Csernobil öröksége: a Zóna (Chernobyl's Heritage: The Zone)
Terminando de ver “Csernobil öröksége: a Zóna” (Chernobyl's Heritage: The Zone – 2011) de Anton Bendarjevskiy & Márk Maczelka con István Gyukity, entre otros.
Documental húngaro que explora los eventos posteriores a aquel 26 de abril de 1986 que pasó a la historia como “el día del mayor desastre nuclear en la historia de la humanidad” donde el polvo radiactivo liberado por el reactor en ruinas se desplazó por toda Europa, y contaminó países enteros.
Los directores visitaron la región en abril de 2011, 25 años después de la catástrofe, y comenzaron la gigantesca tarea de crear una película sobre “La Zona” de Chernóbil, que son alrededor de 30km2, organizada en torno al reactor N° 4 que aún funciona, una zona que completamente cerrada del mundo exterior, siendo una de las áreas más contaminadas del mundo.
Y es que el propósito de “La Zona” es restringir el acceso a áreas peligrosas, reducir la propagación de la contaminación radiológica y realizar actividades de monitoreo radiológico y ecológico.
El filme muestra los momentos posteriores al evento, la movilización de los “liquidadores”, algunas entrevistas con los trabajadores, que lo dieron todo por la descontaminación y pagaron un alto precio… por lo que no se exploran los motivos, y si se evidencia la manipulación del gobierno de la tragedia, la falta de preparación para los “liquidadores”, el absurdo y cuestionable razonamiento de quien defiende los asentamientos donde ocurrió la explosión, como un lugar fuera de peligro… aquí se muestra el alto nivel de ignorancia de los pobladores, habitantes de las ciudades construidas alrededor de los silos, como ciudades modernas, totalmente futuristas, con construcciones que estaban aún por estrenar, como el emblemático parque de atracciones… así como también se muestra la lucha de los científicos contra el gobierno, el peligro que han corrido con el encarcelamiento por oponerse a la reapertura de los reactores, y el optimismo de quienes pueblan “La Zona” que son puros ancianos rodeados de reactividad, con animales que han sobrevivido pero que están llenos de contaminación, lugares donde no crece nada, y gran cantidad de asentamientos totalmente abandonados, lo peor viene a que la reubicación de la ciudad es relativamente cerca al reactor, por lo que el gobierno trata de mostrar que “nada ha pasado”
Hoy en día, “La Zona” atrae un gran interés científico por los altos niveles de exposición a la radiación en el medio ambiente, así como el creciente interés de los turistas…
Absurdo y peligroso, pues se sabe que faltarán muchísimos años para que el lugar esté completamente descontaminado; pues una simple roca es transmisora de contaminación.
También, la película toma su tiempo para evidenciar la inseguridad del llamado “Sarcófago” que contiene el lugar de la explosión, del que se dice es completamente sellado, pero las imágenes muestran grandes sectores donde se filtra hasta la luz…
El filme está bien hecho, lamentablemente la edición es mala, hay cortes bruscos en el desarrollo del relato, evidentemente no hay opiniones oficiales del gobierno, los “profesionales” no convencen, y más bien parecen personas fanáticas al régimen comunista o ignorantes de una situación que todavía se sufre.
25 años después, este documental evidencia que la gente todavía no tiene idea de lo grave que fue este “accidente” pues el estado en que se encuentra ahora el “Sarcófago” es otra bomba de tiempo.
RECOMENDADA.
Documental húngaro que explora los eventos posteriores a aquel 26 de abril de 1986 que pasó a la historia como “el día del mayor desastre nuclear en la historia de la humanidad” donde el polvo radiactivo liberado por el reactor en ruinas se desplazó por toda Europa, y contaminó países enteros.
Los directores visitaron la región en abril de 2011, 25 años después de la catástrofe, y comenzaron la gigantesca tarea de crear una película sobre “La Zona” de Chernóbil, que son alrededor de 30km2, organizada en torno al reactor N° 4 que aún funciona, una zona que completamente cerrada del mundo exterior, siendo una de las áreas más contaminadas del mundo.
Y es que el propósito de “La Zona” es restringir el acceso a áreas peligrosas, reducir la propagación de la contaminación radiológica y realizar actividades de monitoreo radiológico y ecológico.
El filme muestra los momentos posteriores al evento, la movilización de los “liquidadores”, algunas entrevistas con los trabajadores, que lo dieron todo por la descontaminación y pagaron un alto precio… por lo que no se exploran los motivos, y si se evidencia la manipulación del gobierno de la tragedia, la falta de preparación para los “liquidadores”, el absurdo y cuestionable razonamiento de quien defiende los asentamientos donde ocurrió la explosión, como un lugar fuera de peligro… aquí se muestra el alto nivel de ignorancia de los pobladores, habitantes de las ciudades construidas alrededor de los silos, como ciudades modernas, totalmente futuristas, con construcciones que estaban aún por estrenar, como el emblemático parque de atracciones… así como también se muestra la lucha de los científicos contra el gobierno, el peligro que han corrido con el encarcelamiento por oponerse a la reapertura de los reactores, y el optimismo de quienes pueblan “La Zona” que son puros ancianos rodeados de reactividad, con animales que han sobrevivido pero que están llenos de contaminación, lugares donde no crece nada, y gran cantidad de asentamientos totalmente abandonados, lo peor viene a que la reubicación de la ciudad es relativamente cerca al reactor, por lo que el gobierno trata de mostrar que “nada ha pasado”
Hoy en día, “La Zona” atrae un gran interés científico por los altos niveles de exposición a la radiación en el medio ambiente, así como el creciente interés de los turistas…
Absurdo y peligroso, pues se sabe que faltarán muchísimos años para que el lugar esté completamente descontaminado; pues una simple roca es transmisora de contaminación.
También, la película toma su tiempo para evidenciar la inseguridad del llamado “Sarcófago” que contiene el lugar de la explosión, del que se dice es completamente sellado, pero las imágenes muestran grandes sectores donde se filtra hasta la luz…
El filme está bien hecho, lamentablemente la edición es mala, hay cortes bruscos en el desarrollo del relato, evidentemente no hay opiniones oficiales del gobierno, los “profesionales” no convencen, y más bien parecen personas fanáticas al régimen comunista o ignorantes de una situación que todavía se sufre.
25 años después, este documental evidencia que la gente todavía no tiene idea de lo grave que fue este “accidente” pues el estado en que se encuentra ahora el “Sarcófago” es otra bomba de tiempo.
RECOMENDADA.
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