The Birth Of A Nation

“A plea for the art of the motion picture:
We do not fear censorship, for we have no wish to offend with improprieties or obscenities, but we do demand, as a right, the liberty to show the dark side of wrong, that we may illuminate the bright side of virtue, the same liberty that is conceded to the art of the written word, the art to which we owe the Bible and the works of Shakespeare”

El Ku Klux Klan (KKK) es el nombre que han adoptado varias organizaciones de extrema derecha en Estados Unidos, creadas en el siglo XIX, inmediatamente después de la Guerra de Secesión, y que promueven principalmente la xenofobia, así como la supremacía de la raza blanca, homofobia, el antisemitismo, racismo, anticomunismo, y el anticatolicismo.
Lo crearon 6 veteranos Confederados de clase media y baja, molestos con la situación en su pueblo, Pulaski, Tennessee, en los años de la postguerra.
El nombre del Klan se compuso con la fusión del griego “κύκλος [kýklos]” (círculo)
El capitán John B. Kennedy añadió “klan” (clan) en recuerdo de los grupos familiares ancestrales, ya que todos tenían ascendencia escocesa.
Los fundadores decidieron escribir clan con “K”, para darle más notoriedad a la organización.
Les gustó el sonido rítmico de las palabras, y decidieron separar “Kuklos” en dos palabras, cambiando la “o” de “Kuklos” por “u”, y la “s” final por una más impactante “x”
Con frecuencia, estas organizaciones han recurrido al terrorismo, la violencia y actos intimidatorios como la quema de cruces, para oprimir a sus víctimas.
La primera encarnación del Klan fue fundada a finales de 1865 por veteranos después de la Guerra de Secesión, quienes quisieron resistirse a la Reconstrucción.
Al enfrentar ese período, los Estados Unidos después de la guerra civil, el KKK endureció sus actividades, y se dedicó a oprimir a los “carpetbaggers” o norteños que se mudaron al sur, a los “scalawags” o blancos sureños que se unieron al Partido Republicano, y a los recién liberados esclavos.
El pasado conservador, y de apoyo a la esclavitud del Partido Demócrata, hizo que muchos de sus miembros buscaran pertenecer al KKK, ya que de manera informal, el Klan repudiaba al Partido Republicano.
La organización adoptó rápidamente métodos violentos para conseguir sus fines.
Sin embargo, hubo una reacción que en poco tiempo llevó a la organización al declive, pues las élites sureñas veían al Klan como un pretexto para que las tropas federales estuvieran activas en los Estados del Sur.
El KKK fue formalmente disuelto en 1870 por el Presidente republicano Ulysses S. Grant, a través del Acta de Derechos Civiles de 1871, conocida como “El Acta Ku-Klux Klan”
“This is an historical presentation of the Civil War and Reconstruction Period, and is not meant to reflect on any race or people of today”
Durante el año de 1915, tuvieron lugar 3 eventos íntimamente relacionados:
1. Se estrenó la película “The Birth Of A Nation” de D. W. Griffith, en la cual se glorifica y mitifica al primer Ku Klux Klan.
La popularidad e influencia de The Birth Of A Nation aumentaron cuando, el historiador y presidente de los Estados Unidos, Woodrow Wilson, avaló la exactitud de la misma.
Gran parte de la iconografía del Klan, incluyendo los disfraces blancos y las cruces ardientes, procede de The Birth Of A Nation, la cual se inspiraba más en el romántico concepto que Thomas Dixon tenía de la vieja Escocia, que en los auténticos símbolos usados por el primer Klan.
The Birth Of A Nation incluye numerosas citas de la obra de Wilson “Historia del Pueblo Estadounidense”
Al ver una proyección exclusiva de The Birth Of A Nation, que paso a ser la primera película mostrada en la Casa Blanca el 18 de febrero de 1915, Wilson exclamó:
“Esto es como escribir la historia con un relámpago, y lamento que todo es terriblemente verdadero”
El apoyo de Wilson hacia The Birth Of A Nation aumentó la popularidad de la misma, la cual fue un factor importante en la creación del segundo Klan.
2. Leo Frank, un judío acusado de violar y asesinar a una joven llamada Mary Phagan, una niña de 14 años empleada en su fábrica, fue linchado en medio de un gran frenesí mediático.
Primeramente, Frank fue condenado a muerte en un cuestionable juicio, donde se solicitó que ni el acusado ni su abogado defensor, estuvieran presentes en el momento de anunciar el veredicto, ya que se temía que la turba que rodeaba el edificio de la corte actuara violentamente.
Las apelaciones de Frank no prosperaron, pero el Gobernador del Estado cambió la sentencia de muerte por una de cadena perpetua.
Sin embargo, la turba, autollamada “Los Caballeros de Mary Phagan” secuestró a Frank de la prisión donde se encontraba, y lo linchó a muerte públicamente.
Muchos sureños consideraban que Frank era culpable, y para ellos había una fuerte resonancia entre el juicio y la película The Birth Of A Nation, ya que veían una analogía entre Mary Phagan y Flora, un personaje de The Birth Of A Nation.
Flora era una joven virgen, que se lanza de un acantilado para evitar ser violada por el personaje negro Gus, quien era descrito como un “renegado, producto de las viciosas doctrinas que los “carpetbaggers” esparcieron”
3. Se fundó el segundo Ku Klux Klan, con nuevos objetivos antisemitas y antiinmigrantes.
La mayoría de los fundadores pertenecían a una organización llamada “Los Caballeros de Mary Phagan”
El segundo Ku Klux Klan se fundó en 1915, demostrando el recientemente descubierto poder de los medios masivos de comunicación.
Los reclutadores hacían énfasis en señalar a los banqueros judíos, los negros, los católicos, o algún otro grupo social, o étnico, como los causantes de los problemas del ciudadano común.
La diferencia entre el primer KKK y el segundo, radica en que, mientras el primero podía caracterizarse como sureño y exclusivamente del Partido Demócrata, el segundo Klan, pese a seguir siendo predominantemente Demócrata, consiguió penetrar fuertemente en el Partido Republicano, extendiendo su influencia por todo los Estados Unidos.
El segundo KKK fue una organización más formal, con membrecía registrada, y con una estructura estatal y nacional.
El número de miembros llegó a ser de 4 a 5 millones.
La popularidad del Klan comenzó a caer en la Gran depresión de 1929, y durante la Segunda Guerra Mundial, ya que algunos miembros destacados del Klan protagonizaron escándalos por apoyar a la Alemania nazi.
Adicionalmente, algunos grupos del KKK tomaron parte en linchamientos, llegando a asesinar a soldados negros que volvían de la Segunda Guerra Mundial, estando aún usando sus uniformes militares.
El Klan les advirtió a los negros que debían respetar los derechos de la raza blanca “en cuyo país se les permite vivir”
El colapso del segundo Klan se debió parcialmente a la reacción en su contra, y en parte gracias al escándalo alrededor de David Stephenson, entonces miembro del Partido Republicano, después de haber sido miembro del Partido Socialista, y del Partido Demócrata, miembro del Ku Klux Klan que fue condenado por la violación y el asesinato de Madge Oberholtzer, tras un juicio que fue sensación nacional.
Como resultado de los escándalos, el Klan cayó de la gracia del público, y en la década de 1930 se retiró de la actividad política.
Desde entonces, varias agrupaciones diferentes han utilizado el nombre, incluyendo a las que se oponían al Acta de Derechos Civiles, y a la de segregación en las décadas de 1950 y 1960.
Algunos miembros de estas organizaciones llegaron a ser condenados por diversos crímenes.
Aunque docenas de organizaciones emplean hoy todo, o parte del nombre en sus títulos, la membrecía real se estima en unos cuantos miles.
Estos grupos, con operaciones separadas en pequeñas unidades aisladas, son considerados grupos de odio extremo.
El KKK moderno ha sido repudiado por los medios de comunicación de masas y líderes políticos y religiosos de Estados Unidos.
En los años 1940, el activista Stetson Kennedy, se infiltró en la organización haciendo desvelar secretos del mismo a las autoridades, y forzando a eliminarse como asociación nacional.
“While youth dances the night away, childhood and old age slumber”
En 1914, Estados Unidos está en plena ebullición económica y social.
El nuevo país está a punto de convertirse en la primera potencia mundial a base de esfuerzo, creatividad y ruptura con muchas de las normas establecidas en las antiguas potencias coloniales.
En Estos momentos, Estados Unidos es una auténtica tierra de promisión donde cualquiera que quiera trabajar, y tenga talento puede llegar a lo más alto.
En este panorama, la industria del cine se mueve también a velocidad de vértigo; en apenas 10 años, el cine ha pasado de curiosidad científica, a industria, y ya se han sentado muchos de los principios técnicos y artísticos del Séptimo Arte.
Hacia 1915, el lenguaje del cine se había desarrollado paulatina, pero constantemente.
De las vistas de un solo rollo, la cinematografía había pasado a los grandes espectáculos de larga duración, y múltiples escenarios y actores.
Por su parte, la industria había crecido y se había establecido como una de las formas de entretenimiento más populares.
Faltaba la gran película que ayudara a que el cine se consolidara como una forma de expresión estética.
Así, llegó The Birth Of A Nation, y no solo suponía la separación definitiva entre la técnica y el estilo:
La primera como simple herramienta; el segundo toma esa herramienta y le da sentido artístico.
La primera se aprende; el segundo, no, a lo más puede desarrollarse.
La primera es estándar; el segundo es rabiosamente personal.
La técnica de dibujo de Leonardo da Vinci se puede aprender, todos los días se enseña en las academias; pero nadie puede dibujar con el estilo de Leonardo.
Por eso, The Birth Of A Nation es el nacimiento del arte cinematográfico:
Porque el primer artista es el primer autor, David Wark Griffith.
“While women and children weep, a great conqueror marches to the sea”
The Birth Of A Nation es un film dramático, épico, dirigido, coescrito y musicalizado por David Llewelyn Wark “D. W.” Griffith en 1915, coescrita con Frank E. Woods y basados en la novela “The Clansman” de Thomas F. Dixon Jr.
Protagonizada por Lillian Gish, Mae Marsh, Henry B. Walthall, Miriam Cooper, Mary Alden, Ralph Lewis, George Siegmann, Walter Long, Robert Harron, Wallace Reid, Joseph Henabery, Elmer Clifton, Josephine Crowell, Spottiswoode Aitken, George Beranger, y un extenso reparto y extras, muchos no acreditados.
La música corre a cargo de Joseph Carl Breil en conjunto con D.W. Griffith, sobre unos pasajes de Vincenzo Bellini y Richard Wagner, y otros compositores norteamericanos, entre otros.
The Birth Of A Nation es la primera gran película épica, que en su época fue considerada un inmenso fresco histórico hasta por el presidente Woodrow Wilson, y hoy es vista como un melodrama racista y tendencioso.
Griffith está considerado “el creador del modelo americano de representación cinematográfica”, por lo que fue llamado “El Padre del Cine Moderno”
Griffith basó su guión en la novela “The Clansman”, del reverendo Thomas Dixon, que narraba, con acento heroico, el nacimiento y la actuación de la organización racista Ku-Klux-Klan al acabar la Guerra de Secesión.
Curiosamente, Griffith era al igual que el reverendo Dixon, hijo de un coronel sudista arruinado por la Guerra Civil, y que entre sus confusos principios de autodidacta, se hallaba profundamente arraigado, desde los lejanos días de la infancia, el desprecio hacia la raza negra, considerada como inferior.
Griffith se proponía mostrar en The Birth Of A Nation la amistad y el amor de dos familias blancas:
Los Stoneman y los Cameron, bruscamente enfrentados por el estallido de La Guerra Civil, al tomar, los primeros, partido por el Norte, y los segundos, por el Sur.
The Birth Of A Nation iba a constituir una pieza dramática capital, que contribuiría a atizar uno de los más candentes problemas que gravitan sobre la sociedad norteamericana desde los días de La Guerra Civil.
En 190 minutos, The Birth Of A Nation narra los acontecimientos más importantes de la creación de los Estados Unidos, creando el primer relato íntegramente narrativo y es, debido a su técnica, una de las películas más famosas de la época del cine mudo, y también una de las más polémicas por promover la supremacía de la “raza” blanca, y describir el supuesto heroísmo de los miembros del Ku Klux Klan.
The Birth Of A Nation se considera un hito de la historia del cine, porque David W. Griffith reúne y sistematiza todos los recursos narrativos que había ido desarrollando el cine hasta ese momento (1915), y lo hace de una forma en que queda establecido un modelo de cine que se perpetuaría hasta la actualidad.
Por ejemplo:
La forma en que se establece el salto de eje, el uso de los primeros planos, la alternancia entre planos generales que permiten que el espectador comprenda, y organice mentalmente, el espacio donde transcurre la acción, y planos cortos, donde se aprecia el detalle, constituyen la base del modelo; aunque es cierto que, en The Birth Of A Nation, aún se pueden rastrear, ocasionalmente, huellas del cine primitivo que desaparecen en films posteriores.
Si bien, desde el punto de vista técnico, The Birth Of A Nation es admirable, no se puede decir lo mismo desde el punto de vista moral, ya que los hombres de “raza negra” son tratados de modo despectivo, hasta el punto de que Griffith justifica la creación de Ku Klux Klan, como un método de contener las tropelías que la población negra perpetraba en el sur de los EEUU.
Con todos estos ingredientes, y unas gotitas de megalomanía, el director decide tomar un tema de enorme trascendencia para sus contemporáneos, no olvidemos que The Birth Of A Nation es una película hecha por norteamericanos para norteamericanos:
La aparición del espíritu nacional en EEUU, a partir de la traumática experiencia de La Guerra Civil ocurrida en los años 60 del siglo XIX.
Griffith elige contar The Birth Of A Nation desde el punto de vista de los perdedores, el Sur.
En el relato se puede entrever que el nuevo nacionalismo americano, como todos, nace por la negación de los otros, y estos otros, pueden ser los europeos, los negros, o todo lo que no sea genuinamente americano.
Y no hay que perder de vista que, en el fondo, lo que se trata en The Birth Of A Nation es de decirle al público:
“Gástense sus dólares en una entrada para The Birth Of A Nation, donde verán más de todo lo que han visto hasta ahora en el cine, y además les explicaremos por qué ustedes van a ser mejores y, a la postre, los dueños del mundo”
Pensar que Griffith es “El Padre del Cine” por The Birth Of A Nation es ir demasiado lejos; simplemente The Birth Of A Nation es una película muy importante, porque crea conceptos nuevos en el cine de su época:
Superproducción, historias paralelas, significados implícitos de la historia, o sea, película con moraleja, etc.
“Don't scrape to me.
You are the equal of any man here”
The Birth Of A Nation empieza con el origen del esclavismo, de ahí pasa a La Guerra Civil, mas tarde al asesinato de Lincoln, y por último, al nacimiento del Ku Klux Klan.
El hilo conductor son los esclavos, quienes acaban siendo culpados de que haya habido una Guerra Civil, lo cual justifica el nacimiento del Klan.
The Birth Of A Nation retrata las venturas y desventuras de dos familias amigas, y que representan el norte y el sur de los Estados Unidos durante la Guerra de Secesión.
En el Sur, hacia 1860, vive feliz en su despreocupación la acaudalada familia Cameron, que tiene nexos con la familia del diputado anexionista Stoneman.
El estallido de La Guerra Civil separa a ambos clanes.
El padre de los Stoneman es Austin (Ralph Lewis) un congresista anexionista partidario de la abolición de la esclavitud y de la igualdad de todas las razas, dicho sea, el personaje está basado en el personaje histórico real Thaddeus Stevens, Senador de Pensilvania.
Austin Stoneman tiene 2 hijos:
Tod (Robert Harron) y Phil (Elmer Clifton), y una hija, Elsie (Lillian Gish) la cual es pretendida por Ben Cameron (Henry B. Walthall), el hijo menor de la familia sureña, y ex-coronel del Ejército Confederado.
La Guerra acaba con el asesinato de Abraham Lincoln (Joseph Henabery) a manos de John Wilkes Booth (Raoul Walsh), y con la toma del poder por parte de los negros, encabezados por el mulato Silas Lynch (George Siegmann), lo cual genera una situación de caos y desorden en el país.
Ante tales humillaciones, Ben Cameron se inspira en unos niños blancos que asustan tapados con sábana blanca a unos negritos, para crear a los paramilitares Ku Klux Klan, (gran hazaña histórica)
Es entonces cuando Ben, ve necesario hacer frente al poder negro, y para ello lidera el ejército racista denominado Ku Klux Klan.
El Sur, después de su derrota, es prácticamente dominado por Silas Lynch, el líder de color, que ha formado un brutal ejército dedicado al pillaje ya mantener el “orden negro”
Mientras tanto, Gus (Walter Long), un miembro del ejército de los negros, le propone matrimonio a una de las hijas de los Cameron, Flora Cameron (Violet Wilkey/niña, Mae Marsh/adulta), a lo cual ésta se niega en rotundo, y huye de él, con tan mala suerte que cae en un acantilado y muere estrellada contra las rocas.
Ante esto el Ku Klux Klan llevará a cabo su venganza, lo que hará que Lynch ataque a los Cameron, y éstos se vean obligados a esconderse.
Su hermano Benjamín, ex-coronel del ejército confederado, decide vengarla, y aprovechar el creciente poderío del Ku Klux Klan fundado por él.
Además, por si esto fuera poco, Lynch tratará de casarse por la fuerza con Elsie, la hija de Austin Stoneman, su propio mentor, pero éste no aprobará ese matrimonio, y ella tratará de rechazarle.
Al negarse éste, Lynch se encoleriza, y manda arrestar al diputado, para después raptar a su hija, que finalmente es salvada por el Ku Klux Klan.
Los negros descubren que el coronel Cameron es el líder del Klan, y deciden atacar a su familia, pero ésta huye a una cabaña en donde es ayudada por dos excombatientes sureños.
Grupos de negros sitian la cabaña, hasta la llegada de los victoriosos jinetes del Ku Klux Klan, que los hacen huir.
The Birth Of A Nation acaba con la victoria del Ku Klux Klan en las siguientes elecciones, y con la luna de miel entre Ben Cameron y Elsie Stoneman por un lado, y Phil Stoneman (Elmer Clifton), hijo de los Stoneman, y Margaret Cameron (Miriam Cooper), hija de los Cameron, por otro.
No tiene desperdicio el final:
El Diablo azotando a los negros, y Dios entre los blancos.
“Stay away or I'll jump!”
The Birth Of A Nation se divide en 2 partes:
La primera parte llamada “Pre-Civil War America”, es la recreación de las batallas de La Guerra Civil, es impresionante, vemos escenas llenas de soldados de ambos bandos luchando, carretas tiradas por caballos, artillería pesada, gente a caballo... y todo con planos lejanos, en los que vemos un campo de acción realmente grande.
Se puede decir que no escatimaron esfuerzos por recrearla con la máxima verosimilitud.
Importante también el detalle de mostrar las crueldades de la guerra, como los soldados del sur quedándose sin comida, o siendo masacrados en la batalla final.
Es famosa la escena del asesinato de Lincoln.
La recreación del asesinato de Lincoln es muy fiel a la historia, vemos el gran error que se cometió, al facilitar la entrada al palco, del asesino.
Como curiosidad, el actor que encarna al asesino de Lincoln es Raoul Walsh, uno de los grandes directores de cine de toda la historia.
En la secuencia del asesinato de Lincoln, el cineasta David Wark Griffith, recurrió a testigos reales del hecho para utilizarlos como extras en el rodaje, buscado de paso, el más fiable asesoramiento.
Lo que me gusta es que, aquí no se juzga ni al asesino, ni al que cometió el error, tan solo narra los hechos.
Pero si se dice que, el motivo del asesinato, es la suavidad con la que se trato a los generales confederados por parte del presidente Lincoln.
Con esto termina la primera parte, que vienen a ser 1h, 30m.
La segunda parte se llama “Reconstruction” y trata sobre el problema racial surgido tras La Guerra Civil.
Vemos como retrata a los negros como alcohólicos, indisciplinados, caciques sin piedad, siguiendo incluso algún que otro tópico, como que les gusta bailar, o comer pollo, poniendo de manifiesto que la minoría de blancos estaba a su merced.
Y, claro, tuvo que surgir el Ku Klux Klan para poner orden.
El texto de la imagen es la imitación de como habla un negro del sur, sin cultura ni modales.
La imagen de los miembros del KKK no es la que estamos acostumbrados a ver, pues se trata del traje más clásico.
Según The Birth Of A Nation se hicieron unos 4000 trajes.
Vemos como se enfatiza el hecho de que el primer ataque sangriento fue causado por un grupo de negros contra unos miembros del Klan cuando estos solo se dedicaban a intimidar verbalmente.
Por otra parte, el reparto comprendió nombres que no tardarían en refulgir como estrellas de la gran época del cine mudo:
Lillian Gish, Mae Marsh, Wallace Reid, Henry B. Walthall, Bessie Love, Elmo Lincoln, Miriam Cooper y Ralf Lewis.
Pero, en su conjunto, las posibilidades de los intérpretes se vieron coartadas por los límites propios de este primario melodrama racista, verdadero himno en honor del Ku Klux Klan, cuya fuerza y vigor reposaban, exclusivamente, en la excepcional intuición cinematográfica del autodidacta Griffith.
D.W. desarrolló en sus primeros años en la Biograph toda una serie de técnicas e innovaciones, que después pondría en práctica en conjunto en The Birth Of A Nation.
Ahora la cámara se movía, reescribiendo el espacio fílmico, mostrándonos zonas que en las anteriores producciones no veíamos, debido a que la cámara era fija, y generando una narración basada en el corte y en la alternancia de los tamaños de los planos.
Entre todas sus aportaciones, voy a nombrar aquellas que considero más importantes en la creación de ese lenguaje visual al que estoy remitiendo:
1. El establecimiento del director como primera fuerza creativa del filme.
2. Empleo de jóvenes nuevos talentos.
3. La compañía permanente.
4. La moderación en la expresión.
5. Historias mejor escritas con argumentos más creíbles.
6. La longitud del film.
7. Planificación ágil a la hora de contar historias.
8. Gama variada de planos, no solo en cuanto a su tamaño, sino también en cuanto a su duración.
9. Una gran variedad de emplazamientos y ángulos de la cámara en movimiento al montar la cámara en un tren, en una carretilla y en un coche.
10. El montaje y la manipulación del tiempo.
11. Suspense prolongado.
12. El fundido, iluminación, contraluz o “backlighting”, fotografía “empañada” y el teñido, entre otras.
Aun para los estándares actuales, las cifras de The Birth Of A Nation son impresionantes:
5.000 escenas diferentes, 1.357 tomas individuales, 18.000 actores y extras, 3.000 caballos, y 7 meses de producción.
Estos beneficios, y ese éxito que tuvo The Birth Of A Nation, aparte de venir dados por la publicidad gratuita surgida a raíz de la polémica que consigo trajo, fueron debidos al gran despliegue de medios que fue llevado a cabo para poder desarrollar el rodaje:
Grandes decorados, gran cantidad de extras y actores, etc.
Todas estas mejoras, incluyendo la larga extensión de los metrajes que obligaban a las salas a proyectar películas en menos sesiones, trajeron como resultado un incremento en la afluencia de los espectadores al cine, y también en el tiempo que un espectador estaba en la sala para terminar de ver la película, lo que sin duda tuvo su repercusión en toda la industria cinematográfica:
Al tener las salas que albergar a un mayor número de espectadores, éstas se hicieron más grandes para cubrir todas las plazas necesarias.
Además, al durar las películas más de lo que hasta ahora el espectador medio estaba acostumbrado, era preciso hacer las salas más cómodas, lo que llevó a la instalación de vestíbulos, butacas cómodas, guardarropas donde dejar el abrigo, aseos, etc.
Y por supuesto, el hacer las salas más grandes y más cómodas no era gratis; había que pagarlo, razón por la cual la entrada para una sesión de cine aumentó de precio.
Ante esto, muchos empresarios no pudieron amoldarse a las nuevas características del cine impuestas por el mercado, porque no podían hacer frente a inversiones tan caras, lo que, haciendo efectivo el refrán de “renovarse o morir”, llevó a muchos de ellos a la quiebra.
Con este gigantesco filme, Griffith culminó todas sus experiencias adquiridas a lo largo de 7 años, y se convirtió en el maestro de varias generaciones de cineastas.
En palabras del famoso director ruso Sergei Eisenstein:
“Griffith fue el padre de todos nosotros”
“Sic semper tyrannis!”
La interpretación que The Birth Of A Nation hace de la historia de los Estados Unidos es polémica.
La reconstrucción de EEUU fue un desastre, los negros nunca pudieron ser integrados como iguales en la sociedad blanca, y las acciones violentas del Ku Klux Klan se justifican, porque ayudaron a restablecer un gobierno “honesto”
Mientras que los racistas del KKK nos son presentados como gloriosos salvadores de almas cándidas, los negros aparecen como estúpidos, ignorantes, y burros en el mejor de los casos.
Recuérdese, por ejemplo, la escena del Congreso en la que aparecen negros sin zapatos, con los pies encima de la mesa y muy mal educados; o la frase con la que comienza The Birth Of A Nation:
“En el momento en que desembarcó el primer negro se instauró la semilla de la desunión”
Pensar que Griffith era racista no es del todo descabellado, puesto que la tierra donde se crió, Kentucky, es conocida por haber sido uno de los centros donde el racismo encontró más arraigo entre la población.
Además, su padre fue combatiente durante La Guerra de Secesión en las filas del bando perdedor, lo que sin duda influyó en el pensamiento, y forma de ver la vida, de David W. Griffith.
Cuando The Birth Of A Nation se estrenó, hubo disturbios en Boston, Filadelfia y otras ciudades importantes.
Chicago, Denver, Kansas City, Minneapolis, Pittsburgh y Saint Louis cancelaron el estreno.
El carácter incendiario de The Birth Of A Nation incitó a pandillas de blancos a atacar a la gente de raza negra.
En Lafayette, Indiana, un hombre blanco, tras ver The Birth Of A Nation, asesinó a un adolescente negro.
En algunos casos, la audiencia entusiasmada disparaba sus armas hacia la pantalla…
The Birth Of A Nation era el primer gran escándalo de la historia del cine, y por lo mismo, el primer gran éxito de taquilla.
Las apasionadas tomas de posición de los periódicos sobre The Birth Of A Nation, tuvieron la virtud de instituir la crítica de cine como sección regular en sus páginas.
Todo el mundo hablaba y discutía sobre The Birth Of A Nation, todo el mundo iba a ver la película, una o varias veces.
Como consecuencia, su recaudación comenzó a elevarse hasta llegar a batir todas las marcas pasadas y futuras:
En 1963, la revista “Variety” todavía colocaba The Birth Of A Nation a la cabeza de los éxitos de taquilla del mercado norteamericano, con una cifra estimada superior a los 50 millones de dólares, y seguida de otra película racista de corte parecido:
“Gone With The Wind” (1939) de Victor Fleming con 41.200.000 dólares.
The Birth Of A Nation es acusada de racismo, pues en el desenlace unas mujeres, secuestradas por un hombre de raza negra, eran salvadas “in extremis” por el Ku Klux Klan.
Por ello, al director le fue muy difícil encontrar actores y extras negros que se prestasen al rodaje, por lo que tuvo que caracterizar actores blancos con la piel maquillada en negro.
De hecho se insinúa que The Birth Of A Nation fue la chispa que hizo que volvieran a juntarse antiguos miembros del KKK, ya que en 1870 se deshizo, y a mediados del siglo XX ya contaban con 4 millones de miembros, siendo The Birth Of A Nation muy alabada por ellos.
Desafortunadamente, la amplia popularidad de The Birth Of A Nation, en cuyo estreno, se emplearon hombres encapuchados como reclamo publicitario, provocó un resurgimiento del Ku Klux Klan en muchos estados del Sur.
Por otra parte, la racial, la imagen que da The Birth Of A Nation de los negros es la siguiente:
Se los presenta como seres primarios y estúpidos, glotones, vagos, lujuriosos y pendencieros.
La asociación de este carácter con la raza es total, pues incluso el político enviado al Sur por Stoneman acaba comportándose como un animal, pese a tratarse de una persona culta y educada.
Es decir, ni siquiera se escuda en el entorno social o la ignorancia para dar esa imagen.
Se hace alusión explícita, a que los blancos tienen ciertos derechos por pertenecer a la raza “aria”, aclaro que el uso de este término es The Birth Of A Nation.
Se insinúa, de forma evidente, que el matrimonio interracial es algo moralmente aborrecible, y se insiste además, sobre la idea de que desemboca en que los hombres negros violen a las mujeres blancas.
En muchas escenas aparecen actores blancos con la cara pintada de negro, “gestualizando” y andando casi como monos.
Se da a entender que los “negros buenos” son aquellos que aceptan su lugar como servidores de los blancos.
Se muestra la igualdad de derechos como una alteración del orden social lógico y el aniquilamiento de la civilización sureña.
La nación a la que hace referencia el título es la de los norteamericanos blancos, unidos tras superar sus diferencias provocadas por los negros y sus aliados.
Se muestra un rencor desmedido por parte de los esclavos liberados, mientras que antes de la guerra aparecían felices y alegres.
Los blancos se enamoran románticamente, los negros babean como animales.
De la madurez del espectador depende el rechazar The Birth Of A Nation por su costado racista, o apreciarla en la faz cinematográfica.
Imaginemos que luego vendrían décadas en las que los negros serán los buenos de las películas, una suerte de estereotipado que no resulta muy afortunado por la repetición incesante.
De todas maneras, The Birth Of A Nation es una obra soberbia,
“If in this work we have conveyed to the mind the ravages of war to the end that war may be held in abhorrence, this effort will not have been in vain”
Más que el nacimiento de una nación, es el nacimiento de un grupo de personas racistas y nacionalistas, pues creen que ellos y nadie más, son lo que deberían imperar en ese país.
The Birth Of A Nation es una mirada cruel de las relaciones entre blancos y negros, que se calificó de racista y discriminatorio pues pone, en muchas escenas, a los mulatos y negros en ridículo, especialmente cuando llegan a la cámara de representantes.
Por otro lado, pese a la filosofía de cada familia, Ben Cameron y Elsie Stoneman, se quedan juntos, obviamente no es la repetida historia de “Romeo y Julieta”, para eso deberían ser de distinto color.
Quizás, también, The Birth Of A Nation se deba a lo que vendrá después de esa unión de blancos, a la unión perfecta de Griffith, una producción que ni en estos tiempos se ve por la ayuda de la tecnología.
Los escenarios usados como exteriores realzan lo gigantesco de la producción, y gracias a sus planos genérales, mayormente contemplativos se puede llegar a apreciar la grandeza del lugar, aunque muchas veces no del todo iluminado.
Se ha discutido mucho acerca de esta posición, llamada racista sin más, por parte del director, en todos esos momentos en los que se presenta a los libertos como caóticos e insolentes pandilleros.
Más allá de lo explícito, el sentido que le da es más complejo, The Birth Of A Nation se refiere a un momento en particular en el que la organización probablemente estuvo en manos poco preparadas a las cuales, quiérase o no, debía aleccionarse.
Presunciones al vuelo, habrían de evitarse para mirar con atención que, bien puede interpretarse como la aparición del hombre como propiedad, identificado en la raza negra, sembrando la desigualdad que finalmente desemboca en los resentimientos.
Fue ello acaso el motivo mayor de la guerra, que estuvo a punto de separar a su nación, incluso poco después de finalizada.
En la época que es rodada The Birth Of A Nation, Estados Unidos estaba en un momento económicamente bueno, y con la industrialización en buena marcha.
Ya todo para ellos era empresa, y es así como el cine surge en un ambiente estable, y sobre todo en un país que quiere dar a conocer todo de lo que son capaces, su grandeza.
Es por esto que Griffith tuvo una gran aceptación en el público norteamericano, obviamente blanco, porque realzaba su raza, y sobre todo porque The Birth Of A Nation elevaba el sentido de las producciones.
Sin embargo, no se puede intentar separar The Birth Of A Nation como una obra de arte, con la perspectiva histórica de la película.
Tenga en cuenta, The Birth Of A Nation no fue sólo un retrato de la historia, fue también una “parte” de la historia.
The Birth Of A Nation sirvió para defender el Klan, la segregación racial y linchamientos, en un momento cuando eran cuestiones políticas reales.
No es casualidad que el mayor período de linchamientos y Las Leyes Jim Crow llegaran poco después de The Birth Of A Nation.
En resumen, The Birth Of A Nation había oprimido pueblo.
Charles Robert Richet dijo una vez:
“Hace 30.000 años que existen negros en África, y en el transcurso de todo este tiempo, no han podido llegar a nada que les pusiese por encima de los monos.
Cuando menos, nosotros los blancos, poseemos algunos monumentos, bosquejos de ciencia y de arte, tratados de geometría, analítica y moral, diccionarios, dramas, sinfonías y observatorios de astronomía.
Los negros no tienen nada parecido, aun viviendo entre los blancos.
Continúan haciendo vida vegetativa, sin producir más que ácido carbónico y urea.
Las tortugas, ardillas y monos, no consentirían jamás en agujerearse las narices con enormes agujas de madera.
Los hombres negros viven en rebaños, pero han agregado al estado natural, costumbres a veces crueles, a veces ridículas, casi siempre ambas cosas a la vez, mucho menos excusables puesto que su cerebro es un poco más complicado que el de los monos, y es capaz, cuando menos en apariencia, de algunos razonamientos rudimentarios”
Éste fue el hombre que acuñó la palabra “anafilaxia” y que ganó el premio Nobel de Medicina en 1913.
Al mismísimo Cervantes se le atribuye la frase:
“El racismo es como los negros, no debería existir”
Que dirían éstos si supieran que en el año 2010, habría un presidente americano negro, o que habrá pensado Griffith al ver los horrores que produjo la Segunda Guerra Mundial, influida tal vez ínfimamente con obras como The Birth Of A Nation, y que mató a tanta gente a nombre de una “raza aria”
Lo más triste, o lo más impresionante, es que a pesar de que hayan pasado casi 100 años, y después de tantas guerras... no hemos cambiado.
Se sigue aludiendo a los mismos cánones para masacrar a tu prójimo.

“Dare we dream of a golden day when the bestial War shall rule no more.
But instead, the gentle Prince in the Hall of Brotherly Love in the City of Peace.
Liberty and union, one and inseparable, now and forever!”



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