Inside Out

“Is everything okay?”

El paso del tiempo, puede ser un camino complicado.
Sí, es verdad que la meta de los seres humanos se resume a querer ser felices, pero ser felices siempre, también sería aburrido, por eso tenemos emociones como:
El miedo, la rabia, la melancolía, lo que nos hace que maticemos nuestro comportamiento, y se marquen rasgos únicos de nuestra personalidad.
¿Qué significa crecer, hacerse adulto?
¿Cómo se configuran nuestras emociones, para poder acabar dando forma a nuestra personalidad?
¿Cuál es la importancia de los recuerdos en nuestro crecimiento personal?
¿Cuál es el valor real de la tristeza como emoción?
¿Tiene alguna connotación positiva?
¿Puede un film, abiertamente comercial, y configurado, básicamente bajo la conjugación de ideas/emociones/colores primarios, convertirse en una compleja obra, plagada de capas que acaben por definir de forma tan certera, como emocionante, el raciocinio inherente a la existencia humana?
“Meet the little voices inside your head”
Inside Out es una película animada en 3D, del año 2015, dirigida por Pete Docter y Ronaldo Del Carmen.
Protagonizada por Amy Poehler, Phyllis Smith, Bill Hader, Lewis Black, Mindy Kaling, Kaitlyn Dias, Diane Lane, Kyle MacLachlan, John Ratzenberger, entre otros.
El guión es de Pete Docter, Meg Lefauve y Josh Cooley; y basados en una idea original de Pete Docter; producida por Pixar Animation Studios, y distribuida por Walt Disney Pictures.
Nominada a 2 Premios Oscar, gana 1:
Mejor Película Animada y guión original.
Pete Docter, comenzó a desarrollar Inside Out en 2009, después de notar cambios en la personalidad de su hija, mientras ella crecía.
El director recuerda su propia infancia:
“Mis padres se mudaron a Dinamarca cuando yo tenía 11 años, y fue muy difícil para mí”, explicó Docter, quien comentó, haber tenido una adolescencia triste, en la que se sentía desconectado de los otros niños, y pasaba gran parte del tiempo encerrado en su habitación dibujando.
Los productores de Inside Out, consultaron a numerosos psicólogos y neurólogos, e investigaron de la mente, en preparación para la construcción de su historia.
Los borradores iniciales, fueron satisfactorios, y la producción se revisó significativamente, con la comprensión de que las relaciones interpersonales, guían las emociones humanas.
Unos 350 artistas y técnicos, trabajaron bajo la dirección de Docter, para dar vida a esta nueva aventura; la cual se desarrolla en la mente de una niña, Riley Anderson (Kaitlyn Dias), donde 5 emociones:
Joy/amarillo (Amy Poehler), Anger/rojo (Lewis Black), Disgust/verde (Mindy Kaling), Fear/lila (Bill Hader), y Sadness/azul (Phyllis Smith), la guían en el día a día de su vida.
A medida de que Riley crece, se van agregando emociones, siendo Joy la primera, y Anger la última emoción en unirse.
También para Riley, que debe dejar su vida en El Medio Oeste, cuando su padre (Kyle MacLachlan) consigue un nuevo trabajo en San Francisco.
Como todos, somos guiados por las emociones, quienes viven en Cuarteles Generales, El Centro de Control dentro de la cabeza, desde donde nos ayudan y aconsejan; en el que influyen en las acciones, y los recuerdos, a través de una Consola de Control.
Así, los nuevos recuerdos de Riley, se encuentran en esferas del color de la emoción vivida en ese recuerdo.
Cuando Riley va a dormir, las emociones envían los recuerdos del día, a La Memoria a Largo Plazo.
Los recuerdos más importantes, conocidos como “Pensamientos Centrales”, se encuentran en un Centro de Operaciones en El Cuartel General, y las fuentes de 5 islas, que reflejan un aspecto diferente de la personalidad de Riley.
Así, Riley y sus emociones, intentan adaptarse a su nueva vida en San Francisco, pero el caos se instala en Los Cuarteles Generales de su cerebro.
Aunque Joy, la emoción principal, y la más importante de Riley, intenta mantener una actitud positiva, las emociones chocan a la hora de decidir cómo actuar en una nueva ciudad, un nuevo hogar, y una nueva escuela.
Aunque Joy intenta dominar los sentimientos, para mantener a la niña en un estado de felicidad, Sadness comienza a cambiar las cosas, y a hacer que la melancolía se extienda.
Una serie de sucesos, hace que las 2 emociones salgan accidentalmente del Cuartel General, y viajen por la mente de Riley, mientras tratan de encontrar el camino de vuelta.
Inside Out nos muestra el funcionamiento interno que define la personalidad de la protagonista, con la excusa accidental del aterrizaje de Joy y Sadness, en El Laberinto de La Memoria; por lo que los realizadores aprovechan para realizar un viaje alucinante, al interior de la mente humana, una fantástico paraje, donde habitan por igual, las pesadillas, los pensamientos abstractos, la fábrica de sueños, y los amigos imaginarios, entre muchos otros.
“Come on, group hug!
You too, Anger”
Inside Out es un film definitivamente abstracto, que resuelve para siempre, uno de los grandes misterios de la Humanidad:
El complejo funcionamiento de la mente.
Con ese argumento, el director tuvo que echar mando de los estudios sobre las emociones, que son parte primordial de Inside Out.
Una de las teorías usadas para definir los personajes, es la de Paul Ekman, un pionero en el estudio de las emociones, y que ha sido consultor de otros estudios como Disney, e Industrial Light & Magic; el cual explica que, durante una investigación que realizó hace más de 40 años, buscaba demostrar, como se creía entonces, debido a la corriente liderada por Margaret Mead, que las emociones son determinadas culturalmente, y que aún más, algunos pueblos no tenían emociones.
Ekman señala, que él es un científico que cambió su forma de pensar por sus descubrimientos, y estos fueron, que hay emociones universales, sin importar el aspecto cultural.
Dichas emociones, son distintas a los gestos simbólicos, en los que sí hay claras diferencias de cultura a cultura.
El personaje principal en Inside Out, no es Riley, sino las emociones de Riley.
La emoción primaria en la vida de Riley, es Joy, quien es la líder de facto del grupo, y se encarga de supervisar que todas las otras emociones cumplan su rol; el problema es que, ni ella, ni las demás, están seguras de cuál es el rol específico de Sadness, ni siquiera ella misma lo sabe, por lo que intentan aislarla del funcionamiento normal de Riley.
Las emociones son:
Joy/amarillo:
Su meta siempre ha sido, asegurarse de que Riley fuera feliz.
Es optimista, y está decidida a encontrar el lado divertido de cada situación.
Anger/rojo, no soporta las injusticias, y luchará contra viento y marea, para acabar con ellas.
Su feroz temperamento, provoca que salten chispas, cuando las cosas no marchan según lo previsto.
Disgust/verde, es una emoción muy testaruda, sincera a más no poder, y siempre evita que Riley se envenene, tanto física, como mentalmente.
Fear/lila, tiene una labor primordial:
Proteger a Riley, por eso, siempre está atento a los posibles desastres y peligros que la jovencita deba afrontar en su día a día.
A Sadness/azul, le encantaría ser más optimista, y poder colaborar más en la felicidad de Riley, pero le resulta muy difícil ver el lado positivo de las cosas.
Al Centro de Control, se conectan, suspendidas en los abismos de lo insondable, las islas que constituyen los diferentes aspectos de la personalidad de la pequeña, sus intereses básicos:
La familia, el hockey, hacer tonterías…
Los recuerdos, son bolas, cuyo color viene determinado por la emoción que las domina, y algunos aparecen por sorpresa.
Rodeando los angustiosos abismos, en cuyo fondo mueren las bolas, están Los Archivos de La Memoria, un gigantesco laberinto, que unos operarios azules purgan regularmente.
Y también La Fábrica de Sueños, que remite, claro está, a Hollywood, entre otros territorios de nuestro cerebro, como:
El Reino de La Imaginación, el del Pensamiento Abstracto, o el del Subconsciente, un Purgatorio, donde van a parar “todo lo que crea problemas”
Pero cabe preguntarse:
¿Por qué no hay personaje de “Sorpresa”?
Porque, dice Paul Ekman, que “la sorpresa es la emoción más corta”, ya que luego de esta, pasaremos a otra emoción, luego del estímulo, es decir, de la sorpresa, podemos pasar a la alegría, la tristeza, etc.
Esa historia mayor, que es la historia que realmente importa en Inside Out, es la difícil, y dolorosa búsqueda de equilibrio emocional, que permita a Riley, salir avante del desmoronamiento de sus anclas emocionales y afectivas, aquellas que conforman su identidad e integridad moral, que le ha supuesto el abandono de su antiguo hogar y entorno, y el no deseado e intempestivo ingreso a un hábitat impredecible, gris, y tosco, un entorno, donde se pierde la mudanza, hay que dormir en el suelo, se atrofian las habilidades sociales y deportivas, los padres ya no parecen tan divertidos y sensatos, y que para colmo de los colmos, la pizza lleva brócoli…
Las cosas se complican, cuando Sadness toca uno de los recuerdos alegres de Riley, representados por orbes brillantes amarillos, convirtiéndolo permanentemente en azul/Triste.
Esto empeora cuando, en el primer día de clases de Riley, Sadness actúa, y sin querer, logra que la niña llore frente a sus nuevos compañeros, generando una “memoria principal” completamente triste, la primera de esa naturaleza.
Joy, intenta evitar que esta memoria principal triste, alcance el centro neurálgico donde están las restantes memorias principales, y que le dan energía a las “islas” que forman la personalidad de Riley:
La Isla de La Familia, la del Hockey, la de Amistad, de la Honestidad, y de las Boberías; pero en ese intento desesperado, solo logra separar a ella y a Sadness, del resto de las emociones, dejando al mismo tiempo a las “islas” sin energía alguna.
Aquí, las otras emociones:
Sadness, Anger, Disgust, y Fear, exigen y ganan su derecho a existir, a ser parte de la vida de Riley.
Emociones incómodas y despistadas a veces, pero todas ellas son parte de la identidad e integridad psicológica y moral de Riley.
De hecho, cuando Riley siente que los pilares de su vida afectiva, se van desmoronando uno a uno:
La familia, la amistad, el hockey, y su integridad moral, y sus afectos familiares, empiezan a desdibujarse, se da cuenta de que sólo contando con todas sus emociones, sólo aprendiendo a dar el color justo a cada una de ellas, es que se puede evitar el descalabro final.
Una de las muchas virtudes de Inside Out, es la ausencia de un antagonista, algo refrescante dentro de la miríada de contenido actualmente disponible.
Como el conflicto es mayormente interior, la fuerza antagónica, está dada más por el transcurso irrefrenable del tiempo, una fuerza que no se detiene ni discrimina, simplemente existe.
La aparición de Bing Bong (Richard Kind), antiguo amigo imaginario de Riley, parece jugar un poco con las expectativas del público; pero Bing Bong termina siendo mucho más que eso, más que un simple “plot device”, o una mala copia de personajes anteriores.
Bing Bong, resulta ser un potente y emotivo recordatorio de la niñez perdida, que todos tuvimos.
Otro científico, también aportó sus estudios, para ser consultor del equipo de Peter Docter; y se trata de Daltcher Ketner, profesor en La Universidad de California, y que ayudó en la comprensión de los procesos en los que se deja atrás la infancia, así como aquellos en que una emoción, puede “teñir” los recuerdos que tenemos.
Y señala que los animadores, personificaron de forma adecuada, los procesos de los recuerdos, lo que sucede cuando dormimos, los cambios específicos que puede vivir una niña, al pasar a la adolescencia.
Por último, y casi como moraleja, Paul Ekman señala en sus estudios, que la capacidad emocional, puede desarrollarse con el paso del tiempo, entendiéndose esta, como una especie de maduración personal, que nos permite manejar nuestras emociones, señala que no es sencillo, puesto que, como podemos saber por sus estudios, las emociones tienen una raíz inconsciente, ajenas a la cultura, y mucho más ligadas a la evolución de lo que se creía.
La capacidad emocional de la que habla Ekman, señala que podemos:
Ser o no emotivos ante un estímulo, es decir, no dar rienda suelta a la emoción natural.
Elegir cómo actuar, es decir, decidir cómo se va a reaccionar ante un estímulo.
Ser más sensibles a las emociones de otros.
Al mismo tiempo, se encarga de derribar una de las preconcepciones más arraigadas de la depresión:
Más que una cuestión de “tristeza”, es una cuestión de ausencia de emociones.
Un vacío interno, que no es solucionable con un “cambio de ánimo”, sino que requiere un proceso de introspección y, por qué no, de ayuda.
Así, la depresión es también una fuerza antagónica dentro de Inside Out, más allá de que no reciba personificación alguna.
Así las cosas, Inside Out explica a los jóvenes, qué significa hacerse adulto, y haciendo entender a los adultos, todo aquello a lo que renunciamos, para alcanzar esa aburrida madurez en la que nos tambaleamos, entre el exceso de trabajo y las responsabilidades inherentes a la paternidad.
Porque sí, Inside Out también es una película de padres e hijos, donde se pone en evidencia, la importancia de los recuerdos formados en la niñez, a la vez que ayuda a expresar en imágenes, cómo se fragua la melancolía o, dicho de otra forma, el por qué todos los recuerdos acaban convirtiéndose en recuerdos tristes.
Más que una “Oda a La Alegría, Inside Out acaba convirtiéndose en una “Defensa de La Tristeza”, y en lo importante que resulta combinar ambas emociones.
Y es que sin tristeza, no se entiende la alegría, y viceversa; son complementarias.
Pero los dibujos animados, dejaron de ser cosa de niños hace mucho tiempo...
Pixar, asume un riesgo inmenso:
Inside Out no es para los niños menores de 15 años, es decir, los niños reirán con los “gags” habituales, pero son los padres, los jóvenes, y los adultos, los que se identificaran con lo sucedido.
De este modo, Pixar logra captar ambos públicos, pero de distinta manera:
La moraleja ya no es obvia, todo en Inside Out es sutil, y de fácil entendimiento para los mayores, no tanto para los chicos.
La excusa argumental, son los problemas de adaptación de una niña que, con su familia, se traslada desde Minnesota a, precisamente, San Francisco.
Y aquí entran las lecturas ligadas al color de las emociones, la personalidad, y algo más, la sexualidad:
Los personajes que interpretan a las emociones, están muy bien definidos cada uno:
Su físico y sus vestimentas, están seleccionados a la perfección y precisión.
Joy/amarillo:
Se asocia a la sabiduría, la inteligencia, la rapidez mental, y la creatividad en cuanto a su vertiente positiva; ella es una de las mujeres que usan vestido, pues se supone que son 3 chicas… y curiosamente tiene cabello corto, como signo de rebeldía, y modernidad.
Anger/rojo:
Indica pasión, sexualidad, ímpetu, fuego, y sangre.
Ejerce una influencia fuerte, sobre el estado de ánimo de una manera positiva, como puede ser, que te da la fuerza para enfrentarte a tus miedos, y mostrar seguridad en ti mismo, o de una manera negativa, puesto que puede dar lugar a actitudes agresivas.
Es el personaje más parecido a “Finding Nemo” (2003), en el trazo del dibujo, y por la vestimenta, parece ser un hombre de unos 40 años, harto de como la vida lo ha tratado, tanto en su trabajo como en su vida, y se le nota en el ceño; y es uno de los 2 hombres que comparten “las emociones masculinas del personaje”
Disgust/verde:
Representa al equilibrio, ayuda a sentirse más tranquila y serena.
Se suele utilizar en casos de insomnio, fatiga, jaquecas, excitabilidad nerviosa, ya que disminuye la presión sanguínea, y baja el ritmo cardíaco.
Pero también tiene un lado más negativo, y es que puede significar locura, y la envidia.
Es la otra chica que usa vestido, peo es muy conservadora, y refleja esa imagen de los años 50, y 60, la típica ama de casa, destinada al hogar.
Fear/lila:
Se asocia a la intuición y la espiritualidad; a la realeza, y simboliza poder, nobleza, lujo, y ambición; sugiere riqueza y extravagancia.
Es el nerd del grupo, y segunda “emoción masculina” del personaje, es un ser temeroso, precavido, que enrumba al sentimiento científico, y de formación académica, debido a la experiencia.
Sadness/azul:
Pertenece a la gama de los colores fríos, pero es un color que transmite serenidad, confianza, calma, y tranquilidad, eso sí, una sobreexposición al mismo, puede conllevar a estados de tristeza, melancolía, depresión, y fatiga.
Normalmente se aconseja, que se convine con colores cálidos, para encontrar el equilibrio emocional.
Refleja tranquilidad, no violencia, siendo el color preferido por el género masculino, y sugiere integridad, serenidad, y formalismo.
Si no fuera porque la interpreta una actriz, se diría que Sadness es un hombre, o al menos, es el personaje más ambiguo físicamente de todos, que recuerda a “Pat”, del programa Saturday Night Live, en que no se sabe si es hombre o mujer, por su apariencia personal, ligada al hecho del color “Blue” que cobra sentido al sentimiento nostálgico y reprimido; inclusive, de ser mujer, es la única que no lleva del todo, algún tipo de maquillaje, o distintivo femenino.
Mientras algunos personajes adicionales, aparecen a cuadro, donde se destaca el amigo imaginario de Riley, Bing Bong:
Es una especie de osito de peluche, con trompa de elefante, cola de gato, y sonido propios de un delfín.
Aquí hago más la lectura más concisa de un fetichismo, ligado a la sexualidad, o mejor dicho, a las etapas del crecimiento, ligado a la sexualidad.
Como bien es sabido, los elefantes pueden simbolizar el pene, o “El Complejo de Edipo”; la cola de gato, al Complejo de Electra, y el delfín, a la bisexualidad.
El cambio hormonal, ligado a la menstruación, se nota cuando Anger, Disgust, y Fear, cuando tratan de mantener el estado emocional de Riley, en la ausencia de Joy, pero accidentalmente, causan que ella se comporté de una forma extraña delante su padre y madre (Diane Lane), amigos y aficiones, llegando incluso a ser grosera…
Después de que Sadness vuelve a instalar Los Pensamientos Centrales en modo triste, Riley empieza a llorar, y admite a sus padres, que ella extraña su antigua vida.
Como sus padres aceptan lo que dice Riley, la abrazan y la tranquilizan, creando la madurez del personaje.
Y la misma Riley, rizando más el rizo, me da la impresión de ser una niña de inclinación lésbica, tanto en su forma de vestir, que no usa vestido, hasta las aficiones deportivas, y las amistades, donde no vemos a un personaje masculino fuerte, donde en su mente hay 2 emociones masculinas y 3 femeninas, que da la impresión de su rol pasivo femenino sexual, así como la figura patética masculina del hombre, producido en masa de manera insistente, etc.
No solamente se refleja en la tristeza de Riley, confrontar su cambio hormonal, y sexual, algo totalmente nuevo para ella, y que la entristece, sino también por el entorno, no es casual, que venga del “entorno rural”, Minnesota, al citadino San Francisco, “capital de la diversidad sexual” de los EEUU.
¿Es Inside Out, el filme de Pixar con temática gay más evidente?
Claro que sí, sobre todo por los logros alcanzados en ese tema en EEUU recientemente.
Desde lo psicológico, Inside Out trata de lo que pasa en tu cabeza; pues que no eres tú “El Yo” el que decide, sino los mecanismos neuronales sinápticos, que “toman” las decisiones antes que tú “El Yo”
Si bien, la literalidad de lo escrito, tiene sus variantes, en Inside Out es en esencia lo que nos muestra:
Sentimientos/sensaciones, felicidad/tristeza, miedo/ira, recuerdos/olvidos, inocencia perdida, ese quizás, es el mayor mérito de Inside Out, que logra generar empatía, a costa claro, de siempre llevar al film y al espectador consigo al sentimentalismo y sensiblería propia de este tipo de películas.
Y aunque hay momentos lindos, tristes, afortunados, y muy divertidos, no me conmovió en forma general, y sentí ese vacío al final.
Un mensaje en forma de metáfora muy poderosa, pero con déficit de emotividad.
Creo que, por complacer a los niños con la diversión, y a los adultos con la lucidez en otras escenas, se pierde entre contrastes, y no logra el flechazo que haga rendir a ambos por igual.
Pero reconozco que no debió ser fácil, la dosificación en la planeación, y logra escenas muy buenas.
Al final, resulta un experimento interesante, y muy original por el fondo que quiere trasmitir.
Sentir o no añoranza por el niño que fuimos, es el primordial objetivo que se maneja.
Si bien, el apartado visual no es sobresaliente, también tiene sus joyas:
Los diseños de los personajes, dentro de la mente de Riley, son perfectos para lo que representan.
Finalmente, debo decir que Inside Out, es un gran avance por parte de Disney/Pixar, ya era hora de descansar de Príncipes, Princesas, Castillos, y seres de fantasía, y es hora de explorar “lo real”; aunque el dibujo se mantenga el trazado infantil.
Siempre será entretenido, explorar a los seres humanos y sus complejas emociones, una gran temática para una gran película.
Porque logran ponerle imágenes animadas, a todas esas partes del cerebro que uno conoce por la teoría, pero no logra relacionarlo con algo real.
Entonces vemos los espacios de la imaginación, los amigos invisibles de la infancia, el estudio donde se realizan los sueños, el oscuro mundo del subconsciente, las fantasías, etc.
“Crying helps me slow down and obsess over the weight of life's problems”
En “El Tratado del Hombre”, una de las obras póstumas de René Descartes, imaginaba el asiento del alma, en la glándula pineal.
Allí reside “el fantasma de lo que somos”
Allí, como “una diminuta réplica de nosotros”, vive el genio que nos maneja.
Allí, la sangre se transforma en los intangibles “espíritus animales”, que acto seguido, discurren por los nervios.
Acababa de nacer la, hasta cierto punto, fatídica dualidad cartesiana, entre el cuerpo y lo que no es tal.
Acababa de nacer, la conciencia moderna.
La historia de la niña, preadolescente desubicada, es universal, niños y adultos pueden identificarse con Riley, y hay una aventura muy física, de ritmo trepidante, y con personajes coloristas, que los niños seguirán hasta el final.
Riley sirve de reflejo de lo que “los espíritus animales”, que diría Descartes, hacen de ella.
La búsqueda de pruebas, de que la emoción tiene diferentes patrones en El Sistema Nervioso Autónomo, como propusieron James y Darwin, se recuperó con la publicación del artículo:
“Autonomic Nervous System Activity Distinguishes Among Emotions” en la revista Science, en 1983.
En este estudio, los actores representaban expresiones faciales, sin conocimiento directo de la emoción que representaban, mientras eran registrados con una serie de variables autónomas:
Ritmo cardíaco, conductancia de la piel, etc.
En este artículo, Paul Ekman y colaboradores, propusieron patrones de la emoción, diferentes, para 6 emociones, que son universales, y biológicamente básicas, las cuales son:
Sorpresa, asco, tristeza, ira, miedo, y alegría/felicidad.
Estas, se convirtieron en la lista de emociones básicas con mayor aceptación, conocidas incluso, como “Las 6 Grandes Emociones” o “The Big Six” en 2004.
Se consideraron básicas, en 2 formas:
Psicológica y biológicamente, debido a que se consideró, que no contienen otras emociones como una parte, y son innatas.
Ekman y colaboradores, influyeron en la investigación subsecuente, en la búsqueda de patrones de la emoción, con diferentes respuestas en El Sistema Nervioso Autónomo, que dieron soporte al punto de vista de las emociones básicas.
Así las cosas, Inside Out se nos muestra, que para crecer y madurar, no hay por qué abandonar la alegría de la niñez, siempre y cuando la mezclemos con la seriedad, y la responsabilidad de la adultez.
No hay emociones puras, y mientras vamos creciendo, nos damos cuenta de que los momentos alegres, generalmente los más significativos, van precedidos de momentos tristes, en esa mezcla, un poco extraña pero natural, encontramos el sentido pleno, y que aún con la llegada de la adultez, no es necesario que dejemos de lado a ese niño que llevamos dentro.

“C'mon!
Think positive!”



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