The Seafarers
“Never, ever go near power.
Don't become friends with anyone who has real power.
It's dangerous”
Si bien, hoy en día, Stanley Kubrick es considerado como uno de los cineastas más influyentes y aclamados de todos los tiempos, la carrera de este legendario director, tuvo su humilde comienzo en el género documental, en concreto, en la realización de 2 noticiarios para RKO Radio Pictures en 1951, cuando él tenía sólo 23 años de edad.
A esa edad, Kubrick ya era un fotógrafo personal de tiempo completo para la revista “Look”, pero después de hacer los 2 cortometrajes, él renunció a su trabajo, y decidió convertirse en un director de cine a tiempo completo.
Sin embargo, esos 2 cortometrajes, no serían los únicos documentales que el maestro dirigiría en su vida, al igual que en 1953, tuvo que regresar al género documental, después del fracaso comercial de su debut, en el largometraje, “Fear and Desire” en 1953.
Su tercer y último documental, también sería su primera vez trabajando en el color, y todo montado a manera de un comercial para la gente de la Seafarers International Union (SIU)
La SIU, forma parte de la federación de sindicatos del American Federation of Labor (AFL), de carácter conservador, y defensora del sistema capitalista, que impulsó su creación en 1938, tras la constitución el año anterior, de la National Maritime Union (NMU), afiliada a la confederación sindical, Congress of Industrial Organizations (CIO), de carácter radical; y relacionada con El Partido Comunista.
Con The Seafarers, Stanley Kubrick arrancaría su carrera cinematográfica sin haber ido a la escuela de cine, en realidad, nunca terminó la escuela, que le aburría, y fue todo un autodidacta como cineasta, con la lectura de los libros de Vsevolod Illarionovich Pudovkin:
“Film Theory” & “Film Acting”
“One man writes a novel.
One man writes a symphony.
It is essential that one man make a film”
The Seafarers es un cortometraje documental, dirigido por Stanley Kubrick, en el año de 1953.
El guión es de Will Chasen; narrado y protagonizado por Don Hollenbeck.
The Seafarers es un cortometraje de 30 minutos de duración, que fue encargado por Atlantic and Gulf Coast District of the Seafarers International Union y producido por Lester Cooper Productions / Seafarers International Union, Atlantic & Gulf Coast District, American Federation of Labor (AFI) / Pietrzak Filmways; siendo The Seafarers, su primera película en color, y con más medios, pues el documental tiene algunos “travellings” destacables, distanciándose ya, de manera clara, de la estética del cine “fotografiado”
Como dato, su segunda película a color, fue “Spartacus” (1960)
Kubrick, nunca quiso hacer esta película realmente, en primer lugar, pero necesitaba el dinero, y esa fue la motivación para The Seafarers.
Como de costumbre, no estaba a la altura del cineasta; y es por eso que The Seafarers se quedó “enterrado” por tanto tiempo, hasta que resurgió a principios de los 70, pero lamentablemente, sólo la copia en cinta de VHS sobrevive.
The Seafarers fue “descubierta” en 1973, por el director de cine, Frank P. Tomasulo, quien organizó una impresión de 16 mm del documental, para ser depositados en la colección permanente de la Biblioteca del Congreso de la División Motion Picture.
The Seafarers fue puesto en libertad, y en formato DVD, hasta el año 2008, con comentarios de audio de los directores Roger Avary y Keith Gordon, así como una entrevista con una de las hijas de Kubrick.
El corto, también está disponible como un extra, en la versión de 2012, del primer largometraje de Stanley Kubrick, “Fear and Desire”
De algo estamos seguros, que no hay, absolutamente nada notable en The Seafarers.
Está hecha de manera competente, pero no es el tipo de proyecto, en el que un director tendría la oportunidad de ejercer cualquier tipo de creatividad.
Kubrick era “un asesino a sueldo” en esto, él hizo el trabajo que le fue pagado, y eso es todo.
Cualquier intento de buscar la marca registrada, toques Kubrick, o la innovación, no tendría sentido.
Pero hay 2 cosas notables:
The Seafarers fue dirigida por Stanley Kubrick, y pasó a ser su primera película en color.
Aparte de la lectura del título “Dirigida por Stanley Kubrick”, no encontré interés alguno.
No hay nada malo en ello, pero The Seafarers sería, completamente olvidado e ignorado, si no hubiera sido dirigida por alguien que pasó a cosas mucho más grandes.
Así las cosas, The Seafarers es un estudio sobre los afiliados al sindicato marítimo, durante el trabajo cotidiano sobre las naves y los muelles, y repleto de invitaciones a participar en la vida asociativa del Sindicato.
Vemos entrevistas con marinos, trabajando o retirados, entre los que se encuentra, el primer personaje “kubrickiano” sentado en una silla de ruedas, es decir Dr. Stragelove de “Dr. Strangelove or: How I Learned To Stop Worrying and Love The Bomb” (1964), que se alternan con escenas de la vida comunitaria, y con encuadres sobre las elecciones de nuevos representantes de la organización.
Sólo se trata de un documental sobre el SIU, que es un sindicato democrático de la marina estadounidense, que se creó en 1938.
Incluso tiene página web en, www.seafares.com, y Stanley Kubrick nos lo muestra con todos sus detalles.
Sólo tienen acceso a la dirección, los marinos que hayan trabajado 3 años en el mar.
Oficinas en casi todos los puertos de EEUU continental, Hawaii y Canadá.
Tienen escuelas, restaurantes, salas de juego, biblioteca, etc.
Ayudan a los enfermos.
Visitan a los ancianos retirados, incluso con regalos.
Por supuesto, oficina de empleo que se dan por riguroso orden.
Un sindicato que de verdad, habría de ser internacional, y no sólo del mar.
También, juega la carta de la familia, con un par de fotos de la familia estadounidense, armónica, con hijos, justo antes del final, por lo que ver cómo los miembros de la SIU, no tendrán que preocuparse por aquellos que dejan atrás.
Todos los tipos de prestaciones, inclusive por maternidad, etc.
Con todo, The Seafarers es un film promocional, de un sindicato de marineros; pura propaganda:
“Marino, afíliese a nosotros, y gozará todas estas bondades y beneficios”
The Seafarers es un trabajo puramente alimenticio, del que apenas podemos extraer algunas gotas de la esencia del maestro Stanley Kubrick.
Pero si uno va a mirar justo en el lado técnico de las cosas, se puede poner una sonrisa en la cara de un fan de Kubrick, para ver algunos de los principios de las técnicas expuestas.
Ejemplos, yo incluiría su “travelling” o seguimiento de la cámara, a este tipo de visualizar a través de una habitación que se podría encontrar en “Paths Of Glory” (1957) y “The Shining (1980)” con el “travelling” lateral, que se utiliza en efecto, para mostrar a los marinos que comen en la cafetería.
Esto pone su marca en el material de inmediato, aunque hay otras tomas antes de esto, con ciertas composiciones de tipo Kubrick; un fotógrafo estándar, puede hacer que apenas consiga tomas individuales, se disuelven en las cortes, y que sea más corto.
Pero hay una atención a estas personas que el director / fotógrafo aquí quiere transmitir, y también en las composiciones, al igual que ciertos primeros planos de máquinas, grandes y pequeñas, y sólo las tomas de la gente en las habitaciones, y el panorama a través de las líneas del horizonte, y los buques que parece diferente, de alguna manera, a como lo haría otro ojo a sueldo como él.
Aunque están correctamente filmadas, sin nada que objetar en el aspecto técnico, en esta “Trilogía Documental” sólo se adivina al Kubrick posterior, en 3 o 4 planos, porque no había mucho espacio para ejerciera su creatividad en estos comerciales publicitarios, disfrazados de documentales.
Aunque Kubrick haya querido quemar The Seafarers, ahí sí se empieza a ver por todos lados, el estilo que comienza a forjarse, y que todos conocemos.
“Call it a dream fulfilled”
Desde sus primeras incursiones en el campo del cortometraje, la labor creativa de Stanley Kubrick se despliega más allá de la dirección:
Realiza el guión, la dirección de fotografía y el sonido de “Day Of The Fight” (1951); el guión y la dirección de fotografía de “Flyng Padre” (1952), y la dirección de fotografía de “The Seafarers” (1953)
Ese sano afán de autonomía, lo conducirá a la difícil empresa de tener completo control sobre sus films.
No siempre lo ha logrado, y sin embargo, la noción de autoría, no debería circunscribirse a desentrañar la coherencia de su universo temático y estético, ya que su metodología de trabajo, será uno de los factores determinantes de la calidad artística de sus obras.
Se produce un tránsito desde las primeras películas de bajo presupuesto, hacia películas cada vez más costosas, no sólo por la producción, sino también por la meticulosidad en la implementación de la técnica, y por la exhaustiva investigación y documentación de los temas a tratar.
Ello lo condujo a una serie de proyectos truncados, a pesar de haber llegado hasta una fase avanzada de preproducción.
Los films que se llevan a la pantalla grande, le demandan cada vez más años de preparación.
Y es que son pocas son las personas como Stanley Kubrick, que van por el camino, creyendo en sí mismas, y en lo que pueden lograr.
Él hacia las cosas innovando, gritándole al mundo, el interior de su alma, a través del lente de una cámara.
Su mundo nos los compartió sin importarle las críticas, y las consecuencias.
Es por eso que, hoy en día, es uno de los cineastas más influyentes del siglo XX.
“I have always enjoyed dealing with a slightly surrealistic situation and presenting it in a realistic manner.
I've always liked fairy tales and myths, magical stories.
I think they are somehow closer to the sense of reality one feels today than the equally stylized “realistic” story in which a great deal of selectivity and omission has to occur in order to preserve its “realist” style”
Don't become friends with anyone who has real power.
It's dangerous”
Si bien, hoy en día, Stanley Kubrick es considerado como uno de los cineastas más influyentes y aclamados de todos los tiempos, la carrera de este legendario director, tuvo su humilde comienzo en el género documental, en concreto, en la realización de 2 noticiarios para RKO Radio Pictures en 1951, cuando él tenía sólo 23 años de edad.
A esa edad, Kubrick ya era un fotógrafo personal de tiempo completo para la revista “Look”, pero después de hacer los 2 cortometrajes, él renunció a su trabajo, y decidió convertirse en un director de cine a tiempo completo.
Sin embargo, esos 2 cortometrajes, no serían los únicos documentales que el maestro dirigiría en su vida, al igual que en 1953, tuvo que regresar al género documental, después del fracaso comercial de su debut, en el largometraje, “Fear and Desire” en 1953.
Su tercer y último documental, también sería su primera vez trabajando en el color, y todo montado a manera de un comercial para la gente de la Seafarers International Union (SIU)
La SIU, forma parte de la federación de sindicatos del American Federation of Labor (AFL), de carácter conservador, y defensora del sistema capitalista, que impulsó su creación en 1938, tras la constitución el año anterior, de la National Maritime Union (NMU), afiliada a la confederación sindical, Congress of Industrial Organizations (CIO), de carácter radical; y relacionada con El Partido Comunista.
Con The Seafarers, Stanley Kubrick arrancaría su carrera cinematográfica sin haber ido a la escuela de cine, en realidad, nunca terminó la escuela, que le aburría, y fue todo un autodidacta como cineasta, con la lectura de los libros de Vsevolod Illarionovich Pudovkin:
“Film Theory” & “Film Acting”
“One man writes a novel.
One man writes a symphony.
It is essential that one man make a film”
The Seafarers es un cortometraje documental, dirigido por Stanley Kubrick, en el año de 1953.
El guión es de Will Chasen; narrado y protagonizado por Don Hollenbeck.
The Seafarers es un cortometraje de 30 minutos de duración, que fue encargado por Atlantic and Gulf Coast District of the Seafarers International Union y producido por Lester Cooper Productions / Seafarers International Union, Atlantic & Gulf Coast District, American Federation of Labor (AFI) / Pietrzak Filmways; siendo The Seafarers, su primera película en color, y con más medios, pues el documental tiene algunos “travellings” destacables, distanciándose ya, de manera clara, de la estética del cine “fotografiado”
Como dato, su segunda película a color, fue “Spartacus” (1960)
Kubrick, nunca quiso hacer esta película realmente, en primer lugar, pero necesitaba el dinero, y esa fue la motivación para The Seafarers.
Como de costumbre, no estaba a la altura del cineasta; y es por eso que The Seafarers se quedó “enterrado” por tanto tiempo, hasta que resurgió a principios de los 70, pero lamentablemente, sólo la copia en cinta de VHS sobrevive.
The Seafarers fue “descubierta” en 1973, por el director de cine, Frank P. Tomasulo, quien organizó una impresión de 16 mm del documental, para ser depositados en la colección permanente de la Biblioteca del Congreso de la División Motion Picture.
The Seafarers fue puesto en libertad, y en formato DVD, hasta el año 2008, con comentarios de audio de los directores Roger Avary y Keith Gordon, así como una entrevista con una de las hijas de Kubrick.
El corto, también está disponible como un extra, en la versión de 2012, del primer largometraje de Stanley Kubrick, “Fear and Desire”
De algo estamos seguros, que no hay, absolutamente nada notable en The Seafarers.
Está hecha de manera competente, pero no es el tipo de proyecto, en el que un director tendría la oportunidad de ejercer cualquier tipo de creatividad.
Kubrick era “un asesino a sueldo” en esto, él hizo el trabajo que le fue pagado, y eso es todo.
Cualquier intento de buscar la marca registrada, toques Kubrick, o la innovación, no tendría sentido.
Pero hay 2 cosas notables:
The Seafarers fue dirigida por Stanley Kubrick, y pasó a ser su primera película en color.
Aparte de la lectura del título “Dirigida por Stanley Kubrick”, no encontré interés alguno.
No hay nada malo en ello, pero The Seafarers sería, completamente olvidado e ignorado, si no hubiera sido dirigida por alguien que pasó a cosas mucho más grandes.
Así las cosas, The Seafarers es un estudio sobre los afiliados al sindicato marítimo, durante el trabajo cotidiano sobre las naves y los muelles, y repleto de invitaciones a participar en la vida asociativa del Sindicato.
Vemos entrevistas con marinos, trabajando o retirados, entre los que se encuentra, el primer personaje “kubrickiano” sentado en una silla de ruedas, es decir Dr. Stragelove de “Dr. Strangelove or: How I Learned To Stop Worrying and Love The Bomb” (1964), que se alternan con escenas de la vida comunitaria, y con encuadres sobre las elecciones de nuevos representantes de la organización.
Sólo se trata de un documental sobre el SIU, que es un sindicato democrático de la marina estadounidense, que se creó en 1938.
Incluso tiene página web en, www.seafares.com, y Stanley Kubrick nos lo muestra con todos sus detalles.
Sólo tienen acceso a la dirección, los marinos que hayan trabajado 3 años en el mar.
Oficinas en casi todos los puertos de EEUU continental, Hawaii y Canadá.
Tienen escuelas, restaurantes, salas de juego, biblioteca, etc.
Ayudan a los enfermos.
Visitan a los ancianos retirados, incluso con regalos.
Por supuesto, oficina de empleo que se dan por riguroso orden.
Un sindicato que de verdad, habría de ser internacional, y no sólo del mar.
También, juega la carta de la familia, con un par de fotos de la familia estadounidense, armónica, con hijos, justo antes del final, por lo que ver cómo los miembros de la SIU, no tendrán que preocuparse por aquellos que dejan atrás.
Todos los tipos de prestaciones, inclusive por maternidad, etc.
Con todo, The Seafarers es un film promocional, de un sindicato de marineros; pura propaganda:
“Marino, afíliese a nosotros, y gozará todas estas bondades y beneficios”
The Seafarers es un trabajo puramente alimenticio, del que apenas podemos extraer algunas gotas de la esencia del maestro Stanley Kubrick.
Pero si uno va a mirar justo en el lado técnico de las cosas, se puede poner una sonrisa en la cara de un fan de Kubrick, para ver algunos de los principios de las técnicas expuestas.
Ejemplos, yo incluiría su “travelling” o seguimiento de la cámara, a este tipo de visualizar a través de una habitación que se podría encontrar en “Paths Of Glory” (1957) y “The Shining (1980)” con el “travelling” lateral, que se utiliza en efecto, para mostrar a los marinos que comen en la cafetería.
Esto pone su marca en el material de inmediato, aunque hay otras tomas antes de esto, con ciertas composiciones de tipo Kubrick; un fotógrafo estándar, puede hacer que apenas consiga tomas individuales, se disuelven en las cortes, y que sea más corto.
Pero hay una atención a estas personas que el director / fotógrafo aquí quiere transmitir, y también en las composiciones, al igual que ciertos primeros planos de máquinas, grandes y pequeñas, y sólo las tomas de la gente en las habitaciones, y el panorama a través de las líneas del horizonte, y los buques que parece diferente, de alguna manera, a como lo haría otro ojo a sueldo como él.
Aunque están correctamente filmadas, sin nada que objetar en el aspecto técnico, en esta “Trilogía Documental” sólo se adivina al Kubrick posterior, en 3 o 4 planos, porque no había mucho espacio para ejerciera su creatividad en estos comerciales publicitarios, disfrazados de documentales.
Aunque Kubrick haya querido quemar The Seafarers, ahí sí se empieza a ver por todos lados, el estilo que comienza a forjarse, y que todos conocemos.
“Call it a dream fulfilled”
Desde sus primeras incursiones en el campo del cortometraje, la labor creativa de Stanley Kubrick se despliega más allá de la dirección:
Realiza el guión, la dirección de fotografía y el sonido de “Day Of The Fight” (1951); el guión y la dirección de fotografía de “Flyng Padre” (1952), y la dirección de fotografía de “The Seafarers” (1953)
Ese sano afán de autonomía, lo conducirá a la difícil empresa de tener completo control sobre sus films.
No siempre lo ha logrado, y sin embargo, la noción de autoría, no debería circunscribirse a desentrañar la coherencia de su universo temático y estético, ya que su metodología de trabajo, será uno de los factores determinantes de la calidad artística de sus obras.
Se produce un tránsito desde las primeras películas de bajo presupuesto, hacia películas cada vez más costosas, no sólo por la producción, sino también por la meticulosidad en la implementación de la técnica, y por la exhaustiva investigación y documentación de los temas a tratar.
Ello lo condujo a una serie de proyectos truncados, a pesar de haber llegado hasta una fase avanzada de preproducción.
Los films que se llevan a la pantalla grande, le demandan cada vez más años de preparación.
Y es que son pocas son las personas como Stanley Kubrick, que van por el camino, creyendo en sí mismas, y en lo que pueden lograr.
Él hacia las cosas innovando, gritándole al mundo, el interior de su alma, a través del lente de una cámara.
Su mundo nos los compartió sin importarle las críticas, y las consecuencias.
Es por eso que, hoy en día, es uno de los cineastas más influyentes del siglo XX.
“I have always enjoyed dealing with a slightly surrealistic situation and presenting it in a realistic manner.
I've always liked fairy tales and myths, magical stories.
I think they are somehow closer to the sense of reality one feels today than the equally stylized “realistic” story in which a great deal of selectivity and omission has to occur in order to preserve its “realist” style”
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