Oblivion

“What Horatius said was:
“How can a man die better than facing fearful odds for the ashes of his fathers and the temples of his Gods”

El futuro, como universo post-apocalíptico, es un lienzo en blanco, que permite crear un amplio abanico de historias ficticias, perfectas para dibujar al ser humano enfrentado contra sus errores y aciertos, en un entorno hostil, que actúe como catalizador de sus instintos más primarios, y sus emociones más viscerales.
En el género de la ciencia ficción, como en la mayoría, parece estar todo inventado.
Hay quien se arriesga a intentar algo nuevo, original, y los hay quienes tiran por un camino marcado, más simple y tópico.
Es muy curioso, el pesimismo de los autores de ciencia ficción sobre el futuro de nuestro planeta.
Hay prácticamente un consenso, en cuanto a su aciago destino, previendo su apocalipsis, principalmente, por un holocausto nuclear, una invasión alienígena, o la destrucción del medio ambiente.
La idea de máquinas que destruyen civilizaciones, ha sido usada en otras ocasiones, que un argumento en torno a ello, ya está muy trillado.
“Dream of us”
Oblivion es una película de ciencia ficción, dirigida por Joseph Kosinski, en el año 2013.
Protagonizada por Tom Cruise, Andrea Riseborough, Olga Kurylenko, Morgan Freeman, Nikolaj Coster-Waldau, Zoe Bell, Melissa Leo, Lindsay Clift, Jaylen Moore, Julie Hardin, Paul Gunawan, Jay Oliver, Jason Stanly, entre otros.
El guion es de William Monahan, basado en una novela gráfica, que Kosinski escribió junto a Arvid Nelson, para Radical Comics; cuya revisión la llevó a cabo Karl Gajdusek.
Cuando el guión de Oblivion pasó a manos de Los Estudios Universal, Michael Arndt escribió la versión final.
Los Estudios Universal, se mostraron encantados con el resultado, llegando a decir que “es uno de los más bonitos que hemos escrito nunca”
Para los angloparlantes, la palabra “oblivion” significa “olvido”
Por lo que un “oblivion” como “eterno” es el concepto filosófico que dice que, el individuo propio, experimenta un estado de permanente “no existencia” después de la muerte, negando completamente que exista una “vida después de la muerte” o todo rastro de conciencia, o existencia.
Siendo un concepto básico, en el ateísmo.
La mayor parte de los exteriores de Oblivion, fueron rodados en Islandia; el interior de Raven Rock, es una antigua estación eléctrica, que fue demolida poco después del rodaje, todo ello animado con unos efectos visuales muy poderosos.
Oblivion inicia en el año 2077; cuando hace más de 60 años, La Tierra fue atacada por unos seres extraterrestres, que destruyen La Luna.
La humanidad, ganó la guerra, pero la mitad del planeta quedó destruido por terremotos, tsunamis, y todos los seres humanos sobrevivientes, fueron evacuados a Titán, una de las lunas de Saturno, ya que se tuvieron que usar los arsenales nucleares, durante la guerra.
Jack Harper (Tom Cruise), es un antiguo Comandante, astronauta de La NASA, y uno de los últimos hombres que la habitan, junta a Victoria “Vika” Olsen (Andrea Riseborough), su compañera, y quien le ayuda a través de una tecnología muy avanzada, pero a quienes previamente les borraron la mente, aunque a Jack le llegan destellos de recuerdos de antes de la guerra.
Jack es un técnico de drones, que forma parte de una operación masiva para extraer los recursos vitales del planeta.
Patrulla diariamente los cielos, como parte de su misión, y nada inusual sucede, hasta que su vida da un cambio, cuando rescata a una desconocida mujer de una nave espacial, que cae a La Tierra, después de orbitarla durante más de 60 años.
La llegada de Julia Rusakova (Olga Kurylenko), desencadena una serie de acontecimientos, que lo obligan a cuestionar sus convicciones, y lo hacen responsable del destino de la humanidad.
Oblivion presenta un arranque, de lo más prometedor, encontrándonos con una Tierra que, devastada tras una guerra que la humanidad mantuvo contra unos alienígenas, ahora es observada desde los cielos, por Jack y Victoria, quienes se encargan de que un sistema de vigilancia, acabe con los últimos invasores que quedan en el planeta azul.
Cuando cumplan su misión, viajarán hasta Titán, el nuevo refugio de nuestra especie; por lo que la humanidad vive bajo la atenta mirada de unos extraterrestres, que se hicieron con el planeta Tierra.
Tom Cruise, tendrá que liberar “al pueblo humano” de ellos, y establecer el orden, pero se dará cuenta que no es tan fácil, y que él no es quien cree ser…
Oblivion es ciencia ficción profunda, y de interés, conceptualmente brillante, e inteligente, de magnífica factura técnica, tiene todo lo que se puede pedir a un buen título de ciencia ficción; pero es una lástima que no se la haya valorado más unánimemente, pero quizá ese momento llegue.
“I created you, Jack.
I am your God”
Oblivion posee una envergadura conceptual interesante, y de paradójica reflexión, además de todo lo comentado, sobre la generosidad, y el sacrificio, sobre creer en uno mismo, confiar, en tiempos como los actuales, donde eso se considera prepotente; la vida es como un acto de involucración.
Aquí lo que prima, por encima de los fuegos de artificio, los tiroteos, y las piruetas explosivas, es la ciencia ficción pura y dura.
Picos de acción los tiene, por supuesto, con sus “deus ex machina” correspondientes, pero ni abundan ni son especialmente relevantes, una vez digerido el conjunto, convertida la propuesta, en una valiente, por su intimidad estructural, fábula ambientada en un futuro post-apocalíptico, potentísima en lo técnico, llena de imágenes terribles, y embriagadoras, que hipnotizan al espectador, enmascarando con acierto, una narrativa extraña, atípica, lánguida, pero efectiva en sus giros principales.
Del mismo modo, algunos han señalado errores por la incompetencia de una inteligencia tan avanzada como el TET, al no reconocer al Jack que sube, o perderlo de vista…
El TET no es un “Gran Hermano” que todo lo ve, necesita de la colaboración y trabajo de Victoria, que además, informa de los problemas, o cambios de comportamiento que puedan surgir a su alrededor, que tampoco es humano, por lo que no tiene por qué entender nuestros comportamientos.
Puede resultar más raro que la Victoria del Jack 52, no lo reconozca, pero tampoco lo veo llamativo.
Que no detecten una bomba camuflada, puede deberse a multitud de circunstancias, bomba que es más bien, un componente de un dron, y que va en el “ataúd” en el que llevan, supuestamente, a Julia.
El TET sabe, que el Jack que sube es el 49, simplemente pretende borrarle de nuevo la memoria, en cuanto tenga la opción, o eliminarlo si la cosa se complica, conocerlo en cualquier caso, conocer, o intentarlo al menos, sus motivaciones.
La consciencia de su superioridad, esa prepotencia, condena al TET.
Que no  identifique a Malcolm Beech (Morgan Freeman) es completamente normal, no tiene por qué, y hay múltiples explicaciones que se podrían dar, si bien es cierto que si se hubiera concretado este aspecto, habría ayudado, pero se perdería el efecto sorpresa:
El TET no tiene el ADN, ni de Beech ni de Julia, por lo que no puede saber quién va en la nave.
Beech verá, como deseó, la cara del TET antes de morir, una cara con un punto rojo al estilo del HAL de “2001: A Space Odyssey” (1968)
El TET no acaba con Julia y Jack, porque entiende que el vínculo sería más estable y fuerte entre ellos, que entre Jack y Victoria, corregiría ese error emocional, si los une como “equipo eficaz”
Postura lógica e inteligente.
La nave de Julia, vagó por el espacio, al soltarla Jack, cuando previó lo que se le venía encima a la suya, al emitirse una señal desde el derruido Empire State, por lo que la nave que contenía los cuerpos hibernados, regresó a La Tierra.
Lo interesante del tema de los dobles en Oblivion, es que de alguna forma, están vinculados, se retroalimentan, y los unos sirven para afianzarse a los que vienen después, hay una evolución en esa recuperación de la memoria y de su vida, a través de todos ellos.
Esto acaba perfectamente ejemplificado en el final, cuando sea el Jack Harper 52, el que retome la vida donde la dejó el Jack Harper 49.
Así, las copias van afirmando su personalidad, en base a los recuerdos del original, que también son suyos en esencia, ya que son él mismo, nacieron de él.
El rincón idílico y natural, creado por Jack, será además simbólico, es la regeneración, el nacimiento, la vida; por ello, Julia se recuperará perfectamente allí, nacerá la hija, será el lugar del reencuentro, lugar en el que la vida es posible, en el que se pretende regenerar, y conservar reductos de lo anterior, y fundar un futuro.
Allí veremos un pez, y a la hija de la pareja.
Entorno biológico y floreciente, natural, que contraste con lo anteriormente visto, robótico, aséptico, artificial, o desértico.
Por su parte, Beech, reconoce el nombre de Julia, conoce toda la historia de esos personajes, la cuestión estaba en descubrir, qué clon daría el paso, en cuál clon se daría el cambio.
Esto nos lo explicará el propio Beech:
Miles de “Jacks Harpers” con la memoria borrada, bajaron para destruir los reductos de humanidad.
Aliados que se volvieron en contra de la resistencia, tras pasar por las manos del TET.
Uno de ellos, era Jack...
Dentro del TET, veremos miles de clones suyos, incluso fetos…
La destrucción del dron obliga, como comenté, a la maña.
Harper irá en persona, para intentar detonar la carga en el interior del TET.
Irá con “el señuelo de Julia”, que ocupará un lugar, en un aparentemente premonitorio “ataúd”
En este viaje, tendremos un “flashback” donde veremos lo que ocurrió el día en que Jack y Victoria, pilotos, y otros tripulantes, entre ellos Julia, que estaban en hibernación, subieron al TET.
Recuerdos, producto del audio de la caja negra que encontraron.
Fue el comienzo.
El final, ha creado ciertas discusiones, e incluso confusiones:
La aparición de un nuevo clon de Jack, el 52, al que vimos amordazado por el 49, nuestro protagonista, parece que ha provocado ciertas incertidumbres, incomprensiones, o despistes.
El clon 52, siguió los recuerdos que tenía en común con el 49, su desarrollo, y buscó a Julia, a la que vio en la escena de la pelea, basándose en el conocimiento de sí mismo, algo con lo que seguramente contaría también el Jack Harper 49.
Ya vimos la aceptación de la idea, anteriormente, de Julia, por lo que la reunión, aunque curiosa e intrigante, no deja de ser lógica y real, auténtica.
Un proceso nada rápido, ni apresurado, pues 3 años tardó en asumir y encontrar a su amada, que tiene crecidita a la hija, de la noche de pasión que tuvo con su alter ego, el Jack Harper 49.
Un planteamiento interesante, de esos que dan la vuelta a la tortilla:
Los malos son los buenos, y los buenos son los malos.
Oblivion nos habla de insubordinación a un poder opaco, del que saben pocas cosas, viven en una oficina volante, recibiendo órdenes hasta que se descubre el pastel.
Les han dado instrucciones de que lo que habita allí abajo, son seres abominables, y después, las cosas son diferentes.
La idea de la resistencia, podrían haberla elaborado más, ya que el papel de “Profeta” de Morgan Freeman, es interesante.
La parte que más me ha gustado, es el “despertar” del personaje:
Parece que estamos viendo cómo, la clase obrera, de pronto se da cuenta que ha trabajado toda su vida, para los opresores verdaderos, y cómo ha llegado al “tiempo del olvido” bajo un lavado de cerebro, en el que un bienestar aséptico, es el adormecedor de la memoria.
De hecho, la importancia que el protagonista otorga a determinados objetos, en especial a los libros, como la cita sobre Horacio del libro “Cantos Populares de La Antigua Roma”, del poeta y político inglés Thomas Macaulay, resume el mensaje de la historia; refleja que la felicidad está al alcance de nuestras manos, dado que está se encuentra en las pequeñas cosas:
La pintura, así lo rubrica.
El cuadro de Andrew Wyeth, “El Mundo de Cristina”, aparecerá para remarcar ciertas ideas sobre los sentimientos de los personajes, sus motivaciones, miedos, y situación.
El cuadro representa a una frágil chica, paralítica, que era vecina del pintor, arrastrándose por la hierba, en busca de su casa, lejana, con un desolado paisaje, y empinada.
La frustración, el miedo, y el deseo por un hogar lejano, el sacrificio para lograr el objetivo, la angustia vital.
Esos sentimientos que transmite el cuadro, y debía sentir Cristina, son homologables a los de los personajes, que ven un desolado panorama, que se opone a su deseo, llegar al idílico hogar que ha creado Jack.
Aunque no rechaza la tecnología, si demuestra cierta reticencia hacia su uso y abuso, y casi es un alegato hacia la vuelta al estado de naturaleza, representado por la rustica cabaña, al lado de un lago, en la cual, al depositar cuidadosamente sus Ray-Ban y la gorra de los New York Yankees, mientras suena de fondo un viejo disco de vinilo “A Whiter Shade Of Pale”, del grupo británico de rock, Procol Harum, convertida en melodía de culto, transforma en hogar; en contraposición al tecnológico, en la nubes.
Hay en Oblivion, analogías bíblicas:
Al génesis bíblico, donde la pareja perfecta en el paraíso, es tentada a desobedecer a Dios, e ir más allá de lo permitido.
Cristicas, como la subida a los cielos, el profeta que augura su venida, y ese Dios omnipresente…
Fantástica me resultó la nave en la que se desplazan, sobre todo, por la forma de despegar, imitando a una libélula.
El director Joseph Kosinski, se alimenta de cuatro fuentes principales para crear su Oblivion:
En primer término, la teleserie “Battlestar Galactica” (2004-2009), de Ronald D. Moore, lejanamente inspirada, a su vez, en ideas del escritor Philip K. Dick; otro autor, cuyo recuerdo se impone en puntos cruciales de la trama.
Añadan a la mezcla, detalles de la novela “Un Mundo Feliz” (1931), de Aldous Huxley.
Y completen, con esa variedad adulta de la ficción científica, que cultivó Stanislaw Lem.
Es más que probable que Kosinski no lo haya leído, pero curiosamente, en Oblivion, se advierten con claridad, los ecos de “Solaris” (1961)
¿Es eso posible, cuando uno ya ha visto, y leído mucha ciencia ficción?
No es fácil, obviamente.
Quizás por ello, muchos se han apresurado a buscar en el ADN de Oblivion, los cromosomas de miles cintas de ciencia ficción.
En cierto modo, se trata de un ejercicio improductivo, porque nos movemos en un género de convenciones, fácilmente reconocibles:
La originalidad, en este campo, es un asunto huidizo.
Es evidente que Oblivion es un refrito de otras obras, que solo demuestran su falta de imaginación, y de ideas; porque juega con la delgada línea, entre el homenaje o el refrito, entre los guiños, o los plagios.
Sin embargo, hay muchas cuestiones que quedan pendientes en Oblivion, y que pueden ser respondidas en más de un visionado:
Pues parece que Jack 49, lleva varios años cuidando de las instalaciones succionadoras, y de los drones; y luchando contra los “scavengers”
Ahora bien, en tantas luchas:
¿Nunca ha visto de cerca el cadáver de un “scavengers”; no se ha dado cuenta que son humanos?
¿Cuantas veces debe borrarle la memoria el ente central, para que todo vaya bien?
O es por ello, el uso de los clones, desechar y suplantar… ahí queda esas cuestiones...
Sobre el fallo argumental que le veo; podemos ver a 2 técnicos:
El número 49, es el que está en el puesto cercano a las nubes; y el 52, es el del puesto sobre una montaña.
El técnico 49, es el protagonista, el que encuentra a su mujer, y al que le ofrece la nave alienígena, el ir con ella a renegociar condiciones.
Pero luego se cambia por el técnico 52, utilizando su nave para suplantarle, aprovechando que son clones iguales.
No me cuadra que la nave alienígena, no se dé cuenta de que el trato se lo ofreció al técnico 49, y no al 52…
Vamos, que no es la misma persona, y que le está suplantando.
O puede que sí se diese cuenta, y por eso le dice lo de las insubordinaciones, pero no lo deja claro, parece que la nave cree estar hablando con el técnico 49 realmente.
Obvian ese aspecto de la suplantación del técnico, que la nave no podría ignorar, si no puede llevar la cuenta de qué clon es cada uno, vaya sistema que se ha montado.
Aparte de eso, a nivel científico, se confunde muchas veces el tema clon, con el tema de ser personas idénticas.
El clon, lo único que tiene, es el ADN igual al de otro.
Es decir, el aspecto físico, pero por lo demás, serían individuos únicos, y podrían desarrollar personalidades diferentes.
En este caso, se supone que la nave extraterrestre les graba la memoria, y forma de ser del original, pero científica, y filosóficamente, es muy cuestionable, poder llegar a ese punto...
Cuando se queda embaraza la mujer del protagonista, antes de la hibernación, 60 años atrás, o durante las persecuciones y tiroteos... bueno, se supone que en la criogenización, no te desarrollas, no creces, ni pasa nada… Solo “respiras”
Pero que haya pasado 60 años, y Jack se acuerde de muchas cosas, me hace preguntarme, si él tiene conocimiento de la noción del tiempo…
La razón por la que Vika fue asesinada sin reparos, y no Jack, fue porque para el TET, la sobreviviente era clave, imagino que para clonarla también, y erradicar así la rebeldía de Jack, creando un “nuevo equipo eficiente” con Julia en lugar de Vika.
O quizás otros planes.
¿De dónde cuernos sacan los “scavengers” las provisiones para sobrevivir 60 años, desde la desolación del planeta?
¿Dónde están las granjas y cultivos para ese alimento?
Dejando los cuestionamientos, el componente visual de Oblivion es magnífico, creando el realizador, de mano del equipo de efectos digitales, tanto un alucinante mundo post-apocalíptico, arrasado por la carencia de la influencia gravitatoria de nuestro satélite, como unos espléndidos diseños de las diversas máquinas, y construcciones que pueblan la acción, de frías y depuradas líneas derivadas de las formas básicas de la geometría, como demuestra, por ejemplo, ese tetraedro que es el TET.
Me pareció un diseño muy interesante y bastante simbólico, hasta diría que anatómico, pues el TET parece una vagina, con la nave como espermatozoide, creando una vida que se desarrolla adentro, como iniciación de una nueva especie…
¡Delirante!
“I want mankind to survive.
This is the only way”
Resulta que La NASA, anunció el descubrimiento de vida, fuera del planeta Tierra.
Según lo anunciado por la Administración Nacional de Aeronáutica y del Espacio de los Estados Unidos, se ha comprobado, la existencia de organismos vivos en el satélite más grande del planeta Saturno:
Titán.
La importancia del hallazgo, radica en el descubrimiento de “una bacteria en el satélite de Saturno, que tiene condiciones similares, a las encontradas en una bacteria, en un lago de California.
Estas bacterias, viven en Arsénico”, explicó Jorge Bueno, director del Instituto de Astrobiología de Colombia.
“Al encontrar vida en un ambiente tan hostil, se presume la posibilidad de la existencia de organismos que sobrevivan en condiciones diferentes a las de nuestro planeta, como Titán, en este caso”, agregó.
El profesor, biólogo de la Universidad Nacional de Colombia, explicó que:
“Titán tiene características similares a las de La Tierra, en sus primeros inicios, es decir, hace más de 3,800 millones de años”, época en la que se cree, surgieron los primeros microorganismos, de los que provinieron las diferentes especies conocidas hoy en La Tierra.
Y es que Titán, es el mayor de los satélites de Saturno, y el segundo del Sistema Solar tras Ganímedes.
Además, es el único satélite conocido, que posee una atmósfera importante, y el único objeto, aparte de La Tierra, en el que se ha encontrado evidencia clara, de cuerpos líquidos estables en la superficie.
Es además, el 6º satélite elipsoidal de Saturno, y frecuentemente es descrito como, un satélite similar a un planeta.
Tiene un diámetro un 50% más grande que La Luna, y es un 80% más masivo; es más grande en volumen que el planeta Mercurio, aunque su masa representa el 40% de este último.
Titán, fue descubierto en 1655, por el astrónomo holandés Christiaan Huygens, y fue la primera luna conocida de Saturno, y el 5º satélite conocido de otro planeta.
Según los datos disponibles, su atmósfera podría estar compuesta, principalmente de nitrógeno, pero hasta un 6% puede ser metano, y compuestos complejos de hidrocarburos.
El clima, incluyendo viento y lluvia, crea características superficiales, similares a las de La Tierra, tales como:
Dunas, ríos, lagos, mares, probablemente de metano líquido y etano; y deltas, y está dominado por patrones climáticos estacionales, como en La Tierra.
Con sus líquidos, tanto superficiales como subterráneos, y su robusta atmósfera de nitrógeno, el ciclo del metano de Titán, es visto como una analogía con el ciclo del agua de La Tierra, aunque a una temperatura mucho más baja.
Por ejemplo, la atmósfera de Titán, está llena  de gas metano, que normalmente es destruido por la luz del sol.
En La Tierra, la vida repone constantemente el metano que el sol destruye, por lo que en Titán, podría estar sucediendo algo similar.
No obstante, Titán actualmente es muy frío, y el agua líquida, debería estar a bastante profundidad, bajo la superficie helada.
La rareza de este fenómeno, y la necesidad de una fuente de metano, son indicios de la posible existencia de vida.
De este satélite, se ha dicho que es la apuesta más prometedora de vida, gracias a su acogedora temperatura, y la probable presencia de agua y moléculas orgánicas simples.
Se cree que la superficie de esta luna, está compuesta en un 99% de hielo de agua, con una buena oportunidad de albergar agua líquida bajo la superficie.
Las observaciones de la sonda Cassini sugieren que, la mayor luna de Saturno, es sospechosa de albergar vida, ya que su gruesa atmósfera es rica en compuestos que, muy a menudo, señalan la presencia de organismos vivos.
Por lo tanto, Titán podría tener vida acuática, y tal vez, aunque no existen evidencias, con seres inteligentes.

“For three years I searched for the house he built.
I knew it had to be out there.
Because I know him.
I am him.
I am Jack Harper, and I'm home”



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