Into The Storm
“There is no calm before the storm”
De todos es conocido que el “cine catástrofe”, en inglés “disaster films”, es un género cinematográfico, compuesto por películas que tienen como tema principal, una catástrofe en curso o inminente para la humanidad.
Por lo general, traen consigo un amplio reparto de actores, y múltiples líneas argumentales, y se centran en los intentos de los personajes, de evitar, escapar, o resistir las consecuencias de la catástrofe.
Un personaje principal, varios menores, y muchos extras, que suelen morir antes de la resolución de la historia.
En lo particular, un tornado, es una masa de aire con alta velocidad angular; su extremo inferior, está en contacto con la superficie de La Tierra, y el superior con una nube “cumulonimbus” o excepcionalmente, con la base de una nube “cúmulus”
Se trata del fenómeno atmosférico ciclónico de mayor densidad energética de La Tierra, aunque de poca extensión, y de corta duración, que van desde segundos, hasta más de una hora.
Los tornados, se presentan en diferentes tamaños y formas, pero generalmente tienen la forma de una nube embudo, cuyo extremo más angosto toca el suelo, y suele estar rodeado por una nube de desechos y polvo, al menos, en sus primeros instantes.
La mayoría de los tornados, cuentan con vientos que llegan a velocidades de entre 65 y 180km/h, miden aproximadamente 75 metros de ancho, y se trasladan varios kilómetros, antes de desaparecer.
Los más extremos pueden tener vientos con velocidades que pueden girar a 450km/h, o más, y medir hasta 2km de ancho, y permanecer tocando el suelo a lo largo de más de 100km de recorrido.
Hay tornados grandes con un solo vórtice, que pueden verse como enormes cuñas enterradas en la tierra, y por tanto, se les conoce como “tornados en cuña”
Uno de estos tornados, puede ser tan ancho, que parezca ser un grupo de nubes oscuras, siendo incluso más ancho que la distancia entre la base de la nube y el suelo.
Aún observadores de tormentas experimentados, pueden tener dificultades para diferenciar un tornado en cuña, de una nube baja, a la distancia.
Muchos de los tornados más grandes, aunque no todos, son en cuña.
En los Estados Unidos, por ejemplo, en promedio los tornados miden cerca de 150m de ancho, y recorren unos 8km en contacto con el suelo.
Por ejemplo, un tornado que afectó Hallam, Nebraska, el 22 de mayo de 2004, llegó en un punto, a medir 4km de ancho al nivel del suelo.
En términos de longitud de su recorrido, El Tornado Triestatal de 1925, o “Tri-State Tornado”, que afectó partes de Missouri, Illinois, e Indiana, el 18 de marzo de 1925, oficialmente se mantuvo en contacto con el suelo continuamente por 352km.
Muchos tornados, que aparentan tener recorridos de 160km o más, en realidad son una familia de tornados formados rápidamente de forma sucesiva; no obstante, no hay pruebas concretas de que esto ocurriera en el caso del Tornado Triestatal.
En los Estados Unidos, el 80% de los tornados, son clasificados como EF0 y EF1, de T0 a T3.
Cuanto mayor sea la intensidad de un rango, menor es su tasa de incidencia, pues menos de 1%, son tornados violentos, como el EF4, T8, o más fuerte.
Fuera del Tornado Alley, y de Norteamérica en general, los tornados violentos son extremadamente raros.
Aparentemente, esto se debe más que nada, al menor número de tornados en general que hay fuera de dicha región, ya que las investigaciones muestran, que la distribución de los tornados según su intensidad, es bastante similar a nivel mundial.
Unos cuantos tornados de importancia, ocurren cada año en Europa, áreas del centro-sur de Asia, porciones del sureste de Sudamérica, y el sur de África.
“I don't know how big.
They're tornadoes, they don't do courtesy calls”
Into The Storm es una película de ciencia ficción, del año 2014, dirigida por Steven Quale.
Protagonizada por Richard Armitage, Sarah Wayne Callies, Jeremy Sumpter, Nathan Kress, Matt Walsh, Arlen Escarpeta, Jon Reep, London Elise Moore, Kyle Davis, Alycia Debnam-Carey, entre otros.
El guión es de John Swetnam; centrado principalmente, en el desastre natural que se le conoce como “tornado”, y como género de desastres meteorológicos, sobre una ola de tornados que afecta Silverton, Oklahoma; EEUU, en una categoría EF6, aunque la categoría EF5 actual, no tiene límite superior.
Para la realización de Into The Storm, fueron consultados varios especialistas en esta clase de fenómenos, entre ellos, los realizadores del programa “Storm Hunters”
El rodaje tuvo lugar en Michigan, EEUU.
En el transcurso de un solo día, el pueblo de Silverton, es azotado por una serie de tornados sin precedentes.
Toda la ciudad, está a merced de ciclones erráticos y mortales, mientras que “los cazadores de tormentas” predicen que lo peor está aún por llegar.
La mayoría de las personas buscan refugio, mientras que otras corren hacia el vórtice, poniendo a prueba, hasta dónde está dispuesto a llegar un “cazador de tormentas” para conseguir esa toma que solo “se hace una vez en la vida”
Hay varios grupos de personajes que se forman, así que la acción está dividida en 4 frentes:
“Los Caza Tormentas”, con su tanque “Titus”:
Peter “Pete” Moore (Matt Walsh), Allison Stone (Sarah Wayne Callies), Jacob Hodges (Jeremy Sumpter), y Daryl (Arlen Escarpeta)
Unos tipos que cuelgan videos en youtube; los estudiantes de un instituto; y una pareja de adolescentes:
Donnie Fuller (Max Deacon) y Katlyn (Alycia Debnam-Carey), que rueda un corto como trabajo para el colegio, así que la acción está bien repartida.
Into The Storm, definitivamente no es un drama sobre seres humanos sobreviviendo a una tormenta, sino un filme de terror, y ciencia ficción que muestra a un grupo de científicos, desafiando a la naturaleza, cual héroes, y todo parece indicar, que la tormenta se ensaña contra ellos, con escenas impactantes, de aparente buenos efectos especiales, que dejan claro que, con la madre naturaleza, no hay quien pueda.
“Prepare to go into the storm”
En Into The Storm, todo está hecho por, y para el tornado, que eso sí, y como cabría esperar, es más que espectacular.
Bien rodado, con efectos formidables, y lo de siempre:
Historia paralela de lo más rudimentaria…
Ahondando un poco en el argumento, se nos muestran 2 historias paralelas, que se entrecruzan:
Por un lado, tenemos a unos documentalistas, que buscan obtener imágenes de tornados en cámara, con un objetivo final de capturar “el ojo del huracán” utilizando el “Titus”, una especie de tanque, diseñado para la tarea.
Completamente ajena a todo esto, es la historia de Donnie y Trey (Nathan Kress), 2 adolescentes que necesitan grabar la graduación de su preparatoria para un trabajo, y lidiar con la mala relación que tienen con su padre, Gary Fuller (Richard Armitage)
En medio de este contexto, y como era de esperar, aparece un tornado, junta las historias, y queda la embarrada… y ya se entiende por dónde va la cosa.
Y es que no hace falta ser un genio del cine, para darse cuenta que la historia, los personajes, y el desarrollo de los mismos, es un enorme cliché, que ya se ha visto en otras oportunidades:
Esa relación truncada entre padre e hijo, que se fortalece ante la adversidad; o la chica que se enamora del muchacho del que jamás se fijaría, sino fuese porque un tornado de proporciones bíblicas, casi les arranca la vida; ese mensaje final muy obvio, del cuidemos la naturaleza, claro, ahora hay que cuidar la naturaleza después de que tu casa voló por los aires, pero antes…
La historia es lo de menos, sabes lo que te vas encontrar en todo momento:
Destrucción y tornados, justamente es lo que buscas de este tipo de películas, que ofrece una historia sencilla, y un guión sencillo, con diálogos entre los personajes que no son destacables, pero las escenas de los tornados sí lo son.
Más allá de la historia, insisto, creo que nadie esperaba mucho más, Into The Storm posee un par de fortalezas, que impiden que la experiencia de observarla, sea traumática.
Lo primero, la duración total de la película, 90 minutos; y la distribución temporal de los actos durante el metraje, están acertados.
En ningún momento, te dan diálogos pobres, olvidándose de la acción; tal vez solo la primera media hora, profundiza más en la historia de los personajes, para dejar los siguientes 60 minutos, casi exclusivamente dedicados a los tornados.
Y aquí se suma la otra fortaleza:
Los efectos especiales, de primer nivel, y asombrosamente construidos, como la escena del tornado final, deja a cualquiera con la boca abierta.
Del reparto, solo Richard Armitage, quizás, sea el único que se salve de la quema, y aun así, el guión no le hace justicia, dejando una historia fantasiosa e inverosímil, además de tener un ritmo atropellado, por culpa de su primera media hora, que como cité, intenta profundizar en los personajes, para que nos importen, y solo hace que queramos que se los carguen pronto... y además, todos los personajes se comportan de modo extraño…
Si hay algo que no se le puede reprochar, es como el director y todo el departamento de animaciones, lograron recrear un verdadero caos, cada vez que los tornados hacen su aparición.
Los efectos especiales son estupendos, los tornados parecen bastante realistas, y las escenas en cuestión, están muy bien orquestadas; y es bastante detallista en este punto, sobre todo por hacer la diferencia con “Twister” (1996), al usar una mezcla con la cámara en mano, con cámara en tercera persona, con ese aire de documental; que aquí es todo multiplicado por 10, con la mejorada tecnología, años después de la creación de aquellos tornados sublimes.
Así, los efectos especiales son de primera, con una serie de tomas imposibles de olvidar, realmente abrumadoras, como el final, a como debe ser.
Como dato, las clases de tornados que se muestran, van desde la F1 a la F5, que puede llegar a vientos más de 500km por hora, y literalmente, absorber y levantar cualquier cosa.
Sin embargo, el principal problema de Into The Storm, es su dependencia absoluta del recurso de entretenimiento.
El término “exploitation” es bastante difícil de usar, pero a esta muestra le queda perfecto:
¿De verdad necesitamos ver a gente al borde de la muerte, cuando sabemos que van a sobrevivir?
Y peor aún:
¿Es necesario ver cómo algunos fallecen, por la necesidad de seguir la trama, y para que podamos observar un buen efecto especial; o la intervención de tontos usados como “carne de cañón”?
La respuesta de estas preguntas, varía entre lo afirmativo y negativo, entre los tipos de espectadores que disfrutan y aplauden este tipo de producciones, y aquellos que simplemente ven la película, porque se supone que “deben verla”
Lo interesante de la asistencia masiva a estas películas, es que la gente va al cine esperando ver la versión extendida de las escenas, visualmente impresionantes, que ya se mostraron en los avances del “tráiler”
Pero al contrario, tenemos que soportar por un espacio largo de tiempo, a lo nauseabundo de personajes que son “carne” de cámara, con tal de hacer ver la diferencia entre cámara en tercera persona, con la cámara de la película, y viceversa, y todas las demás combinaciones posibles de perspectiva.
Y en el fondo, Into The Storm es un desastre, desde un punto de vista cinematográfico, porque no cuenta una historia; simplemente cuenta una circunstancia, y la explota en un escenario repleto de planos manipulados, y diálogos absurdos, de personajes imposibles, y giros aburridos e innecesarios.
Como errores importantes, muchos:
Imposible ver como se alzan personas y no otros objetos de alrededor de mucho menos peso…
No todo vuela por el aire, pero arranca casas a destajo; y en lo personal, cuando el padre hace R.C.P. al hijo, no se hace respiración boca a boca... vamos, que no son besitos, es para salvar a tu hijo.
Pete, “El Cazador de Tornados” es insoportable.
Maltrata psicológicamente a la meteoróloga, de tal forma, que daban ganas de pegarle, pero ella aguantaba calladita...
La historia del padre viudo, que no se lleva con sus hijos, es demasiado forzada.
Los 2 hermanos fanáticos de youtube, a lo “Jackass” son absolutamente desagradables, pero había que incluir la gamberrada cómica…
¿Mejor se hubiera puestos serios, no?
Donnie, que queda encerrado debajo de una fábrica, con el agua hasta el cuello, con la chica que le gusta, y tiene señal en el teléfono… pero el padre que está “afuera y seco”, no tiene señal…
Ese mismo chico, que permaneció varios minutos con agua en los pulmones, y sin pulsaciones, y apenas se recupera… corre, y sigue filmando los tornados…
Los aviones gigantes en un aeropuerto, que apareció de golpe en un pequeño pueblo…
¿De dónde salieron?
Y volando por los aires, pero el viudo salva a la meteoróloga, agarrándola solo de la mano…
Respecto a los insoportables gamberros, y demás que todo lo filman en Into The Storm, es porque se quiere decir que es “La Era de Youtube”, y se nota, todo el mundo grabando, incluso cuando están en medio del peligro de la tormenta...
Muero pero lo filmé…
¡Estupidez!
Pero de lo contrario, Into The Storm no haría la diferencia, y no habría película, a modo de documental falso/encontrado a lo “reality show” si se quiere.
Imposible, lo que le sucedió a los 2 idiotas que se grababan haciendo cosas extremas, ya que si el tornado los agarró, jamás puede suceder lo que mostraron al final...
Pero bueno… las historias de amor, por dicha son solamente sugeridas, no consumadas, lo cual es un acierto; y se agradece que no hayan puesto el típico cliché, de protagonista masculino y femenino, se conocen, y al final se besan...
Eso hubiese estropeado todo.
Puestos en claro, Into The Storm se disfrutará por su alta calidad; por lo que debe ser vista como lo que es:
Una película de entretención, que utiliza los efectos especiales, para que veas como un huracán destruye un pueblo.
Si aceptas su lógica, es probable que pases un buen rato.
De lo contrario, te recomendamos buscar algún título más interesante; porque aquí no hay explicación científica ni historia profunda.
“This is a storm shelter for Christ's sake”
¿Puede suceder realmente, lo visto en Into The Storm?
El tornado más extremo del que se tiene registro, fue el Tornado Tri-Estatal, que atravesó partes de Missouri, Illinois, e Indiana, el 18 de marzo de 1925.
Posiblemente, hubiera sido clasificado como un tornado F5, aunque los tornados no eran clasificados en esa época; y mantiene los récords, por haber recorrido la mayor distancia, de 352km; la mayor duración, de unas 3,5 horas; y la mayor velocidad de desplazamiento hacia el frente, para un tornado de importancia, con unos 117km/h, en todo el mundo.
Además, es el tornado más mortífero en la historia de los Estados Unidos, con 695 muertos.
También, fue en su momento, el 2º tornado más costoso de la historia, pero ya ha sido superado por muchos otros sin normalizar.
Cuando los costos son normalizados, según la riqueza y la inflación, sigue siendo hoy en día, el 3° tornado más costoso.
El tornado más mortífero a nivel mundial, fue el tornado de Daulatpur-Saturia en Bangladés, el 26 de abril de 1989, que mató aproximadamente a 1.300 personas.
Bangladesh, ha tenido al menos, 19 tornados en su historia, que han matado a más de 100 personas, lo que representa al menos, la mitad del total en el resto del mundo.
La mayoría de los récords establecidos para oleadas de tornados, corresponden al llamado “Super Outbreak” o “Súper Oleada”, que afectó una gran parte del centro de los Estados Unidos, y una pequeña zona del sur de Ontario, en Canadá, entre el 3 y el 4 de abril de 1974.
No sólo presentó esta oleada, la increíble cantidad de 148 tornados, en únicamente 18 horas, sino que también, varios de ellos eran violentos:
Solo 7 eran de intensidad F5, y 23 eran F4.
Esta oleada, llegó a tener 16 tornados en la superficie, al mismo tiempo, en su punto más fuerte.
Más de 300 personas, posiblemente hasta 330, murieron a causa de los tornados de esta oleada.
Y es que las tormentas que producen tornados, pueden presentar intensas corrientes ascendentes, a veces sobrepasando los 240km/h.
Los desechos que levanta un tornado, pueden llegar hasta la tormenta principal, y ser arrastrados una gran distancia.
Un tornado que afectó a Great Bend, Kansas, en noviembre de 1915, fue un caso extremo, donde una “lluvia de desechos”, ocurrió a 130km del pueblo, donde un saco de harina fue hallado a 177km, y un cheque cancelado del Banco de Great Bend, fue encontrado en un campo, a las fueras de Palmyra, Nebraska, 491km al noreste.
Así como las trombas marinas, y tornados, han sido utilizados como una posible explicación, para ocasiones en que han llovido peces, y otros animales.
Así que, con aviso de tornados, mejor dejar los “likes” de youtube, si quieres sobrevivir un par de años, y “contar el cuento”
“What would you like to say to yourself in 25 years?”
De todos es conocido que el “cine catástrofe”, en inglés “disaster films”, es un género cinematográfico, compuesto por películas que tienen como tema principal, una catástrofe en curso o inminente para la humanidad.
Por lo general, traen consigo un amplio reparto de actores, y múltiples líneas argumentales, y se centran en los intentos de los personajes, de evitar, escapar, o resistir las consecuencias de la catástrofe.
Un personaje principal, varios menores, y muchos extras, que suelen morir antes de la resolución de la historia.
En lo particular, un tornado, es una masa de aire con alta velocidad angular; su extremo inferior, está en contacto con la superficie de La Tierra, y el superior con una nube “cumulonimbus” o excepcionalmente, con la base de una nube “cúmulus”
Se trata del fenómeno atmosférico ciclónico de mayor densidad energética de La Tierra, aunque de poca extensión, y de corta duración, que van desde segundos, hasta más de una hora.
Los tornados, se presentan en diferentes tamaños y formas, pero generalmente tienen la forma de una nube embudo, cuyo extremo más angosto toca el suelo, y suele estar rodeado por una nube de desechos y polvo, al menos, en sus primeros instantes.
La mayoría de los tornados, cuentan con vientos que llegan a velocidades de entre 65 y 180km/h, miden aproximadamente 75 metros de ancho, y se trasladan varios kilómetros, antes de desaparecer.
Los más extremos pueden tener vientos con velocidades que pueden girar a 450km/h, o más, y medir hasta 2km de ancho, y permanecer tocando el suelo a lo largo de más de 100km de recorrido.
Hay tornados grandes con un solo vórtice, que pueden verse como enormes cuñas enterradas en la tierra, y por tanto, se les conoce como “tornados en cuña”
Uno de estos tornados, puede ser tan ancho, que parezca ser un grupo de nubes oscuras, siendo incluso más ancho que la distancia entre la base de la nube y el suelo.
Aún observadores de tormentas experimentados, pueden tener dificultades para diferenciar un tornado en cuña, de una nube baja, a la distancia.
Muchos de los tornados más grandes, aunque no todos, son en cuña.
En los Estados Unidos, por ejemplo, en promedio los tornados miden cerca de 150m de ancho, y recorren unos 8km en contacto con el suelo.
Por ejemplo, un tornado que afectó Hallam, Nebraska, el 22 de mayo de 2004, llegó en un punto, a medir 4km de ancho al nivel del suelo.
En términos de longitud de su recorrido, El Tornado Triestatal de 1925, o “Tri-State Tornado”, que afectó partes de Missouri, Illinois, e Indiana, el 18 de marzo de 1925, oficialmente se mantuvo en contacto con el suelo continuamente por 352km.
Muchos tornados, que aparentan tener recorridos de 160km o más, en realidad son una familia de tornados formados rápidamente de forma sucesiva; no obstante, no hay pruebas concretas de que esto ocurriera en el caso del Tornado Triestatal.
En los Estados Unidos, el 80% de los tornados, son clasificados como EF0 y EF1, de T0 a T3.
Cuanto mayor sea la intensidad de un rango, menor es su tasa de incidencia, pues menos de 1%, son tornados violentos, como el EF4, T8, o más fuerte.
Fuera del Tornado Alley, y de Norteamérica en general, los tornados violentos son extremadamente raros.
Aparentemente, esto se debe más que nada, al menor número de tornados en general que hay fuera de dicha región, ya que las investigaciones muestran, que la distribución de los tornados según su intensidad, es bastante similar a nivel mundial.
Unos cuantos tornados de importancia, ocurren cada año en Europa, áreas del centro-sur de Asia, porciones del sureste de Sudamérica, y el sur de África.
“I don't know how big.
They're tornadoes, they don't do courtesy calls”
Into The Storm es una película de ciencia ficción, del año 2014, dirigida por Steven Quale.
Protagonizada por Richard Armitage, Sarah Wayne Callies, Jeremy Sumpter, Nathan Kress, Matt Walsh, Arlen Escarpeta, Jon Reep, London Elise Moore, Kyle Davis, Alycia Debnam-Carey, entre otros.
El guión es de John Swetnam; centrado principalmente, en el desastre natural que se le conoce como “tornado”, y como género de desastres meteorológicos, sobre una ola de tornados que afecta Silverton, Oklahoma; EEUU, en una categoría EF6, aunque la categoría EF5 actual, no tiene límite superior.
Para la realización de Into The Storm, fueron consultados varios especialistas en esta clase de fenómenos, entre ellos, los realizadores del programa “Storm Hunters”
El rodaje tuvo lugar en Michigan, EEUU.
En el transcurso de un solo día, el pueblo de Silverton, es azotado por una serie de tornados sin precedentes.
Toda la ciudad, está a merced de ciclones erráticos y mortales, mientras que “los cazadores de tormentas” predicen que lo peor está aún por llegar.
La mayoría de las personas buscan refugio, mientras que otras corren hacia el vórtice, poniendo a prueba, hasta dónde está dispuesto a llegar un “cazador de tormentas” para conseguir esa toma que solo “se hace una vez en la vida”
Hay varios grupos de personajes que se forman, así que la acción está dividida en 4 frentes:
“Los Caza Tormentas”, con su tanque “Titus”:
Peter “Pete” Moore (Matt Walsh), Allison Stone (Sarah Wayne Callies), Jacob Hodges (Jeremy Sumpter), y Daryl (Arlen Escarpeta)
Unos tipos que cuelgan videos en youtube; los estudiantes de un instituto; y una pareja de adolescentes:
Donnie Fuller (Max Deacon) y Katlyn (Alycia Debnam-Carey), que rueda un corto como trabajo para el colegio, así que la acción está bien repartida.
Into The Storm, definitivamente no es un drama sobre seres humanos sobreviviendo a una tormenta, sino un filme de terror, y ciencia ficción que muestra a un grupo de científicos, desafiando a la naturaleza, cual héroes, y todo parece indicar, que la tormenta se ensaña contra ellos, con escenas impactantes, de aparente buenos efectos especiales, que dejan claro que, con la madre naturaleza, no hay quien pueda.
“Prepare to go into the storm”
En Into The Storm, todo está hecho por, y para el tornado, que eso sí, y como cabría esperar, es más que espectacular.
Bien rodado, con efectos formidables, y lo de siempre:
Historia paralela de lo más rudimentaria…
Ahondando un poco en el argumento, se nos muestran 2 historias paralelas, que se entrecruzan:
Por un lado, tenemos a unos documentalistas, que buscan obtener imágenes de tornados en cámara, con un objetivo final de capturar “el ojo del huracán” utilizando el “Titus”, una especie de tanque, diseñado para la tarea.
Completamente ajena a todo esto, es la historia de Donnie y Trey (Nathan Kress), 2 adolescentes que necesitan grabar la graduación de su preparatoria para un trabajo, y lidiar con la mala relación que tienen con su padre, Gary Fuller (Richard Armitage)
En medio de este contexto, y como era de esperar, aparece un tornado, junta las historias, y queda la embarrada… y ya se entiende por dónde va la cosa.
Y es que no hace falta ser un genio del cine, para darse cuenta que la historia, los personajes, y el desarrollo de los mismos, es un enorme cliché, que ya se ha visto en otras oportunidades:
Esa relación truncada entre padre e hijo, que se fortalece ante la adversidad; o la chica que se enamora del muchacho del que jamás se fijaría, sino fuese porque un tornado de proporciones bíblicas, casi les arranca la vida; ese mensaje final muy obvio, del cuidemos la naturaleza, claro, ahora hay que cuidar la naturaleza después de que tu casa voló por los aires, pero antes…
La historia es lo de menos, sabes lo que te vas encontrar en todo momento:
Destrucción y tornados, justamente es lo que buscas de este tipo de películas, que ofrece una historia sencilla, y un guión sencillo, con diálogos entre los personajes que no son destacables, pero las escenas de los tornados sí lo son.
Más allá de la historia, insisto, creo que nadie esperaba mucho más, Into The Storm posee un par de fortalezas, que impiden que la experiencia de observarla, sea traumática.
Lo primero, la duración total de la película, 90 minutos; y la distribución temporal de los actos durante el metraje, están acertados.
En ningún momento, te dan diálogos pobres, olvidándose de la acción; tal vez solo la primera media hora, profundiza más en la historia de los personajes, para dejar los siguientes 60 minutos, casi exclusivamente dedicados a los tornados.
Y aquí se suma la otra fortaleza:
Los efectos especiales, de primer nivel, y asombrosamente construidos, como la escena del tornado final, deja a cualquiera con la boca abierta.
Del reparto, solo Richard Armitage, quizás, sea el único que se salve de la quema, y aun así, el guión no le hace justicia, dejando una historia fantasiosa e inverosímil, además de tener un ritmo atropellado, por culpa de su primera media hora, que como cité, intenta profundizar en los personajes, para que nos importen, y solo hace que queramos que se los carguen pronto... y además, todos los personajes se comportan de modo extraño…
Si hay algo que no se le puede reprochar, es como el director y todo el departamento de animaciones, lograron recrear un verdadero caos, cada vez que los tornados hacen su aparición.
Los efectos especiales son estupendos, los tornados parecen bastante realistas, y las escenas en cuestión, están muy bien orquestadas; y es bastante detallista en este punto, sobre todo por hacer la diferencia con “Twister” (1996), al usar una mezcla con la cámara en mano, con cámara en tercera persona, con ese aire de documental; que aquí es todo multiplicado por 10, con la mejorada tecnología, años después de la creación de aquellos tornados sublimes.
Así, los efectos especiales son de primera, con una serie de tomas imposibles de olvidar, realmente abrumadoras, como el final, a como debe ser.
Como dato, las clases de tornados que se muestran, van desde la F1 a la F5, que puede llegar a vientos más de 500km por hora, y literalmente, absorber y levantar cualquier cosa.
Sin embargo, el principal problema de Into The Storm, es su dependencia absoluta del recurso de entretenimiento.
El término “exploitation” es bastante difícil de usar, pero a esta muestra le queda perfecto:
¿De verdad necesitamos ver a gente al borde de la muerte, cuando sabemos que van a sobrevivir?
Y peor aún:
¿Es necesario ver cómo algunos fallecen, por la necesidad de seguir la trama, y para que podamos observar un buen efecto especial; o la intervención de tontos usados como “carne de cañón”?
La respuesta de estas preguntas, varía entre lo afirmativo y negativo, entre los tipos de espectadores que disfrutan y aplauden este tipo de producciones, y aquellos que simplemente ven la película, porque se supone que “deben verla”
Lo interesante de la asistencia masiva a estas películas, es que la gente va al cine esperando ver la versión extendida de las escenas, visualmente impresionantes, que ya se mostraron en los avances del “tráiler”
Pero al contrario, tenemos que soportar por un espacio largo de tiempo, a lo nauseabundo de personajes que son “carne” de cámara, con tal de hacer ver la diferencia entre cámara en tercera persona, con la cámara de la película, y viceversa, y todas las demás combinaciones posibles de perspectiva.
Y en el fondo, Into The Storm es un desastre, desde un punto de vista cinematográfico, porque no cuenta una historia; simplemente cuenta una circunstancia, y la explota en un escenario repleto de planos manipulados, y diálogos absurdos, de personajes imposibles, y giros aburridos e innecesarios.
Como errores importantes, muchos:
Imposible ver como se alzan personas y no otros objetos de alrededor de mucho menos peso…
No todo vuela por el aire, pero arranca casas a destajo; y en lo personal, cuando el padre hace R.C.P. al hijo, no se hace respiración boca a boca... vamos, que no son besitos, es para salvar a tu hijo.
Pete, “El Cazador de Tornados” es insoportable.
Maltrata psicológicamente a la meteoróloga, de tal forma, que daban ganas de pegarle, pero ella aguantaba calladita...
La historia del padre viudo, que no se lleva con sus hijos, es demasiado forzada.
Los 2 hermanos fanáticos de youtube, a lo “Jackass” son absolutamente desagradables, pero había que incluir la gamberrada cómica…
¿Mejor se hubiera puestos serios, no?
Donnie, que queda encerrado debajo de una fábrica, con el agua hasta el cuello, con la chica que le gusta, y tiene señal en el teléfono… pero el padre que está “afuera y seco”, no tiene señal…
Ese mismo chico, que permaneció varios minutos con agua en los pulmones, y sin pulsaciones, y apenas se recupera… corre, y sigue filmando los tornados…
Los aviones gigantes en un aeropuerto, que apareció de golpe en un pequeño pueblo…
¿De dónde salieron?
Y volando por los aires, pero el viudo salva a la meteoróloga, agarrándola solo de la mano…
Respecto a los insoportables gamberros, y demás que todo lo filman en Into The Storm, es porque se quiere decir que es “La Era de Youtube”, y se nota, todo el mundo grabando, incluso cuando están en medio del peligro de la tormenta...
Muero pero lo filmé…
¡Estupidez!
Pero de lo contrario, Into The Storm no haría la diferencia, y no habría película, a modo de documental falso/encontrado a lo “reality show” si se quiere.
Imposible, lo que le sucedió a los 2 idiotas que se grababan haciendo cosas extremas, ya que si el tornado los agarró, jamás puede suceder lo que mostraron al final...
Pero bueno… las historias de amor, por dicha son solamente sugeridas, no consumadas, lo cual es un acierto; y se agradece que no hayan puesto el típico cliché, de protagonista masculino y femenino, se conocen, y al final se besan...
Eso hubiese estropeado todo.
Puestos en claro, Into The Storm se disfrutará por su alta calidad; por lo que debe ser vista como lo que es:
Una película de entretención, que utiliza los efectos especiales, para que veas como un huracán destruye un pueblo.
Si aceptas su lógica, es probable que pases un buen rato.
De lo contrario, te recomendamos buscar algún título más interesante; porque aquí no hay explicación científica ni historia profunda.
“This is a storm shelter for Christ's sake”
¿Puede suceder realmente, lo visto en Into The Storm?
El tornado más extremo del que se tiene registro, fue el Tornado Tri-Estatal, que atravesó partes de Missouri, Illinois, e Indiana, el 18 de marzo de 1925.
Posiblemente, hubiera sido clasificado como un tornado F5, aunque los tornados no eran clasificados en esa época; y mantiene los récords, por haber recorrido la mayor distancia, de 352km; la mayor duración, de unas 3,5 horas; y la mayor velocidad de desplazamiento hacia el frente, para un tornado de importancia, con unos 117km/h, en todo el mundo.
Además, es el tornado más mortífero en la historia de los Estados Unidos, con 695 muertos.
También, fue en su momento, el 2º tornado más costoso de la historia, pero ya ha sido superado por muchos otros sin normalizar.
Cuando los costos son normalizados, según la riqueza y la inflación, sigue siendo hoy en día, el 3° tornado más costoso.
El tornado más mortífero a nivel mundial, fue el tornado de Daulatpur-Saturia en Bangladés, el 26 de abril de 1989, que mató aproximadamente a 1.300 personas.
Bangladesh, ha tenido al menos, 19 tornados en su historia, que han matado a más de 100 personas, lo que representa al menos, la mitad del total en el resto del mundo.
La mayoría de los récords establecidos para oleadas de tornados, corresponden al llamado “Super Outbreak” o “Súper Oleada”, que afectó una gran parte del centro de los Estados Unidos, y una pequeña zona del sur de Ontario, en Canadá, entre el 3 y el 4 de abril de 1974.
No sólo presentó esta oleada, la increíble cantidad de 148 tornados, en únicamente 18 horas, sino que también, varios de ellos eran violentos:
Solo 7 eran de intensidad F5, y 23 eran F4.
Esta oleada, llegó a tener 16 tornados en la superficie, al mismo tiempo, en su punto más fuerte.
Más de 300 personas, posiblemente hasta 330, murieron a causa de los tornados de esta oleada.
Y es que las tormentas que producen tornados, pueden presentar intensas corrientes ascendentes, a veces sobrepasando los 240km/h.
Los desechos que levanta un tornado, pueden llegar hasta la tormenta principal, y ser arrastrados una gran distancia.
Un tornado que afectó a Great Bend, Kansas, en noviembre de 1915, fue un caso extremo, donde una “lluvia de desechos”, ocurrió a 130km del pueblo, donde un saco de harina fue hallado a 177km, y un cheque cancelado del Banco de Great Bend, fue encontrado en un campo, a las fueras de Palmyra, Nebraska, 491km al noreste.
Así como las trombas marinas, y tornados, han sido utilizados como una posible explicación, para ocasiones en que han llovido peces, y otros animales.
Así que, con aviso de tornados, mejor dejar los “likes” de youtube, si quieres sobrevivir un par de años, y “contar el cuento”
“What would you like to say to yourself in 25 years?”
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