You May Not Kiss The Bride

“Nikitin is a crime against the world's bosses”

Un matrimonio de conveniencia, es un matrimonio contratado por razones distintas de la relación, la familia o el amor.
En cambio, tal matrimonio es orquestado para beneficio personal, o algún otro tipo de propósito estratégico, como el matrimonio político; y en los casos en que representa un fraude, se le llama “matrimonio fingido”
En particular, el casarse por papeles, y mentirle a inmigración sobre una relación que no existe, es fraude contra el sistema migratorio, porque es un casamiento fraudulento, al producirse fundamentalmente para obtener beneficios jurídicos, económicos o sociales, sin que exista un vínculo sentimental intenso entre los contrayentes; además no hay consumación carnal, es decir, los cónyuges no mantienen relaciones íntimas, antes, durante o después del evento.
En discusiones, se ha cuestionado si los matrimonios arreglados internacionales son falsos, pues son un medio conveniente para obtener la residencia y la ciudadanía a inmigrantes, que de otro modo se les negaría una visa para entrar al país.
Estos temores se han avivado por los divorcios observados una vez que se cumplió el período mínimo de residencia en el matrimonio requerido.
Existen ejemplos de tales abusos por parte de familias musulmanas del oeste de Asia, y los Estados Unidos han tenido una controversia similar con falsos matrimonios concertados para obtener la “Green Card”
Hay muchas personas que consiguen la residencia basadas en matrimonios verdaderos, y califican para ello, y deben seguir haciéndolo, pero no es nada nuevo que inmigración está consciente de la posibilidad de fraude de algunos matrimonios.
El proceso con el que inmigración determina si un matrimonio es verdadero, es muy riguroso, y se debe presentar evidencia, como contratos de arrendamiento, cuentas de banco conjuntos, fotos de viajes, cartas de diferente personas y una entrevista.
Si hay sospecha de que el matrimonio no es legítimo, hay otra entrevista más a fondo, donde los separan; y si inmigración determina que el matrimonio no es verdadero, puede poner al aplicante en proceso de deportación por fraude.
Entonces, esa persona que no estaba en ningún problema hasta ese momento, se estaría poniendo en más riesgo, porque sin ese trámite puede mantenerse sin que migración le haya empezado un proceso.
No es tan fácil como pensar que, si alguien se casa con un ciudadano, ya va a conseguir sus papeles…
Es una cuesta arriba; pues el proceso de la verificación de matrimonios que inmigración realiza, son tan estrictos, que a clientes con matrimonios verídicos, no les han dado los papeles rápidamente, les solicitan más información, y hasta los han puesto en sospecha.
En otras palabras, el fraude afecta la burocracia.
Si bien el matrimonio fraudulento, no es un delito sin víctimas, ni un crimen inocente; es un delito serio que debilita la seguridad de cualquier nación, y nos hace menos seguros.
Por tanto, ser partícipe de fraude en un matrimonio, puede resultar en prisión de hasta 5 años para los involucrados en algunos países como en EEUU, y los problemas legales también son para el ciudadano o residente que se case por conveniencia.
Participar en ese tipo de fraude, y negociar su seguridad para obtener ganancias financieras, es un delito grave, con sanciones penales, y consecuencias serias.
“Hjei.
Tjoin kjissan kjuvattavaksi”
You May Not Kiss The Bride es una comedia del año 2011, escrita y dirigida por Rob Hedden.
Protagonizada por Dave Annable, Katharine McPhee, Rob Schneider, Mena Suvari, Kathy Bates, Tia Carrere, Vinnie Jones, Ken Davitian, Howard Bishop, Kevin Dunn, entre otros.
La película fue filmada en Hawaii, a principios de 2009; cuyo presupuesto fue de más de $6 millones; y se estrenó hasta el 2 de septiembre de 2011, por falta de distribuidores, en un teatro en Hawaii, debido a que la compañía local, Hawaii Film Partners, está ubicada allí; y posteriormente se estrenó en el resto de Estados Unidos, Rusia, Rumania, Hungría, Canadá, y Latinoamérica.
El problema de su estreno es que Hawaii Film Partners tuvo problemas para distribuir la película debido a su pequeño presupuesto, y sus estrellas no eran grandes estrellas de cine, por lo que ellos mismos tuvieron que formar el Hawaii Film Partners Distribution, y así distribuyeron la película ellos mismos.
You May Not Kiss The Bride tiene todo lo que usted podría esperar y desear de una comedia romántica:
Risas, acción, peleas, persecuciones de coches, y un gran paisaje.
La acción toma lugar en Chicago y Hawaii, y sigue al fotógrafo de mascotas, Bryan Lighthouse (Dave Annable), que vive una vida bastante poco romántica.
Su madre (Kathy Bates) está deseosa que su hijo pierda la virginidad, pidiéndole reiteradamente que se case y dé a sus nietos; lo que él no esperaba, es que se verá envuelto en acción, aventuras y romance.
Un día, mientras trabajaba, la asistente de Bryan, Tonya (Mena Suvari), causó un accidente con el gato de un cliente, nada más y nada menos que con Borislava Nikitin (Jeanne Rogers)
La dueña del gato, es la esposa de un mafioso croata, Vlatko Nikitin (Ken Davitian), que obliga a Bryan a casarse, contra su voluntad, con la hija Masha Nikitin (Katharine McPhee), para pagar así la deuda; y para conseguirle una “Green Card”  a ella, bajo la condición de que Bryan “no puede tocarla” durante la boda.
Ambos se casan y pasan su luna de miel en un complejo tropical remoto, en algún lugar de Tahití; pero el novio de Masha, Brick (Vinnie Jones), que está enamorado de ella, aunque ella no le regresa las atenciones, los sigue hasta el resort tropical... donde Masha es secuestrada.
A partir de entonces, el amor y la violencia se desatarán con situaciones desternillantes, con la cantidad justa de acción, aventura, romance y comedia.
No piense demasiado en el trabajo de investigación, la trama y el razonamiento... el equipo de producción no ha puesto mucho esfuerzo en eso; pero si mantenga sus expectativas bajas, y usted no será decepcionado.
You May Not Kiss The Bride es cine de evasión, pura y dura.
“Move away from him... if you don't want to get shot”
En el fondo, You May Not Kiss The Bride es una comedia romántica bastante tonta, desigual, viciada, pero atractiva y entretenida, que en el fondo trata los problemas de muchos países:
Los matrimonios de conveniencia, que a menudo se contratan para explotar las lagunas legales de varios tipos.
Una pareja, puede casarse por razones de ciudadanía o derecho de residencia; esto también ha sido representado en programas de televisión, donde el matrimonio es intencionalmente para la residencia, por ejemplo, que como muchos países alrededor del mundo, conceden tales derechos a cualquier persona casada con un ciudadano residente.
En los Estados Unidos, esta práctica se conoce como un “Green Card Wedding” o “matrimonio de tarjeta verde”
Debido a que explotan las lagunas legales, los matrimonios de conveniencia a menudo tienen consecuencias legales.
Por ejemplo, la oficina de Inmigración de Estados Unidos (USCIS), puede castigar esto con una multa de $250.000 y 5 años de prisión.
No sabiendo estos los personajes, se enredan en esta comedia romántica, que narra las peripecias de un fotógrafo estadounidense, Bryan, que quería viajar por el mundo y tomar fotografías de todas las maravillas que encuentra a lo largo del camino; pero se quedó atascado tomando fotografías de mascotas con disfraces extraños; y una mujer croata, Masha, que quiere tener su propio estudio de baile; se ve obligada a casarse con él, para poder quedarse en los Estados Unidos.
La razón por la que Bryan se ve obligado a casarse con esta chica, que nunca había visto ni conocido, es porque tuvo un incidente con el gato de la madre, que se suponía, le tenía que tomar fotografías.
El padre de Masha es un jefe de la mafia, por lo que tomó ese incidente como una base de hacer que se case con su hija, pero sólo en el papel...
Su padre planea casarla con su mejor hombre, Brick, cuando ella obtenga el permiso para quedarse en los Estados Unidos.
Pero después de la boda, para engañar a los agentes del USCIS, también son enviados a una luna de miel.
Allí es donde Masha será secuestrada, y nunca creerán quiénes son los secuestradores:
Los secuestradores resultan ser los 2 agentes del USCIS corruptos:
El agente Meyers (Howard Bishop) y el agente Ross (Kevin Dunn)
Por supuesto, a Bryan se le dice que se mantenga las manos fuera de Masha, ya que esto es sólo “un matrimonio de apariencia”, pues el secuaz del padre, tiene intereses más allá que Masha, y es mucho dinero.
Sin embargo, Bryan se da a la tarea de rescatarla, porque al final se enamora de Masha; y para ello, Bryan cuenta con algo de ayuda:
Lani (Tia Carrere) la empleada del resort y su primo Ernesto (Rob Schneider), un loco piloto de helicóptero, y de la misma Tonya.
Pero la familia de Masha piensa que Bryan está involucrado en el secuestro...
Tras una estrambótica peripecia, él tiene éxito, y ella es devuelta ilesa a sus padres.
En ese momento, su padre está de acuerdo en que se queden juntos, pero Bryan no quiere tener nada que ver con ellos, ya por su experiencia de muerte cercana, por todos los disparos que recibió, y porque su padre es un criminal decide dejarla.
Al final, como era de esperarse, es un final feliz.
De los personajes, tal vez el mejor es Ernesto, porque el tipo es muy loco, y los conduce a los momentos más desternillantes del relato.
Él tiene los mejores chistes, y el mejor comportamiento, inesperado y divertido.
Mientras Vinnie Jones, está interpretando al mafioso dura, ido de tuerca, que tampoco se muestra muy fuerte como tal, sino como un incapaz; por tanto, si no tomas la película en serio, entonces es simplemente diversión “inofensiva”
Sorprende ver aquí a Kathy Bates, en un personaje igual de divertido, algo pasado, y que no tiene mucha importancia en la trama, más que por un par de escenas.
Mena Suvari, sigue con el registro cómico e hilarante, muy alejada de lo que fue una vez “American Beauty” (1999)
Los protagonistas, Dave Annable y Katherine McPhee, tratan de hacer todo lo posible con sus personajes:
Ellos son muy lindos, tienen química, y encajan perfectamente en sus papeles.
Como dato, Katharine McPhee participó en la 5ª edición, de 2006, del American Idol, y quedó en 2º lugar, después de Taylor Hicks.
Ella está preciosa, y se luce en la cámara, mostrando que puede actuar tan bien como cantar.
Y Dave Annable se esfuerza mucho con el material ligeramente tonto que se le da el guión.
Sin embargo, este es uno de sus pocos papeles en el cine, que le va como anillo al dedo, y sería bueno verlo más regularmente.
Como galán, tiene todas las papeletas.
Un “personaje” más, es la ubicación elegida para el rodaje, que está fuera de este mundo; filmado en un magnífico escenario, la cinematografía, las secuencias de persecución, y los efectos de helicóptero, fueron excepcionales.
En particular la cinematografía, le da una vista increíble de Hawaii, que fue sorprendente para una comedia romántica de bajo presupuesto.
Peor tampoco es una película brillante dentro del género...
No obstante, aquí no hay nada que los padres deberían evitar ver a sus hijos; hay algunas travesuras amorosas, extremadamente ligeras, y graciosas, nada de violencia ni demostraciones sexuales…
El idioma es también para público en general.
Los protagonistas de hecho tienen una moral decente, y una de las moralidades menores de sus aliados, se representa como una tontería.
Pero el atractivo de You May Not Kiss The Bride es meramente técnico:
En su carrera por posicionarse en el emergente mercado del sonido inmersivo tridimensional, Imm Sound, tomó a You May Not Kiss The Bride como su apuesta para su propuesta tecnológica; un filme que mezcla acción, aventura y romance.
Con You May Not Kiss The Bride, Imm Sound demuestra que el sonido 3D va más allá de un uso efectista para películas de acción, dando todos los pasos para convertirse en el estándar de sonido del cine.
La película, ofrece un extenso portafolio de paisajes tropicales, ideales para demostrar la calidad y detalle del sistema de audio en 3 dimensiones, a la hora de representar ambientes capaces de sumergir al espectador en la experiencia.
Cabe señalar que Imm Sound era una empresa de propiedad privada, con sede en Barcelona, España; especializada en la tecnología de sonido 3D y post producción en la industria cinematográfica y en otros medios de comunicación.
La empresa, fue adquirida por Dolby, en julio de 2012.
Entre los errores encontrados en You May Not Kiss The Bride tenemos que los nombres:
Masha, Vlatko, Borislava... y el acento que tienen y las costumbres de la boda, son todos rusos, no croata en lo más mínimo.
Y la música usada en la boda, es turco/rusa.
En las bodas croatas, se sabe que no tiene la costumbre de gritar “Gorko, Gorko, Gorko”, que significa “amarga”, así que un novio no besaría a una novia…
Es vergonzoso usar el estilo y la percepción rusa, bajo un nombre croata.
Eso deja mucho que desear de parte de una producción poco documentada, aunque no pretenden dar lecciones de historia.
Sí, los hechos sobre Croacia eran ridículos y falsos, pero no son parte principal del guión, ni siquiera una parte muy importante del relato, bien podría haber sido cualquier país eslavo de Europa oriental…
Así las cosas, realmente disfruté de esta comedia romántica, tan predecible como se ve, y aun así me proporcionó un buen entretenimiento.
Por último, la mayoría de las canciones usadas en la película, son por músicos hawaianos.
Una de las canciones, “Beautiful Stranger”, fue coescrita por Katharine McPhee, y los productores, David y Shauna Jackson.
“Should we get married, in order to receive a residence permit?”
Todo tiene su propósito... y You May Not Kiss The Bride no está exenta.
Hoy, con la llegada del gobierno de Trump, algunos consideran recurrir a esta práctica de matrimonio, pero los expertos advierten que es demasiado riesgoso.
Las amenazas de Donald Trump, de deportar a millones de indocumentados, han causado tal alarma, que más de uno está buscando la manera de poder legalizar su estatus en el país como sea.
Y los matrimonios por conveniencia, parecieran ser una opción rápida para muchos que, en medio de su desespero, no ven otra manera de lograrlo, pero si son descubiertos, podrían acabar con “El Sueño Americano” para siempre, y de paso, corren el riesgo de terminar en prisión.
Curiosamente, diversas encuestas por pequeños muestreos se han hecho para determinar si los matrimonios arreglados, o los matrimonios autónomos, tienen una vida matrimonial más satisfactoria.
Los resultados son mixtos:
Algunos afirman que la satisfacción matrimonial es mayor en los matrimonios autónomos; otros no encuentran diferencias significativas…
Los estudiosos también se preguntan, si el amor y el respeto de la vida conyugal, es mayor en los matrimonios arreglados que los matrimonios autónomos…
Pero si en algo estamos claro, es que el amor surge con el tiempo.
Ni los matrimonios arreglados ni los autónomos ofrecen ninguna garantía.
Muchos matrimonios arreglados, también terminan siendo fríos y disfuncionales, así, con informes de abuso, etc.
¡Ojo pues!

“The honeymoon is officially over!”



Comentarios

Entradas populares