Always

“They couldn't hear him.
They couldn't see him.
But he was there when they needed him...
Even after he was gone”

La lucha aérea contra el fuego, consiste en el uso de aviones, especialmente aviones cisternas, que en muchos casos, aunque no siempre, son hidroaviones adaptados, y otros medios aéreos para apagar incendios.
Los tipos de aeronaves utilizadas, incluyen aeronaves de ala fija, y helicópteros.
Los productos químicos utilizados para combatir los incendios, pueden incluir agua, los potenciadores del agua, tales como espumas, geles, y especialmente retardantes de llama de formulación específica.
Hay aviones de extinción de incendios, o helicópteros, diseñados especialmente para la lucha contra incendios.
Es en la mayoría de los casos, algún tipo de incendio forestal, así como para incendios industriales, que se puedan extinguir desde el aire.
En principio, un avión es suficientemente eficiente para transportar una cantidad considerable de agua a largas distancias.
Otra ventaja es por ejemplo, que un hidroavión puede llenar los depósitos de agua en pleno vuelo, por inmersión en un lago, en comparación con otros sistemas tradicionales de transporte de agua.
Finalmente, también hay que tener en cuenta, que un avión puede llegar hasta áreas que son de difícil acceso para las personas, y lanzar el agua a una distancia segura.
Normalmente, el agua no se tira directamente sobre el fuego, sino en el camino de propagación del fuego, delante de él, para detener el frente del incendio.
El avión “cortafuegos” más grande del mundo, es el avión-cisterna Super Evergreen 947, un Boeing 747, que puede llevar 77.600 litros de agua mezclada con retardante de llama.
“You don't have an excuse, you quit.
You quit, you gave up.
He never quit on anything until it killed him, and that was his way, and there's much worse ways.
And boys you sure found one”
Always es una película de fantasía, dirigida por Steven Spielberg en 1989.
Protagonizada por Richard Dreyfuss, Holly Hunter, John Goodman, Audrey Hepburn, Brad Johnson, entre otros.
El guión es de Jerry Belson; y viene siendo un remake de “A Guy Named Joe” (1943), dirigida por Victor Fleming, protagonizada por Spencer Tracy, esa vez, ambientada en La Segunda Guerra Mundial, que mostraba una visión amable de la muerte.
Always, sin embargo, sigue la misma línea argumental básica:
El espíritu de un experto piloto recién muerto, que será mentor de un piloto nuevo, mientras deja el amor de su novia sobreviviente.
Los nombres de los 4 personajes principales de “A Guy Named Joe” (1943) son todos iguales, con la excepción del personaje Ted Randall, que se llama Ted “Baker” en Always, y el apellido de Pete es “Sandich”, en lugar de “Sandidge”
Para Spielberg, recordó que vio la obra de Fleming cuando era un niño, a altas horas de la noche, siendo una de las películas que le inspiraron para convertirse en un director de cine, y uno de los objetivo de hacer Always, era crear una conexión emocional que había vivido con su padre, un veterano de la fuerza aérea en tiempos de guerra.
Como dato, Audrey Hepburn aparece en un pequeño papel en Always, siendo su última película antes de retirarse del cine, para dedicarse a los niños necesitados, como Embajadora de UNICEF.
Always se rodó en Kootenai National Forest, Montana, con algunas escenas filmadas en, y alrededor de Libby, Montana, EEUU.
Unas 500 personas de la cercana Libby, Montana, fueron reclutadas como extras para actuar como bomberos forestales.
Esas escenas que transcurren en “Flat Rock, Colorado” fueron filmadas en, y alrededor del aeropuerto Ephrata, en el este de Washington.
Always sigue a Pete Sandich (Richard Dreyfuss), que es uno de los pilotos de una base de bomberos aéreos forestales.
Él confía en su pericia, y se arriesga mucho para realizar mejor su trabajo; y mantiene una relación amorosa con Dorinda Durston (Holly Hunter), una mujer que trabaja en la torre de control de la base.
Un día, Pete se arriesga demasiado, y se mata con su avioneta.
La siguiente escena, está llena de luz, con Pete en un bosque totalmente quemado, y al fondo, sobre un oasis de césped con flores, aparece un ángel llamado Hap (Audrey Hepburn), que le confirma que está muerto, mientras simbólicamente, le corta el pelo.
Pero Pete regresa a La Tierra, como espíritu invisible, con la misión de liberarse del amor que siente por Dorinda, para que ella pueda seguir siendo feliz, pues desde que Pete falleció, no tiene control sobre su vida, profundamente apenada por su desaparición.
Con el tiempo, otro piloto llamado Ted Baker (Brad Johnson), se enamora de Dorinda, y Pete no sabe qué hacer para impedirlo, hasta llegar a la conclusión de que su amor por Dorinda, le obliga a separarse definitivamente de ella, para que sea feliz.
Always una bonita historia romántica, y bastante triste, que nos recuerda la importancia de decir “Te Amo” cuando se siente, porque después puede ser demasiado tarde.
“Extra dry vodka martini.
Don't forget the olive”
Always es una bonita pero irregular fábula, en la que Steven Spielberg, el mejor director de su generación, nos enseña que el amor consiste en hacer feliz a la persona que amamos, aunque para ello tengamos que renunciar a formar parte de su vida, y que para obtener la libertad, primero hay que saber darla.
Always cumple a la perfección, aquello que el crítico más influyente de la “nouvelle vague”, André Bazin decía, de que “toda película, incluso las peores, esas con las que nos quedamos dormidos, contienen al menos 5 minutos de pura magia, de auténtico cine”
Y como suele ocurrir en Spielberg, el apartado técnico es muy bueno, sin llegar a un nivel sobresaliente como en otras producciones del director, pero en los momentos que se hace más visible, se nota el buen trabajo que hay detrás de la producción.
En Always destacan los aviones, y aquí se usaron muchos, como:
2 bombarderos contrafuego, Douglas A-26 Invader:
Douglas B-26C Invader No. 57, y Douglas TB-26C Invader Nº 59.
Las escenas de vuelo realizado en Always fueron ejecutadas por los reconocidos pilotos:
Steve Hinton y Dennis Lynch, propietario del a-26.
Otras aeronaves que sobresalen, fueron:
Aeronca 7AC Champion, Bellanca 8KCAB Super Decathlon, Beechcraft Model 18, Cessna 337 Super Skymaster, Cessna 340, Consolidated PBY-5A Catalina, de Havilland Canada DHC-6-300 Twin Otter, Douglas C-54 Skymaster, Fairchild C-119C Flying Boxcar, McDonnell Douglas DC-10, y North American B-25J Mitchell.
Y 2 helicópteros:
Bell 206 Jet Ranger, y Bell UH-1B Iroquois.
De las actuaciones, no hay quejas:
Richard Dreyfuss, Holly Hunter, y John Goodman, bordan sus papeles, entendiéndolos de sobremanera, haciendo que Always, en ningún momento aburra, y que el espectador mantenga el interés en el argumento, a pesar de todo el cliché mostrado.
Mención especial para la legendaria Audrey Hepburn, que en su último papel en el cine, con sus 5 minutos, bastan para llenar la pantalla con su presencia, siendo este, el último papel perfecto para ella, una preciosa despedida, el del ángel que siempre fue.
Y es también una pena, que Always fuese la cinta con la que la mítica y delicada Audrey Hepburn, cerrase su carrera.
Una pequeña aparición, 4 años antes del fallecimiento de esta gran actriz, y figura del mundo del cine, que será la única razón por la que dentro de muchos años, Always pueda ser recordada.
Sobre Brad Johnson… no decir que es excelente, pero solo cumple su papel de “bombón”
De Always, me quedo con toda esa parte que trata sobre la relación de amor entre los protagonistas, desde el comienzo, hasta todo lo que ocurre tras el accidente...
Sin embargo, tiene algunos altibajos, sobre todo cuando el personaje al que da vida Richard Dreyfuss, comienza su nueva “vida”, y conoce al piloto al que debe ayudar, me parece que es esa parte intenta tener un toque más cómico y ligero, que no acaba de convencer, y se trae abajo todo el interés romántico de la pareja.
Destacaría también, el comienzo y el final, sin duda, 2 de los mejores tramos de todo el metraje, junto con alguna escena intermedia, siendo donde más se nota la mano de Spielberg, en la parte de la fantasía.
No obstante, todo en Always suena a ya visto, o ya recorrido, y además de todo, hay que remarcar que hay quizás demasiado humor absurdo, que no suma, y que resulta bastante irritante a veces.
Y a pesar de que cuente con espectaculares escenas de vuelo, pocas pero magníficamente filmadas, los momentos románticos se vuelven repetitivos, y hoy en día ha provocado que Always sea considerada, de las peores películas de Spielberg.
Los únicos momentos con personalidad e interés de la propuesta van:
Desde el encuentro de Pete ya muerto, con ese ser sobrenatural que encarna la llorada Audrey Hepburn, la secuencia en la que Pete y Ted se comunican por medio del mediador, que repentinamente ofrece un viejo alucinado, que vive en una granja abandonada; o el momento en que Ted logra “resucitar” al conductor de un autobús, que sufre un infarto, la mejor secuencia de Always, son instantes que, redondeados por el fondo sonoro creado por John Williams, y marcada por una canción muy especial, la canción de Pete y Dorinda: “Smoke Gets in Your Eyes”, interpretada por The Platters, la hacen especial.
“I can't live without it”
No soy de concluir mis notas con poemas, o letras de canciones, pero hay una pieza de Luis Fonsi, que se adapta bien al espíritu de Always…
“Nada es para siempre amor,
Hoy nos toca compartir la misma luna
Y mañana quién sabrá si hay una separación
o habrá fortuna...
Nadie sabe amor
Nadie sabe qué podrá pasar mañana.
Quiero amarte hoy
Quiero abrir todas las puertas de mi alma.
Te quiero hoy
Quiero abrirle al corazón una ventana.
Esto es amor
Y es tan grande que no cabe en mis palabras
Somos como arena y mar
Somos más que una ilusión porque no hay duda
Y esta historia de los dos
Es tan linda como nunca hubo ninguna”

“I know now, that the love we hold back is the only pain that follows us here”



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