Shakespeare In Love
“Yo pretendo que haya poesía en mi vida, y aventura, y amor.
No la artística impostura del amor, sino el amor que es capaz de derrumbar la vida, impetuoso, ingobernable como un ciclón en el corazón ante el que nada se puede, ya te arruine o te embelese.
Yo debo sentir ese amor.”
El cine se ha nutrido de la historia; y los reyes, símbolos del poder absoluto, no fueron la excepción.
Los filmes sobre sus andanzas lograron aventuras épicas.
Los largometrajes que tuvieron a monarcas históricos o legendarios fueron muchos y variados a lo largo de la vida del cine.
En ese ámbito se destaca los monarcas británicos, que debido a su importancia para los Estados Unidos, Hollywood no se cansó en describir sus biografías.
Existen dos grandes monarcas en la historia del Reino Unido que debido a diferentes factores, fueron claves en el desarrollo de la actual sociedad británica y mundial.
Ellas fueron las reinas Elizabeth I y Victoria I.
El lapso de tiempo en que gobernó la llamada Reina Virgen, fue tan importante que se denominó “período Elizabethino” (desde 1558 hasta 1603).
Durante el reinado de Elizabeth I grandes acontecimientos marcaron a fuego al país europeo, como la definitiva separación de Iglesia Católica y el germen de la futura Iglesia Anglicana.
Tal florecimiento se dio en la literatura y principalmente en el teatro, sobre todo con William Shakespeare, Christopher Marlowe, Ben Jonson, John Webster, John Ford y otros.
Sobresalientemente, Shakespeare generó con su pluma varias piezas teatrales sobre amores y grandes monarcas británicos, que con los siglos fueron llevados a la gran pantalla.
El concepto de cómo desarrolló Shakespeare su tragedia del amor prohibido, ha sido también utilizado en varias producciones cinematográficas donde se reconstruye el ambiente del teatro Elizabethino.
Romeo y Julieta (1597) es una tragedia de William Shakespeare.
Cuenta la historia de dos jóvenes enamorados que, a pesar de la oposición de sus familias, rivales entre sí, deciden luchar por su amor hasta el punto de casarse de forma clandestina; sin embargo, la presión de esa rivalidad y una serie de fatalidades conducen al suicidio de los dos amantes.
Esta relación entre sus protagonistas los ha convertido en el arquetipo de los llamados “star-crossed lovers”.
There is no business like show business!
Shakespeare In Love es una película estadounidense del año 1998, dirigida por el británico John Philip Madden para Miramax Films / Universal Pictures / The Bedford Falls Company.
Está protagonizada por Gwyneth Paltrow, Joseph Fiennes, Judi Dench, Geoffrey Rush, Colin Firth, Ben Affleck, Tom Wilkinson, Simon Callow, Jim Carter, Martin Clunes, Antony Sher, Imelda Staunton, Mark Williams y Daniel Brocklebank, entre otros.
Música a cargo de Stephen Warbeck
Shakespeare In Love narra la aventura amorosa entre un joven William Shakespeare y Viola De Lesseps durante la época en la que el dramaturgo estaba escribiendo Romeo y Julieta.
Aunque los personajes están basados en personas reales, lo que se cuenta en la película es en su mayor parte ficticio.
De hecho Shakespeare plagió una obra escrita por Luigi da Porto, de Vicenza, en el año 1520.
Así que no fue él amor lo que le inspiró.
Fue el plagio.
Pero no importa, supongo…
Basada en una premisa argumental sin ninguna pretensión de fidelidad histórica, el maravilloso guión de Shakespeare In Love, uno de los puntales fundamentales en que se apoya la arquitectura del film de John Madden, pleno de hallazgos que explora a fondo todas las posibilidades que permite la historia, transformándose en un estudio profundo sobre el amor y el proceso de creación de la obra de arte, bascula progresivamente, de forma inexorable, desde un registro de comedia romántica de época hacia otro hermosísimo, pero profundamente triste, y dolorosamente romántico.
Un joven William Shakespeare inmerso en una profunda crisis de inspiración busca desesperadamente una musa que le permita recuperar su capacidad creativa.
Su repentino enamoramiento de Lady Viola nos permitirá no solo ser espectadores, sino también implicarnos emocionalmente en los entresijos de una historia de amor maravillosa, y nos abrirá, de par en par, la puerta que nos va a permitir asistir al milagro de la génesis de la obra de arte.
Vamos adentrándonos en las vicisitudes que influyeron en el proyecto del joven, mientras que paralelamente Madden nos describe la aventura amorosa entre Will y Viola De Lesseps, sus apasionados encuentros, sus utopías, sus proyectos en común, sus problemas.
Como bien sabemos Shakespeare estaba casado y Viola estaba predestinada por sus padres a casarse con un joven de la aristocracia de la época.
Sus encuentros sexuales son a escondidas, desenfrenados e impulsivos, un romance bastante cuestionable tal cual como es mostrado aquí.
Jugando con increíble habilidad con el paralelismo entre realidad y ficción, nos veremos inmersos de lleno en la creación de una de las cumbres de la literatura universal de todos los tiempos, "Romeo y Julieta".
Asistiremos atónitos cómo lo real y lo ficticio con frecuencia están separados por una delgada línea que a menudo se confunde, y como la realidad a menudo condiciona la ficción.
Con una dirección brillante de Madden y una puesta en escena impecable, la complicidad de una cámara nerviosa que utiliza con frecuencia el travelling circular como instrumento al servicio de la historia, y una excelente labor de montaje, en Shakespeare In Love sobresalen aspectos tan cuidados como la dirección artística, el vestuario y una banda sonora de Stephen Warbeck que fueron galardonados justamente con el Oscar de la Academia.
Una comedia acerca de la historia más grande de amor que estuvo a punto de no ser contada; la cinta muestra a Shakespeare como un héroe romántico, seductor y en vías de convertirse en un genio de la literatura universal que nos deja ver su lado humano, con virtudes y defectos, pero apasionado ante todo.
El guión de Marc Norman y Tom Stoppard es original.
Ambos inventan una conjunción de posibles sucesos que podrían haberle ocurrido al genial autor inglés, hasta inspirarle de modo decisivo en la obra.
Así conjugan humor, ingenio (es un buen entretenimiento para el espectador descubrir qué sucesos de los narrados recoge luego Shakespeare en la historia de los Capuleto y los Montesco) y romance amoroso.
“Podéis quedaros, si permanecéis callado.
Prestad atención, veréis como el genio crea una leyenda.”
Shakespeare In Love es un documento fidedigno de lo que era el ambiente del teatro en Inglaterra, el vestuario es acorde, la música es elegante y pomposa, melodías románticas llenas de lirismo y encanto.
Para comenzar, Shakespeare In Love está ambientada en pleno siglo XVI, es decir, en pleno Renacimiento.
Se toca, además del tema del amor, varios aspectos principales como el mundo de la literatura o sobre todo el teatro.
Este punto se centra exclusivamente en un único personaje, que no es otro que el protagonista, William Shakespeare.
No obstante, la visión que se hace en Shakespeare In Love de éste, no es una visión hecha desde fuera, que nos cuenta cómo es, sino que está hecha desde dentro del personaje, es decir, es el propio Shakespeare quien nos muestra como es su literatura, su manera de escribir, de pensar, en definitiva, de componer.
Esta manera de contarnos como es la literatura de Shakespeare, nos hace darnos cuenta de la gran figura de la literatura no sólo de esta época, sino universal, capaz de crear en una sola noche un acto para una de sus obras, con tal maestría y precisión como si la hubiera hecho cualquier otro en varias semanas.
El mundo del teatro se cuenta desde un punto de vista más externo.
Se describe minuciosamente cómo era el teatro de la época, los contratiempos que tenía y sobre todo, la manera de preparar una obra.
Destaca el hecho de que a las mujeres no se le estaba permitido interpretar un papel en una obra, hecho que por otra parte constituye un elemento importante en la trama de Shakespeare In Love.
Otro hecho importante es la manera que se tenía de elegir a los actores.
Éstos no eran profesionales (excepto unos pocos), y debían pasar varias pruebas para ser seleccionados para interpretar un papel.
Se muestra como esto era una buena oportunidad para la mayoría de la gente para ganar algún dinero, en una época, en la que la pobreza y las enfermedades estaban a la orden del día.
Por otra parte, se pone de manifiesto la tipología de representaciones que tenían lugar.
Éstas eran sin duda las comedias, al frente de las cuales destacaba la figura del payaso.
Cuando al final de la obra de Shakespeare es representada, el público queda atónito y sorprendido, ya que no saben si los protagonistas en realidad han muerto o no debido al realismo de ésta.
Además de estos temas, también se tratan algunos otros de menor importancia, como la corte o la sociedad de la época.
La corte se representa de manera grotesca y un tanto pintoresca, a través de la imagen de la reina principalmente.
Es una imagen dura, férrea, o lo que es lo mismo, característica del absolutismo propio de la época.
La sociedad se nos presenta con muchos matices, desde la alta burguesía cruel y sin ideales, hasta el pueblo llano, pobre y en ocasiones desesperanzado (recuérdese el muchachillo de los ratones).
“Los tísicos conspiran contra mí: Allí hay una obra de Will Shakespeare, vamos allí a toser".
La principal dificultad de la película en cuanto a la fotografía es la de conseguir una buena caracterización de todos los elementos propios de la época que se quiere representar, es decir, una buena consecución de todo lo que se refiere a decorados, paisajes, etc.
Se puede decir en líneas generales que la película tiene una muy buena fotografía.
Los decorados, típicamente ingleses, destacan por su sobriedad ante todo, además de por su realismo.
Como es normal en películas de este género, la música utilizada es la clásica, que además hace referencia a todo lo que es la música renacentista de entonces.
De todos modos, el papel que juega, aunque a primera vista puede pasar desapercibido, es en realidad muy importante, ya que ayuda a crear momentos de enorme tensión para el espectador, sobre todo en las escenas amorosas y en las de representación de la obra de Shakespeare (al final, cuando ya ha finalizado).
Sin duda, los personajes más importantes son Shakespeare y Viola, a tal punto, que eclipsan por completo a los demás personajes.
Shakespeare es un joven enamoradizo, dedicado a la literatura.
No obstante está en un momento de terrible bloqueo mental, tanto que llega a dudar de sí mismo, y cree haber perdido la inspiración que le permite seguir escribiendo.
Esto coincide con una etapa de crisis en lo profesional, y es por ello que no llega a avanzar una línea en su obra más reciente: “Romeo Y Ethel, La Hija Del Pirata”.
Sin embargo, el encuentro con el joven adecuado para protagonizar su obra, Thomas Kent (Viola De Lesseps), va a suponer un giro de 180º en su vida.
Viola es una joven entusiasmada con el teatro y con poder ser actriz, lo cual es imposible.
El hecho de tener que casarse con el hombre al que no ama, le atormenta, pero no le hace desfallecer.
El encuentro con William es tan decisivo para ella como para él.
Es el comienzo de su historia de amor.
El idealismo principal de Shakespeare In Love, el tema principal o lo que se sugiere, es el tema del amor.
Es por ello que merece un punto aparte.
Lo que se trata en el fondo de contar es como a pesar de que sea imposible, de todos los impedimentos posibles o de incluso el fracaso posterior, el amor siempre perdura.
Está claro que en este tipo de películas, las de género romántico, ésta es una característica fundamental.
Hay que tener en cuenta la época, es decir, el Renacimiento.
Es una época en la que el amor está bastante idealizado.
Pero también hay que sumar el paralelismo que existe durante toda la obra, lo real y lo fantástico, es decir, la historia de los personajes y su total semejanza con la historia escrita por el propio Shakespeare.
En resumen, es la historia de amor de Romeo y Julieta, y a la vez la de Will y Viola.
Shakespeare In Love compitió la noche del Oscar contra la misma reina, Elizabeth, La Vita È Bella, Saving Private Ryan y The Thin Red Line.
Shakespeare In Love fue nominada a 13 premios de la Academia y ganadora de 7 Oscar a mejor película, mejor actriz (Gwyneth Paltrow), mejor actriz de reparto (Judi Dench), mejor guión original, mejor vestuario (Sandy Powell), mejor escenografía (Martin Childs y Jill Quertier) y mejor banda sonora (en comedia o musical para Stephen Warbeck).
Nominada a mejor director, mejor actor de reparto (Geoffrey Rush), mejor fotografía (Richard Greatrex), mejor montaje (David Gamble), mejor maquillaje (Lisa Westcott y Veronica Brebner) y mejor sonido (Robin O'Donoghue, Dominic Lester y Peter Glossop).
Por su parte, la Academia deja por fuera de la competición por el rubro mayor a grandes films como: Gods And Monsters, Affliction, ENORME The Truman Show, ENORME Central Do Brasil y American History X.
"Palabras, palabras, palabras; una vez poseí ese don.
Hacía el amor con ellas como el alfarero hace cuencos con el barro, ese amor que derrumba imperios, amor capaz de unir dos corazones frente al fuego del infierno y el azufre.
Por dos peniques por verso, podía provocar un motín en un convento..."
Todos los que amamos el arte de plasmar nuestra creatividad en la escritura tenemos que superar ese conocido síndrome del "papel en blanco".
Se suele decir que lo que más cuesta es empezar y todos los escritores, tanto los profesionales como los que somos aficionados, experimentamos a menudo esa sensación única de estar ante el papel o el ordenador, sintiendo por dentro ese cosquilleo que precede a la inspiración.
Ese momento mágico en el que comienzan a fluir las ideas y nuestras manos reaccionan, obedientes.
A veces cuesta más, otras veces las palabras salen como por ensalmo, como si brotaran solas y por su propia voluntad.
Es el milagro de la creatividad, de la inspiración.
Todos ustedes y yo lo hemos sentido, cada vez que me siento a escribir estas críticas, siento esa corriente de energía que me recorre y puedo asegurar que para mí es una experiencia muy gratificante.
Pero, ¿qué ocurre cuando la inspiración no llega?
¿Cuando el genio creador se encuentra ausente, porque algo impide que las ideas fluyan?
Cualquier escritor ha pasado muchas veces por ese estado de aridez, de infertilidad.
Shakespeare In Love nos demuestra que incluso al mismo Shakespeare le pasaría.
Pues ése, ni más ni menos, es el punto central de esta encantadora película.
El escritor más importante de la lengua inglesa acapara la pantalla grande, no sólo por medio de sus obras sino también por su vida misma.
Tal vez sea por eso que en gran cantidad de ocasiones, que nos remontan a inicios del siglo pasado, las obras de este clásico escritor inglés han sido recreadas constantemente en el cine, siendo Romeo y Julieta, Hamlet y Macbeth las favoritas del público, e incluso han sido la inspiración para historias actuales, y su vida ha sido base para la creación de historias ficticias en torno a su época.
"Buen amigo, por Jesús, abstente de cavar el polvo aquí encerrado.
Bendito sea el hombre que respete estas piedras y maldito el que remueva mis huesos."
William Shakespeare
No la artística impostura del amor, sino el amor que es capaz de derrumbar la vida, impetuoso, ingobernable como un ciclón en el corazón ante el que nada se puede, ya te arruine o te embelese.
Yo debo sentir ese amor.”
El cine se ha nutrido de la historia; y los reyes, símbolos del poder absoluto, no fueron la excepción.
Los filmes sobre sus andanzas lograron aventuras épicas.
Los largometrajes que tuvieron a monarcas históricos o legendarios fueron muchos y variados a lo largo de la vida del cine.
En ese ámbito se destaca los monarcas británicos, que debido a su importancia para los Estados Unidos, Hollywood no se cansó en describir sus biografías.
Existen dos grandes monarcas en la historia del Reino Unido que debido a diferentes factores, fueron claves en el desarrollo de la actual sociedad británica y mundial.
Ellas fueron las reinas Elizabeth I y Victoria I.
El lapso de tiempo en que gobernó la llamada Reina Virgen, fue tan importante que se denominó “período Elizabethino” (desde 1558 hasta 1603).
Durante el reinado de Elizabeth I grandes acontecimientos marcaron a fuego al país europeo, como la definitiva separación de Iglesia Católica y el germen de la futura Iglesia Anglicana.
Tal florecimiento se dio en la literatura y principalmente en el teatro, sobre todo con William Shakespeare, Christopher Marlowe, Ben Jonson, John Webster, John Ford y otros.
Sobresalientemente, Shakespeare generó con su pluma varias piezas teatrales sobre amores y grandes monarcas británicos, que con los siglos fueron llevados a la gran pantalla.
El concepto de cómo desarrolló Shakespeare su tragedia del amor prohibido, ha sido también utilizado en varias producciones cinematográficas donde se reconstruye el ambiente del teatro Elizabethino.
Romeo y Julieta (1597) es una tragedia de William Shakespeare.
Cuenta la historia de dos jóvenes enamorados que, a pesar de la oposición de sus familias, rivales entre sí, deciden luchar por su amor hasta el punto de casarse de forma clandestina; sin embargo, la presión de esa rivalidad y una serie de fatalidades conducen al suicidio de los dos amantes.
Esta relación entre sus protagonistas los ha convertido en el arquetipo de los llamados “star-crossed lovers”.
There is no business like show business!
Shakespeare In Love es una película estadounidense del año 1998, dirigida por el británico John Philip Madden para Miramax Films / Universal Pictures / The Bedford Falls Company.
Está protagonizada por Gwyneth Paltrow, Joseph Fiennes, Judi Dench, Geoffrey Rush, Colin Firth, Ben Affleck, Tom Wilkinson, Simon Callow, Jim Carter, Martin Clunes, Antony Sher, Imelda Staunton, Mark Williams y Daniel Brocklebank, entre otros.
Música a cargo de Stephen Warbeck
Shakespeare In Love narra la aventura amorosa entre un joven William Shakespeare y Viola De Lesseps durante la época en la que el dramaturgo estaba escribiendo Romeo y Julieta.
Aunque los personajes están basados en personas reales, lo que se cuenta en la película es en su mayor parte ficticio.
De hecho Shakespeare plagió una obra escrita por Luigi da Porto, de Vicenza, en el año 1520.
Así que no fue él amor lo que le inspiró.
Fue el plagio.
Pero no importa, supongo…
Basada en una premisa argumental sin ninguna pretensión de fidelidad histórica, el maravilloso guión de Shakespeare In Love, uno de los puntales fundamentales en que se apoya la arquitectura del film de John Madden, pleno de hallazgos que explora a fondo todas las posibilidades que permite la historia, transformándose en un estudio profundo sobre el amor y el proceso de creación de la obra de arte, bascula progresivamente, de forma inexorable, desde un registro de comedia romántica de época hacia otro hermosísimo, pero profundamente triste, y dolorosamente romántico.
Un joven William Shakespeare inmerso en una profunda crisis de inspiración busca desesperadamente una musa que le permita recuperar su capacidad creativa.
Su repentino enamoramiento de Lady Viola nos permitirá no solo ser espectadores, sino también implicarnos emocionalmente en los entresijos de una historia de amor maravillosa, y nos abrirá, de par en par, la puerta que nos va a permitir asistir al milagro de la génesis de la obra de arte.
Vamos adentrándonos en las vicisitudes que influyeron en el proyecto del joven, mientras que paralelamente Madden nos describe la aventura amorosa entre Will y Viola De Lesseps, sus apasionados encuentros, sus utopías, sus proyectos en común, sus problemas.
Como bien sabemos Shakespeare estaba casado y Viola estaba predestinada por sus padres a casarse con un joven de la aristocracia de la época.
Sus encuentros sexuales son a escondidas, desenfrenados e impulsivos, un romance bastante cuestionable tal cual como es mostrado aquí.
Jugando con increíble habilidad con el paralelismo entre realidad y ficción, nos veremos inmersos de lleno en la creación de una de las cumbres de la literatura universal de todos los tiempos, "Romeo y Julieta".
Asistiremos atónitos cómo lo real y lo ficticio con frecuencia están separados por una delgada línea que a menudo se confunde, y como la realidad a menudo condiciona la ficción.
Con una dirección brillante de Madden y una puesta en escena impecable, la complicidad de una cámara nerviosa que utiliza con frecuencia el travelling circular como instrumento al servicio de la historia, y una excelente labor de montaje, en Shakespeare In Love sobresalen aspectos tan cuidados como la dirección artística, el vestuario y una banda sonora de Stephen Warbeck que fueron galardonados justamente con el Oscar de la Academia.
Una comedia acerca de la historia más grande de amor que estuvo a punto de no ser contada; la cinta muestra a Shakespeare como un héroe romántico, seductor y en vías de convertirse en un genio de la literatura universal que nos deja ver su lado humano, con virtudes y defectos, pero apasionado ante todo.
El guión de Marc Norman y Tom Stoppard es original.
Ambos inventan una conjunción de posibles sucesos que podrían haberle ocurrido al genial autor inglés, hasta inspirarle de modo decisivo en la obra.
Así conjugan humor, ingenio (es un buen entretenimiento para el espectador descubrir qué sucesos de los narrados recoge luego Shakespeare en la historia de los Capuleto y los Montesco) y romance amoroso.
“Podéis quedaros, si permanecéis callado.
Prestad atención, veréis como el genio crea una leyenda.”
Shakespeare In Love es un documento fidedigno de lo que era el ambiente del teatro en Inglaterra, el vestuario es acorde, la música es elegante y pomposa, melodías románticas llenas de lirismo y encanto.
Para comenzar, Shakespeare In Love está ambientada en pleno siglo XVI, es decir, en pleno Renacimiento.
Se toca, además del tema del amor, varios aspectos principales como el mundo de la literatura o sobre todo el teatro.
Este punto se centra exclusivamente en un único personaje, que no es otro que el protagonista, William Shakespeare.
No obstante, la visión que se hace en Shakespeare In Love de éste, no es una visión hecha desde fuera, que nos cuenta cómo es, sino que está hecha desde dentro del personaje, es decir, es el propio Shakespeare quien nos muestra como es su literatura, su manera de escribir, de pensar, en definitiva, de componer.
Esta manera de contarnos como es la literatura de Shakespeare, nos hace darnos cuenta de la gran figura de la literatura no sólo de esta época, sino universal, capaz de crear en una sola noche un acto para una de sus obras, con tal maestría y precisión como si la hubiera hecho cualquier otro en varias semanas.
El mundo del teatro se cuenta desde un punto de vista más externo.
Se describe minuciosamente cómo era el teatro de la época, los contratiempos que tenía y sobre todo, la manera de preparar una obra.
Destaca el hecho de que a las mujeres no se le estaba permitido interpretar un papel en una obra, hecho que por otra parte constituye un elemento importante en la trama de Shakespeare In Love.
Otro hecho importante es la manera que se tenía de elegir a los actores.
Éstos no eran profesionales (excepto unos pocos), y debían pasar varias pruebas para ser seleccionados para interpretar un papel.
Se muestra como esto era una buena oportunidad para la mayoría de la gente para ganar algún dinero, en una época, en la que la pobreza y las enfermedades estaban a la orden del día.
Por otra parte, se pone de manifiesto la tipología de representaciones que tenían lugar.
Éstas eran sin duda las comedias, al frente de las cuales destacaba la figura del payaso.
Cuando al final de la obra de Shakespeare es representada, el público queda atónito y sorprendido, ya que no saben si los protagonistas en realidad han muerto o no debido al realismo de ésta.
Además de estos temas, también se tratan algunos otros de menor importancia, como la corte o la sociedad de la época.
La corte se representa de manera grotesca y un tanto pintoresca, a través de la imagen de la reina principalmente.
Es una imagen dura, férrea, o lo que es lo mismo, característica del absolutismo propio de la época.
La sociedad se nos presenta con muchos matices, desde la alta burguesía cruel y sin ideales, hasta el pueblo llano, pobre y en ocasiones desesperanzado (recuérdese el muchachillo de los ratones).
“Los tísicos conspiran contra mí: Allí hay una obra de Will Shakespeare, vamos allí a toser".
La principal dificultad de la película en cuanto a la fotografía es la de conseguir una buena caracterización de todos los elementos propios de la época que se quiere representar, es decir, una buena consecución de todo lo que se refiere a decorados, paisajes, etc.
Se puede decir en líneas generales que la película tiene una muy buena fotografía.
Los decorados, típicamente ingleses, destacan por su sobriedad ante todo, además de por su realismo.
Como es normal en películas de este género, la música utilizada es la clásica, que además hace referencia a todo lo que es la música renacentista de entonces.
De todos modos, el papel que juega, aunque a primera vista puede pasar desapercibido, es en realidad muy importante, ya que ayuda a crear momentos de enorme tensión para el espectador, sobre todo en las escenas amorosas y en las de representación de la obra de Shakespeare (al final, cuando ya ha finalizado).
Sin duda, los personajes más importantes son Shakespeare y Viola, a tal punto, que eclipsan por completo a los demás personajes.
Shakespeare es un joven enamoradizo, dedicado a la literatura.
No obstante está en un momento de terrible bloqueo mental, tanto que llega a dudar de sí mismo, y cree haber perdido la inspiración que le permite seguir escribiendo.
Esto coincide con una etapa de crisis en lo profesional, y es por ello que no llega a avanzar una línea en su obra más reciente: “Romeo Y Ethel, La Hija Del Pirata”.
Sin embargo, el encuentro con el joven adecuado para protagonizar su obra, Thomas Kent (Viola De Lesseps), va a suponer un giro de 180º en su vida.
Viola es una joven entusiasmada con el teatro y con poder ser actriz, lo cual es imposible.
El hecho de tener que casarse con el hombre al que no ama, le atormenta, pero no le hace desfallecer.
El encuentro con William es tan decisivo para ella como para él.
Es el comienzo de su historia de amor.
El idealismo principal de Shakespeare In Love, el tema principal o lo que se sugiere, es el tema del amor.
Es por ello que merece un punto aparte.
Lo que se trata en el fondo de contar es como a pesar de que sea imposible, de todos los impedimentos posibles o de incluso el fracaso posterior, el amor siempre perdura.
Está claro que en este tipo de películas, las de género romántico, ésta es una característica fundamental.
Hay que tener en cuenta la época, es decir, el Renacimiento.
Es una época en la que el amor está bastante idealizado.
Pero también hay que sumar el paralelismo que existe durante toda la obra, lo real y lo fantástico, es decir, la historia de los personajes y su total semejanza con la historia escrita por el propio Shakespeare.
En resumen, es la historia de amor de Romeo y Julieta, y a la vez la de Will y Viola.
Shakespeare In Love compitió la noche del Oscar contra la misma reina, Elizabeth, La Vita È Bella, Saving Private Ryan y The Thin Red Line.
Shakespeare In Love fue nominada a 13 premios de la Academia y ganadora de 7 Oscar a mejor película, mejor actriz (Gwyneth Paltrow), mejor actriz de reparto (Judi Dench), mejor guión original, mejor vestuario (Sandy Powell), mejor escenografía (Martin Childs y Jill Quertier) y mejor banda sonora (en comedia o musical para Stephen Warbeck).
Nominada a mejor director, mejor actor de reparto (Geoffrey Rush), mejor fotografía (Richard Greatrex), mejor montaje (David Gamble), mejor maquillaje (Lisa Westcott y Veronica Brebner) y mejor sonido (Robin O'Donoghue, Dominic Lester y Peter Glossop).
Por su parte, la Academia deja por fuera de la competición por el rubro mayor a grandes films como: Gods And Monsters, Affliction, ENORME The Truman Show, ENORME Central Do Brasil y American History X.
"Palabras, palabras, palabras; una vez poseí ese don.
Hacía el amor con ellas como el alfarero hace cuencos con el barro, ese amor que derrumba imperios, amor capaz de unir dos corazones frente al fuego del infierno y el azufre.
Por dos peniques por verso, podía provocar un motín en un convento..."
Todos los que amamos el arte de plasmar nuestra creatividad en la escritura tenemos que superar ese conocido síndrome del "papel en blanco".
Se suele decir que lo que más cuesta es empezar y todos los escritores, tanto los profesionales como los que somos aficionados, experimentamos a menudo esa sensación única de estar ante el papel o el ordenador, sintiendo por dentro ese cosquilleo que precede a la inspiración.
Ese momento mágico en el que comienzan a fluir las ideas y nuestras manos reaccionan, obedientes.
A veces cuesta más, otras veces las palabras salen como por ensalmo, como si brotaran solas y por su propia voluntad.
Es el milagro de la creatividad, de la inspiración.
Todos ustedes y yo lo hemos sentido, cada vez que me siento a escribir estas críticas, siento esa corriente de energía que me recorre y puedo asegurar que para mí es una experiencia muy gratificante.
Pero, ¿qué ocurre cuando la inspiración no llega?
¿Cuando el genio creador se encuentra ausente, porque algo impide que las ideas fluyan?
Cualquier escritor ha pasado muchas veces por ese estado de aridez, de infertilidad.
Shakespeare In Love nos demuestra que incluso al mismo Shakespeare le pasaría.
Pues ése, ni más ni menos, es el punto central de esta encantadora película.
El escritor más importante de la lengua inglesa acapara la pantalla grande, no sólo por medio de sus obras sino también por su vida misma.
Tal vez sea por eso que en gran cantidad de ocasiones, que nos remontan a inicios del siglo pasado, las obras de este clásico escritor inglés han sido recreadas constantemente en el cine, siendo Romeo y Julieta, Hamlet y Macbeth las favoritas del público, e incluso han sido la inspiración para historias actuales, y su vida ha sido base para la creación de historias ficticias en torno a su época.
"Buen amigo, por Jesús, abstente de cavar el polvo aquí encerrado.
Bendito sea el hombre que respete estas piedras y maldito el que remueva mis huesos."
William Shakespeare
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