Sucker Punch
“This is your journey, if you succeed, it will set you free”
El universo multimedia, sigue cambiando a velocidades sorprendentes, nuestra manera de relacionarnos con una realidad, cada vez menos tangible.
El desconcierto, es la reacción lógica, en una era proteica, que se resiste a definiciones rápidas, o categorizaciones enciclopédicas, inmersos como estamos, en un proceso de ajuste y reajuste permanentes.
Un proceso que afecta no sólo a nuestra relación con las imágenes, sino sobre todo, a la forma en que éstas interactúan entre sí.
Lo que muchos despreciaban por ser sociolectos sub culturales, como comics, series de televisión, telenovelas, videoclips, videojuegos, son ya, lenguajes con una gramática propia que, desde hace varios años, estimulan a pensadores, académicos, e investigadores de diversos campos.
Están pasando cosas, y ya no se trata de predicar con pancartas el advenimiento del “Apocalipsis Cultural”, ni de adherirse irresponsablemente, a toda novedad tecnológico-digital, sin plantearnos sus sentidos, sino de intentar aprehender las repercusiones, en nuestro entorno, y en nuestros imaginarios, de una época asentada sobre los conceptos de virtualidad, y mutabilidad.
¿Quién dictamina nuestras fantasías?
¿Quién crea nuestros monstruos?
¿Quién determina lo que es normal, y lo que no lo es?
¿Quién escribe las normas, y sobre esas normas, sitúa a los que están dentro, y los que están fuera de los cauces?
¿Quién define el significado de la palabra “Libertad”?
“If you don't stand for something, you'll fall for anything”
Sucker Punch es una película de fantasía, del año 2011, dirigida por Zack Snyder.
Protagonizada por Emily Browning, Vanessa Hudgens, Abbie Cornish, Jena Malone, Jamie Chung, Carla Gugino, Jon Hamm, Scott Glenn, Oscar Isaac, Danny Bristol, Vicky Lambert, Eli Snyder, Danielle Benton, Paula Giroday, Daniela Dib, Richard Cetrone, entre otros.
El guión es de Steve Shibuya y Zack Snyder.
El título “Sucker Punch” no se explica durante el metraje; pero es un término boxístico, que se traduce al castellano, como “golpe a traición”
En realidad, muchos de los seguidores de este director, habrán sentido que Sucker Punch es un verdadero puñetazo en la zona baja, luego de que pasaran meses viendo la estética que iba a tener el film.
La idea del director surgió cuando:
“Hace algún tiempo, había escrito un guión para mí mismo, y había una escena que me hizo pensar:
“¿Cómo puedo hacer una película, que pueda tener escenas de acción, que no estén limitadas por la realidad física, que limita a la gente normal, pero que a la vez, la historia tenga sentido para que no sea, y no quiero ser cruel, una estupidez como “Ultraviolet” (2006) o algo así…?
Es algo más loco de lo que haya hecho nunca.
Es una película, que nadie puede conseguir hacer con un final como este, y sobre este tema”, dijo.
El desarrollo, comenzó en 2007, bajo un guión escrito por Snyder y Shibuya, que se terminó en 5 meses.
Snyder dijo, que Sucker Punch es “una crítica al sexismo de la cultura “geek”, y a la conversión de las mujeres en meros objetos; así como a la religión, y las instituciones de salud” siendo la primera película de la idea original de Zack Snyder, ya que las películas anteriores, son basadas en “remakes”, y novelas gráficas.
En la mente de los personajes, dijo Snyder, “pueden hacer cualquier cosa” es una estilizada película de acción, con una especie de paisajes de la imaginación, y cosas de la misma naturaleza; y consideró durante un tiempo, el título de la película, hasta que finalmente eligió “Sucker Punch”, como una referencia a la cultura pop.
En las primeras entrevistas, Zack Snyder dijo que Sucker Punch tendría clasificación “R” de “restringido”, pero tiempo más tarde, dijo que intentaría hacerla “PG-13” con guía paterna estricta.
Para su lanzamiento, se vio obligado a cortar multitud de escenas, para satisfacer a la Motion Picture Association of America (MPAA), pero dijo que la versión en DVD/Blu-ray, las incorporarían.
Y añadió:
“La MPAA, ha hecho que edite las escenas, para que parezcan más “suaves”
Era la única manera de lograr una calificación “PG-13”
Así las cosas, Sucker Punch está ambientada en los años 50; donde Babydoll (Emily Browning), es internada por su padrastro, en una institución psiquiátrica, para que le practiquen una lobotomía.
Mientras espera, su imaginación crea una realidad alternativa, que podría salvarla de su dramática situación.
Sin limitaciones de tiempo y espacio, tiene la libertad para ir donde su mente la lleve, y sus increíbles aventuras, borran la línea entre lo real y lo imaginario.
Ha partir de ahí, la joven comienza a preparar su fuga, cuyo éxito depende del robo de 5 objetos; y decidida a luchar por su libertad, anima a otras 4 chicas:
La decidida Rocket (Jena Malone), la astuta Blondie (Vanessa Hudgens), la implacablemente leal, Amber (Jamie Chung); y la reacia Sweet Pea (Abbie Cornish); a unirse, e intentar escapar de su terrible destino, a manos de sus captores:
Blue Jones (Oscar Isaac), Madame Vera Gorski (Carla Gugino), y The High Roller/El Doctor (Jon Hamm)
Guiadas por Babydoll, las chicas entablan un combate fantástico contra todo, desde samuráis a serpientes, con un arsenal virtual a su disposición.
Juntas, deben decidir lo que están dispuestas a sacrificar para permanecer vivas; pero con la ayuda de “The Wise Man” (Scott Glenn), su increíble viaje, si lo consiguen, las liberará.
Snyder nos trasporta, a un mundo dentro de otro mundo, dónde cada escena respira pura locura, crea su propio “comic”, creando universos, dignos del Noveno Arte, con escenas que parecen salidas de videojuegos, regalando al espectador, un auténtico alarde visual.
La seducción de Sucker Punch, no viene por sus cielos surcados por dragones, por el atractivo salvaje de sus “lolitas” semidesnudas, o su reinvención “steampunk” de las batallas en trincheras de una Guerra Mundial, que también; el embrujo viene, ante la constatación de que la forma de los sueños, que se reinventan a cada momento, mora, y crece aquí, sin remisión.
Y nos muestra que la lucha de mucha gente cotidiana, no es menos épica que la de los grandes luchadores o los héroes de “comics” imaginarios, que los monstruos existen, y que nos los encontramos detrás de cada esquina, por las injusticias que han sido reveladas, por las que nunca verán la luz…
“Remember, don't ever write a check with your mouth you can't cash with your ass”
Zack Snyder, distorsiona la realidad, para confirmar su constante empeño en avanzar un paso más allá, visualmente, con cada propuesta; por lo que Sucker Punch maneja elementos que remiten a otros trabajos fílmicos que han tocado el tema de la locura, aunque por momentos, parece ser la “tarantiniana” saga de “Kill Bill”, la principal referencia y fuente de inspiración, mientras que no pocos harán comparaciones con otros filmes.
A todo esto, Snyder le agrega a un diseño retro futurista, la acción principal, que transcurre en los años 50, pero apela todo el tiempo, incluso desde la música, a un posmoderno anacronismo; y sigue la historia de una joven, a punto de ser lobotomizada, y su intento de escapar de un hospital psiquiátrico, junto con sus compañeras.
La historia, es contada por Sweet Pea; aunque la trama se centra en Babydoll, nos encontramos que al final, la historia es contada por la única sobreviviente, Sweet Pea; incluso al principio, se escucha que es esta la que habla, y como ingrediente dice que “los ángeles se pueden aparecer en forma de un anciano sabio, o una pequeña niña”, haciendo referencia a “The Wise Man” y a Babydoll, respectivamente.
Por su parte, Blondie, es la chica más antigua de las 5; y aparentemente es la que recuerda todo lo que ha sucedido en el lugar, incluso cuando Amber llegó al Lennox House.
En el fondo, Sucker Punch es la historia de cómo la mente, puede ser la única arma, el último recurso, cuando ya sabes que no queda nada.
Son metáforas y ensoñaciones, sobre como rebelarse en un mundo casi apocalíptico, en una mente perdida e inestable, cuyo único recurso es, jugárselo todo a una carta.
Es decir, inventa tu propia realidad, y vívela.
Sucker Punch, opera en 3 niveles:
El primero, es una realidad, luego una sub-realidad en la que la sala de psiquiatría, es un extraño burdel; y por último, un nivel formado por un mundo de ensueño, donde secuencias de acción fuera del tiempo y espacio tienen lugar.
Los mundos paralelos, están a 20 millones de años luz de distancia, según cuenta el director; y a pesar de un prodigioso prólogo, no juegan más papel, que el de muchos videojuegos:
Tienen partes de transición, en las que el jugador descansa, entre nivel y nivel, viendo cómo la acción avanza lo suficiente, antes de entrar en una nueva aventura.
Porque la historia de la chica encerrada en el psiquiátrico, que urde un juego de fantasía para escapar de allí, no es más que la excusa, para ofrecernos luchas imposibles, instaladas en contextos, no menos imposibles, pero también de una extrema belleza.
Resulta difícil, que a uno no le duelan las pupilas, de tanto dilatarse ante secuencias como, la loca guerra de trincheras, en un escenario apocalíptico, surcado por zepelines, bajo los restos arquitectónicos de una catedral, y con un ejército de zombis alemanes, aguardando en el campo enemigo…
Para ello, el director se apoya en su ya conocido estilo visual, y su paleta de colores, para transportarnos de un lado a otro de su mundo, y de la protagonista, hábilmente, utiliza su técnica cada día mejorada, para crear lo mejor de la trama:
Un magnífico prólogo, que nos introduce en la historia de Babydoll, no abandonando dicho estilo en ningún momento, lo que hace ya de por sí interesante, es el modo de narrar que nos impone, y más aún, cuando se confunden realidad y fantasía, momento en el cual, Snyder se suelta, y se deja llevar por el entusiasmo que hará las delicias de los seguidores del movimiento “steampunk”, y de todos aquellos a los que la coherencia les importe menos que el espectáculo, y sin objeción ninguna, se sumerjan en las fantasías de una chiquilla atormentada, cuya imaginación y subconsciente, más que rico en ideas, recrean épocas inexistentes, con momentos épicos, vividos por el grupo de amazonas que junto con la protagonista, y sus más que provocativas indumentarias, poblarán los sueños de muchos espectadores.
Rick Carter, es el diseñador de producción, mientras que los efectos visuales, fueron realizados por Animal Logic, con 75 especialistas, y la Moving Picture Company, que realizó más de 120 tomas.
Y es que Snyder quería diseñar una película, de manera que no hubiera límites de ningún tipo, pero dijo que al ser su primera película original, no basada en nada anterior, eso era lo más difícil, ya que quería una historia fresca, y no sólo un videojuego.
Su particular forma de usar la cámara, también ayuda mucho a mantener ese ritmo, sin llegar al nivel de mareo que produce Michael Bay; Snyder sabe perfectamente, cómo manejar la cámara en las escenas de acción, así como usar de la mejor forma posible, esos momentos de “slow motion”, para que consigan resultar espectaculares, y no cansen en ningún momento.
Las misiones, a modo de parodia a “Sailor Moon” son para conseguir 5 artículos que, según la visualización surrealista, se dan en 3 lugares diferentes: “Mision Freedom”:
Se da en un Templo Japonés, posiblemente entre los años 1337 a 1573, según la arquitectura del sitio.
“Mision Map”:
Se da en visión surrealista de La Primera Guerra Mundial, ya que el uniforme, como las armas, los coloca en esta, incluso el uso de Trincheras, también la tecnología como el “steam clock” que es de la década de los 70'.
“Mision Fire”, se da en un punto de la surrealista a modo de “Tierra Media”, cuando se pueden observar Dragones y Orcos.
Y “Mision Kitchen Knife”
Que es la única que parece darse en un el futuro, que incluso para el año 1950/60 que se presume está ambientada Sucker Punch, da un vistazo de este, muy creativo, sin embargo, la visión también parece darse en un “planeta”, que se cree, no es La Tierra.
Sobre la idealidad, Sucker Punch, claramente expresa, que la trama es contada por un paciente psiquiátrico, lo que Zack Snyder incorpora a la perfección, en cada aspecto de la misma, pues expresa las altas y bajas de una persona con un problema mental; por ejemplo:
Los diferentes niveles de surrealidad, que es la forma que las chicas “decoran” la realidad, al momento que se presume, según la trama, eran vendidas a los hombres.
La búsqueda de una salida, en la que cada chica busca la forma de salir de ese lugar, y cuando lo logra, regresa a la realidad; y la forma que sonaría, si fuese contada Sucker Punch como que es de “locos”
Curiosamente, antes de comenzar el “casting”, en marzo de 2009, Snyder reveló el reparto que consideraba como ideal.
Y decidió escoger un reparto femenino, diciendo que:
“Yo ya había elegido un reparto masculino para “300” (2007), así que estoy haciendo lo contrario”, contradiciendo la opinión de Warner Bros., de 2007.
Antes de comenzar el rodaje, el reparto tuvo que entrenar.
El entrenamiento duró 12 semanas.
El reparto femenino, tuvo que levantar peso muerto de hasta 100 kilogramos.
Damon Caro, el preparador de Snyder, fue contratado; y Abbie Cornish dijo, que antes del comienzo del rodaje, estuvieron entrenando 6 horas al día, 5 días a la semana, artes marciales, esgrima, y coreografía.
El ampuloso positivismo visual, que habita en la caótica, por atestada cabeza de Zack Snyder, le ha movido a diseñar un delicioso y atemporal embalaje erótico, y por qué no, machista, que se esfuerza por contener una absurda fábula de heroínas, bajo una morbosa estética “pin-up”, ya sea en su modalidad guerrera, en su versión colegial, o en los interludios cabareteros…
Pero si Snyder tenía la intención de hacer un film de acción, protagonizado por mujeres, y destinado a mujeres, creo que le ha salido el tiro por la culata, por cuanto Sucker Punch desprende, un tufillo machista, realmente vergonzoso, y en algunos casos, hasta repugnante; y ha sido criticado, por su representación de la mujer.
Varios críticos la describen como misógina, y otros expresaron su preocupación por el tratamiento de la violencia sexual:
“Niñas” buenas, ligeritas de ropa, que enseñan lo justo, y provocan lo máximo; apenas para sesiones masturbatorias.
Y es que Sucker Punch, engañosamente se posiciona como “empoderamiento femenino”, a pesar, claramente, de haber sido tramada como “carne de fantasía para los chicos de 13 años de edad”, y el hecho de que las chicas “están bajo la amenaza constante de ser violadas o asesinadas”, hace que sea altamente inapropiada para los espectadores jóvenes, y es un análisis, profundamente pesimista de la opresión femenina, ya que deja claro que, al igual que los hombres que organizan las danzas, son ellos quienes controlar los términos de las escenas de lucha.
Por lo que muchos ven a Sucker Punch, como una “batalla perdida”; pues usan todas las herramientas que están a su disposición, ya sea la sexualidad, o la fuerza física, el ingenio, o la capacidad de unirse para luchar contra un enemigo común:
La herramienta de la hermandad, y sobre cómo utilizarla, todavía no es suficiente para salvarse…
El problema es, que el resto del metraje tiene muchas carencias, como el desarrollo de los personajes, mencionándolas en escala de importancia:
Babydoll, es el único personaje en el que profundiza, obvio, siendo la protagonista; después los personajes de Sweet Pea y Rocket, desdibujados casi por completo, y eso que son 2 de las mejores interpretaciones que tiene, y ya rozando lo indignante, los personajes de Blondie y Amber, de las cuales apenas solo sabemos sus nombres, y lo mismo pasa con el resto.
Como errores, hacia el final, mientras las chicas esperan que abran las puertas, se puede ver, que el encargado de vigilancia, tiene puestos unos audífonos, lo cual es un anacronismo, considerando que Sucker Punch se desarrolla durante los años 50…
En lo que a lecturas se refiere, hay múltiples maneras de interpretar la historia:
Toda Sucker Punch, es sobre una chica que se somete a “MK ULTRA/Programación Monarca, un programa desarrollado por La CÍA para control mental.
Babydoll se retira, cada vez más en su mente, para desvincularse de los traumas que ella está experimentando.
El hospital, es lo que experimenta Babydoll durante la programación ALPHA/Control Mental; mientras que en el burdel, Babydoll está siendo sometida a la programación BETA/Esclava Sexual.
Durante las escenas acción, cumplen la programación DELTA/Asesinato…
Si Sucker Punch tiene lugar durante 1950/60, a pesar de los evidentes anacronismos, fue un período durante el cual, los experimentos reales “MK ULTRA” se sabe tuvieron lugar.
La protagonista principal, es una muchacha de 20 años de edad, conocida sólo como “Babydoll” o “Muñeca”
Su nombre sugiere control mental, como a las muñecas, que no controlan sus movimientos o ambientes.
Trasfondos de muñecas, y el camino del control mental, refleja la historia de muchos esclavos de la vida real de la Programación Monarca, léase también como mariposa, que también salen en algunas escenas:
Con un padre abusivo, que causó múltiples traumas a una edad temprana, por lo que creo, su predisposición a la disociación.
Su “propiedad”, se transfiere a una institución, donde la programación actual se lleva a cabo, bajo la supervisión de especialistas/los controladores.
La historia de Babydoll, es de hecho, la típica historia de la vida real de los esclavos, que a menudo, eran objeto de abuso, a una edad temprana.
Después de varios años de malos tratos, las despiadadas figuras parentales, que no tienen problema para entregar a sus niños a las autoridades MK ULTRA, son exonerados de los posibles cargos criminales que podrían enfrentar por años de abuso…
Así, Babydoll es llevada a la fuerza a la institución.
Varias instituciones de salud mental, eran realmente sitios utilizados por La CIA, para el control mental, al menos eso es lo que se cuenta...
La amenaza de abuso físico y sexual, es constante durante todo el metraje, y varias técnicas se utilizan para activar la disociación.
La música, es muy importante en la institución, y en el control mental actual, donde se utiliza como una herramienta de programación.
La mayoría de las canciones escuchadas, tienen letras sugerentes, que en el contexto del control de la mente, puede provocar la disociación.
El alter de Babydoll, tiene un pasado diferente...
En su caso, su abusivo padrastro, se convierte en un sacerdote...
Crítica a la iglesia pedófila, que en vez de guiar, abusa…
Utilizando la música, como una herramienta de programación, podemos creer que Vera Gorski, “doctora de la institución”, es “la instructora de baile” en la realidad alternativa; era la que les creaba esa ilusión, para “hacerles su vida allí, más llevadera”
Que la que escapa al final, era la única loca, o la única cuerda, y por eso es la que se libra.
Este nivel múltiple de la disociación, es un mecanismo de Babydoll como defensa a la realidad dura y fría:
El tercer nivel de la escena de acción, significa que ella está bailando en el segundo nivel del club, lo que significa que ella está siendo violada en el primer nivel de la institución para enfermos mentales, espero que esto no es demasiado confuso… y así sucede en los demás casos.
Por ello, la mayoría de aficionados de Sucker Punch, creen que es una película sobre “poder femenino”, “mujeres luchando de nuevo”, y otras palabras de moda que utilizan en estos días.
Mientras que algunos pueden percibir a Babydoll, como una mujer fuerte, que lucha contra la opresión de los hombres; otros podrían concluir, que Sucker Punch responde a las perversiones, convirtiéndolos en una fantasía...
El mismo doble discurso, puede ser atribuido a Sucker Punch, cuando se relaciona con el tema del control de la mente…
Mientras que el mensaje principal, parece ser de “luchar por la libertad”, una mirada más profunda, revela que podría estar diciendo lo contrario…
Al final, la batalla de Babydoll no fue para una rebelión, y libertad, sino por escape y disociación.
Su “guía”, no era un agente de liberación, sino una guía que tenía las llaves de su psique, guiándola en la fractura de su personalidad.
Allí llego lo mejor:
Esa ambientación, y efectos especiales espectaculares; una gran forma de mezclar la realidad con la imaginación, con una historia profunda bastante buena.
Como dato, Eli Snyder, hijo del director, aparece 2 veces, siendo el niño que ven.
Para ir finalizando, Sucker Punch está dedicada a Sam Mc Gowan, miembro del departamento de arte, que falleció en el 2009; y a Marsha, fotógrafa y madre del director, que falleció en el 2010.
Hay un final alternativo:
Con Babydoll y El Doctor que la lobotomiza.
Babydoll, solo decide aislarse, aceptando la lobotomía, ya que sabe que nunca será libre.
Lo curioso es que al final, cuando la violencia real en forma de lobotomía llega, Babydoll la transforma en sexo.
La apuesta en general, es arriesgada, para muchos, está vacía de contenido, para otros está llena de simbolismos ocultos, que le dan mucha complejidad a la narración.
La música, es una parte intrínseca de Sucker Punch:
“En la historia, la música es lo que las lanza a los mundos fantásticos”, explica Snyder.
Curiosamente, es en esas escenas oníricas, donde las chicas “bailan”, nunca las vemos… pues la representación no viene visualizada en acción de defensa ante lo que ellas viven en la cruda realidad musical, para ello, nótese las letras de las canciones.
La columna vertebral, es la música; por lo que se usan canciones que peguen con el ambiente; donde se escuchan las voces de los productores discográficos:
Tyler Bates y Marius De Vries.
“I'm gonna escape from here”
¿Realidad o Fantasía?
El Proyecto MK ULTRA, fue un programa de investigación ilegal, y secreto, de La Agencia Central de Inteligencia (CIA) de los Estados Unidos, en el que, mediante experimentación en seres humanos, se buscaba identificar y desarrollar drogas, y procedimientos para interrogar y torturar prisioneros, y debilitar su resistencia a la confesión.
Pero había aproximadamente, 150 proyectos de investigación en el programa, y aún no se conoce el propósito de todos ellos... ni si todos fueron exitosos.
El nombre del proyecto, es un criptónimo CIA, en que el dígrafo MK, representa a proyecto del Equipo de Servicios Técnicos de La CIA en los 1950s y los 1960s.
En el proyecto, se utilizaban muchas otras drogas, los sujetos de las pruebas, eran empleados de La CIA, miembros de los servicios militares, médicos, otros agentes del gobierno, indigentes, prostitutas, pacientes con enfermedades mentales, y miembros del público, muchas veces, sin que los involucrados supieran lo que se hacía con ellos, ni se solicitara su consentimiento...
El programa, salió a la luz públicamente, gracias a La Comisión Presidencial Rockefeller, en el año de 1975.
Con 44 universidades estadounidenses, 15 fundaciones de investigación o químicas, o compañías farmacéuticas y similares, incluyendo:
Sandoz, actualmente Novartis; y Eli Lilly & Co.; más hospitales o clínicas, además de los relacionados con las universidades; y tres cárceles, se sabe, han participado en MK ULTRA.
Así las cosas:
¿Quién honra a aquellos que amamos con la vida que vivimos?
¿Quién envía a los monstruos para que nos maten, y al mismo tiempo, canta que nunca vamos a morir?
¿Qué nos enseña lo que es real, y cómo se ríen de la mentira?
¿Quién decide porque vivimos, y por qué moriremos para defender?
¿Qué nos encadena?
¿Y quién tiene la llave que nos puede hacer libres?
Eres tú.
Tú tiene todas las armas que necesitas.
Es momento de luchar.
For those who fight for it, life has a flavour the sheltered will never know.
El universo multimedia, sigue cambiando a velocidades sorprendentes, nuestra manera de relacionarnos con una realidad, cada vez menos tangible.
El desconcierto, es la reacción lógica, en una era proteica, que se resiste a definiciones rápidas, o categorizaciones enciclopédicas, inmersos como estamos, en un proceso de ajuste y reajuste permanentes.
Un proceso que afecta no sólo a nuestra relación con las imágenes, sino sobre todo, a la forma en que éstas interactúan entre sí.
Lo que muchos despreciaban por ser sociolectos sub culturales, como comics, series de televisión, telenovelas, videoclips, videojuegos, son ya, lenguajes con una gramática propia que, desde hace varios años, estimulan a pensadores, académicos, e investigadores de diversos campos.
Están pasando cosas, y ya no se trata de predicar con pancartas el advenimiento del “Apocalipsis Cultural”, ni de adherirse irresponsablemente, a toda novedad tecnológico-digital, sin plantearnos sus sentidos, sino de intentar aprehender las repercusiones, en nuestro entorno, y en nuestros imaginarios, de una época asentada sobre los conceptos de virtualidad, y mutabilidad.
¿Quién dictamina nuestras fantasías?
¿Quién crea nuestros monstruos?
¿Quién determina lo que es normal, y lo que no lo es?
¿Quién escribe las normas, y sobre esas normas, sitúa a los que están dentro, y los que están fuera de los cauces?
¿Quién define el significado de la palabra “Libertad”?
“If you don't stand for something, you'll fall for anything”
Sucker Punch es una película de fantasía, del año 2011, dirigida por Zack Snyder.
Protagonizada por Emily Browning, Vanessa Hudgens, Abbie Cornish, Jena Malone, Jamie Chung, Carla Gugino, Jon Hamm, Scott Glenn, Oscar Isaac, Danny Bristol, Vicky Lambert, Eli Snyder, Danielle Benton, Paula Giroday, Daniela Dib, Richard Cetrone, entre otros.
El guión es de Steve Shibuya y Zack Snyder.
El título “Sucker Punch” no se explica durante el metraje; pero es un término boxístico, que se traduce al castellano, como “golpe a traición”
En realidad, muchos de los seguidores de este director, habrán sentido que Sucker Punch es un verdadero puñetazo en la zona baja, luego de que pasaran meses viendo la estética que iba a tener el film.
La idea del director surgió cuando:
“Hace algún tiempo, había escrito un guión para mí mismo, y había una escena que me hizo pensar:
“¿Cómo puedo hacer una película, que pueda tener escenas de acción, que no estén limitadas por la realidad física, que limita a la gente normal, pero que a la vez, la historia tenga sentido para que no sea, y no quiero ser cruel, una estupidez como “Ultraviolet” (2006) o algo así…?
Es algo más loco de lo que haya hecho nunca.
Es una película, que nadie puede conseguir hacer con un final como este, y sobre este tema”, dijo.
El desarrollo, comenzó en 2007, bajo un guión escrito por Snyder y Shibuya, que se terminó en 5 meses.
Snyder dijo, que Sucker Punch es “una crítica al sexismo de la cultura “geek”, y a la conversión de las mujeres en meros objetos; así como a la religión, y las instituciones de salud” siendo la primera película de la idea original de Zack Snyder, ya que las películas anteriores, son basadas en “remakes”, y novelas gráficas.
En la mente de los personajes, dijo Snyder, “pueden hacer cualquier cosa” es una estilizada película de acción, con una especie de paisajes de la imaginación, y cosas de la misma naturaleza; y consideró durante un tiempo, el título de la película, hasta que finalmente eligió “Sucker Punch”, como una referencia a la cultura pop.
En las primeras entrevistas, Zack Snyder dijo que Sucker Punch tendría clasificación “R” de “restringido”, pero tiempo más tarde, dijo que intentaría hacerla “PG-13” con guía paterna estricta.
Para su lanzamiento, se vio obligado a cortar multitud de escenas, para satisfacer a la Motion Picture Association of America (MPAA), pero dijo que la versión en DVD/Blu-ray, las incorporarían.
Y añadió:
“La MPAA, ha hecho que edite las escenas, para que parezcan más “suaves”
Era la única manera de lograr una calificación “PG-13”
Así las cosas, Sucker Punch está ambientada en los años 50; donde Babydoll (Emily Browning), es internada por su padrastro, en una institución psiquiátrica, para que le practiquen una lobotomía.
Mientras espera, su imaginación crea una realidad alternativa, que podría salvarla de su dramática situación.
Sin limitaciones de tiempo y espacio, tiene la libertad para ir donde su mente la lleve, y sus increíbles aventuras, borran la línea entre lo real y lo imaginario.
Ha partir de ahí, la joven comienza a preparar su fuga, cuyo éxito depende del robo de 5 objetos; y decidida a luchar por su libertad, anima a otras 4 chicas:
La decidida Rocket (Jena Malone), la astuta Blondie (Vanessa Hudgens), la implacablemente leal, Amber (Jamie Chung); y la reacia Sweet Pea (Abbie Cornish); a unirse, e intentar escapar de su terrible destino, a manos de sus captores:
Blue Jones (Oscar Isaac), Madame Vera Gorski (Carla Gugino), y The High Roller/El Doctor (Jon Hamm)
Guiadas por Babydoll, las chicas entablan un combate fantástico contra todo, desde samuráis a serpientes, con un arsenal virtual a su disposición.
Juntas, deben decidir lo que están dispuestas a sacrificar para permanecer vivas; pero con la ayuda de “The Wise Man” (Scott Glenn), su increíble viaje, si lo consiguen, las liberará.
Snyder nos trasporta, a un mundo dentro de otro mundo, dónde cada escena respira pura locura, crea su propio “comic”, creando universos, dignos del Noveno Arte, con escenas que parecen salidas de videojuegos, regalando al espectador, un auténtico alarde visual.
La seducción de Sucker Punch, no viene por sus cielos surcados por dragones, por el atractivo salvaje de sus “lolitas” semidesnudas, o su reinvención “steampunk” de las batallas en trincheras de una Guerra Mundial, que también; el embrujo viene, ante la constatación de que la forma de los sueños, que se reinventan a cada momento, mora, y crece aquí, sin remisión.
Y nos muestra que la lucha de mucha gente cotidiana, no es menos épica que la de los grandes luchadores o los héroes de “comics” imaginarios, que los monstruos existen, y que nos los encontramos detrás de cada esquina, por las injusticias que han sido reveladas, por las que nunca verán la luz…
“Remember, don't ever write a check with your mouth you can't cash with your ass”
Zack Snyder, distorsiona la realidad, para confirmar su constante empeño en avanzar un paso más allá, visualmente, con cada propuesta; por lo que Sucker Punch maneja elementos que remiten a otros trabajos fílmicos que han tocado el tema de la locura, aunque por momentos, parece ser la “tarantiniana” saga de “Kill Bill”, la principal referencia y fuente de inspiración, mientras que no pocos harán comparaciones con otros filmes.
A todo esto, Snyder le agrega a un diseño retro futurista, la acción principal, que transcurre en los años 50, pero apela todo el tiempo, incluso desde la música, a un posmoderno anacronismo; y sigue la historia de una joven, a punto de ser lobotomizada, y su intento de escapar de un hospital psiquiátrico, junto con sus compañeras.
La historia, es contada por Sweet Pea; aunque la trama se centra en Babydoll, nos encontramos que al final, la historia es contada por la única sobreviviente, Sweet Pea; incluso al principio, se escucha que es esta la que habla, y como ingrediente dice que “los ángeles se pueden aparecer en forma de un anciano sabio, o una pequeña niña”, haciendo referencia a “The Wise Man” y a Babydoll, respectivamente.
Por su parte, Blondie, es la chica más antigua de las 5; y aparentemente es la que recuerda todo lo que ha sucedido en el lugar, incluso cuando Amber llegó al Lennox House.
En el fondo, Sucker Punch es la historia de cómo la mente, puede ser la única arma, el último recurso, cuando ya sabes que no queda nada.
Son metáforas y ensoñaciones, sobre como rebelarse en un mundo casi apocalíptico, en una mente perdida e inestable, cuyo único recurso es, jugárselo todo a una carta.
Es decir, inventa tu propia realidad, y vívela.
Sucker Punch, opera en 3 niveles:
El primero, es una realidad, luego una sub-realidad en la que la sala de psiquiatría, es un extraño burdel; y por último, un nivel formado por un mundo de ensueño, donde secuencias de acción fuera del tiempo y espacio tienen lugar.
Los mundos paralelos, están a 20 millones de años luz de distancia, según cuenta el director; y a pesar de un prodigioso prólogo, no juegan más papel, que el de muchos videojuegos:
Tienen partes de transición, en las que el jugador descansa, entre nivel y nivel, viendo cómo la acción avanza lo suficiente, antes de entrar en una nueva aventura.
Porque la historia de la chica encerrada en el psiquiátrico, que urde un juego de fantasía para escapar de allí, no es más que la excusa, para ofrecernos luchas imposibles, instaladas en contextos, no menos imposibles, pero también de una extrema belleza.
Resulta difícil, que a uno no le duelan las pupilas, de tanto dilatarse ante secuencias como, la loca guerra de trincheras, en un escenario apocalíptico, surcado por zepelines, bajo los restos arquitectónicos de una catedral, y con un ejército de zombis alemanes, aguardando en el campo enemigo…
Para ello, el director se apoya en su ya conocido estilo visual, y su paleta de colores, para transportarnos de un lado a otro de su mundo, y de la protagonista, hábilmente, utiliza su técnica cada día mejorada, para crear lo mejor de la trama:
Un magnífico prólogo, que nos introduce en la historia de Babydoll, no abandonando dicho estilo en ningún momento, lo que hace ya de por sí interesante, es el modo de narrar que nos impone, y más aún, cuando se confunden realidad y fantasía, momento en el cual, Snyder se suelta, y se deja llevar por el entusiasmo que hará las delicias de los seguidores del movimiento “steampunk”, y de todos aquellos a los que la coherencia les importe menos que el espectáculo, y sin objeción ninguna, se sumerjan en las fantasías de una chiquilla atormentada, cuya imaginación y subconsciente, más que rico en ideas, recrean épocas inexistentes, con momentos épicos, vividos por el grupo de amazonas que junto con la protagonista, y sus más que provocativas indumentarias, poblarán los sueños de muchos espectadores.
Rick Carter, es el diseñador de producción, mientras que los efectos visuales, fueron realizados por Animal Logic, con 75 especialistas, y la Moving Picture Company, que realizó más de 120 tomas.
Y es que Snyder quería diseñar una película, de manera que no hubiera límites de ningún tipo, pero dijo que al ser su primera película original, no basada en nada anterior, eso era lo más difícil, ya que quería una historia fresca, y no sólo un videojuego.
Su particular forma de usar la cámara, también ayuda mucho a mantener ese ritmo, sin llegar al nivel de mareo que produce Michael Bay; Snyder sabe perfectamente, cómo manejar la cámara en las escenas de acción, así como usar de la mejor forma posible, esos momentos de “slow motion”, para que consigan resultar espectaculares, y no cansen en ningún momento.
Las misiones, a modo de parodia a “Sailor Moon” son para conseguir 5 artículos que, según la visualización surrealista, se dan en 3 lugares diferentes: “Mision Freedom”:
Se da en un Templo Japonés, posiblemente entre los años 1337 a 1573, según la arquitectura del sitio.
“Mision Map”:
Se da en visión surrealista de La Primera Guerra Mundial, ya que el uniforme, como las armas, los coloca en esta, incluso el uso de Trincheras, también la tecnología como el “steam clock” que es de la década de los 70'.
“Mision Fire”, se da en un punto de la surrealista a modo de “Tierra Media”, cuando se pueden observar Dragones y Orcos.
Y “Mision Kitchen Knife”
Que es la única que parece darse en un el futuro, que incluso para el año 1950/60 que se presume está ambientada Sucker Punch, da un vistazo de este, muy creativo, sin embargo, la visión también parece darse en un “planeta”, que se cree, no es La Tierra.
Sobre la idealidad, Sucker Punch, claramente expresa, que la trama es contada por un paciente psiquiátrico, lo que Zack Snyder incorpora a la perfección, en cada aspecto de la misma, pues expresa las altas y bajas de una persona con un problema mental; por ejemplo:
Los diferentes niveles de surrealidad, que es la forma que las chicas “decoran” la realidad, al momento que se presume, según la trama, eran vendidas a los hombres.
La búsqueda de una salida, en la que cada chica busca la forma de salir de ese lugar, y cuando lo logra, regresa a la realidad; y la forma que sonaría, si fuese contada Sucker Punch como que es de “locos”
Curiosamente, antes de comenzar el “casting”, en marzo de 2009, Snyder reveló el reparto que consideraba como ideal.
Y decidió escoger un reparto femenino, diciendo que:
“Yo ya había elegido un reparto masculino para “300” (2007), así que estoy haciendo lo contrario”, contradiciendo la opinión de Warner Bros., de 2007.
Antes de comenzar el rodaje, el reparto tuvo que entrenar.
El entrenamiento duró 12 semanas.
El reparto femenino, tuvo que levantar peso muerto de hasta 100 kilogramos.
Damon Caro, el preparador de Snyder, fue contratado; y Abbie Cornish dijo, que antes del comienzo del rodaje, estuvieron entrenando 6 horas al día, 5 días a la semana, artes marciales, esgrima, y coreografía.
El ampuloso positivismo visual, que habita en la caótica, por atestada cabeza de Zack Snyder, le ha movido a diseñar un delicioso y atemporal embalaje erótico, y por qué no, machista, que se esfuerza por contener una absurda fábula de heroínas, bajo una morbosa estética “pin-up”, ya sea en su modalidad guerrera, en su versión colegial, o en los interludios cabareteros…
Pero si Snyder tenía la intención de hacer un film de acción, protagonizado por mujeres, y destinado a mujeres, creo que le ha salido el tiro por la culata, por cuanto Sucker Punch desprende, un tufillo machista, realmente vergonzoso, y en algunos casos, hasta repugnante; y ha sido criticado, por su representación de la mujer.
Varios críticos la describen como misógina, y otros expresaron su preocupación por el tratamiento de la violencia sexual:
“Niñas” buenas, ligeritas de ropa, que enseñan lo justo, y provocan lo máximo; apenas para sesiones masturbatorias.
Y es que Sucker Punch, engañosamente se posiciona como “empoderamiento femenino”, a pesar, claramente, de haber sido tramada como “carne de fantasía para los chicos de 13 años de edad”, y el hecho de que las chicas “están bajo la amenaza constante de ser violadas o asesinadas”, hace que sea altamente inapropiada para los espectadores jóvenes, y es un análisis, profundamente pesimista de la opresión femenina, ya que deja claro que, al igual que los hombres que organizan las danzas, son ellos quienes controlar los términos de las escenas de lucha.
Por lo que muchos ven a Sucker Punch, como una “batalla perdida”; pues usan todas las herramientas que están a su disposición, ya sea la sexualidad, o la fuerza física, el ingenio, o la capacidad de unirse para luchar contra un enemigo común:
La herramienta de la hermandad, y sobre cómo utilizarla, todavía no es suficiente para salvarse…
El problema es, que el resto del metraje tiene muchas carencias, como el desarrollo de los personajes, mencionándolas en escala de importancia:
Babydoll, es el único personaje en el que profundiza, obvio, siendo la protagonista; después los personajes de Sweet Pea y Rocket, desdibujados casi por completo, y eso que son 2 de las mejores interpretaciones que tiene, y ya rozando lo indignante, los personajes de Blondie y Amber, de las cuales apenas solo sabemos sus nombres, y lo mismo pasa con el resto.
Como errores, hacia el final, mientras las chicas esperan que abran las puertas, se puede ver, que el encargado de vigilancia, tiene puestos unos audífonos, lo cual es un anacronismo, considerando que Sucker Punch se desarrolla durante los años 50…
En lo que a lecturas se refiere, hay múltiples maneras de interpretar la historia:
Toda Sucker Punch, es sobre una chica que se somete a “MK ULTRA/Programación Monarca, un programa desarrollado por La CÍA para control mental.
Babydoll se retira, cada vez más en su mente, para desvincularse de los traumas que ella está experimentando.
El hospital, es lo que experimenta Babydoll durante la programación ALPHA/Control Mental; mientras que en el burdel, Babydoll está siendo sometida a la programación BETA/Esclava Sexual.
Durante las escenas acción, cumplen la programación DELTA/Asesinato…
Si Sucker Punch tiene lugar durante 1950/60, a pesar de los evidentes anacronismos, fue un período durante el cual, los experimentos reales “MK ULTRA” se sabe tuvieron lugar.
La protagonista principal, es una muchacha de 20 años de edad, conocida sólo como “Babydoll” o “Muñeca”
Su nombre sugiere control mental, como a las muñecas, que no controlan sus movimientos o ambientes.
Trasfondos de muñecas, y el camino del control mental, refleja la historia de muchos esclavos de la vida real de la Programación Monarca, léase también como mariposa, que también salen en algunas escenas:
Con un padre abusivo, que causó múltiples traumas a una edad temprana, por lo que creo, su predisposición a la disociación.
Su “propiedad”, se transfiere a una institución, donde la programación actual se lleva a cabo, bajo la supervisión de especialistas/los controladores.
La historia de Babydoll, es de hecho, la típica historia de la vida real de los esclavos, que a menudo, eran objeto de abuso, a una edad temprana.
Después de varios años de malos tratos, las despiadadas figuras parentales, que no tienen problema para entregar a sus niños a las autoridades MK ULTRA, son exonerados de los posibles cargos criminales que podrían enfrentar por años de abuso…
Así, Babydoll es llevada a la fuerza a la institución.
Varias instituciones de salud mental, eran realmente sitios utilizados por La CIA, para el control mental, al menos eso es lo que se cuenta...
La amenaza de abuso físico y sexual, es constante durante todo el metraje, y varias técnicas se utilizan para activar la disociación.
La música, es muy importante en la institución, y en el control mental actual, donde se utiliza como una herramienta de programación.
La mayoría de las canciones escuchadas, tienen letras sugerentes, que en el contexto del control de la mente, puede provocar la disociación.
El alter de Babydoll, tiene un pasado diferente...
En su caso, su abusivo padrastro, se convierte en un sacerdote...
Crítica a la iglesia pedófila, que en vez de guiar, abusa…
Utilizando la música, como una herramienta de programación, podemos creer que Vera Gorski, “doctora de la institución”, es “la instructora de baile” en la realidad alternativa; era la que les creaba esa ilusión, para “hacerles su vida allí, más llevadera”
Que la que escapa al final, era la única loca, o la única cuerda, y por eso es la que se libra.
Este nivel múltiple de la disociación, es un mecanismo de Babydoll como defensa a la realidad dura y fría:
El tercer nivel de la escena de acción, significa que ella está bailando en el segundo nivel del club, lo que significa que ella está siendo violada en el primer nivel de la institución para enfermos mentales, espero que esto no es demasiado confuso… y así sucede en los demás casos.
Por ello, la mayoría de aficionados de Sucker Punch, creen que es una película sobre “poder femenino”, “mujeres luchando de nuevo”, y otras palabras de moda que utilizan en estos días.
Mientras que algunos pueden percibir a Babydoll, como una mujer fuerte, que lucha contra la opresión de los hombres; otros podrían concluir, que Sucker Punch responde a las perversiones, convirtiéndolos en una fantasía...
El mismo doble discurso, puede ser atribuido a Sucker Punch, cuando se relaciona con el tema del control de la mente…
Mientras que el mensaje principal, parece ser de “luchar por la libertad”, una mirada más profunda, revela que podría estar diciendo lo contrario…
Al final, la batalla de Babydoll no fue para una rebelión, y libertad, sino por escape y disociación.
Su “guía”, no era un agente de liberación, sino una guía que tenía las llaves de su psique, guiándola en la fractura de su personalidad.
Allí llego lo mejor:
Esa ambientación, y efectos especiales espectaculares; una gran forma de mezclar la realidad con la imaginación, con una historia profunda bastante buena.
Como dato, Eli Snyder, hijo del director, aparece 2 veces, siendo el niño que ven.
Para ir finalizando, Sucker Punch está dedicada a Sam Mc Gowan, miembro del departamento de arte, que falleció en el 2009; y a Marsha, fotógrafa y madre del director, que falleció en el 2010.
Hay un final alternativo:
Con Babydoll y El Doctor que la lobotomiza.
Babydoll, solo decide aislarse, aceptando la lobotomía, ya que sabe que nunca será libre.
Lo curioso es que al final, cuando la violencia real en forma de lobotomía llega, Babydoll la transforma en sexo.
La apuesta en general, es arriesgada, para muchos, está vacía de contenido, para otros está llena de simbolismos ocultos, que le dan mucha complejidad a la narración.
La música, es una parte intrínseca de Sucker Punch:
“En la historia, la música es lo que las lanza a los mundos fantásticos”, explica Snyder.
Curiosamente, es en esas escenas oníricas, donde las chicas “bailan”, nunca las vemos… pues la representación no viene visualizada en acción de defensa ante lo que ellas viven en la cruda realidad musical, para ello, nótese las letras de las canciones.
La columna vertebral, es la música; por lo que se usan canciones que peguen con el ambiente; donde se escuchan las voces de los productores discográficos:
Tyler Bates y Marius De Vries.
“I'm gonna escape from here”
¿Realidad o Fantasía?
El Proyecto MK ULTRA, fue un programa de investigación ilegal, y secreto, de La Agencia Central de Inteligencia (CIA) de los Estados Unidos, en el que, mediante experimentación en seres humanos, se buscaba identificar y desarrollar drogas, y procedimientos para interrogar y torturar prisioneros, y debilitar su resistencia a la confesión.
Pero había aproximadamente, 150 proyectos de investigación en el programa, y aún no se conoce el propósito de todos ellos... ni si todos fueron exitosos.
El nombre del proyecto, es un criptónimo CIA, en que el dígrafo MK, representa a proyecto del Equipo de Servicios Técnicos de La CIA en los 1950s y los 1960s.
En el proyecto, se utilizaban muchas otras drogas, los sujetos de las pruebas, eran empleados de La CIA, miembros de los servicios militares, médicos, otros agentes del gobierno, indigentes, prostitutas, pacientes con enfermedades mentales, y miembros del público, muchas veces, sin que los involucrados supieran lo que se hacía con ellos, ni se solicitara su consentimiento...
El programa, salió a la luz públicamente, gracias a La Comisión Presidencial Rockefeller, en el año de 1975.
Con 44 universidades estadounidenses, 15 fundaciones de investigación o químicas, o compañías farmacéuticas y similares, incluyendo:
Sandoz, actualmente Novartis; y Eli Lilly & Co.; más hospitales o clínicas, además de los relacionados con las universidades; y tres cárceles, se sabe, han participado en MK ULTRA.
Así las cosas:
¿Quién honra a aquellos que amamos con la vida que vivimos?
¿Quién envía a los monstruos para que nos maten, y al mismo tiempo, canta que nunca vamos a morir?
¿Qué nos enseña lo que es real, y cómo se ríen de la mentira?
¿Quién decide porque vivimos, y por qué moriremos para defender?
¿Qué nos encadena?
¿Y quién tiene la llave que nos puede hacer libres?
Eres tú.
Tú tiene todas las armas que necesitas.
Es momento de luchar.
For those who fight for it, life has a flavour the sheltered will never know.
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