Brotherly
“Hello Gerald, this is Paul calling…”
Los hermanos varones, a menudo ofrecen la primera y, probablemente, la más intensa relación de un niño, con un igual.
Además de tener en común los genes, la clase social, la raza, la cultura, la generación... comparten las experiencias familiares, y los acontecimientos de la vida.
A los hermanos, les une el hecho de compartir también los juguetes, la ropa, el dormitorio, el baño, los espacios íntimos, y los recuerdos.
Todo ello, va a hacerles establecer fuertes alianzas, y sólidos lazos afectivos.
Normalmente, los hermanos van a recibir la misma educación, los mismos valores intergeneracionales, que van conformando la propia identidad.
Así vemos a modo de esbozo, que los hermanos durante la infancia, son una fuente constante de compañía mutua.
Lo característico de las interacciones entre ellos pequeños, son las expresiones intensas y desinhibidas de amor, afecto, lealtad, hostilidad, odio, y resentimiento.
Durante los años escolares, para establecer nuevas relaciones, los hermanos ponen en práctica, las habilidades sociales que han aprendido del otro.
Se enseñan mutuamente, habilidades para la resolución de conflictos, frente a situaciones de competitividad, rivalidad, ante los compromisos, y en materia de educación.
Durante la adolescencia, recurren unos a otros, y se convierten en confidentes, consejeros y asesores, particularmente, con relación a las amistades, las presiones de los compañeros, la sexualidad, y ante los problemas que puedan surgir.
Son grandes aliados.
Ya en la madurez, cuando los hermanos comienzan a tener sus propios hijos, y ya asumiendo su papel de tíos, pueden proveer una red adicional de cariño y apoyo para todos.
“Dreaming”
Brotherly es un cortometraje de 11 minutos, dirigido en el año de 2008, por J.C. Oliva.
Protagonizado por Kevin Fabian, Malcolm McRae, Mathis Fender, Jonathan Robert Kaplan, y Lisa Michel.
El guión es de Joe Brouillette, basado en una historia real, sucedida en Ohio en los años 70, que permanece sellada a fuego, en la mente y el corazón de la audiencia, muchísimo tiempo después del visionado.
Brotherly, no es la crónica de una aberración sexual, sino de la unión pura de 2 víctimas, en principio...
Así pues, privados de un padre cariñoso (Jonathan Robert Kaplan), y una madre amorosa (Lisa Michel), 2 hermanos:
Paul (Malcolm McRae) y Michael (Mathis Fender), deben valerse por sí mismos, en un medio que arrasa el alcoholismo de sus padres.
Se dice a menudo, en La Teoría Psicoanalítica, que el padre, es la máxima autoridad, que inscribe al niño en el orden simbólico.
Pero:
¿Qué autoridad se puede obtener, de una figura paterna que vive en el estupor, y la embriaguez constante?
Claramente, no hay tal cosa, como un padre ejemplar, en la vida de estos 2 niños, y tal vez es por eso, que no hay reglas claras para ellos, para la supervivencia, que en este caso significa, cuidarse el uno del otro.
Como el hermano menor, Paul, de 12 años, suele mojar la cama como producto de unas pesadillas, el hermano mayor, Michael, lo lleva a su dormitorio, y le ayuda a desnudarse, para que él le puede asear...
El niño, es muy aficionado de su hermano, y se ve que lo admira.
En ellos, no hay verdadero afecto hacia los padres, sólo amor fraternal.
Pronto, la proximidad de los 2 niños empieza por compartir la misma cama, ese hecho despierta algo en ambos.
Y la sexualidad, irrumpe con fuerza para el niño que experimenta su primera erección, ya que siente el cuerpo de su hermano, apretado contra el suyo.
Y es que en una casa gobernada por 2 adultos alcohólicas, estos chicos, menores de edad, encontrar un consuelo especial y refugio, son difíciles; por lo que recurren a uno de los tabúes más antiguos de la civilización occidental:
El incesto.
Hay un entresijo, en el área de la ambigüedad sexual, pues ambos experimentan el sexo, como una manifestación de la carnalidad, o más bien, como una instancia en la que se pueden redefinir sus roles, y sin temores o preocupaciones, acerca de las imágenes especulares de la edad adulta, la de sus padres, y por extensión, a la sociedad…
Cuidadosamente diseñado, Brotherly elude la controversia, al ofrecernos imágenes y “flashbacks” en poéticas secuencias, que nos hace entender, por qué estos personajes hacen lo que hacen, sin juzgarlos, o explotarlos.
Lo que hace de Brotherly, un cortometraje misterioso, que encuentra en una relación a priori escabrosa, un potente artefacto para pensar en las causas y consecuencias, que emanan de una situación de abandono físico, y desamparo emocional.
“I’m ready to talk about it”
Brotherly pone sobre la mesa, en escasos minutos, los límites de las relaciones entre hermanos, a nivel sexual y emocional.
A partir del testimonio del hermano pequeño, que se confiesa ya mayor (Kevin Fabian) ante la cámara, somos partícipes de una infancia durísima, que marcó a los protagonistas de por vida.
Oliva, indaga sin estridencias, en el seno de una familia desestructurada, y produce en el espectador, una fractura igual de potente, que sentimos a flor de piel, y que pone en duda, cualquier principio ético.
Y es que los problemas psicopatológicos que afrontan muchos de los niños, a causa de los problemas familiares, si observamos acá el contexto intrínseco, es fuerte.
Ya que a ciertas edades, los sentimientos se confunden:
¿Dónde empieza, y dónde acaba una relación de amistad, respecto otra, de amor?
¿Qué separa el afecto, de la absoluta dependencia?
Tenemos a 2 hermanos que callan un drama familiar; sus padres están enfermos, y no pueden cuidar de los pequeños...
Pero Brotherly quiere hacer ver que, de la desgracia, surge una historia de esperanza, un poco de luz...
No me parece.
La lectura que hago de Brotherly es la siguiente:
Tal parece que Paul no quiere hablar de un pasado:
¿Por qué?
Probablemente, porque algo sucedió en su vida familiar, supongo o pudo ser, que su hermano haya muerto, y eso disparó la necesidad de Paul, para hablar sobre la relación que tuvo con su hermano, que lo marcó desde la infancia.
Por tanto, vemos una sala, a modo de habitación para interrogatorios, típica de los policiales.
Allí, Paul, un hombre mayor, en sus 40s, fumador, parece nervioso, y con cierta falta de “masculinidad” en sus gestos.
Su relato, inicia cuando tenía 10 años…
Los exteriores de su casa, con rayos incluidos, denotan un ambiente hostil, y oscuro.
Vemos escenas con los padres, tirados en los sillones, ya entrada la noche:
Él, con latas de cerveza; ella con frascos de píldoras y alcohol.
Vemos que Paul tiene pesadillas, y en un muy rápido “flash”, vemos la imagen de la madre, acompañadas las escenas con gemidos de extraña procedencia, probablemente terror, o tortura.
Vemos imágenes del padre, increpándolo, y a la madre, diciéndole:
“No eres mi hijo”, mientras Paul se sacude en su cama, causándole esas pesadillas, pues en algún momento se ve, que la madre le dice:
“Te vas a ir al infierno”, que “es un enfermo”
De pronto, entra Michael, su hermano adolescente, y lo despierta.
Michael, denotando cariño y consentimiento, lo lleva en brazos, a lo que parece ser su habitación, y le dice que se quite la ropa, pues se ha orinado en la cama y en sus pijamas, por lo que hace lo que le pide…
Paul ve en él, un ejemplo “tranquilo” de autoridad.
Parece, pues creo que sucede, que Michael seca a su hermano en las partes íntimas, mientras éste le pregunta:
“Has tomado Coca-Cola antes de irse a dormir”, para no volver a orinar la cama, pues tenía 10 años, y me parece que ese hecho, es un síntoma de que algo más terrible, le sucede al niño.
Paul es muy callado, aún con su hermano, pues después de asearlo y mudarlo, le pide “si puede quedarse a dormir con él, en su cama”
De pronto, hay “flashbacks” sobre los comportamientos de los miembros de la familia:
El padre, violento; una madre que no muestra signos de amor y cariño; aquí debo decir, que el relato de Brotherly, es contado desde su punto de vista de Paul adulto, en recuerdos de cuando era niño…
Entonces, Paul dice que su hermano “era real”
Ese detalle, me hace pensar, que él murió…
“Era real” probablemente, porque era el único que le demostraba cariño, atención, y cuidados.
La escena que desata los acontecimientos, deduzco, es la primera erección de Paul, cuando le pregunta a Mike, si “está despierto”
Esa pregunta, la interpreto como un despertar de la sexualidad del niño, en un momento natural de confusión, en una pregunta hacia su hermano más desarrollado, aquí aún, no hay nada sexual, pero si hay un descubrimiento en el cambio del cuerpo, de un niño a adolescente.
Cuando Paul le pide a su hermano que “no lo deje” pues necesita de protección ante los crápulas padres que tiene, le dice Mike que “si, pero que lo deje dormir, pues tiene partido al día siguiente”
Divago si digo que, es costumbre, no tener relaciones sexuales antes de los partidos, pues se cree “disminuye la energía”, por tanto, el joven Michael, está “con toda la leche” literalmente hablando, hay que decirlo todo...
Después, hay “una invitación”, un movimiento curioso del cuerpo de Paul, probablemente, un acomodo de sus glúteos, contra una probable erección nocturna de su hermano, hace que Mike lo abrace; y Paul sienta el vigor de su miembro sexual.
Curiosamente, todos esos signos, a Paul no lo asustaron, pues se trataba de su hermano, la imagen de alguien “noble y familiar”, que probablemente admiraba, pues describe cómo son sus brazos, “fuertes y cálidos”; y lo vio como protección contra toda la violencia que se vivía en el hogar.
Paul adulto, llega a confesar, que era “el mejor momento de su vida, su mejor recuerdo”
Posteriormente, confiesa que, a partir de ahí, comenzaron a tener, más frecuentemente, relaciones sexuales…
Aquí veo que, lo que pudo ser “cariño y protección”, pronto se convirtió en puro sexo…
En un “flashback” se nota cuando Mike entra a la habitación de Paul, este sufriendo pesadillas, y se lo lleva a su cuarto en brazos…
¿Qué más pesadilla que el estupro?, pues creo que Mike se aprovechó de la situación de temor de Paul.
Pasados 2 años, en “estupro consentido”, Michael se va a la universidad, abandona el hogar, y deja a Paul solo.
En la cabeza de Paul, cree que “estaban casados, como sus padres” aquí creo que Michael, nunca le dijo, ni le aclaró nada sobre la situación meramente sexual de ambos; sin embargo, hay una mirada de despedida de Michael hacia Paul, que denota que en verdad le quería, vamos, pues es el hermano/amante.
El que Paul preguntara:
“Cómo pudiste dejarme así, con ellos, quien va a cuidar de mí” responde mis dudas en el cuestionamiento anterior.
Diferente hubiera sido, si Michael le hubiera hablado desde el principio, dándole “apoyo emocional” para seguir adelante, en vez de dejarlo atado, y sin defensas.
Luego habla que Michael está casado, y que no hablan del pasado, y le confiesa a esa “persona misteriosa”, probablemente a nosotros mismos, que “es la primera persona que sabe de lo que pasó”
Se nota que Paul no pudo superar las experiencias que tuvo con su hermano, y la cámara toma un picado sobre la mesa, y lo que parece ser la mano de un niño, apaga la grabadora donde se guardó en cinta, todo el relato, y acaba el cortometraje.
¿Qué se sabe del destino de Michael, o el de sus padres?
Es incierto.
La historia, en apariencia, “basada en un hecho real” no es necesariamente que haya pasado en un caso concreto, pues se desconoce el caso real, sino del caso que sucede, una y otra vez, en cualquier hogar con similares características, donde se desarrolla una situación parecida, cualquiera.
Puntos negativos:
Eso, que nunca explican el porqué de la confesión; no hay una evolución en la historia, y no apunta a un final; es una viñeta de un hecho pasado hace muchos años, y que a manera de reconciliación, o paz interior, se hace necesario decírselo a alguien.
Cuidado por la temática porque a mí por lo menos, me queda la duda de si Paul va a ver a un siquiatra, está ingresado en algún centro, una Estación Policial, o en todo caso, a quien se lo cuenta…
¿A otro niño?
Con todo, Brotherly me ha dejado pensativo, las miradas de los hermanos son difíciles de ignorar, entre deseo y amor, y confieso que me gusto la escenografía, por su aire de suburbio estadounidense; y el cariño entre ellos, pero el tipo de apoyo de los 2, y la mente de Paul ya grande, son algo espeluznante, porque me hace pensar que Mike se aprovechó de la infancia de Paul.
Y es que los dramas de la infancia, no se olvidan, siguen vivos dentro de nosotros.
En el pasado, si alguien atacó la parte más sensible e inocente de nuestra naturaleza, cuando todavía no sabíamos protegernos; ese daño queda para siempre, y más si los padres son verdugos por su acción u omisión.
Por último, rescato de Brotherly, una bella banda sonora, en 2 piezas clásicas:
“Images II pour piano/Et la lune descend sur le temple qui fuit” de Claude Debussy, interpretada por Philippe Entremont; y “Kinderszenen, Opus 15/Träumerei” de Robert Shumann, por Donald Betts.
“I was ten years old”
El incesto, es la última barrera.
Cuando ya la sociedad acepta, al menos legalmente, casi cualquier relación entre adultos, todavía las luces rojas se encienden, si se trata de 2 hermanos.
El incesto es entonces, cualquier forma de relación sexual, entre miembros de una familia, cuyos vínculos por afinidad o consanguineidad, sean muy estrechos.
Algunas veces, es consensuado, esto es, con el consentimiento de las 2 personas que, además, pueden ser adultas; pero ello no les quita el rótulo de incestuosos.
Es incesto agravado con estupro, se da si solo uno de los miembros de esa pareja incestuosa, es mayor de edad, sin importar si hay consentimiento del menor, puesto que legalmente, se puede asumir influencia, coerción, o chantaje del adulto hacia el menor, aunque el menor esté a punto de cumplir su mayoría de edad.
En la cultura machista y falocéntrica que prevalece en el mundo, marca con características especiales, el trauma que le toca vivir un niño abusado sexualmente, y las secuelas que tendrá que enfrentar.
La sociedad, acepta como principio indiscutible, que un niño penetrado sexualmente “se convierte en un maricón”, y será homosexual.
Y el estigma cultural sobre la homosexualidad, casi no tiene fisuras.
Así, el abuso sexual de los niños varones, es un tabú, y tiene una mayor carga de estigmatización social, si se divulga.
Por eso, la familia guarda el secreto con mayor esmero, y también el niño guarda un silencio más profundo, y más prolongado.
Lo que sucede es que, el silencio que cubre los hechos, es mayor.
En la década de 1980, comenzó a estudiarse en profundidad el abuso sexual infantil; cuando las acusaciones contra “padres de familia” generaron la aparición de hipótesis, como la de “los falsos recuerdos”
Según la “False Memory Syndrome Foundation”, los “falsos recuerdos” han sido protagonistas en muchas investigaciones, y casos judiciales, incluyendo especialmente, casos de supuesto abuso sexual.
La Fundación para El Síndrome de Falso Recuerdo (FMSF), fue formada por un grupo de padres, que habían sido acusados de abuso sexual infantil, con el objetivo de cuestionar dichas acusaciones.
Cuenta con el apoyo de grupos de padres, que han sido alejados de sus hijos, por causas judiciales, por los abogados que los defienden en de esas acusaciones, y por profesionales que trabajan como peritos de parte en estos casos, frente a los juzgados.
A su vez, tiene abogados y académicos, que apoyan la causa, y que promueven la hipótesis del FMS, y critican la validez de los recuerdos recobrados.
Por tanto, callar es un problema mayor del que se oculta, es necesario hacerles saber que no están solos, y que el amor entre hermanos varones, no es ni debe ser sexual.
“He was real”
Los hermanos varones, a menudo ofrecen la primera y, probablemente, la más intensa relación de un niño, con un igual.
Además de tener en común los genes, la clase social, la raza, la cultura, la generación... comparten las experiencias familiares, y los acontecimientos de la vida.
A los hermanos, les une el hecho de compartir también los juguetes, la ropa, el dormitorio, el baño, los espacios íntimos, y los recuerdos.
Todo ello, va a hacerles establecer fuertes alianzas, y sólidos lazos afectivos.
Normalmente, los hermanos van a recibir la misma educación, los mismos valores intergeneracionales, que van conformando la propia identidad.
Así vemos a modo de esbozo, que los hermanos durante la infancia, son una fuente constante de compañía mutua.
Lo característico de las interacciones entre ellos pequeños, son las expresiones intensas y desinhibidas de amor, afecto, lealtad, hostilidad, odio, y resentimiento.
Durante los años escolares, para establecer nuevas relaciones, los hermanos ponen en práctica, las habilidades sociales que han aprendido del otro.
Se enseñan mutuamente, habilidades para la resolución de conflictos, frente a situaciones de competitividad, rivalidad, ante los compromisos, y en materia de educación.
Durante la adolescencia, recurren unos a otros, y se convierten en confidentes, consejeros y asesores, particularmente, con relación a las amistades, las presiones de los compañeros, la sexualidad, y ante los problemas que puedan surgir.
Son grandes aliados.
Ya en la madurez, cuando los hermanos comienzan a tener sus propios hijos, y ya asumiendo su papel de tíos, pueden proveer una red adicional de cariño y apoyo para todos.
“Dreaming”
Brotherly es un cortometraje de 11 minutos, dirigido en el año de 2008, por J.C. Oliva.
Protagonizado por Kevin Fabian, Malcolm McRae, Mathis Fender, Jonathan Robert Kaplan, y Lisa Michel.
El guión es de Joe Brouillette, basado en una historia real, sucedida en Ohio en los años 70, que permanece sellada a fuego, en la mente y el corazón de la audiencia, muchísimo tiempo después del visionado.
Brotherly, no es la crónica de una aberración sexual, sino de la unión pura de 2 víctimas, en principio...
Así pues, privados de un padre cariñoso (Jonathan Robert Kaplan), y una madre amorosa (Lisa Michel), 2 hermanos:
Paul (Malcolm McRae) y Michael (Mathis Fender), deben valerse por sí mismos, en un medio que arrasa el alcoholismo de sus padres.
Se dice a menudo, en La Teoría Psicoanalítica, que el padre, es la máxima autoridad, que inscribe al niño en el orden simbólico.
Pero:
¿Qué autoridad se puede obtener, de una figura paterna que vive en el estupor, y la embriaguez constante?
Claramente, no hay tal cosa, como un padre ejemplar, en la vida de estos 2 niños, y tal vez es por eso, que no hay reglas claras para ellos, para la supervivencia, que en este caso significa, cuidarse el uno del otro.
Como el hermano menor, Paul, de 12 años, suele mojar la cama como producto de unas pesadillas, el hermano mayor, Michael, lo lleva a su dormitorio, y le ayuda a desnudarse, para que él le puede asear...
El niño, es muy aficionado de su hermano, y se ve que lo admira.
En ellos, no hay verdadero afecto hacia los padres, sólo amor fraternal.
Pronto, la proximidad de los 2 niños empieza por compartir la misma cama, ese hecho despierta algo en ambos.
Y la sexualidad, irrumpe con fuerza para el niño que experimenta su primera erección, ya que siente el cuerpo de su hermano, apretado contra el suyo.
Y es que en una casa gobernada por 2 adultos alcohólicas, estos chicos, menores de edad, encontrar un consuelo especial y refugio, son difíciles; por lo que recurren a uno de los tabúes más antiguos de la civilización occidental:
El incesto.
Hay un entresijo, en el área de la ambigüedad sexual, pues ambos experimentan el sexo, como una manifestación de la carnalidad, o más bien, como una instancia en la que se pueden redefinir sus roles, y sin temores o preocupaciones, acerca de las imágenes especulares de la edad adulta, la de sus padres, y por extensión, a la sociedad…
Cuidadosamente diseñado, Brotherly elude la controversia, al ofrecernos imágenes y “flashbacks” en poéticas secuencias, que nos hace entender, por qué estos personajes hacen lo que hacen, sin juzgarlos, o explotarlos.
Lo que hace de Brotherly, un cortometraje misterioso, que encuentra en una relación a priori escabrosa, un potente artefacto para pensar en las causas y consecuencias, que emanan de una situación de abandono físico, y desamparo emocional.
“I’m ready to talk about it”
Brotherly pone sobre la mesa, en escasos minutos, los límites de las relaciones entre hermanos, a nivel sexual y emocional.
A partir del testimonio del hermano pequeño, que se confiesa ya mayor (Kevin Fabian) ante la cámara, somos partícipes de una infancia durísima, que marcó a los protagonistas de por vida.
Oliva, indaga sin estridencias, en el seno de una familia desestructurada, y produce en el espectador, una fractura igual de potente, que sentimos a flor de piel, y que pone en duda, cualquier principio ético.
Y es que los problemas psicopatológicos que afrontan muchos de los niños, a causa de los problemas familiares, si observamos acá el contexto intrínseco, es fuerte.
Ya que a ciertas edades, los sentimientos se confunden:
¿Dónde empieza, y dónde acaba una relación de amistad, respecto otra, de amor?
¿Qué separa el afecto, de la absoluta dependencia?
Tenemos a 2 hermanos que callan un drama familiar; sus padres están enfermos, y no pueden cuidar de los pequeños...
Pero Brotherly quiere hacer ver que, de la desgracia, surge una historia de esperanza, un poco de luz...
No me parece.
La lectura que hago de Brotherly es la siguiente:
Tal parece que Paul no quiere hablar de un pasado:
¿Por qué?
Probablemente, porque algo sucedió en su vida familiar, supongo o pudo ser, que su hermano haya muerto, y eso disparó la necesidad de Paul, para hablar sobre la relación que tuvo con su hermano, que lo marcó desde la infancia.
Por tanto, vemos una sala, a modo de habitación para interrogatorios, típica de los policiales.
Allí, Paul, un hombre mayor, en sus 40s, fumador, parece nervioso, y con cierta falta de “masculinidad” en sus gestos.
Su relato, inicia cuando tenía 10 años…
Los exteriores de su casa, con rayos incluidos, denotan un ambiente hostil, y oscuro.
Vemos escenas con los padres, tirados en los sillones, ya entrada la noche:
Él, con latas de cerveza; ella con frascos de píldoras y alcohol.
Vemos que Paul tiene pesadillas, y en un muy rápido “flash”, vemos la imagen de la madre, acompañadas las escenas con gemidos de extraña procedencia, probablemente terror, o tortura.
Vemos imágenes del padre, increpándolo, y a la madre, diciéndole:
“No eres mi hijo”, mientras Paul se sacude en su cama, causándole esas pesadillas, pues en algún momento se ve, que la madre le dice:
“Te vas a ir al infierno”, que “es un enfermo”
De pronto, entra Michael, su hermano adolescente, y lo despierta.
Michael, denotando cariño y consentimiento, lo lleva en brazos, a lo que parece ser su habitación, y le dice que se quite la ropa, pues se ha orinado en la cama y en sus pijamas, por lo que hace lo que le pide…
Paul ve en él, un ejemplo “tranquilo” de autoridad.
Parece, pues creo que sucede, que Michael seca a su hermano en las partes íntimas, mientras éste le pregunta:
“Has tomado Coca-Cola antes de irse a dormir”, para no volver a orinar la cama, pues tenía 10 años, y me parece que ese hecho, es un síntoma de que algo más terrible, le sucede al niño.
Paul es muy callado, aún con su hermano, pues después de asearlo y mudarlo, le pide “si puede quedarse a dormir con él, en su cama”
De pronto, hay “flashbacks” sobre los comportamientos de los miembros de la familia:
El padre, violento; una madre que no muestra signos de amor y cariño; aquí debo decir, que el relato de Brotherly, es contado desde su punto de vista de Paul adulto, en recuerdos de cuando era niño…
Entonces, Paul dice que su hermano “era real”
Ese detalle, me hace pensar, que él murió…
“Era real” probablemente, porque era el único que le demostraba cariño, atención, y cuidados.
La escena que desata los acontecimientos, deduzco, es la primera erección de Paul, cuando le pregunta a Mike, si “está despierto”
Esa pregunta, la interpreto como un despertar de la sexualidad del niño, en un momento natural de confusión, en una pregunta hacia su hermano más desarrollado, aquí aún, no hay nada sexual, pero si hay un descubrimiento en el cambio del cuerpo, de un niño a adolescente.
Cuando Paul le pide a su hermano que “no lo deje” pues necesita de protección ante los crápulas padres que tiene, le dice Mike que “si, pero que lo deje dormir, pues tiene partido al día siguiente”
Divago si digo que, es costumbre, no tener relaciones sexuales antes de los partidos, pues se cree “disminuye la energía”, por tanto, el joven Michael, está “con toda la leche” literalmente hablando, hay que decirlo todo...
Después, hay “una invitación”, un movimiento curioso del cuerpo de Paul, probablemente, un acomodo de sus glúteos, contra una probable erección nocturna de su hermano, hace que Mike lo abrace; y Paul sienta el vigor de su miembro sexual.
Curiosamente, todos esos signos, a Paul no lo asustaron, pues se trataba de su hermano, la imagen de alguien “noble y familiar”, que probablemente admiraba, pues describe cómo son sus brazos, “fuertes y cálidos”; y lo vio como protección contra toda la violencia que se vivía en el hogar.
Paul adulto, llega a confesar, que era “el mejor momento de su vida, su mejor recuerdo”
Posteriormente, confiesa que, a partir de ahí, comenzaron a tener, más frecuentemente, relaciones sexuales…
Aquí veo que, lo que pudo ser “cariño y protección”, pronto se convirtió en puro sexo…
En un “flashback” se nota cuando Mike entra a la habitación de Paul, este sufriendo pesadillas, y se lo lleva a su cuarto en brazos…
¿Qué más pesadilla que el estupro?, pues creo que Mike se aprovechó de la situación de temor de Paul.
Pasados 2 años, en “estupro consentido”, Michael se va a la universidad, abandona el hogar, y deja a Paul solo.
En la cabeza de Paul, cree que “estaban casados, como sus padres” aquí creo que Michael, nunca le dijo, ni le aclaró nada sobre la situación meramente sexual de ambos; sin embargo, hay una mirada de despedida de Michael hacia Paul, que denota que en verdad le quería, vamos, pues es el hermano/amante.
El que Paul preguntara:
“Cómo pudiste dejarme así, con ellos, quien va a cuidar de mí” responde mis dudas en el cuestionamiento anterior.
Diferente hubiera sido, si Michael le hubiera hablado desde el principio, dándole “apoyo emocional” para seguir adelante, en vez de dejarlo atado, y sin defensas.
Luego habla que Michael está casado, y que no hablan del pasado, y le confiesa a esa “persona misteriosa”, probablemente a nosotros mismos, que “es la primera persona que sabe de lo que pasó”
Se nota que Paul no pudo superar las experiencias que tuvo con su hermano, y la cámara toma un picado sobre la mesa, y lo que parece ser la mano de un niño, apaga la grabadora donde se guardó en cinta, todo el relato, y acaba el cortometraje.
¿Qué se sabe del destino de Michael, o el de sus padres?
Es incierto.
La historia, en apariencia, “basada en un hecho real” no es necesariamente que haya pasado en un caso concreto, pues se desconoce el caso real, sino del caso que sucede, una y otra vez, en cualquier hogar con similares características, donde se desarrolla una situación parecida, cualquiera.
Puntos negativos:
Eso, que nunca explican el porqué de la confesión; no hay una evolución en la historia, y no apunta a un final; es una viñeta de un hecho pasado hace muchos años, y que a manera de reconciliación, o paz interior, se hace necesario decírselo a alguien.
Cuidado por la temática porque a mí por lo menos, me queda la duda de si Paul va a ver a un siquiatra, está ingresado en algún centro, una Estación Policial, o en todo caso, a quien se lo cuenta…
¿A otro niño?
Con todo, Brotherly me ha dejado pensativo, las miradas de los hermanos son difíciles de ignorar, entre deseo y amor, y confieso que me gusto la escenografía, por su aire de suburbio estadounidense; y el cariño entre ellos, pero el tipo de apoyo de los 2, y la mente de Paul ya grande, son algo espeluznante, porque me hace pensar que Mike se aprovechó de la infancia de Paul.
Y es que los dramas de la infancia, no se olvidan, siguen vivos dentro de nosotros.
En el pasado, si alguien atacó la parte más sensible e inocente de nuestra naturaleza, cuando todavía no sabíamos protegernos; ese daño queda para siempre, y más si los padres son verdugos por su acción u omisión.
Por último, rescato de Brotherly, una bella banda sonora, en 2 piezas clásicas:
“Images II pour piano/Et la lune descend sur le temple qui fuit” de Claude Debussy, interpretada por Philippe Entremont; y “Kinderszenen, Opus 15/Träumerei” de Robert Shumann, por Donald Betts.
“I was ten years old”
El incesto, es la última barrera.
Cuando ya la sociedad acepta, al menos legalmente, casi cualquier relación entre adultos, todavía las luces rojas se encienden, si se trata de 2 hermanos.
El incesto es entonces, cualquier forma de relación sexual, entre miembros de una familia, cuyos vínculos por afinidad o consanguineidad, sean muy estrechos.
Algunas veces, es consensuado, esto es, con el consentimiento de las 2 personas que, además, pueden ser adultas; pero ello no les quita el rótulo de incestuosos.
Es incesto agravado con estupro, se da si solo uno de los miembros de esa pareja incestuosa, es mayor de edad, sin importar si hay consentimiento del menor, puesto que legalmente, se puede asumir influencia, coerción, o chantaje del adulto hacia el menor, aunque el menor esté a punto de cumplir su mayoría de edad.
En la cultura machista y falocéntrica que prevalece en el mundo, marca con características especiales, el trauma que le toca vivir un niño abusado sexualmente, y las secuelas que tendrá que enfrentar.
La sociedad, acepta como principio indiscutible, que un niño penetrado sexualmente “se convierte en un maricón”, y será homosexual.
Y el estigma cultural sobre la homosexualidad, casi no tiene fisuras.
Así, el abuso sexual de los niños varones, es un tabú, y tiene una mayor carga de estigmatización social, si se divulga.
Por eso, la familia guarda el secreto con mayor esmero, y también el niño guarda un silencio más profundo, y más prolongado.
Lo que sucede es que, el silencio que cubre los hechos, es mayor.
En la década de 1980, comenzó a estudiarse en profundidad el abuso sexual infantil; cuando las acusaciones contra “padres de familia” generaron la aparición de hipótesis, como la de “los falsos recuerdos”
Según la “False Memory Syndrome Foundation”, los “falsos recuerdos” han sido protagonistas en muchas investigaciones, y casos judiciales, incluyendo especialmente, casos de supuesto abuso sexual.
La Fundación para El Síndrome de Falso Recuerdo (FMSF), fue formada por un grupo de padres, que habían sido acusados de abuso sexual infantil, con el objetivo de cuestionar dichas acusaciones.
Cuenta con el apoyo de grupos de padres, que han sido alejados de sus hijos, por causas judiciales, por los abogados que los defienden en de esas acusaciones, y por profesionales que trabajan como peritos de parte en estos casos, frente a los juzgados.
A su vez, tiene abogados y académicos, que apoyan la causa, y que promueven la hipótesis del FMS, y critican la validez de los recuerdos recobrados.
Por tanto, callar es un problema mayor del que se oculta, es necesario hacerles saber que no están solos, y que el amor entre hermanos varones, no es ni debe ser sexual.
“He was real”
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