The Farmer's Daughter
“To believe in our type of 100% Americanism.
Now, a 100% American is...”
Hace 69 años, EEUU no tenía la remota idea de lo histórico que sería tener a una mujer en la carrera política por La Presidencia del país.
Actualmente, si en Estados Unidos sólo votasen los hombres, como ocurría hasta 1920, El Republicano Donald Trump, sería el próximo Presidente.
La victoria sería aplastante, e inapelable.
Mientras que si sólo votasen las mujeres, Hillary Clinton ganaría con facilidad.
La división por sexos a la hora de votar no es nueva, pero se ha acentuado en la campaña para las elecciones del 8 de noviembre de 2016, la primera en la que una mujer está en condiciones de llegar a La Casa Blanca.
Las acusaciones por agresión sexual contra Trump, y sus comentarios machistas, como sus declaraciones contra los inmigrantes hispanos, o los planes para discriminar a los musulmanes, pueden acabar siendo el muro en el que se estrellen sus ambiciones, dañando las aspiraciones políticas de muchos republicanos.
Y es que a finales del siglo XVIII, los gobiernos occidentales estaban en manos de hombres blancos, que probablemente no podían imaginar la candidatura de una mujer a ningún cargo elegido, y mucho menos a La Presidencia.
Abigail Adams, se adelantó a su tiempo en su defensa de la inclusión.
“Acuérdate de las mujeres”, le escribió a su marido, el líder revolucionario John Adams, en marzo de 1776, cuando fue delegado al Congreso Continental.
Le instó a que El Congreso tuviera en cuenta los derechos de la mujer, al sentar las bases de la independencia estadounidense:
“Recuerda que todos los hombres serían tiranos si pudieran.
Si no se les presta especial cuidado y atención a las mujeres, estamos decididas a fomentar una rebelión, y no nos atendremos a respetar ninguna ley en la que no tengamos voz, ni representación”
Abigail Adams, se convirtió en Primera Dama, cuando su marido sucedió a George Washington como Presidente, en 1797.
Entre la carta que escribió Adams, y la campaña electoral de Hillary Rodham Clinton, la primera candidata a la presidencia políticamente viable, generaciones de mujeres estadounidenses, vieron superados los estereotipos, y rompieron las barreras para acceder a cargos electorales.
En 1887, Susanna Madora Salter, fue elegida Alcaldesa de Argonia, Kansas; y se convirtió en la primera mujer alcaldesa de Estados Unidos, pocas semanas después de que las mujeres en Kansas obtuvieran el derecho al voto.
Algunos hombres, habían presentado la candidatura de Salter, de 27 años de edad, como una broma, pero la broma fue a costa de ellos, cuando Salter ganó la elección.
El 2 de abril de 1916, Jeannette Rankin, republicana de Montana, ocupó su escaño en La Cámara de Representantes de Estados Unidos, como la primera mujer elegida al Congreso, incluso antes de que la 19ª Enmienda en 1920, otorgara el derecho a todas las mujeres estadounidense, a votar en las elecciones.
Rankin sostenía, que los talentos y los conocimientos de las mujeres, eran necesarios para crear mejores sociedades:
“Los hombres y las mujeres, son como las manos, derecha e izquierda, no tiene sentido, no utilizar ambas”, dijo.
En 1932, Hattie Caraway, en un principio, designada para ocupar el escaño de su difunto esposo, se convirtió en la primera mujer elegida al Senado por derecho propio, en representación de Arkansas.
Apodada “Hattie, La Silenciosa” debido a sus escasos discursos públicos, Caraway se tomó en serio sus responsabilidades, y se ganó fama por su integridad.
Margaret Chase Smith, representó al estado de Maine, primero en La Cámara de Representantes, y luego en el Senado; siendo la primera mujer en desempeñar cargos en ambas cámaras del Congreso.
En 1964, la republicana Smith, se convirtió en la primera mujer en ser considerada candidata a La Presidencia, en una convención nacional; pero perdió la candidatura ante Barry Goldwater.
En 1972, Shirley Chisholm de New York, fue la primera mujer afroamericana en ser elegida al Congreso, y defensora destacada de los derechos de las minorías; hizo campaña por la candidatura demócrata a la presidencia.
Chisholm, hizo grandes esfuerzos para que la tomasen en serio; el presentador de noticias, Walter Cronkite, anunció su candidatura diciendo:
“Un nuevo sombrero, más bien una pamela, se ha lanzado al ruedo de la carrera presidencial del Partido Demócrata”
Chisholm perdió la candidatura, ante George McGovern.
En 1984, Geraldine Ferraro hizo campaña como candidata demócrata a la vicepresidencia; al aceptar la candidatura, la representante de New York dijo:
“Al elegir a una mujer para el segundo cargo más alto de nuestro país, transmiten un poderoso mensaje a todos los estadounidenses:
Que no hay puertas que no podamos abrir.
No pondremos ningún límite a los logros”
Cuando El Presidente George W. Bush, pronunció su discurso del Estado de La Unión en enero de 2007, la primera mujer presidenta de La Cámara de Representantes, Nancy Pelosi, de San Francisco, se sentó detrás de él en el estrado.
Hay que destacar que la persona que preside La Cámara, es la siguiente en la línea de sucesión a La Presidencia, después del Vicepresidente.
El Presidente Bush, calificó la ascensión de Pelosi al cargo de Presidenta de La Cámara de “histórico para nuestro país.
Y como padre de jóvenes mujeres... creo que es importante”
En 2008, Sarah Palin se convirtió en la primera mujer candidata a la vicepresidencia del Partido Republicano; y en junio de 2008, la ex Primera Dama, Hillary Rodham Clinton, en ese entonces, senadora de New York, puso fin a su histórica campaña para La Presidencia de Estados Unidos.
Llegados al mes de junio, los 18 millones de votos que había ganado en las primarias, no iban a ser suficientes para asegurar la candidatura por el Partido Demócrata; y perdió la nominación demócrata ante Barack Obama.
“Piensen en el enorme progreso que ya hemos hecho”, dijo Clinton a sus partidarios.
“De ahora en adelante, no será nada especial que una mujer gane victorias en las elecciones primarias de los estados, ni que la campaña de una mujer esté en reñida carrera para ser nuestra candidata, ni pensar que una mujer pueda ser presidente de Estados Unidos”
El 12 de abril de 2015, la especulación terminó, cuando Clinton anunció formalmente su candidatura por correo electrónico, y a través de la publicación de un video, donde decía:
“Cada día, los estadounidenses necesitan un defensor.
Y yo quiero ser esa defensora”
La historia política de EEUU, la ha elegido en 2016, como la más dura contendiente para La Presidencia de su país, con una carrera política impresionante, entre la que destaca como Secretaria de Estado de los Estados Unidos de 2009 a 2013.
“A Gal Who Really Goes To Town!”
The Farmer's Daughter es una comedia del año 1947, dirigida por H.C. Potter.
Protagonizada por Loretta Young, Joseph Cotten, Ethel Barrymore, Charles Bickford, Rose Hobart, Rhys Williams, Harry Davenport, Tom Powers, William Harrigan, Lex Barker, Harry Shannon, Keith Andes, Thurston Hall, entre otros.
El guión es de Allen Rivkin y Laura Kerr, basados en la obra de teatro “Juurakon Hulda” de Hella Wuolijoki, bajo el seudónimo de Juhani Tervapää.
Los derechos para el cine, fueron comprados inicialmente por David O. Selznick; que tenía la intención de que The Farmer's Daughter sea un vehículo para Ingrid Bergman; pero ella declinó el papel, debido en parte a los rumores de que Joseph Cotten tenía un romance con ella; por lo que el papel de Bergman en la película, fue tomado por Loretta Young.
Pero entre otras postulantes, se intentó colar Dorothy McGuire y Sonja Henie, hasta que los derechos se vendieron a la RKO Radio Pictures, manteniendo a Young en el papel.
The Farmer's Daughter, ganó el premio Oscar a La Mejor Actriz para Loretta Young, y fue el filme también estuvo nominado como mejor actor de reparto por Charles Bickford.
El Oscar ganado por Young, es famoso en cuanto a controversia:
Rosalind Russell, ganó el Globo de Oro y todas las encuestas, y hasta los apostadores de Las Vegas la daban como ganadora.
Mientras Young aparecía última en las predicciones.
La noche de la ceremonia, todo fue saliendo según lo previsto, hasta cuando Fredric March, abriendo el sobre para revelar quién era la mejor actriz; Rosalind Russell involuntariamente empezó a levantarse de su asiento, pero el nombre fue el de Loretta Young…
Todos retuvieron el aliento en estado de total asombro, y a Russell no le quedó otra solución, que seguir con el envión, y pararse para aplaudir a su mejor amiga.
Esta ocasión, fue una de las sorpresas “desagradables” o mejor dicho, inusitada del Oscar, más citada y recordada.
Por mucho que se alegró, al ser entrevistada en la sala de prensa, Young dijo:
“¿Y Roz?
¿Ahora qué le digo a Roz?”
La acción de The Farmer's Daughter sigue a Katie Holstrom (Loretta Young), una mujer de origen sueco, que abandona la granja de su familia, y deja a su padre (Harry Shannon), madre (Anna Q. Nilsson), y 3 hermanos:
Olaf (Lex Barker), Sven (Keith Andes) y Peter (James Arness); y toma rumbo a la gran ciudad, “gracias” al “buen samaritano” de Adolph Petree (Rhys Williams)
Allí, se emplea como sirvienta en la casa del congresista, Glenn Morley (Joseph Cotten) que vive junto a su madre, la viuda Agatha (Ethel Barrymore), y el mayordomo, Joseph Clancey (Charles Bickford); y a fuerza de tesón, pronto llega a triunfar en la política, abandonando la enfermería, logrando un puesto en Washington, dentro del Congreso, tras vencer al político corrupto, Anders J. Finley (Art Baker)
The Farmer's Daughter es una película que reconforta, que vigoriza, que se saborea plano a plano, segundo a segundo.
Captamos toda su dimensión, todo su mensaje, no tiene desperdicio porque nos engancha desde el comienzo.
Su director, H.C. Potter, nos hace disfrutar con cada toque de comedia, y nos hace enfurecernos con la desalmada clase política, que siempre termina ocultando sus perversos objetivos.
“Tell us what kind of a representative you'd like”
Después de triunfar en la escena de Broadway, el director de teatro, H.C. Potter, se lanzaba al mundo de Hollywood, donde dirigiría más de una veintena de obras, especializándose en la comedia.
Entre sus títulos dirigidos, se incluyen The Farmer's Daughter, haciendo un uso de la fotografía en blanco y negro, y la puesta en escena magníficas.
Con un buen guión, con diálogos rápidos, ingeniosos y divertidos; los personajes de carácter, están bien perfilados, y excepcionalmente interpretados.
Con gran dirección de actores entre los que destaca Loretta Young, lástima los peinados tipo Princesa Leia; hacen de la propuesta un muy atractivo y actual filme político, con tono amable de comedia.
Si en The Farmer's Daughter no vemos algún paralelismo de la realidad en la contienda política actual, entre Trump y Clinton, es porque estamos ciegos.
Cabe destacar, el empeño de una mujer que quiere salir de su medio rural, para lograr una profesión en la ciudad, la enfermería.
En el camino, como mujer joven y atractiva, es víctima del abuso por su condición, por parte de un pintor conocido por la familia:
El hombre quiere abusar de ella, pero al no lograrlo, le roba dinero…
El abuso como tal, no es como lo pensamos actualmente, pues acá lo tenemos dentro del Código Hays de producción cinematográfica, que prohibía cualquier insinuación de carácter sexual, aunque sea muy evidente.
Así, la chica sin dinero, se verá obligada a buscar trabajo, y lo hace siendo sirvienta en una mansión.
A partir de acá, The Farmer's Daughter es casi la base de todas las novelas latinoamericanas, en las que una mujer pobre pero inteligente, que trabajando como sirvienta, logra ascender y superarse profesionalmente.
Aunque también hay algo del cuento de “La Cenicienta” pero sin villanos que estén ensombreciendo el relato; de hecho, no hay antagonista directo, solo se asoma debido a las circunstancias.
En la mansión, logrará entablar una relación de amistad con el mayordomo, que será su amigo y confidente, así como encontrará el amor y la complacencia de la madre del muchacho.
Será por su inteligencia, que Katie irá dándose a conocer, como una mujer con amplio conocimiento de la realidad de su entorno, y la necesita de hacer algo por ello, para mejorar.
Así, llegará a ser rival de su amante, y una serie de hechos inesperados, hará que su familia, junto con Glenn, le ayude a parar el chantaje por la que fue víctima, y continuar con su carrera política.
Es un hecho que el político como tal, es el personaje mal parado en toda la obra, desde el candidato de la oposición, hasta algunos de la bancada de Glenn, que no logran vislumbrar lo equivocados que están.
Del reparto, es un gusto ver una película, en las que no hay villano terrible a temer, y todos los personajes reciben lo que merecen.
Sobre todo ha sido un gusto ver a Joseph Cotten, en los pocos filmes en los que se le ve riendo, y muy a gusto; así como a Ethel Barrymore, en un papel muy en su línea, pero que no deja de agradar.
Y claro está, la talentosa Loretta Young, que sin embargo, hasta que falleció de cáncer de ovarios, el 12 de agosto de 2000, ella era una de las pocas estrellas de La Época Dorada de Hollywood que aún vivían, y a pesar de acercarse a los 90 años, la edad no había opacado su “sex appeal” ni su belleza.
Su vida personal, tanto fuera como dentro de los sets de filmación, la transformaron en una de las mujeres más respetadas y admiradas de la industria cinematográfica.
También puede decirse, que llevó una vida un poco controvertida.
Aquellos que la conocieron íntimamente, la llamaron:
“La Mariposa de Acero”, “La Virgen de Hierro”, “La Manipuladora”, entre otros apodos desfavorables; pero otros la han renombrado como:
“La Santa Loretta” o “La Gran Humanista”
Realmente, Loretta Young es digna poseedora de todos los epítetos anteriores, y de muchos, muchos más; puesto que fue una de las primeras estrellas en ser “independiente”, y aunque no le fue tan bien; por lo que se dice, que la incluyeron en “la lista negra”; tal vez por su tumultuosa vida privada; pero que la hizo ganar un premio Oscar, como reconocimiento por esta película.
En lo privado, se dice que en 1935, “adoptó” a una niña, Judy.
Años después, una vez muerto Clark Gable, la misma hija reveló que era hija sanguínea de Young y Gable, concebida durante la filmación de “Call Of The Wild” (1935)
Volviendo al reparto, Charles Bickford en su papel de mayordomo gruñón e idealista, está encantador, y me llama la atención, el enorme parecido que tiene con Cotten…
Por cierto, aparece Harry Davenport, secundario siempre entrañable y bondadoso, haciendo el pequeño papel de médico de la familia; y Lex Barker, uno de los inolvidables galanes que interpretaron a Tarzán, al sustituir a Johnny Weissmüller.
Después, Barker alcanzó especial popularidad en Alemania e Italia, por varias películas rodadas en dichos países, y adaptando novelas de Karl May.
En España, se le recuerda como el primer esposo de Carmen Cervera; y posteriormente como marido de Lana Turner.
Como dato de producción de The Farmer's Daughter, a pesar de que el estado nunca se menciona, parece que se lleva a cabo en Minnesota, donde hay una gran población de escandinavos.
Y “Capitol City”, parecería ser St. Paul, y la mansión del Morley, sin duda se ve como si estuviera en Summit Avenue.
Mientras que el partido político de Glenn Morley, nunca se menciona...
Fijo es El Partido Republicano.
“She doesn't know anything about politics”
En 2016, se hizo oficial que una mujer haya hecho historia en EEUU, al convertirse en la primera nominada a la presidencia de cualquier partido grande en la historia nacional.
Tanto si la aman como si la odian, hay que darle crédito a Hillary Clinton.
Fue una victoria, que desde hacía tiempo se merecía una mujer.
Hillary, ex Primera Dama, ex Senadora por New York y ex Secretaria de Estado, ya está preparada para romper uno de los pocos techos de cristal que quedan en la política estadounidense.
Esto es muy emocionante para ellos, que se habían quedado a la zaga de muchos países en otorgar a las mujeres esa clase de alta posición.
La palabra “historia”, volaba pues en la televisión a partir de mediados de abril de 2015, y se hizo realidad a mediados de 2016; y con toda razón.
En el mundo, los británicos tuvieron a Margaret Thatcher; Nicaragua a Violeta Chamorro; Argentina a Cristina Fernández; Chile a Michelle Bachelet; Brasil a Dilma Rousseff; Costa Rica a Laura Chinchilla; los alemanes tienen a Angela Merkel; Israel tuvo a Golda Meir; India a Indira Gandhi; Pakistán a Benazir Bhutto...
Ahora, Hillary Clinton está oficialmente en el camino para seguir esos pasos; y ha ido más lejos políticamente que cualquier otra mujer en Estados Unidos.
Al menos por su perseverancia, merece elogios.
Y si Hillary gana La Presidencia de Estados Unidos, será 8 años después que los estadounidenses eligieran al primer presidente afroamericano.
Es una transformación progresista, en un país que a veces ha estado estremecido por las tensiones raciales, y en el que las mujeres aún no tienen igualdad con los hombres en muchas áreas.
Aunque pendiente de ratificar dentro de unas semanas, el triunfo de Clinton, es ya, inequívocamente histórico.
“Puede que me convierta en La Primera Presidenta de Estados Unidos, pero la próxima puedes ser tú”, expresó la candidata demócrata.
La revolución política, ha comenzado.
Pasa en el cine, pasa en la realidad.
“Ladies and Gentlemen, tonight I want to ask you for the most precious thing you own:
Your vote”
Now, a 100% American is...”
Hace 69 años, EEUU no tenía la remota idea de lo histórico que sería tener a una mujer en la carrera política por La Presidencia del país.
Actualmente, si en Estados Unidos sólo votasen los hombres, como ocurría hasta 1920, El Republicano Donald Trump, sería el próximo Presidente.
La victoria sería aplastante, e inapelable.
Mientras que si sólo votasen las mujeres, Hillary Clinton ganaría con facilidad.
La división por sexos a la hora de votar no es nueva, pero se ha acentuado en la campaña para las elecciones del 8 de noviembre de 2016, la primera en la que una mujer está en condiciones de llegar a La Casa Blanca.
Las acusaciones por agresión sexual contra Trump, y sus comentarios machistas, como sus declaraciones contra los inmigrantes hispanos, o los planes para discriminar a los musulmanes, pueden acabar siendo el muro en el que se estrellen sus ambiciones, dañando las aspiraciones políticas de muchos republicanos.
Y es que a finales del siglo XVIII, los gobiernos occidentales estaban en manos de hombres blancos, que probablemente no podían imaginar la candidatura de una mujer a ningún cargo elegido, y mucho menos a La Presidencia.
Abigail Adams, se adelantó a su tiempo en su defensa de la inclusión.
“Acuérdate de las mujeres”, le escribió a su marido, el líder revolucionario John Adams, en marzo de 1776, cuando fue delegado al Congreso Continental.
Le instó a que El Congreso tuviera en cuenta los derechos de la mujer, al sentar las bases de la independencia estadounidense:
“Recuerda que todos los hombres serían tiranos si pudieran.
Si no se les presta especial cuidado y atención a las mujeres, estamos decididas a fomentar una rebelión, y no nos atendremos a respetar ninguna ley en la que no tengamos voz, ni representación”
Abigail Adams, se convirtió en Primera Dama, cuando su marido sucedió a George Washington como Presidente, en 1797.
Entre la carta que escribió Adams, y la campaña electoral de Hillary Rodham Clinton, la primera candidata a la presidencia políticamente viable, generaciones de mujeres estadounidenses, vieron superados los estereotipos, y rompieron las barreras para acceder a cargos electorales.
En 1887, Susanna Madora Salter, fue elegida Alcaldesa de Argonia, Kansas; y se convirtió en la primera mujer alcaldesa de Estados Unidos, pocas semanas después de que las mujeres en Kansas obtuvieran el derecho al voto.
Algunos hombres, habían presentado la candidatura de Salter, de 27 años de edad, como una broma, pero la broma fue a costa de ellos, cuando Salter ganó la elección.
El 2 de abril de 1916, Jeannette Rankin, republicana de Montana, ocupó su escaño en La Cámara de Representantes de Estados Unidos, como la primera mujer elegida al Congreso, incluso antes de que la 19ª Enmienda en 1920, otorgara el derecho a todas las mujeres estadounidense, a votar en las elecciones.
Rankin sostenía, que los talentos y los conocimientos de las mujeres, eran necesarios para crear mejores sociedades:
“Los hombres y las mujeres, son como las manos, derecha e izquierda, no tiene sentido, no utilizar ambas”, dijo.
En 1932, Hattie Caraway, en un principio, designada para ocupar el escaño de su difunto esposo, se convirtió en la primera mujer elegida al Senado por derecho propio, en representación de Arkansas.
Apodada “Hattie, La Silenciosa” debido a sus escasos discursos públicos, Caraway se tomó en serio sus responsabilidades, y se ganó fama por su integridad.
Margaret Chase Smith, representó al estado de Maine, primero en La Cámara de Representantes, y luego en el Senado; siendo la primera mujer en desempeñar cargos en ambas cámaras del Congreso.
En 1964, la republicana Smith, se convirtió en la primera mujer en ser considerada candidata a La Presidencia, en una convención nacional; pero perdió la candidatura ante Barry Goldwater.
En 1972, Shirley Chisholm de New York, fue la primera mujer afroamericana en ser elegida al Congreso, y defensora destacada de los derechos de las minorías; hizo campaña por la candidatura demócrata a la presidencia.
Chisholm, hizo grandes esfuerzos para que la tomasen en serio; el presentador de noticias, Walter Cronkite, anunció su candidatura diciendo:
“Un nuevo sombrero, más bien una pamela, se ha lanzado al ruedo de la carrera presidencial del Partido Demócrata”
Chisholm perdió la candidatura, ante George McGovern.
En 1984, Geraldine Ferraro hizo campaña como candidata demócrata a la vicepresidencia; al aceptar la candidatura, la representante de New York dijo:
“Al elegir a una mujer para el segundo cargo más alto de nuestro país, transmiten un poderoso mensaje a todos los estadounidenses:
Que no hay puertas que no podamos abrir.
No pondremos ningún límite a los logros”
Cuando El Presidente George W. Bush, pronunció su discurso del Estado de La Unión en enero de 2007, la primera mujer presidenta de La Cámara de Representantes, Nancy Pelosi, de San Francisco, se sentó detrás de él en el estrado.
Hay que destacar que la persona que preside La Cámara, es la siguiente en la línea de sucesión a La Presidencia, después del Vicepresidente.
El Presidente Bush, calificó la ascensión de Pelosi al cargo de Presidenta de La Cámara de “histórico para nuestro país.
Y como padre de jóvenes mujeres... creo que es importante”
En 2008, Sarah Palin se convirtió en la primera mujer candidata a la vicepresidencia del Partido Republicano; y en junio de 2008, la ex Primera Dama, Hillary Rodham Clinton, en ese entonces, senadora de New York, puso fin a su histórica campaña para La Presidencia de Estados Unidos.
Llegados al mes de junio, los 18 millones de votos que había ganado en las primarias, no iban a ser suficientes para asegurar la candidatura por el Partido Demócrata; y perdió la nominación demócrata ante Barack Obama.
“Piensen en el enorme progreso que ya hemos hecho”, dijo Clinton a sus partidarios.
“De ahora en adelante, no será nada especial que una mujer gane victorias en las elecciones primarias de los estados, ni que la campaña de una mujer esté en reñida carrera para ser nuestra candidata, ni pensar que una mujer pueda ser presidente de Estados Unidos”
El 12 de abril de 2015, la especulación terminó, cuando Clinton anunció formalmente su candidatura por correo electrónico, y a través de la publicación de un video, donde decía:
“Cada día, los estadounidenses necesitan un defensor.
Y yo quiero ser esa defensora”
La historia política de EEUU, la ha elegido en 2016, como la más dura contendiente para La Presidencia de su país, con una carrera política impresionante, entre la que destaca como Secretaria de Estado de los Estados Unidos de 2009 a 2013.
“A Gal Who Really Goes To Town!”
The Farmer's Daughter es una comedia del año 1947, dirigida por H.C. Potter.
Protagonizada por Loretta Young, Joseph Cotten, Ethel Barrymore, Charles Bickford, Rose Hobart, Rhys Williams, Harry Davenport, Tom Powers, William Harrigan, Lex Barker, Harry Shannon, Keith Andes, Thurston Hall, entre otros.
El guión es de Allen Rivkin y Laura Kerr, basados en la obra de teatro “Juurakon Hulda” de Hella Wuolijoki, bajo el seudónimo de Juhani Tervapää.
Los derechos para el cine, fueron comprados inicialmente por David O. Selznick; que tenía la intención de que The Farmer's Daughter sea un vehículo para Ingrid Bergman; pero ella declinó el papel, debido en parte a los rumores de que Joseph Cotten tenía un romance con ella; por lo que el papel de Bergman en la película, fue tomado por Loretta Young.
Pero entre otras postulantes, se intentó colar Dorothy McGuire y Sonja Henie, hasta que los derechos se vendieron a la RKO Radio Pictures, manteniendo a Young en el papel.
The Farmer's Daughter, ganó el premio Oscar a La Mejor Actriz para Loretta Young, y fue el filme también estuvo nominado como mejor actor de reparto por Charles Bickford.
El Oscar ganado por Young, es famoso en cuanto a controversia:
Rosalind Russell, ganó el Globo de Oro y todas las encuestas, y hasta los apostadores de Las Vegas la daban como ganadora.
Mientras Young aparecía última en las predicciones.
La noche de la ceremonia, todo fue saliendo según lo previsto, hasta cuando Fredric March, abriendo el sobre para revelar quién era la mejor actriz; Rosalind Russell involuntariamente empezó a levantarse de su asiento, pero el nombre fue el de Loretta Young…
Todos retuvieron el aliento en estado de total asombro, y a Russell no le quedó otra solución, que seguir con el envión, y pararse para aplaudir a su mejor amiga.
Esta ocasión, fue una de las sorpresas “desagradables” o mejor dicho, inusitada del Oscar, más citada y recordada.
Por mucho que se alegró, al ser entrevistada en la sala de prensa, Young dijo:
“¿Y Roz?
¿Ahora qué le digo a Roz?”
La acción de The Farmer's Daughter sigue a Katie Holstrom (Loretta Young), una mujer de origen sueco, que abandona la granja de su familia, y deja a su padre (Harry Shannon), madre (Anna Q. Nilsson), y 3 hermanos:
Olaf (Lex Barker), Sven (Keith Andes) y Peter (James Arness); y toma rumbo a la gran ciudad, “gracias” al “buen samaritano” de Adolph Petree (Rhys Williams)
Allí, se emplea como sirvienta en la casa del congresista, Glenn Morley (Joseph Cotten) que vive junto a su madre, la viuda Agatha (Ethel Barrymore), y el mayordomo, Joseph Clancey (Charles Bickford); y a fuerza de tesón, pronto llega a triunfar en la política, abandonando la enfermería, logrando un puesto en Washington, dentro del Congreso, tras vencer al político corrupto, Anders J. Finley (Art Baker)
The Farmer's Daughter es una película que reconforta, que vigoriza, que se saborea plano a plano, segundo a segundo.
Captamos toda su dimensión, todo su mensaje, no tiene desperdicio porque nos engancha desde el comienzo.
Su director, H.C. Potter, nos hace disfrutar con cada toque de comedia, y nos hace enfurecernos con la desalmada clase política, que siempre termina ocultando sus perversos objetivos.
“Tell us what kind of a representative you'd like”
Después de triunfar en la escena de Broadway, el director de teatro, H.C. Potter, se lanzaba al mundo de Hollywood, donde dirigiría más de una veintena de obras, especializándose en la comedia.
Entre sus títulos dirigidos, se incluyen The Farmer's Daughter, haciendo un uso de la fotografía en blanco y negro, y la puesta en escena magníficas.
Con un buen guión, con diálogos rápidos, ingeniosos y divertidos; los personajes de carácter, están bien perfilados, y excepcionalmente interpretados.
Con gran dirección de actores entre los que destaca Loretta Young, lástima los peinados tipo Princesa Leia; hacen de la propuesta un muy atractivo y actual filme político, con tono amable de comedia.
Si en The Farmer's Daughter no vemos algún paralelismo de la realidad en la contienda política actual, entre Trump y Clinton, es porque estamos ciegos.
Cabe destacar, el empeño de una mujer que quiere salir de su medio rural, para lograr una profesión en la ciudad, la enfermería.
En el camino, como mujer joven y atractiva, es víctima del abuso por su condición, por parte de un pintor conocido por la familia:
El hombre quiere abusar de ella, pero al no lograrlo, le roba dinero…
El abuso como tal, no es como lo pensamos actualmente, pues acá lo tenemos dentro del Código Hays de producción cinematográfica, que prohibía cualquier insinuación de carácter sexual, aunque sea muy evidente.
Así, la chica sin dinero, se verá obligada a buscar trabajo, y lo hace siendo sirvienta en una mansión.
A partir de acá, The Farmer's Daughter es casi la base de todas las novelas latinoamericanas, en las que una mujer pobre pero inteligente, que trabajando como sirvienta, logra ascender y superarse profesionalmente.
Aunque también hay algo del cuento de “La Cenicienta” pero sin villanos que estén ensombreciendo el relato; de hecho, no hay antagonista directo, solo se asoma debido a las circunstancias.
En la mansión, logrará entablar una relación de amistad con el mayordomo, que será su amigo y confidente, así como encontrará el amor y la complacencia de la madre del muchacho.
Será por su inteligencia, que Katie irá dándose a conocer, como una mujer con amplio conocimiento de la realidad de su entorno, y la necesita de hacer algo por ello, para mejorar.
Así, llegará a ser rival de su amante, y una serie de hechos inesperados, hará que su familia, junto con Glenn, le ayude a parar el chantaje por la que fue víctima, y continuar con su carrera política.
Es un hecho que el político como tal, es el personaje mal parado en toda la obra, desde el candidato de la oposición, hasta algunos de la bancada de Glenn, que no logran vislumbrar lo equivocados que están.
Del reparto, es un gusto ver una película, en las que no hay villano terrible a temer, y todos los personajes reciben lo que merecen.
Sobre todo ha sido un gusto ver a Joseph Cotten, en los pocos filmes en los que se le ve riendo, y muy a gusto; así como a Ethel Barrymore, en un papel muy en su línea, pero que no deja de agradar.
Y claro está, la talentosa Loretta Young, que sin embargo, hasta que falleció de cáncer de ovarios, el 12 de agosto de 2000, ella era una de las pocas estrellas de La Época Dorada de Hollywood que aún vivían, y a pesar de acercarse a los 90 años, la edad no había opacado su “sex appeal” ni su belleza.
Su vida personal, tanto fuera como dentro de los sets de filmación, la transformaron en una de las mujeres más respetadas y admiradas de la industria cinematográfica.
También puede decirse, que llevó una vida un poco controvertida.
Aquellos que la conocieron íntimamente, la llamaron:
“La Mariposa de Acero”, “La Virgen de Hierro”, “La Manipuladora”, entre otros apodos desfavorables; pero otros la han renombrado como:
“La Santa Loretta” o “La Gran Humanista”
Realmente, Loretta Young es digna poseedora de todos los epítetos anteriores, y de muchos, muchos más; puesto que fue una de las primeras estrellas en ser “independiente”, y aunque no le fue tan bien; por lo que se dice, que la incluyeron en “la lista negra”; tal vez por su tumultuosa vida privada; pero que la hizo ganar un premio Oscar, como reconocimiento por esta película.
En lo privado, se dice que en 1935, “adoptó” a una niña, Judy.
Años después, una vez muerto Clark Gable, la misma hija reveló que era hija sanguínea de Young y Gable, concebida durante la filmación de “Call Of The Wild” (1935)
Volviendo al reparto, Charles Bickford en su papel de mayordomo gruñón e idealista, está encantador, y me llama la atención, el enorme parecido que tiene con Cotten…
Por cierto, aparece Harry Davenport, secundario siempre entrañable y bondadoso, haciendo el pequeño papel de médico de la familia; y Lex Barker, uno de los inolvidables galanes que interpretaron a Tarzán, al sustituir a Johnny Weissmüller.
Después, Barker alcanzó especial popularidad en Alemania e Italia, por varias películas rodadas en dichos países, y adaptando novelas de Karl May.
En España, se le recuerda como el primer esposo de Carmen Cervera; y posteriormente como marido de Lana Turner.
Como dato de producción de The Farmer's Daughter, a pesar de que el estado nunca se menciona, parece que se lleva a cabo en Minnesota, donde hay una gran población de escandinavos.
Y “Capitol City”, parecería ser St. Paul, y la mansión del Morley, sin duda se ve como si estuviera en Summit Avenue.
Mientras que el partido político de Glenn Morley, nunca se menciona...
Fijo es El Partido Republicano.
“She doesn't know anything about politics”
En 2016, se hizo oficial que una mujer haya hecho historia en EEUU, al convertirse en la primera nominada a la presidencia de cualquier partido grande en la historia nacional.
Tanto si la aman como si la odian, hay que darle crédito a Hillary Clinton.
Fue una victoria, que desde hacía tiempo se merecía una mujer.
Hillary, ex Primera Dama, ex Senadora por New York y ex Secretaria de Estado, ya está preparada para romper uno de los pocos techos de cristal que quedan en la política estadounidense.
Esto es muy emocionante para ellos, que se habían quedado a la zaga de muchos países en otorgar a las mujeres esa clase de alta posición.
La palabra “historia”, volaba pues en la televisión a partir de mediados de abril de 2015, y se hizo realidad a mediados de 2016; y con toda razón.
En el mundo, los británicos tuvieron a Margaret Thatcher; Nicaragua a Violeta Chamorro; Argentina a Cristina Fernández; Chile a Michelle Bachelet; Brasil a Dilma Rousseff; Costa Rica a Laura Chinchilla; los alemanes tienen a Angela Merkel; Israel tuvo a Golda Meir; India a Indira Gandhi; Pakistán a Benazir Bhutto...
Ahora, Hillary Clinton está oficialmente en el camino para seguir esos pasos; y ha ido más lejos políticamente que cualquier otra mujer en Estados Unidos.
Al menos por su perseverancia, merece elogios.
Y si Hillary gana La Presidencia de Estados Unidos, será 8 años después que los estadounidenses eligieran al primer presidente afroamericano.
Es una transformación progresista, en un país que a veces ha estado estremecido por las tensiones raciales, y en el que las mujeres aún no tienen igualdad con los hombres en muchas áreas.
Aunque pendiente de ratificar dentro de unas semanas, el triunfo de Clinton, es ya, inequívocamente histórico.
“Puede que me convierta en La Primera Presidenta de Estados Unidos, pero la próxima puedes ser tú”, expresó la candidata demócrata.
La revolución política, ha comenzado.
Pasa en el cine, pasa en la realidad.
“Ladies and Gentlemen, tonight I want to ask you for the most precious thing you own:
Your vote”
Comentarios
Publicar un comentario