Tajna Nikole Tesle

“Ere many generations pass, our machinery will be driven by a power obtainable at any point of the universe”

El mundo necesita despertar...
Sólo las mentes curiosas nos han traído las mejoras verdaderas; por lo que no dejemos que unos pocos opaquen la vida humana, y su rol en este planeta que es cuidarlo para generaciones futuras.
Hace 5 días, se cumplieron 75 años del fallecimiento del genio Nikola Tesla, de etnia serbia, nacido en el pueblo de Smiljan, actualmente en Croacia, en el entonces Imperio Austrohúngaro, y tiempo después se nacionalizaría estadounidense; fue un inventor, ingeniero mecánico, eléctrico y físico, al que se le conoce sobre todo por sus numerosas invenciones en el campo del electromagnetismo, desarrolladas a finales del siglo XIX y principios del siglo XX.
Este gran olvidado “descubridor”, como se hacía llamar, poco a poco va recuperando el lugar que se merece en la historia, pues todos los días continuamos utilizando diversos aparatos y tecnologías que él ideó cuando otros sólo se atrevían a soñarlos, como los rayos X, el control remoto, y la radio, este último, probablemente el robo más flagrante que nunca le hicieron a Tesla; y es que las patentes de Tesla y su trabajo teórico, ayudaron a forjar las bases de los sistemas modernos para el uso de la energía eléctrica por corriente alterna (CA), incluyendo el sistema polifásico de distribución eléctrica, y el motor de corriente alterna, que contribuyeron al surgimiento de La Segunda Revolución Industrial; y se le reconoció ampliamente como uno de los más grandes ingenieros eléctricos de los Estados Unidos.
Durante este periodo, la fama de Tesla rivalizaba con la de cualquier inventor o científico de la historia o la cultura popular, pero debido a su personalidad excéntrica, y a sus afirmaciones increíbles, a veces totalmente inverosímiles, y en ocasiones, falsas, acerca del posible desarrollo de innovaciones científicas y tecnológicas, Tesla terminó relegado al ostracismo, y considerado un “científico loco”; pues él creía que solo era cuestión de tiempo que el hombre pudiese adaptar las máquinas al engranaje de la naturaleza, declarando:
“Antes que pasen muchas generaciones, nuestras máquinas serán impulsadas por un poder obtenido en cualquier punto del universo”
Nikola Tesla nació el 10 de julio de 1856, cerca de la costa del Adriático.
Su padre era un eclesiástico serbio ortodoxo, y su madre era una mujer inteligente, aunque analfabeta; siendo Nikola, el penúltimo de una familia de 5 hijos.
Sus padres querían que ingresase en La Iglesia o el ejército… pero logró demostrar que poseía numerosas cualidades intelectuales, tales como una gran memoria fotográfica, un genio inventivo, el don de visualizar con tal nitidez que no tiene necesidad de maquetas, ni de dibujos, ni siquiera de experimentar; tanto que su representación mental, convierte a los modelos en perfectamente reales.
Además, él mismo decía:
“Todo lo que invento funciona como lo he imaginado, la experimentación se desarrolla tal como estaba previsto”
Y es que desde pequeño inventa objetos originales; a pesar de haber tenido una infancia problemática, debido a una historia familiar muy intensa que le creó problemas psicológicos y fobias.
Es sólo a la edad de 17 años, cuando empieza a interesarse realmente en sus inventos; y Tesla aparece como un autodidacta.
Desde muy joven, Tesla pasaba el tiempo leyendo muchas obras y memorizando libros completos, ya que supuestamente poseía una memoria fotográfica.
Hay quien cree que parte de la figura de Tesla se debe a que tenía un principio de sinestesia.
Un sinestésico puede percibir de forma conjunta diferentes sensaciones, mezclar sus sentidos; y las principales características son:
La posibilidad de oler un color, ver un sonido, percibir un gusto al tocar la textura de un objeto, etc.
En su autobiografía, Tesla relató que en ciertas ocasiones experimentó momentos detallados de inspiración.
Durante su infancia, sufrió varios episodios de una enfermedad muy peculiar, la cual provocaba que cegadores haces de luz apareciesen ante sus ojos, a menudo acompañados de alucinaciones.
Normalmente, las visiones estaban asociadas a una palabra o idea que le rondaba la cabeza.
Otras veces, estas le daban la solución a problemas que se le habían planteado.
Simplemente con escuchar el nombre de un objeto, era capaz de visualizarlo de forma muy realista.
Actualmente, la sinestesia presenta síntomas similares... y es que Tesla podía visualizar una invención en su cerebro con precisión extrema, incluyendo todas las dimensiones, antes de iniciar la etapa de construcción; una técnica algunas veces conocida como “pensamiento visual”
De hecho, Tesla no solía dibujar esquemas, en lugar de eso concebía todas las ideas solo con la mente.
También en ocasiones tenía reminiscencias de hechos que le habían sucedido previamente en su vida; fenómeno este que se inició durante su infancia.
Para cuando se produjo la apertura de la central telefónica en 1881 en Budapest, Tesla se había convertido en el jefe de electricistas de la compañía, y fue más tarde, ingeniero del primer sistema telefónico del país.
También desarrolló un dispositivo que, de acuerdo con ciertas fuentes, era un repetidor telefónico o amplificador, pero que, según otros, pudo haber sido el primer altavoz.
En junio de 1884, llegó por primera vez a los Estados Unidos, a la ciudad de New York, con poco más que una carta de recomendación de Charles Batchelor, un antiguo empleador; dirigida a Thomas Edison:
“Conozco a 2 grandes hombres, usted es uno de ellos; el otro es este joven”
 Edison fue un empresario y un prolífico inventor, considerado el inventor más importante de Estados Unidos; que desarrolló muchos dispositivos que han tenido gran influencia en todo el mundo, como el fonógrafo, la cámara de cine o una duradera bombilla incandescente.
Apodado “El Mago de Menlo Park”, Edison fue uno de los primeros inventores en aplicar los principios de la producción en cadena, y el trabajo en equipo a gran escala al proceso de invención, motivos por los cuales se le reconoce la creación del primer laboratorio de investigación industrial.
Edison fue un inventor prolífico que registró 1093 patentes a su nombre en Estados Unidos, además de otras en Reino Unido, Francia y Alemania; pero más importante que sus muchas patentes, fue el amplio impacto que tuvieron algunas de sus invenciones:
La luz eléctrica y el suministro público de electricidad, la grabación de sonido y la cinematografía, se convirtieron en nuevas y poderosas industrias en todo el mundo.
Sus inventos contribuyeron en particular, a las telecomunicaciones, como una máquina de voto, una batería para un automóvil eléctrico, la energía eléctrica, la grabación de música y las películas.
Sus avanzados trabajos en estos campos, no fueron más que una continuación de su primer trabajo como radiotelegrafista.
Además, Edison desarrolló un sistema de generación y distribución de energía eléctrica a las casas, negocios y fábricas, un avance crucial para el mundo industrializado moderno.
Así pues, Edison contrató a Tesla para trabajar en su Edison Machine Works; y empezó a trabajar para Edison como un simple ingeniero eléctrico, resolviendo algunos de los problemas de la compañía.
Tesla afirmaba, que le habían ofrecido $50.000, unos $1,1 millones en 2007, ajustado por inflación; por rediseñar los ineficientes motores y generadores de Edison, mejorando tanto su servicio como su economía.
En 1885, cuando Tesla preguntó acerca de su remuneración, Edison replicó:
“Tesla, usted no entiende nuestro humor estadounidense”, rompiendo así su palabra; y con un sueldo de solo $18 a la semana, tendría que haber trabajado 53 años para reunir el dinero que le fue prometido; oferta que era igual al capital inicial de la compañía; por lo que renunció a su empleo de inmediato, cuando se le denegó un aumento de $25 semanales.
Poco después, necesitado de trabajo, se encontró a sí mismo cavando zanjas para la compañía de Edison por un corto periodo de tiempo, el cual aprovechó para concentrarse en su sistema polifásico de corriente alterna.
En 1886, Tesla fundó su propia compañía, la Tesla Electric Light & Manufacturing.
Los primeros inversionistas, no estuvieron de acuerdo con sus planes para el desarrollo de un motor de corriente alterna, y finalmente lo relevaron de su puesto en la compañía.
Por tanto, trabajó como obrero en New York de 1886 a 1887 para mantenerse y reunir capital para su próximo proyecto.
Empeñado Tesla en mostrar la superioridad de la corriente alterna sobre la corriente continua de Edison, se entabló lo que se conoce como “La Guerra de Las Corrientes”, una competencia económica y tecnológica producida en la década de 1880, por el control del incipiente mercado de la generación y distribución de energía eléctrica.
Nikola Tesla y Thomas Edison, se convirtieron en adversarios debido a la promoción de la corriente continua de Edison y J. P. Morgan, que crearon General Electric para la distribución de energía eléctrica, y que a su vez estaba en contra de la corriente alterna defendida por George Westinghouse y Nikola Tesla.
A pesar de la popularidad de Edison y sus descubrimientos e inventos, fue la corriente alterna propugnada por Tesla, la que predominó para la distribución de electricidad, desde entonces hasta nuestros días.
Por otra parte, y muy a pesar de que El Premio Nobel de Física fue otorgado a Guglielmo Marconi por la invención de la radio en 1909, la prensa publicó que Edison y Tesla compartirían El Premio Nobel en 1915; pero Edison trató de minimizar los logros de Tesla, y se negó a recibir el premio en caso de que fuera compartido.
Algunas fuentes afirmaron que, debido a la envidia de Edison, ninguno lo ganó, a pesar de sus grandes contribuciones a la ciencia.
Irónicamente, Tesla solo fue premiado con La Medalla Edison, la máxima distinción otorgada por El Instituto de EEUU de Ingenieros Eléctricos (AIEE) en 1916:
“Por sus meritorios logros en sus tempranos e innovadores trabajos de los sistemas polifásicos y de alta frecuencia de las corrientes eléctricas”
Y es que La Medalla Edison, también irónicamente fue concedida a mucha gente que trabajó en el campo de la corriente alterna, cuando el propio Edison fue defensor acérrimo de la continua.
Tesla-Westinghouse, fueron los verdaderos padres de la electricidad, quienes hicieron posible su creación, distribución y uso, por y para todo el mundo.
Sabedor de su talento, Edison, preso de la envidia, no dejó de humillar y ridiculizar a Tesla; y cuando Thomas Edison murió, en 1931, Tesla aportó la única opinión negativa al New York Times, enterrado en una amplia cobertura de la vida de Edison:
“Edison no tenía afición, no se preocupaba por ningún tipo de diversión, y vivía en absoluto desprecio de las más elementales normas de higiene...
Su método era ineficiente en extremo, ya que había que cubrir un inmenso terreno para obtener cualquier cosa, a menos que interviniera la casualidad ciega y, al principio, casi fui un triste testigo de sus acciones, sabiendo que solo un poco de teoría y cálculo le habrían ahorrado el 90% del trabajo.
Pero tenía un verdadero desprecio por el aprendizaje de libros y el conocimiento matemático, confiando por completo en el instinto inventor, y en el sentido estadounidense práctico”
No hay dudas que Nikola Tesla era un psíquico...
Su memoria fotográfica, sus posibilidades de visualización y su fisiología supersensible, lo ubican en una categoría única.
Cuando viajó a Europa en 1890 por la muerte de su madre, tuvo la oportunidad de mantener interesantes charlas con el famoso parapsicólogo Williams Crookes, y esos diálogos lo llevaron a creer en la telepatía, y en la vida después de la muerte; pero ni siquiera la visión de la aparición de su madre el día en que murió, le cambió ni siquiera en el último minuto de vida, su “racionalismo científico”
A pesar de que sus inventos le llegaban como revelaciones, nunca se creyó metapsíquico; y su contacto extraterrestre, le dio fama entre los ocultistas y se tejieron leyendas...
“Throughout space there is energy.
Is this energy static or kinetic!
If static our hopes are in vain; if kinetic, and this we know it is, for certain, then it is a mere question of time when men will succeed in attaching their machinery to the very wheelwork of nature”
Tajna Nikole Tesle es un drama yugoslavo, del año 1980, dirigido por Krsto Papić.
Protagonizado por Petar Božović, Strother Martin, Orson Welles, Dennis Patrick, Oja Kodar, Boris Buzančić, entre otros.
El guión es de Ivo Brešan, Ivan Kušan, y Krsto Papić; hablada en serbo-croata y en inglés; es una historia basada en trabajos altamente documentados y entrevistas con personas que conocieron personalmente a Tesla, y observaron de primera mano, demostraciones de sus conceptos puestos a trabajar.
Y es que Nikola Tesla fue uno de los pocos inventores, en realidad el único que se le viene a la mente, que se dedicaba principalmente a beneficiar la vida en La Tierra; mientras que otros inventores buscaban la gloria, las ganancias y los intereses económicos.
Tesla, simplemente quería mejorar el planeta; y en ese sentido, sus ideas sobre el poder limpio y libre, surgieron mucho antes de que nuestros recursos menguantes y El Calentamiento Global lo convirtieran en una necesidad egoísta; por lo que Tesla era un verdadero altruista; y en el contexto de la reivindicación de la figura de Tesla, que se inició a finales del pasado siglo XX, el director Krsto Papić dirigió esta película directa, sentida y cargada de buena intención; que históricamente no es completamente precisa, sobre todo por su duración de 90 minutos; pero el esfuerzo está ahí; porque tiene antecedentes principalmente reales, y los eventos formativos de la vida de Nikola Tesla se presentan de forma relativamente realista.
Sobre todo, Tajna Nikole Tesle describe el período comprendido entre 1884 y 1913; a modo de una dramatización de la vida y el trabajo de Nikola Tesla (Petar Božović), desde que llegó a los EEUU, y se hizo famoso como científico, cuyos inventos fueron robados, pero cuya mayor contribución a la humanidad sigue siendo un misterio hasta el día de hoy.
Nikola Tesla, es un yugoslavo, croata de origen serbio, que tras pasar por Paris, viaja a Estados Unidos para trabajar en la empresa del gran Thomas Alva Edison (Dennis Patrick), puesto que tiene una idea innovadora respecto a la transmisión de la electricidad; pero a Edison no le gusta nada la idea que Tesla tiene acerca de la corriente alterna, puesto que Edison ha diseñado muchas centrales con corriente continua, y todos sus inventos funcionan con éste.
Pero aun así lo contrata, para luego darle la patada… y Tesla acaba diseñando un motor de corriente alterna, y en un “meeting” logra encender el pabellón donde se celebra.
Pero Edison piensa que es una mala y peligrosa idea, y no da nada por ella.
Sin embargo, se le presenta George Westinghouse (Strother Martin), porque le ha interesado mucho su invención, y lo contrata.
Por su parte, para demostrar que la corriente alterna es mala, Edison electrocuta a un perro con esta electricidad… y la gente empieza a odiar a Tesla; y para demostrar al mundo que la corriente alterna no es peligrosa, el mismo Tesla hace una prueba ante un público en el que el propio Tesla tocará 2 electrodos con un millón de voltios.
Su amiga, Katharine Johnson (Oja Kodar), esposa del diplomático y escritor, Robert Underwood Johnson (Boris Buzančić), intenta impedir que se suicide, agarrando uno de los electrodos, pero él hace puente con ella, y se encienden las bombillas, demostrando que la corriente alterna no los ha achicharrado.
Entonces El Presidente de General Electric, John Pierpont Morgan Sr. (Orson Welles), que también era empresario, banquero y coleccionista de arte, que dominó las finanzas corporativas y la consolidación industrial de su época, siendo uno de los hombres más ricos del mundo; le pide a Tesla que genere electricidad en la zona de Las Cataratas del Niágara, que era un proyecto inicialmente cedido a Edison.
Así inicia “La Guerra de Corrientes”, que ya se estaba inclinando a favor de Tesla y Westinghouse; por lo que gracias al éxito, Tesla sigue creando nuevos inventos.
Finalmente, Tesla está construyendo una gran torre, cuya utilidad es un secreto...
En el año 1900, Morgan la financia con $150.000, y le cede un predio en Long Island a Nikola Tesla para hacer la Torre Wardenclyffe; lo que prometía ser un transmisor de radio de alta potencia para comunicaciones trasatlánticas.
La Torre, recibe su nombre en honor a James S. Warden, un banquero y abogado que había comprado terrenos en Shoreham, Long Island, a unos 96,5 Kilómetros de Manhattan.
Tesla consiguió ponerla en marcha en varias ocasiones con un rotundo éxito; pero en 2 de ellas las instalaciones rebasaron la potencia límite, y ardieron parcialmente; y para 1903, Tesla había gastado toda la inversión inicial sin completar el proyecto; además, Guglielmo Marconi había realizado una transmisión transatlántica con un equipo mucho más barato, aunque usando patentes de Tesla.
Entonces Morgan declinó refinanciar más este proyecto; y Tesla intentó generar mayor interés en La Torre Wardenclyffe, revelando la capacidad de transmitir electricidad de forma inalámbrica, pero con la pérdida de los fondos de Morgan, y la situación de Wall Street en 1903, su proyecto nunca fue completado.
Sin capital de inversión adicional disponible, el proyecto en Wardenclyffe fue abandonado en 1906, para nunca volverse operativo.
Tajna Nikole Tesle, incluye referencias a las habilidades de visualización mental detallada de Tesla, así como a los hábitos personales, las indulgencias o las excentricidades que se fueron intensificando lentamente por lo que se hizo casi tan conocido; y retrata a Tesla en una batalla con Thomas Edison sobre la superioridad de la corriente alterna sobre la corriente continua.
También, representa el sueño de Tesla, de proporcionar a los consumidores de todo el mundo, una energía inalámbrica ilimitada.
Pero la gente a su alrededor, tendía a apoyar su genio para obtener ganancias, mientras que Tesla parecía indiferente a las consideraciones monetarias.
Así, la película ofrece una visión intrigante del genio, al tiempo que expone las numerosas excentricidades de Tesla; a modo de una exploración melodramática de la vida y obra de Nikola Tesla; y curiosamente, sin ser excesivamente espiritualista, logra una especie de horror “Lovecraftiano”, cuando el viejo chiflado Tesla, conversa con los difuntos Westinghouse y Twain, esperando conversar con Morgan…
Intermitente entre la nostalgia croata nacionalista por la ciudad natal de Tesla, y el respeto reverencial por la verdadera protagonista de la película, la corriente alterna; el final da muchísimo que pensar sobre lo que pudo haber sucedido si Tesla hubiera logrado culminar su gran secreto.
Así las cosas, el director croata, Krsto Papić, armó un elenco que incluye 3 actores estadounidenses, interpretando personalidades icónicas de Estados Unidos en el siglo XIX, y principios del siglo XX:
J.P. Morgan (1837-1913), Thomas Edison (1847-1931) y George Westinghouse (1846-1914)
Morgan, es interpretado por Orson Welles, mientras que la actriz croata, Oja Kodar, compañera de Welles durante los últimos 24 años de su vida, tiene el papel de Katharine Johnson (1855-1924), con quien Tesla se mantuvo durante muchos años, y cuyo marido, Robert Underwood Johnson (1853-1937), interpretado por el actor croata, Boris Buzančić; fue un poeta, erudito, diplomático, amigo y defensor de toda la vida de Tesla.
Los otros estadounidenses en el elenco, son los actores:
Strother Martin como Westinghouse, que murió 6 semanas antes del estreno en inglés, el 12 de septiembre de la película en El Festival de Cine de Toronto; y Dennis Patrick como Edison.
Y es increíble comprobar, cómo el personaje de Nikola Tesla paso desapercibido en la historia real del avance científico del último siglo.
Nadie duda de este personaje, adelantado a su época, la guerra de intereses en avances tecnológicos fueron los que provocaron en aquellos que poseían los recursos para agilizar nuevos conocimientos, la ira, los celos y el desprecio hacia este hombre progresista.
Esta es una increíble historia, sobre el grandísimo e inigualable científico y revolucionario; cuya gran labor consistía en hacer la vida de las personas más digna y saludable, garantizando la accesibilidad de lo que hoy día, nuestra moderna civilización depende aún más y más; y que ha generado terribles guerras.
Pues todos los días utilizamos sus logros, y no podemos vivir sin ellos... la energía en forma de electricidad.
Por lo que no se puede ver esta película, sin pensar en los negocios multimillonarios de carbón y petróleo que se verían afectados por el desarrollo de fuentes de energía alternativas, limpias y baratas.
Así que Tajna Nikole Tesle es una película para aquellos que entienden el concepto central que ha hecho tan talentoso a Steve Jobs:
“Quería ayudar al mundo”
Bueno, antes que él, también lo hizo Nikola Tesla, pero a diferencia del genio tardío, se olvidó de tener en cuenta que no podría hacer que el mundo sea rico mientras exista la avaricia y, sobre todo, la ignorancia, que lamentablemente es igual de natural.
“Money does not represent such a value as men have placed upon it.
All my money has been invested into experiments with which I have made new discoveries enabling mankind to have a little easier life”
Tajna Nikole Tesle nos da cuenta de los principales acontecimientos de la vida de alguien relativamente desconocido para la mayoría de la gente que, por otra parte, cree poseer una cultura general relativamente amplia.
Y no hay motivo para escandalizarse ante el desconocimiento generalizado de esta figura tan relevante en la historia de la ciencia y la técnica del siglo pasado, pues la película explica en buena medida, las causas de este hecho.
Yo mismo lo conocí hace relativamente poco; y esta es la única película sobre Nikola Tesla que he visto.
Además, nunca he leído ningún libro sobre él, y sus inventos... vergüenza de mí; y puedo imaginar que este filme biográfico, sobre este genio, no tiene la popularidad que se merece, porque fue realizada en un país de poco reconocimiento cinematográfico, y además, ataca el capitalismo de EEUU, ya que todas las empresas luchan por obtener beneficios económicos, y Tesla tan sólo quería ayudar a la humanidad, y no quiso nunca sacar tajada; porque tanto Edison como Westinghouse o Morgan, siempre buscaron ganancias.
Así, Tajna Nikole Tesle trata de darnos la esencia de su vida; y adopta un enfoque melancólico y documental que indudablemente aburrirá a muchas personas que no conozca la trascendencia de Tesla; además porque hay escenas crípticas, sin palabras, de Tesla observando la naturaleza como las puestas de sol, ríos y, por supuesto, tormentas eléctricas.
Esta es una manera sutil de mostrar, cómo Tesla derivó su inspiración de los elementos naturales; sin embargo, al usar este enfoque sutil, el director sacrifica el impulso de la trama.
Así se nos presenta un prólogo sobre el papel decisivo de la energía en nuestro mundo, y el modo en que ésta es extraída y utilizada.
Llama la atención que la película fuera producida en 1980, al fin de la década de los 70, justo cuando se empezaba a tomar conciencia de los efectos nocivos de la acción humana sobre el planeta, muy bien representado por el famoso “Informe sobre Los Límites del Desarrollo” de Donella Meadows de 1972.
Todo esto dio lugar al nacimiento de los partidos verdes, y la conciencia ecológica.
El momento para reivindicar la figura de Tesla, era entonces el adecuado, no obstante, parece que el impacto de este empeño fue más bien escaso.
Aún con todo, su figura debe seguir siendo un referente en nuestros días, cuando urge encontrar soluciones a nuestro irracional modelo económico.
Sea como fuere, continuando con la exposición de la estructura de la obra, toma como base el modelo de la tragedia:
Una vez superado el prólogo, se nos muestra al descubridor en los momentos previos a su muerte, que aconteció en 1943, cuando su ocaso y declinar ya son manifiestos.
Éste sería el presente que, a continuación empieza a ser enlazado con el pasado, a través de un largo “flashback”
Y es aquí cuando viene la parte central de la obra, en la que siempre intervienen varios personajes en escena, igual a la tragedia; cuyo objetivo será explicar las razones de la caída de Tesla, de su condena al ostracismo por parte de la comunidad científica y la opinión pública.
El protagonista, en sus diálogos con los diferentes protagonistas, que serían en cierto sentido el coro, porque aquí todo gira en torno a Tesla; irá dando una exposición de sus visiones e ideas filosóficas, morales, científicas sobre todo, etc.; y se definirá frente a los demás:
Su agria relación con el envidioso y manipulador Edison, celoso de conservar su ascendiente en la sociedad; con el codicioso Morgan, interesado tan sólo en el dinero; con los filántropos Catherine y Johnson, casi tan ingenuos como el propio Tesla en lo referente a sus ideales; etc.
Al final aparecerá Tesla en su habitación, sólo, esclavo de su propia impotencia…
El espectador comprueba, que Tesla es un hombre atemporal, cuyo castigo es producto de ese “no tener sitio en el tiempo”, de mostrar unas ideas tan revolucionarias, que rompían los rígidos corsés en que se hallaba sumido el mundo por aquel entonces, y aún ahora.
En sí, podemos decir que su castigo fue su desafío abierto contra un mundo donde primaban unos intereses muy diferentes a los del mero altruismo y la ciencia, por el bien de la humanidad.
Así pues, se puede considerar que la estructura de la obra es impecable; y es sorprendente por muchos motivos.
Es obvio que sus efectos especiales, especialmente esos toscos relámpagos que cruzan el cielo en determinados momentos, y que serían la representación de esos “flashes” mentales que Tesla sufría, no sorprenderán a nadie; pero desde el punto de vista cinematográfico, se le puede censurar cierta falta de tensión narrativa, un planteamiento algo simplista, y ese excesivo deseo de ensalzar al personaje histórico, que resta algo de interés a la producción.
Pero posee, no obstante, una buena dosis de carga crítica, y se puede afirmar que cumple con su voluntad de enaltecer al inventor centroeuropeo.
Casi secundario, es la acción:
La amarga rivalidad de Edison, quien, sí, fue un fanático sociópata que efectivamente electrocutaba perros y gatos en público como lo alude esta película; así como los fenomenales logros de Tesla, iluminando La Feria Mundial y construyendo la estación de energía de corriente alterna en Niágara Falls, son pasados por alto a la luz de las fantasías soñadoras de Tesla.
Y el plan más grandioso de Tesla, una “Tierra de Energía Libre”, se presentó de manera tan ambigua, que nosotros, los espectadores, salimos sintiéndonos un poco insatisfechos…
Por supuesto, esa fue la intención del director.
Nosotros no hemos sido completados, porque obviamente no estamos saltando alrededor del mundo en máquinas Tesla gratis de la manera que él había esperado.
Ni siquiera sabemos 1/100 de lo que podríamos haber tenido, si la historia hubiera tomado un giro diferente.
Por lo que esta película debe ser abordada muy filosófica y artísticamente.
De lo real, representa con precisión la conexión entre Katherine Johnson y Nikola; y muchos otros hechos que están bien documentados en las biografías de Tesla; así como muestra a Edison, Westinghouse, J.P. Morgan, Mark Twain (Samuel Clemens), Marconi, y otras grandes pelucas de la época.
Incluso me sorprendí al ver que parece que construyeron una versión a escala completa de La Estación Experimental de Colorado Springs, y de La Torre Wardenclyffe, todo un logro para tan escaso presupuesto.
Sin embargo, hay que reconocer que cosas como ésta, se pueden dejar a un lado si tenemos en cuenta la brillantez del reparto, cuya actuación raya en conjunto a un nivel muy alto, con participación incluida de Orson Welles en el papel de J.P. Morgan.
No sería conveniente olvidar a Dennis Patrick en el papel de Thomas Edison, que está impresionante, todo un bastardo como el monopolista ineficiente del negocio de la electricidad continua; mientras Welles es puesto como el magnate multimillonario e inversionista sin escrúpulos, muy de la época.
Ambas actuaciones son espectacularmente elegantes, y muy realistas.
Pero la gloria queda para el siempre sorprendente y polifacético Petar Božović quien, curiosamente, se me ocurre decir que con el paso de los años ha sufrido una evolución fisiológica muy similar a la de Orson Welles, porque de aquí a sus últimos films, hay que reconocer que es difícil creer que en ambos es el mismo hombre.
La solemnidad que Božović imprime a su personaje, cómo refleja sus manías e interioriza su modo de ser refinado, reservado y abnegado en su deseo de beneficiar a la humanidad con su ingenio, serán irrepetibles en la historia del cine, si es que algún día se vuelve a hacer un biopic del “descubridor croata”, como a él le gustaba que le llamaran.
Es más, Petar Božović contribuye a dar al film, ese carácter de tragedia griega que lo sobrevuela de principio a fin, y es que en cierto sentido, toda la obra está concebida de este modo.
Su mirada, es la mirada de Tesla, al igual que la pose, su hablar, todo, es Tesla mismo, y será irrepetible.
Como dato, el título en español de la película, “El Secreto de Nikola Tesla”, alude a las tontas afirmaciones hechas por Tesla en sus años de decadencia.
En sus 80 años, Tesla hizo afirmaciones que los científicos ahora dudan eran válidas; por ejemplo, Tesla afirmó haber resuelto la teoría de la gravedad del campo unificado, pero nunca la publicó.
Otros reclamos, como un rayo de la muerte que podría derribar aviones enemigos a cientos de millas de distancia, le dieron a Tesla la reputación de ser un “científico loco”; sin embargo, en Tajna Nikole Tesle se muestran algunos de los hechos, pero se podría haber hecho mucho más; por ejemplo, Marconi, a menudo acreditado con las primeras transmisiones de radio, no lo logró hasta varios años después de que Tesla demostrara un modelo de barco con control de radio.
Es un circuito de transmisión y control de radio mucho más complejo que el de Marconi.
Este hecho se pasa por alto rápidamente, dejando al espectador con la impresión de que el logro de Marconi fue mejor.
Marconi, también hizo algo grandioso, pero fueron las teorías de Tesla las que lo llevaron allí.
Pero Tesla no debería ser recordado por las excentricidades de sus últimos años.
Cuando era joven, Tesla era realmente un genio increíble de la electricidad y el magnetismo, que finalmente fue honrado en la portada de la revista Time.
Él diseñó en su cerebro algo que todas las personas que leen estas palabras han utilizado todos los días de sus vidas, el motor de corriente alterna eléctrica.
¡Hasta este momento, la corriente alterna no podría funcionar con un motor!
Antes del año 1900, inventó el primer transmisor de radio, inventó la bujía, diseñó un torpedo controlado por radio, creó varios tipos de luces de tubo fluorescente, diseñó generadores para Edison, y creó imágenes de los huesos de su mano, antes del descubrimiento de rayos X de Röntgen.
Acaso no hay mucho para celebrar a Tesla, y por qué no, hacerlo bajo un gran presupuesto hollywoodense.
¿Quién dijo que no se lo merece?
“To cause at will the birth and death of matter would be man's grandest deed, which would give him the mastery of physical creation, make him fulfill his ultimate destiny”
Es un hecho comprobado que Nikola Tesla no hacía planos, sino que lo memorizaba todo, siendo un inventor que obtuvo alrededor de 300 patentes en todo el mundo para sus inventos; entonces cabe la pregunta:
¿Por qué tanto interés en borrar a Tesla de la historia?
Principalmente, por 2 grandes motivos:
Tesla nunca quiso enviar ningún artículo a la comunidad académica, ganándose su enemistad, y con ella, su oposición a cualquier nuevo invento que creara.
El sueño de Tesla era obtener energía gratuita para todo el mundo, y además enviada de forma inalámbrica; esto chocaba frontalmente con las aspiraciones del poder económico y los monopolios energéticos, que veían peligrar su negocio.
Y además, era el genio que quería que sus inventos mejorasen el planeta, que beneficiasen a la humanidad, en lugar de centrarse en el beneficio económico.
Algunos de sus estudios, nadie podía descifrarlos debido a su enorme capacidad inductiva; y para la mayoría de sus proyectos ideaba los documentos de cabeza, le bastaba con tener la imagen de dicho objeto sin saber cómo funcionaba, simplemente lo elaboraba sin saber que podía suponer un gran avance para la humanidad.
Posteriormente, en El Laboratorio de Colorado Springs, Tesla observó señales inusuales, que más tarde creyó podrían ser evidencia de comunicaciones de radio extraterrestre provenientes de Venus o Marte.
Actualmente se debate sobre el tipo de señales que Tesla pudo recibir, las cuales podrían ser resultado de la radiación natural extraterrestre, y con todo, queda para la historia como el precursor de la radioastronomía.
En lo personal, Tesla fue educado en la religión ortodoxa; y posteriormente tuvo un profundo respeto tanto por el budismo como por el cristianismo.
Su figura, su carácter excéntrico, y la historia de su experimento sobre transmisión inalámbrica, son utilizados por aficionados a las teorías conspirativas para justificar varias pseudociencias, atribuyéndole inventos, hechos y/o investigaciones que no corresponden con la realidad.
La unidad de medida del campo magnético (B) del Sistema Internacional de Unidades, también denominado densidad de flujo magnético o inducción magnética, el tesla (T), fue llamado así en su honor en La Conferencia General de Pesas y Medidas de París, en 1960.
Además de su trabajo en electromagnetismo e ingeniería electromecánica, el trabajo de Tesla más tarde sirvió en diferente medida al desarrollo de la robótica, el control remoto, el radar, las ciencias de la computación, la balística, la física nuclear, y la física teórica.
Se dijo que Tesla trabajó todos los días, desde las 9:00am hasta las 6:00pm, o más tarde, con una cena desde exactamente las 8:10pm, en el restaurante Delmonico; y luego en el Hotel Waldorf-Astoria.
Tesla telefonearía su pedido de cena al “maître”, quien también podría ser el único que lo sirviera:
“La comida debía estar lista a las 8pm en punto...
Cenaba solo, excepto en las raras ocasiones en que daba una cena a un grupo para cumplir con sus obligaciones sociales.
Luego, Tesla reanudaba su trabajo, hasta las 3:00am”
Para el ejercicio, Tesla caminaba entre 13 y 16 km por día; y curvaba los dedos de sus pies 100 veces por cada pie cada noche, diciendo que estimulaba sus células cerebrales; y dijo que creía que todas las leyes fundamentales podrían reducirse a una.
Tesla se hizo vegetariano en sus últimos años, viviendo solo de leche, pan, miel y jugos de vegetales; medía 1.88m; y pesaba 142 libras, unos 64kg; con casi ninguna variación de peso desde 1888 hasta alrededor de 1926.
Su apariencia fue descrita como:
“Casi la más alta, casi la más delgada, y sin duda, el hombre más serio que acude regularmente a Delmonico”
Era una figura elegante en la ciudad de New York, meticuloso en su aspecto personal, indumentaria, y reglamentado en sus actividades diarias, una apariencia que mantuvo para promover sus relaciones comerciales.
También se lo describió como tener ojos claros, manos muy grandes y pulgares notablemente grandes.
Era un políglota que hablaba 8 idiomas:
El serbocroata, checo, inglés, francés, alemán, húngaro, italiano y latín.
No obstante, abogaba por un idioma universal para facilitar la comprensión mutua; y muy curiosamente, el esperanto nació durante los años en los que La Guerra de Las Corrientes estaba en su apogeo.
Tesla nunca se casó, y explicó que su castidad fue muy útil para sus habilidades científicas; tanto que una vez dijo que sentía que nunca podría ser lo suficientemente digno para una mujer, considerando a las mujeres superiores en todos los sentidos.
En la edad madura, Tesla se hizo amigo íntimo de Mark Twain; y pasaron mucho tiempo juntos en su laboratorio y en otros lugares; pero nunca prestó mayor atención a sus finanzas.
Se dice que murió empobrecido a sus 86 años; y cuando murió, El Gobierno de los Estados Unidos intervino todos los documentos de su despacho, en los que constaban sus estudios e investigaciones.
Años más tarde, en 1957, la familia Tesla y la embajada yugoslava, lograron recuperar parte del material incautado, que hoy día se encuentra expuesto en El Museo Nikola Tesla, en Belgrado.
La secretaria de Sava Kosanović, sobrino de Tesla, Charlotte Muzar, transportó las cenizas de Tesla desde los Estados Unidos a Belgrado; y hoy se muestran en una esfera dorada sobre un pedestal de mármol en El Museo Nikola Tesla.
Tesla murió sólo, abandonado; y tras fallecer el 7 de enero de 1943, comenzó la campaña para borrar su nombre de la Historia, y atribuir sus éxitos a otros, así como centrar su recuerdo en su carácter excéntrico.
Por ejemplo, Edison fue proclamado “Padre de La Electricidad”, y Marconi “Inventor de La Radio”; pero ambos, sin Tesla, no hubiesen sido nada.
Especialmente Marconi, quien utilizando 17 patentes de Nikola para su primera retransmisión en 1901, atribuyéndose el mérito sin citar a Tesla.
Este hurto fue subsanado por La Corte Internacional en 1943, pero todavía hoy, la cultura popular señala a Marconi como “inventor de la radio”
En honor a los logros de Tesla, la empresa de fabricación de automóviles eléctricos, fundada por Elon Musk en 2003, lleva como nombre Tesla Motors.
Y en la cultura popular, el ingeniero serbio-estadounidense ha sido particularmente representado en ciencia ficción, un género que es muy adecuado para abordar sus inventos; aunque a menudo exagerados, las variantes ficticias se basan principalmente en sus propios alegatos o ideas.
Una popular y creciente obsesión entre los narradores de cuentos de ciencia ficción, comics e historia especulativa, es retratar a Tesla como miembro de una sociedad secreta, junto con otras luminarias de la ciencia.
Los impactos de las tecnologías inventadas por Nikola Tesla son un tema recurrente del género “steampunk” a la ciencia alternativa.
Hoy, 75 años después de su fallecimiento, hay que darle a Nikola Tesla, el puesto que le corresponde, como uno de los inventores más grandes que existieron jamás.

“Let the future tell the truth and evaluate each one according to his work and accomplishments.
The present is theirs; the future, for which I really worked, is mine”



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