American Sniper
“Would you be surprised if I told you that Navy has credited you with... over 160 kills?”
Antes de la aparición de las armas de fuego, los soldados como los arqueros, eran entrenados como tiradores de élite.
La definición tradicional de un francotirador o “sniper” es la de un soldado de infantería, experto en tareas de camuflaje, y tirador de élite, que dispara con arma, normalmente un fusil, a grandes distancias, y desde un lugar oculto, a objetivos seleccionados.
Típica e idealmente, un francotirador hábil, se acerca al enemigo que desconoce su presencia, utiliza 1 o 2 balas por cada blanco, y se retira sin ser visto…
Como dato, los francotiradores, son entrenados para apretar el gatillo con la superficie del dedo hacia atrás, a fin de evitar que el arma se mueva.
La posición con más precisión es tumbado, o decúbito, con una bolsa de arena apoyando la culata, y la mejilla pegada a ésta.
En terreno, se puede utilizar un bípode en su lugar.
Generalmente, la meta de un francotirador en guerra, es reducir la capacidad de lucha del enemigo, abatiendo un número pequeño de blancos importantes, como son los oficiales.
Específicamente, los francotiradores del Reino Unido, Estados Unidos, y doctrinas derivadas, tienen desplegados a equipos de 2 hombres, que consisten en un francotirador, y un observador.
Ambos tienen diferentes funciones y, por tanto, su asignación corresponde a sus habilidades, pero es una práctica común, que se intercambien los papeles, para evitar la fatiga ocular.
Las misiones típicas incluyen:
Reconocimiento, vigilancia, tareas contra francotiradores enemigos, eliminar comandantes enemigos, seleccionar objetivos de oportunidad, e incluso, eliminar equipo militar, lo que requiere el uso de fusiles de grandes calibres, como el .50 BMG, y el .338 Lapua Magnum.
Recientemente, se ha demostrado que los francotiradores, son útiles en las fuerzas estadounidenses y británicas, en La Guerra de Irak, como fuego de apoyo para cubrir el movimiento de tropas, especialmente, en zonas urbanas.
Los Marines de los EEUU, emplearon en La Operación Tormenta del Desierto, francotiradores con fusiles Barrett de calibre .50; 12,7 mm; consiguiendo destruir vehículos blindados de mando, y de reconocimiento iraquíes, a una distancia de 1600 m.
Igualmente, desplegaron unos 600 fusiles Remington M24, de 7,62 mm, con buenos resultados confirmados, a una distancia de 1200 m.
Christopher Scott Kyle, fue un militar estadounidense, perteneciente a The United States Navy Sea, Air and Land, o “SEAL”, famoso por ser el francotirador más letal de la historia militar estadounidense, siendo apodado como “El Demonio de Ramadi” o “Al-Shaitan Ramad” por los iraquíes, durante La Invasión de Irak de 2003, y las posterior guerra.
Christopher Kyle, nació en Odessa, en el estado de Texas, en 1974, era hijo de un matrimonio religioso, que se dedicaba a las labores de granja.
A los 8 años, Chris Kyle recibió como regalo, un rifle Springfield para niños, y se aficionó junto a su padre, en la caza furtiva de aves de presa y ciervos de su comarca, desarrollando una gran aptitud para el manejo efectivo de un arma.
Intentó ganarse la vida como cowboy de rodeo de exhibición en su estado; pero un accidente grave en un brazo, lo retiró de los rediles.
En 1998, Chris entonces, intentó enrolarse en La Marina de los Estados Unidos, con la intención de formarse como un SEAL; pero la lesión de su brazo, causó que fuera desestimado en un principio.
Sin embargo, gracias a contactos dentro de La Marina, Chris Kyle tuvo otra oportunidad, y fue admitido para el curso de SEAL, en la especialidad de francotirador, en 1999, siendo este, su segundo intento.
Ese mismo año, Kyle es enviado como parte de la compañía Charlie del equipo N°3 de tareas de los SEAL a Irak, en el contexto de La Guerra de Irak, siendo designado a Ramadi, Anwar, y Bagdad.
Kyle realizó 4 ciclos de relevo en Irak, mientras duró esta guerra; y se convirtió en una leyenda viva entre Los Marines, por lograr unas 255 muertes de insurgentes iraquíes; pero en El Pentágono, solo se le acreditaron 150 muertes, convirtiéndolo en “el francotirador más letal de los Estados Unidos”
Kyle, efectuó en Ramadi, acciones mortíferas en su especialidad, logrando dar en el blanco, a una distancia de 2,100 m, cuando un joven insurgente se dirigía con un RPG, a un convoy de EEUU en marcha.
Otra de sus acciones, fue matar a una mujer con un bebé en brazos, que portaba una granada, y que se acercaba confundida entre la muchedumbre, a un grupo de soldados de EEUU.
Fue entonces, que el francotirador se ganó el apodo de “El Satán de Ramadi” por los insurgentes iraquíes.
En la segunda batalla por la ciudad de Fallujah, Kyle hizo en un solo día, 40 muertes de insurgentes, por lo que los iraquíes pusieron un precio por su cabeza, con una recompensa de $20,000.
Kyle, fue además herido 2 veces por disparos de otros francotiradores, y sobrevivió a 6 atentados con explosivos disimulados, mientras se trasladaba en vehículos de La Marina; y por sus actos, ganó 2 medallas de plata, y 5 de bronce, al valor...
A lo largo de su servicio, Kyle utilizó diversos modelos de rifle para sus operaciones:
Un McMillan TAC-338, un MK-12, o una Carabina M4, empleando munición especial para larga distancia, como la .338 Lapua-Magnum, o la .300 Winchester Magnum.
Kyle permaneció 10 años en los SEAL de La Marina hasta el 2009, retirándose para poder salvar su matrimonio con su esposa Taya, con quien tenía 2 hijos.
Kyle, fue entrevistado numerosas veces, y siempre defendió su labor en Irak, con la premisa de que, por cada baja de un insurgente iraquí, salvaba varias vidas de estadounidenses, y que no consideraba a sus víctimas como personas…
“La primera vez, ni siquiera estás seguro de que puedas hacerlo.
Pero yo no estaba allí, mirando a esas personas como personas.
No me preguntaba si tenían familia.
Solo estaba tratando de mantener a mi gente a salvo” dijo el francotirador.
De regreso a EEUU, Kyle contribuyó al establecimiento de la organización no lucrativa “FITCO Cares”, que facilitaba equipo para hacer ejercicio en casa, a veteranos que tuvieran problemas emocionales o motrices, por heridas de guerra.
Y fundó una empresa de seguridad privada paramilitar y civil, llamada “Craft International”
Además, escribió un libro autobiográfico llamado:
“American Sniper: The Autobiography Of The Most Lethal Sniper In U.S. Military History” (2012), escrito junto a Scott McEwen y Jim DeFelice; donde relata sus experiencias en Irak, que resultó todo un éxito de ventas.
“Dedico este libro también, a la memoria de mis hermanos del Navy SEAL, Mark y Ryan, rindiendo homenaje a su valiente servicio a la patria, y a nuestra amistad inmortal.
En lo que me queda de vida, mi corazón sangrará por su muerte”, escribía Kyle en el prólogo.
Chris Kyle, en múltiples ocasiones, fue comparado con un personaje legendario de La Guerra de Vietnam, el francotirador, Carlos Hathcock.
El “Hathcock de nuestros días”, como le llamaban a Kyle los profesionales, no pretendía superar a su predecesor legendario, que causó en el bando enemigo, 96 bajas confirmadas.
Se daba cuenta perfectamente, de que las armas de exterminio, han evolucionado muchísimo desde los años 70; o sea, ahora es mucho más fácil matar...
“Estuve utilizando una computadora de balística, que me decía todo lo que tenía que hacer.
Era un simple mono con el rifle en las manos”, anotó modestamente el héroe en sus memorias.
Y muchos le admiraban…
“Un valiente soldado y patriota, Chris Kyle habla sin reservas de su misión, sus problemas personales, y de una elección difícil, que tiene que afrontar a diario, un francotirador de la unidad de elite de La Marina estadounidense”, dijo de su libro, uno de sus antiguos comandantes.
Los admiradores del héroe, le llamaban:
“Un ejemplo del servicio a la patria”
Chris aseguraba en sus memorias, que su único objetivo eran los insurgentes, ya que por matar a un civil en Irak, sería juzgado de inmediato por un Tribunal Militar:
“Un disparo injustificado, y te acusan del asesinato” dijo; y creía que la misión de EEUU en Irak, era absolutamente necesaria.
El regreso a la vida normal, fue muy duro:
Las primeras palabras de agradecimiento en el libro, son para su mujer, y sus 2 hijos que “le ayudaron a superar todo esto”
No obstante, el sábado 2 de febrero de 2013, Kyle y un amigo llamado Chad Littlefield, estaban practicando en un campo de tiro en Rough Creek Lodge, en Glen Rose, Texas, a eso de las 15 horas; cuando fueron asesinados a tiros de larga distancia, con un arma automática, a las 17 horas.
El autor de los disparos, fue identificado como Eddie Routh, que vivía en Lancaster, según El Departamento de Seguridad de Texas.
Los motivos de Routh, no están claros aún, y son motivo de investigación; pero cabe decir que Routh fue un ex Marine, que también estuvo destinado en Irak en el mismo período de Kyle.
Por otro lado, al momento de su muerte, Kyle tenía pendiente un proceso judicial para el 1 de agosto de 2013, en el que estaba envuelto el gobernador de Minnesota, Jesse Ventura, por un caso de difamación.
Así pues, en sus 4 despliegues en Irak, Chris Kyle había sido alcanzado en 2 ocasiones, y herido en 6 explosiones diferentes de bombas caseras.
Era un hombre con suerte en el campo de batalla.
Con 3 estrellas de plata, y 5 de bronce, era uno de los mejores, y más condecorados SEAL de la historia, pero fue asesinado por Routh, en Fort Worth, Texas, el que se presupone que debe ser uno de los lugares más seguros del mundo.
Tras un servicio religioso en su memoria, celebrado en el estadio de los Dallas Cowboys en Arlington, su cuerpo fue trasladado desde Midlothian, al cementerio estatal de Austin, en un desfile funerario, acompañado de miles de personas, durante más de 300 kilómetros.
Cientos de residentes locales, y de fuera del estado, se alinearon en la Interestatal 35, para ver la procesión, y pagar sus últimos respetos a Kyle.
“You're my husband, you're the father of my children.
Even when you're here, you're not here.
I see you, I feel you, but you're not here”
American Sniper es una película bélica, del año 2014, dirigida por Clint Eastwood.
Protagonizada por Bradley Cooper, Sienna Miller, Luke Grimes, Jake McDorman, Kyle Gallner, Keir O'Donnell, Eric Close, Sam Jaeger, Owain Yeoman, Brian Hallisay, Marnette Patterson, Cory Hardrict, Joel Lambert, Eric Ladin, Madeleine McGraw, entre otros.
El guión es de Jason Dean Hall; y se basa en la autobiografía de Chris Kyle:
“American Sniper: The Autobiography Of The Most Lethal Sniper In U.S. Military History” (2012)
Chris Kyle, el francotirador más letal en la historia militar de Estados Unidos, fue un tejano con el récord de muertes, como francotirador del ejército.
Pero había mucho más acerca de este verdadero héroe, que su habilidad con un rifle.
El 24 de mayo de 2012, se anunció que Warner Bros., adquirió los derechos del libro con Bradley Cooper, conjunto para producir y protagonizar la película; y el 21 de agosto de 2013, se informó de que Clint Eastwood sería quien la dirigiría.
Kevin Lacz, un ex SEAL de La Marina, es la imagen de sí mismo, y que sirve como asesor técnico.
Otro, ex SEAL de La Marina, Joel Lambert, también se unió a American Sniper; que interpreta un francotirador Delta.
El rodaje, comenzó el 31 de marzo de 2014, en Los Angeles; también fue parcialmente rodada en Marruecos, y Afganistán.
American Sniper obtuvo 6 nominaciones al Oscar:
Mejor película, actor (Bradley Cooper), guión adaptado, sonido, mezcla de sonido y montaje.
Ganó solo Mejor Sonido.
Así las cosas, American Sniper sigue al y francotirador Chris Kyle (Bradley Cooper), cuando es enviado a Irak, con una sola misión:
Proteger a sus hermanos de armas.
Su precisión milimétrica, ahorra incontables vidas en el campo de batalla y, debido a las historias de sus valerosas hazañas, se gana el apodo de “Leyenda”
Sin embargo, su reputación también está creciendo tras las líneas enemigas, poniendo un precio a su cabeza, y haciendo de él, un blanco principal de los insurgentes.
Al mismo tiempo, también se está enfrentando a otra batalla en casa:
Ser un buen marido de Taya Renae Kyle (Siena Miller), y un buen padre de familia, desde el otro lado del mundo.
A pesar del peligro, así como la falta a su familia en su casa, Chris sirve a través de 4 recorridos desgarradoras de servicio en Irak, convirtiéndose en el emblemático del credo SEAL:
“Dejar a nadie atrás”
Pero al regresar a casa, Chris considera que la guerra que no la puede dejar atrás...
American Sniper es una devastadora película bélica, y una devastadora película antibélica; posee la turbia ambigüedad, sobre la violencia que se ha mostrado repetidamente en el trabajo de Eastwood; y da para cometarios ambivalentes.
“I was just protecting my guys, they were trying to kill... our soldiers and I...
I'm willing to meet my Creator and answer for every shot that I took”
A los 84 años, el director Clint Eastwood, entrega otro provocador drama, acerca de los desafíos morales de la guerra moderna.
Un retrato engañosamente sencillo, sobre la vida del condecorado tirador, Chris Kyle.
Con American Sniper, el director entrega otra obra maestra, a su muy destacada filmografía.
En lo técnico, está muy bien fotografiada, muy buenos los encuadres, siempre presentando un ritmo nunca cae, y mantiene un suspenso inusitado, algo mucho más fino y mejor narrado que La Saga de Kathryn Bigalow sobre Irak.
La obra, es la desmitificación del heroísmo, y las ironías de la vida; presentado de forma cruda y gráfica, las acciones y los sentimientos de la vida misma.
Como toda obra del otrora “uomo senza nome”, que debe ser vista y analizada, tanto en cumbres políticas, como en reuniones de vecinos.
En lo que respecta al reparto, American Sniper presenta una magnífica interpretación de Bradley Cooper, que es el centro de la desgarradora y reflexiva dramatización de la vida del Navy SEAL, Chris Kyle.
Como dato decir que Bradley Cooper arriesgó su salud por su papel, pues tuvo que someterse a un entrenamiento físico, y a una dieta muy estricta, para poder parecerse al personaje que iba a interpretar.
Alejado totalmente de la comedia, Cooper demuestra el magnífico actor dramático que es en American Sniper, totalmente inmerso en el personaje, que además está secundado por una correcta Sienna Miller.
Como curiosidad, notar las veces que aparece la letra K entre los nombres o apellidos del reparto:
Luke Grimes, Jake McDorman, Kyle Gallner, Keir O'Donell…
El libro en que se basa American Sniper, es un auténtico recorrido por la personalidad de un operador SEAL, que reunía los valores típicos de un texano:
Una fuerte religiosidad cristiana, un alto sentido del patriotismo, y de la familia; su lema era:
“Dios, Patria y Familia”, de hecho, con una enorme pasión por los caballos, y las armas, se consideraba a sí mismo, un cowboy, y un gran sentido del deber que le hacía sentirse culpable, cada vez que volvía a casa, y se ponía a pensar en sus compañeros desplegados en Irak.
Aunque en ocasiones reconoce que su trabajo le gustaba, no esconde la conmoción que le supuso ver morir en sus brazos a un joven marine, y la pérdida de algunos de sus compañeros de los SEAL.
En una de las reflexiones que hace hacia el final del libro, sobre el hecho de matar y los remordimientos que eso le provoca, vemos como no le duele haber matado a quienes amenazaban con matar a sus compañeros, pero sí le remuerde la conciencia, por las vidas de militares estadounidenses, que no consiguió salvar.
En fin, el libro es una buena aproximación a la psicología de la guerra, y al sentido moral del deber, que mueve a quienes luchan en ella, una visión muy alejada del simplón pacifismo, de quienes disfrutan de libertad, para criticar a los militares, gracias a que éstos se dejan su sangre y su vida en el frente por esa libertad…
American Sniper es también una visión texana, republicana, y profundamente “cristiana” de una guerra injusta, que partió como una mentira:
Armas de destrucción masiva, que llevó a un montón de jóvenes pobres, a tratar de defender bajo el rotulo de democracia, “Sueño Americano” y libertad, los intereses de grupos económicos, y señores de la guerra, que venden seguridad, armamentos, empresas contratistas, y todo un amplio etc.
Un negocio multimillonario, y por demás, luego que estos muchachos llegan, se usa el sentimiento de compañerismo y protección, para salvaguardar las acciones en combate.
Me pregunto, si es posible y razonable la idea de un Dios tan comprensivo con el “deber” de un francotirador, aunque éste pertenezca al ejército “más poderoso del planeta”, que se permite invadir cualquier país, en función de sus intereses, y hacernos creer que “nos defiende de los malos”
También me pregunto, cómo un hombre puede estar tan seguro de no equivocarse, al decidir disparar a una persona desde 1,800 metros de distancia…
Cómo puede decidir, que esa persona es “tu enemigo”, cómo puede decidir que esa persona debe morir... cómo puede dormir por la noche… En un artículo de opinión de “Salon”, la escritora Laura Miller, expresó su disgusto por la actitud de Kyle, diciendo:
“En “American Sniper”, Kyle describe el asesinato como “diversión”, y algo que él “amaba” hacer.
Este placer, era sin duda facilitado por su absoluta convicción, de que cada persona que disparó, era un “chico malo”
Fallujah y Ramadi, donde vio la mayoría de la acción, y había más insurgentes y militantes islámicos extranjeros; Kyle jura, que todo hombre que fue casado con su rifle de francotirador, era para nada bueno.
Pero su sed de sangre, y la indiferencia general para con los iraquíes, y su país, no sugieren que él estaba muy motivado para asegurarlo.
“Yo no disparé personas con coranes”, Kyle réplica a un investigador del Ejército, cuando fue acusado de matar a un civil iraquí.
“Me gustaría, pero no lo sé”
Más tarde, en American Sniper, anuncia:
“Yo no doy una mierda por los iraquíes”
“Odio a los malditos salvajes”, explica.
Por otro lado, no me convenzo, y no quiero creer, que alguien cristiano con él, pueda creer que con un fusil especial, un “sniper” se vuelva un héroe.
¿Alguien letal, en el término cristiano?
Donde la muerte y la guerra, parecen tan normales, como ir al patio a jugar con los niños.
Hay efectos secundarios, que afectan a los soldados.
Por supuesto, matas personas, no se trata de un pollo, o como dice el mismo Kyle en su libro:
“Ciervos, codornices, etc.”
El deber de un soldado, es defender a los ciudadanos, proteger al pueblo, o pueblos, la acción militar directa, es el último recurso, cuando todo lo demás falla...
Si Kyle lo hubiera sabido, se habría preguntado antes de entrar en combate, que significa el mandamiento:
“No Matarás”
No se es mejor, porque se es letal, se es un verdadero héroe, cuando soy un pacificador, cuando ante la agresión, busco las armas de la justicia y el derecho, y no agarrarme a balazos…
¿Es American Sniper, entretención o burda propaganda para justificar los errores y excesos de nuestras democracias?
Clint Eastwood pone el tema de discusión sobre la mesa.
Por otro lado, este tipo de personas capaces, mentalmente y moralmente, que procuran los mejor para los suyos, que se responsabilizan de alcanzar la victoria por encima del enemigo, sin preguntar nada, ni caer en falsas tentaciones, estas personas hacen que un país como Estados Unidos, esté en la posición que está.
Compromiso, es así de simple, no es un monstruo, el que defiende a su país y a su gente, al igual que no es un monstruo, el granjero que mata a los buitres para evitar que dañen su ganado…
Pero claro, todo depende del punto de vista del prisma con que se mire, para los EEUU, es un héroe; y para las familias de las personas que mató, es un demonio y un enemigo, pero:
¿Quién lleva razón?
Estos días, cuando se debate sobre el control de armas, este caso es uno de los que más ha llamado la atención en Estados Unidos.
Al debate sobre las armas, se une la ironía de que un francotirador de Las Fuerzas Armadas, encuentre la muerte en casa, y a todo esto se añade, el estigma del estrés postraumático, que los soldados sufren cuando vuelven de la guerra.
Los estadounidenses, se hacen muchas preguntas:
¿Por qué a Eddie Ray Routh, el asesino de Chris Kyle, se le permitió la entrada a ese campo de tiro?
¿Por qué se le dejó manejar un arma, teniendo en cuenta sus antecedentes psicológicos?
¿Por qué Kyle, pensó que lo mejor que se podía hacer para ayudarle, era llevarle a un campo de tiro?
Porque nos hemos olvidado de una de las frases de ese gran estadista, Abraham Lincoln:
“Ningún hombre es demasiado bueno, para gobernar a otro sin su consentimiento”
“The thing that... haunts me are all the guys that I couldn't save”
La guerra, siempre tiene consecuencias, y todos los implicados en ella, han de pagar un precio, sea el que sea.
De 38 años, Kyle fue asesinado a tiros junto a otro hombre identificado como Chad Littlefield, de 35 años, en una tarde de sábado, en un campo de tiro en Glen Rose, de acuerdo con El Departamento de Seguridad Pública de Texas.
Tras el tiroteo, Eddie Ray Routh, cogió el camión de Kyle, y se dirigió a casa de su hermana, a quien contó lo sucedido.
Cuando Routh se marchó, la mujer llamó a la policía, afirmó el portavoz, Lonny Haschel.
Posteriormente, los empleados del campo de tiro, encontraron los cuerpos de las víctimas, en un control rutinario.
La policía, arrestó poco después a Eddie Routh, de 25 años, como sospechoso de ambas muertes.
Chris Kyle, se había reunido por primera vez con su supuesto asesino, Eddie Ray Routh, también veterano de Irak, a petición de la madre de éste.
La mujer, no sabía cómo ayudar al hijo, sumido en una profunda depresión.
“Es posible que Routh padezca enfermedades mentales, tras sus experiencias de combate”, comentó Tommy Bryant, Sheriff del condado de Erath.
Según la policía, se cree que en la tarde del sábado, Kyle se había reunido con Routh, precisamente para darle apoyo, ya que desde que dejó los marines, no había encontrado empleo, y en su expediente existe una detención por conducir borracho…
Así las cosas, Routh, fue acusado formalmente, el sábado en la noche, de 2 cargos de homicidio calificado.
Sin embargo, se desconoce por qué Routh mató a tiros a Kyle y Littlefield.
El agente, Kyle Roberts, de la prisión del condado de Erath, dijo que Routh fue traído a la instalación el domingo en la mañana, y le fue fijada una fianza de $3 millones.
Del total de la fianza, $1 millón corresponden a un cargo de homicidio calificado, y $1 millón por cada cargo, un total de 2, por homicidio.
Por otra parte, a lo largo de su vida, el ex luchador y político, Jesse Ventura, ha dejado claro, ser un hombre al cual le gusta dar de qué hablar.
Veterano de La Marina, ex combatiente de lucha libre profesional, ex Gobernador de Minnesota, e invitado constante en programas de radio y televisión; Ventura ha sido un luchador/político, cercano a los reflectores.
El pasado 12 de octubre del año 2006, surgió una polémica sobre una supuesta pelea de bar en la ciudad de San Diego, California. Al parecer, esa noche, el bar estaba repleto de miembros de La Marina de los Estados Unidos; reunidos principalmente, por la muerte de un compañero en La Guerra de Irak.
El marine, Chris Kyle, y el veterano de guerra Jesse Ventura, estaban ahí esa noche.
Kyle relata, que Ventura estuvo criticando La Guerra de Irak, en un contexto sumamente inapropiado, diciendo inclusive, que La Marina de Estados Unidos, merecía perder algunos hombres.
Al no cesar sus críticas, pese a haberle solicitado hacerlo, Kyle explica, decidió darle un golpe a Ventura, con lo cual, el ex Gobernador terminó en el suelo...
Ventura dijo, que todo era una gran mentira, explicó que jamás había estado criticando a La Marina, y que tampoco había recibido ningún golpe por parte de Kyle.
El verdadero problema surgió, cuando Chris Kyle decidió escribir sus memorias:
En el libro autobiográfico, que rápidamente se convirtió en best seller, Kyle relata el curioso acontecimiento de la noche, en ese bar de San Diego.
Por lo que el ex gobernador de Minnesota, Jesse Ventura, demandó a Kyle por una porción del libro, en la que asevera que Kyle golpeó a Ventura durante una riña, y por haber hecho comentarios antipatriotas.
Ventura aseguró, que nunca ocurrió tal golpe, y que Kyle lo difamó...
En sus memorias, escribió que tuvo un encuentro con Jesse Ventura en 2006, el cual se mofó de él, y de los Navy SEAL, soltando un “los Navy SEAL merecen que caigan unos cuantos de ellos en Irak, por tanto asesinato de civiles”
Por esto, el ex-luchador y leyenda, supuestamente recibió un puñetazo.
Ventura, siempre ha negado estos hechos, y sobretodo, insultar a los Navy SEAL, pues él fue miembro de los SEAL.
Kyle, había solicitado que se desecharan los reclamos de Ventura, sobre invasión de privacidad, y enriquecimiento injusto, a expensas de otro, diciendo que no tenían sustento jurídico.
Sin embargo, un juez federal dijo, que la demanda debía seguir...
A la muerte de Kyle, la viuda Taya, sería la actual acusada…
En el juicio, las 2 partes habían traído testigos, que refutaban las 2 versiones, pero el juez ha creído, que la parte del escritor, era poco creíble...
Algunos escucharon a Ventura realizar las críticas, otros no lo escucharon decir nada malo; algunos lo vieron caer tras el puñetazo, otros ni siquiera vieron golpe alguno. En un descargo que realizó en el mes de noviembre, Ventura comentó, que sus ofertas de trabajo se esfumaron, después que fue publicado el libro, y que estaba preocupado, ya que no quería ser considerado como un traidor al Ejército.
También dijo, que la publicidad que Kyle recibió de las entrevistas, acerca del supuesto incidente con Ventura, le ayudó a las ventas de su libro, y dio lugar a que se filmara American Sniper.
La defensa argumenta en los documentos de la corte, que el público aceptó el libro de Kyle, por razones “que no tienen ninguna relación con el incidente con Ventura” y que el libro ha tenido más éxito, que cualquiera que haya escrito Ventura...
Una gran cantidad de dinero podría estar en juego en este juicio...
Los documentos de la corte muestran, que el libro de Kyle ha ganado regalías por más de $3 millones, hasta el 30 de junio del 2013, y que el juez determinó, que las ganancias de una próxima película, podrían estar sujetas al pago de daños…
Luego de varios meses, la justicia se hizo presente en el caso Jesse Ventura, contra Chris Kyle, dando la razón al ex gobernador de Minnesota, por ser víctima de los delitos de difamación e injuria.
Por eso, Jesse Ventura ha ganado este juicio, y el juez Richard Kyle, que no es familiar del difunto; ha puesto una multa de $1,8 millones, de medio millón por difamación, y $1,3 millones por lucrarse a través de su libro con esta historia.
Según los datos oficiales del Pentágono, 1 de cada 5 militares estadounidenses, que participaron en las misiones de Irak, y Afganistán, sufre de Trastorno de Estrés Post Traumático.
En los últimos 6 años, el número de personas a las que se les había diagnosticado oficialmente este síndrome, ascendió a más de 300,000.
De momento, Eddie Ray Routh, que ya intentó atacar a los guardias carcelarios, se encuentra bajo estricta vigilancia, en una celda individual.
Hasta ahora, el joven no se ha arrepentido, ni explicado el por qué había disparado contra Kyle.
Si le declaran culpable, su suerte está echada:
La ley de Texas prevé la pena capital por el asesinato.
Tal vez, Eddie Routh, también hubiera podido convertirse en el héroe nacional…
Tal vez lo hubiera sido en aquella guerra, cuyos motivos seguramente no comprendía.
Al regresar a casa, como otros miles de ex combatientes en Irak y Afganistán, no pudo encontrar ningún trabajo.
No sabía cómo seguir.
Sólo sabía matar, como miles de soldados estadounidenses en esa guerra…
Una guerra que quizás, fuera una especie de psicoterapia para una nación que ya había vivido el 9/11
“If you think that this war isn't changing you you're wrong.
You can only circle the flames so long”
Antes de la aparición de las armas de fuego, los soldados como los arqueros, eran entrenados como tiradores de élite.
La definición tradicional de un francotirador o “sniper” es la de un soldado de infantería, experto en tareas de camuflaje, y tirador de élite, que dispara con arma, normalmente un fusil, a grandes distancias, y desde un lugar oculto, a objetivos seleccionados.
Típica e idealmente, un francotirador hábil, se acerca al enemigo que desconoce su presencia, utiliza 1 o 2 balas por cada blanco, y se retira sin ser visto…
Como dato, los francotiradores, son entrenados para apretar el gatillo con la superficie del dedo hacia atrás, a fin de evitar que el arma se mueva.
La posición con más precisión es tumbado, o decúbito, con una bolsa de arena apoyando la culata, y la mejilla pegada a ésta.
En terreno, se puede utilizar un bípode en su lugar.
Generalmente, la meta de un francotirador en guerra, es reducir la capacidad de lucha del enemigo, abatiendo un número pequeño de blancos importantes, como son los oficiales.
Específicamente, los francotiradores del Reino Unido, Estados Unidos, y doctrinas derivadas, tienen desplegados a equipos de 2 hombres, que consisten en un francotirador, y un observador.
Ambos tienen diferentes funciones y, por tanto, su asignación corresponde a sus habilidades, pero es una práctica común, que se intercambien los papeles, para evitar la fatiga ocular.
Las misiones típicas incluyen:
Reconocimiento, vigilancia, tareas contra francotiradores enemigos, eliminar comandantes enemigos, seleccionar objetivos de oportunidad, e incluso, eliminar equipo militar, lo que requiere el uso de fusiles de grandes calibres, como el .50 BMG, y el .338 Lapua Magnum.
Recientemente, se ha demostrado que los francotiradores, son útiles en las fuerzas estadounidenses y británicas, en La Guerra de Irak, como fuego de apoyo para cubrir el movimiento de tropas, especialmente, en zonas urbanas.
Los Marines de los EEUU, emplearon en La Operación Tormenta del Desierto, francotiradores con fusiles Barrett de calibre .50; 12,7 mm; consiguiendo destruir vehículos blindados de mando, y de reconocimiento iraquíes, a una distancia de 1600 m.
Igualmente, desplegaron unos 600 fusiles Remington M24, de 7,62 mm, con buenos resultados confirmados, a una distancia de 1200 m.
Christopher Scott Kyle, fue un militar estadounidense, perteneciente a The United States Navy Sea, Air and Land, o “SEAL”, famoso por ser el francotirador más letal de la historia militar estadounidense, siendo apodado como “El Demonio de Ramadi” o “Al-Shaitan Ramad” por los iraquíes, durante La Invasión de Irak de 2003, y las posterior guerra.
Christopher Kyle, nació en Odessa, en el estado de Texas, en 1974, era hijo de un matrimonio religioso, que se dedicaba a las labores de granja.
A los 8 años, Chris Kyle recibió como regalo, un rifle Springfield para niños, y se aficionó junto a su padre, en la caza furtiva de aves de presa y ciervos de su comarca, desarrollando una gran aptitud para el manejo efectivo de un arma.
Intentó ganarse la vida como cowboy de rodeo de exhibición en su estado; pero un accidente grave en un brazo, lo retiró de los rediles.
En 1998, Chris entonces, intentó enrolarse en La Marina de los Estados Unidos, con la intención de formarse como un SEAL; pero la lesión de su brazo, causó que fuera desestimado en un principio.
Sin embargo, gracias a contactos dentro de La Marina, Chris Kyle tuvo otra oportunidad, y fue admitido para el curso de SEAL, en la especialidad de francotirador, en 1999, siendo este, su segundo intento.
Ese mismo año, Kyle es enviado como parte de la compañía Charlie del equipo N°3 de tareas de los SEAL a Irak, en el contexto de La Guerra de Irak, siendo designado a Ramadi, Anwar, y Bagdad.
Kyle realizó 4 ciclos de relevo en Irak, mientras duró esta guerra; y se convirtió en una leyenda viva entre Los Marines, por lograr unas 255 muertes de insurgentes iraquíes; pero en El Pentágono, solo se le acreditaron 150 muertes, convirtiéndolo en “el francotirador más letal de los Estados Unidos”
Kyle, efectuó en Ramadi, acciones mortíferas en su especialidad, logrando dar en el blanco, a una distancia de 2,100 m, cuando un joven insurgente se dirigía con un RPG, a un convoy de EEUU en marcha.
Otra de sus acciones, fue matar a una mujer con un bebé en brazos, que portaba una granada, y que se acercaba confundida entre la muchedumbre, a un grupo de soldados de EEUU.
Fue entonces, que el francotirador se ganó el apodo de “El Satán de Ramadi” por los insurgentes iraquíes.
En la segunda batalla por la ciudad de Fallujah, Kyle hizo en un solo día, 40 muertes de insurgentes, por lo que los iraquíes pusieron un precio por su cabeza, con una recompensa de $20,000.
Kyle, fue además herido 2 veces por disparos de otros francotiradores, y sobrevivió a 6 atentados con explosivos disimulados, mientras se trasladaba en vehículos de La Marina; y por sus actos, ganó 2 medallas de plata, y 5 de bronce, al valor...
A lo largo de su servicio, Kyle utilizó diversos modelos de rifle para sus operaciones:
Un McMillan TAC-338, un MK-12, o una Carabina M4, empleando munición especial para larga distancia, como la .338 Lapua-Magnum, o la .300 Winchester Magnum.
Kyle permaneció 10 años en los SEAL de La Marina hasta el 2009, retirándose para poder salvar su matrimonio con su esposa Taya, con quien tenía 2 hijos.
Kyle, fue entrevistado numerosas veces, y siempre defendió su labor en Irak, con la premisa de que, por cada baja de un insurgente iraquí, salvaba varias vidas de estadounidenses, y que no consideraba a sus víctimas como personas…
“La primera vez, ni siquiera estás seguro de que puedas hacerlo.
Pero yo no estaba allí, mirando a esas personas como personas.
No me preguntaba si tenían familia.
Solo estaba tratando de mantener a mi gente a salvo” dijo el francotirador.
De regreso a EEUU, Kyle contribuyó al establecimiento de la organización no lucrativa “FITCO Cares”, que facilitaba equipo para hacer ejercicio en casa, a veteranos que tuvieran problemas emocionales o motrices, por heridas de guerra.
Y fundó una empresa de seguridad privada paramilitar y civil, llamada “Craft International”
Además, escribió un libro autobiográfico llamado:
“American Sniper: The Autobiography Of The Most Lethal Sniper In U.S. Military History” (2012), escrito junto a Scott McEwen y Jim DeFelice; donde relata sus experiencias en Irak, que resultó todo un éxito de ventas.
“Dedico este libro también, a la memoria de mis hermanos del Navy SEAL, Mark y Ryan, rindiendo homenaje a su valiente servicio a la patria, y a nuestra amistad inmortal.
En lo que me queda de vida, mi corazón sangrará por su muerte”, escribía Kyle en el prólogo.
Chris Kyle, en múltiples ocasiones, fue comparado con un personaje legendario de La Guerra de Vietnam, el francotirador, Carlos Hathcock.
El “Hathcock de nuestros días”, como le llamaban a Kyle los profesionales, no pretendía superar a su predecesor legendario, que causó en el bando enemigo, 96 bajas confirmadas.
Se daba cuenta perfectamente, de que las armas de exterminio, han evolucionado muchísimo desde los años 70; o sea, ahora es mucho más fácil matar...
“Estuve utilizando una computadora de balística, que me decía todo lo que tenía que hacer.
Era un simple mono con el rifle en las manos”, anotó modestamente el héroe en sus memorias.
Y muchos le admiraban…
“Un valiente soldado y patriota, Chris Kyle habla sin reservas de su misión, sus problemas personales, y de una elección difícil, que tiene que afrontar a diario, un francotirador de la unidad de elite de La Marina estadounidense”, dijo de su libro, uno de sus antiguos comandantes.
Los admiradores del héroe, le llamaban:
“Un ejemplo del servicio a la patria”
Chris aseguraba en sus memorias, que su único objetivo eran los insurgentes, ya que por matar a un civil en Irak, sería juzgado de inmediato por un Tribunal Militar:
“Un disparo injustificado, y te acusan del asesinato” dijo; y creía que la misión de EEUU en Irak, era absolutamente necesaria.
El regreso a la vida normal, fue muy duro:
Las primeras palabras de agradecimiento en el libro, son para su mujer, y sus 2 hijos que “le ayudaron a superar todo esto”
No obstante, el sábado 2 de febrero de 2013, Kyle y un amigo llamado Chad Littlefield, estaban practicando en un campo de tiro en Rough Creek Lodge, en Glen Rose, Texas, a eso de las 15 horas; cuando fueron asesinados a tiros de larga distancia, con un arma automática, a las 17 horas.
El autor de los disparos, fue identificado como Eddie Routh, que vivía en Lancaster, según El Departamento de Seguridad de Texas.
Los motivos de Routh, no están claros aún, y son motivo de investigación; pero cabe decir que Routh fue un ex Marine, que también estuvo destinado en Irak en el mismo período de Kyle.
Por otro lado, al momento de su muerte, Kyle tenía pendiente un proceso judicial para el 1 de agosto de 2013, en el que estaba envuelto el gobernador de Minnesota, Jesse Ventura, por un caso de difamación.
Así pues, en sus 4 despliegues en Irak, Chris Kyle había sido alcanzado en 2 ocasiones, y herido en 6 explosiones diferentes de bombas caseras.
Era un hombre con suerte en el campo de batalla.
Con 3 estrellas de plata, y 5 de bronce, era uno de los mejores, y más condecorados SEAL de la historia, pero fue asesinado por Routh, en Fort Worth, Texas, el que se presupone que debe ser uno de los lugares más seguros del mundo.
Tras un servicio religioso en su memoria, celebrado en el estadio de los Dallas Cowboys en Arlington, su cuerpo fue trasladado desde Midlothian, al cementerio estatal de Austin, en un desfile funerario, acompañado de miles de personas, durante más de 300 kilómetros.
Cientos de residentes locales, y de fuera del estado, se alinearon en la Interestatal 35, para ver la procesión, y pagar sus últimos respetos a Kyle.
“You're my husband, you're the father of my children.
Even when you're here, you're not here.
I see you, I feel you, but you're not here”
American Sniper es una película bélica, del año 2014, dirigida por Clint Eastwood.
Protagonizada por Bradley Cooper, Sienna Miller, Luke Grimes, Jake McDorman, Kyle Gallner, Keir O'Donnell, Eric Close, Sam Jaeger, Owain Yeoman, Brian Hallisay, Marnette Patterson, Cory Hardrict, Joel Lambert, Eric Ladin, Madeleine McGraw, entre otros.
El guión es de Jason Dean Hall; y se basa en la autobiografía de Chris Kyle:
“American Sniper: The Autobiography Of The Most Lethal Sniper In U.S. Military History” (2012)
Chris Kyle, el francotirador más letal en la historia militar de Estados Unidos, fue un tejano con el récord de muertes, como francotirador del ejército.
Pero había mucho más acerca de este verdadero héroe, que su habilidad con un rifle.
El 24 de mayo de 2012, se anunció que Warner Bros., adquirió los derechos del libro con Bradley Cooper, conjunto para producir y protagonizar la película; y el 21 de agosto de 2013, se informó de que Clint Eastwood sería quien la dirigiría.
Kevin Lacz, un ex SEAL de La Marina, es la imagen de sí mismo, y que sirve como asesor técnico.
Otro, ex SEAL de La Marina, Joel Lambert, también se unió a American Sniper; que interpreta un francotirador Delta.
El rodaje, comenzó el 31 de marzo de 2014, en Los Angeles; también fue parcialmente rodada en Marruecos, y Afganistán.
American Sniper obtuvo 6 nominaciones al Oscar:
Mejor película, actor (Bradley Cooper), guión adaptado, sonido, mezcla de sonido y montaje.
Ganó solo Mejor Sonido.
Así las cosas, American Sniper sigue al y francotirador Chris Kyle (Bradley Cooper), cuando es enviado a Irak, con una sola misión:
Proteger a sus hermanos de armas.
Su precisión milimétrica, ahorra incontables vidas en el campo de batalla y, debido a las historias de sus valerosas hazañas, se gana el apodo de “Leyenda”
Sin embargo, su reputación también está creciendo tras las líneas enemigas, poniendo un precio a su cabeza, y haciendo de él, un blanco principal de los insurgentes.
Al mismo tiempo, también se está enfrentando a otra batalla en casa:
Ser un buen marido de Taya Renae Kyle (Siena Miller), y un buen padre de familia, desde el otro lado del mundo.
A pesar del peligro, así como la falta a su familia en su casa, Chris sirve a través de 4 recorridos desgarradoras de servicio en Irak, convirtiéndose en el emblemático del credo SEAL:
“Dejar a nadie atrás”
Pero al regresar a casa, Chris considera que la guerra que no la puede dejar atrás...
American Sniper es una devastadora película bélica, y una devastadora película antibélica; posee la turbia ambigüedad, sobre la violencia que se ha mostrado repetidamente en el trabajo de Eastwood; y da para cometarios ambivalentes.
“I was just protecting my guys, they were trying to kill... our soldiers and I...
I'm willing to meet my Creator and answer for every shot that I took”
A los 84 años, el director Clint Eastwood, entrega otro provocador drama, acerca de los desafíos morales de la guerra moderna.
Un retrato engañosamente sencillo, sobre la vida del condecorado tirador, Chris Kyle.
Con American Sniper, el director entrega otra obra maestra, a su muy destacada filmografía.
En lo técnico, está muy bien fotografiada, muy buenos los encuadres, siempre presentando un ritmo nunca cae, y mantiene un suspenso inusitado, algo mucho más fino y mejor narrado que La Saga de Kathryn Bigalow sobre Irak.
La obra, es la desmitificación del heroísmo, y las ironías de la vida; presentado de forma cruda y gráfica, las acciones y los sentimientos de la vida misma.
Como toda obra del otrora “uomo senza nome”, que debe ser vista y analizada, tanto en cumbres políticas, como en reuniones de vecinos.
En lo que respecta al reparto, American Sniper presenta una magnífica interpretación de Bradley Cooper, que es el centro de la desgarradora y reflexiva dramatización de la vida del Navy SEAL, Chris Kyle.
Como dato decir que Bradley Cooper arriesgó su salud por su papel, pues tuvo que someterse a un entrenamiento físico, y a una dieta muy estricta, para poder parecerse al personaje que iba a interpretar.
Alejado totalmente de la comedia, Cooper demuestra el magnífico actor dramático que es en American Sniper, totalmente inmerso en el personaje, que además está secundado por una correcta Sienna Miller.
Como curiosidad, notar las veces que aparece la letra K entre los nombres o apellidos del reparto:
Luke Grimes, Jake McDorman, Kyle Gallner, Keir O'Donell…
El libro en que se basa American Sniper, es un auténtico recorrido por la personalidad de un operador SEAL, que reunía los valores típicos de un texano:
Una fuerte religiosidad cristiana, un alto sentido del patriotismo, y de la familia; su lema era:
“Dios, Patria y Familia”, de hecho, con una enorme pasión por los caballos, y las armas, se consideraba a sí mismo, un cowboy, y un gran sentido del deber que le hacía sentirse culpable, cada vez que volvía a casa, y se ponía a pensar en sus compañeros desplegados en Irak.
Aunque en ocasiones reconoce que su trabajo le gustaba, no esconde la conmoción que le supuso ver morir en sus brazos a un joven marine, y la pérdida de algunos de sus compañeros de los SEAL.
En una de las reflexiones que hace hacia el final del libro, sobre el hecho de matar y los remordimientos que eso le provoca, vemos como no le duele haber matado a quienes amenazaban con matar a sus compañeros, pero sí le remuerde la conciencia, por las vidas de militares estadounidenses, que no consiguió salvar.
En fin, el libro es una buena aproximación a la psicología de la guerra, y al sentido moral del deber, que mueve a quienes luchan en ella, una visión muy alejada del simplón pacifismo, de quienes disfrutan de libertad, para criticar a los militares, gracias a que éstos se dejan su sangre y su vida en el frente por esa libertad…
American Sniper es también una visión texana, republicana, y profundamente “cristiana” de una guerra injusta, que partió como una mentira:
Armas de destrucción masiva, que llevó a un montón de jóvenes pobres, a tratar de defender bajo el rotulo de democracia, “Sueño Americano” y libertad, los intereses de grupos económicos, y señores de la guerra, que venden seguridad, armamentos, empresas contratistas, y todo un amplio etc.
Un negocio multimillonario, y por demás, luego que estos muchachos llegan, se usa el sentimiento de compañerismo y protección, para salvaguardar las acciones en combate.
Me pregunto, si es posible y razonable la idea de un Dios tan comprensivo con el “deber” de un francotirador, aunque éste pertenezca al ejército “más poderoso del planeta”, que se permite invadir cualquier país, en función de sus intereses, y hacernos creer que “nos defiende de los malos”
También me pregunto, cómo un hombre puede estar tan seguro de no equivocarse, al decidir disparar a una persona desde 1,800 metros de distancia…
Cómo puede decidir, que esa persona es “tu enemigo”, cómo puede decidir que esa persona debe morir... cómo puede dormir por la noche… En un artículo de opinión de “Salon”, la escritora Laura Miller, expresó su disgusto por la actitud de Kyle, diciendo:
“En “American Sniper”, Kyle describe el asesinato como “diversión”, y algo que él “amaba” hacer.
Este placer, era sin duda facilitado por su absoluta convicción, de que cada persona que disparó, era un “chico malo”
Fallujah y Ramadi, donde vio la mayoría de la acción, y había más insurgentes y militantes islámicos extranjeros; Kyle jura, que todo hombre que fue casado con su rifle de francotirador, era para nada bueno.
Pero su sed de sangre, y la indiferencia general para con los iraquíes, y su país, no sugieren que él estaba muy motivado para asegurarlo.
“Yo no disparé personas con coranes”, Kyle réplica a un investigador del Ejército, cuando fue acusado de matar a un civil iraquí.
“Me gustaría, pero no lo sé”
Más tarde, en American Sniper, anuncia:
“Yo no doy una mierda por los iraquíes”
“Odio a los malditos salvajes”, explica.
Por otro lado, no me convenzo, y no quiero creer, que alguien cristiano con él, pueda creer que con un fusil especial, un “sniper” se vuelva un héroe.
¿Alguien letal, en el término cristiano?
Donde la muerte y la guerra, parecen tan normales, como ir al patio a jugar con los niños.
Hay efectos secundarios, que afectan a los soldados.
Por supuesto, matas personas, no se trata de un pollo, o como dice el mismo Kyle en su libro:
“Ciervos, codornices, etc.”
El deber de un soldado, es defender a los ciudadanos, proteger al pueblo, o pueblos, la acción militar directa, es el último recurso, cuando todo lo demás falla...
Si Kyle lo hubiera sabido, se habría preguntado antes de entrar en combate, que significa el mandamiento:
“No Matarás”
No se es mejor, porque se es letal, se es un verdadero héroe, cuando soy un pacificador, cuando ante la agresión, busco las armas de la justicia y el derecho, y no agarrarme a balazos…
¿Es American Sniper, entretención o burda propaganda para justificar los errores y excesos de nuestras democracias?
Clint Eastwood pone el tema de discusión sobre la mesa.
Por otro lado, este tipo de personas capaces, mentalmente y moralmente, que procuran los mejor para los suyos, que se responsabilizan de alcanzar la victoria por encima del enemigo, sin preguntar nada, ni caer en falsas tentaciones, estas personas hacen que un país como Estados Unidos, esté en la posición que está.
Compromiso, es así de simple, no es un monstruo, el que defiende a su país y a su gente, al igual que no es un monstruo, el granjero que mata a los buitres para evitar que dañen su ganado…
Pero claro, todo depende del punto de vista del prisma con que se mire, para los EEUU, es un héroe; y para las familias de las personas que mató, es un demonio y un enemigo, pero:
¿Quién lleva razón?
Estos días, cuando se debate sobre el control de armas, este caso es uno de los que más ha llamado la atención en Estados Unidos.
Al debate sobre las armas, se une la ironía de que un francotirador de Las Fuerzas Armadas, encuentre la muerte en casa, y a todo esto se añade, el estigma del estrés postraumático, que los soldados sufren cuando vuelven de la guerra.
Los estadounidenses, se hacen muchas preguntas:
¿Por qué a Eddie Ray Routh, el asesino de Chris Kyle, se le permitió la entrada a ese campo de tiro?
¿Por qué se le dejó manejar un arma, teniendo en cuenta sus antecedentes psicológicos?
¿Por qué Kyle, pensó que lo mejor que se podía hacer para ayudarle, era llevarle a un campo de tiro?
Porque nos hemos olvidado de una de las frases de ese gran estadista, Abraham Lincoln:
“Ningún hombre es demasiado bueno, para gobernar a otro sin su consentimiento”
“The thing that... haunts me are all the guys that I couldn't save”
La guerra, siempre tiene consecuencias, y todos los implicados en ella, han de pagar un precio, sea el que sea.
De 38 años, Kyle fue asesinado a tiros junto a otro hombre identificado como Chad Littlefield, de 35 años, en una tarde de sábado, en un campo de tiro en Glen Rose, de acuerdo con El Departamento de Seguridad Pública de Texas.
Tras el tiroteo, Eddie Ray Routh, cogió el camión de Kyle, y se dirigió a casa de su hermana, a quien contó lo sucedido.
Cuando Routh se marchó, la mujer llamó a la policía, afirmó el portavoz, Lonny Haschel.
Posteriormente, los empleados del campo de tiro, encontraron los cuerpos de las víctimas, en un control rutinario.
La policía, arrestó poco después a Eddie Routh, de 25 años, como sospechoso de ambas muertes.
Chris Kyle, se había reunido por primera vez con su supuesto asesino, Eddie Ray Routh, también veterano de Irak, a petición de la madre de éste.
La mujer, no sabía cómo ayudar al hijo, sumido en una profunda depresión.
“Es posible que Routh padezca enfermedades mentales, tras sus experiencias de combate”, comentó Tommy Bryant, Sheriff del condado de Erath.
Según la policía, se cree que en la tarde del sábado, Kyle se había reunido con Routh, precisamente para darle apoyo, ya que desde que dejó los marines, no había encontrado empleo, y en su expediente existe una detención por conducir borracho…
Así las cosas, Routh, fue acusado formalmente, el sábado en la noche, de 2 cargos de homicidio calificado.
Sin embargo, se desconoce por qué Routh mató a tiros a Kyle y Littlefield.
El agente, Kyle Roberts, de la prisión del condado de Erath, dijo que Routh fue traído a la instalación el domingo en la mañana, y le fue fijada una fianza de $3 millones.
Del total de la fianza, $1 millón corresponden a un cargo de homicidio calificado, y $1 millón por cada cargo, un total de 2, por homicidio.
Por otra parte, a lo largo de su vida, el ex luchador y político, Jesse Ventura, ha dejado claro, ser un hombre al cual le gusta dar de qué hablar.
Veterano de La Marina, ex combatiente de lucha libre profesional, ex Gobernador de Minnesota, e invitado constante en programas de radio y televisión; Ventura ha sido un luchador/político, cercano a los reflectores.
El pasado 12 de octubre del año 2006, surgió una polémica sobre una supuesta pelea de bar en la ciudad de San Diego, California. Al parecer, esa noche, el bar estaba repleto de miembros de La Marina de los Estados Unidos; reunidos principalmente, por la muerte de un compañero en La Guerra de Irak.
El marine, Chris Kyle, y el veterano de guerra Jesse Ventura, estaban ahí esa noche.
Kyle relata, que Ventura estuvo criticando La Guerra de Irak, en un contexto sumamente inapropiado, diciendo inclusive, que La Marina de Estados Unidos, merecía perder algunos hombres.
Al no cesar sus críticas, pese a haberle solicitado hacerlo, Kyle explica, decidió darle un golpe a Ventura, con lo cual, el ex Gobernador terminó en el suelo...
Ventura dijo, que todo era una gran mentira, explicó que jamás había estado criticando a La Marina, y que tampoco había recibido ningún golpe por parte de Kyle.
El verdadero problema surgió, cuando Chris Kyle decidió escribir sus memorias:
En el libro autobiográfico, que rápidamente se convirtió en best seller, Kyle relata el curioso acontecimiento de la noche, en ese bar de San Diego.
Por lo que el ex gobernador de Minnesota, Jesse Ventura, demandó a Kyle por una porción del libro, en la que asevera que Kyle golpeó a Ventura durante una riña, y por haber hecho comentarios antipatriotas.
Ventura aseguró, que nunca ocurrió tal golpe, y que Kyle lo difamó...
En sus memorias, escribió que tuvo un encuentro con Jesse Ventura en 2006, el cual se mofó de él, y de los Navy SEAL, soltando un “los Navy SEAL merecen que caigan unos cuantos de ellos en Irak, por tanto asesinato de civiles”
Por esto, el ex-luchador y leyenda, supuestamente recibió un puñetazo.
Ventura, siempre ha negado estos hechos, y sobretodo, insultar a los Navy SEAL, pues él fue miembro de los SEAL.
Kyle, había solicitado que se desecharan los reclamos de Ventura, sobre invasión de privacidad, y enriquecimiento injusto, a expensas de otro, diciendo que no tenían sustento jurídico.
Sin embargo, un juez federal dijo, que la demanda debía seguir...
A la muerte de Kyle, la viuda Taya, sería la actual acusada…
En el juicio, las 2 partes habían traído testigos, que refutaban las 2 versiones, pero el juez ha creído, que la parte del escritor, era poco creíble...
Algunos escucharon a Ventura realizar las críticas, otros no lo escucharon decir nada malo; algunos lo vieron caer tras el puñetazo, otros ni siquiera vieron golpe alguno. En un descargo que realizó en el mes de noviembre, Ventura comentó, que sus ofertas de trabajo se esfumaron, después que fue publicado el libro, y que estaba preocupado, ya que no quería ser considerado como un traidor al Ejército.
También dijo, que la publicidad que Kyle recibió de las entrevistas, acerca del supuesto incidente con Ventura, le ayudó a las ventas de su libro, y dio lugar a que se filmara American Sniper.
La defensa argumenta en los documentos de la corte, que el público aceptó el libro de Kyle, por razones “que no tienen ninguna relación con el incidente con Ventura” y que el libro ha tenido más éxito, que cualquiera que haya escrito Ventura...
Una gran cantidad de dinero podría estar en juego en este juicio...
Los documentos de la corte muestran, que el libro de Kyle ha ganado regalías por más de $3 millones, hasta el 30 de junio del 2013, y que el juez determinó, que las ganancias de una próxima película, podrían estar sujetas al pago de daños…
Luego de varios meses, la justicia se hizo presente en el caso Jesse Ventura, contra Chris Kyle, dando la razón al ex gobernador de Minnesota, por ser víctima de los delitos de difamación e injuria.
Por eso, Jesse Ventura ha ganado este juicio, y el juez Richard Kyle, que no es familiar del difunto; ha puesto una multa de $1,8 millones, de medio millón por difamación, y $1,3 millones por lucrarse a través de su libro con esta historia.
Según los datos oficiales del Pentágono, 1 de cada 5 militares estadounidenses, que participaron en las misiones de Irak, y Afganistán, sufre de Trastorno de Estrés Post Traumático.
En los últimos 6 años, el número de personas a las que se les había diagnosticado oficialmente este síndrome, ascendió a más de 300,000.
De momento, Eddie Ray Routh, que ya intentó atacar a los guardias carcelarios, se encuentra bajo estricta vigilancia, en una celda individual.
Hasta ahora, el joven no se ha arrepentido, ni explicado el por qué había disparado contra Kyle.
Si le declaran culpable, su suerte está echada:
La ley de Texas prevé la pena capital por el asesinato.
Tal vez, Eddie Routh, también hubiera podido convertirse en el héroe nacional…
Tal vez lo hubiera sido en aquella guerra, cuyos motivos seguramente no comprendía.
Al regresar a casa, como otros miles de ex combatientes en Irak y Afganistán, no pudo encontrar ningún trabajo.
No sabía cómo seguir.
Sólo sabía matar, como miles de soldados estadounidenses en esa guerra…
Una guerra que quizás, fuera una especie de psicoterapia para una nación que ya había vivido el 9/11
“If you think that this war isn't changing you you're wrong.
You can only circle the flames so long”
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