La Vie d'Adèle - Chapitre 1 & 2

“Je t'aime passionnément... et je veux que vous calmement...
(Te amo con pasión... y te quiero con calma...)

Siempre hay una resonancia particular en filmes, que buscan hablar sobre el elusivo y complejo tema, de lo que entendemos como:
“amor”
Lo abstracto del concepto, ha sido desmenuzado por infinidad de filósofos, poetas, escritores, científicos, y desde luego, cineastas.
Un primer amor, puede cambiar nuestra vida para siempre.
El descubrimiento del primer amor, para muchos el amor de su vida, o el que le marcará como personas.
Y por eso, ha sido uno de los temas favoritos de la literatura, el cine, la poesía, y otras artes.
Los largometrajes sobre orientación sexual son escasos en pleno siglo XXI.
Quizás sea porque la temática, siempre ha estado marcada por el hito de la censura y ciertos tabúes preponderaban ante cualquier apuesta cinematográfica debutante.
Hasta hoy.
Si entendemos el sexo entre personas que se quieren, como una demostración plena de confianza y afecto en la relación, no hay por qué alarmarse tanto.
Lacan decía, más o menos:
“Ten cuidado con lo que desees, porque estás condenado a no ser feliz en cuanto lo alcances” y no se refería al sexo, sino al amor.
Esto se refiere, a ese mecanismo inconsciente, del instinto de supervivencia, que hace que pongamos la realización final de nuestro ser, en cosas inalcanzables, o que saltemos de un objetivo a otro, cuesta abajo, y sin frenos, hacia:
“La inevitable tragedia de nuestra condición humana”
“Mais j'ai une infinie tendresse pour vous.
Je t'aimerai toujours.
Toute ma vie”
(Pero tengo una ternura infinita para ti.
Siempre lo haré.
Toda mi vida)
La Vie d'Adèle - Chapitre 1 & 2 es una película francesa, dramática, del año 2013, dirigida, escrita, y producida, por Abdellatif Kechiche.
Protagonizada por Adèle Exarchopoulos, Léa Seydoux, Salim Kechiouche, Mona Walravens, Jérémie Laheurte, Alma Jodorowsky, Aurélien Recoing, Catherine Salée, Fanny Maurin, Benjamin Siksou, Sandor Funtek, Karim Saidi, entre otros.
El guión es de Abdellatif Kechiche, y Ghalya Lacroix, basados en la novela gráfica: “Le Bleu Est Une Couleur Chaude” o “El Azul Es Un Color Cálido” de Julie Maroh.
Maroh, es una joven autora francesa, que acaba de terminar el instituto, y que ha sorprendido a todos, con este primer trabajo.
Actualmente reside en Bruselas, donde ha conseguido una beca, y donde se ha celebrado una exposición con sus trabajos.
La trama de “Le Bleu Est Une Couleur Chaude” relata la relación entre una estudiante de 15 años, y una joven universitaria de cabello azul; y nos narra el despertar sexual de la adolescente, el descubrimiento de su homosexualidad, y su primer amor... perfecto, apasionado, de esos que a todos nos gustaría vivir, al menos una vez en la vida, y que no todos conseguimos.
Y es que, a pesar de su juventud, o precisamente por eso, Julie la protagonista de la novela, logra transmitirnos toda la pasión de ese primer amor, gracias a un guión perfectamente estructurado, y un dibujo delicado, preciso, y hermoso, que cautiva desde la primera página; por lo que es imposible, no sentirse identificado con sus protagonistas; porque sería un grave error considerar “Le Bleu Est Une Couleur Chaude” como exclusiva para los homosexuales.
Nos daría lo mismo, que nos contase el enamoramiento de un hombre y una mujer, 2 rudos camioneros, o 2 amebas, lo que importa es como lo cuenta, consiguiendo emocionar desde el primer momento.
Y Julie consigue trasmitir toda la fuerza y la pasión de ese primer amor, a través de la historia de Clémentine, una joven recién llegada del campo a la ciudad, para estudiar en el instituto, y cuyos primeros escarceos con un chico no la satisfacen.
Todo cambia cuando se cruza, por la calle, con una chica de cabellos azules, que la perturba sin saber por qué, y hace que se replantee sus preferencias sexuales, y su vida entera.
A partir de ahí, nos cuenta la historia de enamoramiento de ambas, sin prisas, sin pausa.
Y, una vez consumado, su lucha por ese amor, a pesar de la oposición de la familia de Clémentine, y de sus supuestas amigas del instituto, también la aparición de las dudas, los problemas, los prejuicios, los enfados, las reconciliaciones; pero además, es la historia de 2 jóvenes valientes, que consiguen superar todas esas dificultades.
Desde la misma portada, de “Le Bleu Est Une Couleur Chaude”, podemos comprobar, que el color azul, es uno de los grandes protagonistas de esta historia que transcurre, en su mayor parte, en blanco y negro.
Julie usa el blanco y negro para el pasado, en donde irrumpe con fuerza, el azul, que va ganando fuerza de forma que, al final de la historia, comprendemos:
Por qué es un color cálido para la protagonista.
Ahora, llevada a la pantalla de forma súper sensible, pero sin temor a expresar el dolor de unos seres humanos, llevados por sus sentimientos más profundos en cuanto al amor; en dicho guión, destacan especialmente, los excelentes diálogos de naturaleza cultural que aparecen a lo largo del metraje.
Así, conversaciones de literatura, pintura, arquitectura, o filosofía, aparecen a lo largo del metraje, de forma constante, haciendo las delicias de los que como yo, aman el arte por encima de todo.
Así mismo, están perfectamente delimitados, todos los personajes que aparecen, no sólo los dos principales, lo que da un mayor realismo si cabe a La Vie d'Adèle - Chapitre 1 & 2.
Extraordinaria e intensa; natural y triste; real y sincera; emocionante y larga.
Todos estos adjetivos, y otros cuantos más, podrían usarse para definirla; ya que se nos muestra lo que es la vida, la vida de una persona con muchísimas virtudes, belleza física, dedicación, inteligencia, sensibilidad extrema, cultura...
Pero también con sus defectos, sus debilidades, sus errores, errores que todos los seres humanos cometemos a lo largo de nuestra vida, y que en mayor o menor medida, marcan nuestra existencia de manera más directa, que todas las virtudes que podamos tener.
Una narración lineal contada con tal pasión, que suscita unos sentimientos únicos en el espectador.
La Vie d'Adèle - Chapitre 1 & 2 se estrenó en El Festival Internacional de Cine de Cannes del 2013; donde fue galardonada con La Palme d’Or, tanto para al director, como para las actrices principales.
El Jurado de La Crítica Internacional (FIPRESCI), premió igualmente, a La Vie d'Adèle - Chapitre 1 & 2, como La Mejor Película del Festival.
Ambos premios, llegaron justo en un momento de intensas protestas contra la legalización del matrimonio entre homosexuales en Francia,  por lo que el presidente del jurado, Steven Spielberg, tuvo que salir al corte, para indicar que el premio, no tenía ninguna razón política detrás.
La Vie d'Adèle - Chapitre 1 & 2 está cargada de erotismo y de sensualidad, en cada fotograma, y resulta muy interesante, para acercarse a la experiencia sexual entre mujeres, y ampliar la concepción de sexualidad.
Si bien, La Vie d'Adèle - Chapitre 1 & 2 generó controversia por sus largas y gráficas escenas de sexo, filmadas con “genitales falsos”, ha recibido elogios de la crítica desde su estreno.
La Vie d'Adèle - Chapitre 1 & 2 es una historia de amor, tan real como soñada, tan intensa como emocionante, que cambiará la vida de sus protagonistas para siempre; y que consigue algo tan difícil, como emocionarnos.
Adèle (Adèle Exarchopoulos) tiene 15 años, y sabe que “lo normal” es salir con chicos, pero tiene dudas sobre su sexualidad.
Una noche conoce, y se enamora inesperadamente, de Emma (Léa Seydoux), una joven con el pelo azul, una chica abiertamente lesbiana, y mayor que ella.
La atracción que despierta en ella, una mujer que le muestra el camino del deseo y la madurez, hará que Adèle tenga que sufrir los juicios, y prejuicios de familiares y amigos.
Adèle y Emma se conocen en un momento muy particular en la vida de la primera, aquel en que la joven está descubriendo su verdadera identidad sexual.
Un universo lleno de dudas, de dilemas, de pasos en falso, e inseguridades, condicionado, como ocurre tantas veces, por la presión de la sociedad, representada, en este caso, por sus compañeros de clase, la obligación de agradar a los demás, la de un entorno al que, a pesar de lo transcurrido ya, aún le cuesta digerir lo diferente.
En estas condiciones, Adèle intenta, en un primer momento, adaptarse a lo establecido, forzándose a tener relaciones con otros chicos, como con Thomas (Jérémie Laheurte); pero tras su encuentro con Emma, pronto descubrirá que su vida no va a ir por ahí.
Antes de seguir, conviene como siempre, adelantar los principales puntos sobre los que gira este magistral melodrama, enfocado como apunta su propio título, en las experiencias de una chica llamada Adèle.
En la novela gráfica que adaptan Kechiche y Ghalia Lacroix, la protagonista se llamaba Clémentine, por lo que sin duda, el nombre ha sido modificado, para corresponderse con el de la actriz que la interpreta.
Este detalle corrobora que, Adèle, es el alma de la obra, pese a lo que pueda haberse deducido de su cartel, o de su promoción.
De esta manera, la historia toca desde un doble frente, uno de sus temas principales:
El de la iniciación, y el aprendizaje.
Para ello utiliza una enorme fotografía, que juguetea de manera muy sutil con la gama de colores del azul y el amarillo, tergiversando su significado cromático tradicional, como ya se hacía en el cómic.
Los deseos de Adèle, aparecen representados en azul, así como su estado de ánimo.
Durante El Capítulo 1, recordar que La Vie d'Adèle - Chapitre 1 & 2, está rodada en 2 capítulos, como si de 2 películas complementarias se tratase; apenas existen planos en los que no haya un elemento destacando en color azul:
Un bolígrafo, la ropa de los alumnos de la escuela, paredes, ventanas, uñas, y, por supuesto, el pelo de Emma, cuya primera aparición en pantalla, resulta crucial para el insatisfactorio mundo de nuestra protagonista.
El impacto del azul en este encuentro, es casi religioso, místico, como si de una aparición se tratase.
El pelo teñido de Emma, se vislumbra desde una multitud aburrida, como una salvación, una solución a todos los problemas y dudas que acechan a Adèle, pues no hay nada gratuito en un filme cargado de sutilezas.
Todo cambiará en El Segundo Capítulo, anunciado de manera muy sugerente, mediante el cambio de look de Emma, en un plano que parece no desentonar con lo anteriormente vivido.
En él, advertimos un pequeño cambio, la habitación está iluminada de un amarillo intenso y, a medida que avanza el plano secuencia, vemos que Emma tiene el pelo rubio, su color natural.
A partir de este punto, los tonos amarillos se harán cada vez más presentes en la paleta de colores del filme, aunque los azules permanecerán, para expresar los sentimientos de Adèle, como la pared de la escuela donde trabaja es azul, así como su ropa.
El azul volverá a ser importante en 3 momentos cruciales de esta 2ª Parte:
El momento en que Adèle y Emma se citan en un bar, para intentar reconciliarse, donde Emma aparece tras un azul intenso, mientras Adèle lleva un ajustado vestido azul; el momento de la playa, en el que Adèle parece aceptar su situación, donde se sumerge en el agua que, poco a poco, va adquiriendo tonos azules cada vez más intensos; y el final, en el que la vemos con un elegante vestido azul, mientras la cámara se queda inmóvil, y la deja marchar.
Adèle ha dejado de ser una niña, pero en el camino, ha vivido un carrusel de emociones, que la han llevado a amar, a los demás, y a ella misma, y ser amada, a sentir el placer más intenso, y la ansiedad más profunda, a pasar de la inocencia juvenil al dolor de las experiencias... y nosotros lo hemos vivido con ella.
Una elipsis de varios años que se produce en el centro del metraje, es el elemento de separación entre las 2 partes.
El Capítulo 1, como dije, se corresponde con la efervescencia adolescente, una etapa de emociones desbordantes.
Es un momento en el que una conversación sobre un filósofo muerto, abre nuevas posibilidades intelectuales, y en el que explorar placeres desconocidos, es una forma de autodescubrimiento.
El Capítulo 2, por su parte, nos muestra el inicio de la edad adulta, la asunción de responsabilidades, la necesidad de conciliar las expectativas con la realidad, la comprensión de los límites que las propias elecciones implican.
Es una narración de la formación del carácter, para una época en la que el carácter, se ha convertido en algo disperso, inestable, e incierto, sometido a constantes redefiniciones.
La Vie d'Adèle - Chapitre 1 & 2 es una historia de maduración, a comienzos del siglo XXI, en la que la definición de una “identidad sexual” es un elemento importante de la formación de la personalidad, y las diferencias culturales, entre una clase acomodada culta, y una clase obrera que desconfía del mundo intelectual, determinan las relaciones entre 2 chicas que provienen de entornos tan diferentes.
El sexo, es el terreno de juego más personal en su relación, la cama como el lugar donde las diferencias sociales se anulan, y el hecho de compartir placer físico, es un vínculo puramente personal, en el que por un momento quizás demasiado breve, 2 seres humanos pueden abstraerse de todos los condicionamientos sociales.
La parte final es, simplemente, desgarradora, algo que coloca a La Vie d'Adèle - Chapitre 1 & 2 al nivel de las grandes historias de amor cinematográficas.
La mirada del director, hurga en los detalles, engrandece cosas que normalmente no se ven, consiguiendo ser también, afilada y quirúrgica como un láser.
Esto no es sólo la historia de un amor, es también el análisis despiadado, de cómo las diferencias de las clases sociales, cuenten en el amor, e influyen en su solidez, forma y duración.
El realizador, Abdellatif Kechiche, nos muestra a seres humanos jóvenes, que van descubriendo su sexualidad, a veces aceptándolo sin mayor problema, otros con cuidado del qué dirán los demás; todo muy íntimo y real, durante casi 3 horas, y no cansa absolutamente nada, gracias a un ágil ritmo, y a unas situaciones que nos muestran el abanico de la vida, con sus alegrías, felicidad, y también sus sinsabores, como el desamor, los celos, la soledad…
Como dato a tomar en cuenta para la lectura de La Vie d'Adèle - Chapitre 1 & 2, Kechiche presta especial atención a la boca de sus protagonistas, especialmente a la de Exarchopoulos, mientras come, besa, lame o muerde… por lo que trata al espectador, como un ser inteligente, pues no muestra emociones a través de una “voz en off” o del personaje hablando en solitario, sino a través de ellos mismos, y sus bocas.
La Vie d'Adèle - Chapitre 1 & 2 es, sobre todo, una historia de amor, la historia de un amor adolescente, que se entrega a la pasión con toda la inocencia, la inseguridad, y sin las herramientas necesarias para medir los límites, las fronteras de lo que está en juego.
Adèle se ofrece desnuda a esta pasión, como se entrega quien ha descubierto que el mundo era otra cosa, quien sale, por fin, a la luz.
Y claro, sufre, y mucho.
Será ese aprendizaje, por las bravas, lo que da coherencia y emoción.
“Tu me manques.
Je m'ennuie de ne pas toucher l'autre.
Ne voyant pas l'autre, ne respire pas dans l'autre.
Je te veux.
Tout le temps.
Personne d'autre”
(Te echo de menos.
Echo de menos que no se toquen entre sí.
Al no ver el uno al otro, sin respirar en el otro.
Te deseo.
Todo el tiempo.
Nadie más)
Sin dudas, La Vie d'Adèle - Chapitre 1 & 2 fue La Mejor Película del Festival Internacional de Cine de Cannes, en la que Abdellatif Kechiche, tiñe de sensual e intenso azul, el minucioso estudio quirúrgico del despertar sexual adolescente, que supone la antesala al auténtico amor maduro.
Y como era de esperar, para quienes amamos el cine ARTE, lo hace al más puro estilo, sin despegar la cámara en ningún momento de los cuerpos y rostros que transitan.
El descubrimiento del amor, la fragilidad del deseo, o la percepción existencial del desarrollo físico, son diseccionados con precisión de bisturí, pero ante todo, con abrumadora frescura, y asombrosa agilidad, por esta intensa y hermosa historia de amor.
Provocadoramente erótica, sutilmente carnal, delicadamente veraz, y extremadamente sensible, La Vie d'Adèle - Chapitre 1 & 2 se sumerge en la intimidad de sus protagonistas, capturando fragmentos de vida, sorprendiendo con asombrosas elipsis, articulándose con pasmosa agilidad, a través de largas secuencias, envueltas por diálogos tan interminables como absorbentes, y por descontado, deleitándonos con las características, y tradicionales comidas.
La actriz, Léa Seydoux, coprotagoniza, y completa un buen papel siempre eclipsado por el nuevo descubrimiento del cine francés:
Adèle Exarchopoulos, una figura que empapa la pantalla de un remolino de sensaciones infinito.
Kechiche, exprime a Exarchopoulos hasta la saciedad:
La cámara retrata a la joven actriz, hasta mostrar todas las expresiones y actitudes posibles.
El personaje de Adèle, es seguramente, uno de los personajes más trabajados y pensados de los últimos años, en el panorama cinematográfico.
De parte del guión, hecho por el director, el proceso creativo está estudiado hasta el más mínimo detalle.
Es así como se puede ver a Adèle, en su vida diaria, con una naturalidad y un realismo asombroso, por parte de Exarchopoulos, que lleva el peso, en todo momento.
Desde las escenas en las que come, con fuerza y energía, hasta los momentos de vida social, o de sexo, se pueden palpar los sentimientos más profundos que desprende Adèle.
Pero no se queda atrás la Seydoux, quien pone las bases para que su compañera de reparto, se luzca hasta en el más mínimo detalle.
Ella es la fuerza moral de Adèle, quien ve como su vida cambia de estado de ánimo, dependiendo de su relación con Emma, más grande de edad, más segura en su camino, y más madura para afrontar los hechos.
La simpleza de Adèle permite, que sus rostros y su espíritu, pasen de la tristeza a la alegría, en cuestión de segundos.
Narrada con un estilo casi documental, sin querer añadir nada de su parte, como si el director también fuera espectador de la historia, La Vie d'Adèle - Chapitre 1 & 2 nos contará la inocente evolución de Adèle, desde el descubrimiento de su condición sexual, hasta el amor más apasionado, para terminar con la ruptura de la pareja, y la tristeza más absoluta, por la pérdida del ser amado.
En la narración, el director parece querer hacer hincapié, en la involuntariedad en la participación en su vida, incluso de la propia Adèle, como que los acontecimientos se sucedieran en ella aleatoriamente, y a ella sólo le correspondería vivirlos.
Para ello, se recrea en mostrarnos numerosas veces, a Adèle durmiendo plácidamente, para hacer más evidente su inocencia, y esa ausencia de premeditación en el trascurso de su vida.
Por otro lado, Adèle y Emma, son 2 mujeres que pertenecen a 2 clases sociales diferentes.
Emma pertenece a una clase social acomodada.
Esto se desprende del ambiente, en la capacidad adquisitiva y, de esta, en los gustos, la formación y el comportamiento de su familia, las relaciones que mantienen entre ellos, pues los padres de Emma están divorciados, y parecen más abiertos a aceptar con normalidad las inclinaciones de su hija.
Mientras que, en el caso de Adèle, sabemos que su familia es más modesta y convencional.
Está igualmente en sus ambiciones, en casi cualquier aspecto de su forma de vivir.
Del encuentro entre estos 2 mundos, irreconciliables, parece decirnos Kechiche, saltarán chispas y, pude que, al final, sea esto parte del problema, al que se tienen que enfrentar las 2 amantes.
Adèle y Emma, tienen ambiciones muy distintas en la vida:
Emma quiere ser artista.
Adèle, por su parte, parece conformarse con ser profesora en una guardería; y parece tener un talento especial para la literatura, pero a ella no le importa explotarlo, lo que irrita a Emma, que le reprocha que desperdicie su vida de esa manera.
Pero:
¿Es un desperdicio realmente?
Sin restarle el mérito que merece:
¿Por qué una cosa, es mejor que la otra?
Adèle es más emocional, y Emma más cerebral.
Ambas asumen diferentes roles reconocibles, totalmente reflejados en 2 escenas:
Adèle organiza una gran fiesta para los amigos de Emma.
Ella es la que prepara, cocina, atiende, sirve, y cuida a los invitados, mientras Emma, se limita al papel de protagonista, y anfitriona de la fiesta.
Después, Adèle recoge todo, mientras Emma la espera leyendo en la cama.
En la relación, en el lado emocional, Emma domina, y Adèle muestra más su dependencia…
La otra escena, es la ruptura, la manera en que Emma se dirige a Adèle, cómo la descalifica, y cómo la echa de casa.
Es decir, Adèle y Emma, se comportan como una pareja heterosexual de toda la vida, y además, no muy moderna.
Para terminar, quisiera mostrar otra interpretación personal, de lo que ocurre entre las 2 mujeres.
Como ya he repetido hasta la saciedad, a Adèle no le importa sacrificar todo por el amor a Emma, lo más importante de su vida con mucho.
Sin embargo, Emma es una mujer que prefiere hallar el equilibrio entre todas las partes de su vida.
Emma tiene amigos, tiene relaciones sociales trabajo, tiene una carrera artístico-profesional como objetivo, que va consiguiendo poco a poco, y tiene pareja.
Ninguna de todas estas cosas, destaca muy por encima de las demás.
Quizá ligeramente lo hace su carrera profesional, pero no estoy seguro...
En definitiva, Emma considera que, hallar este equilibrio, es la virtud de la vida.
Y por eso siempre le hace tanto hincapié a Adèle, para que expanda sus proyectos profesionales.
Por el contrario, pese a reconocer que el sexo/amor era distinto, más intenso, mejor, con Adèle que con su última pareja.
No quiere abandonar a ésta última, pues con ella, sí ha conseguido desarrollarse en los demás ámbitos, véase la exposición de arte final…
Adèle es completamente distinta.
La virtud para ella, no es el equilibrio entre todas las facetas, sino el amor.
Amar perdidamente como sujeto, y ser amada como objeto.
Y por eso, no sale con sus amigos de siempre, no sale con sus compañeros de trabajo, no tiene contacto con su familia, no tiene aspiraciones profesionales, más allá de aquellas que le permitan vivir, y no desarrolla su arte literario.
Su relación parece imposible:
Emma ama el término medio de todas las cosas, y Adèle ama únicamente el amor.
Por ello, La Vie d'Adèle - Chapitre 1 & 2 es una pequeña obra de arte, que muestra un trabajo excepcional por parte del trío director-actrices.
Prueba son las escenas de sexo, apasionadas y sentidas, que evidencian el entendimiento de 2 actrices que encajan a la perfección.
Comprometidos con una película que identifica al espectador, que queda asombrado por un realismo plasmado en la emoción y el amor.
Sin ningún lugar a dudas, Kechiche, Seydoux, y especialmente Exarchopoulos, quedarán marcados por un filme liberador.
Esta historia lineal, que dura unos 10 años en la ficción, y unas 3 horas dentro del cine, peca quizás de su duración, pero engancha y vuela por la intensidad que propaga en cada minuto de metraje.
“Je voulais savoir, si c'était la première fois que vous goûté...”
(Quería saber, ¿Cuándo fue la primera vez que probaste...?)
Criticar La Vie d'Adèle - Chapitre 1 & 2 porque nos muestra escenas de sexo, es como criticar una película de acción, porque tiene disparos, o una comedia porque tiene chistes…
Lo lógico y normal en una película que nos cuenta una relación de pareja, es mostrarnos esa relación, y eso incluye muchas cosas, entre ellas sexo, y en La Vie d'Adèle - Chapitre 1 & 2 nos encontramos con todo eso.
Pero las polémicas, como los premios, hay, y también son un arma de doble filo.
Y es que, lo que en principio podría parecer una ventaja, y más en un mundo como este, en el que la guerra por mantenerse en cartelera es atroz, puede tornarse perjuicio, en cuanto el público empiece a percibir, que nada de lo prometido, o lo esperado, o lo que uno se imaginaba que, a consecuencia de lo dicho sobre ella, va a dar la película, se cumple.
¿Y qué es lo que espera ese espectador, después de tanto alboroto mediático?
A veces nada específico, concreto.
Tan sólo lo extraordinario, lo soberbio, lo sublime.
Si no:
¿A qué venía, entonces, tanto ruido?
El sexo.
Imposible rehuir a este aspecto de la relación entre Adèle y Emma.
Así lo espera uno, a medida que va avanzando el metraje.
La vida de Adèle, la misma Adèle, interpretada por Adèle Exarchopoulos, exuda sensualidad por todos los costados, esa pulsión sexual, la atracción irrefrenable, el deseo que casi desde el primer encuentro fortuito, se desprende entre las 2 protagonistas, aquí de nuevo, cobran importancia los primeros planos de las actrices.
Deseo que explota, inevitablemente, en las secuencias que mayor polémica han causado entre la crítica.
Kechiche no se arredra ante la tarea que tiene delante, y nos muestra a 2 mujeres, sencillamente gozando del placer sexual, de sus cuerpos, y si bien, en algunos momentos la coreografía de estas secuencias, o instantes de la relación entre las 2 chicas, nos puede parecer “exageradas” o que roza los motivos de una producción porno, con esos orgasmos tan naturales, a menos que uno sea un zoquete, resulta fácil entender de qué se está hablando.
Y es que en las relaciones, de cualquier clase, aparte de los sentimientos, las emociones que se ponen en juego, el sexo cumple un papel importante.
Es la carne por el placer de la carne, el cuerpo por el placer de disfrutar de otro cuerpo, el sexo por el sexo.
Follar o culiar.
Así es, nos quiere decir Kechiche.
Y al que no le guste, o no le interese, que mire hacia otro lado...
El director, decide dedicarles tantos minutos a las escenas de sexo, como importancia tienen en la vida de Adèle.
Y es que la relación sexual, “incómoda”, mecánica, que tiene con un muchacho que le gusta, dura apenas unos segundos.
La relación sexual que tiene con Emma, llena de pasión, de amor, y de entendimiento, dura cerca de 10 minutos.
Y la relación sexual que le cuesta la relación a la pareja de ellas 2, ni siquiera aparece en pantalla, no es importante.
¿Y la gente solo se fija en el sexo?
En La Vie d'Adèle - Chapitre 1 & 2, el sexo tiene un peso similar al que tiene en cualquier relación de pareja, y para mí, su presencia está igual de justificada, que la de cualquier diálogo, sonrisa, beso, caricia, o mirada entre las chicas.
Ya está bien de tanto tabú, el sexo es algo bonito, bello, agradable, placentero…
¡Y natural!
¡Es algo que hacemos todos!
Basta ya de tratarlo como si fuera un delito.
Bastante infravalorado está el sexo en las películas, con respecto al peso que tiene en la vida real, como para encima, criticar un largometraje que incluye unas cuantas escenas.
Es una película de amor, pasión, y sexo, y eso es lo que muestra, ni más ni menos.
¿Morbo?
Sí, el primer revolcón entre las 2 enamoradas, como prácticamente todas las demás escenas, es historia “'viva”', nunca mejor dicho, del Séptimo Arte, pero no hay intenciones morbosas detrás, a menos que sean los feministas/machista o los pornógrafos que busquen la quema de la obra o el sobo liberador...
¿Sentimientos?
También y a flor de piel.
Pero tampoco hay sentimentalismo.
¿Lecciones?
Incontables, pero ni mucho menos hay voluntad aleccionadora, lo cual me pareció algo genial.
Sin embargo, la polémica ha salido de nuevo a la luz en los últimos días, con la presentación de La Vie d'Adèle - Chapitre 1 & 2 en festivales, tras declaraciones tanto de Seydoux como de Exarchopoulos, sobre los métodos crueles y desmesurados de Kechiche, en el rodaje.
Ambas han confesado por ejemplo, que se alargó innecesariamente, durante varios días, la filmación de la tan comentada, y primera escena de sexo entre ellas, o que en otra escena, en la que ambas tienen una discusión, su director le pidió a Seydoux, pegar de verdad a Exarchopoulos, y que ésta llorase también de verdad.
Durante la promoción de La Vie d'Adèle - Chapitre 1 & 2 en Cannes, los 3 parecían llevarse muy bien, pero ahora se ha derrumbado la obligada fachada, y al parecer, las 2 actrices, que valga la redundancia, son heterosexuales, y el director, no pueden ni verse.
¿Es La Vie d'Adèle - Chapitre 1 & 2, la mirada masculina de una relación lésbica?
¿Por qué no disfrutarla como otra plasmación del primer amor?
La propia autora de la novela gráfica, no se ha sentido en absoluto identificada con la manera de mirar del director.
Las escenas de sexo, que son absolutamente reales y detallistas, la primera con una duración cercana a los 10 minutos, y que explican realmente, cómo es esa relación en todas sus dimensiones.
Y es que nunca se ha mostrado en el cine, cómo es el amor, la pasión, y el sexo entre mujeres en la cama, como en La Vie d'Adèle - Chapitre 1 & 2, y cómo todo ello influirá en lo que irá ocurriendo a continuación.
Sin embargo, Kechiche evita por completo, el ámbito de la condición gay, y se sitúa siempre, en la historia de amor entre 2 personas, lesbianas o no, y da la impresión de entrar como pocos, en los sentimientos de las mujeres en general.
Es decir, La Vie d'Adèle - Chapitre 1 & 2 no es una oda al lesbianismo…
Ciertamente las escenas de intensa actividad sexual, hacen un ejercicio incomodo de voyerismo en el público, en poco tiempo, trascienden de la mera y vulgar representación preciosista y segura de filmes hollywoodenses, perforando con su abrasivo realismo, deshaciendo el mito de la pornografía gratuita.
Quizás la óptica sea masculina, como acusan algunos, pero la entrega y pasión, no podrían ser más femeninas.
En el comic original, a modo de curiosidad, cuando las 2 amantes están compartiendo habitación e intimidad, bajo el techo de sus muy tradicionales padres, son descubiertas, y arrojadas prácticamente a la calle, por practicar sexo pecaminoso.
Esto en La Vie d'Adèle - Chapitre 1 & 2 se ha evitado.
Y toda la segunda parte, es bastante más libre respecto al comic.
Kechiche ha buscado otra forma menos drástica de contar la historia.
Por fortuna, a pesar de relatar una historia lésbica, ésta no es una película gay militante, como dije.
Adèle y Emma participan en un “Gay Pride”, pero ninguna proclama es lanzada por Kechiche, al menos explícitamente, ningún mensaje.
La homosexualidad es presentada, como un dato existencial como cualquier otro, eso es todo.
La parábola de Adèle, no sigue ningún modelo a priori.
No es psicología, ni sociología, ni moral.
Es en cambio, un movimiento impredecible, orquestado por variables ocasionales, el fluido combinarse entre un impulso individual, y un estado de cosas.
Libertad y materia.
Cuerpos, tiempo, y espacio.
La Vie d'Adèle - Chapitre 1 & 2 es un excelente retablo, sobre el paso de la adolescencia a la edad adulta.
Esta es la historia de la obra.
El verdadero rechazo, el dolor del que hablábamos, el desengaño, el alto precio de los errores, el vacío profundo, la soledad; y encuentra una sólida cohesión temática, en el tema del destino, y el llamado “sentido de predestinación”
Utilizando la óptica existencialista de Jean-Paul Sartre, La Vie d'Adèle - Chapitre 1 & 2 niega todos los valores, o principios existentes, para inventar un nuevo código trágico, en el que la tragedia, no en un sentido melodramático, es eterna, y donde la casualidad no existe.
Este fatalismo romántico, permea la visión de nuestras protagonistas, y eventualmente sella su propio destino, uno de cambio predeterminado y perpetuo, que cuando se desea alterar, activa mecanismos regresivos infantiles.
Nótese la devastadora escena en el café, cerca del final, donde Adèle aferrada neuróticamente a Emma, mete los dedos de ésta a su boca.
Una demanda neuróticamente infantil, que inspira una amarga ternura.
La Vie d'Adèle - Chapitre 1 & 2 gira alrededor de una dulce y dolorosa confusión, la del porvenir trágico, en el que Adèle va de la curiosidad, y posterior explosión sexual, a una regresiva implosión emocional.
Más allá del amor, y antes que éste, está el candor de un beso, que no respeta convicciones de ningún tipo.
Quien acepta su destino, es valiente, quien se aferra a cambiarlo, un cobarde.
Adèle siempre habrá de tomar el camino de la valentía.
Como únicos puntos negativos, que le han sido reprochados a Kechiche, son la lentitud, que hace que dure 3 horas, y las numerosas escenas de sexo excesivamente explícito, y bastante largas, quizás para hacer redundante, un gran amor ya de por sí evidente.
Tal vez lo peor de todo, será el momento en que termine, y sigamos sin ver el punto de la supuesta vida posterior de Adèle.
Yo he visto muchas películas de temáticas similares, y se comete el mismo error, construir por entero la narración, al hecho de que es una relación homosexual, y el espectador termina por rechazarla…
¿Por qué sus amigos la juzgan por ser lesbiana, cuando tienen en el grupo, a un chico gay?
De hecho:
¿Qué le pasa a ese amigo, y al resto de personas del grupo?
¿Por qué desaparecen de repente?
¿Qué sucede con los padres de Adèle, y por qué les esconde su sexualidad?
¿Qué es del “novio” con el que engañó a Emma?
¿Cómo afecta todo esto a su trabajo como profesora, del que vemos mucho sin nada interesante que aportar?
La escena del café, en la que quedan las 2 a solas por última vez, Adèle le coge la mano, y la pone en tu entrepierna, y empiezan a besarse con una pasión y una locura infernal, me parece estupendo pero...
¿En medio de un café y nadie se dio cuenta?
Muchos critican de Kechiche, que se ha centrado demasiado en el sexo, y poco en el amor.
No estoy seguro, de hasta qué punto obvia cosas, y exagera demasiado otras.
Por esa razón, quizás, tengo tanta curiosidad por saber, cuánto habría cambiado La Vie d'Adèle - Chapitre 1 & 2, si hubiese sido dirigida por una mujer.
Esperemos que algún día, nos dejen ver el montaje que dura 5 horas; como ya dijeron sus responsables, no sigue los pasos de la novela gráfica de Julie Maroh, sólo la toma como base.
Por ello, unos echaron de menos, algunos momentos como cuando los padres de Adèle se enteran de que su hija es lesbiana…
Este era uno de los pasajes destacados de la novela, y no aparece, ya que se dice que sí se grabó, afirmado por Adèle Exarchopoulos.
“J'ai essayé les deux.
Je suis sorti avec les gars, les filles, et j'ai réalisé que je préférais les filles.
Pour sûr”
(He intentado todo.
Salí con chicos, chicas, y me di cuenta, de que prefería las chicas.
Por supuesto)
Así, La Vie d'Adèle - Chapitre 1 & 2 cuenta una historia mil veces vista en cine y literatura:
El primer amor.
El cruce de miradas, el encuentro, el enamoramiento, y la seducción, la explosión de la pasión, el éxtasis, la rutina de pareja, las frustraciones, y los sueños rotos, los miedos, e infidelidades, la ruptura dolorosa, y el reencuentro triste…
Es una historia, sobre la veracidad de los sentimientos.
No somos seres racionales, como nos han intentado hacer creer los filósofos durante demasiado tiempo.
Somos ante, todo seres sentimentales.
La Vie d'Adèle - Chapitre 1 & 2 toca el tema del derecho a la libertad sexual de las personas, desde la identidad a la orientación.
Y cómo los prejuicios y el desconocimiento, coartan las libertades de las personas, ejerciendo una fuerte presión sobre quienes se muestran diferentes a la media establecida, y socialmente admitida.
Alrededor de La Vie d'Adèle - Chapitre 1 & 2 se tocan un montón de temas, muy bien llevados:
La importancia de la escuela pública, y el respeto por un espacio como es la clase.
Cómo la creatividad y el arte, enriquece la vida de los personajes:
La escritura y la pintura.
La complejidad de las relaciones y las emociones.
La actualidad de una sociedad inmersa en la crisis.
La riqueza que genera una sociedad multicultural, con el reflejo de las distintas identidades sexuales, y modelos de convivencia… pero también, las dificultades y contradicciones.
Cine libre de tópicos... y fantásticamente subyugado a la realidad.
Así habla el cine, sin enfrentamientos, sin política, pero mostrando en imágenes, la realidad social.
Ésa que nadie puede detener, ni la mayor de las manifestaciones.
El tema de la educación, la transmisión de conocimientos, y en un mundo dominado por la acumulación, el no pretender más de lo que se es, el camino de Adèle, es un ejemplo a seguir.
Lucha contra lo que nos imponen los demás, optar, equivocarse, intentar seguir el camino, deshacer lo andado, todo está en La Vie d'Adèle - Chapitre 1 & 2.
El amor, la amistad, las dudas, el miedo, la certeza, y el sexo, todo está filmado, con mucho respeto, pero explícita, y artísticamente, digamos, muy iluminado.
Tanto es así, que en ciertos estados de los EEUU y Latinoamérica, no llegará a estrenarse por sus escenas de sexo, y corre el riesgo de ser censurada, o de experimentar limitaciones en su distribución, y es una pena.
Los tintes de dolor, amor, felicidad, lágrimas reales, conversaciones intensas, y variopintas situaciones, que juegan con la fuerza emocional de un espectador que se tiene de indiscreto por momentos, constituyen en una obra del Séptimo Arte diferente, a unas alturas del cine que se creía difícil lograr sorprender.
Al terminar La Vie d'Adèle - Chapitre 1 & 2, simplemente pude pensar, en que probablemente, no volvería a ver nada igual en mucho tiempo, o a menos que tengamos que esperar los Chapitre 3 & 4...
Con un te quiero apasionadamente... y te quiero apaciblemente...
Puede que el amor eterno sea eso.
Esta mezcla de paz y de fuego, pues la vida continúa.

“Je suis heureux.
Je suis heureux avec toi, comme ça.
C'est ma façon d'être heureux”
(Estoy feliz.
Estoy contenta contigo, de esta manera.
Es mi manera de ser feliz)



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