Monty Python and The Holy Grail

“A year passed:
Winter changed into spring, spring changed into summer, summer changed back into winter, and winter gave spring and summer a miss and went straight on into autumn... until one day...”

El Santo Grial, es el plato o copa usado por Jesucristo en La Última Cena.
La relación entre E Grial, El Cáliz, y José de Arimatea, procede de la obra de Robert de Boron “Joseph d'Arimathie”, publicada en el siglo XII.
Según este relato, Jesús, ya resucitado, se aparece a José, para entregarle El Grial, y ordenarle que lo lleve a la isla de Britania.
Siguiendo esta tradición, autores posteriores cuentan, que el mismo José usó El Cáliz, para recoger la sangre, y el agua emanadas de la herida abierta por La Lanza del Centurión, en el costado de Cristo y que, más tarde, en Britania, estableció una Dinastía de Guardianes, para mantenerlo a salvo, y escondido.
La búsqueda del Santo Grial, es un importante elemento en las historias relacionadas con El Rey Arturo, “El Ciclo Artúrico” o “Materia de Bretaña”, donde se combinan la tradición cristiana, con antiguos mitos celtas, referidos a un Caldero Divino.
A partir de este momento, los textos se concentran en 2 historias diferentes:
Por un lado, las relacionadas con la búsqueda del Santo Grial, emprendidas por Los Caballeros del Rey Arturo; y por el otro, las que relatan la propia historia del Grial, desde los tiempos de José de Arimatea.
La leyenda del Santo Grial, ha sido fuente de inspiración de obras literarias, óperas, e incluso películas.
“It is I, Arthur, son of Uther Pendragon, from the castle of Camelot.
King of the Britons, defeater of the Saxons, Sovereign of all England!”
Monty Python and The Holy Grail es una comedia británica, dirigida por Terry Gilliam y Terry Jones, en 1974.
Protagonizada por John Cleese, Michael Palin, Terry Jones, Terry Gilliam, Graham Chapman, Eric Idle, Carol Cleveland, Connie Booth, Neil Innes, Bee Duffell, entre otros.
El guión es de Terry Gilliam, John Cleese, Michael Palin, Graham Chapman, Eric Idle, y Terry Jones; y fue concebido entre la 3ª y 4ª serie de su muy popular programa de televisión de la BBC:
“Monty Python Flying Circus”
En contraste con la primera película del grupo, “And Now For Something Completely Different” (1971), que era una recopilación de bocetos de las 2 primeras series de televisión, Monty Python and The Holy Grail, se compone de material nuevo, y por tanto, se considera la primera película del grupo.
Monty Python and The Holy Grail, cuenta con sutileza, e inteligencia, los sucesos que van pasando, los cuales tienen todos, un significado de fondo:
Críticas a la sociedad, a la mediocridad, a las ideas, a la moral, al poder, a la discriminación, etc.
Siendo la 2ª película de los Monty Python, en la que abordan la historia del legendario Rey Arturo y de sus Caballeros, que van a la búsqueda del Santo Grial; además que no solo se limita a parodiar el cine medieval, y más en concreto, el del Rey Arturo, sino que también engloba la concepción que tiene la gente de La Edad Media, o incluso la filosofía anarquista.
Monty Python and The Holy Grail, fue un éxito en su lanzamiento inicial, que provocó en Idle, la inspiración para la obra musical “Spamalot” (2005) que fue ganadora del premio Tony.
Monty Python and The Holy Grail se rodó en tan sólo un mes, por falta de presupuesto.
El Rey Arturo (Graham Chapman), y sus Caballeros:
Sir Bedevere, The Wise (Terry Jones); Sir Lancelot, The Brave (John Cleese); Sir Galahad, The Pure (Michael Palin); y Sir Robin the Not-Quite-So-Brave-As-Sir-Lancelot (Eric Idle), reciben un encargo divino:
Partir en búsqueda del Santo Grial, para lo cual deberán luchar contra enemigos muy diversos:
Malignos caballeros rivales, bestias sanguinarias que solo son visibles como dibujo animado, groseros soldados franceses, fortificando un castillo en Inglaterra; brujas, adivinos mefistofélicos, Scotland Yard, La Bestia Legendaria de Aaaaarrrrrrggghhh, y hasta el asesino y carnívoro conejo de Caerbannog, que muere destruido por una cómica reliquia traída de Las Cruzadas:
“Holy Hand Grenade of Antioch” o “La Santa Granada de Mano de Antioquía”
La grandeza de Monty Python and The Holy Grail, y ese es el matiz, reside en que con el grupo inglés, nos reímos y reímos y, con ello, lo hacemos explícitamente de nosotros mismos, y de nuestra insignificancia, porque aprendemos que la estupidez humana, atraviesa la coordenada tiempo desde el inicio del universo, hasta su extinción final.
Y no es por ello una risa que nos haga entristecer luego, no nos convierte en cínicos, no, sino que nos hace más listos, más sensibles, y mejores personas.
En cualquier caso, Monty Python and The Holy Grail fue un gran éxito de taquilla, y aún hoy, sigue teniendo gran frescura por algunos momentos estelares.
Quizás no sea la mejor película de los Python, que en esta ocasión, adolecían de falta de experiencia, pero algunos de sus pasajes, se han convertido por méritos propios, en muestras inolvidables del surrealismo de estos geniales humoristas.
“Listen.
Strange women lying in ponds distributing swords is no basis for a system of government.
Supreme executive power derives from a mandate from the masses, not from some farcical aquatic ceremony”
Monty Python and The Holy Grail, constituyó la 1ª ocasión, en que alguno de los Python, estuvo tras las cámaras, contando con la dirección conjunta de Terry Gilliam y Terry Jones que, de hecho, se convirtió en una verdadera bipolaridad de intenciones:
Gilliam estaba más preocupado por temas técnicos; mientras Jones se centraba más en las actuaciones.
El presupuesto final de 200,000 libras esterlinas, dobló lo estimado al principio de la producción, partiendo de las ganancias del grupo musical Pink Floyd, derivadas de su disco:
“The Dark Side Of The Moon” (1973)
Pero los fondos eran bastante exiguos, respecto a la idea que tenía el grupo, así que tuvieron que rebajar costes como pudieron, siendo una de sus decisiones más sorprendentes, y de mayor efecto cómico, el prescindir de caballos para los personajes, sustituyéndolos por cáscaras de coco, que eran utilizadas por los escuderos, para aparentar el sonido de los cascos de los equinos.
Así, los Python la convirtieron en la parodia de la Inglaterra medieval, y Los Caballeros del Rey Arturo, siendo realmente una excusa para ejecutar una ácida crítica de los estereotipos de la vida moderna, utilizando elementos de La Edad Media, como base para su sátira:
El Rey Arturo, y Los Caballeros, en su búsqueda del Santo Grial...
El Cáliz usado por Jesucristo en La Última Cena.
Esta labor, es asignada por Dios mismo, en forma de una de las extrañas animaciones de Terry Gilliam, el único estadounidense en Python, ojo la alegoría, de modo que El Rey Arturo comienza por reclutar Nobles Caballeros, que lo ayuden en La Sagrada Misión.
Así, eventualmente lo acompañan:
Sir Lancelot, Sir Galahad, y Sir Robin, quienes con sus respectivos pajes y escuderos, recorren la campiña inglesa, topándose con toda suerte de personajes, algunos amigos, otros enemigos... y el conejo más sanguinario en la historia del mundo.
Y aquí viene lo difícil... explicar el humor conceptual y absurdista de Monty Python.
Creo que esa es la palabra indicada:
“Absurdo”
Pero eso no lo define completamente.
Yo diría que la característica principal de Monty Python and The Holy Grail, y del resto del trabajo del grupo; es “el absurdo” llevado a extremos insospechados, pero manteniendo una especie de torcida lógica, que mantiene las excéntricas rutinas consistentes, con la personalidad de los personajes.
¡Y qué personajes!
Los 5 ingleses, y el estadounidense, se encargan de casi todos los papeles, incluyendo varios femeniles, y en más de una ocasión, el mismo actor aparece como antagonista de sí mismo, en una misma escena.
Esto sólo refuerza el aire surrealista de los “sketches”, y subraya el fiero espíritu independiente, que siempre caracterizó a Python, quienes hacían lo que a ellos les parecía gracioso, sin consultar con “mercadólogos” o ejecutivos para garantizar su aceptación entre el público.
El humor, nace desde el disparate social que va naciendo a través de diferentes “sketches” yuxtapuestos, que van componiendo la trama.
No existe un hilo conductor de peso, al momento de contar la historia, sino que el hecho de que Arturo y sus Caballeros, deben encontrar El Santo Grial, por tratarse de una Encomienda Divina, se transforma en la excusa perfecta para burlarse de la forma de vida del periodo escolástico, de la siutiquería de Los Caballeros, de la religión, y de la historia enseñada por los siglos de los siglos…
Como dato de producción, los ropajes de época de los actores, también tuvieron su parte de “ahorro”, siendo las armaduras en su mayoría cotas de lana pintadas, excepto la única cota de malla, que correspondió al Arturo encarnado por Chapman, una decisión que causó serios problemas al equipo, por las duras, húmedas, y frías condiciones del rodaje, en castillos de Escocia.
No acaban ahí los problemas durante el rodaje, siendo quizás el más significativo, el alcoholismo de Graham Chapman, que ralentizó bastante el proceso, por sus indisposiciones, y su apatía por momentos, sin olvidar la negativa de las autoridades escocesas, a ceder castillos de titularidad pública, así como las reticencias para rodar ciertas escenas, que entrañaban alguna peligrosidad.
Por otro lado, la fuerza de este gran film, está nada más ni nada menos, que en su humor inteligente.
Algunos afirman que Monty Python and The Holy Grail, es básicamente “humor absurdo”
Aunque es cierto que hay alguna escena absurda, yo tengo que destacar el humor inteligente que nos desvela:
Mientras nosotros nos reímos viendo, cómo unos campesinos critican al Rey Arturo, Monty Python está haciendo una crítica sobre la sociedad feudal, y sus estamentos.
Cuando vemos como explican las razones, por las que una mujer es “una bruja”, Monty Python nos muestra, entre un montón de risas e ironía, una dura crítica a una sociedad anclada en las supersticiones, leyendas, y en la ignorancia.
Cuando los valientes hombres de Arturo, luchan contra un “monstruoso” conejo, y pierden, se nos muestra una vez más, lo ridículo de los mitos y supersticiones del Medievo.
Cuando se nos muestra la lucha entre Arturo y El Caballero Negro, y este sigue insistiendo en luchar, aun estando herido, y sin opciones de victoria, se nos hace una crítica al nulo valor del honor, que llevaba a Los Caballeros Medievales, a la muerte, en muchas situaciones estúpidas, sólo por buscar el “honor” de la batalla.
El “humor absurdo” de los Monty Python, se sale por todos los costados en Monty Python and The Holy Grail, que hace reír desde los créditos iniciales; pues a los espectadores, se les mostraban los nombres de todo el equipo técnico, y en la parte inferior, aparecían unos subtítulos que invitaban, en un inglés extraño pero legible, con tipografía de caracteres suecos, a visitar Suecia, y conocer sus diversas bondades…
Algunos gags destacables son:
Los Caballeros sin caballo; y El Caballero Negro, que sigue luchando sin desalentarse, aún después de habérsele amputado todas sus extremidades, y amenaza incluso al Rey Arturo, diciéndole que “combatirá con sus dientes”
Como dato, esta escena se rodó después de tiempo, y contó con la colaboración de sólo 7 personas:
Terry Jones como director, Terry Gilliam que era también director, que interpretaba al Caballero Verde, y a Patsy; Graham Chapman como Arturo; John Cleese como El Caballero Negro; un técnico de sonido, el productor, que fue el cámara, y el doble que interpretaba al Caballero Negro, cuando solo tenía una pierna; aunque John Cleese volvió a ser El Caballero Negro una vez sin piernas.
El castillo poblado sólo por jóvenes y atractivas mujeres:
150 doncellas, morenas y rubias, entre 16 y 19 años, que no hacen más que bañarse, y ponerse y quitarse ropa íntima (sic); y que pretenden secuestrar al casto Sir Galahad, Caballero con voto de castidad, y que es rescatado contra su voluntad por sus compañeros.
Los campesinos revolucionarios, o los feroces Caballeros que dicen Ni, que tras amenazar a Arturo y sus seguidores, huyen despavoridos cuando éstos repiten inadvertidamente la sílaba “ni” en sus diálogos.
Como es sabido, los Monty Python hicieron varios personajes:
Michael Palin:
Es el primer soldado en la apertura de escena / Dennis / el segundo aldeano / El Caballero cantor #5 / El de la derecha, Jefe de 3 cabezas / Rey del Castillo del Pantano / El Monje asistente de Maynard / El Caballero Jefe de los que dicen “Ni” / El Narrador / El Caballero francés / Un de los invitados en El Castillo del Pantano.
Eric Idle:
Es el recolector de muertos / el primer aldeano / El Caballero cantor #2 / Un guardia / El confundido en El Castillo del Pantano / Concorde, el escudero de Sir Lancelot / Roger la desbrozadora / El Hermano Maynard.
Graham Chapman:
Es El Rey Arturo / El guardia con hipo / La voz de Dios / El del medio, Caballero de 3 cabezas.
John Cleese:
Es Sir Lancelot / El Caballero francés / El 2º soldado en la escena de apertura / el cuerpo en la escena de la plaga / El Caballero cantor #4 / El Caballero Negro / El 3r aldeano / Tim, El Encantador…
Curiosamente, Cleese tenía miedo de cruzar el puente, que verdaderamente estaba encima de un desfiladero, y utilizaron un doble para que lo cruzara.
Terry Gilliam:
Es el viejo adivino en la escena del puente / El Caballero Verde / El Caballero cantor #3 / Sir Bors, el 1º en ser asesinado por el conejo / El animador de los débiles de corazón / La mano del Gorila.
Terry Jones:
Es la madre / la cabeza izquierda del Caballero de 3 cabezas / El Príncipe Herbert / El Caballero francés de la historieta del Escribano.
Neil Innes:
Es el jefe de los monjes cantores / El Caballero cantor #1 / Baton el trovador / uno de los aplastados por el conejo de madera / el 4º aldeano / El Caballero francés que ríe.
Así pues, al final, Monty Python and The Holy Grail, no acaba de ser otra cosa más que un cachondeo, una historia sin pies ni cabeza, para pasar un rato divertido con unos humoristas que, a pesar de que el humor británico, a veces es un poco incomprensible para el resto del mundo, pues supieron hacer reír a carcajadas, cosa de verdad muy difícil.
En plena fiebre del éxito, la prensa le preguntaba a Terry Gilliam, y a Terry Jones:
¿Cuál sería su siguiente rodaje?
No tenían nada proyectado, y se limitaban a decir:
“Jesús.
Hambre de Gloria”
Como una broma, que se extendió tanto, que comenzaron a trabajar sobre esa temática para su siguiente proyecto...
“How do you know she is a witch?”
Nada mejor para matar un chiste que sobre-analizarlo... sin embargo, eso es lo que muchas personas intentan hacer con la notable obra del grupo de comediantes que, bajo el nombre de Monty Python, revolucionaron el humor en Europa y, eventualmente, el mundo.
Pero alguien olvidó avisarle al mundo.
Sea como sea, las bizarras rutinas de estos comediantes, han sido estudiadas por analistas, profesionales y aficionados, tratando de encontrar mensajes políticos y sociales.
Y tal vez, esos mensajes están ahí.
Pero yo prefiero disfrutar del trabajo de Monty Python en un nivel visceral, donde las sorpresas, y el excelso manejo del absurdo producen, más que risas, una explosión de humor e incredulidad ante lo que vemos en la pantalla.
Desde luego, muchas personas rechazarán a los Python, por considerarlos “bobos e infantiles”
Pero quien quiera ver más allá, notará una asombrosa sofisticación, y un espíritu “decontruccionista”, que no considera nada sagrado.

“Ekke Ekke Ekke Ekke Ptangya Zoooooooom Boing Ni!
Ni!
Ni!
Ni!”



Comentarios

Entradas populares