Hulk

“You're making me angry.
You wouldn't like me when I'm angry”

The Hulk es un superhéroe de la compañía estadounidense Marvel Comics, creado en 1962 por Stan Lee y Jack Kirby.
The Hulk apareció por 1ª vez en el # 1 de la revista de comics “The Incredible Hulk”, en mayo de 1962.
La palabra “Hulk” significa literalmente en español, “armatoste”, que es un mueble tosco o mal hecho, pero también, se usa para designar a alguien corpulento e inútil.
De hecho, el nombre del personaje no es “Hulk”, sino “The Hulk”, ya que en su 1ª aparición en el comic, los militares usan este nombre para definir a “El Armatoste”
En la primera historieta, The Hulk era gris en vez de verde; Stan Lee, escritor y editor en jefe, había querido un color que no sugiriera ningún grupo étnico en particular.
El colorista Stan Goldberg, sin embargo, insistió a Lee, en que la tecnología del momento no podía presentar el color gris claro de forma correcta, dándose diferentes tonos de gris, e incluso verde.
A partir de la edición del nº 2 de julio de 1962, Goldberg directamente pintó la piel de The Hulk de color verde.
La historia del increíble Hulk se inspira en “El extraño caso del Doctor Jekyll y el Señor Hyde” para tratar la dicotomía existente, entre el intelecto avanzado del Dr. Banner, y la mente sencilla y emocional de The Hulk, tratado en las historias de los años 60 y 70.
Otra influencia directa en el personaje, es la película “Frankenstein” de los Estudios Universal de 1931, en la que se persigue con furia al monstruo de fuerza prodigiosa y mente infantil.
La serie original The Hulk, fue cancelada después de 6 números, con fecha de cubierta de marzo de 1963.
Lee había escrito todas las historias, con Kirby dibujando los 5 primeros números, y Steve Ditko el 6º.
Ese mismo mes, el personaje fue estrella invitada en el n° 12 de “Fantastic Four”, y en noviembre, se convirtió en miembro fundador de “Avengers”, regresando como antagonista del grupo, en los n° 3 y 5, de enero y mayo de 1964.
En julio, The Hulk fue estrella invitada en el n° 14 de “Amazing Spider-Man”
The Hulk gira en torno al científico Robert Bruce Banner, quien estaba probando una de sus últimas invenciones:
“La Bomba Gamma”
Justo en el momento de una explosión, un joven llamado Rick Jones, se adentró en la zona de pruebas del ejército donde iba a ser lanzada la bomba, y un atónito Bruce Banner se dio cuenta, y fue a salvarlo.
Quedaban ya muy pocos segundos para el impacto de la bomba, cuando Bruce Banner le dice que se aparte de la zona, pero Rick no le escucha.
Entonces Bruce le tira a una zanja para salvarle, pero cuando se va a meter él, explota la bomba, y la radiación le da de lleno.
Esta radiación se queda para siempre en el cuerpo de Bruce Banner.
Cabe señalar que en las primeras historias, Banner sólo se convertía en The Hulk cuando salía La Luna, pero conforme fue avanzando la serie, sus trasformaciones se debían principalmente a estados de furia, excitación, y miedo, todas activaciones del sistema nervioso, lo que le convertía en un ser monstruoso, dotado de una fuerza súper humana, capaz de dar saltos de cientos de metros, aguantar la respiración debajo del agua y en el espacio.
Además, su cuerpo dependiendo de las necesidades, puede mutar para adaptarse a las situaciones nuevas, y aguantar el disparo de un misil en su pecho.
The Hulk es perseguido y acosado en todo momento por el ejército.
Su interés romántico por Betty Ross, hija del General “Thunderbolt” Ross, el contrincante de The Hulk dará pie a muchas aventuras.
Aunque gracias a estas actuaciones, The Hulk logró cierta popularidad, su carácter tremendamente irascible, le hizo llegar a pelearse con sus compañeros, o a rebelarse contra ellos, por eso la gente nunca confió en él.
En 2 ocasiones, Bruce Banner “se separó” de The Hulk:
En una fue llevado a Asgard, con la intención de acabar con Thor, pero el intento fracasaría; y en otra, pudo casarse con Betty Ross pero esta, desdichadamente, murió.
Recién en 1968, The Hulk volvería a primer plano, con tira propia, y con el color verde por todos conocido.
La tira se mantendría en producción hasta el día de hoy pero, como suele suceder en el mundo de los comics, degeneraría en todo tipo de variantes disparatadas.
The Hulk tendría varias personalidades que aparecen de acuerdo al humor de Banner:
The Hulk Unificado, The Hulk Salvaje, The Hulk Demonio, etc., y por qué no, de acuerdo al humor de los guionistas y directivos de turno de la Marvel, según el estado de las ventas.
Así que The Hulk fue capturado, enviado a otros planetas, poseído por espíritus demoníacos, relanzado como súper héroe, y un sinfín de otros delirios.
No es un tema nuevo en el mundo de la historieta, la DC Comics ha hecho dislates semejantes, con su saga de Mundos Infinitos donde cada personaje tiene múltiples versiones, etc.
Es a partir de 1968, que The Hulk posee una línea editorial antimilitarista, el relanzamiento del personaje coincide con el recrudecimiento de La Guerra de Vietnam, y el acaloramiento de los ánimos públicos sobre el conflicto, donde su antagonista habitual, es humano, el General “Thunderbolt” Ross, el padre de su ex novia Betty, y The Hulk vivirá combatiendo contra el ejército americano que quería atraparlo.
Esa y otras, fueron las razones por la que S.H.I.E.L.D. envió agentes para capturarle, y fue desterrado al espacio.
En ese momento The Hulk descubrió una sociedad secreta llamada “Illuminati” conformada por:
Iron Man, Doctor Strange, El profesor X, Namor, Black Bolt y Reed Richards.
Esta organización controlaba el mundo de los superhéroes, y exiliaron a The Hulk al espacio, por considerarlo un peligro para el mundo.
The Hulk accidentalmente, desvió la nave que fue enviada a un agujero negro, a través del cual aterrizó en el Planeta Sakaar, donde habitaban varias razas alienígenas, organizadas en diferentes tribus bárbaras, dirigidos por reyes.
The Hulk fue capturado y hecho esclavo por los sirvientes del Rey Rojo, un tiránico rey de Sakaar que gobernaba un vasto territorio, y fue convertido en gladiador por sus habilidades.
Con la ayuda de varios aliados, The Hulk derrocó al Rey Rojo, y se quedó con su reino.
El reinado de The Hulk estuvo lleno de paz, hasta que el planeta y sus habitantes fueron destruidos por una bomba, dejando pocos supervivientes, y The Hulk juró venganza contra los que creía que son responsables de su exilio:
“Illuminati”
Y así comienza el evento conocido como “World War Hulk”, que culminó con la victoria de los héroes “Iluminati” sobre el gigante verde, más por el cansancio de Banner, que por la fuerza de ellos.
Tras su guerra contra La Tierra, Bruce fue encerrado en la base Gamma, donde alguna vez estuvo el reactor que le convirtió en The Hulk.
Es habitual, que los héroes del comic cambien de uniforme a lo largo del tiempo, pero el gigante esmeralda no, directamente cambia de forma y de personalidad.
Cada manifestación de The Hulk proviene de cualquier estado emocional y mental de Bruce Banner.
La versión más famosa del comic, es la de The Hulk en pantalones morados y de color verde, de mente infantil, que tan sólo desea ser dejado en paz, pero que es forzado continuamente a pelear en diversas batallas, por diferentes fuerzas que intentan capturarlo y controlarlo para beneficio propio.
Este sería el llamado The Hulk Salvaje o The Hulk verde de toda la vida:
Si le pegas se enfada, se hace más fuerte, y se dedica a pelear contra los militares que lo persiguen, normalmente encabezados por El General Ross, padre de su difunta esposa.
The Hulk es capaz de dar saltos que le permiten cubrir varios miles de kilómetros de distancia en poco tiempo, puede llegar a salir de la órbita del planeta, algo que es considerablemente grande, si contamos la velocidad de escape que se debe alcanzar.
Además, puede chocar sus manos en una palmada, que crea una gran onda de choque, capaz de apagar un gigantesco incendio forestal, destrozar estructuras, o romper todo los vidrios de una ciudad equivalente a Nueva York.
The Hulk posee una resistencia increíble al daño físico:
Puede resistir el impacto de artillería de un cañón de gran calibre, armamento antitanque, o explosiones de bombas gamma, superiores a las de hidrógeno, sin daños apreciables.
También posee una gran resistencia a temperaturas extremas, pudiendo aguantar desde -150°C hasta unos 6000°C sin abrasión ni irritación.
Aunque difícil de dañar, The Hulk no es totalmente invulnerable ni indestructible. Algunas armas, como el martillo de Thor, o las garras de Wolverine, pueden causarle un daño severo, o grave, dependiendo del ataque de dichos oponentes.
The Hulk ha sufrido cortes de armas hechas de materiales de gran dureza, y en teoría, podría quedar apreciablemente herido en el centro de una explosión nuclear de hidrógeno, aunque ninguna arma creada por el hombre puede matar a The Hulk, incluyendo las armas creadas por Tony Stark; como mucho dejarlo inconsciente, pero sin presenciar daños extremadamente graves.
Incluso, a pesar de su bajo intelecto en ciertas transformaciones, es prácticamente inmune al control mental, y a los ataques psíquicos.
Si bien fue manipulado reiteradas veces, su ira descontrolada hace que los intentos directos de calmarlo, o dominarlo sean ineficaces.
Resistió los poderes de Charles Xavier y Jean Grey, e incluso, se liberó de la posesión del dios Loki, gracias a su incontenible furia.
Además de su enorme resistencia, The Hulk posee una regeneración de tejidos acelerada, pudiendo curar partes de su cuerpo perdidas, o dañadas, casi inmediatamente, el factor regenerativo más rápido del Universo Marvel, incluso más rápido que el del mismísimo Wolverine, en cuestión de segundos.
Al igual que su fuerza física, su factor de recuperación aumenta cuando está enfurecido.
Su sistema inmunológico es tan fuerte, que le hace inmune a todas las enfermedades e infecciones existentes, excepto al virus zombie, aún cuando es Bruce Banner.
En sus primeros tiempos, The Hulk podía incluso, respirar en el espacio, o bajo el agua.
De hecho, su cuerpo se adapta para sobrevivir, incluso en condiciones de vacío.
A esto se le suma su inmortalidad cronológica.
En “The Ultimate Hulk” vemos que Bruce soñaba con ser el Capitán América.
Graduado de la universidad 2 años antes de lo esperado, busco reproducir el extraviado suero del “Súper Soldado” para el gobierno, bajo las órdenes del General Ross, cabeza de S.H.I.E.L.D.
Pronto se convirtió en el líder del programa del “Súper Soldado”, con base en Pittsburgh.
Se comprometió con la hija de Ross, Betty, y desarrollo una rivalidad con su compañero científico Hank Pym.
Existieron rumores de que dirigió experimentos en civiles, durante sus años en el departamento; sin duda, probó la fórmula en el más de una ocasión.
La última prueba, transformó a Banner en un gigante de piel verde con capacidad intelectual limitada, guiado únicamente por su instinto, como consecuencia, Banner arrasó con lo largo y ancho del país
Cuando el nuevo líder de S.H.I.E.L.D, Nick Fury expandió el programa de “Súper Soldado”, Bruce fue degradado a segundo al mando, bajo las órdenes de Pym.
Rechazado y denigrado por Betty, y celoso de los proyectos exitosos de Hank, Banner cayó en una creciente inseguridad, la cual provocó que no tuviera progresos con el suero.
El descubrimiento del Capitán América original, vivo y en buenas condiciones, lo proveyó de nueva información, pero ningún avance.
Escuchando por casualidad a sus compañeros burlarse de él, Banner enloqueció y se reinyectó el suero, ahora combinado con la sangre del Capitán América.
Más brutal que nunca, The Hulk de piel gris, mató a 852 personas en un arrebato, tratando de encontrar a Betty.
Finalmente “Avengers” lo sometieron.
Banner fue encerrado en una prisión de alta seguridad ubicada debajo del Triskelion donde lo mantienen parcialmente sedado, para prevenir otra transformación.
Su conexión con The Hulk es a nivel de ADN, dejándolo en riesgo permanente de cambio.
La historieta probó ser exitosa, y en 1977 terminó por ser adaptada para la televisión, en la popular serie “The Incredible Hulk” (1977 - 1981), con Bill Bixby como el Dr. Banner, renombrado como David, y Lou Ferrigno como el gigante verde.
“All you've given Bruce is fear.
Fear of life”
Hulk es una película del género comic del año 2003, dirigida por Ang Lee.
Protagonizado por Eric Bana, Jennifer Connelly, Sam Elliott, Josh Lucas, Nick Nolte, Paul Kersey, Cara Buono, Todd Tesen, Kevin Rankin, Celia Weston, Mike Erwin, Lou Ferrigno, Stan Lee, Craig Damon, Geoffrey Scott, entre otros.
El guión es de James Schamus, John Turman y Michael France, sobre el Comic homónimo de Stan Lee y Jack Kirby.
Stan Lee ha tenido cameos en prácticamente todas las cintas de Marvel Comics, mientras que Lou Ferrigno ha sido un elemento recurrente en los filmes en los que aparece The Hulk.
Sin embargo, Hulk es la única ocasión, en donde las 2 leyendas comparten escena en un filme de Marvel.
El propio Stan Lee, ha revelado que sus caemos también son una sorpresa para él, ya que no cuenta con ningún tipo de guión, y se le dan las instrucciones el mismo día del rodaje.
“No sé lo que se espera de mí hasta que llego, pero por su puesto la hago magníficamente”, dice.
Para mí, Hulk no es un superhéroe, no porque sus poderes fueran concedidos de manera involuntaria, sino porque ni siquiera puede controlarlos.
Los productores sólo buscan dinero, y Hulk nunca será excesivamente rentable, porque el personaje no da para tanto.
Visualmente, Hulk es un derroche de imaginación en puesta en escena, y nada se le puede reprochar al respecto.
Lee se propuso revolucionar la narración habitual, y tiró de recursos habituales del comic, como las viñetas, para contar su historia.
Por su parte, la estupenda fotografía de Frederick Elmes, aportó unos vivos colores que también remitían al papel, terminando de puntualizar la idea de que estábamos viendo un comic animado.
Para nada se le puede achacar a Lee no manejar bien las secuencias de acción, y mucho menos hacer una película aburrida.
No se puede obviar tampoco, el montaje, que a través de cortinillas nos ofrece en un plano diferentes ángulos de la escena, consiguiendo un lenguaje más próximo a los comics, de forma que el espectador centra su visión en diferentes partes de la escena.
Esto no es algo novedoso, pero resulta curioso por lo poco usado que ha sido hasta ahora.
Lejos de ofrecer el clásico entretenimiento para jóvenes, sin más pretensiones que el espectáculo y la diversión, Lee propone una película adulta, más cercana al drama que a la acción, aunque la tiene, sin ninguna concesión al humor, muy propio de este tipo de films.
Hulk explora sus orígenes, el cual es mayormente atribuido a los experimentos del padre de Banner en sí mismo, y pasando sus genes a su hijo, y dónde se abordan temas como los sentimientos reprimidos, las relaciones paterno-filiales, y las cuestiones éticas sobre los experimentos genéticos.
Además, intenta darle a la historia cierta credibilidad, dentro de su indudable carácter fantástico.
“I should have put a stop to it right then, but I was curious, and that was my downfall”
Hulk comienza muy tranquilo, con un ritmo de ir detallando cada particularidad, y poco a poco llega el vértigo y la acción tan bien puesta en escena.
Poco a poco nos adentramos en el guión muy intenso, y con mucha profundidad discursiva, vemos aflorar sentimientos internos y conflictos existenciales del pasado, de relaciones introvertidas, de camuflaje de identidad.
Hulk es melancólico, psicológico, y de catarsis en cierto sentido, y con mucha dosis de adrenalina surgida del interior del ser.
Así vemos a Bruce Banner (Eric Bana), un brillante investigador en el campo de la tecnología genética, que oculta un pasado doloroso que lo ha dejado estigmatizado.
Su antigua novia, la investigadora Betty Ross (Jennifer Connelly), que perdió la paciencia esperando que recuperara la estabilidad emocional, fue testigo de un grave accidente sufrido por Banner en el laboratorio:
Debido a una explosión, el cuerpo del científico absorbió una dosis letal de rayos gamma; desde entonces, Banner empezó a sentir en su interior, la presencia de un ente peligroso y, a la vez, oscuramente atractivo.
Mientras tanto, Hulk, una criatura salvaje, y prodigiosamente fuerte, aparece esporádicamente, dejando tras de sí, una estela de destrucción.
Mientras tanto, el padre biológico de Bruce, el Dr. David Banner (Nick Nolte), lo contacta y le informa de que él es fruto de experimentos que ha realizado en su cuerpo, y que en la gestación, le han sido traspasados genéticamente.
Pero David Banner tiene ocultas intenciones para con Bruce, ya que desea extraer el secreto de su poder, y asimilarlo, para poder desatar su venganza contra los militares que le enviaron a prisión por 30 años, entre ellos El General Thaddeus “Thunderbolt” Ross (Sam Elliott), el padre de Betty, y poder dominar el mundo.
Se trata de una situación de emergencia que exige la intervención del ejército, encabezado por el padre de Betty.
Betty es la única que sospecha que Bruce tiene algo que ver con Hulk, pero su intento de impedir la caza del monstruo puede resultar inútil.
Ang Lee es un director que se centra mucho en desarrollar a los personajes, por eso fue una apuesta sorprendente para una producción así.
De hecho, uno de los grandes lastres que le encontró el público, fue su falta de ritmo.
Lejos de ser un fallo, esto está hecho adrede, pues Hulk quiere que viajemos con su protagonista desde el principio, y empaticemos con los demás personajes protagónicos, siendo la clave de ellos, el padre (Nick Nolte), que es el personaje consciente de todo lo ocurrido, y que está debatido entre el amor y el poder; debate que claro, durará poco.
Así descubrimos que tras el accidente con los rayos gamma, empieza la conquista inapelable de la bestia sobre Bruce, siendo clave el sueño en el que se abre la puerta, misma puerta tras las que en sus recuerdos se encerraron sus padres, y se ve por primera vez a Hulk, eso sí, difuminado, ya que todavía no ha derrotado al controlado Bruce.
Así y todo, comprendemos que será cuestión de tiempo.
En la brillante primera conversión de Bruce Banner, tras el diálogo de este con su padre biológico, al que acaba de descubrir, descubrimos lo capaz que es de dejarse llevar por la ira destrozándolo todo, y también, la gran fuerza del personaje para resistir, en cierto modo, la rendición absoluta, perdonándole la vida a su padre, demostrando una capacidad de autocontrol brutal.
En este punto de la historia, el personaje interpretado por Jennifer Connelly, la ex-novia de Bruce, y también científica Betty Ross, cobrará una importancia capital, convirtiéndose en el equilibrio emocional del protagonista, el contrapunto a su ira.
Después de todo, su amor por ella será más grande que su ira, siendo buen ejemplo de esto, el momento en que Hulk se destransforma, a pesar de estar rodeado de militares.
El encuentro entre el padre de Bruce y la Betty me parece sencillamente espectacular, es un diálogo tremendamente revelador, puesto que vemos a una Jennifer Connelly por fin vulnerable, contraponiéndose con su, hasta entonces, comportamiento fuerte y controlado, véase lo contrario en los diálogos con su padre (Sam Elliott), enemigo “secundario”' de Bruce, en los que se muestra tajante y directa, y mostrándonos la verdadera cara del padre de Bruce, su maldad y su capacidad para influenciar negativamente, y dar dónde más duele a los demás.
Tras esto, el interés por Hulk sí decae en algún momento, en la base militar, con un Hulk preso y usado, a modo de conejillo de indias, sin embargo, esto tampoco está escogido al azar, pues nos preparan para uno de los momentos claves del largometraje, y, si cabe, el más importante y bello de todos, que es su huída y posterior lucha en el desierto.
Por primera vez, vemos a un Hulk pequeño, perdido, sin rumbo y perseguido.
No hay manera mejor de describir la soledad del personaje.
“We're going to have to watch that temper of yours”
Bruce Banner/Hulk (Eric Bana):
El padre de Bruce, David Banner inició experimentos para lograr regeneración humana en busca de inmortalidad.
Para esto mezclo esencias de 4 animales:
Medusa: Inmunología, bioluminiscencia verde y respuesta acelerada, reflejos.
Estrella de mar: Regeneración genética.
Cohombros: Piel dura y resistente.
Lagartos: Resistencia al veneno.
Luego de varias pruebas fallidas en animales, decide hacer una prueba en él mismo, y Bruce lo hereda por transmisión genética.
De grande, Bruce realiza sus propios experimentos, cuando uno falla, y recibe una descarga de rayos gamma directa.
Esto termina de despertar a Hulk, latente en su interior desde su nacimiento, y Bruce sufre la metamorfosis cada vez que se enoja, desarrollando los poderes derivados de la esencia del experimento de su padre.
Hulk tiene varios súper poderes:
Capacidad de absorber poderes ya que crece absorbiendo energía.
Capacidad regenerativa.
Súper fuerza y súper resistencia.
Hulk no usa vehículos, ya que con la fuerza de sus piernas, da gigantescos saltos que le permiten recorrer largas distancias en un corto tiempo.
Betty Ross (Jennifer Connelly) es la compañera de investigación, y ex novia de Bruce Banner.
Busca indagar sobre los padres biológicos de Bruce, a pesar de que él dice no querer saber nada al respecto.
Ella es la única persona que logra calmar a Hulk, e incluso Hulk muestra tener conciencia al estar con ella, y la defiende.
General Ross (Sam Elliott) es un General militar y padre de Betty.
Fue el que despidió a David Banner, al descubrir que había hecho pruebas del experimento con humanos.
Luego, vuelve contra Bruce cuando descubre que es su hijo, e intenta alejar a Betty de él como sea.
Major Glenn Talbot (Josh Lucas) administra los laboratorios de la base militar.
Cuando Bruce es capturado, Glenn recibe el poder para estudiarlo.
Quiere extraerle una muestra como Hulk, primero intenta hacerlo reaccionar, provocándolo físicamente, pero Bruce mantienen la calma hasta desmayarse.
Entonces, prueba induciéndolo a tener una pesadilla, cuando despierta a Hulk, ni puede obtener la muestra por su piel dura, y no logran detenerlo.
Cuando intenta matarlo, para que no escape, con un misil explosivo, este rebota en su piel y lo devuelve... matándolo.
El Villano es David Banner (Nick Nolte), el padre biológico de Bruce.
Al haber probado sus experimentos en humanos, él mismo, lo encarcelaron 30 años.
Al salir, buscó a su hijo, a quién quiso matar antes para salvarlo de su monstruo interior.
Al ver los efectos de la transformación de Bruce a Hulk, decide exponerse a rayos gamma, intentando imitar esos resultados.
Sus transformaciones, posteriores a esto, le daban el poder de mimetizarse con las cosas al tocarlas.
Pero éstas eran muy inestables, por eso piensa que necesita la potencia de Hulk para estabilizarla.
Su plan fue entregarse a los militares con la condición de que lo dejen estar una vez más con su hijo.
Al estar con él, lo hizo convertirse en Hulk, y empezó a robarle su poder, al absorberlo.
Negado por su ambición, absorbió todo el poder, y no lo pudo controlar.
En ese momento, un ataque militar para evitar consecuencias de ese enfrentamiento, lanza un misil que explota toda esa energía, y termina con él.
El papel de Nick Nolte está sobreactuado, pero se reivindica en sus motivos, en especial, sobre su obsesión con su verdadero hijo, Hulk, y su desprecio por Bruce.
Pocas veces se ha visto un carácter tan nefasto, en la pantalla de un film de súper héroes, como David Banner.
Todo el largo tramo de la escapada de Hulk de la base militar, su posterior persecución por el desierto, y la llegada a San Francisco es soberbio.
Los momentos se suceden uno tras otro.
Lo curioso es que, en una película tan medida, aparezcan escenas que limitan con el ridículo, al parecer, añadidas a último minuto.
¿Alguien se puede tomar en serio, la pelea con los perros?
Siempre me resultó llamativo, cómo cuando Hulk aparece en escena, siempre se le rompe todo:
La camisa, los zapatos... queda desnudo, pero para ocultar sus vergüenzas, los pantalones tienen una elasticidad infinita.
¿Qué curioso?
Poco hay más que decir, de la evolución de Bruce Banner, salvo el final, en el que empatizamos y llegamos a comprender el sufrimiento del personaje, sabiendo que su carga no puede ser llevada por cualquiera, es un peso que debe llevar él, es, en cierto modo, el elegido, para resistir dicha cruz.
Como nota, el archienemigo de Hulk es su propio padre, un científico egoísta, ególatra, totalmente amoral, y con poca humanidad.
Para desgracia del héroe, que anhela amor paternal, se encuentra con un padre que busca en él, solo al monstruo que creó al experimentar con su propio hijo.
Su padre solo busca el poder, el hijo no quiere ser Hulk, quiere amar y ser amado con normalidad, y por tanto, librarse de ese acontecimiento del pasado que atormenta su subconsciente.
Son 3 secuencias, las que Lee dedica a la acción:
El ataque de los perros, la huida del recinto militar, y el duelo final con el padre.
La primera es sencillamente una brutalidad, la segunda nos muestra abiertamente a Hulk y sus posibilidades, con detalle sobre su bondad humana hacia un piloto, luego continúa en una escena copiada por todos los comics al llegar a la atmósfera, y la última, un intenso clímax, de liberación, precedido de una secuencia dramática casi “shakesperiana”
Nota de atención también sobre el final, precioso, esa imagen del pasado, y el epílogo, divertidísimo, con Bana hablando en español.
En conclusión, a mi parecer Hulk es una película avanzada a su tiempo, que dota de seriedad a una historia de la que se esperaba que fuera una mera versión palomitera.
Hulk es una interpretación adulta, respetuosa, y seria del comic.
“I could tell from the moment she conceived that it wasn't a son I had given her, but something else.
A monster, maybe”
Si bien los guionistas de Hulk hicieron su tarea, y lograron introducir, además de radiaciones y genes, un tercer elemento para explicar los increíbles poderes de Hulk, los llamados “nanomeds”, que no son otra cosa que máquinas submicroscópicas, como las que sueñan los nanotecnólogos de la actualidad, con capacidad para reparar los daños que sufra el cuerpo humano.
Se genera así un verdadero coctel fantasioso de tecnologías amenazantes.
La ciencia causó su problema, pero es también, la única fuente de una posible solución.
Y Banner no abandona su fe en la ciencia, a pesar de todo.
Desgraciadamente, los guionistas sintieron la necesidad de introducir el estereotipo en la figura del padre de Banner:
El típico científico ambicioso, que recibe su justo castigo, incluso hay una escena en donde habla de “ser como dios”
Es una lástima, pues con ello Hulk vuelve al repetido “mito frankensteiniano”
Además, Hulk fue la primera película que se vio afectada por el marketing viral negativo, en una época en la que internet estaba dando sus primeros pasos como herramienta de promoción.
A pesar de esa fresca, innovadora y atrevida propuesta, es linchada básicamente por todos aquellos aficionados al cine de acción y/o a los comics.
¿Qué hizo Ang Lee, que tan poco convenció al público?
Pues usar la historia de Hulk para contar una tragedia adulta, a espaldas de una platea excesivamente joven, que no entendía qué demonios le estaban contando.
Si a eso le unimos a un actor desconocido, Eric Bana, y a un pasadísimo, y también desconocido para los jóvenes, Nick Nolte, pues el drama está servido.
El director taiwanés, planteó toda la historia como si de una tragedia griega se tratase, tirando de mitos, desde “Frankenstein” a “King Kong”, pasando por “La Bella & La Bestia”, potenciando todo el drama.
Además, metió un conflicto paterno-filial, tema habitual en su filmografía, pero ausente en los comics, que terminó de desubicar a todo el mundo.
Lee comentó:
“Mi problema es que me tomé todo muy en serio.
Debería haber disfrutado más con ella, en lugar de todo el psicodrama”
Es Banner quien más interesa a Lee, no Hulk.
¿Qué más quería la gente?
Digo más:
¿Qué esperaba, ver a Hulk destrozando cosas durante 2 horas?
¿Qué es una película sin conflictos?
Lee apuesta por un tridente de conflictos:
Banner contra Hulk, su alter ego bestial.
Contra su padre, el culpable de su trauma, y contra los que quieren apoderarse de lo que tiene en su interior, para fines militares, enemigos más claros, ya que no dudarán en destruirle.
Entre los 3 frentes se encuentra otro poderoso sentimiento humano:
El amor, representado por una mujer que tiene dudas sobre cómo ayudar a Banner, pero no sobre lo que comparten.
Es la paz contra la guerra, el odio y la violencia que representan los otros conflictos que debe afrontar el protagonista.
Ang Lee cambia completamente la historia de Hulk...
Bruce Banner se transformó en Hulk cuando fue expuesto a radiación gamma en un desierto, y en la película ponen la incoherencia de que su padre se lo transmitió, y la explosión gamma solo liberó a la bestia.
Así como el gigantesco tamaño de Hulk...
Se supone que conforme avanza su enojo crece de tamaño, pero ni en “World War Hulk” medía eso, en la película lo ponen como un gigante del tamaño de edificios.
A diferencia de la ciencia ficción, en Hulk nos encontramos numerosas incongruencias que son, vistas desde la ciencia, imposibles de justificar, y como tales, rompen con la verosimilitud de la película.
El monstruo es capaz de brincar cientos de metros de un solo salto, correr a cientos de kilómetros por hora, o aventar un tanque como si fuera un costal, por no mencionar que, dependiendo de qué tan enojado esté, crece hasta casi tamaño “King Kong”
Esto rompe leyes tan elementales, como las de Newton al saltar de esa manera, la aceleración haría que su cuerpo quedara destrozado en el camino, por ejemplo.
Y su crecimiento rompe con la ley de conservación de la materia.
Pero en fin, no se trata de ponerse quisquilloso, que es la mejor manera de echar a perder una película.
Pero lo que le quita mérito, sin rebajar la calidad del filme, son 2 cosas que le juegan en contra.
En primer lugar es el personaje de Bruce Banner, que totalmente apático.
No es problema de la interpretación de Eric Bana, que es buena, sino que el libreto lo transforma en un papel tan profundamente herido en lo sicológico, tan reprimido y torturado, que no resulta de nuestra simpatía, es decididamente un discapacitado en lo emocional, frío, aislado, y distante.
Sin duda, cuando Hulk explota de furia y arrasa todo, vuela miles de metros con cada salto, y revolea helicópteros y tanques resulta disfrutable, pero nunca la audiencia termina por estar enteramente con él, por una cuestión del hermetismo con que está delineado su alter ego.
El otro inconveniente es Hulk mismo, que a pesar de su plasticidad de movimientos, se ve ABSOLUTAMENTE ARTIFICIAL.
No es un problema de presupuesto, sino de la elección artística de Lee, para que se vea como un dibujo, pero el personaje resulta tan irreal, que es imposible no pensar que es un CGI.
¿Habrá manera de hacer una película de este tipo, en que la ciencia no sea un fuerza del mal, sino algo más cercano a lo real, es decir, una de las mayores fuentes de avances útiles al ser humano?
Pero siendo justos con un film de las características de Hulk, deberíamos apreciar su originalidad, al suponer una ruptura en una moda, la de los superhéroes, cuyas películas acabamos por no distinguir, ya que si algo posee este Hulk, es personalidad propia, madurez, estilo original, y unos niveles de calidad que deberían ser apreciados.
“It's the only path to the truth that gives men the power to go beyond God's boundaries”
Ahora me gustaría acercarme brevemente a Hulk desde un ángulo distinto, pero muy actual y oportuno.
Porque, aunque sus pretensiones sean básicamente de entretenimiento, me parece conveniente no olvidar el lado antropológico y social que encierra, mostrado de manera simple pero clarividente.
Por un lado, vemos cómo se descompone el rostro de quien sufre el descontrol de sus pasiones, hasta transformarse en un monstruo imprevisible, que incluso se desconoce a sí mismo, que no es consciente, ni recuerda sus propios actos, tras esos momentos de cólera y excitación.
Banner era un científico bueno e ingenuo, que se expuso a un experimento peligroso, y que ahora quiere deshacerse de ese lastre de autodestrucción, que procura evitar los arranques de ira y defenderse en situaciones de acorralamiento.
Parece claro, por otra parte, que el problema no está en la pasión humana, en el progreso científico, ni en las circunstancias de injusticia que puedan darse, sino en el propio hombre, en su debilidad, y en su soberbia.
Idéntico planteamiento podemos hacer con la cuestión bioética, presente por su ausencia, en unos científicos que juegan a ser dioses, y que en su ingenuidad, crean un banco de sangre y radiaciones gamma con que “clonar” tan poderoso espécimen.
Aunque pretendan la experimentación científica con fines terapéuticos, y sea bienintencionada, no por ello deja de responder a unos planteamientos no éticos, desconocedores de la naturaleza humana, y de su incapacidad para dominar las pasiones, cuando estas adquieren una dimensión sobrehumana.
Por eso Banner, que ha aprendido la lección, no quiere activar ese poder, ni exponerse a sus consecuencias, por eso, El General sucumbe ante su ambición de poder, por eso el científico no percibe el peligro de una ciencia incontrolada, ni amparada por la ética.
Definitivamente, el hombre demuestra no estar preparado, no poder estarlo, como se ve en el último plano, para ser absolutamente independiente y autosuficiente… precisamente porque su condición es limitada, frágil, y humana.
En las versiones cinematográficas recientes de Hulk, en nuestros tiempos de Proyecto Genoma Humano, el ya implícito componente genético es exaltado.
Banner también investiga aplicaciones biomédicas de la radiación, como en la serie de TV, exponiéndose accidentalmente, a sobredosis de rayos X que “deberían” haberlo matado:
Las radiaciones son soportadas por su organismo en la medida de que ya habían sido previamente alterado su genoma, sin su conocimiento, por su padre, un oscuro y renegado científico desaparecido.
Así, Hulk enfrentará problemas con militares, y Banner con su amor.
Hay elementos constantemente repetidos en estos personajes de comic.
La penetración de la tecnología en el cuerpo, ha avanzado progresivamente desde los 30, como lo revelan los mismos personajes.
El nuevo imaginario corporal, da una forma a las representaciones de la enfermedad, que adquiere una significación, que va más allá de la pura información fisiológica, fundada en la fe en la medicina… y en la creencia en la magia de los remedios nacidos de la revolución farmacéutica.
En Hulk, el complejo militar-industrial es siempre obvio y la inmunología adopta el lenguaje de lo geopolítico.
Curiosamente, Banner se transforma en Hulk tras una sobreexposición a rayos gamma.
Estos rayos son utilizados en tratamientos radiológicos contra el cáncer, para eliminar las células malignas, por lo que no sería el mejor método de conseguir una musculatura súper desarrollada como la de Hulk.
Los culturistas suelen tomar esteroides anabólicos, principalmente testosterona sintética, sustancia que aumenta la musculatura pero hasta cierto límite.
El crecimiento muscular obtenido con anabolizantes, solo supone el 50% aproximadamente, del aumento de masa muscular que sufre Banner, por lo que su consumo tampoco los transformará en Hulk, aunque los ataques de ira que sufre sí, que se corresponden con la agresividad que acompaña a los tratamientos con esteroides...
Para convertirse en Hulk hay que recurrir a la ingeniería genética.
Hay estudios con ratones a los que se les inserta el gen que produce el Factor de Crecimiento Insulínico de tipo I (IGF-1)
El IGF-1 es una hormona similar en estructura molecular a la insulina.
Juega un papel importante en el crecimiento infantil, los mayores niveles se producen en la pubertad, los menores en la infancia y la vejez, y en el adulto continúa teniendo efectos anabolizantes.
En ratones de experimentos, son 40% más corpulentos, que los ratones normales, y sus músculos no se debilitan con la edad.
Si se tratan los músculos directamente con esta hormona, se consigue la autorreparación, lo que supondría un posible tratamiento para la distrofia muscular.
Los científicos se han acercado a ayudar a las personas, a crecer los músculos grandes y fuertes, sin necesidad de llegar a la sala de pesas.
Investigadores australianos han descubierto que mediante el bloqueo de la función de una proteína llamada “Hulk” o Grb10 (Brotes de Rayos Gamma) mientras que los ratones estaban en el útero, eran considerablemente más fuertes y más musculosos que sus contrapartes normales.
Este descubrimiento aparece en el 09/2012 de la revista FASEB.
En última instancia, esto puede mejorar el tratamiento de condiciones de desgaste muscular, así como trastornos metabólicos como la diabetes de tipo 2.
Se compararon 2 grupos de ratones:
Una vez que el grupo tenía la interrupción del gen Grb10, y eran muy musculosos.
El otro grupo, donde el gen Grb10 era funcional, tenía los músculos normales.
Los investigadores examinaron las propiedades de los músculos tanto en ratones adultos y recién nacidos, y descubrió que las alteraciones causadas por la pérdida de función Grb10, había ocurrido principalmente, durante el desarrollo prenatal.
Estos resultados proporcionan una idea, de cómo funciona la Grb10, lo que sugiere que puede ser posible alterar el crecimiento muscular, y facilitar la curación, como los procesos implicados en la regeneración muscular y reparación son similares a los de la formación inicial del músculo.
Si quieres músculos grandes, la receta clásica sigue siendo válida:
Levantar cosas pesadas, comer y dormir bien.
Pero este estudio demuestra, que cuando entendemos la ciencia básica de cómo las fibras musculares crecen y se multiplican, vamos a ser capaces de levantar la carga, literalmente, de la enfermedad del músculo para muchos de nuestros pacientes.

“Bad science, maybe, but personally gratifying”



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