor de Hombre es una película de comedia española, de temática LGBT, del año 1997, dirigida por Yolanda García Serrano y Juan Luis Iborra.
Protagonizada por Loles León, Andrea Occhipinti, Pedro Mari Sánchez, Armando del Río, Roberto Álvarez, Romá Sánchez, Jesús Cabrero, Sergio Otegui, entre otros.
Amor de Hombre es una obra inteligente, de ritmo ágil, y entretenida, teniendo en cuenta que su fecha de lanzamiento fue 1997, siendo precursora de la aparición, ahora frecuente, de películas que tienen que ver con las relaciones blandas, entre los hombres gay y las mujeres heterosexuales.
Amor de Hombre es también, una rara comedia de temática gay, que está libre de los clichés habituales que encontramos en películas de este tipo, hechas en los EEUU.
Los directores, Yolanda García Serrano y Juan Luis Iborra, quien también escribieron la obra de teatro homónima de la pantalla, nos muestran una cara de la vida gay en España, lo que representa su vida de una forma madura para que puedan interactuar en su mundo, y una vida social que parece ser gratificante.
Amor de Hombre trata la historia de la amistad de un hombre homosexual con una mujer; en la que el actor italiano, Andrea Occhipinti, regresaba a España casi 15 años después del rodaje de “Bolero” (1984), donde trabajó con Bo Derek, y la española, Ana Obregón.
Amor de Hombre sigue las aventuras de Esperanza (Loles León) como mariliendra, y su amigo homosexual, Ramón (Andrea Occhipinti) cuando celebran su 40 cumpleaños, rodeados de sus amigos, todos ellos homosexuales.
Esperanza es una profesora de preescolar, es divertida y cariñosa; y Ramón es un “famoso” y guapo abogado matrimonialista gay, aficionado a los ligues de una sola noche, y que a diferencia de Esperanza, no intenta encontrar al hombre de su vida, ya que es escéptico respecto al amor, debido a su profesión.
Ambos son amigos del alma, siempre están juntos, y lo comparten todo.
Pero todo cambia, a raíz de un accidente de coche, en el que Ramón resulta levemente lesionado.
Y cuando Esperanza le presenta a Roberto (Armando del Río), un profesor de educación física y masajista, para que le trate las secuelas, y Ramón se enamora perdida, y ciegamente de él.
Cuando Esperanza empieza a darse cuenta, de que Roberto no es buena persona, y que no le conviene a Ramón, la amistad entre ambos se resiente, ya que Ramón atribuye sus objeciones, a los celos.
Finalmente, Ramón descubre que Esperanza tenía razón, se reconcilian, y celebran su siguiente cumpleaños juntos, sabiendo que, aunque no tengan suerte en el amor, siempre se tendrán el uno al otro.
Paralelamente a la trama principal, se nos muestran las relaciones sentimentales de los demás amigos.
La trama de Amor de Hombre, tiene el número correcto de estereotipos, personajes, y situaciones creíbles, para hacer que Amor de Hombre funcione en los niveles de cómicos y dramáticos.
La representación inusual de hombres gay como “yuppies” “normales” es decir “cero pluma” y profesionales, como lo son médicos, abogados, y maestros; no peluqueros, maquillistas, y diseñadores, aquí es de agradecer, recordar que estamos en 1997… y que tienen vida propia.
Y en la ecuación, los directores han lanzado a una mujer, Esperanza, que es un típico “Fag Hag” en amistad con Ramón, el hombre que es el centro de la historia, siendo algo poco común.
Ramón depende básicamente de Esperanza, como un medio de apoyo y amistad.
De hecho, la amistad parece ser más profunda de lo que parece en la superficie, siendo Esperanza, una verdadera amiga, que estará allí para Ramón, todo el tiempo, algo que se da por hecho, como se ha demostrado cuando se involucra con Roberto.
Y es que el alma de Amor de Hombre es Loles León, que está estupenda, como la diva de sus amigos homosexuales, en especial con Ramón, y el personaje le viene como “anillo al dedo” y se nota, siendo ella, el verdadero “amor de ese hombre”
Magnífica Loles León, que en la primera media hora, hace que te enganches a su personaje, que va dando muchos matices ante la ramplonería e insulsez de los que le rodean; hombres jóvenes y muy guapos eso sí, pero malos en su interpretación de unas situaciones vulgares, u ordinarias, típicas del mundillo.
Así, el tono de comedia, y la ambientación en la comunidad gay, viene de perlas para acompañar a esa maravillosa mujer, de nombre bien puesto “Esperanza”, en su soledad amorosa a pesar del bullicio que le rodea, muy bien tratado un ambiente gay normal, y sin estridencias, ni plumas.
A lo largo de Amor de Hombre, se hace evidente que, incluso con una incompatibilidad sexual básica, estas 2 personas, realmente se preocupan por los demás, tanto que es poco probable, que cada uno, alguna vez, encuentre una mejor pareja.
Las secuencias en las que cada uno trata de arreglar al otro, con un amante, son hilarantes y conmovedoras.
No obstante, Amor de Hombre respalda una relación, en la que una mujer está en la entera disposición de “la reina del drama histriónico” de un hombre gay…
Ella no tiene vida propia, aparte del ambiente, y está siempre disponible para atender al pobre hombre, que se acuesta con un montón de chicos; pero este se enamora de uno, la deja de lado y regresa cuando descubre que estaba equivocado...
Ninguno de los personajes, se desarrollan o crecen, a pesar de la ilusión de una “amistad amorosa sensible”, que no lo es... tanto, de manera bilateral.
Las feministas se pondrán furiosas con esta caracterización del “todo dar” de esta “Fag Hag” y del hombre gay, narcisista y egoísta, que se aprovecha de ella.
Pensé que Amor de Hombre iba a exponer, lo enfermo era esta relación, que a mí me pasó una vez, sino que se creó un final feliz, de romántica ilusión, así que no puedo dejar de pensar, que los cineastas quisieron darle mucho sentimiento y hacer de Amor de Hombre algo anecdótico o de vivencia, la suya, entre Yolanda y Juan Luis…
Y sin embargo, no es un buen mensaje para estos días.
Sin embargo, rescato que Amor de Hombre muestra el arco iris de las relaciones entre los hombres homosexuales, que van desde el largo plazo con el buscavidas, a buscar un compañero para aprovecharse financieramente; pero lo más importante es que representa el anhelo de la mayoría de los hombres gays, de encontrar un socio de toda la vida, y simplemente ser amado.
Los amantes van y vienen, pero los amigos siempre están cerca, para aconsejar y consolar, para bien o para mal; de ahí que la escena final, resultó conmovedora.
“Me arrastraré, suplicaré, sí; un hombre de verdad”
Amor de Hombre muestra una amistad épica, donde se puede ver, que el verdadero amor existe.
Para la mayoría de los gays que conozco, si no todos, tienen una o varias mariliendres al lado:
Ella te escucha, te aconsejan, salen al ambiente contigo, aman y odian a tus novios con tu misma intensidad...
¿Qué sería de los homosexuales, sin esa mejor amiga que vela por su bien en todo momento?
¿Qué sería de ellos sin las mariliendres?
Y curiosamente, porque alguna, seguro que alguna vez fue tu novia, aunque nunca lo hayas sabido... ya que la relación con las mariliendres, en muchos casos, data de la infancia, o adolescencia, donde crecieron enamoradas, y que “se desilusionaron” al saber la orientación gay, pero que la aceptan y se hacen las mejores amigas.
Normalmente, sus amigos gays, suelen ser las típicas maricas de turno, que se creen graciosos, simplemente por el mero hecho de haber nacido gay, y con una prepotencia, totalmente inexplicable, dada su limitada inteligencia e ilimitado atrevimiento.
Las mariliendres, sin embargo, suelen ser utilizadas, para contar los devaneos de alcoba, y ser paño de de lágrimas, y donde su único objetivo en la vida, es salir cada semana con ellos al lugar de moda.
Por otro lado, la inseguridad de las mariliendres, les hace ser las típicas “mosquitas muertas celosas” que cuando ven que su amigo gay está ligando, de repente, le apetece irse de la discoteca, para comprobar si a su amigo le importa más el sexo o su amistad…
Dicen que el final de las mariliendres es trágico, y triste, condenadas al mal de amores, ya que todas comparan a los chicos que se les acercan con su “perfecto” amigo gay, y por tanto, ninguno les llena, creándose una relación de amor platónico.
Amor de Hombre no te decepcionará, si entiendes que existen otras vidas alrededor, muy cerca, y con pensamientos esenciales, no tan alejados de los tuyos.
“¿Te acompaño o te persigo?”
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