Bare
Terminando de ver “Bare” (2015) de Natalia Leite con Dianna Agron, Paz de la Huerta, Chris Zylka, Louisa Krause, Mary Price Moore, entre otros.
Drama de temática gay, sobre una chica de “La América Profunda” que explora su sexualidad, al tiempo que busca salir del basurero en que, según ella, se encuentra.
La película de corte independiente, cuyo título se traduce como “desnudo” o “descubierto” contempla temas como la familia, el amor, la sexualidad, las drogas, y las duras experiencias de la vida hacia la madurez y la independencia.
La historia toma un giro cuando aparece una traficante y vendedora de drogas, algo indigente, de la que se enamora la protagonista.
Confieso que el desarrollo, es decir, toda la trama romántica de las chicas me pareció exagerada:
Ninguna mujer tan guapa como La Agron, se iría a la primera con una mujer de apariencia insana/insalubre, como de la Huerta, teniendo un pedazo como Zylka, pero el amor es ciego... “dicen los que saben” aun si ella representa la liberación a otra vida, menos convencional.
La protagonista, en plan muy Britney Spears, es tan mala que no cambia de pose de santurrona, que no lo es, ni tampoco se ve bien como stripper, demasiado forzado todo este asunto, que de buenas a primeras, es una joven liberada y experta…
Mientras Pepper me resultó muy desagradable en su físico, mentalidad, y todo ella.
Y “el chico que sufre”, el enamorado que solo la busca por sexo, Chris Zylka no tiene mucho desarrollo, no se siente que él vaya a darle en cambio que ella busca, tanto así, que el final se torna muy duro y desolador.
Este parece un cuento de una “White Trash” sin salida, que en algún momento tocará fondo, otra vez en un círculo vicioso que acabará con su vida.
Técnicamente la dirección es la típica del género “indie” y eso se nota en los encuadres, la poética de algunas escenas, el corto metraje, al tiempo que las escenas sexuales son bastante pudorosas, aunque tampoco las hay.
Una historia bastante conocida pero con trasfondo lésbico.
NO RECOMENDADA.
Drama de temática gay, sobre una chica de “La América Profunda” que explora su sexualidad, al tiempo que busca salir del basurero en que, según ella, se encuentra.
La película de corte independiente, cuyo título se traduce como “desnudo” o “descubierto” contempla temas como la familia, el amor, la sexualidad, las drogas, y las duras experiencias de la vida hacia la madurez y la independencia.
La historia toma un giro cuando aparece una traficante y vendedora de drogas, algo indigente, de la que se enamora la protagonista.
Confieso que el desarrollo, es decir, toda la trama romántica de las chicas me pareció exagerada:
Ninguna mujer tan guapa como La Agron, se iría a la primera con una mujer de apariencia insana/insalubre, como de la Huerta, teniendo un pedazo como Zylka, pero el amor es ciego... “dicen los que saben” aun si ella representa la liberación a otra vida, menos convencional.
La protagonista, en plan muy Britney Spears, es tan mala que no cambia de pose de santurrona, que no lo es, ni tampoco se ve bien como stripper, demasiado forzado todo este asunto, que de buenas a primeras, es una joven liberada y experta…
Mientras Pepper me resultó muy desagradable en su físico, mentalidad, y todo ella.
Y “el chico que sufre”, el enamorado que solo la busca por sexo, Chris Zylka no tiene mucho desarrollo, no se siente que él vaya a darle en cambio que ella busca, tanto así, que el final se torna muy duro y desolador.
Este parece un cuento de una “White Trash” sin salida, que en algún momento tocará fondo, otra vez en un círculo vicioso que acabará con su vida.
Técnicamente la dirección es la típica del género “indie” y eso se nota en los encuadres, la poética de algunas escenas, el corto metraje, al tiempo que las escenas sexuales son bastante pudorosas, aunque tampoco las hay.
Una historia bastante conocida pero con trasfondo lésbico.
NO RECOMENDADA.
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