We Stand Alone Together: The Men Of Easy Company / Band Of Brothers

“There Was A Time When The World Asked Ordinary Men To Do Extraordinary Things”

Desde finales de La Segunda Guerra Mundial, los Estados Unidos ostentan la supremacía militar en el mundo.
Solemos pensar, que esta hegemonía se basa exclusivamente en su fuerza económica y tecnológica, desdeñando la capacidad de estudio y análisis que han demostrado en numerosas ocasiones, su inteligencia práctica, y la aplicación de los nuevos conocimientos en neuropsicología, con el objeto de reforzar el espíritu militar.
Al final, la guerra no las libran la batería bélica, sino los soldados.
El éxito final en la batalla, depende también de esos circuitos cerebrales que codifican el valor, la resistencia, el espíritu de lucha, la alta moral, el trabajo de equipo, la fe en la victoria, y también el sobreponerse al pánico, superar el horror de los estragos, el ser capaz de matar a un semejante, y tantas otras cosas.
La Compañía Easy del 2º Batallón, fue La 5ª Compañía del 506º Regimiento de Infantería de Paracaidistas de La 101ª División Aerotransportada del Ejército de los Estados Unidos durante La Segunda Guerra Mundial, en el frente europeo.
La 101ª División Aerotransportada, también conocida con el sobrenombre de “Screaming Eagles”, es en la actualidad, una división de asalto aéreo del Ejército de los Estados Unidos, que se creó en 1942, como una división paracaidista, pero durante La Guerra de Vietnam, se reconvirtió en una unidad aeromóvil, para posteriormente, pasar a ser una división de asalto aéreo.
La 101ª División, mantiene el identificador “Airborne” o “Aerotransportada”, aunque no realiza operaciones paracaidistas a nivel de división.
La división, tiene como base Fort Campbell, en el estado de Kentucky, y ha servido recientemente en Irak y Afganistán.
La 101ª División Aerotransportada, es actualmente una unidad operativa de intervención en cualquier conflicto o misión que tengan los EEUU.
Como dato, los regimientos en el ejército estadounidense, tradicionalmente asignan a sus compañías, designaciones alfabéticas, por ejemplo:
La 5ª Compañía, es la E).
Durante La Segunda Guerra Mundial, se pronunciaba “Compañía Easy” de acuerdo al alfabeto fonético conjunto Ejército/Armada.
Esto difiere en las convenciones modernas, que usan el alfabeto fonético de La OTAN, ya que actualmente, La Compañía E, sería llamada “Compañía Echo”
Al final de La Segunda Guerra Mundial y entre otras acciones, a esta Compañía se les atribuye, al igual que a otras unidades, la toma del Nido del Águila, en Berchtesgaden, Baviera; refugio y lugar de retiro de Hitler.
Su comandante en jefe fue Maxwell Taylor, Mayor General de La 101ª División Aerotransportada; que también contó con líderes de extraordinaria valía, como fueron El General Anthony McAuliffe, El Teniente Coronel Robert G. Cole, El Mayor Richard Winters, o El Teniente Ronald Speirs, entre otros muchos oficiales, y sobre todo, suboficiales, como El Sargento y posteriormente ascendido a Teniente por méritos de guerra, Clifford Carwood “Lip” Lipton.
Pero se recuerda a La Compañía Easy, porque participó en los lanzamientos sobre Normandía durante La Operación Overlord, mezclándose con miembros de La 82ª División Aerotransportada, donde sufrieron menos bajas de lo que esperaba el alto mando.
Tras Normandía, fueron devueltos a su campo de entrenamiento en Inglaterra, para ser lanzados como apoyo del Ejército Británico en La Operación Market Garden, con el objetivo de apoderarse de diversos puentes en la zona de Eindhoven, para allanar el paso de los blindados británicos.
En el otoño del mismo año, participaron en La Batalla de Las Ardenas, para ser trasladados en apoyo de las fuerzas estadounidenses en Bastogne.
De allí siguieron hasta el paso del Rin, liberando campos de exterminio, y llegando hasta El Nido del Águila de Hitler.
Tras pasar un tiempo en Austria, como ejército de ocupación, La Compañía Easy volvió a Estados Unidos en 1946.
El mayor Richard Winters, describió la estructura organizacional de La Compañía Easy de esta manera:
“La Compañía disponía de 3 secciones de fusileros, y una sección de mando.
Cada sección constaba de 3 pelotones de 12 hombres, y un equipo de 6 hombres encargados de un mortero de 60mm.
La Compañía, también tenía una ametralladora por cada pelotón”
Y constaba de:
El Alto Mando por:
Robert Sink, Teniente Coronel (506° Regimiento CO), Robert Strayer, Teniente Coronel (2º oficial Batallón CO), Richard Winters, Mayor (2° Batallón CO), Clarence Hester, Mayor (506 PIR S-3), y Salve Matheson, Capitán (506 PIR S-4)
Los Oficiales al Mando de La Compañía/por orden de jerarquía:
Herbert Sobel, Capitán (Primer Oficial Comandante), Thomas Meehan III, Teniente (Segundo OC), Richard Winters, Mayor (tercer OC), Fred Heyliger, Teniente (cuarto OC), Norman Dike, Teniente (quinto OC), y Ronald Speirs, Teniente Coronel (final OC)
Otros Oficiales:
Lewis Nixon, Capitán (Oficial de Inteligencia), y Los Tenientes:
C. Carwood Lipton, Lynn “Buck” Compton, Jack Foley, Harry Welsh, Henry Jones, Thomas Peacock, y Edward Shames.
Otros Miembros, en orden de rango, si el rango es el mismo, se ordenan alfabéticamente.
Sargentos:
William “Wild Bill” Guarnere, John Martin (soldado), Darrel “Shifty” Powers, Floyd “Tab” Talbert, Joseph Toye, Donald Malarkey (técnico), George Luz, Warren “Skip” Muck, Frank Perconte, Denver “Bull” Randleman, Leo Boyle, Gordon Carson, Burton “Pat” Christenson, Charles “Chuck” Grant, Forrest Guth, Robert Rader, Myron “Mike” Ranney, James “Moe” Alley, Amos “Buck” Taylor, Paul Rogers y Roderick Strohl.
Los Cabos:
William Dukeman, Walter “Smokey” Gordon, Donald Hoobler, Joe Liebgott, Earl “One Lung” McClung, Alex Penkala y Eugene Roe.
Los Soldados:
Albert Blithe, Antonio “Tony” García, Lester “Leo” Hashey, Edward “Babe” Heffron, David Kenyon Webster y Robert “Popeye” Wynn.
El entrenamiento de La Compañía, no fue fácil, en parte por el duro entrenamiento que recibían los paracaidistas y, por otro lado, por El Capitán Herbert Sobel. El Capitán Sobel, fue el primer comandante de la compañía, y éste acuñó la frase con la que se conocía el ejercicio:
“3 millas subiendo, 3 millas bajando”
Sobel era conocido, por ser un hombre extremadamente estricto.
Bajo su estricta comandancia, La Compañía Easy se convirtió en una de las mejor entrenadas de todo el batallón; porque quería que su compañía fuera perfecta, llegando a requisar permisos de fin de semana, por solo ver un defecto en el soldado, como llevar sucia la bayoneta, o tener una pequeña arruga en el pantalón.
Uno de los ejercicios de entrenamiento preferidos del Capitán Herbert Sobel, era subir a la cima del Currahee, cuyo nombre deriva de una palabra Cherokee que significa “estar solos”; que realizaban casi todos los días, muchas veces puestos al límite por él, pero debido a su voluntad, La Compañía Easy conseguía superar cada una de las pruebas a las que era sometida.
También, como parte fundamental de su entrenamiento, a la compañía se le hacía marchar en formación con todo su equipo; la formación constaba de 3 a 4 columnas de hombres.
Estas marchas eran para llevar al límite a los hombres, y para enseñarles a trabajar en equipo.
Tras finalizar el entrenamiento en el Camp Toccoa, y haber recibido toda la compañía, sus insignias de paracaidistas, se trasladaron a Camp Mackall, en Carolina del Norte, el 23 de junio de 1943, donde comenzaron su entrenamiento en tácticas militares, y simulaciones de combate.
Allí, El Capitán Herbert Sobel resultó nulo en la interpretación de mapas, y presentó un gran nerviosismo en combate, lo que lo llevó a perder muchos puntos a los ojos de su compañía.
En su estancia en Aldbourne, ocurrió un pequeño motín de algunos suboficiales, debido a que no querían que una persona como El Capitán Sobel los mandara en combate, ya que sería una muerte segura.
El Coronel Robert Sink, degradó a todos los suboficiales, pero tomando en cuenta la decisión de éstos, decidió trasladar a Sobel a los Estados Unidos, dejando el mando de la compañía, en manos del Teniente Thomas Meehan.
Tras Aldbourne, se marcharon a Upottery para su lanzamiento en Normandía.
La Operación Overlord, es la más conocida invasión de Las Fuerzas Aliadas durante La Segunda Guerra Mundial.
La misión de La Compañía Easy, era desplegarse desde una base aérea en el sur de Inglaterra, y lanzarse sobre Normandía.
Desde ahí, tendrían que localizar y destruir una posición defensiva alemana, que iba a ser un obstáculo para el desembarco de las tropas de infantería que empezarían a llegar a las primeras horas de la mañana.
Los paracaidistas, fueron lanzados en la madrugada del 6 de junio de 1944, para que pudieran pasar desapercibidos por la mayoría de las fuerzas alemanas, y mantener a los aviones seguros de la artillería antiaérea enemiga.
Una vez en tierra, a La Compañía se le asignó la tarea de neutralizar una batería de cañones, emplazada en una granja solariega de Brécourt, que estaba bombardeando la Playa de Utah.
Esta acción, se conoce como “El Asalto a Brécourt Manor” y se convertiría en una de las más famosas batallas de las muchas que se libraron “El Día D”
Sin embargo, el avión C-47 que llevaba al líder de la Easy, Tte. Meehan, y al alto mando de la compañía de paracaidistas, fue derribado por fuego antiaéreo alemán, quemando y matando a todos a bordo.
Sin que sus compañeros supieran el destino de su Oficial Comandante Meehan, Richard Winters se convirtió de facto, en El Comandante de La Compañía Easy, quien los lideró durante toda la batalla de Normandía, y en El Asalto a Brécourt Manor.
De hecho, varios efectivos de La Compañía Easy fueron condecorados, incluido El Tte. Winters, que recibió, y fue recomendado para La Cruz por Servicio Distinguido, el segundo premio más alto de las fuerzas estadounidenses por valor en combate.
Del 10 al 14 de junio, La Compañía Easy participa en La Batalla de Carentan.
Poco después, El Regimiento 506° fue retirado de Francia, y regresó a Aldbourne en Inglaterra para reorganización.
Durante La Operación Market Garden, a La Compañía Easy se le asignó la misión de asistir a las fuerzas británicas para liberar Eindhoven, ocupando posiciones defensivas a lo largo de los caminos, para que así, los blindados británicos entraran en la ciudad, y siguieran hasta Arnhem.
Esta acción, permitiría cruzar El Rin, y penetrar en suelo alemán.
La batalla por el control de Arnhem, se libró a mediados de septiembre de 1944.
Sin embargo, terminó con una victoria alemana, y la rendición de tropas británicas…
La causa inmediata de la derrota Aliada, fue la gran presencia de grupos blindados SS, en las afueras de Arnhem.
Después de eso, los alemanes bombardearon Eindhoven.
En esos momentos, El Teniente Frederick Heyliger, estaba al mando de La Compañía Easy; y dirigió La Operación Pegaso, el 23 de octubre, y supervisó el rescate y evacuación de 138 hombres de la parte de La 1ª División Aerotransportada británica, que todavía estaban varados detrás de las líneas alemanas, cruzando El Rin, después de La Operación Market Garden.
Después del exitoso rescate, Heyliger recibió un disparo accidental de un guardia de La Easy, en 31 de octubre de 1944.
Durante los meses de diciembre de 1944 y enero de 1945, La Compañía Easy, y el resto de La 101ª División Aerotransportada, pelearon en Bélgica, en La Batalla de Las Ardenas.
Al mando estaba El Tte. Norman Dike.
Su misión consistía, en defender un importante cruce de caminos en el pueblo de Bastogne, que lo hacía ideal para el avance de las divisiones blindadas.
La división fue rodeada por los alemanes, y bombardeada intensamente por la artillería.
A pesar de estar peor equipada, y sin contar con apoyo aéreo debido a que el mal tiempo impedía el reabastecimiento por avión, la división resistió.
El 9 de enero de 1945, El Segundo Batallón llevó a cabo un ataque definitivo contra el pueblo de Foy, y en el transcurso del mismo, El Capitán Winters relevó al Tte. Norman Dike del mando de La Compañía Easy, por su pobre desempeño durante el combate.
Este fue reemplazado por El Tte. Ronald Speirs, que hasta ese momento comandaba La Compañía Dog.
Speirs, quedaría como Comandante de La Easy hasta el final de la guerra.
Después, El Tercer Ejército del General George Patton, rompió el cerco, y los alemanes retrocedieron.
La Compañía sufrió muchísimas bajas durante La Batalla de Las Ardenas, siendo trasladados luego a Haguenau en Francia.
Hasta el día de hoy, ningún soldado de La 101ª ha estado de acuerdo en que la división necesitaba ser “rescatada”, como sentenció Patton...
El 27 de abril, liberaron un campo de concentración cercano a la ciudad de Landsberg am Lech en Baviera; y mientras se acercaba el final de la guerra, La Compañía y el resto del 506º, fueron asignados a ocupar la localidad de Berchtesgaden, en Alemania, que se llevó a cabo el 5 de mayo.
Ésta era una meta para varios Generales aliados, ya que era allí donde se encontraba el famoso Nido del Águila, una inmensa casa vacacional que utilizaba Hitler, y en donde encontraron el tesoro personal de Hermann Göring, obras de arte robadas de todos los países de Europa ocupados por los alemanes.
En este lugar, La Compañía Easy celebró “El Día de La Victoria en Europa”, el 8 de mayo de 1945.
Posteriormente, se trasladaron a Zell am See, Salzburgo, Austria, en donde se rindieron 25 mil soldados alemanes; y en los siguientes días, comenzaron a entrenarse para ir a La Guerra del Pacífico, ya que la división entera, tenía planes de ser movilizada a este teatro de operaciones.
Sin embargo, con la rendición de Japón el 14 de agosto, y el fin de la guerra, esta acción no fue necesaria.
El 30 de noviembre de 1945, La 101ª División Aerotransportada, queda desactivada del servicio activo en Auxerre, Francia; y La Compañía Easy deja de existir.
“Band Of Brothers” fue el lema que se atribuyeron los miembros sobrevivientes de La Compañía Easy, del Segundo Batallón del 506° Regimiento de La 101° División de Paracaidistas del Ejército de EEUU, durante La Segunda Guerra Mundial.
Durante todo el tiempo que estuvieron tanto en Alemania como en Austria, nunca cumplieron a cabalidad con “no confraternizar con el enemigo”, ya que todos estaban cansados de la guerra, y descubrieron que los alemanes no eran los malos sino los Nazis.
Incluso Winters admiró muchísimo al soldado alemán, tanto por su valor en combate, como por su disciplina.
En una oportunidad, recibió la rendición de toda una división alemana que había cruzado Los Alpes desde Italia; esta unidad, jamás había sido derrotada por cuanto se había retirado desde Sicilia en 1943, en una forma extraordinaria, causando grandes bajas a Los Aliados, y solo se rindió, cuando le fue ordenado por sus Mandos.
El General alemán al mando, le solicitó decirles unas palabras de despedida a sus hombres, lo que Winters aceptó, y fue lo siguiente:
“Soldados, ha sido una guerra larga, dura y difícil.
Han sufrido y combatido con valor y honor por su país; han sobrevivido a las batallas y las penurias de las trincheras, y han tenido la camaradería que solo se vive en combate.
Me siento orgulloso de haberlo compartido con ustedes.
Se merecen vidas largas, felices y en paz...”
Este discurso caló hondo en los hombres de La Compañía Easy; que de los 140 hombres que originalmente la formaron en Camp Toccoa, Georgia; 366 hombres se enumeran como pertenecientes a la Easy Company para el final de la guerra, debido a las transferencias y reemplazos; solo 49 hombres de la Easy, murieron en acción; y casi el 90% de La Compañía, fue herida en combate durante la guerra, incluyendo a Richard Winters, quien fue ascendido al grado de Mayor en marzo de 1945; pero los demás, volvieron a casa.
“La Banda de Hermanos”, vivirá para contarlo, para explicar que no hay una buena guerra, ni una mala paz; y se han reunido año tras año, desde que fue disuelta La Compañía en noviembre de 1945, hasta el día de hoy, en que van quedando vivos pocos veteranos.
Y lo hicieron, ya que fue la única forma de compartir sus experiencias de guerra que sólo ellos comprendían, y poder mantenerse medianamente “normales” a los imborrables recuerdos de la experiencia sufrida dentro de una sociedad que no había vivido esa guerra, pero que ellos fueron a enfrentarla y vencerla.
Sus experiencias, son el tema de la miniserie de HBO “Band Of Brothers”, que a su vez, está basada en el libro “Band Of Brothers, E Company, 506th Regiment, 101st Airborne: From Normandy to Hitler's Eagle's Nest” (1992) del historiador Stephen Ambrose.
Stephen Edward Ambrose, era un historiador estadounidense, biógrafo de los presidentes Dwight D. Eisenhower y Richard Nixon; considerado como uno de los mayores especialistas en La Segunda Guerra Mundial, y es el autor de una extensa obra ensayística; siendo fundador y director del National D-Day Museum, instituido en memoria del desembarco de Normandía.
En calidad de asesor técnico-militar, Ambrose participó en el guión de diversas películas, como la oscarizada producción de Steven Spielberg, “Saving Private Ryan” (1998) o la adaptación a la televisión de su obra, “Band Of Brothers”
“Todos los chicos de EEUU, necesitan entender lo que estos hombres sufrieron en La Segunda Guerra Mundial”, dijo el escritor, que murió en 2002, a la edad de 66 años, debido a un cáncer de pulmón.
Para el año 2009, 20 de los últimos sobrevivientes de Easy Company, relataron sus historias en el proyecto del libro de historia oral, “We Who Are Alive and Remain: Untold Stories From The Band Of Brothers”
La historia de La Compañía Easy, es considerada con el tiempo, como una de las más valientes y eficientes de La Segunda Guerra Mundial.
“Men, it's been a long war, it's been a tough war.
You've fought bravely, proudly for your country.
You're a special group.
You've found in one another a bond, that exists only in combat, among brothers”
We Stand Alone Together: The Men Of Easy Company/Band Of Brothers es un documental del año 2001, dirigido por Mark Cowen.
Protagonizado por Richard D. Winters, Carwood Lipton, Lynn “Buck” Compton, William Guarnere, Edward “Babe” Heffron, Robert “Popeye” Wynn, Denver “Bull” Randleman, Roderick Bain, Donald Malarkey, Patrick O'Keefe, Henry C. Zimmerman, Antonio García de Pedro, Bill Maynard, Darrel “Shifty” Powers, John Martin, Don King, entre otros.
El guión es de William Richter, basado en el libro y en la miniserie de HBO, “Band Of Brothers”
Durante un período de 2 años, Mark Cowen y su equipo, viajaron a 40 ciudades de EEUU y Europa, para entrevistar a los veteranos de La Compañía Easy.
Las historias, contadas por los veteranos sobre ellos mismos, crean una historia de La Segunda Guerra Mundial desde el punto de vista de esta heroica compañía.
Este documental, se hizo famoso como el episodio extra, Nº 11, en la edición de colección de la miniserie “Band Of Brothers”
La mayoría de las imágenes, son tomadas con comentarios de los miembros supervivientes de la Easy Company, ahora viejos, pero todavía llevando recuerdos que parecen tan frescos para ellos, como lo hacen para el espectador.
Algunos de los hombres llegan casi a ahogarse entre lágrimas, pero nadie se descompone delante de la cámara.
Y entrevista a cada uno de los auténticos miembros de La Compañía Easy, haciendo un recorrido por todas sus historias, desde el punto de vista de cada uno de los sucesos vividos por la compañía, a lo largo de la guerra; que fue inmortalizada en el libro “Band Of Brothers, E Company, 506th Regiment, 101st Airborne: From Normandy to Hitler's Eagle's Nest” (1992) de Stephen Ambrose, con la cual se realizó la exitosa miniserie del mismo nombre por HBO.
Aunque hubo otras Compañías E, en el libro y en la miniserie, esta fue la más famosa y reconocida.
Y se trata de los hombres que ves en la miniserie, contando sus historias al principio de cada episodio de “Band Of Brothers”
Aquí, en lugar de los breves fragmentos habituales de la miniserie, todos los hombres llegan a contar sus historias sobre su participación en El 506º Regimiento de Infantería de Paracaidismo, La 101ª División Aerotransportada.
Además, hay un montón de fotos, así como imágenes de video de los hombres que tienen su reunión al final.
Con todo, We Stand Alone Together: The Men Of Easy Company/Band Of Brothers es una pieza muy inspiradora, que simplemente permite a los hombres, recordar y discutir sus experiencias durante la guerra.
En muchos sentidos, es como una versión condensada de lo que ves en la miniserie, y por eso se recomienda ver primero toda la miniserie “Band Of Brothers”, y luego ver el documental con los participantes reales; por lo que vale la pena ver, al estar excepcionalmente bien hecha.
En definitiva, We Stand Alone Together: The Men Of Easy Company/Band Of Brothers capta la esencia de un cuentacuentos, como un muchacho joven, escuchando en la rodilla de su abuelo, mientras que él relata historias de la guerra.
Si el documental consistía en nada más que mostrar a los hombres, recordando su experiencia, habría sido genial; pero la superposición de los cuentos de los hombres, es notable destacable como material de archivo de los acontecimientos que describen, junto con algunas diapositivas necesarias, que proporcionan mayor y mejor información pertinente.
Añadir esto, a haber visto los acontecimientos descritos en “Band Of Brothers”, uno tiene un relato más vívido de La Segunda Guerra Mundial, que cualquier cosa que la imaginación de uno haya podido inventar.
Ver a los ex soldados decir sus historias, ofrece una apreciación más completa de lo que han sufrido.
Tan fenomenal como “Band Of Brothers” es, escuchar las palabras directamente de los hombres que hicieron los eventos más personales, porque usted sabe que han sobrevivido tanto la guerra, como a la vida misma posteriormente.
Quizás, lo más esclarecedor de todo, fue aprender del respeto que los soldados estadounidenses tenían por los alemanes.
Ellos comprendieron que los alemanes también eran humanos, que en circunstancias drásticamente diferentes, pudieron hasta ser buenos amigos.
El documental, We Stand Alone Together: The Men Of Easy Company/Band Of Brothers, enfatiza un slogan de la miniseries:
“Eran hombres corrientes, haciendo cosas extraordinarias”
Escucharlos explicar cómo simplemente regresaron a la vida “normal”, después de la guerra, es casi impresionante.
Así, el soldado moderno sigue siendo humano, pero mucho más entrenado y perfeccionado, a menudo un soldado profesional, que nos lleva a pensar que son casi sobrehumanos; pero la mayoría de los soldados de La Segunda Guerra Mundial, eran personas comunes, lo que hace que sus logros nos hagan aún sacudir nuestra cabeza.
We Stand Alone Together: The Men Of Easy Company/Band Of Brothers fue hecho como un epílogo para la mini-serie, sin embargo, este trabajo sublime, también funciona bien como un documental independiente; y se puede considerar, según mi punto de vista, en una pieza histórica, que narra los acontecimientos más importantes vividos por la Easy Company, durante La Segunda Guerra Mundial.
“We're paratroopers, Lieutenant.
We're supposed to be surrounded”
La guerra, se ha representado de muchas maneras a lo largo de la historia, creando un imaginario único, que sólo se entiende dentro de un marco interpretativo que contextualice los hechos, los valores y las emociones, algo que les dé un sentido colectivo, y los justifique, los justifique hasta la victoria.
La guerra, se ha nutrido de los medios de comunicación, en la misma medida que los medios de comunicación, se han nutrido de la guerra en los años posteriores a los acontecimientos bélicos.
Quizás porque es algo extremo, salvaje, emotivo, porque la guerra es algo que no escapa a la sensibilidad, como todo lo que hace el hombre, es un acto sensible, un cóctel de emociones y miedos a punto de desparramarse y estallar; y a veces incomprensible, es un tema con una morbosidad macabra que plantea diversas cuestiones:
¿Cómo se vivió aquello?
¿Por qué se lucha?
¿Cómo se vive cuando tienes el recuerdo grabado en la piel, en una pierna mutilada?
Una de las cosas que marcaron a “Band Of Brothers”, aparte de otras miniseries basadas en la guerra, fue la inclusión de entrevistas con los miembros sobrevivientes de Easy Company.
Este programa de 80 minutos, nos permite conocer a los hombres reales detrás de la historia, y lo que hicieron con sus vidas después de la guerra.
Así que en un sentido muy real, este es el episodio 11° de la serie.
Las entrevistas, fueron muy conmovedoras.
Casi 60 años después, los hombres involucrados, siguen siendo profundamente afectados por sus experiencias.
We Stand Alone Together: The Men Of Easy Company/Band Of Brothers, es un emocionante paseo por los recuerdos de los veteranos de La Compañía Easy, que aún sobrevivían en el momento de grabación de la serie, el año 2001, haciendo un recorrido por todas sus historias, en cada uno de los sucesos vividos por la compañía a lo largo de la guerra; y van hablando los auténticos “brothers”, empezando por El Mayor Richard Winters (1918-2011), y pasando por Carwood Lipton , Donald Malarkey , El Sargento Darrel “Shifty” Powers, William “Wild Bill” Guarnere, El Tte. Lynn “Buck” Compton, El Sargento Denver “Bull” Randleman, Edward “Babe” Heffron, Robert “Popeye” Wynn, o Patrick O'Keefe.
El reportaje empieza con Lipton, y desde allí vamos viendo a aquellos integrantes de la Easy, muchos de ellos, compañeros desde Toccoa, y algunos procedentes de los reemplazos, hasta el momento en que la compañía queda suprimida en noviembre de 1945.
Van contando sus experiencias y razones del por qué se alistaron, las dificultades en su formación inicial por la dureza en Toccoa, los primeros saltos...
Tras esto, relatan cómo fue el traslado desde New York a Inglaterra, y las dudas sobre la posibilidad de regresar o no.
Más tarde, relatan su formación en los campos británicos, y la preparación específica para el salto.
De ahí, pasan por los episodios del Día D, de Brécourt Manor, o de Market Garden, y las dificultades encontradas.
Siempre hacen referencia, a las muchas bajas que se produjeron que en El Día D, y Normandía, que alcanzaron al 50% de La Compañía, la sustitución y desapego ante los reemplazos, la unión entre ellos, especialmente entre Guarnere y Martin, que se tatuaron en Escocia un paracaídas...
Hablan igualmente de las dificultades y privaciones vividas durante La Batalla de Las Ardenas, el bombardeo y la toma de Foy.
Aquí destaco la presencia de Guarnere, en el mismo lugar en el que perdió su pierna…
Por último, su entrada en Alemania, y cómo pasan de las dificultades de la defensa alemana, hasta la comodidad del Nido del Águila de Hitler.
La verdad, hacen un recorrido por todas sus historias desde el punto de vista de cada uno de los sucesos vividos por la compañía a lo largo de la guerra. Finalmente, vemos la unidad que han mantenido los veteranos, con sus reuniones anuales y la unidad, y la idea de que esta “Band Of Brothers”, pueden estar solos pero que, en el fondo, siguen unidos.
El documental We Stand Alone Together: The Men Of Easy Company/Band Of Brothers, también es magnífico técnicamente:
Destaca especialmente la estimulación.
Desechando las opciones modernas comunes de cortes rápidos, o de la música que agarra la atención, el documental prosigue deliberadamente con senderos tranquilos, consistentemente usando fundidos dentro y fuera de las imágenes, y entrevistas, por lo que el director Mark Cowen, permite tiempo para que el espectador absorba el poder de lo que se dice y se muestra.
Tras ver la miniserie, que ha intentado ser fiel a los testimonios relatados en el documental, se pueden dar cuenta de los pequeños detalles que aparecen en la miniserie, a los que no da mucha importancia en ese momento, y que son cosas grabadas a fuego en la mente de estos veteranos; además de otros momentos exclusivos como aquel impagable el dialogo entre nieta y abuelo:
“¿Abuelo, fuiste un héroe durante la guerra?”
“No... pero serví en una compañía de héroes”
Por otra parte, no puedo dejar de comentar los pequeños toques irónicos que todos los soldados adquieren a lo largo de la guerra, la camaradería, el sufrimiento tan bien reflejado en algunos capítulos de la miniserie…
We Stand Alone Together: The Men Of Easy Company/Band Of Brothers es un documental necesario, por lo difícil que es conseguir algunos de estos recuerdos en los archivos ahora mismo; además que muchos de los protagonistas, ahora envejecidos, no estarán con nosotros por mucho más tiempo.
Destacable también porque, a pesar de su bravuconería ocasional, el orgullo justificable y la solidaridad resultante, los hombres no son lo suficientemente tontos para hablar de la gloria, o defender el mundo del nazismo.
Su comentario muestra que, para cada uno de ellos, su parte en la guerra era un negocio altamente personal.
Estaban asustados, y vieron a sus compañeros morir junto a ellos…
We Stand Alone Together: The Men Of Easy Company/Band Of Brothers tuvo que hacerse para recordarnos que la guerra, incluso cuando se gana, es una creación malvada.
Porque el punto de vista, es el de los propios paracaidistas, que no obstante, algunos de los detalles más generales de sus compromisos se pierden.
Hablan de saltar en la noche sobre Normandía El Día D, y tener sus equipos, incluidas las armas, arrancados por el choque de la abertura de la rampa, y el viento...
No parecen darse cuenta de que, aunque ellos mismos habían sido entrenados a fondo, los pilotos de los C-47 no lo eran; esto quiere decir, por supuesto, que los únicos comentarios que escuchamos en el documental, provienen solo de aquellos cuyos aterrizajes tuvieron éxito, naturalmente.
Casi la mitad de los hombres, se perdieron durante el mes pasado en Normandía…
Llegaron a casa, para vivir una vida ordinaria, después de sufrir un estrés inimaginable, y extraordinario.
Si se le puede achacar algo a We Stand Alone Together: The Men Of Easy Company/Band Of Brothers es que resultó difícil asociar a los hombres entrevistados, con los personajes de la miniserie.
Podría haber sido agradable, si se habían incluido algunos clips breves, o se había mostrado una foto del actor...
Pero eso probablemente habría restado.
Por último, la banda sonora es de Jeff y Rob Pfeifer, muy justa y bastante sentimental en momentos puntuales.
“The only hope you have is to accept the fact that you're already dead”
En el estudio de las relaciones humanas, según Adler, y de cómo se forman las llamadas “comunidades intencionales”, resulta muy interesante fijar la atención en aquellas que se dan de manera “accidental”, y que no por eso dejan de ser comunidades auténticas.
No es el caso de la familia tradicional, que sería una comunidad no intencional, los hijos no eligen formar parte de esa comunidad; pero sí hay una voluntad de unión, y una cultura comunitaria detrás.
Hablaríamos más bien, de comunidades surgidas de la unión ante la adversidad.
“Band Of Brothers”, es una miniserie de televisión de 10 capítulos, ambientada en La Segunda Guerra Mundial, coproducida por Steven Spielberg y Tom Hanks.
Dirigida por Stephen Ambrose/creador, David Frankel, Tom Hanks, David Leland, Richard Loncraine, David Nutter, Phil Alden Robinson, Mikael Salomon, y Tony To.
Protagonizado por Damian Lewis, Ron Livingston, Rick Gomez, Scott Grimes, Donnie Wahlberg, Michael Cudlitz, James Madio, Dexter Fletcher, Neal McDonough, Matthew Settle, Ross McCall, Frank John Hughes, Peter McCabe, Nicholas Aaron, Craig Heaney, Kirk Acevedo, Eion Bailey, Shane Taylor, Dale Dye, Stephen Graham, David Schwimmer, Peter Youngblood Hills, Nolan Hemmings, Rick Warden, Robin Laing, Philip Barrantini, Phil McKee, Tom George, Michael Fassbender, Ben Caplan, George Calil, Doug Allen, Matthew Leitch, Marc Warren, Colin Hanks, Andrew Scott, Tom Hardy, Jimmy Fallon, Simon Pegg, entre muchos otros.
Tom Hanks, había leído el libro de Stephen Ambrose, “Band Of Brothers, E Company, 506th Regiment, 101st Airborne: From Normandy to Hitler's Eagle's Nest” (1992), la historia de La Compañía Easy, una destacada división de paracaidistas; y quedó obsesionado con el camino que habían recorrido, desde su entrenamiento en Estados Unidos, en 1942; hasta el fin de La Segunda Guerra Mundial, en 1945.
Y con Steven Spielberg, presentaron la idea a HBO, y luego de filmar “Saving Private Ryan” (1998), cuyas similitudes entre el film y la serie, son claras; en el Reino Unido, se quedaron para liderar el proyecto.
Es importante entender la forma en que se armó la serie, para reconocer ese proceso en el producto final.
Spielberg y Hanks, se cargaron al hombro la serie más costosa de la historia, con $125 millones invertidos, 2.000 extras contratados, 2.000 uniformes, con actores entrenando 16 horas por día, por más de 2 semanas, y 1.000 armas auténticas de La Segunda Guerra Mundial.
La miniserie de TV, de 10 episodios que se basa en el “best seller” de Stephen E. Ambrose, narra la historia de la Easy Company, un batallón de paracaidistas que luchó en Europa durante La Segunda Guerra Mundial, que tuvo lugar entre 1939 y 1945; e incluye entrevistas a los supervivientes, recuerdos de los periodistas, y cartas de los soldados.
Gran parte de la acción en la miniserie, se centra en lo experimentado por La Compañía Easy del 506º Regimiento de Infantería Paracaidista, de La 101ª División Aerotransportada del Ejército de los Estados Unidos, y en unos de sus primeros jefes de sección, los tenientes Herbert Sobel y Richard Winters, más tarde, Comandante Winters.
La serie, y por tanto la novela, está basada en las experiencias reales de estos soldados, a los que vemos al principio de cada capítulo prologando con sus impresiones el contenido del episodio.
La serie trata de ser lo más fiel posible a la historia real, aunque tiene sus inconsistencias, que de todas formas no quitan mérito alguno al resultado conseguido.
Los eventos retratados en la miniserie, tratan de ser fieles a la historia, y se basan en la investigación de Ambrose, y en entrevistas hechas a veteranos de La Easy Company.
Todos los personajes que aparecen en la miniserie, están basados en personajes reales de dicha compañía; algunos de ellos, aparecen en entrevistas pregrabadas como prólogo a cada episodio.
La miniserie de 705 minutos de duración, fue estrenada en 2001 por HBO, y posteriormente se programó en The History Channel.
El estreno tuvo lugar el 9 de septiembre de 2001, y atrajo a 10 millones de espectadores; pero 2 días más tarde, los ataques del 11 de septiembre ocurrieron, y HBO inmediatamente cesó su campaña de comercialización.
El segundo episodio, atrajo a 7,2 millones de espectadores; y el último episodio de la miniserie, recibió 5.1 millones de espectadores, siendo la audiencia más pequeña.
En ese momento, con un presupuesto de $104 millones, “Band Of Brothers” fue el drama televisivo más costoso jamás realizado; tras 3 años de producción.
El presupuesto total de la miniserie, fue de $120 millones, de esos, solo los costos de construcción de sets, fueron de $17 millones.
En 2003, “Band Of Brothers” se convirtió en la serie de TV en DVD, más vendida, generando $109 millones en ventas.
El título de la serie, “Band Of Brothers”, está inspirado en un párrafo pronunciado por Henry V de Inglaterra, antes de La Batalla de Agincourt, en la obra “Henry V”; Acto IV, Escena 3, de William Shakespeare.
“And Crispin Crispian shall ne'er go by, from this day to the ending of the world, but we in it shall be remember'd; we few, we happy few, we BAND OF BROTHERS; for he to-day that sheds his blood with me shall be my brother; be he ne'er so vile, this day shall gentle his condition:
And gentlemen in England now a-bed shall think themselves accursed they were not here, and hold their manhoods cheap whiles any speaks that fought with us upon Saint Crispin's day”
La versión corta de este discurso, aparece en la primera página del libro de Ambrose, y también es citada por Carwood Lipton, al final del último episodio de “Band Of Brothers”
Aunque históricamente, la expresión fue usada por El Almirante británico, Horatio Nelson, refiriéndose a su consejo de capitanes, a bordo de su buque insignia, a quienes animó más allá de lo común, a ser asertivos y tomar la iniciativa, diciendo:
“Tuve la dicha de comandar una BANDA DE HERMANOS”
Así, la miniserie de 10 partes, cuenta con 500 papeles con parlamentos.
Capítulo 1 – Currahee:
Dirección de Jefferson Jaime Salcedo, con un guión de Erik Jendresen y Tom Hanks.
Capítulo 2 – Day of Days.
Dirección de Richard Loncraine, con un guión de John Orloff.
Capítulo 3 – Carentan.
Dirección de Mikael Salomon, con un guión de E. Max Frye.
Capítulo 4 – Replacements.
Dirección de David Nutter, con un guión de Bruce C. McKenna & Graham Yost.
Capítulo 5 – Crossroads.
Dirección de Tom Hanks, con un guión de Erik Jendresen.
Capítulo 6 – Bastogne.
Dirección de David Leland, con un guión de Bruce C. McKenna.
Capítulo 7 – The Breaking Point.
Dirección de David Frankel, con un guión de Graham Yost.
Capítulo 8 – The Last Patrol.
Dirección de Tony To, con un guión de Erik Jendresen y Bruce C. McKenna.
Capítulo 9 – Why We Fight.
Dirección de David Frankel, con un guión de John Orloff.
Capítulo 10 – Points.
Dirección de Mikael Salomon, con un guión de Graham Yost.
Capítulo 11 – We Stand Alone Together.
Dirección de Mark Cowen, con un guión de William Richter.
Los 10 capítulos nos llevan desde El Día D hasta el final de La Segunda Guerra Mundial, de manos de los miembros de La Compañía Easy de paracaidistas, que recorrió Europa desde Francia, pasando por Austria, Holanda, Bélgica hasta Alemania.
A lo largo de los 10 episodios, la serie detalla las hazañas de la compañía durante la guerra.
Comenzando con el entrenamiento de saltos en El Campamento Toccoa en Georgia, y más tarde, sigue las vivencias de la unidad a través de los desembarcos aerotransportados estadounidenses en Normandía, La Operación Market Garden, El Cerco de Bastogne, La Batalla de Hagenau, el descubrimiento de los campos de concentración, o la llegada a Bergchesgarden, y la toma del Nido del Águila.
En el capítulo final, además, se habla de la rendición de Japón, y del incierto regreso.
La calidad de la serie, es inmejorable.
El realismo de las escenas de combate, la dureza vivida por los soldados, sus distintos recorridos vitales a lo largo de más de un año de guerra, las muertes constantes de sus miembros, los heridos, la relación con los habitantes de los lugares, por los que van pasando, el endurecimiento de algunos por la guerra frente a la destrucción física y mental de otros, que no consiguen sobrellevar tanto estrés, violencia y muerte... todo en la serie, aporta algo, y cada capítulo está pensado para contarnos un aspecto distinto de la guerra, mientras vamos siguiendo a los supervivientes de La Compañía Easy en su tortuoso camino hacia el final de la contienda.
La serie, se puede considerar como un producto de Steven Spielberg, tras la producción del film “Saving Private Ryan” (1998)
La miniserie, fue tan exitosa, que estuvo nominada a 19 Premios Emmy, ganando 6 de ellos, entre los cuales están Mini-Serie Excepcional, Casting brillante para la Mini-Serie, filme o especial; y Dirección Excepcional para una Mini-Serie, filme o especial dramático.
También ganó El Globo de Oro para Mejor Mini-Serie o Película hecha para la televisión; otro premio otorgado por el American Film Institute, y fue seleccionada para el Premio Peabody por “...recrear la historia y la memoria para crear un nuevo tributo a aquellos que combatieron por preservar la libertad”
La belleza obtenida en cada plano, la fotografía perfecta, los sonidos y la música ideal, se contraponen constantemente con la sangre, los gritos de dolor y las imágenes violentas de la guerra.
El nivel de realismo es enorme.
En los momentos de acción, en pleno tiroteo, se priorizó filmar con cámara en mano, para que el espectador sintiera la sensación de estar en el lugar.
Aunque por momentos se recurre a golpes bajos, y algún exceso nacionalista, quizás los peores vicios que tiene la serie, la verdadera intención fue quitar la ideología y las banderas políticas de la guerra.
Los soldados, en realidad, quieren ganar la guerra para volver lo antes posible a casa.
Matan para no morir.
Odian a los soldados nazis, porque escucharon o leyeron que son malos, pero luego entenderán que no son muy distintos a ellos…
Los diálogos son brillantes, y no recurren al heroísmo barato.
Muchos soldados tienen pánico, quedan desequilibrados psicológicamente, no pueden recuperarse de momentos que son reales, pero que parecen pesadillas.
El relato, no tiene intención de personalizar las historias.
Aunque cada capítulo está contado desde la perspectiva de un soldado, no se llega a conocer del todo a los personajes, salvo quizás a Richard Winters y Lewis Nixon.
El foco, está puesto en La Compañía Easy como grupo, y los acompaña en sus movimientos desde El Día D hasta el fin de la guerra, en Austria.
A medida que pasan los capítulos, sí se conoce cada vez más al prototipo de soldado:
Ignorante, joven, sin un futuro claro, de clase social media baja, y repleto de códigos:
Respetar y dejar la vida por quienes demostraron ser valientes, degradar a los cobardes, a los que recién llegaron a la guerra, y no sufrieron la muerte de un amigo, o el dolor de un balazo en una pierna.
El recurso de mostrar a los verdaderos soldados de La Compañía Easy antes de cada capítulo, ya viejos, vestidos con camisa, y recordando en detalle todo lo que habían vivido, es efectivo.
Es otro golpe de realismo, que tiene un resultado desgarrador.
Aquellos soldados que corren por su vida, y la de sus compañeros.
Esos que mueren de hambre y frío, que pierden una pierna o un brazo, son reales.
Las lágrimas de los veteranos de guerra, sirven de remedio, de consuelo amargo…
Todos admiten que de la guerra no se puede volver.
Algunos, porque liderar a un grupo de hombres, tirar una bomba, emboscar a un grupo de soldados enemigos, encontrar en el cuerpo una resistencia y fuerza que no se advertían, es lo mejor que pueden hacer.
Otros, porque no pueden borrar los recuerdos de sus amigos que quedaron enterrados en Europa, o que fueron devueltos a Estados Unidos.
Es una historia tan humana, que a veces llega a desesperar, porque muestra el estrés agobiante del apremio por sobrevivir, la angustia asfixiante del deshonor y la presión enfermiza de lo que se espera de ti en el ejército.
Pero sobretodo, muestra algo esencial en la serie:
La muerte fortuita que está por todas partes, la espontaneidad ridícula y macabra de la guerra.
Es inevitable que se creen vínculos rápidamente entre la audiencia y los protagonistas que están tan expuestos a los acontecimientos como ellos mismos.
Tan abandonados a su suerte, como los soldados de La Compañía 101 Aerotransportada, Easy.
Pero es cierto, hemos aprendido a consumir guerra, a darle un toque dramático, divertido, irónico, seco, razonablemente objetivo, incluso poético.
Es por todo esto, quizá sea esta fascinación enfermiza y excesiva, la culpable de que nos acostumbremos plácidamente al escenario, pero al mismo tiempo, sea la responsable de que no nos habituemos jamás a la obra macabra de teatro que se representa.
Los actores, aparte de haber sido seleccionados específicamente según sus parecidos físicos con los personajes reales para establecer una máxima coincidencia, y así, crear un alto nivel de credibilidad en relación a la historia real, han hecho un trabajo maravilloso con sus brillantes actuaciones.
A lo largo de la serie, el espectador se va dando cuenta de la fuerte amistad que se va creando entre los soldados, y de la mezcla de sentimientos tanto negativos como positivos, que surgieron a lo largo del camino de la Easy Company durante la guerra.
Como dato, una gran parte de los soldados estadounidenses retratados a lo largo de la serie, son interpretados por actores británicos.
Desglosando las principales partes de actuación por nacionalidad, veremos que hay 59 miembros del elenco de Reino Unido e Irlanda del Norte, 29 de Estados Unidos, 12 de Alemania, y 1 de Sudáfrica.
Inclusive, Peter Youngblood Hills es parte Cherokee, al igual que su carácter Shifty Powers era en la vida real.
“Band Of Brothers” significó el debut en pantalla de Tom Hardy.
Otro dato interesante, es que todos los 1.200 trajes civiles, eran ropa auténtica “vintage”
Si bien, Tom Hanks, Steven Spielberg y Stephen Ambrose, mostraron cada uno de los guiones a los soldados de la vida real de Easy Company para garantizar la autenticidad; tanto el libro de Ambrose como la serie, contienen varias incongruencias o errores desde el punto de vista histórico.
Muchas de ellas, fueron descubiertas por los veteranos de La 101ª División Aerotransportada, y comentadas en sitios como Trigger Time, que comenta episodio por episodio los errores y aciertos.
Pero fue por culpa de que muchos de los actores, a menudo hicieron ciertas escenas después de que los veteranos respectivos les comentaron que no estaban allí para el evento en cuestión.
La serie, se proyectó en Fort Campbell, KY, en agosto de 2001, a los miembros de La 101ª División Aerotransportada, apenas unas semanas antes de los ataques del 11 de septiembre.
Varios personajes de la película, y los actores que los retrataron, se reunieron con las Screaming Eagles que para entonces servían, entre ellas, Bill Guarnere, Carwood Lipton y Don Malarkey.
Bill Guarnere, incluso bailó el Jitterbug a pesar de tener sólo una pierna...
Y 18 meses después, La 101ª desplegó y participó en La Invasión de Irak…
En años siguientes, La 101ª fue reactivada, y tiene como base Fort Campbell, en el estado de Kentucky, y sirve actualmente en Irak y en Afganistán.
Una compañía que, al igual que otras muchas, hizo historia en una guerra que desgraciadamente, es la que más récords a batido en la historia de la humanidad.
Con 44 millones de soldados y civiles muertos en el bando aliado, y 11 millones en el eje.
Supongo que los 44 millones de aliados murieron para forjar un mejor el mundo, y para que reinara la paz... pero:
¿Consiguieron su objetivo, o acaso murieron en vano?
Unos años después de que terminara esta sangrienta guerra, los EEUU se lanzaron muy convencidos a Vietnam para librarla del comunismo “malvado”, y el resultado no fue precisamente la victoria…
Actualmente, tenemos que soportar ver en los telediarios, cómo aún siguen muriendo civiles y soldados en Medio Oriente y en otros países por culpa de ISIS.
La guerra en sí no ha terminado...
Esta nota va dedicada a mi gran amiga Marianella Méndez Centeno, mi “partner” en el cine, que tanto conocimiento tiene de la historia y de La Segunda Guerra Mundial.
Agradecido especialmente por haberme obsequiado el DVD de lujo de “Band Of Brothers”
Para ella, este reconocimiento.

“That night, I thanked God for seeing me through that day of days and prayed I would make it through D plus 1.
I also promised that if some way I could get home again, I would find a nice peaceful town and spend the rest of my life in peace”



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