The Glenn Miller Story
“Maybe it's good and maybe it ain't, but it's radical!”
Alton Glenn Miller, fue un músico estadounidense de jazz, de La Era del Swing, y además militar, en el rango de Mayor.
En 1937, funda la orquesta en la que crearía y mantendría viva desde ese entonces su música, llamada:
“The Glenn Miller Orchestra”, donde hizo innumerables éxitos, entre los más importantes:
“In The Mood”, que es posiblemente, la canción de swing más conocida, y otras como:
“Kalamazoo”, “American Patrol”, “Moonlight Serenade”, “Tuxedo Junction”, “Chattanooga Choo Choo”, “A String of Pearls”, “Little Brown Jug”, “Pennsylvania 6-5000”, entre otras.
Miller comenzó su carrera musical, en 1925, en una pequeña banda de provincias…
Después de actuar por pueblos y ciudades, se instala en New York, y hasta allí llega Helen Berger, su novia de la escuela secundaria, para casarse con él.
La fiesta de su boda, es una histórica sesión musical, dirigida por el gran Louis Armstrong.
A partir de entonces, se inician los éxitos de Glenn Miller, triunfando en el mundo de la música, como compositor y trombonista, y terminará triunfando al frente de su propia “Big Band”, en el mundo del jazz.
Su primer gran éxito fue “Moonlight Serenade”, y un contrato en El Casino de Glen Island, en New Rochelle, en New York, le abre las puertas a una carrera triunfal, que se mantendrá hasta el final de su vida.
Al mismo tiempo que la orquesta triunfa en las salas de bailes, la banda adquiere una popularidad tremenda en los Estados Unidos, debido a la emisión de sus actuaciones, por un programa radiofónico, que transmitía de costa a costa, en los Estados Unidos, y que fue patrocinado por la marca de cigarrillos “Chesterfield”
Así, desde junio de 1938, Miller dominó los primeros puestos de varias listas de música popular, y se mantuvo así, más de un año.
A principios de 1940, “In The Mood” estuvo 15 semanas consecutivas de #1, y siguió:
“Tuxedo Junction”, que mantuvo a Miller, en el #1, hasta el verano.
Posteriormente, el 11 de febrero de 1941, se le otorgó a Miller, el primer Disco de Oro por “Chattanooga Choo Choo”
Pero fue “Moonlight Serenade”, una de las canciones más reproducidas de toda la historia en EEUU, y actualmente está considerada, como el tema representativo de Miller, y como una de las canciones más importantes de la historia musical de EEUU.
En 1942, durante La Segunda Guerra Mundial, Miller se alistó en Las Fuerzas Aéreas, donde recibió el rango de Capitán, y donde se encargó de tocar para las tropas estadounidenses, desplazadas en Europa.
Pero el 15 de diciembre de 1944, el avión monomotor que partió desde el aeródromo de Twinwood, 50 millas al norte de Londres; que se dirigía a París, para iniciar su gira artística, nunca llegó a su destino...
A los 40 años, Glenn Miller se dio por muerto.
Como nunca se encontraron los cadáveres de Miller y sus acompañantes, hubo una serie de leyendas que le suponían vivo…
En febrero de 1945, Glenn Miller fue condecorado póstumamente, con una Medalla de Bronce, que fue recogida por su esposa Helen Miller, y sus 2 hijos:
Steven y Jonnie, ambos adoptados.
En 1991, la discográfica RCA, puso a la venta, una colección de 13 cederrones, con todos los temas grabados para dicha firma de Glenn Miller.
La compilación, contaba con un total de 286 títulos.
“And the trombones, right on the left here, over there, right in there, and the four trumpets right behind them...”
The Glenn Miller Story es un musical, dirigido por Anthony Mann, en el año 1954.
Protagonizado por James Stewart, June Allyson, Harry Morgan, Charles Drake, George Tobias, Barton MacLane, Sig Ruman, Irving Bacon, James Bell, Kathleen Lockhart, Katharine Warren, Frances Langford, Louis Armstrong, Ben Pollack, Gene Krupa, entre otros.
El guión es de Valentine Davies y Oscar Brodney.
The Glenn Miller Story obtuvo un Premio Oscar al Mejor Sonido, y 2 nominaciones al mejor guión, adaptación musical, para Henry Mancini y Joseph Gershenson.
The Glenn Miller Story mezcla la comedia y el drama moralista del “self-made man” estadounidense; con los éxitos nacidos de la persistencia, y demás.
Glen Miller (James Stewart), fue uno de los más famosos músicos de jazz de La Era del Swing; eran los EEUU de los años 30, previo a La Segunda Guerra Mundial, cuando Miller y su amigo Harry Morgan, encabezan una orquesta que malvive en actuaciones de poca monta:
Miller toca un trombón, y además se encarga de hacer los arreglos musicales, para toda la banda.
Pero el joven músico tenía que empeñar, y desempeñar su instrumento, para poder sobrevivir…
Estaba obsesionado con crear su propio estilo; algo le faltaba a sus composiciones, para que él mismo las considerase “perfectas”; y rechaza buenos trabajos, para trabajar en sus composiciones.
En 1925, empezó a tocar el trombón en una pequeña banda de provincias y, después de una gira por pueblos y ciudades, se instaló en New York; y posteriormente se unió su novia, Helen Burger (June Allyson) en matrimonio.
La boda fue una histórica sesión musical, dirigida por el gran Louis Armstrong.
A partir de entonces, la carrera de Glenn Miller estuvo llena de éxitos.
Con la guerra, decide alistarse en el ejército, y llevar la música a los soldados de ultramar, decisión que le costaría la vida…
The Glenn Miller Story termina, con el trágico accidente de avioneta que acabó con su vida, cuando se encontraba en lo más alto de su carrera; presentando una atípica relación con el amor, y la lucha de quien buscó crear su propio estilo musical, en una época donde florecían las grandes orquestas.
Aunque The Glenn Miller Story no es una biografía, tampoco es totalmente fiel a la vida real de Miller, y recrea lo que de verdad interesa sobre el músico, sin detalles escabrosos y desagradables.
“See it and Hear it as Never Before”
The Glenn Miller Story es un gran tributo a Glenn Miller, una de las mayores leyendas musicales de EEUU, viajando desde su ascenso desde el anonimato, y la pobreza, hasta la fama y la riqueza, en los años 40; siendo considerada, con las debidas reservas, como una de los mejores películas realizados en Hollywood, más que nada, por la excelente dirección de Anthony Mann, quién de manera habilidosa, logró sortear los “peligros” melodramáticos, a que lo sometía la visión idílica, con que Hollywood presentaba la vida de famosos personajes del ambiente musical, en aquellos años, como resultó la biografía de Cole Porter en “Night and Day” (1945), en la cual, para no tener líos con la censura, se hizo un absoluto silencio sobre la homosexualidad del compositor, al grado de que poco faltó para que lo presentaran como un “mujeriego” o, para que hablar de las versiones de las vidas de compositores clásicos como:
Liszt, Chopin, o Wagner, que nunca trascienden la visión de personaje inolvidable, al estilo del Selecciones de Readers Digest...
Pero bueno, es la mirada de Mann, que resulta ágil, tratando su aspecto cronológico, con resuelta economía, conduciéndolo con un tono ligero y amable, incluso, con algún aporte de humor benévolo, además, siempre es agradable ver en pantalla a un James Stewart perfecto en el papel principal, y la película, tintada de manera espléndida, en suntuoso Tecnicolor por William Daniels, por lo que en conjunto, resulta un visionado muy agradable, a pesar de que desperdicia una perspectiva más incisiva y real, de la importante figura como músico de Miller.
Mientras tanto, el papel de su mujer, tiene una gran fuerza:
Ella es el motor de la relación; ella cree en él, cuando ni siquiera el mismo creía; y luchó para que pudiese conseguir el sueño de crear una música especial, de crear una gran orquesta.
Ella es esa gran mujer, que hay detrás de cada gran hombre...
Un “artista” y su mujer, que son la base que nos servirá para poder ver una serie de valores humanos, por encima de cualquier problemática profesional que a ambos les pudiera surgir.
Todos los problemas que aparecen, son tomados con positivismo, y buena cara, problemas con solución, y eso es quizás, lo que más gustó de The Glenn Miller Story:
Un matrimonio que sabe lo que significa pasar hambre, y estar unidos ante los problemas, y luchar por eso, en lo que creen.
Cuando se termina, uno tiene la sensación de positivismo que le inunda todo el cuerpo, no cae en el sensacionalismo barato, ni en la ternura fácil y simplona, al contrario, es buena energía la que desprende.
Como dato, The Glenn Miller Story se rodó 9 años después de la muerte del músico; siendo la 2ª de las 3 películas en las que James Stewart y June Allyson, interpretaron a marido y mujer.
Por su parte, James Stewart es doblado al trombón, por el mismo Glenn Miller, y por Trummy Young; y hace eco de esa concepción de Glenn Millar, y nos lo presenta siempre, como el típico buen ciudadano estadounidense, ejemplar, sobre todo, en la parte final, cuando Miller se alista en el ejército, para llevar entretenimiento a las tropas durante La Segunda Guerra Mundial.
Según algunos biógrafos del músico, The Glenn Miller Story falsea su idílica relación con su esposa Helen, pero eso forma parte de la leyenda tejida en torno al compositor.
Sí que es cierto que aborda sus inicios como arreglista, sus ilusiones, y su empeño en progresar como músico, y alcanzar un objetivo sonoro en el mundo del jazz, la consecución del éxito, y el conocido final de su existencia, pero todo resulta demasiado esquemático y precipitado, como así lo es también, la poco estimulante y melodramática relación amorosa con June Allyson, pivotando demasiado el asunto, en una relación que tampoco presenta demasiadas vertientes, ni cuenta con demasiado peso…
Hay varios anacronismos, como cuando la banda militar dirigida por Miller, está delante del General “Hap” Arnold, y un bombardero B-29 está en el fondo…
Las tropas que marchan, están desagregadas, lo que no ocurrió hasta 1948, es decir, 4 años después de la muerte de Miller.
Hay varios momentos importantes en la carrera de Miller, que son mostrados con diferentes grados de verosimilitud, incluyendo:
El éxito inicial de sus arreglos para la banda de jazz; su salida de Broadway, y su intento por formar su propia banda.
El fracaso de su primera banda con sus recorridos; y la subsiguiente reformación de su gran banda, y el establecimiento del “Sonido Miller”, como se muestra en la canción “Moonlight Serenade”
También, se muestra el éxito internacional de Miller, junto a su banda, en apoyo a Los Aliados en La Segunda Guerra Mundial.
Al final, se dice que Miller muere en accidente aéreo.
Mann, tiene el gran detalle de no mostrar un plano de la esposa, al recibir la noticia.
El General que le comunica la tragedia, comenta que quiere llamarla personalmente, y el siguiente plano, muestra a Helen y los suyos, esperando la emisión de su último concierto por la radio, sabedores ya de la muerte del músico.
El momento álgido de dicha emisión, sobre un primer plano de June Allyson, tiene aún más fuerza, gracias a la omisión del plano en que la mujer se ha enterado de la tragedia.
Por último, la banda sonora estaba compuesta por una serie de grandes éxitos grabados entre 1939 y 1943, y alcanzo el #1 en las listas de Billboard, en el año 1954.
Son varias las canciones de Miller, de sus grabaciones originales, como:
“Moonlight Serenade”, “Tuxedo Junction”, “Little Brown Jug”, “St. Louis Blues March”, “Basin Street Blues”, “In The Mood”, “A String of Pearls”, “Pennsylvania 6-5000”, “American Patrol”, y “Otchi-Tchor-Ni-Ya”
Por su parte, los músicos que aparecen en The Glenn Miller Story son:
Louis Armstrong, Barney Bigard, Cozy Cole, Gene Krupa, Frances Langford, Skeets McDonald, Marty Napoleon, Ben Pollack, Babe Russin, Arvell Shaw, The Modernaires, y James Young.
John “Chummy” MacGregor, que fue pianista de La Orquesta de Glenn Miller, hizo de asesor técnico; mientras La Banda de Miller, fue retratada por The Airmen of Note, un conjunto del Air Force Band de los Estados Unidos, creado originalmente en 1950, para continuar con la tradición de Glenn Miller.
Esta banda sonora, fue #1 durante 10 semanas en Billboard, en 1954.
El álbum posteriormente fue relanzado con una lista de pistas ampliadas; y ha sido recomendada para los fanáticos del jazz y el blues, de los clarinetes, y los saxofones, y de todo aquel que se embelese con una historia de superación, y de búsqueda de innovación en lo que a música se refiere.
“Honestly!”
Con respecto a la muerte de Glenn Miller, se dijo que su avión se perdió en un viaje que hacía de Inglaterra a Francia…
La teoría más probable, es que el avión fue accidentalmente derribado por bombarderos RAF sobre El Canal de La Mancha, entre Francia y Reino Unido, después de una operación abortada de bombardeo contra Alemania, donde se arrojaron al mar, las bombas destinadas, a fin de aligerar carga:
El piloto de La Fuerza Aérea Británica, Frad Shaw, anotó en su bitácora, que observó que un pequeño avión monomotor, se precipitaba en espiral, y sin control hacia el mar…
A pesar de la desaparición del músico, su banda continuó sus actividades, bajo la dirección de Jerry Gray, hasta el 13 de noviembre de 1945, cuando hizo su última presentación, ante El Presidente Harry Truman, en Washington.
El Mayor Glenn Miller, fue el único miembro de la banda, que no sobrevivió a la guerra…
Tiempo después, se filtró que no hubo tal desaparición, sino que los hechos fueron falseados, para que su figura carismática de “estadounidense ejemplar”, no fuera manchada con la verdad.
Glenn, era muy mujeriego, y falleció de un infarto al corazón, en un café de Francia, mientras estaba con una prostituta; otros alegan que fue apuñalado en un hotel, por una prostituta en París...
Ese manto de silencio, respecto de su muerte, tanto de los militares involucrados, como de sus parientes, dejando correr el rumor periodístico de una desaparición misteriosa, se debió simplemente a su escabrosa muerte, indigna de un hombre de su talla, con un carisma como pocos.
Y se creyó así, preservar su imagen.
El libro “The Glenn Miller Conspiracy”, del periodista Hunton Downs, y publicado en 2010, afirma que Miller fue puesto bajo las órdenes de Eisenhower, y fue capturado por La Gestapo, con el fin de llegar hasta éste.
Fue torturado, ejecutado, y abandonado en un burdel parisino...
En abril de 1992, a petición de su hija, se le puso una lápida en El Cementerio Nacional de Arlington, lugar que se destina a los caídos en las guerras, y expresidentes de los Estados Unidos.
“This is for your last birthday...”
Alton Glenn Miller, fue un músico estadounidense de jazz, de La Era del Swing, y además militar, en el rango de Mayor.
En 1937, funda la orquesta en la que crearía y mantendría viva desde ese entonces su música, llamada:
“The Glenn Miller Orchestra”, donde hizo innumerables éxitos, entre los más importantes:
“In The Mood”, que es posiblemente, la canción de swing más conocida, y otras como:
“Kalamazoo”, “American Patrol”, “Moonlight Serenade”, “Tuxedo Junction”, “Chattanooga Choo Choo”, “A String of Pearls”, “Little Brown Jug”, “Pennsylvania 6-5000”, entre otras.
Miller comenzó su carrera musical, en 1925, en una pequeña banda de provincias…
Después de actuar por pueblos y ciudades, se instala en New York, y hasta allí llega Helen Berger, su novia de la escuela secundaria, para casarse con él.
La fiesta de su boda, es una histórica sesión musical, dirigida por el gran Louis Armstrong.
A partir de entonces, se inician los éxitos de Glenn Miller, triunfando en el mundo de la música, como compositor y trombonista, y terminará triunfando al frente de su propia “Big Band”, en el mundo del jazz.
Su primer gran éxito fue “Moonlight Serenade”, y un contrato en El Casino de Glen Island, en New Rochelle, en New York, le abre las puertas a una carrera triunfal, que se mantendrá hasta el final de su vida.
Al mismo tiempo que la orquesta triunfa en las salas de bailes, la banda adquiere una popularidad tremenda en los Estados Unidos, debido a la emisión de sus actuaciones, por un programa radiofónico, que transmitía de costa a costa, en los Estados Unidos, y que fue patrocinado por la marca de cigarrillos “Chesterfield”
Así, desde junio de 1938, Miller dominó los primeros puestos de varias listas de música popular, y se mantuvo así, más de un año.
A principios de 1940, “In The Mood” estuvo 15 semanas consecutivas de #1, y siguió:
“Tuxedo Junction”, que mantuvo a Miller, en el #1, hasta el verano.
Posteriormente, el 11 de febrero de 1941, se le otorgó a Miller, el primer Disco de Oro por “Chattanooga Choo Choo”
Pero fue “Moonlight Serenade”, una de las canciones más reproducidas de toda la historia en EEUU, y actualmente está considerada, como el tema representativo de Miller, y como una de las canciones más importantes de la historia musical de EEUU.
En 1942, durante La Segunda Guerra Mundial, Miller se alistó en Las Fuerzas Aéreas, donde recibió el rango de Capitán, y donde se encargó de tocar para las tropas estadounidenses, desplazadas en Europa.
Pero el 15 de diciembre de 1944, el avión monomotor que partió desde el aeródromo de Twinwood, 50 millas al norte de Londres; que se dirigía a París, para iniciar su gira artística, nunca llegó a su destino...
A los 40 años, Glenn Miller se dio por muerto.
Como nunca se encontraron los cadáveres de Miller y sus acompañantes, hubo una serie de leyendas que le suponían vivo…
En febrero de 1945, Glenn Miller fue condecorado póstumamente, con una Medalla de Bronce, que fue recogida por su esposa Helen Miller, y sus 2 hijos:
Steven y Jonnie, ambos adoptados.
En 1991, la discográfica RCA, puso a la venta, una colección de 13 cederrones, con todos los temas grabados para dicha firma de Glenn Miller.
La compilación, contaba con un total de 286 títulos.
“And the trombones, right on the left here, over there, right in there, and the four trumpets right behind them...”
The Glenn Miller Story es un musical, dirigido por Anthony Mann, en el año 1954.
Protagonizado por James Stewart, June Allyson, Harry Morgan, Charles Drake, George Tobias, Barton MacLane, Sig Ruman, Irving Bacon, James Bell, Kathleen Lockhart, Katharine Warren, Frances Langford, Louis Armstrong, Ben Pollack, Gene Krupa, entre otros.
El guión es de Valentine Davies y Oscar Brodney.
The Glenn Miller Story obtuvo un Premio Oscar al Mejor Sonido, y 2 nominaciones al mejor guión, adaptación musical, para Henry Mancini y Joseph Gershenson.
The Glenn Miller Story mezcla la comedia y el drama moralista del “self-made man” estadounidense; con los éxitos nacidos de la persistencia, y demás.
Glen Miller (James Stewart), fue uno de los más famosos músicos de jazz de La Era del Swing; eran los EEUU de los años 30, previo a La Segunda Guerra Mundial, cuando Miller y su amigo Harry Morgan, encabezan una orquesta que malvive en actuaciones de poca monta:
Miller toca un trombón, y además se encarga de hacer los arreglos musicales, para toda la banda.
Pero el joven músico tenía que empeñar, y desempeñar su instrumento, para poder sobrevivir…
Estaba obsesionado con crear su propio estilo; algo le faltaba a sus composiciones, para que él mismo las considerase “perfectas”; y rechaza buenos trabajos, para trabajar en sus composiciones.
En 1925, empezó a tocar el trombón en una pequeña banda de provincias y, después de una gira por pueblos y ciudades, se instaló en New York; y posteriormente se unió su novia, Helen Burger (June Allyson) en matrimonio.
La boda fue una histórica sesión musical, dirigida por el gran Louis Armstrong.
A partir de entonces, la carrera de Glenn Miller estuvo llena de éxitos.
Con la guerra, decide alistarse en el ejército, y llevar la música a los soldados de ultramar, decisión que le costaría la vida…
The Glenn Miller Story termina, con el trágico accidente de avioneta que acabó con su vida, cuando se encontraba en lo más alto de su carrera; presentando una atípica relación con el amor, y la lucha de quien buscó crear su propio estilo musical, en una época donde florecían las grandes orquestas.
Aunque The Glenn Miller Story no es una biografía, tampoco es totalmente fiel a la vida real de Miller, y recrea lo que de verdad interesa sobre el músico, sin detalles escabrosos y desagradables.
“See it and Hear it as Never Before”
The Glenn Miller Story es un gran tributo a Glenn Miller, una de las mayores leyendas musicales de EEUU, viajando desde su ascenso desde el anonimato, y la pobreza, hasta la fama y la riqueza, en los años 40; siendo considerada, con las debidas reservas, como una de los mejores películas realizados en Hollywood, más que nada, por la excelente dirección de Anthony Mann, quién de manera habilidosa, logró sortear los “peligros” melodramáticos, a que lo sometía la visión idílica, con que Hollywood presentaba la vida de famosos personajes del ambiente musical, en aquellos años, como resultó la biografía de Cole Porter en “Night and Day” (1945), en la cual, para no tener líos con la censura, se hizo un absoluto silencio sobre la homosexualidad del compositor, al grado de que poco faltó para que lo presentaran como un “mujeriego” o, para que hablar de las versiones de las vidas de compositores clásicos como:
Liszt, Chopin, o Wagner, que nunca trascienden la visión de personaje inolvidable, al estilo del Selecciones de Readers Digest...
Pero bueno, es la mirada de Mann, que resulta ágil, tratando su aspecto cronológico, con resuelta economía, conduciéndolo con un tono ligero y amable, incluso, con algún aporte de humor benévolo, además, siempre es agradable ver en pantalla a un James Stewart perfecto en el papel principal, y la película, tintada de manera espléndida, en suntuoso Tecnicolor por William Daniels, por lo que en conjunto, resulta un visionado muy agradable, a pesar de que desperdicia una perspectiva más incisiva y real, de la importante figura como músico de Miller.
Mientras tanto, el papel de su mujer, tiene una gran fuerza:
Ella es el motor de la relación; ella cree en él, cuando ni siquiera el mismo creía; y luchó para que pudiese conseguir el sueño de crear una música especial, de crear una gran orquesta.
Ella es esa gran mujer, que hay detrás de cada gran hombre...
Un “artista” y su mujer, que son la base que nos servirá para poder ver una serie de valores humanos, por encima de cualquier problemática profesional que a ambos les pudiera surgir.
Todos los problemas que aparecen, son tomados con positivismo, y buena cara, problemas con solución, y eso es quizás, lo que más gustó de The Glenn Miller Story:
Un matrimonio que sabe lo que significa pasar hambre, y estar unidos ante los problemas, y luchar por eso, en lo que creen.
Cuando se termina, uno tiene la sensación de positivismo que le inunda todo el cuerpo, no cae en el sensacionalismo barato, ni en la ternura fácil y simplona, al contrario, es buena energía la que desprende.
Como dato, The Glenn Miller Story se rodó 9 años después de la muerte del músico; siendo la 2ª de las 3 películas en las que James Stewart y June Allyson, interpretaron a marido y mujer.
Por su parte, James Stewart es doblado al trombón, por el mismo Glenn Miller, y por Trummy Young; y hace eco de esa concepción de Glenn Millar, y nos lo presenta siempre, como el típico buen ciudadano estadounidense, ejemplar, sobre todo, en la parte final, cuando Miller se alista en el ejército, para llevar entretenimiento a las tropas durante La Segunda Guerra Mundial.
Según algunos biógrafos del músico, The Glenn Miller Story falsea su idílica relación con su esposa Helen, pero eso forma parte de la leyenda tejida en torno al compositor.
Sí que es cierto que aborda sus inicios como arreglista, sus ilusiones, y su empeño en progresar como músico, y alcanzar un objetivo sonoro en el mundo del jazz, la consecución del éxito, y el conocido final de su existencia, pero todo resulta demasiado esquemático y precipitado, como así lo es también, la poco estimulante y melodramática relación amorosa con June Allyson, pivotando demasiado el asunto, en una relación que tampoco presenta demasiadas vertientes, ni cuenta con demasiado peso…
Hay varios anacronismos, como cuando la banda militar dirigida por Miller, está delante del General “Hap” Arnold, y un bombardero B-29 está en el fondo…
Las tropas que marchan, están desagregadas, lo que no ocurrió hasta 1948, es decir, 4 años después de la muerte de Miller.
Hay varios momentos importantes en la carrera de Miller, que son mostrados con diferentes grados de verosimilitud, incluyendo:
El éxito inicial de sus arreglos para la banda de jazz; su salida de Broadway, y su intento por formar su propia banda.
El fracaso de su primera banda con sus recorridos; y la subsiguiente reformación de su gran banda, y el establecimiento del “Sonido Miller”, como se muestra en la canción “Moonlight Serenade”
También, se muestra el éxito internacional de Miller, junto a su banda, en apoyo a Los Aliados en La Segunda Guerra Mundial.
Al final, se dice que Miller muere en accidente aéreo.
Mann, tiene el gran detalle de no mostrar un plano de la esposa, al recibir la noticia.
El General que le comunica la tragedia, comenta que quiere llamarla personalmente, y el siguiente plano, muestra a Helen y los suyos, esperando la emisión de su último concierto por la radio, sabedores ya de la muerte del músico.
El momento álgido de dicha emisión, sobre un primer plano de June Allyson, tiene aún más fuerza, gracias a la omisión del plano en que la mujer se ha enterado de la tragedia.
Por último, la banda sonora estaba compuesta por una serie de grandes éxitos grabados entre 1939 y 1943, y alcanzo el #1 en las listas de Billboard, en el año 1954.
Son varias las canciones de Miller, de sus grabaciones originales, como:
“Moonlight Serenade”, “Tuxedo Junction”, “Little Brown Jug”, “St. Louis Blues March”, “Basin Street Blues”, “In The Mood”, “A String of Pearls”, “Pennsylvania 6-5000”, “American Patrol”, y “Otchi-Tchor-Ni-Ya”
Por su parte, los músicos que aparecen en The Glenn Miller Story son:
Louis Armstrong, Barney Bigard, Cozy Cole, Gene Krupa, Frances Langford, Skeets McDonald, Marty Napoleon, Ben Pollack, Babe Russin, Arvell Shaw, The Modernaires, y James Young.
John “Chummy” MacGregor, que fue pianista de La Orquesta de Glenn Miller, hizo de asesor técnico; mientras La Banda de Miller, fue retratada por The Airmen of Note, un conjunto del Air Force Band de los Estados Unidos, creado originalmente en 1950, para continuar con la tradición de Glenn Miller.
Esta banda sonora, fue #1 durante 10 semanas en Billboard, en 1954.
El álbum posteriormente fue relanzado con una lista de pistas ampliadas; y ha sido recomendada para los fanáticos del jazz y el blues, de los clarinetes, y los saxofones, y de todo aquel que se embelese con una historia de superación, y de búsqueda de innovación en lo que a música se refiere.
“Honestly!”
Con respecto a la muerte de Glenn Miller, se dijo que su avión se perdió en un viaje que hacía de Inglaterra a Francia…
La teoría más probable, es que el avión fue accidentalmente derribado por bombarderos RAF sobre El Canal de La Mancha, entre Francia y Reino Unido, después de una operación abortada de bombardeo contra Alemania, donde se arrojaron al mar, las bombas destinadas, a fin de aligerar carga:
El piloto de La Fuerza Aérea Británica, Frad Shaw, anotó en su bitácora, que observó que un pequeño avión monomotor, se precipitaba en espiral, y sin control hacia el mar…
A pesar de la desaparición del músico, su banda continuó sus actividades, bajo la dirección de Jerry Gray, hasta el 13 de noviembre de 1945, cuando hizo su última presentación, ante El Presidente Harry Truman, en Washington.
El Mayor Glenn Miller, fue el único miembro de la banda, que no sobrevivió a la guerra…
Tiempo después, se filtró que no hubo tal desaparición, sino que los hechos fueron falseados, para que su figura carismática de “estadounidense ejemplar”, no fuera manchada con la verdad.
Glenn, era muy mujeriego, y falleció de un infarto al corazón, en un café de Francia, mientras estaba con una prostituta; otros alegan que fue apuñalado en un hotel, por una prostituta en París...
Ese manto de silencio, respecto de su muerte, tanto de los militares involucrados, como de sus parientes, dejando correr el rumor periodístico de una desaparición misteriosa, se debió simplemente a su escabrosa muerte, indigna de un hombre de su talla, con un carisma como pocos.
Y se creyó así, preservar su imagen.
El libro “The Glenn Miller Conspiracy”, del periodista Hunton Downs, y publicado en 2010, afirma que Miller fue puesto bajo las órdenes de Eisenhower, y fue capturado por La Gestapo, con el fin de llegar hasta éste.
Fue torturado, ejecutado, y abandonado en un burdel parisino...
En abril de 1992, a petición de su hija, se le puso una lápida en El Cementerio Nacional de Arlington, lugar que se destina a los caídos en las guerras, y expresidentes de los Estados Unidos.
“This is for your last birthday...”
Hola, quería saludarte y de paso darte las gracias por seguir mi blog desde hace tiempo. Y también quería pedirte un favor, estoy promocionando mi propio cómic, como puedes ver aquí:
ResponderBorrarhttp://artbyarion.blogspot.com/2015/06/un-american-chronicles-available-now-in.html
Me encantaría que pudieras ayudarme a compartir el link con tus lectores, y si te animas a escribir un post sobre mi proyecto te lo agradecería muchísimo.
Saludos.
Hola Arion, claro que sí, ya lo he compartido, y te agradezco el seguimiento.
ResponderBorrar¡¡ Te deseo lo mejor !!