The Tommyknockers

“Late last night and the night before, Tommyknockers, Tommyknockers, knocking at the door. I want to run, don't know if I can, 'cause I'm so afraid of the Tommyknocker man”

La relación del prolífico Maestro del Terror, Stephen King, con el cine y la televisión es estrecha, y por sobretodo, irregular.
Se han adaptado sus novelas, de las más extensas a las más cortas, y sus cuentos, de hecho, él mismo ha escrito unos cuantos guiones.
Dicho de otra forma, un gran porcentaje de la obra de King, ha sido llevado a la pantalla, y seguimos contando.
El resultado es inconsistente, claro, al gusto de cada quien.
Dejemos a un lado el valor literario de la obra de King, y limitémonos sólo a la estética, y al lenguaje visual de las películas basadas en su pluma, más precisamente, a aquellas de “segunda línea”, incluyendo telefilmes y miniseries.
¿Qué encontramos?
Cierto espíritu, cierta esencia; si se quiere, incluso podría hablarse de una suerte de subgénero:
“Las King Movies”
Un look estancado en la década de los 90, que prevalece en esa filmografía “Kingniana” alternativa, aún hoy en día.
Se respira un aire de cine de bajo presupuesto, de fantasía ornamentada a precios módicos.
La precariedad de los efectos visuales, pasa a convertirse en un elemento estilístico, un distintivo.
El horror, por ende, se sostiene en otros mecanismos:
En el manejo del suspenso, la construcción de la atmósfera de misterio, el cliché bien usado...
Pero que no se malentienda, estas películas de Stephen King, gozan del encanto de lo imperfecto, del encanto de lo purulento.
“You can't run.
You can't hide.
You can only become...
One of them”
The Tommyknockers es una teleserie de terror y ciencia ficción, del año 1993, dirigido por John Power.
Protagonizado por Jimmy Smits, Marg Helgenberger, Joanna Cassidy, Traci Lords, Paul McIver, E.G. Marshall, Leon Woods, John Ashton, Cliff De Young, Allyce Beasley, Robert Carradine, entre otros.
El guión es de Lawrence D. Cohen, basado en la novela homónima, escrita en 1987, por Stephen King.
La novela “The Tommyknockers” mantiene un estilo de horror, mezclado con la ciencia ficción que establece King en varias de sus novelas.
En este caso, la influencia que ejerce un objeto misterioso, enterrado en medio del bosque, sobre los habitantes del pueblo Haven, Maine, en EEUU.
Cabe destacar que el guionista, Lawrence D. Cohen, adapta por 3ª vez, una obra de Stephen King, pues las anteriores habían sido:
“Carrie” (1976) e “It” (1990)
Esta historia, nos trasladada a uno de esos pequeños y apacibles pueblos, tan recurrentes en la narrativa de King.
The Tommyknockers sigue a Jim “Gard” Gardner (Jimmy Smits), un poeta que se encuentra de gira literaria, mientras intenta superar sus problemas con la bebida.
Mientras tanto, su esposa Roberta “Bobbi” Anderson (Marg Helgenberger), permanece en Maine, intentando escribir su primera novela.
Pero un día, Bobbi descubre por casualidad, un extraño artefacto en los bosques que rodean a su cabaña, y pronto se da cuenta, que el mismo es parte de una estructura mucho más grande, y que se encuentra enterrada desde tiempos ancestrales.
El contacto con el mismo, ha provocado cambios en Bobbi, así como en el resto de los pobladores de Maine.
Muy pronto, los locales se encuentran inventando maravillosas máquinas que aceleran su trabajo, mientras se dedican por las noches, a seguir desenterrando el artefacto.
Por lo que Jim descubrirá el extraño comportamiento de los locales, al regresar de su gira.
Pronto quedará en evidencia, que toda esta movida está impulsada por la energía de la estructura enterrada, algo a lo cual Jim es inmune, gracias a la placa de aluminio que posee en su cabeza, como fruto de un viejo accidente.
Y Jim será el único que podrá evitar, que estas extrañas y oscuras fuerzas, se apoderen del pueblo.
“Something wonderful is happening in Haven”
Con The Tommyknockers, Stephen King quiso combinar varias cosas:
Primero, dar unos toques autobiográficos, ya que el protagonista, es un escritor que está pasando por un período de lucha contra el alcohol, y en ese momento, King se estaba desintoxicando de su adicción a las drogas.
En ese sentido The Tommyknockers queda en el medio de una especie de “trilogía literaria basada en escritores conflictuados”, precedida por “Misery” (1987), y seguida por “The Dark Half” (1989), obras que le habrán servido al autor, como una especie de terapia.
En su autobiografía, “On Writing” (2000), el propio King le atribuye cierta influencia al cuento “The Colour Out Of Space” de H.P. Lovecraft.
También es evidente, un paralelo con la película de 1956, “Invasion Of The Body Snatchers”, y la novela de Clifford D. Simak, “The Big Front Yard”, publicada en 1959.
En la época en que escribió el libro “The Tommyknockers”, Stephen King padecía graves problemas de abuso de alcohol y drogas, de los que logró sobreponerse.
Desde entonces, el escritor abandonó el consumo de toda sustancia de ese tipo, incluyendo tabaco, y alcohol.
Segundo, King se mete en el tema de las invasiones alienígenas silenciosas.
El problema es que a King, no se le ocurre ningún subtexto posible, que es imprescindible en este tipo de tramas, ya que suelen funcionar como alegorías, y narra todo, de manera muy lineal y naif.
Una “posesión” alienígena, pues deriva del influjo, en el libro, un gas radiactivo; y en la serie, una especie de fulgor fosforito, que ejerce una nave extraterrestre semienterrada en los bosques cercanos del pueblo.
En el libro, los efectos de dicho envenenamiento, poco a poco acababan transformando, de un modo horrible, a los habitantes en alienígenas.
En la teleserie, sólo se les ve desmejorados, estupidizados en sus invenciones delirantes, y perdiendo algún que otro diente…
Después de la publicación de “The Tommyknockers”, su familia y amigos, decidieron ayudar a King con sus vicios, y le mostraron su propia basura, para que se diera cuenta del nivel de adicción que había alcanzado:
Latas de cerveza, cigarrillos, cocaína, xanax, valium, nyquil, eran algunas de las cosas que había…
Solicitó ayuda, y abandonó toda forma de alcohol y drogas, a finales de los años 1980.
Hay que resaltar que la ambientación de The Tommyknockers es buena, retratando una de esas pequeñas poblaciones, con todo el aire de antaño, en la que todo el mundo conoce a todo el mundo.
Los habitantes, acostumbrados a la más absoluta calma, se conmocionan desde el primer suceso que escapa a la rutina habitual.
Esto contribuye a sumergirnos muy pronto, casi desde el principio, en la historia, y a empaparnos de la inquietud que comienza a aflorar entre los vecinos.
Pero quedan muchas cosas inconclusas:
El objetivo de los inventos…
Tal vez era el enganche para atrapar a los pueblerinos… no se sabe.
¿Por qué empiezan a perder dientes?
Es el resultado del consumo de drogas, vivido por King…
¿Qué pasó con Ruth Merrill (Joanna Cassidy)?
Por supuesto que The Tommyknockers resulta burda, pero hoy en día, podría decirse que es un divertido ejercicio de estilo.
Como dato, se habla del Hospital de Derry, el pueblo donde se desarrolla el otro telefilm “It” (1990)
“Pray it doesn't happen to you”
En los años 90, se abusó con miniseries de Stephen King, creo que no había un año, sin 1 o 2 producciones suyas en la televisión.
Y es que cada 2 de 3 novelas, King escribe idioteces, que sabe camuflar con un depurado lenguaje narrativo; y el resultado es aún peor, cuando King se mete en el terreno de la ciencia ficción, en donde definitivamente, es muy malo en el 100% de los casos.
Y además, ocurre que, como en casi todas la novelas de King, aparecen elementos o demasiado violentos y/o tétricos, o demasiado imaginativos y fantásticos, para poder ser llevados a la pantalla, sea grande o chica.
Los primeros, por razones obvias, hay que moderar lenguaje, violencia, sexo, etc., si se quiere un producto “visible” comercialmente,
Y las segundas, porque, o encarecerían el presupuesto, o sencillamente son imposibles, o muy complicadas de “traducir” en imágenes.
Sin embargo, el escritor Stephen King, apela siempre, y mucho, a la imaginación del lector.

“It wasn't the plate that kept them out.
It was you”



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